MEDITACIÓN de RELAJACIÓN y ENRAIZAMIENTO

DIAPO 1- RELAJACIÓN

Siéntate en un lugar tranquilo, mejor en una silla que tumbado.

Ahora, vas a tensar fuertemente tus músculos. Aprieta los puños, los dientes, contrae los muslos, los pies, así,
tensa, tensa, tensa.... y suelta!
Otra vez. Tensa, tensa, tensa…. ¡Y suelta!
¡Muy bien!
Ahora, colócate en la silla con la espalda recta, sin forzar. Apoya los 2 pies en el suelo, sin cruzar las piernas, y deja
reposar tus manos sobre el regazo o los muslos. Como te sientas más cómodo.
Ahora, dirige tu atención a la respiración. Coloca una mano sobre tu vientre, aspira todo lo que puedas, y observa
cómo al entrar el aire, sube tu abdomen y levanta tu mano. Observa como sube y desciende tu mano con cada
respiración.
Vuelve a poner la mano sobre las piernas, tranquilo. Vas a respirar profundamente, soltando el aire con cada
respiración. No hay ninguna prisa
Aspira…. Espira, … Aspira…. Espira, …. Aspira… Espira.
Y ahora, cierra los ojos suavemente. Nota tu cuerpo sobre la silla, relajado, en el espacio donde está ahora.
Dirige por favor tu atención a los pies, las piernas…. Hombros, cuero cabelludo, frente, mandíbula, más y más
relajado.
Muy bien.

DIAPO 2- ENRAIZAR
Imagina ahora un como si tu fueras un árbol, Enfoca ahora tu atención a tus pies, tocando firmemente sobre el
suelo
De la planta de los pies, empiezan a crecer raíces, van creciendo y van hundiéndose más y más profundamente
dentro de la tierra, más … más… hasta alcanzar el centro de la tierra.
Desde esas raíces profundas y fuertes sientes como desde la tierra entra su energía y te alimenta, te da soporte, te
nutre amorosa. Sube por las piernas hacia tu abdomen.

Imagina ahora que tienes un imán dentro de la cabeza, detrás de los ojos, es un imán muy potente y está atrayendo
toda la energía que tienes puesta en preocupaciones, pensamientos, recuerdos, asuntos pendientes, y los está
atrayendo aquí, ahora, a este momento. Imagina como todas esas cargas entran y van bajando hacia las raíces,
cómo descienden y desaparecen en el centro de la tierra. Permite que abandonen tu cuerpo, que se libere hacia la
tierra a través de tus raíces.

Vas sintiendo como te vas liberando de esas cargas y te sientes más y más ligero, más y más relajado.

Muy bien

DIAPO 3- CONEXIÓN
Ahora vas a usar tu imaginación y sentir como un sol luminoso está sobre ti, es brillante y dorado.
Te das cuenta como del sol salen haces luminosos, limpios y vibrantes, que entran por la copa del árbol. Sientes
como si fueran entrando suavemente por la parte superior de tu cabeza, por tu coronilla.

DIAPO 4- CIRCUITO
Esa luz brillante va bajando por tu interior, como si fuera una columna de luz que fuera iluminando y soltando y
liberando las tensiones, los bloqueos que va encontrando mientras desciende suavemente por tu interior
Sientes como limpia y se lleva consigo la oscuridad, todo aquello que no está bien, va bajando y te sientes limpio,
ligero. Observas tu columna vertebral, tus órganos internos llenos de esa luz. Es una sensación muy agradable.
Muy bien
Permites que suceda, todo está bien
Todo sucede de forma natural, sin prisa
La luz se encuentra con la energía de las raíces y se funden, se entremezclan y alcanzan todos los rincones de tu
cuerpo que se siente más y más resistente y sano.
Ahora, a tu ritmo, recorre mentalmente tu cuerpo de arriba abajo. Poco a poco. Presta atención si quizás, sientes o
notas algún lugar en tu cuerpo con más tensión, más denso, distinto… Si lo notas, enfoca ahí esa energía mientras
observas, sin juicio, sin valorar lo que sucede, permites que esa energía vaya disolviéndolo, haciéndolo
desaparecer.

Tómate tu tiempo, no hay prisa. ¿Algún sitio más?

Repite tantas veces como sientas que es necesario

DIAPO 9- AGRADECIMIENTO
Ahora, puedes dirigir tu atención al corazón, lleva tus manos sobre él y sonríele, como lo harías a tu mejor amigo,
con amabilidad y cariño. Con ternura y compasión.
Muy bien
Siente tu corazón. Siente como late sereno, tranquilo.
Puede que sientas calor, o una cierta vibración, o cosquilleo, lo que sientas está bien.

Ahora respira profundamente.

Ve volviendo poco a poco aquí, a esta habitación

Ve tomando conciencia poco a poco de tu cuerpo, tus pies, tus piernas, las manos, los brazos, respira y, cuando te
sientas listo, ve abriendo los ojos.

¿Qué tal estás?

¿Bien?

Puedes repetir esta meditación tantas veces como necesites

Qué tengas un hermoso día