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Los derechos humanos

¿Qué son los derechos humanos?


Los derechos humanos son derechos inherentes a todos los seres humanos, sin
distinción alguna de nacionalidad, lugar de residencia, sexo, origen nacional o
étnico, color, religión, lengua, o cualquier otra condición. Todos tenemos los
mismos derechos humanos, sin discriminación alguna. Estos derechos son
interrelacionados, interdependientes e indivisibles.
Los derechos humanos universales están a menudo contemplados en la ley y
garantizados por ella, a través de los tratados, el derecho internacional
consuetudinario, los principios generales y otras fuentes del derecho internacional.
El derecho internacional de los derechos humanos establece las obligaciones que
tienen los gobiernos de tomar medidas en determinadas situaciones, o de
abstenerse de actuar de determinada forma en otras, a fin de promover y proteger
los derechos humanos y las libertades fundamentales de los individuos o grupos.
Universales e inalienables
El principio de la universalidad de los derechos humanos es la piedra angular del
derecho internacional de los derechos humanos. Este principio, tal como se
destacara inicialmente en la Declaración Universal de Derechos Humanos, se ha
reiterado en numerosos convenios, declaraciones y resoluciones internacionales
de derechos humanos. En la Conferencia Mundial de Derechos Humanos
celebrada en Viena en 1993, por ejemplo, se dispuso que todos los Estados tenían
el deber, independientemente de sus sistemas políticos, económicos y culturales,
de promover y proteger todos los derechos humanos y las libertades
fundamentales.
Todos los Estados han ratificado al menos uno, y el 80 por ciento de ellos cuatro o
más, de los principales tratados de derechos humanos, reflejando así el
consentimiento de los Estados para establecer obligaciones jurídicas que se
comprometen a cumplir, y confiriéndole al concepto de la universalidad una
expresión concreta. Algunas normas fundamentales de derechos humanos gozan
de protección universal en virtud del derecho internacional consuetudinario a
través de todas las fronteras y civilizaciones.
Los derechos humanos son inalienables. No deben suprimirse, salvo en
determinadas situaciones y según las debidas garantías procesales. Por ejemplo,
se puede restringir el derecho a la libertad si un tribunal de justicia dictamina que
una persona es culpable de haber cometido un delito.
Interdependientes e indivisibles
Todos los derechos humanos, sean éstos los derechos civiles y políticos, como el
derecho a la vida, la igualdad ante la ley y la libertad de expresión; los derechos
económicos, sociales y culturales, como el derecho al trabajo, la seguridad social y
la educación; o los derechos colectivos, como los derechos al desarrollo y la libre
determinación, todos son derechos indivisibles, interrelacionados e
interdependientes. El avance de uno facilita el avance de los demás. De la misma
manera, la privación de un derecho afecta negativamente a los demás.
En Guatemala:
El 10 de diciembre de 1948 la Asamblea General de las Naciones Unidas ONU,
proclamó la Declaración Universal de Derechos Humanos DUDH, desde entonces,
estos derechos se internacionalizaron y la Humanidad conmemora en esa fecha el
Día Internacional de los Derechos Humanos DD. HH. En aquella oportunidad, el
Estado de Guatemala mediante sus representantes, firmó esa Declaración y
progresivamente ha suscrito otros instrumentos internacionales que comprometen
el deber del Estado, obligado a observar y respetar los Derechos Humanos de
todas las personas, sin distinción de ninguna naturaleza.
Los Derechos Humanos se distinguen en tres clases: 1) Civiles y Políticos, son
derechos individuales o de primera generación. 2) Económicos, Sociales y
Culturales, reconocidos como derechos sociales o de segunda generación. 3)
Derechos de los Pueblos, de Solidaridad o de la Humanidad, son derechos de
tercera generación. Esas tres clases de derechos y libertades fundamentales en
su concepto integral, son inherentes a las personas, a nuestra naturaleza de seres
humanos, nacieron para protegernos de los abusos del Poder Público y garantizar
que los Estados y sus agentes los observen y respeten, sin olvidar, que los únicos
sujetos violadores de estos derechos, son el Estado y sus agentes.
En este tema, Guatemala tiene una larga y trágica historia por ser considerado un
país violador de derechos y libertades de sus habitantes. Las violaciones graves,
masivas, indiscriminadas y sistemáticas más recientes sucedieron durante el
Conflicto Armado Interno (CAI), ejecutadas por agentes de las dictaduras militares
contrarrevolucionarias y contrainsurgentes. Genocidio, masacres, ejecuciones
extrajudiciales, desapariciones forzadas e involuntarias, detenciones ilegales y
arbitrarias, torturas, tratos crueles e inhumanos, violaciones y esclavitud sexual,
desplazados, refugiados.
Aquí en Guatemala, la tranquilidad social se alteró por los abusos de todo tipo,
que victimizaron a millones de personas. El esclarecedor y voluminoso informe de
la Comisión de la Verdad (12 tomos), analiza los hechos y a partir de testimonios
desnuda la cruda realidad y el cruel destino de las víctimas de estos abusos. En
esa larga noche de terror y pesadilla fueron miles los agraviados e inmolados,
entre campesinos, obreros, sindicalistas, maestros, intelectuales, artistas,
profesionales, académicos, religiosos, periodistas, políticos y hasta ciudadanos de
otras nacionalidades, padecieron las consecuencias de los intolerantes, represivos
y sanguinarios agentes de las dictaduras militares. Por esas condiciones, la
Organización de las Naciones Unidas ONU, condenó reiteradamente al país y
durante varios años se nombró un Relator Especial quien cada año en la
Asamblea de la antigua Comisión de Derechos Humanos hoy Consejo, presentaba
un informe detallado de la situación de DD. HH. en el país y como la situación era
grave, se volvía a nombrar al Relator y a condenar al Estado por su
responsabilidad en las violaciones, los abusos y la impunidad.
A partir de la firma del Acuerdo de Paz que este diciembre cumple 20 años, la
población confió en la oportunidad y posibilidad de iniciar un cambio que
permitiera alcanzar, por fin, el respeto pleno de los DD. HH. y en consecuencia el
bienestar común, pero tal situación no existe, por el contrario, ni bienestar común
ni respeto a los DD. HH. En Guatemala se continúan violando y el Poder Público
sigue abusando de la fuerza y la autoridad, para intimidar y reprimir a la población,
ahora de formas más sutiles, criminalizando las luchas y reivindicaciones sociales,
judicializando a los dirigentes comunitarios, intimidando y reprimiendo a
periodistas, sindicalistas y defensores de Derechos Humanos.

La constitución política de la republica de Guatemala 1985 y los derechos


humanos:
1985: Se proclama la Constitución Política de la República
El 31 de mayo de cada año en Guatemala se conmemora el "Día de la
Constitución Política de la República", según decreto 2-86 de la Asamblea
Nacional Constituyente. En este día de 1985 se proclamó la actual Carta
Magna. Mediante la constitución se están determinados los derechos y deberes de
cada habitante del Estado, así como la forma de gobierno y la organización de los
poderes públicos. La Constitución también es denomina Carta Magna o ley de
leyes, y fue creada el 31 de mayo de 1985, mediante el decreto 2-86 el cual
señala: Artículo 1°.- Se declara el 31 de mayo de cada año como “Día de la
Constitución”.
La Constitución de Guatemala (nombre oficial: Constitución Política de la
República de Guatemala) es la norma fundamental de la República de Guatemala.
Fue promulgada por la Asamblea Nacional Constituyente el 31 de mayo de 1985,
entrando en vigor el 14 de enero de 1986. La Constitución guatemalteca establece
la estructura y organización jurídico-política de la República de Guatemala, así
como las normas relativas a los deberes ciudadanos y los derechos
fundamentales. La constitución vigente fue reformada en 1993 tras el
derrocamiento del entonces presidente de la república Jorge Antonio Serrano
Elías.
Título I. La persona humana, fines y deberes del Estado
o Capítulo único
o Título II. Derechos humanos
Se puede encontrar los derechos humanos de las personas y garantiza su
protección de los mismos.
Los derechos individuales: son aquellos derechos de los que gozan los individuos
como particulares y que no pueden ser restringidos por los gobernantes, siendo
por tanto inalienables, inmanentes e imprescriptibles.
En la clasificación de los derechos humanos en tres generaciones, estos derechos
aparecen repartidos entre los de primera y los de segunda generación. Los
podemos encontrar del artículo 3 al 46.
Los derechos sociales: son aquellos derechos que facilitan a los ciudadanos o
habitantes de un país a desarrollarse en autonomía, igualdad y libertad así como
aquellos derechos que les permiten unas condiciones económicas y de acceso a
bienes necesarios para una vida digna los derechos sociales los encontramos del
artículo 47 al 56.
Poder Público
Es la capacidad que tiene el estado para obligar a alguien a realizar un acto
determinado.
El poder público es necesario para el funcionamiento de grupos sociales que
confluyen en un espacio físico cualquiera. Se requiere de un orden y del
establecimiento de reglas que permitan la convivencia humana, la cual se traduce
en el ejercicio del poder.
En toda sociedad se conforman grupos que, de una u otra manera crean un centro
de poder que irradia su acción en diversas direcciones como: religión, economía,
cultura, incluso la moda. La sociedad es una verdadera “constelación de poderes”.
Pero esa cantidad de poderes se concentra en una unidad organizada y permite el
armónico desenvolvimiento de los distintos estratos de la sociedad, lo que
conduce a la integración del poder político.
El poder nace como una necesidad de asegurar la convivencia humana, por lo
tanto, si no hay orden y autoridad, se destruye la posibilidad de convivir y de
interactuar en una sociedad capaz de alcanzar la categoría de Estado.
En general, poder público (aunque se suele usar en plural: "poderes públicos")
significa conjunto de órganos e instituciones del Estado. Estas instituciones se
agrupan en torno a tres diferentes poderes: poder legislativo, ejecutivo y judicial.
Es el título del Artículo 152 de la Constitución Política de Guatemala, que indica
que el poder proviene del pueblo. Su ejercicio está sujeto a las limitaciones
señaladas por la Constitución y la ley. Ninguna persona, sector del pueblo, fuerza
armada o política, puede arrogarse su ejercicio (Constitución Política de la
República de Guatemala, s.f.).
El Poder Público se encuentra detallado en el Artículo 152 de la Constitución
Política de Guatemala (Constitución Política de la República de Guatemala.
Separación del poder público:
Se denomina organismo legislativo a una de las tres facultades y funciones
primordiales del estado (junto con el poder ejecutivo y el judicial), que consiste en
la aprobación de normas con rango de ley. Es una de las tres ramas en que
tradicionalmente se divide el poder de un Estado.

En una democracia, el poder legislativo elabora y modifica las leyes existentes de


acuerdo con la opinión de los ciudadanos. Su función específica es la aprobación
de las leyes y, generalmente, está a cargo de un cuerpo deliberativo (congreso,
parlamento o asamblea de representantes).
El organismo ejecutivo es una de las tres facultades y funciones primordiales del
Estado (junto con la legislativa y la judicial) consiste en dictar y hacer cumplir las
leyes que suele aprobar el gobierno o el propio jefe del Estado.

En la ciencia política y el derecho constitucional, el ejecutivo es la rama de


gobierno responsable de la gestión diaria del Estado. En muchos países, se utiliza
la palabra gobierno para referirse al poder ejecutivo, pero este uso puede resultar
confuso en un contexto internacional.

Según la doctrina de la separación de poderes, redactar las leyes es tarea del


poder legislativo, interpretarlas y normatizarlas es tarea del poder ejecutivo, y
hacerlas cumplir es tarea del poder judicial. En la práctica, sin embargo, esta
separación no suele ser absoluta. El jefe de gobierno es la figura visible y de
mayor peso del poder ejecutivo.

El organismo Judicial es aquel poder del Estado que, de conformidad al


ordenamiento jurídico, es el encargado de administrar justicia en la sociedad,
mediante la aplicación de las normas jurídicas, en la resolución de conflictos. Por
"Poder", en el sentido de poder público, se entiende a la organización, institución o
conjunto de órganos del Estado, que en el caso del Poder Judicial son los órganos
judiciales o jurisdiccionales: juzgados y tribunales, que ejercen la
potestad jurisdiccional, que suele gozar de imparcialidad y autonomía.
.El poder público constituye una capacidad jurídica legítima que poseen los tres
poderes políticos del Estado para ejercer en forma eficaz, mediante la coactividad,
las acciones y los cometidos que les son conferidos por la Constitución o Ley
fundamental de un Estado.
Controles intraórgano y controles interróganos
Un importante aporte a la teoría del control constitucional se debe a Karl
Loewenstein. El afirma que las técnicas del control son estructuralmente, de dos
tipos:
a) Cuando las instituciones de control operan dentro de la organización de un solo
titular del poder, son designados como controles intraórgano. Como se sabe "intra"
es una voz latina que significa interioridad. Su sentido lo entendemos claramente
cuando usamos el prefijo en vocablos tales como " intramuros" o "intramuscular".
A este tipo de controles se les llama también controles en los órganos o controles
internos.
b) Cuando las instituciones de control funcionan entre diversos titulares del poder
que cooperan en la gestión estatal, se les designa controles Interorgánicos. A ellos
se les denomina también controles entre los órganos o controles externos.
Ejemplos De Controles Intraórgano
Los controles que se dan al interior de un órgano determinado varían de
Constitución a Constitución y de país a país. Su enumeración exhaustiva es más
propia de la ciencia del Derecho Constitucional comparado que de un manual de
derecho constitucional salvadoreño, por ello nos centraremos, principalmente en
los controles propios de nuestra constitución, sin que ello implique que no
hagamos alusión a instituciones importantes incorporadas en otras cartas
fundamentales.
A. Del Órgano Legislativo
B. 1. El bicameralismo. La existencia de dos Cámaras en un mismo órgano
Legislativo es un control muy usado y puede funcionar tanto para un control
en cierta medida aristocrático sobre el estamento democrático, como
ocurría en el parlamento Ingles, compuesto de la Cámara Alta o de los
Lores y de la Cámara Baja o de los Comunes integrada por representantes
del pueblo a través de los partidos políticos; como para controlar los
intereses de los estados miembros en un Estado Federal, representados en
el senado en relación a los intereses populares representados en la
Cámara de representantes. Este sistema se usa en los Estados Federales y
en el gobierno Federal.
2. La representación proporcional. Posiblemente el principal control dentro
de un Estado unitario, como el nuestro. Este permite que casi todos los
partidos contendientes en una justa electoral estén representados en la
Asamblea Legislativa. Sólo no lo están los que obtienen escasos números
de votos en la elección.
Como se supone que los partidos representan sectores de pensamiento y
de interés de la ciudadanía, esto permite tres cosas:
a) Que sea necesaria para toda clase de resolución la concurrencia o el
acuerdo político de diferentes sectores cuando ninguno de ellos tiene la
mayoría necesaria.
b) Que aun teniendo un partido mayoría simple para los acuerdos
ordinarios, sea necesaria la negación política con partidos minoritarios,
cuando no tengan el primero los números suficientes para aprobar
acuerdos que necesitan mayoría calificada.
c) Que aun cuando un partido tenga votos suficientes, tanto para los casos
de mayoría simple como para los de calificada, el parlamento sirva
como foro de discusión y caja de resonancia de las diferentes opiniones
políticas, sociales y económicas que se vierten sobre los diferentes temas
que informan los proyectos de ley.
3. El régimen de los quórum, que en su forma más atenuada exige que
haya un número determinado y mínimo de diputados presentes para que un
asunto se pueda tratar; y en la versión más eficaz de esta técnica establece
el régimen de la mayoría simple y de las mayorías calificadas, que requiere
en el primer caso la mitad más uno de los diputados electos y en los
segundos, los dos tercios de los mismos, o bien las tres cuartas partes de
los votos de los diputados electos, dependiendo de la trascendencia que a
juicio del constituyente revista la materia de que se trate (Art. 123 Cn).
4. El régimen de debates. Una adecuada reglamentación de los debates
permite que los diputados expresen no sólo los puntos de vista de los
sectores cuyos intereses representan, sino que además permite la
ponderación y la reflexión sobre si un proyecto de ley puede llegar o no a
afectar las disposiciones constitucionales, caso de ser aprobado.
5. El examen de las credenciales de sus miembros a efecto de aceptarlas o
no (Art. 131, 1ª. Parte del ordinal 2do. Cn).
6. La deducción de responsabilidades a sus miembros en los casos
previstos por la Constitución. (Art. 131, 2ª. Parte del ordinal 2do. Cn.)
7. La firma por la mayoría de los miembros de la Junta Directiva de todo
proyecto de ley antes de ser enviado a la consideración del órgano
Ejecutivo. (Art. 134 Cn.)
1. La división del órgano Ejecutivo en el consejo de Ministros, en la Presidencia de
la República y en los Ministerios.
2. La división de los negocios públicos entre diferentes Secretarías de Estado y la
necesidad de que los decretos, acuerdos, órdenes y providencias del Presidente
de la República sean refrendados y comunicados por los Ministros en sus
respectivos ramos o por los Viceministros, en su caso, y que sin estos requisitos
no tendría autenticidad legal Arts. 159 y 163
3. La responsabilidad solidaria, que según el Art. 171 asumen el Presidente de la
República, el Vicepresidente de la República, los Ministros y los Viceministros de
Estado, por los actos que autoricen.
En los casos de Consejo de Ministros, los Ministros o quienes hagan sus veces,
serán responsables con sólo haber estado presentes, aun cuando salven su voto,
si no renuncian inmediatamente después de adoptada la resolución.
C. Del Organo Ejecutivo
D. Del Organo Judicial
1. En virtud del principio de independencia funcional, los magistrados y jueces no
están sujetos a ningún control de sus superiores jerárquicos en lo que se refiere a
la forma en que deben fallar los procesos sometidos a su conocimiento; lo están
solamente a la Constitución y a las Leyes, Art. 172 inciso último Cn.
Pero, sus fallos están sujetos a ser controlados por el tribunal inmediato superior,
por medio del sistema de recursos o medios impugnativos y únicamente a través
de tal sistema. Pero en ningún momento el tribunal superior puede avocarse a una
causa pendiente, Art. 17 Cn
2. Respecto a sus deberes administrativos, los magistrados y jueces sí están
sujetos a controles, los cuales se encuentran establecidos en la Ley Orgánica
Judicial, prevista en el inciso 2do. del Art. 172 Cn. Y son ejercidos por la Corte
Suprema de Justicia, de conformidad a la atribución 5ta. Del Art. 182 Cn., que le
obliga a "vigilar que se administre pronta y cumplida justicia, para lo cual adoptará
las medidas que estime necesarias".
3. La Corte Suprema nombra a los Magistrados de las Cámaras de segunda
Instancia, a los jueces de Primera Instancia y a los jueces de Paz de las ternas
que proponga el Concejo Nacional de la Judicatura; a los Médicos Forenses y a
los empleados de las dependencias de la misma Corte, pudiendo removerlos,
conocer de sus renuncias y concederles licencias (Art. 182 atribución 9ª. Cn), todo
lo cual de alguna manera implica un control.
CH. De los órganos independientes
También existen controles intraórgano, en los órganos independientes, como son:
 La Corte de Cuentas de la República,
 El Tribunal Supremo Electoral,
 El Ministerio Público.
Los cuales están establecidos en las leyes secundarias respectivas.
A. De Los Municipios
Los municipios, que son gobiernos locales, con autonomía económica, técnica y
administrativa, tienen también controles dentro de sí mismo, derivados de la
existencia de dos autoridades diferentes: El Alcalde y el concejo. Las decisiones
más importantes están reservadas a este último, así como el conocimiento en
segunda instancia de las decisiones del primero, todo lo cual está regulado
el Código Municipal, cuya emisión fue ordenada por la propia Constitución.
Ejemplos de controles inter-órganos.
Loewenstein ha dicho que "el concepto de controles Inter-órganos queda aclarado,
sin ninguna dificultad, si se tiene presente la estructura de la actual organización
política de la sociedad estatal. El proceso de poder consiste en el interjuego de los
cuatro detentadores que participan por igual en él:
 Electorado,
 Parlamento (entre nosotros Órgano Legislativo),
 Gobierno (entre nosotros Órgano Ejecutivo) y
 Tribunales (es decir órgano judicial).
Mientras que el electorado es el factor legitimador de todos los otros detentadores
del poder, el parlamento, el gobierno y los tribunales están fundamentalmente
equiparados.
Régimen político electoral:
Régimen político electoral guatemalteco Régimen político electoral es el método a
través del cual se convierten los votos de los electores en cargos de elección
popular. Podemos explicar el régimen político electoral guatemalteco tomando en
consideración lo expuesto por los escritores constitucionalistas Pereira y Richter,
quienes identifican a los sistemas electorales que se aplican en nuestro país de la
siguiente manera “dentro de los sistemas electorales encontramos el sistema
mayoritario y el de representación proporcional, así como una mezcla de ambos.
El sufragio en Guatemala
La primera regulación, en materia electoral en Guatemala se dio en 1981 con la
Ley Reglamentaria de Elecciones, contenida en el Decreto Gubernativo número
403, la que abordó los primeros actos electorales, mismos que conocían las
autoridades municipales encargadas de la votación, luego fue objeto de reformas y
posteriormente fue sustituido por la Ley Electoral normada en el Decreto número
1738 de la Asamblea Nacional Legislativa, durante la gestión gubernativa del
General Jorge Ubico; de esa época hasta ahora, son varios los Decretos que
anteceden a la Ley Electoral y de Partidos Políticos, Decreto-Ley número 1-85 la
cual está vigente desde el catorce de enero de 1986 y que regula todo lo
concerniente al ejercicio de los derechos políticos de los ciudadanos, los derechos
y obligaciones de las organizaciones políticas y órganos electorales, así como
todo lo relativo al proceso electoral.
El sufragio es la voz de todo ciudadano guatemalteco, cuyo ejercicio constituye la
oportunidad de ser escuchado, mediante la emisión del voto en las urnas
electorales el cual es secreto, único, personal e indelegable, de conformidad con
el artículo 12 de la Ley Electoral y de Partidos Políticos; exceptuando, obviamente,
los guatemaltecos que se encuentren en servicio activo en el Ejército Nacional o
en los cuerpos policiacos, así como aquellos que hayan sido nombrados en
cualquier comisión o trabajo de índole militar, los guatemaltecos que se
encuentren suspendidos en el ejercicio de sus derechos ciudadanos y los que por
alguna razón hayan perdido la ciudadanía (artículo 15 de la citada ley).
La Convención Americana de Derechos Humanos (Pacto de San José de Costa
Rica) en el artículo 23 literal b) establece que el sufragio es un derecho y una
oportunidad que deben gozar los ciudadanos, garantizando la libre expresión de la
voluntad de los electores; por su parte la Constitución Política de la República de
Guatemala, en el artículo 136 literal c) indica que es un derecho y un deber
político de todos los mayores de 18 años de edad, debidamente empadronados,
elegir y ser electo, en concordancia con el artículo 3 de la Ley Electoral y de
Partidos Políticos.
Corte de Constitucionalidad
También conocida como CC– es un tribunal permanente de jurisdicción privativa,
cuya función esencial es la defensa del orden constitucional en Guatemala. Actúa
como tribunal colegiado con independencia de los demás organismos del Estado y
ejerce funciones específicas que le asignan la Constitución de la República de
Guatemala y la ley de la materia –Artículo 268 de la Constitución Política de la
República de Guatemala– (Diccionario Municipal de Guatemala, 2009).
La Corte de Constitucionalidad fue creada por la Asamblea Nacional Constituyente
de 1985, e incorporada en la Constitución Política de la República de Guatemala
que se promulgó el 31 de mayo del mismo año. Se constituye con cinco
magistrados titulares, cada uno con su respectivo suplente, por un período de
cinco años (Diccionario Histórico Biográfico de Guatemala, 2004)
Guatemala, 2009).
La Corte de Constitucionalidad fue creada por la Asamblea Nacional Constituyente
de 1985, e incorporada en la Constitución Política de la República de Guatemala
que se promulgó el 31 de mayo del mismo año. Se constituye con cinco
magistrados titulares, cada uno con su respectivo suplente, por un período de
cinco años (Diccionario Histórico Biográfico de Guatemala, 2004).

Misión:
La Corte de Constitucionalidad, como tribunal permanente e independiente, ejerce
las funciones esenciales de defensa y restablecimiento del orden constitucional y
del estado constitucional de derecho. Derivado de esas funciones, que cumple
jurisdiccionalmente, controla los actos del poder público y otros que, emanados de
personas del ámbito del derecho privado, poseen la característica de autoridad.
Para ello interpreta y aplica la normativa que concierne a las garantías
constitucionales, protegiendo valores, principios, libertades y derechos
establecidos en la Constitución Política de la República de Guatemala, en diversos
tratados y convenios internacionales y otras leyes (Corte de Constitucionalidad,
s.f.).
Funciones:
Entre sus funciones se encuentran (Diccionario Municipal de Guatemala, 2009):
– Conocer en única instancia de las impugnaciones interpuestas contra leyes o
disposiciones de carácter general, objetadas parcial o totalmente de
inconstitucionalidad.
– Conocer en única instancia, en calidad de tribunal Extraordinario de Amparo, en
las acciones de amparo en contra del Congreso de la República, la Corte Suprema
de Justicia y el Vicepresidente de la República.
– Conocer en apelación todos los amparos interpuestos ante cualquiera de los
tribunales de justicia.
– Emitir opinion sobre la inconstitucionalidad de los tratados, convenios y
proyectos de ley, a solicitud de cualquier de los organismos del Estado –Artículo
272 de la Constitución Política de la República-.
Integración de la Corte de Constitucionalidad
La Corte de Constitucionalidad se integra con cinco magistrados titulares, cada
uno de los cuales tendrá su respectivo suplente. Cuando conozca de asuntos de
inconstitucionalidad en contra de la Corte Suprema de Justicia, el Congreso de la
República, el Presidente o el Vicepresidente de la República, el número de
integrantes se elevará a siete, escogiéndose los otros dos magistrados por sorteo
de entre los suplentes (Corte de Constitucionalidad, s.f.).
Los magistrados durarán cinco años en sus funciones y serán designados en la
siguiente forma (Corte de Constitucionalidad, s.f.):
– Un magistrado por el pleno de la Corte Suprema de Justicia.
– Un magistrado por el pleno del Congreso de la República.
– Un magistrado por el Presidente de la República de Guatemala en Consejo de
Ministros.
– Un magistrado por el Consejo Superior Universitario de la Universidad de San
Carlos de Guatemala.
– Un magistrado por la Asamblea del Colegio de Abogados.
Simultáneamente con la designación del titular, se hará la del respectivo suplente,
ante el Congreso de la República de Guatemala.
Presidencia de la Corte de Constitucionalidad
La Presidencia de la Corte de Constitucionalidad será desempeñada por los
mismos magistrados titulares que la integran, en forma rotativa, en período de un
año, comenzando por el de mayor edad y siguiendo en orden descendente de
edades (Corte de Constitucionalidad, s.f.).
Corte de Constitucionalidad actual y en la historia
La Corte de Constitucionalidad en vigencia tomó posesión el 14 de abril de 2011 y
cumplirá su mandato hasta el 14 de abril de 2016. Está conformada por Alejandro
Maldonado Aguirre, Mauro Chacón Corado, Héctor Hugo Pérez Aguilera, Roberto
Molina Barreto y Gloria Patricia Porras Escobar como magistrados titulares. Los
magistrados suplentes son María de los Ángeles Araujo Bohr, Juan Carlos Medina
Salas, Ricardo Antonio Alvarado Sandoval, Carmen María Gutiérrez Sole y Héctor
Efraín Trujillo Aldana.

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