Professional Documents
Culture Documents
En primer lugar, hay que decir que estas experiencias tienen una
orientación crítica y reivindicadora respecto de la historia tradicional y
oficializada. Por lo general, entre las personas que han asumido la
tarea de rescatar su propia historia, existe un discurso en contra de la
historia que se enseña en la escuela y a través de los medios de
comunicación, que los borra de la Historia; los deja fuera. Para ellos,
no encontrarse como sujetos en la historia oficial equivale a escuchar
algo así como ustedes no existen, lo cual constituye un acto de
segregación y marginación que a su juicio debe ser reivindicado. Y la
única reivindicación posible es escribir la historia propia, aquella
donde la población o el barrio es el escenario y
su generación, o la de sus padres, es la protagonista. Las historias
locales, en este sentido, se convierten en un mecanismo para
democratizar, la Historia, es decir, dejar que entren en ella —en
calidad de protagonistas—todos los sectores sociales y no sólo las
élites (los gobiernos, los sectores sociales altos, las dirigencias
políticas, los militares, etc.), con todo lo que ello implica, entre otras
cosas, devolverle el principal patrimonio social y cultural a la gente
que menos tiene, esto es, su memoria y su identidad. Según afirma
una de las coordinadoras que impulsó una de estas experiencias: