You are on page 1of 24

CRÍTICAS DE KANT – RAZÓN, PURA Y JUICIO

Gustavo Rodríguez Trujeque


Gerardo García Hernández
Juan Pablo Lepe de la Peña
Daniela Quintero Fuentes
Mario Alejandro Valadez Merino
Daniel Romero Zavala
Zair Yad-El Sánchez Cayetano
CRÍTICAS DE KANT
IMMANUEL KANT
IMMANUEL KANT

Entre sus escritos más destacados se encuentra la Crítica de la razón pura (Kritik der reinen Vernunft),1
calificada generalmente como un punto de inflexión en la historia de la filosofía. En ella se investiga la
estructura misma de la razón. Así mismo se propone que la metafísica tradicional se puede reinterpretar a
través de la epistemología, ya que podemos encarar problemas metafísicos cuando entendemos y
relacionamos la fuente con los límites del conocimiento.

Sus otras obras principales son la Crítica de la razón práctica, centrada en la ética; la Crítica del juicio,
en la que investiga acerca de la estética y la teleología y La metafísica de las costumbres que tiene dos
partes, una centrada en la ética, la doctrina de la virtud, y la otra centrada en el ius, la doctrina del
derecho.
IMMANUEL KANT

Kant adelantó importantes trabajos en los campos de la ciencia, el derecho, la moral, la religión y la
historia creyendo haber logrado, inclusive, un compromiso entre el empirismo y el racionalismo. Aceptando
que si bien todo nuestro conocimiento empieza con la experiencia, no todo procede de ella,3 dando a
entender que la razón juega un papel importante.

Kant argumentaba que la experiencia, los valores y el significado mismo de la vida serían completamente
subjetivos si no hubiesen sido subsumidos por la razón pura, y que usar la razón sin aplicarla a la
experiencia, nos llevaría inevitablemente a ilusiones teóricas.
IMMANUEL KANT
CRÍTICA DE LA RAZÓN PRÁCTICA - ESQUEMA DE LA OBRA

Imitando en parte la estructura de la Crítica de la razón pura, si bien con algunas diferencias, Kant divide la
obra de la siguiente manera:

Parte I: Doctrina de los elementos

 Analítica de la razón pura práctica


 Dialéctica de la razón pura práctica

Parte II: Doctrina del método


CRÍTICA DE LA RAZÓN PRÁCTICA - ESQUEMA DE LA OBRA

Introducción

Se reproducen aquí las primeras frases de la introducción a la obra, con la numeración de páginas según
las ediciones científicas de la misma:

“El uso teórico de la razón se ocupaba de objetos de la mera facultad de conocer, y una crítica de la razón,
en lo que toca a ese uso, se refería propiamente sólo a la facultad pura del conocimiento, porque esta
facultad despertaba sospechas, que luego también se confirmaron, de que se perdía fácilmente, más allá
de sus límites, en inaccesibles objetos o hasta en conceptos contradictorios entre sí.”
CRÍTICA DE LA RAZÓN PRÁCTICA - ESQUEMA DE LA OBRA

La ética kantiana está contenida en lo que se ha denominado como sus tres obras éticas: Fundamentación de la
metafísica de las costumbres, Crítica de la razón práctica y Metafísica de las costumbres. Kant se caracterizó
por la búsqueda de una ética o principios con el carácter de universalidad que posee la ciencia. Para la
consecución de dichos principios Kant separó las éticas en dos clases primarias: éticas empíricas (todas las
anteriores a él) y éticas formales (la ética suya). Este nuevo planteamiento acerca de la ética hace de Kant el
padre de la filosofía moderna.

La razón teórica formula juicios frente a la razón práctica que formula imperativos. Estos serán los pilares en los
que se fundamenta la ética formal kantiana. La ética debe ser universal y, por tanto, vacía de contenido
empírico, pues de la experiencia no se puede extraer conocimiento universal. Debe, además, ser a priori, es
decir, anterior a la experiencia y autónoma, esto es, que la ley le viene dada desde dentro del propio individuo y
no desde fuera. Los imperativos de esta ley deben ser categóricos y no hipotéticos, que son del tipo «Si quieres
A, haz B».
CRÍTICA DE LA RAZÓN PRÁCTICA - ESQUEMA DE LA OBRA
En contraposición a la ética a Kant se encuentra la ética de Tomás de Aquino.

El imperativo categórico tiene tres formulaciones:

«Obra sólo según una máxima tal, que puedas querer al mismo tiempo que se torne en ley universal».
«Obra de tal modo que trates a la humanidad, tanto en tu persona como en la de cualquier otro, siempre como un fin y nunca
solamente como un medio».
«Obra como si por medio de tus máximas fueras siempre un miembro legislador en un reino universal de los fines».
Kant sintetiza su pensamiento, y en general «el campo de la filosofía en sentido cosmopolita», en tres preguntas: «¿Qué debo
hacer?, ¿Qué puedo saber?, ¿Qué me está permitido esperar?», que pueden resumirse en una sola: «¿Qué es el hombre?»20
A la primera interrogante trata de dar respuesta la moral. A la segunda, el análisis de la Crítica de la razón pura en torno de las
posibilidades y límites del conocimiento humano. A la tercera trata de responder la religión.

Kant concluye su estudio epistemológico haciendo especial hincapié en la importancia del deber, que es donde reside la virtud
de toda acción. Al hacer coincidir la máxima de cualquier acción con la ley práctica, el ser humano habrá encontrado el principio
objetivo y universal del obrar.
CRÍTICA DE LA RAZÓN PURA - ESQUEMA DE LA OBRA

La Crítica de la razón pura está dividida en dos grandes secciones:


 Doctrina trascendental de los elementos
Estética trascendental
Lógica trascendental
Analítica trascendental
Dialéctica trascendental
 Doctrina trascendental del método
CRÍTICA DE LA RAZÓN PURA - ESQUEMA DE LA OBRA
Introducción

Kant abre la obra discutiendo la posibilidad de la existencia de juicios sintéticos a priori, juicios que agregan
nueva información (donde el predicado «no está contenido» en el sujeto) y que son de carácter universal y
necesarios; es decir, anteriores a cualquier experiencia.
La existencia de juicios sintéticos a posteriori es innegable. Son los juicios fácticos, empíricos y por tanto
contingentes. Lo que quiere hacer Kant es trascender la gnoseología de Hume de cuestiones de hechos y
relaciones de ideas (juicios sintéticos a posteriori y juicios analíticos a priori) y superar la metafísica dogmática
de los racionalistas.
Kant comienza la obra aceptando la existencia de juicios sintéticos a priori en la física y la matemática;
entonces existen esos juicios. Lo que va a indagar es «cómo son posibles esos juicios» cuya existencia es,
según él, «obvia». Para, a partir de esa investigación, ver si es posible la existencia de este tipo de juicios en la
metafísica (lo cual tendrá una respuesta negativa).
Cabe decir que, si bien la parte donde «muestra» cómo son esos juicios sintéticos a priori en las matemáticas es
correcta, la parte sobre la existencia de esos mismos juicios en la física es, a criterio de una gran cantidad de
críticos (Korner, Romeo & Molina, Martin, etc.) bastante dudosa.
CRÍTICA DE LA RAZÓN PURA - ESQUEMA DE LA OBRA
Introducción

Kant abre la obra discutiendo la posibilidad de la existencia de juicios sintéticos a priori, juicios que agregan
nueva información (donde el predicado «no está contenido» en el sujeto) y que son de carácter universal y
necesarios; es decir, anteriores a cualquier experiencia.
La existencia de juicios sintéticos a posteriori es innegable. Son los juicios fácticos, empíricos y por tanto
contingentes. Lo que quiere hacer Kant es trascender la gnoseología de Hume de cuestiones de hechos y
relaciones de ideas (juicios sintéticos a posteriori y juicios analíticos a priori) y superar la metafísica dogmática
de los racionalistas.
Kant comienza la obra aceptando la existencia de juicios sintéticos a priori en la física y la matemática;
entonces existen esos juicios. Lo que va a indagar es «cómo son posibles esos juicios» cuya existencia es,
según él, «obvia». Para, a partir de esa investigación, ver si es posible la existencia de este tipo de juicios en la
metafísica (lo cual tendrá una respuesta negativa).
Cabe decir que, si bien la parte donde «muestra» cómo son esos juicios sintéticos a priori en las matemáticas es
correcta, la parte sobre la existencia de esos mismos juicios en la física es, a criterio de una gran cantidad de
críticos (Korner, Romeo & Molina, Martin, etc.) bastante dudosa.
CRÍTICA DE LA RAZÓN PURA - ESQUEMA DE LA OBRA

 Doctrina trascendental de los elementos


En esta primera parte, Kant argumenta que todo conocimiento requiere la concurrencia de dos facultades
radicalmente heterogéneas de la mente: la sensibilidad y el entendimiento. Por la primera los objetos nos
son dados, mientras que por la segunda éstos son pensados.

 Estética trascendental
En la primera parte de la Crítica de la razón pura, la estética trascendental, Kant analiza la primera
facultad que interviene en el proceso de conocimiento: la sensibilidad. Gracias a esta facultad podemos
construir una representación de la realidad, es decir, percibir el mundo.
Para Kant, la sensibilidad es como una ventana que permite al sujeto ver el mundo, aunque al mismo
tiempo nos condiciona a verlo de una manera determinada.
CRÍTICA DE LA RAZÓN PURA - ESQUEMA DE LA OBRA

 Lógica trascendental
La lógica trascendental es la segunda parte en la cual está dividida la Crítica de la razón pura ya que
es la parte de la metafísica más completa de todas. En esta sección se parte afirmando que el
conocimiento surge de dos fuentes, que tienen relación con la capacidad que se tiene de recibir
representaciones, a lo que Kant llama receptividad, y la otra es la facultad que tiene un sujeto de conocer
un objeto a través de tales representaciones. Kant indica que a través de la primera se nos da un objeto y
a través de la segunda lo pensamos.
Hay que notar que Kant llama entendimiento a la capacidad que tiene el sujeto de producir
espontáneamente estas representaciones (Vorstellungen) en su mente (Gemüthe), o la misma
receptividad del entendimiento respecto a su capacidad de atenderlas (representaciones). Kant también en
el inicio de la lógica trascendental hace una diferenciación clave entre su lógica (la trascendental) y la
lógica general, apuntando que esta última obedece al esclarecimiento de la forma en que un sujeto tiene
de pensar, es decir las reglas del pensamiento en general. En este sentido la lógica no arroja nada sobre
el contenido del conocimiento sino más bien sobre las condiciones en las que conocemos, condiciones
que llegan a ser completamente indiferentes al objeto en sí.
CRÍTICA DE LA RAZÓN PURA - ESQUEMA DE LA OBRA

 Analítica trascendental
La analítica consiste en descomponer todo nuestro conocimiento a priori en elementos del
conocimiento puro del entendimiento. Se sigue que el entendimiento puro se distingue incluso
de la sensibilidad al ser éste el que provee las reglas básicas mediante las cuales un sujeto
conoce un objeto determinado de la experiencia. Kant indica que la descomposición de los
contenidos del conocimiento, es una capacidad misma del entendimiento que le sirve a sí
misma para poder investigar la eventual existencia de conocimiento a priori.
La base del entendimiento está dada por los conceptos, esto es que todo conocimiento se
funda en conceptualizaciones varias, de carácter discursivo y no intuitivo. Estos conceptos se
fundan en la espontaneidad del pensamiento, y el juicio es el conocimiento más mediato que
puede tenerse de un objeto. Kant es claro al indicar que es posible reducir todos los actos del
entendimiento a juicios, por lo que el conocimiento mismo vendría siendo la capacidad de
juzgar que tiene el sujeto.
CRÍTICA DE LA RAZÓN PURA - ESQUEMA DE LA OBRA

Dialéctica trascendental

Parte de la Crítica de la razón pura que estudia la Razón para comprender su funcionamiento y estructura. Recibe el nombre de
«dialéctica» porque trata también los argumentos dialécticos generados por el uso puro de la razón en su afán por captar lo
incondicionado, uso hiperfísico, dice Kant.

Kant considera que la razón siempre busca la condición o fundamento de las cosas. Precisamente la investigación científica
aparece como consecuencia de este afán de la Razón por la comprensión de las causas, condiciones o fundamentos de los
fenómenos. Pero si el funcionamiento espontáneo de la Razón no se limita por la crítica, tenderá a pensar también la condición
última de tres importantes esferas: la condición o fundamento último de nuestra vida psíquica, la condición o fundamento último
del mundo físico y la condición o fundamento último de la totalidad de los fenómenos, tanto físicos como psíquicos. Cuando la
Razón actúa de este modo incontrolado acabará pensando en los objetos tradicionales de la metafísica: el alma, el mundo
como totalidad y Dios. Kant creyó que este uso de la razón —al que denomina dialéctico— es inadecuado y da lugar a sofismas
y contradicciones.

Doctrina trascendental del método


En la segunda parte de la Crítica de la razón pura se determinan las condiciones formales del sistema completo de la razón
pura.
CRÍTICA DE JUICIO

La Crítica del Juicio​ o de la facultad de juzgar​ o del discernimiento


es la última de las tres grandes críticas escritas por Immanuel Kant.

Kant en su crítica del juicio busca fundamentar la estética, él la


supone algo fuera de conocimiento y de la moral, como algo
especial. El juicio estético, según Kant, deja subsistir libremente lo
que existe fuera y, está dictado por el placer que se espera
conseguir del objeto como tal, al margen de cualquier otra
consideración pues el objeto tiene su objetivo en sí mismo.

You might also like