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"yaG0 Med, Dokumentation /Reprolab. More legible copy impossible due to poor qualiy of tho original paper given to the Reprolabor. LSD 700 Las peicosis experimentales. Estudio comparativo entre las del LSD 25, Mescalina y Cannabis indica, considerando la problemitica peiquidtrica que planteane (Die experimentellen Psychosens vergleichende Unter~ suchung bei LSD 25, Mescalin und Haschisch, unter Be= riickelehtigung der psychiatrischen Fragestellungene) esis, Barcelona 1957 Frontis, Barcelona 1958, 29-S- INTRODUCCION ir una ciencia si no hay una extensa conviccién instintiva en la existencia de un orden de cosas... La ciencia sélo pudo huber sido ereada por quienes ya tuvieron esa ereencia y, por lo tanto, Jas fuentes originales de !a ciencia debieron ser pregicntificas. ..» (Whi- tehead: Science and the modern world. Londres. 1926.) 4No puede v < Hace algunos afos se desperté nuestro interés por las psicosis to- xicas al tener ocasiin de estudiar una intoxicacion anfetaminica — con Mico cnadro psicopatolieico — comprobando que las concepciones cla- ‘exogenas desde Bonhoeffer. no eran : fundamentalmente en lo refe- ban los trastornos de conciencia que venian Considerandose sintomas obligados) y a la inespecificidad de las rés- puestas. Posteriormente {uimos madurando la idea de revisar él pro- Blema de las toxifrenias, hasta que nos dedicamos de leno a la re- reduceion experimental de cuadros psicopatolégicos aprovechando fa posbilidad que nos brindaba Ia LSD-29 y la Mescalina, que estaban Siendo empleadas con idénticos fines en otros paises. Hemos querido = Spaner, como contraste, en nuestra Tesis dichas psicosis téxieas a los Chadros psicopatolégicos del «Cannabis Indicas que teniamos reco- gidos anteriormente, Con tal fin hemos dividido la Tesis en: Capitulo 1: «Situacidn actual y analisis de la literatura sobre i; LSD-25, Mescalina y Cannabis Indica». a. 5 3 3 3 i Capitulo 2": «Material y método de investigaciéns. t Capitulo 3°: «Anilisis de los resultados. 1 Capitulo 4°: «Enlace de Ics problemas y pianteamiento de las conclurioness 4 Capitulo «Conclusiones». Capitulo PRIMERO SITUACION ACTUAL Y ANALISIS DE LA LITERATURA SOBRE LSD-25, MESCALINA Y CANNABIS INDICA Se efeciiia una revision bibliogrifica de la literatura sobre el tema, y dado el ingente numero de publicaciones. imposibles siquiera de citar en tan corto espacio, preferimos exponer en este resumen solamente la situacién actual de las investigaciones. i ‘A). LSD-25.—Como es sabido, el acido lisérgico es el nucleo fundamental de ios ulcaloides del Cornezuelo de Centeno, de cuyas 4 formas estereoisémeras las levdgiras son las mas activas, excepto para el derivado LSD-25 0 dietilamida del acido d-lisérgico, en que la dex- trogira es la farmacologicamente activa. Esta LSD iué obtenida por Stoll y Hoffman en 1938. Pero hasta cinco afios después, en que este Ultimo se intoxicd accidentalmente, no se descubrié su psicoactividad. Desde entonces se intensificaron las investigaciones, preferentemente clinicus, psicométricas y bioquimicas. a) En el terreno clinico ios autores se dividen en los que — como Stoll —creen que la droga produce un sindrome paragonable a las psicosis exdgenas, incluyendo al farmaco en el grupo de los eidético- fantasticos; y los que como Becker piensan que se trata de una droga psicotica, Mientras que hay otro grupo que sostiene una hipo- tesis intermedia (en los psicéticos tendria accion psicotizante, mien- tras que en los sanos daria un efecto eidético), a la que pertenecen Callicri, Ravetta y otros. Pero existe una clara comcidencia en la mayoria de las descrip- ciones clinicas de la intoxicacion: pasado el periodo de latencia (unos 10 a 15 minutos en la administracion intravenosa, o unos 45 a 60 por via cral), aparecen los primeros sintomas preferentemente de tipo vegetativo y neurologico, que constituyen la etapa somatica de la inta~ xicacion (cefaleas, nduseas, mareos, cenestesias, taquicardia, sudo- racion, incoordinacién y relajacion muscular, etc.). Después cparecen los sintomas propiamente psiquicos: euforia, trastornos de la senso- percepcion con ilusiones y alucinaciones, etc.; modificaciones del Esquema corporal, alteraciones de la esfera del’ yo con despersonali- gacion. perturbaci..nes de la conciencia de espacio y tiempo, y modi- ficacicnes de !os rendinventos intelectuales en general. En los psicdiicos y oligofrénicos la psicoactividad de la droga seria menor, y solamente se mostraria acentuando la sin:omatologia anterier (Belsanti y otro: Este cuadie clinico se desarrollaria para algunos (Shon, Rinkel y Salomon, ric.) cn cuatro fases: 1+ Prodromica. 2.* Periodo de acmé Ge los Cicily (una a cinco hevas de la ingestion). 3. Periodo de decli- nacién (1" a i2 horasi. 44 Periodo de efectos posteriores. b) Loy attures tambign se dividen a la hora de ccnsiderar los restiltades de los tests’ un grupo (Shan, Hyde y Salomén) comparan dichos re los efectos de la psicosis lisérgica, con los “a esquuzetienia. Civos (Stoll) definen un estidrome ese Rorschach eonsivente en relajacién y distea: ras (Shun, Douts, ete), por ultimo, no atiNOS, ne, Abranion, e'¢. usando una bateria de tests (Bender, h TAT. Wechster-Bellevue, ete.) hallaron en cl Rorschach de A-Ad ‘7, disminuicién también de las W, y ie las M, Habria una rotura del usual mecanismo 1 clarament que las respuestas fuesen seme- énicrs Lolo cn cinco casns de 21 podia en- 5 contrarse esta semejanza). c) Las investigaciones electroencefalograficas sélo han aportado, en lineas generales, el hallazgo de que durantae la intoxicacién se apre- cia una hiperexcitabilidad con aumento de ritmos alfa, que atribuyen una disminucién de la fase refractaria neuronal (Gustaut, Ferrer y Castell). d) ‘También son contradictorios los resultados de la aplicacién de la LSD-25 con fines terapeuticos, siendo interesante sefalar que, junto a quienes opinan (Sandison, Spencer y otros) que la LSD estaria indi- ja como droga relajante que facilita la transferencia y permite des- cubrir aspectos inconscientes de la personalidad én la psicoterapia de los neurdticos, otros encuentran que dicha droga por si misma puede beneticiar a los depresivos por la euforia que produce, y por cierto efec- to calmante de la ansiedad (Savage, Johnson). Finalmente, hay quien no encuentra aplicacién terapeutica a la LSD. e) Se ha schalado Ja neuttaiizacion de la psicosis lisérgica con otros farmacos (acido nicotinico, barbitiricos, ataraxicos, clorproma- cina, etc.); pero ninguno de ells parece que actuaria por un antago- nismo directo, sino a través de la interaccién sobre los productos me- tabélicos que se producirian en el organismo durante la intoxicacién. En este terreno de los antagonistas, merece citarse que la LSD es el antagonista mas poderoso conocido de la serotonina (Hameed y Gaddum). Pero la significacién fisiolégica de esta sustancia (5-hidro- xitriptamina), que se encuentra presente en los vertebrados en una 99 % de la cantidad total en las células del sistema enterocromafin y as plaquetas, y en menor cantidad en el hipotalamo y otros centros nerviosos (Twarog y Page, etc.), esta poco clara. Por lo cual la hi- potesis original de Woolley y Shaw de que la supresién de su accion fisiolégica se traduciria por trastornos mentales, es bastante aven- turada. f) Cierto numero de investigaciones bioquimicas que comprue- ban una hepatosis fugaz en perros lisergizados (Buscaino), o analogias en el comportamiento excretivo de fostatos inorginicos de los liser- gizados y los esquizofrénicos (Hoagland, Rinkel, etc.); 0 los experi- mentos de Mayer-Gross y colaboradores que han comprobado el blo- queo metabélico de la glucolisis cerebral en los individuos intoxicados con LSD, han promovido una resucitacién de las concepciones, etiolé- gicas de tipos bioquimico en la esquizofrenia. Si bien lo unico que hoy en dia podemos deducir de dicho tipo de investigaciones, es que pa- rece ser que la LSD produce alteraciones en los mecanismos y fer- mentativos de oxidacién cerebral, y que, al igual que otras drogas, que producen psicosis, su efecto esta en relacién con la facilidad de absor- cién de la sustancia a través de las membranas celulares cerebrales (Fischer y colaboradores), Pareciendo verosimil que dicho mecanismo de actuacién se produzca a través del fallo de algiin sistema enzimatico anulador de la adrenalina, pudiéndose producir metabolitos del tipo del adrenocromo, cuyos efectos similares a lu LSD hacen pensar si esta ultima tendria dicho mecanismo de accién. 6 B) La Mescalina es un alcaloide que se obtiene de un cactus Namado vulgarmente Peyote, siendo identificada su estructura quimica por Heffter como la 3-4-5 irimetoxifeniletilamina; compuesto qui- mico bastante cercano a la adrenalina y noradrenalina. a) En realidad el primer trabajo cientifico sobre la droga, que no ha perdido actualidad, es cl de Beringer en 1927, que ya 11,6 los trastornos basicos de la intoxicacion: delirio alucinatorio fantastico, dlusiones de movimiento, sensibilizacion al color y desintegracion ct Ja personalidad, Numerosos autores continuaron los trabajos clinicos, entre los que destacan los de Delay y Gerard, que sefalan la frecuente presentacion de trastornos vegelativos y neuroldgicos, asi como un sindrome psicopatologico consistente en: trastornos de la integracion perceptiva auditiva y visual; trastornos afectivos con euforia o depre- sion; a veces agresividad y excitabilidad psicomotriz;; trastornos psi- cosensoriales con distorsién de los contornos y percepcién brillante de los colores; alucinaciones visuales y trastornos del esquema cor- poral. Existe discrepancia entre las primitivas descripciones de la Gpoca de Beringer y las modernas de Dember, Herman, Merlis, etc. que describen cuadros psicopatologicos mas pobres. La mayoria de los autores conceptian a la Mescalina como ung sustancia «psicética». b) Con respecto a los estudios dedicados a la aplicacién de Tests, durante Ja intoxicacién mescalinica, tenemos un grupo de autores que encuentran los resultados comparables a los obtenidos en la esquizo- frenia (Cruz, Matefi, etc.), y otro grupo que sefiala como los Tests muestran una debilitacion de las fuerzas represoras inconscientes (Tallaferro, Stockings). c) La electroencefalografia ha demostrado una desincronizacién y apagamiento de voltaje del ritmo alfa, si que se pueda establecer paralelismo entre la sintomatologia y el trazado (Dember). Himwich produjo en el conejo un etrazado de alarmay que volvia a la norma- lidad con Frenquel. d) En relacion con la utilidad terapéutica de la droga. aparte de su posibilidad de aglicacién como relajadora y facilitadora de la psi- coterapia, lo mas interesante es lo refcrente a la terapsutica de la esquizofrenia mediante una medicacién conjunta de Mescalina y Clorpromacina, propuesta por primera vez por Dember y cola! dores en 1954, obtemiendo segun ellos curaciones espcctaculares de esquizofrénicos, Pero posteriormente otros autores no han ccntra~ tado la utilidad del método (Postell y Cossa en 1956). e) Los mismo: farmacos que se han empleado como neutrali- zentes de la psicosis lisérgica, se han utilizado para frenar la psicosis miescalinica: Largactil, succinato sddico, barbituiricos, ete. Habiendo servido también la Mescalina para contrastar el efecto antialuciné- geno de nuevos medicamentos como el Frenquel, Meratran, vtc. (Himwich). fy Respecto a las investigaviones bioquimicas, han seguido una 7 marcha paralela a las de LS.D., de tal forma que, utilizando mes- ~ Galina radioactiva, (Block y Potzig) se ha visto su concentracién he pitica y su répida desaparicion del cerebro antes de que comienze el Guadro psicopatologico, por lo que se ha pensado que Ja potencia alu- cinégena de la droga no depende de ella misma sinc de la formacién de un compuesto proteico de origen hepitico. C) El Cannabis Indica es une plata de origen asidtico pertene- ciente a la familia de las Cannabiceas, de la que se han obtenido diver- s0s extractos sin llegar a una completa seguridad en el aislamiento y formulacién de su principio activo, que para Todd, estaria constituido por mezclas de Tetrahidrocannabinoles isoméricos residentes en la Tesina del céfiamo, Existen infinidad de preparados y formas de uti- Hizacion del Haschich segin los diferentes paises. Las propiedades embriagantes de dichos preparados son conocidas de antiguo, pero hasta el estudio de Moreau de Tours en el siglo xvitt, no tenemos un verdadero estudio cientifico de la intoxicacién, Dada la importancia del trabajo del Doctor Moreau de Tours, todos los estudios de céfiamo {ndico toman como base las experiencias del insigne médico. Segin 41 podria distinguirse unos sintoma sométicos caracterizados por: calor, temblor muscular, bradipnea, midriasis, sudoracién principiantes, vomitos y lipotimi Los efectos psiquicos los divide Moreau en ocho apartados: 1 Sentimiento de alegria y euforia, 2s Excitacién y disociacién de iders. 3° Errores sobre el tiempo y el espacio, juzgando de la dura- cién segin el numero de imagenes que desfilen por la mente. 4°" Especial sensibilidad auditiva. '» Formacién de ideas fijas por influencia del mundo exterior. ;* Sobreexcitacién de los sentimientos y disminucién de los afectos. : ‘72 Impulsos irresistibles de otigen sugestivo. 8» Tlusiones y alucinaciones, todo lo que se imagina aparece ne- tamente delante de los ojos. _ Este mismo autor divide la intoxicacién en cuatro periodos: * De excitacién nerviosa. 2. De alucinacién e inestabilidad ment: De éxtasis y reposo profundo, 4° Suefio final, que dura va horas. ‘A continuacién transeribimos algunos pérrafos de la autoexpe- riencia de Tedfilo Gautier, publicado en La Presse el dia 10 de julio de 1843: «Tenia la sensacién de que mi cuerpo se disolvia volviéndose fransparente, Netamente veia en mi pecho el Hasschich que habia ingerido en forma de una esmeralda de la que se escapaban millones de pequefios reflejos... alrededor de mi habia piedras de todos los colores que se iban renovando sin cesar, y que yo no sabria compa- rarlo mejor que al juego del celidoscopio; todavia veia a mis cama- radas en ciertos momentos pero desfigurados, mitad hombre mitad planta, con aire de ibis, apoyados sobre una pata de avestruz y ba- tisndo las alas... uno de mis compafieros me dirigié en italiano un discurso que él Hasschich con su fuerza me tradujo al espafiol... lo particular del enervamiento del Hasschich es que no es una cosa con- tinuada; toma y deja una persona monténdola al cielo y bajandola a la tierra sin transicién.» Por su parte Baudelaire en eLos Parafsos Artificiales» nos rela- ciona sus vivencias: ...Los colores entraroa en el cerebro con una intensidad victoriosa... delirio, nadie se asombraré de que un pensa- amiento final supremo salga del cerebro del sohador jyo me he con- ° vertido en Dios!» La siguiente frase de Blondel (1687): «cada devoto del Hasschich tiene el suefio que mereces, expresa la relacién existente entre los efec- tos de la droga y las condiciones individuales de los que lo toman. Bastantes autores, como Von Bibra (1885), Taylor (1878), Malt- zan (1874), Skliar e Iwanow (1932), describen cuadros alucinatorio- delirantes producidos por el téxico, pero reparando demasiado en lo pintoresco de las descripciones, sin clasificar de una manera cientifica los sintomas. Mas sistematicamente estudiaron Warnock, Villajuif, Hesnard y Fahredin los efectos de la droga, sefialando que 1a intoxicacién cro- nica podia conducir al individuo a un estado andlogo a la esquizo- frenia. En 1939, Stringaris, resume todas las observaciones precedentes distinguiendo la intoxicacién por el Hasschich de la epsicosis hasschis- chica». En el primer grupo se comprendel el delirio ini ; el delirio que aparece cada vez después del uso repetido del Hasschich ; el delirio provocado por el consumo continuado durante dias seguidos del téxico; 1a intoxicacién crénica que provoca una transformacién del caracter. Stringaris considera como «psicosis hasschischica» los trastornés psiquicos causados por cl uso continuado de la droga y manifestados de manera permanente, que pueden no distinguirse de las esquizo- frenias verdaderas. Citando también que el abuso durante afios del cafiamo puede conducir a una demencia parecida a la alcohdlica. El farmacéutico Passcal (1934), en su tesis doctoral, cataloga los sintomas psiquicos en: a) Debilitamiento de la voluntad. b) Sensacién de desdoblamiento psicolégico. c) Revelacion de tendencias subcons- cientes. dy Sugestibilidad pronunciada. e) Recuerdo del delirio después de la crisis. Kamal Dana (1938) sefiala la importancia de la euforia inicial con logorrea, fuga de ideas, hipersensibilidad sensorial y alucinacio- nes, acompanadas de diversos trastornos sométicos propios de la hi- persimpaticotonia. Posteriormente aparecerian las fantasias, manifes- tandose claramente las tendencias inconscientes. Sefiala también que en los toxicomanos crénicos lo mas importante es el trastorno afectivo Po ¥ de la conducta, pudiendo caer en alguna de estas enfermedades Psiquicas: eretismo cerebral; melancclia subaguda; delirio aluci- hatorio auditivo sobre fundo degenerativo; confusién mental; esqui- zoidia y demencia precoz. Walter Bromberg y Rodgers, Mufiz Angulo y otros (1048), han sefialado, trabajando con la marihuana, el particular estado de agre- sividad que revela los sujetos sometidos a la droga, impulsindoles al crimen. Bromberg (1939 y 1946) pone el acento sobre el elevado niimero de personalidades psicopdtices que se dan entre los adeptos, y niega que haya habituamiento y aumento de tolerancia a la droga, cuya . supresion no daria lugar a sintomas especiales. Finalmente, digamos que el Profesor Caturegli de Méjico, en relacién establecida con nosotros en 1954, nos informé de la extensién extraordinaria que ha alcanzado el uso de la marihuana ultimamente en Méjico (incluso con posterioridad al afio 1940 en que el gobierno dispuso su prohibicién en medicina y en la industria). También tuvo la amabilidad de enviarnos resimenes de historias clinicas, que re- velan fundamentalmente cuadros de excitacién psicomotriz, compulsion, cbnubilacién de conciencia, temblor, trastorncs neuro- vegetativos y troficos. Indicandonos su excepticismo acerea de que el uso continuado de esta droga produzca perturbaciones mentales, que no sean el desarrollo de caracteres psicopaticos y trastornos de la esfera ética. En el momento presente en que hemos realizado nuestro traba- jo, los estudios de la intoxicacién por Hasschich, tanto en el aspecto Psicopatolégico, como en el bioquimico, electroencefalogréficos, ete, estén bastante abandonados sin que sepamos se hayan hecho aporta- ciones de valor. Carfruo SEGUNDO MATERIAL Y METODO DE INVESTIGACION Se expone nuestra intencién de hacer un estudio fundamental- mente clinico y psicopatolégico (aunque también se hayan empieado Test y EEG.) de las intoxicacicnes por L.S.D.-25, Mescalina y Can- nabis, intentando desentrafiar su problematica: 1 A través del ané- Jisis estructural de dichas psicosis, viendo si se puede establecer un sindrome axial de las mismas, e investigando la relacién e influencia mutua en Ia respuesta de los factores hereditarios, constitucionales, ambientales, vivenciales y patdgenos. 2° Tratando de responder a la cuestién planteada por muchos autores de la especificidad 0 inespe- Cificidad de dichos cuadros elfnicos, sometiendo a un mismo grupo ° 10 de siete sujetos a los efectos de In LS.D. y Mesealina en cada uno de ellos. 3° Procurando definir el encuadramiento nosolégico de dichcs sindromes, aclarando si son esquizofrenias experimentales, reacciones exdgeneas, ete, punto candente y contradictoria en 1a bibliografia sobre el tema. 4. Estudiando si la sintomatologia de dichas intoxica- ciones tiene relacin con contenidos inconscientes, efec‘uando en ocho sujetos lisergizados y quince mescalinizados, una exploracin profunda de la personalidad con métodos analiticos (Vg., el Desoille), antes de someterles a la prueba. 5.° Efectuando controles: a) Con pla- cebos en los casos 5, 15 y 25. de L. S.D., y 5, 10 y 15, de Mescalina, sin que obtuviéramos sintomatologia psiquica tipica. b) Administrando la LSD. sin que lo supieran en los casos 12, 13 y, 14, En este cap:tulo se expone también el material y métodos de investigacién, habiéndose verificado las experiencias con la L.S.D.-25 sobre un total de 45 sujetos de ambos sexos (8 mujeres), distribuidos as{: 26 voluntarios normales, 3 psicépatas, 5 neurdticos (3 de angustia Y¥ 2obsesivos), 2 delirium tremens, 6 psicosis del circulo esquizofrénico, 1 depresién endégena, 1 oligofrenia y un desarrollo parancide. Los sanos eran sujetos de 19 a 31 afios con niveles mentales su- periores al promedio, habiéndoseles administrado dosis de 30 a 160 gammas por via oral, excepto para cinco en que se empleé la endo- venosa. Los enfermos procedian de la Clinica Psiquidtrica Universi- taria de la Facultad de Barcelona, sus edades oscilaban de 20 a 50 afios, y se emplearon iguales dosis. Para la Mescalina se contd con un total de 15 sujetos varones, , también de nivel mental superior al promedio, de 20 a 40 aiios, dis- tribuidos en: 10 voluntarios normales, 2 alcohélicos, 1 neurosis de angustia, 2 desarrollos paranoides. Empledndose clorhidrato de mesca- lina a la dosis de 0'50 gramos, en 4 por via oral, y en los demés intra- venosa. Para el Hasschich estudiamos un grupo de 10 toxicémanos, varones de 19 a 40 afios, con un nivel mental correspondiente al promedio 0 por encima de él, y con un tiempo de toxicomania que oscilaba de 2 a 15 afios, sin que podamos hablar de dosis, ya que nuestro estudio se referia solamente al Kiff, que es una forma de consumo que por ser fumada, dificulta el precisar la cantidad de t6xico absorbida. Unica- , mente afiadiremos que nuestros sujetos consumieron un promedio de ocho 1 doce pipas por sesin (correspondientes de 16 a 24 gramos de C0). A todos se les efectué una historia clinica completa, estudio de la Personalidad con tests proyectivos y de inteligencia antes ydurante - Ia prueba, observindoles durante todo el periodo de intoxicacién © por lo menos unas doce horas. En 6 sujetos lisergizados se practicé el E.E.G. antes y durante la fase de psicoactividad. En 2 mescalinizados se realiz6 idéntica En un grupo de siete sujetos se repitié la administracién de LSD. de 20 8 veces. A otro grupo de 7, se les sometié sucesivamente a la ad- u ministracion de LSD. y Mescalina, haciéndoles escribir sus impresio- nes comparativas. En todos los sujetos que parecian ofrecer factores interesantes de personalidad, se exploré su psiquismo profundo con métodos analf- ticos, ensuefio hicido, etc... fe A continuacién, con objeto de facilitar la vision de conjunto de nuestro material exponemos algunos ejemplos de nuestra casuistica resumidos: 'A) Casutstica pz 1.s.0.—Ejemplo de respuesta a Ja intoxieacién en individuos normales. Caso nuimero 3: 23 afios, V, estudiante de medicina, picnico, psi- cotipo ciclotimico, alegre, bonachén y mujeriego. Antecedent de cuatro hijos sanos. No enfermedades mentales en la familia, Padres bondadosos. Criado en un ambiente permisivo, de mucha relacién so- cial y buen nivel econémico. experimental: Ingiere 100 gammas de L.S.D. por via cral. A los 30 minutos el pulso sube de 32 a 96, la tensién de 13'5 y 75 a 15/7. Siente frio, diversas cenestesias, pesadez en todo el cuer- po, mareos, visién borrosa. Cambian la forma, nitidez y calidad de las percepciones visuales. A la hora, con ios ojos cerrados, comienza a tener rej taciones de cardcter fantastico (Iamaradas de colores, Jetreros luminosos, emillones de cosas que se suceden en mi mente). Euforia y risa tonta, seguida al poco tiempo de réfagas de angustia. Pensamiento preocupado por su estado. Atencidn dificil de concen- trar. Alteraciones de la conciencia del tiempo. Sensacién de que el ‘se ensancha. El Rorschach demuestra un aumento de respues- tas originales, de respuestas de color y anatémicas, asi como del tiem- de reaccién, en relacién con el estado normal. Dificil composicién de historias con el T.A.T., que no se puede practicar, dedicindose a describir las liminas. A las dos horas presenta abundantes paraeido- Has crométicas méviles. A las dos horas y media comienzan a dismi- nuir los sintomas, recuperindose totalmente a las ocho horas. E. E.G. sin particularidades antes de la prueba. A la hora de la ingestién se le repite, éndose un ritmo répido de bajo voltaje, con conservacién del alfa. Algunas ondas theta bilaterales cn region we Ejemplo de respuesta a la intoxicacién de individuos psicéticos y neuréticos, ‘Caso mimero 34: 30 afice, V, labrador, atlético. Antecedentes: Padre eaquizoide. El enfermo hace el mim. 5 de siete hermanos sa- ‘Siempre fué torpe, con escasa escolaridad, debida a que tuvo que 12 trabajar desde pequefio. Sindrome clinico: esquizofrenia paranoide con delirio mistico, (Se siente dotado de gran capacidad mental, ha- biendo recibido una sefial divina. Se le aparece Dios, del que también recibe érdenes para recristianizar el mundo.) Intoxicacién experimental: Se le administran &0 gammas de LSD. por via oral. A la hora apenas nota alguna cenestesia y mareo. En la pared ve unos bichos raros que también corren por la cama, «pero conmigo no se meten, es la vista la qué los hace, no estan en realidad. Ve que se mueven los cuadros de las paredes. A las dos horas «veo unas motas en el techo, como cangrejillos que comen en el orificio. Comen, lamen, se tiran y los veo alli, hay muchos, son de colores (se rie), la mayoria son amarillos. Parece que estén, yo los veo, pero es cosa de la vista. Del tamafo que los veo, necesitaria unas pinzas para ponerlos en mi bolsilloy. A las cuatro horas nos dice «estoy convencido de que en esta habitacion hacen ustedes algo, quizés in- fluyan con la temperatura. Ustedes intentan verme bien por dentro». A las cinco horas aumentar, los trastornos de la conciencia ce espacio y tiempo. Es dificil interesarle por los tests, que en general muestran una disminucién de rendimientos intelectuaies, En una segunda administracién de 100 gammas repite el cuadro con alucinaciones de bichos y luces de colores. Desorientado en el tiempo y espacio. Se aprecian trastornos del esquema corporal, que en la primera administracién con 80 gammas, no se apreciaban. Afir- ma ano sé si soy hombre o animal, me siento como si estuvierz dentro de las naturaleza y tuviese un alma de conejo, serpiente o lagarto 0 ave de Ja naturalezas. Se recupera a las 16 horas. Nim. 36: 37 afios. V, viajante, leptosoma. Antecedentes: es el mayor de dos hermanos. Padres neurdticos. Tio psicopata. Desde pe- quefio fué mimado y sobreprotegido por la abuela. Onicofagia y colitis espasmédica en la infancia. Estudio cuatro afios de bachillerato mien- tras vivia con la abuella. Hizo la guerra y luego permanecié movili- zado siete afios. Al licenciarse desadaptado durante tres meses, comen- zando luego a trabajar de dibujante, ortopédico, viajante, ete., frac sado en todos los empleos. Muere el padre que constitu i sostén de la familia y Ilegan a la ruina total. Sindrom: rosis de angustia. (Lleva des afios con vértigos, asten etcétera, de matiz hipocondriaco, autoobservandose constantemente. Gran ansiedad, ora con frecuencia, le repele el trabajo y econ sedantes.) Intozicacién experimental: Se le hicieron 8 administraciones de LS.D., desde 80 a 140 gammas, siempre por via oral. Apreciandose un acostumbramiento 41 farmacc con mejor tolerancia, si bien los efec- tos psicopatologicos no variaron en las sucesivas administraciones. La més productiva fué la primera que relatam los 50 minutos sien- te vibraciones de ondas internas en el cuerpo, mareos, vértigos, etc. ‘Estas sensaciones suscitan vivencias catastréficas. Despersonalizacién. Risa tonta e inmotivada, pero sintiéndose «internamente angustiadoy. 3 Atencién, pensamiento, memoria, etc, entorpecidos. Alteraciones de ja somatognosia con impresin de leviandad y pseudolevitacion. Pseu- doalucinaciones de luces intensas. Paraeidolias. Representaciones fan- tdeticas con los ojos cerrados (se ve descendiendo por su propio cré- Heo) Se nota como si fuese un sinvergiienza «me daria lo mismo que ge me cayesen los pantalones aqui o que me ocurriese cualquier otra ‘cosa por el estilo». "Acmé a las cinco horas, bien a las 17. B) Casuistica pz wescaLina. — Ejemplo de respuesta a la intoxi- cacion de individuos normales. ‘Nim. 12: 22 afos, V, estudiante, asténico, psicotipo esquizotimico, madre ciclotimica. Tercero de tres hermanos. Buena escolaridad y bien relacionado con su familia. Siempre los mismos amigos. Se sen- tia mas seguro cuanto mas reducido era su mundo. Al acabar el ba- chiller hubiera escogido la carrera de filosofia y letras, peto por obe- diencia al padre estudid medicina. Intoxicacién experimental: Se le inyectan 0'50 gms. de Mescalina intravenosa, enseguida ligero estado lipotimico y nauseoso, que cede pronto, A media hora representaciones geométricas, primero en blanco y negro y luego en color, como un film de arte abstracto. Dificultad de concentrarse en la conversacién. A la hora, imagenes de figuras humanas vagas sobre fondo coloreado, y representaciones de formas caprichosas, que evolucionan al compas de la musica de una radio cercana que él percibe con una sonoridad especial. A la una y media hora representaciones geométricas, primero en blanco y negro y luego en color, como un film de arte abstracto. Dificultad de concentrarse en Ja conversacién. A la hora, imdgenes de figuras humanas vagas SSbre fondo coloreado, y representaciones de formas caprichosas, que evolucionan al compas de la musica de una radio cercana que a ibe con una sonoridad especial. A Ja una y media horas ya no se sinete expectador, sino que esta metido de leno en las escenas. Ex- trafieza del propio cuerpo (siente como si tuviera muchas piernas). Todas las escenas estén dirigidas por la musica de la radio, sobre cuya realidad duda. Se siente protagonista de grandes revistas con musica y color especiales. A las dos y media horas, estado de dnimo placentero, ligeras dificultades de rendimiento intelectuales. Percibe Er espacio alargado, y las escenas del ambiente con gran plas icidad. Vivencia de haber transcurrido much{simo tiempo desde que tom6 la Mescalina, pero sin embargo, juzga la hora con bastante exactitud. ‘Ve el mundo exterior como una pantalla lena de irrealidad. Viven- cias de extrafieza y sensacién de disolucién del yo, Asi persiste 16 horas, ‘al cabo de las cuales se encuentra recuperado. ‘Autoandlisis: «Es tanto la sensacién de extrafieza que tengo ante mf mismo, que me pregunto qué es lo que me une, me relaciona, con el que esta mafiana ha tomado la droga. Me parece haberme desli- gado de algo que me permite profundizar mis y explicarme a los de- mis, Todo me da sensacién de irrealidad, de representacién, pero més 14 desnudv, Todo cuanto me ha ocurrido hoy me parece inverosimil, como geno fuera yo quizn lo hubiera vivido. Me parece que es interesante esto que he escrito, Me siento muy extrafio y me cuesta trabajo pensar que dia es hoy...» Ejemplo de respuesta a la intoxicacién de individuos enfermos. Nim. 1: 45 anos, V, capataz, leptosoma. Antecedertes: padre desconocido. Madre muerta a los 48 anos, agresiva y alcohélica. Hijo inico, apenas fué a la escuela por tener que trabajar desde pequefo- Infancia sin jucgos ni amigos. Autodidacta, iba a clases nocturnas y luego estudiaba en casa obras de mecanica, matematicas, etc. A tos 24 atios, después de morir la madre, se casa. Tiene cuatro hijos sanos. ‘Sindrome clinico: Desarrollo paranoide (se trata de una perso- nalidad egoista orgulloso de haber legado a capatez en una industria, Introvertido y desconfiado, es sordo y le irrita que le hablen a sus espaidas, pues cree ser objeto de criticas. Se prepara con gran esfuer- zo para un examen que le permitiria mejorar de puesto, pero le dan Ja plaza a otros mas joven en la empresa. Litiga en la Magistratura, cree que se burlan de él sus inferiores, y que todos estén de acuerdo para hacerle fracasar, etc.). Intoxicacién experimental: Se le administran 0'50 yramos de Mes- calina intravenosa. Inmediatamente nduseas, vomitos, sudoracién, pal- pitaciones, el pulso asciende 78 a 92, manteniéndose la presién normal. Midriasis, A los 43 minutos paraeidolias cinéticas. Ondulacién de los planos, Nota los bordes de las cosas mas borrosos. «Nunca me habia Fijado en lo bonito de los colores como ahora» Con el Rorschach no ‘abstrac formas apenas. quedando ensimismado en la contemplacién Ge los colores. Con los ojos cerrados representaciones de manchas y flores on colores rojos y arnarillos. Estado de Animo placentero. «Me estaria asi toda la vida y Mego a olvidar que tengo cuerpo.» Nota Vitalidad incluso en el espacio, que le parece que vibra. Acompafado por el observador sale a Ia calle y ve todo tan bonito, como si antes Funea hubiese captado <1 belleza, que se marcha a dar un paseo. Ligero estado hiporaniaco. Regresa a las dos horas, apagandose poco ‘a poco cl cuadro para recuperat la normalidad a las siete horas. E. E.G, practicado en estado normal no ofrecia ninguna particu- larided El electuado a las dos horas de Ja intoixcacién, muestra un ritmo ravido de bujo voltaje con tendencia al aplanamiento del alfa. Numerosos artefactos musculares. ‘Caso num, 5: 24 afics, varén, representante, atlético. Anteceden- Tins muy bebcdores, padres muy afectivos con el enfermo que haw tinico y muy mimado. Escolaridad precoz con buenos rendi- os. pastcriormente estudié peritaje mercantil sin Hegar a aca- jut De nifi muy enfermizo, imaginativo, embustero. De los 17 afios ‘a wns lante desarrollo con hipererotismo que le hace frecuentar pros- ‘bt! s Hace cuatro afios comenzo a salir con unos amigos muy be- b dines. acostumbrados a beber media botella de cofiac y varies 15 {ermouts con ginebra al dia. Cuando se embriaga es agresivo sobre todo con la madre, rompe cosas, insulta, acabando a veces en le comisaria, Sindrome clinico: Aleoholismo con episodios de embria, guez patologica. Intoxicacién experimental: Se le administran 0°50 gramos de Mes- ¢alina por via oral. A la media hora oleadas de frio y calor, asi como {38 imagenes y colores, predominando ef azul. Los tests mucctnee an ficultades de concentrar y mantener la atencidn, ligero deficit de ia capacidad de fijacion. Ei Rorschach ofrece en ‘comparacién con At bracticade en estado normal, un aumento de respuestas originales 9 de color. Recupera Ja normalidad a las cinco hores ©, Sasuistica ne Hascuicr.—Caso mim. 2: 22 afios; relojero, atlético. Antecedentes: Padre de genio fuerte, casade cn segundas nupcias, La madrastra se Nevaba mal con los hijos del primer watt monio. El sujeto es el mayor de tres hermanos, Buens eseclaine gicndo durante la infancia un nifio alegre y travieso, Haste ioe 4 ahos estuvo estudiando miisica en otro pueblo. Entonces waeles cA domicilio paterno, surgiendo numerosas disputas con le madrastra, St marcha voluntario a Ia legion. Psicotipo, serio, reservado, trabajador { hiperexcitable. Toxicomano de iff y griffa desde hace toe aiios, iMerrumpidos por temporadas de abstencion. Llega a fumar 1s Pipas diarias de kiff y 10 cigarrillos de grifta, Intoxicacién experimental: Le observamos durante una sesién en I er eg Sg PN pa ed sambaneras, A-los 45 minutos el pulso ha subido de 72 a 80 y lac an, Siones de 13-6°9 a 14-7. Pupilas midriaticas, reaccionan poco Reflejos rues, igera euforia. Habla pozo, No empatiza con a reste dooce A ln une iene una fase de vémitos que le duran unos 10 minutos A. una treinta horas obnubilacién de conciencia, Pleede Ie nocién * del tiempo. Fantasias dirigidas por su propia voluntal Ligero tras- 16 ‘CaPiTULO TEACERO ANALISIS DE LOS RESULTADOS. Se dedica al analisis de los resultados. Pero antes de entrar en ‘fu examen, hemos de hacer constar que: 1° Hemos procurado que las condiciones de la observacién fuesen iguales en todos los sujetos. 2° En los seis casos que administramos suero como plavebo no obtuvi- mos cuadros psicopatolégicos tipicos, y si malestar, cierta ansiedad en expectacién de los efertos, etc. 3.° Estos mismos sujetos en admi- istracién posterior ce la droga desarrollaron un cuadro psicopato- légico tipico. 4° En tres sujetos a los que se les hizo beber ecasual- mente» un vaso de agua conteniendo 100 gammas de L. S. D., se desarrolié la psicosis experimental, incluso con gran intensidad, pese a que no Ia esperaban. 5. A todos los sujetos, con objeto de eliminar los efectos subjetivos, se les advirtié «que muchas veces estas drogas no provocan reaccion, dependiendo de {a idiosincrasia particular de cada uno. Por toda lo cual, méxime teniendo en cuenta la actitud neutral del observador, creemos que los efectos se deben exclusivamente al téxico empleado. Hemos centrado el estudio fenomenoldgico de las wsicosis experimentalés en los casos en que se administré la droga 8 sujetos normales, con lo que hemos pretendido evitar el enmascara- miento del cuadro ciinico experimental con la sintomatologia anterior de los enfermos. A) Asf para la L. S. D., entre la administracién del farmaco y Ja aparicién de los primeros efectos vegetativos y somaticos, trans- currié un promedio de 10 minutos para la via intravenosa y de 40 para Ja via oral, Apareciendo luego: midriasis (36 %), taquicardia fugaz (45 %), hipertensin discreta (19 %), incoordinacién (20 %), reflejos vivos (10 %). En todos los casos se han presentado practicamente con mas o menos intensidad, mareos, nauseas, cenestesias y sensaciones propioceptivas diversas, sudoracién, cefaleas y ligero temblor. Después de esta fase somética, cuando van decreciendo sus efectos, comienza la etapa psiquica de la intoxicacién, que estudiaremos por aporiadas y cuya iniciacién, generalmente, tiene lugar con trastornos de la: Afectividad. — Es frecuente que el sujeto reaccione a la intoxica- cin lisérgica con un estado eufdrico, que luego durante el curso de la intoxicacion es modificado por rifagas de angustia (12 casos). Este s{ntoma, de euforia alternante con angustia, expresaria un estado de labilidad afectiva’accmpafiado frecuentemente por incontinencia emo- cional. Pero en otros tres casos, nos encontramos con una disociacién afectiva, por lo cual, sobre un estado de 4nimo angustioso-depresivo (a veces en relacién con sentimientos de ra{z corporal como males- tar, etc), aparecen impulsos alegres, con risa imperiosa, etc. Pero los sujetos estructuran y diferencian perfectamente estos planos de los My |. sentimientos al decirnos frases més o menos parecidas a esta: «Por dentro estoy triste y por fuera tengo ganas de reir». Es dificil precisar Si toda una estirpe de sintomas, como pesadez, relajacion, diversas Genestesias, etc., indican un aumento general de la receptividad cons- Ciente frente a’ las sensaciones del intracuerpo, o son sentimientos corporales, de los cuales los mas frecuentemente afectados son los sentimientos de energia del cuerpo, que frecuentemente se siente como desmayado (6 casos). En tres casos en que predomina la desper- ‘Sonalizacion, se manifiesta lo que pudieramos Ilamar esentimiento de la falta de sentimientoy, 0 sea, un extrafiamiento sentimental. Poco frecuentes también han sido los sentitientos espirituales de catéstrofe o felicidad (3 casos), manifestados sobre todo en forma de vivencia angustiosa de ultimo instante o de estado de 4nimo pla- centero. En relacién con lo afirmado por muchos autores, de que la res- puesta afectiva, durante la intoxicacién por L. S. D., esta en relacién oh el temperamento, estado de animo y momento vivencial previos, hemos de eecir que, de toda nuestra casuistica de individuos normales, s6lo en diez casos se ha dado esta relacion de una manera positiva, siendo en los demas la respuesta discordante. Pero atin dentro de estos diez casas, el estado afectivo no se ha mantenido constantemente en tl mismo ‘polo euférico o disfético, sino que frecuentemente se han dado rafages del estado afectivo opuesto. Impulsos e instintividad.— En esta esfera, han permanecido bas- tante apagadas durante la intoxicacion las finalidades vitales, siendo dentro de la instintividad en general, los instintos sociales y los diri- idos hacia el mundo exterior ios que se nos han mostrado mas dis- finuidos. Cosa légica, si tenemos en cuenta que los sujetos forzosa- Mente convierten a su eyo» en objeto de su atencién preferente. A pesar de que ya queda comprendido en el prrafo anterior, queremos Ser més explicitos y decir que, en contra de lo deserito por algunos, Ya instintividad sexual ha permanecido también apagada dentro de Ja ley general. “Pensamiento. Memoria. Atencion. Capacidades intelectuales.—Nos ha Iamado poderosamente la atencién la frecuencia con que se pre- _ sentaban autorreferencias. decconfianza de los observadores, ete. (12 casos), pero interpretamos que estas autorreferencias tienen por base un estado afectivo de sentirse observado y, al mismo tiempo, invadidos r el efecto de la droga, y con la vivencia de insuficiencia de su propia actividad psiquica, es logico que crean ser objeto de pruebes y wengafios para apurar la observacion. Por lo tanto, pensamos que este tipo de ideas ‘autorreferidas no tienen caracteristicas de ideas deli- rantes. El curso de las asociaciones en general es més répido, pero el to queda unido a lo concreto, no se desprende de ello, fal- tando una conceptual rica. Por esto muchas veces las descrip- ciones de sus vivencias carecen de precisién y claridad. 18 Pricticamente es constante una ligera baja de rendimientos en las pruebas intelectuales, de memoria y atencién. No hemos encontrado, con rigor psicopatologico, la revivisciencia de recuerdos pasados que describen algunos autores. ‘Sensopercepeiones —Son casi constantes lo que Jaspers lama atransiciones de la forma y nitidez de las percepciones ¥ trastacion Sea Golidad en las sensaciones» (tales serian las ondulaciones de los Glands, la percepciéa de distintos colores de los naturales, la sonoridad Pipecial o densidad de la musica). La alteracién de la percepcién més faccuente ha sido la presentacién de ilusiones o paraeidolias coloreadas y cambiantes, que tienen su punto de partida en manchas, som Pras ete. También, aunque con menos frecuencia, se han presentado pseudoalucionaciones Spticas a continuacién de dichas paraeidolias, En contra de la mayoria de los autores, no hemos registrado ape nas alucinaciones verdaderas. En tres unicas ocasiones se nos han Gado en el campo visual y con los caracteres de la alucinacién téxica, facordandonos las alucinaciones del delirium tremens, pues el conte Ride de las mismas eran moscas, gusanos hormigas, etc. En otro caso también se nos presentaron alucinaciones épticas, pero de distintos caracteres, ya que se trataba de disefios geométricos, muy parecidos a fas representaciones que han tenido la mayoria de nuestros sujetos. Digamos también que en dichos cuatro casos se trataba de personali- dades poco integradas, generalmente con fondo angustioso. Muy tipicas, a nuestra manera de ver, son las representaciones fantastivas coloreadas que se dan con més riqueza con el sujeto aislado en'la camara oscura. Dichas representaciones, en su mayoria, adoptan un caracter geométrico de lineas, puntos, citculos, rayos, etc., de colo- tes, Su forma suele ser cambiante y, a menudo, aparecen entrelazadas, Siendo dificiles de retener por el sujeto. Por estos caracteres creemos que dificiimente dichas representaciones pueden ser expresin de un Simbolismo inconsciente, como pretenden algunos autores. En des casos constatamos un trastorno de la percepcién, que con- sistia en que la cualidad sensible de la misma (color), perdia su orde- nacién especial dentro de la forma. Como si fallase 1a percepcién 5 multanea de forma y color. Por regla general, durante la psicosis lisérgica se pierde la estruc- turacion y localizacién de las sensaciones, que se vuelven imprecisas. ‘Todas las pseudopercepciones son fugaces y cambian de sentido constantemente. Los sujetos conservan la conciencia (atin en las alu- cinaciones) de que se trata de producciones artificiales de la intoxi- cacién, y nunca han sido punto de partida ¢ ideas delirantes ‘Conciencia del yo — Los trastornos de esta esfera se han presenta- do en un 50 % de los casos. Dentro de ellos, hemos de distinguir: 4° Trastornos de la identidad de yo consigo mismo, consistente sobre todo en vivencias de cambio y extrafeza, siendo de notar algunas vivencias curiosas, como un caso que, al mirarse en el espejo, vela reflejarse en él la imagen de todos sus vicios, cuyo semejanza con el 19 motivo de la célebre novela de «cl retruto de Dorian Griyo sia accriadamente el Profesor Sarré, 2." Trastornos dv ts conciencia 4 la actividad del yo, como considerar que efectiian acsion’s stoma ticas, ligera despersonalizacion, ete. (2 casos) 3. La vonciencia de ta oposicion del yo al mundo externo sélo se ha trastornads en iG ysio- ticos, consccutivamente la inmersion de sus contenidos psiqtices. eon debilitacion de la pereepeion del mundo externo, Esquema corporal.— Aqui podemos agrupar aiteracione. de Is somatognosia: u) de superficie (andar subre algodunes o pube.: b) de la totalidad somatica (verbigracia, sensacion de Vibra. + et re po); c) sensaciones cinéticas de lus organos interaus (verbigracia sacudidas, cambios de calidad fisica, pesadez, hiviandad, ¢'¢) Muy ca- racteristico son los casos en que parece que las impresioties Extety, propio y entercceptivas, dejan de formar csquemas orgatcados ae si mismo (13 casos). Menos frecuentes, pero también interesantes, sun Ics fenimeros que siguiendo a los autores italianos denominamos apseudi tes tacione (6 casos), consistentes en que se tiene Ja sensacicn de tiotar subre alo 0 casi de volar, pero sin que falle el juicio de reaidad. a é:terencia de la autentica levitacion. Espacio y tiempo. — En 8 casos hemos recogido altcracines de ta percepcién del espacio, que preferentemente se vivenca come infinite © lejano. Pero tambien alguna vez se nos han dado vivenvias mas raras cumo de percepcién de movimientos del espacio, vibracion del mismo, etc. ‘Los trastornos de la conciencia del tiempo se han presntades en un 54 (de los casos, Refiriéndose preferentemente a lo que H-nerio Delgado lama ailusiones acerca de la duracién de Ie vividon, bien transcurriendo subjetivamente el tiempo muy aprisa. sobre tori» eaan- do hay una riqueza de representaciunes grande. O bien, vivenciande una especie de bloqueo del tiempo. Sobre tod cuando cl estado afec- tivo es disférico y predomina el malestar corperal, deseamio tos suje- tos salir de la experiencia cuanto antes. Pere, en ambos casos, la orientacién real en cl tiem es nermal o muy escasamente afectada, de tal forma que a un sun que nos dice que le parece que hayan transcurride una etornidat deode sue ingirio la droga, si le preguntamos la hora que deve ser. nos euntesta con un pequeno margen ce error. Psicomotilidad. —La mayoria de los sujetos pugnan por doninar sus afectos, 0 por lo menos la expresién de los misincs. Siendy muy frecuente también la inquictud, que algunas vecos ileca a 1 excita cin psicomotriz, sobre todo durante las riifagas de angustia. como i tratasen de eliminarla con los movimientos. De la observacién de nuestro material de enfermos se desprenden Jas siguientes consideraciones: En primer lugar, en los esquizofrénicos se aprecia una mayor resistencia a la L.S.D. que en loc sujetos nor- males.

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