Professional Documents
Culture Documents
Introducción.
Cryptosporidium, aún conocido como coccidio, con Cyclospora y Cystoisospora, pertenece al
grupo de los Gregarinos, en el phylum Apicomplexa. Los gregarinos son un grupo diverso de
parásitos que infectan principalmente el intestino y otros espacios extracelulares. Estos tres
coccidios (nomenclatura tradicional) se caracterizan por la eliminación de ooquistes con la materia
fecal de los hospederos. Ademas, las fases infectantes se desplazan mediante movimientos de
deslizamiento (Francia et al., 2016).
El protozoo fue descubierto en ratones por Tizzer (1907); a raíz de ese hallazgo fué reportado en un
amplio rango de animales vertebrados, domésticos y silvestres, muchos de ellos neonatos. Su
importancia como patógeno humano se reconoció en 1976, cuando se diagnosticó en 2 pacientes
con diarrea acuosa. A partir de entonces, se identificó con mayor frecuencia, particularmente en
sujetos inmunodeprimidos y en brotes epidémicos por ingesta de agua contaminada (esta forma de
diseminación cobró relevancia después del brote detectado en Milwaukee, EUA, con 403 000 casos
detectados). La infección crónica ha sido relacionada principalmente con el síndrome de
inmunodeficiencia adquirida, pero las infecciones en sujetos inmunocompetentes han aumentado de
manera muy importante.
Tanto Giardia duodenalis como Cryptosporidium spp. fueron incluidos dentro de la iniciativa de
"enfermedades tropicales menospreciadas" (Neglected Tropical Diseases - NTD) de la OMS, desde
2004.
Morfología. Clasificación.
Se reconocen más de 26 especies de Cryptosporidium, con base en datos morfológicos, biológicos y
moleculares (Ryan et al, 2014; Vitaliano et al., 2015; Moore et al., 2016) y se han identificado
alrededor de 61 genotipos de especie incierta, con base en la secuencias de ssrRNA. La utilización
de herramientas moleculares para el análisis genético, varias pruebas con PCR y el estudio de los
microsatélites han confirmado la autenticidad de especies y la existencia de genotipos dentro de
ellas. La taxonomía de este organismo está en rápida evolución; así, por ejemplo, Cryptosporidium
pestis, antes el genotipo C. parvum, ha sido aceptado, de acuerdo al International Code of
Zoological Nomenclature (Chalmers et al., 2010; Fayer. 2010; Šlapeta. 2011; Xiao et al., 2012). La
revisión más reciente enlista 30 especies y un número en aumento de genotipos (Thompson et al.,
2016).
La enfermedad en el humano se atribuye con mayor frecuencia a 8 de dichas especies, aunque
existen reportes incidentales de infección por otros criptosporidios (Chalmers, et al. 2010).
Ciclo biológico.
La transmisión es fecal-oral, por contacto directo de hospedador-hospedador ya través de alimentos
o agua contaminados con ooquistes, infectantes en el momento de ser eliminados con la materia
fecal del hospedero. Cabe mencionar que la criptosporidiosis se ha identificado en brotes
epidémicos debidos a fuentes de agua contaminada, de redes de agua potable, de superficie o
recreativas.
Los ooquistes de Cryptosporidium, con pared doble y 4 esporozoítos desnudos en su interior,
sobreviven en el ambiente por largos periodos de tiempo (entre 20 - 30 °C, durante semanas/meses).
Una vez en tracto digestivo, principalmente a nivel de intestino delgado, los esporozoítos (forma
invasiva) son liberados a través de una ranura en los ooquistes en disolución.
http://www.facmed.unam.mx/deptos/microbiologia/parasitologia/criptosporidiasis.html 1/8
18/12/2017 CRIPTOSPORIDIOSIS o CRIPTOSPORIDIASIS - Recursos en Parasitología - UNAM
Los esporozoítos poseen un complejo apical, auxiliar en la adhesión a la membrana celular del
hospedero, que envuelve las formas invasivas del parásito y da lugar a una vacuola parasitófora.
Esta vacuola, que engloba al esporozoíto en un nicho protector especial extracitoplásmico
(epicelular), presenta una región electrodensa en la base, denominada organelo de alimentación o
epimerita.
http://www.facmed.unam.mx/deptos/microbiologia/parasitologia/criptosporidiasis.html 2/8
18/12/2017 CRIPTOSPORIDIOSIS o CRIPTOSPORIDIASIS - Recursos en Parasitología - UNAM
Ciclo biológico de Cryptosporidium. En tracto gastrointestinal. Fuente: PHIL 3386 - CDC/Alexander J. da Silva, PhD/Melanie Moser
SEM. Cryptosporidium sp. Organelo de alimentación Cryptosporidium sp. en células epiteliales de vesícula.
expuesto (epimerita). S.J. Upton, Kansas University CDC/Dr. E. Ewing Jr
Las 3 fases de reproducción abarcan unas 12 - 24 h, con una nueva generación de parásitos y formas
autoinfectantes en cada ocasión. Ante tal número de organismos no es de extrañar que en sujetos
inmunocomprometidos las formas parasitarias puedan extenderse hasta conductos biliares y
pancreáticos, estómago y tracto respiratorio.
Espectro clínico.
Se contemplan:
- Estado de portador, asintomático.
- La enfermedad en sujetos inmunocompetentes, autolimitada, con duración entre 2 - 14 días,
aunque puede prolongarse hasta 1 mes. Incluye diarrea acuosa , que puede ser de tipo coleriforme,
ocasionalmente explosiva y fétida, dolor abdominal, flatulencia, vómito, anorexia, pérdida de peso.
- En menores de 2 años es más frecuente un cuadro severo, que incluye evacuaciones acuosas,
ocasionalmente con moco, sin sangre, con deshidratación y desequilibrio electrolítico. Se ha
asociado también a retardo en el crecimiento.
- La parasitosis en personas con algún tipo de inmunocompromiso, con diarrea de tipo coleriforme,
puede representar la pérdida de varios litros (se han mencionado casos extremos con hasta 25
litros/24 h). Es una enfermedad asociada con frecuencia a pacientes con SIDA, quienes pueden
presentar diarrea crónica de manera intermitente, con episodios hasta de 30 días y recurrencias. El
desequilibrio hidroelectrolítico puede ser muy importante. Desarrollan sobre todo la parasitosis
fulminante aquellos sujetos con cuentas de linfocitos CD4 menores a 50-100/µL con un síndrome
de malabsorción más importante. La enfermedad extraintestinal (vesícula biliar, tracto respiratorio,
http://www.facmed.unam.mx/deptos/microbiologia/parasitologia/criptosporidiasis.html 3/8
18/12/2017 CRIPTOSPORIDIOSIS o CRIPTOSPORIDIASIS - Recursos en Parasitología - UNAM
hígado, páncreas) conlleva morbilidad y mortalidad mayores. Se ha reportado una mortalidad de
aproximadamente el 50% en los 6 meses posteriores al inicio de la infección en estos sujetos.
Cualquiera de los cuadros asociado a signos y síntomas puede ser causa de malabsorción intestinal.
Es importante explicar los mecanismos que dan lugar a la diarrea osmótica, inflamatoria y
secretora que se presenta en esta enfermedad, particularmente en sujetos inmunodeprimidos;
sin embargo, hacen falta estudios. Se considera que el origen es multifactorial: están
involucrados tanto el parásito como sus productos, la respuesta inmune del hospedero, que
dan lugar a deficiencias en la absorción a nivel de intestino delgado y aumento en la
secreción.
Adhesión. Entre otros factores se contemplan lectinas y glucoproteínas semejantes a la
mucina, receptores de adherencia del esporozoíto.
Las células T, principalmente los linfocitos CD4+ son fundamentales en la respuesta inmune
contra los criptosporidios, y al mismo tiempo, la atrofia de vellosidades y la hiperplasia de las
criptas son cambios patológicos asociados a las células T. (Chalmers et al. 2010).
Apoptosis. La cascada de señales pro-apoptosis predominan a las 24 - 48 horas postinfección.
Estudios in vitro.
Daño celular - Producido por el parásito. Productos del esporozoíto están involucrados en la
desorganización de las uniones celulares, pérdida de la función de barrera, liberación de
lactato-dehidrogenasa e incremento en la muerte celular. Fosfolipasas, proteasas, son
moléculas que potencialmente pueden causar el daño tisular. (Borowski et al. 2008; Ortega-
Pierres et al. 2009; Stark et al. 2010).
Histopatología.
Los cambios histopatológicos asociados a este organismo incluyen: diferentes grados de atrofia de
las microvellosidades, edema de la submucosa, infiltrado inflamatorio mononuclear e hiperplasia de
las criptas. Los estadios del parásito se observan en la zona apical de la membrana del enterocito.
Diagnóstico.
Es importante el diagnóstico diferencial con patologías causadas por Cyclospora e Cystoisospora, y
otros patógenos intestinales que producen cuadros clínicos similares.
Cryptosporidium sp. Ooquistes. Examen en fresco y Tinción ácido alcohol. Chiang Mai University, Thailand y CDC.
http://www.facmed.unam.mx/deptos/microbiologia/parasitologia/criptosporidiasis.html 4/8
18/12/2017 CRIPTOSPORIDIOSIS o CRIPTOSPORIDIASIS - Recursos en Parasitología - UNAM
Cryptosporidium sp. Ooquistes infectantes. IFA. Quistes Giardia y ooquistes Cryptosporidium. CDC
Contraste de fase. CDC
Epidemiología.
El impacto global de las enfermedades diarreicas se estima en unos 62 millones de años de vida
ajustados por discapacidad (DALYs). Aunque el peso de los diferentes patógenos que contribuyen a
esta cifra es difícil de evaluar, la criptosporidiosis se considera una de las causas más frecuentes de
diarrea en países que cuentan con datos epidemiológicos confiables.
(Karanis et al., 2007).
La criptosporidiosis es una enfermedad cosmopolita, con mayor en zonas con clima tropical o
templado, que se presenta con frecuencia en pacientes con SIDA. En países en desarrollo, en los
que prevalece una sanidad deficiente y hacinamiento, es más frecuente la transmisión oral-fecal,
directa o indirecta, con brotes a nivel familiar o institucional, sin olvidar factores significativos
como la ingesta de agua no potable y las zoonosis.
La prevalencia de la enfermedad en países industrializados oscila entre 0.1 y 27.1%, con una media
de 4.9%, mientras que en países en desarrollo los resultados varían entre 0.1 a 31.5% con una media
de 7.9%, excluyendo los brotes epidémicos específicos y a los sujetos con SIDA. Aún cuando los
estudios epidemiológicos han demostrado que la parasitosis está más difundida de lo que
anteriormente se pensaba, es difícil determinar la extensión del problema, tanto a nivel veterinario
como médico.
Gracias a su pared gruesa, los ooquistes de Cryptosporidium resisten los tratamientos químicos
usuales: no sufren alteración después de ser expuestos a 80 ppm de cloro/30 min, e incluso pueden
tolerar 24 h en el cloro utilizado para blanqueado de ropa.
El empleo de ozono (1 ppm x 5 min), la congelación o calentamiento (>72° C durante 1 min ó 45
°C por 10 min después de iniciada la ebullición) son métodos más efectivos. Permanecen viables al
cabo de una semana en la mayoría de los congeladores caseros. Debido a su tamaño, únicamente los
filtros capaces de remover partículas de 1 µm resultan confiables.
http://www.facmed.unam.mx/deptos/microbiologia/parasitologia/criptosporidiasis.html 5/8
18/12/2017 CRIPTOSPORIDIOSIS o CRIPTOSPORIDIASIS - Recursos en Parasitología - UNAM
Se considera una cloración adecuada del agua cuando se confirma una concentración de cloro
residual de 0.5 mg/l (0.5 p.p.m).
Tratamiento.
Es necesario mantener el equilibrio hidroelectrolítico tanto en sujetos inmunocompetentes como
inmunodeprimidos. En algunos pacientes es necesaria la alimentación parenteral.
Fundamentalmente, el tratamiento consiste en medidas de sostén. Algunos autores sugieren
suspender los fármacos citotóxicos temporalmente.
Se han utilizado ciertos fármacos con resultados muy variables. En algunos pacientes la
paromomicina aparentemente disminuye la intensidad de la infección.
Las dinitroanilinas tienen potencial (A. Armson, Murdoch University, Western Australia).
Se sugiere que la nitazoxanida puede ser benéfica bajo ciertas circunstancias (L. Favennec, Hospital
Charles Nicolle, Rouen, France), aunque los resultados del meta-análisis realizado por la Biblioteca
Cochrane Plus indican que el beneficio derivado del fármaco se hace evidente en sujetos
inmunocompetentes; concluye el estudio con la aseveración de que se carece de un tratamiento
efectivo para esta parasitosis.
Un estudio posterior, con sujetos con adicción a drogas, a pesar de ciertas limitaciones, parece
indicar que la utilización conjunta de garlicina y acetil-espiramicina tiene efecto terapéutico. (Min-
Zhu Huang et al., 2015).
Detección en agua.
Actualmente, la EPA (EEUU) y otras organizaciones de salud con metodología de vanguardia,
utilizan la separación inmunomagnética para detección y aislamiento de protozoos en agua y la
tinción con anticuerpos específicos fluorescentes. Otras técnicas que pueden ser utilizadas con el
objetivo de purificación de quistes y ooquistes de protozoos incluyen gradientes de densidad,
centrifugación de flujo, filtración continua de flujo, citometría de flujo. También se han desarrollado
métodos moleculares, prometedores para la detección efectiva y simultánea de protozoos en agua,
de acuerdo a varios autores, en comparación con los limitados resultados de la tinción convencional
y microscopía, un punto de gran importancia en el campo de la salud pública. (Fletcher et al., 2012).
En México existe la legislación para regular los sistemas públicos operadores de agua para
consumo. La NOM-127-SSA1-1994; NOM-179-SSA1-1998 incluye la determinación, en muestras
de agua, de bacterias coliformes totales, E. coli, coliformes fecales, y la presencia de bacterias
termotolerantes, como Citrobacter y Enterobacter. Los organismos deben estar ausentes. Tambien
está publicado el Proyecto de Norma Oficial Mexicana PROY NOM-250-SSA1-2014 (DOF:
15/08/2014). Sin embargo, existe cierta confusión debido a los contenidos otro proyecto: Proyecto
de Norma Oficial mexicana NOM-000-SSA1-2010. Y no existe la legislación clara para otros
organismos, como los protozoos Cryptosporidium parvum y Giardia lamblia. (Olivas-Enríquez et
al., 2013).
Vínculos.
Hecho en México, Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), todos los derechos reservados 2011. Esta página
puede ser reproducida con fines no lucrativos, siempre y cuando no se mutile, se cite la fuente completa y su dirección
electrónica. De otra forma requiere permiso previo por escrito de la institución. Créditos
http://www.facmed.unam.mx/deptos/microbiologia/parasitologia/criptosporidiasis.html 8/8