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VISTA Nº 151/2018.

JUZGADO LETRADO DE PRIMERA INSTANCIA EN LO PENAL ESPECIALIZADO


EN CRIMEN ORGANIZADO DE 1° TURNO

Autos caratulados: “S,G – Denuncia”


I.U.E. Nº 2-20026/2017

Señora Juez:
A juicio de la Fiscalía, no existen elementos que hagan presumir la existencia de
conductas con apariencia delictiva, por lo que no se iniciará una investigación penal, en mérito
a las siguientes consideraciones:
1) En autos, en sucesivas denuncias escritas y comparecencias personales, los Dres. G.S.
y E.V. denuncian presuntas irregularidades en el contrato celebrado entre la República
Oriental del Uruguay y la empresa finlandesa UPM, el día 7 de noviembre de 2017,
invocando en lo sustancial que: no hubo llamado a licitación; el contrato de inversión
proyectado afecta el medio ambiente; la negociación no fue transparente; el contrato
afecta la soberanía de nuestro país; la causa del contrato es ilícita pues implica el
sometimiento voluntario del Estado uruguayo a una empresa extranjera; se trata de un
contrato “abusivo, lesivo, leonino, ruinoso, asimétrico, cuasi unilateral”; Uruguay
asume una serie de obligaciones independientemente de que UPM decida finalmente
invertir en nuestro país, entre otros fundamentos.

2) En opinión de la Fiscalía, ninguna de las alegadas irregularidades asoma como motivo


suficiente para el inicio de una investigación presumarial respecto del contenido y las
circunstancias del contrato celebrado entre Uruguay y UPM, por cuanto el mismo es
un contrato preliminar, o “carta intención”, sujeto a un “acuerdo complementario”, y
ha sido firmado en el marco de las disposiciones de la Ley de Inversiones Nº 16.906,
de 7 de enero de 1998, y del Decreto Reglamentario 477/008, de 7 de octubre de 2008.
No se han promovido acciones de inconstitucionalidad contra la citada Ley 16.906, ni
recursos administrativos contra el citado Decreto 477/008, por parte de los
denunciantes ni consta que lo hubieran sido por cualquier otro interesado, por lo que
se trata de normas jurídicas vigentes, válidas y perfectamente aplicables.

3) El artículo 11 de la Ley 16.906, en cuyo marco se celebró el contrato cuestionado,


establece que “podrán acceder al régimen de beneficios que establece este Capítulo,
las empresas cuyos proyectos de inversión sean declarados promovidos por el Poder
Ejecutivo, de acuerdo con lo dispuesto en la presente ley”, y su artículo 16 prevé
beneficios especiales a “aquellos proyectos o actividades declaradas promovidas en
virtud de la importancia de su aporte al proceso de descentralización geográfica de la
actividad económica”. Y el Decreto 477/008 por su parte establece los procedimientos
a seguir para la aprobación de los proyectos de inversión y el otorgamiento de los
beneficios previstos en la Ley a las inversiones de gran significación económica.

4) De la lectura del contrato ROU-UPM se advierte que nos encontramos más bien ante
un contrato preliminar, que incluye en su punto Nº 2 distintas cláusulas programáticas,
utilizándose expresiones tales como “beneficios”, “indicativos”, “proyecciones”,
“intereses de ambas partes”, “análisis de impacto”, “compromisos de cooperación”,
“potencialidad de negocios”, “expectativas”, “pre-requisitos contractuales”, sujetas a
un acuerdo complementario que deberá ser firmado antes del 15 de febrero de 2020. Y
en el punto 3 del Contrato se incluyen los “acuerdos alcanzados”, los compromisos
futuros de ambas partes, la fijación del canon anual, asuntos tributarios, permisos
ambientales, proyectos viales, proyecto ferroviario, proyecto portuario, aspectos
laborales y tecnológicos.

5) En el punto 4 del Contrato se establece un cronograma conteniendo una “hoja de ruta


para las partes”, y se conviene expresamente que se negociará “un acuerdo
suplementario (“Contrato complementario”), estipulándose en la cláusula 8.2.3 que
tanto la “declaración final de inversión” por parte de UPM –sujeta a su sola discreción-
como el “contrato complementario” deberán verificarse antes del 15 de febrero de
2020; en caso contrario el actual contrato “se dará por terminado”.
6) No se vislumbra entonces la existencia de cláusulas que los denunciantes califican
como abusivas, leoninas o cuasi unilaterales, por cuanto: es inexacto lo denunciado en
cuanto a que ROU se obliga a llevar a cabo las obligaciones contraídas en el contrato
“independientemente del Proyecto UPM”. Si se lee detenidamente lo convenido en la
cláusula 2.1.2., se advierte que Uruguay no asume ni se compromete a ninguna
obligación en caso de que la declaración final de inversión de UPM sea finalmente
negativa, sino que la cláusula establece claramente que “ROU reconoce y conviene en
que es intención llevar a cabo el Proyecto de ROU independientemente del Proyecto
UPM”. La expresión “es intención” no equivale a la asunción de una obligación por
parte del Estado uruguayo, por lo cual el principal argumento de afectación de la
soberanía nacional invocado por los denunciantes carece de fundamento.

7) Asimismo, y complementariamente, se lee en el contrato –en su punto 10- que la ley


aplicable serán las leyes de la República Oriental del Uruguay; y en el punto 8.2.1 se
acuerda que “cualquiera de las partes podrá dar por terminado este contrato en
cualquier momento antes de la fecha DFI (Declaración Final de Inversión) a su sola
discreción y por cualquier razón o sin expresión de causa, mediante notificación a la
otra parte”.

8) En consecuencia, teniéndose presente que el contrato cuestionado fue celebrado en el


marco de una ley y de un decreto vigentes y no impugnados, y más allá de cualquier
valoración personal que se pueda emitir respecto de la conveniencia o inconveniencia
de la inversión proyectada, o aún de eventuales afectaciones al medio ambiente que el
propio contrato pretende salvaguardar, y sin perjuicio de eventuales acciones civiles o
administrativas contra el contrato, la Fiscalía entiende que los elementos incorporados
a la causa no ameritan el inicio de una investigación presumarial penal.

Por los fundamentos expuestos, y considerando asimismo la circunstancia ya


mencionada de que se trata de un contrato preliminar sujeto a la aprobación de un
contrato suplementario a ser suscrito antes del 15 de febrero de 2020, la Fiscalía solicita
se disponga el archivo de las actuaciones, sin perjuicio.
Montevideo, 26 de febrero de 2018.
LP

Dr. Luis Pacheco Carve


Fiscal Letrado Especializado en Crimen Organizado

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