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Anuario de Psicología Jurídica, Volumen 17, año 2007. Págs. 165-178.

ISSN: 1133-0740

ESTUDIOS

DETECCIÓN Y VALORACIÓN PERICIAL DE LA


SIMULACIÓN O PRODUCCIÓN INTENCIONADA
DE SÍNTOMAS, EN UN CASO PRÁCTICO DE
MOBBING
DETECTION AND EXPERT EVALUATION OF
THE SIMULATION OR PURPOSEFUL
PRODUCTION OF SYMPTOMS IN A MOBBING
CASE

M.ª Paz Ruiz Tejedor*


Fecha de Recepción: 12-12-2007 Fecha de Aceptación: 08-02-2008

RESUMEN

La producción intencionada de síntomas o de trastornos mentales por conseguir una


ganancia secundaria, es un fenómeno frecuente en el ámbito judicial, tanto por parte
de los imputados como de las víctimas.
En el caso de las víctimas, la valoración pericial del daño psíquico constituye una
tarea difícil y controvertida, no sólo por la falta de delimitación y la confusión en el uso
de los términos psicojurídicos (daño psíquico, sufrimiento psíquico, lesión psíquica,
menoscabo en la salud psíquica, padecimiento psíquico, daño moral...) sino porque la
formulación subjetiva de los síntomas por parte de las víctimas, facilita una posible
simulación o sobresimulación.
Ilustrar la tarea de detección y evaluación pericial de este fenómeno, a través de un
caso práctico de mobbing, es el objetivo que persigue este artículo.

* Psicóloga forense de la Clínica Médico-Forense de los Juzgados de Plaza Castilla de Madrid.

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Detección y valoración pericial de la simulación o producción intencionada de síntomas, en un caso práctico...

PALABRAS CLAVE: Simulación, Daño psíquico, Mobbing, Valoración pericial.

ABSTRACT

The purposeful production of symptoms or mental disorders to obtain a secondary


benefit is a frequent phenomenon in the judicial area, both on the part of the accused
and of the victims.
In the case of victims, the expert assessment of psychic damages is a difficult and
controversial task, not only because of the absence of delimitation and the confusion
in the use of psycho-judicial terms (psychic damages, psychic suffering, psychic injury,
deterioration of psychic health, psychic disorder, moral damages… etc.) but because
the subjective formulation of the symptoms makes simulation or oversimulation easy.
This article is aimed at illustrating, with a mobbing case, the task of detecting and
performing an expert evaluation of this phenomenon.

KEY WORDS: Simulation, Psychic damages, Mobbing, Expert assessment.

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M.ª P. Ruiz

INTRODUCCIÓN próximo de ésta (recuerdo víctimas que


referían lo atento que era el acosador
Mobbing y valoración del daño ofreciéndole regalos para sus hijos
psíquico menores, o ayudándoles de forma solíci-
ta cuando llegaban a su nuevo puesto
El mobbing (termino acuñado del de trabajo). Desde un punto de vista psi-
inglés “to mob”: atacar con violencia) codinámico podríamos hablar de una
también llamado acoso psicológico en el “estrategia de tela de araña”, que el
trabajo, es definido como una forma de acosador utiliza para atrapar a su presa.
persecución u hostigamiento psicológico
que un empleado sufre en su lugar de Una segunda fase llamada de con-
trabajo y que, según refieren López y flicto, que se produce cuando la víctima
Vázquez (2003) se ejerce de forma no quiere plegarse a los deseos del aco-
intencionada y reiterativa. sador. Lo cual desata la violencia del
aquel que avanza en escala ascendente
En las organizaciones laborales resul- hasta lograr mermarla y desestabilizarla
ta fácil detectar roces, conflictos, antipa- psicológicamente, instaurándose en ese
tías, discrepancias e incluso desencuen- momento la tercera fase, de acoso
tros o discusiones, pero el mobbing es laboral propiamente dicho. La expre-
algo bien distinto. No se trata de un sión violenta se ejerce de forma sutil a
conflicto entre personas, sino de un pro- través de distintos comportamientos:
ceso de destrucción, o lo que es lo acciones contra la reputación o la digni-
mismo, de una severa forma de maltra- dad personal del acosado, contra el ejer-
to. En el cual, la instrumentalización de cicio o el desarrollo de su trabajo, pri-
actitudes y conductas hostiles, que vándole de la comunicación o de infor-
tomadas de forma aislada podrían pare- mación relevante dentro de la empresa,
cer anodinas o irrelevantes, de forma sometiéndole a situaciones de discrimi-
reiterada y repetida llegan a producir nación o inequidad…
efectos devastadores sobre el estatus
mental de la persona acosada. Sin embargo, el detonante o la moti-
vación latente no es, desde mi punto de
Desde una perspectiva forense pode- vista, lograr un objetivo concreto (excluir
mos diferenciar varias fases: o lograr la expulsión de la víctima), como
postula Morán Astorga (2002)”con el
La primera en el proceso es la de objetivo de que abandone la organiza-
seducción (aunque no todos los autores ción”, sino la disposición perversa que
contemplan su existencia). En esta fase, subyace en el acosador, y que atendien-
la persona acosadora intenta proyectar do al profesor Piñuel (2001) “le empuja
una imagen positiva o atrayente, pero a satisfacer la necesidad insaciable de
aún no ha manifestado su potencial vio- agredir, controlar y dominar”.
lento. Normalmente, la seducción va
dirigida a la víctima, pero en muchas En este sentido, coincido totalmente
ocasiones se hace extensiva al entorno con la definición del “perverso narcisista”

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acuñada por la psiquiatra francesa Hirigo- última fase sería de externalización o


yen (1999) “aquel que bajo la influencia eclosión del problema, que suele con-
de su grandioso yo, intenta crear un vín- dicionar con el paso del tiempo, la inter-
culo de dependencia con el otro, atacan- posición de la correspondiente denun-
do su integridad y dignidad personal”. cia.

Desde mi perspectiva, el origen del Generalmente, la eclosión se produce


proceso acosador no estaría tanto, en cuando el sufrimiento psicológico de la
un conflicto no resuelto o resuelto de víctima cristaliza en síntomas clínicos,
forma inadecuada como defiende Ley- (aparecen crisis de ansiedad, agotamien-
man(1996), sino en los rasgos de perso- to físico y mental, irritabilidad, labilidad
nalidad psicopáticos del acosador. emocional con frecuentes eclosiones de
llanto, dificultades de concentración...)
La reacción o la respuesta de la vícti- que interfieren de forma significativa en
ma en los primeros momentos de ata- los niveles de adaptación, tanto en el
que y hostigamiento, serán determinan- ámbito personal o psicológico, como en
tes en la evolución del problema. el socio-familiar y por supuesto en el
laboral. Según Piñuel (2007) a partir del
Tres son las reacciones más frecuen- sexto mes, suelen comenzar a aparecer,
tes: aquellas que tienden a negar la rea- los primeros síntomas, frecuentemente
lidad de la situación que están viviendo de tipo ansioso.
(“no me daba cuenta de lo que me esta-
ba haciendo, no quería darlo importan- Los cuadros psicopatológicos más fre-
cia, pensaba que quizás era yo que esta- cuentes incluyen trastornos de ansiedad
ba muy susceptible…), las que se auto- (sobre todo el trastorno por estrés pos-
culpabilizan de la conducta que exhibe traumático y trastorno por estrés
el acosador (“soy yo que no sé hacer las agudo). Los trastornos adaptativos mix-
cosas, no doy la talla, no sirvo para tos ansioso depresivos y la descompen-
esto…”) y las que por el contrario, sación psíquica de las personalidades
adoptan una actitud de lucha en solita- con rasgos premórbidos.
rio para demostrarse que son capaces
de resolver el problema (“voy a solucio- En uno de los casos más extremos
nar el problema sin que nadie interven- que tuve ocasión de peritar, la víctima,
ga, me valgo y me sobro para poner fin una mujer de unos 30, denunció la
a esta situación..”). situación de acoso laboral después de
caer en un proceso depresivo severo,
Este tipo de reacciones y la actitud de que le llevó a abandonar su puesto de
pasividad que suelen adoptar los com- trabajo, romper la relación con su mari-
pañeros, permitirán que el acosador do y perder temporalmente la custodia
continúe con la estrategia de desgaste y de su hijo.
menoscabo de su presa.
Desde que H. Leyman definiera este
Desde una perspectiva forense, la fenómeno en torno a la década de los

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80, se han incrementado en número de co” es menos difusa y contempla varios


víctimas, paralelamente la judicialización criterios diagnósticos:
de los casos y por ende, la demanda de
intervención pericial. • La existencia de un síndrome psico-
patológico concreto, es decir los
Nuestra función como peritos se cen- síntomas que presente el paciente
trará fundamentalmente en determinar deben encajar en un cuadro o sín-
la existencia de daño moral y/o daño drome clínico concreto.
psíquico. Ambos conceptos implican
una afectación psíquica en respuesta a • El menoscabo psíquico producido
un acontecimiento desencadenante por efecto de la situación denuncia-
identificable (acoso laboral), donde exis- da, se traduce en una alteración
te un responsable legal y que puede ser mental nueva o novedosa en la bio-
susceptible de indemnización. grafía del sujeto, en ocasiones por
descompensación de los rasgos psi-
Sin embargo, existen grandes dificul- copatológicos premórbidos o en un
tades a la hora de delimitar o definir agravamiento de una enfermedad
éstos términos. De forma genérica y, anterior.
atendiendo a De la Torre (2004), el daño
psíquico se produce a nivel inconsciente, • La enfermedad psíquica que se
por el contrario el “daño moral” hace diagnostique debe tener una rela-
referencia a una actitud consciente e ción de causalidad con la situación
implica una estimación objetiva en denunciada (en nuestro caso acoso
forma de perjuicio, evaluable a través de laboral). El nexo puede ser directo
síntomas que no conforman una enti- (causa el trastorno), o indirecto
dad patológica significativa. Es decir, (actúa como concausa que acelera,
requiere una entidad diferente de la agrava o desencadena una patolo-
molestia común que debe exceder de gía premórbida).
las incomodidades de la vida diaria.
Podemos por tanto, definir el daño
Como ejemplo de reconocimiento psíquico de la siguiente forma: síndrome
judicial del daño moral en casos de o cuadro psicopatológico concreto y
mobbing el citado autor nos remite a la coherente, novedoso en la anamnesis
Sentencia de 1 de mayo de 2002 del del sujeto y originado por la situación
Juzgado de lo Social nº 1 de Bilbao: “..la denunciada, que ha ocasionado una dis-
relación causal entre el daño producido minución de las capacidades psíquicas
y la actividad empresarial han causado previas.
un sufrimiento de los bienes inmateria-
les (dolor espiritual, quebranto de la Cuando el término daño psíquico
salud) tienen la verdadera nomenclatura alude a lesión o secuela, incluye el cri-
de daño moral..”. terio de cronicidad. En este caso el tras-
torno o la enfermedad que se diagnosti-
La determinación del “daño psíqui- que debe conllevar una incapacidad irre-

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versible, o al menos estar jurídicamente Con respecto a las víctimas, los tras-
consolidada (que hayan transcurrido tornos adaptativos y los síndromes pos-
unos dos años). traumáticos son sin duda los elegidos.

Según Esbec (2000), comprende la Según el DSM- IV-TR, “la característi-


enfermedad o discapacidad permanen- ca de la simulación es la producción
te, no susceptible de mejoría en un intencionada de síntomas físicos o psi-
periodo de tiempo razonable, ni con tra- copatológicos desproporcionados o fal-
tamiento, ni de forma espontánea. sos, motivados por incentivos externos
como no realizar el servicio militar, evitar
Reflejar por último, que la valora- un trabajo, obtener una compensación
ción pericial del daño psíquico consti- económica, escapar de una condena cri-
tuye una tarea difícil y controvertida, minal u obtener drogas”.
no sólo por la falta de delimitación
jurídica y la confusión en el uso de tér- Debe sospecharse simulación si existe
minos (como daño psíquico, sufrimien- alguna de las combinaciones siguientes:
to psíquico, lesión psíquica, menosca-
bo en la salud psíquica, padecimiento — Se inscribe en un contexto medi-
psíquico, daño moral…etc.) sino por- co-legal.
que la formulación subjetiva de los sín-
tomas por parte de las presuntas vícti- — Existe discrepancia entre el estrés
mas, facilita una posible simulación o o la alteración manifestada por la
sobresimulación. Y como postulan persona y los datos objetivos de la
Arce, Fariña y Suárez (2006), la evalua- exploración clínica.
ción clínica tradicional no es productiva
en estos casos. — El sujeto no colabora durante la
valoración diagnóstica y no cum-
ple el régimen de tratamiento
Detección y valoración pericial prescrito.
de la simulación
— El sujeto presenta un trastorno
La producción intencionada de sínto- antisocial de la personalidad.
mas o trastornos mentales por conse-
guir una ganancia secundaria, constitu- Sin embargo diagnosticar una simula-
ye un fenómeno frecuente en el ámbito ción supone un reto para los profesiona-
judicial. les forenses, en tanto no existen signos
patognomónicos que nos permitan
Cuando el objetivo es eludir la res- identificar a la persona simuladora.
ponsabilidad penal (en el caso de los
imputados), suelen simularse cuadros Un bagaje amplio en evaluación psi-
psicóticos, demencias, alteraciones psi- cológica y psicopatológica y seguir unas
coneurológicas, trastornos disociativos e directrices generales para la detección
incluso limitación o retraso intelectual. del engaño pueden facilitar esta tarea.

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Esbec y Gómez-Jarabo(1999) nos pro- medades o padecimientos similares


ponen una metodología a seguir: a los alegados en ese momento por
el paciente. Toda vez que la expe-
• Primero descartar psicopatología riencia anterior puede facilitar una
realizando una anamnesis y una reproducción clínica más ajustada
exploración clínica exhaustivas, apli- de los síntomas.
cando pruebas complementarias
(baterías o test de psicodiagnósti- • Por último, abordar directamente al
co), si fuera necesario. simulador, confrontándole con la
información incongruente e incluso
• Descartar trastornos facticios con abocarle a la confesión o el recono-
síntomas psicológicos. En estos cimiento de su estrategia.
casos, al igual que en la simulación,
existe un fingimiento consciente y Por otra parte, sin pretender aportar
voluntario, pero la motivación no es fórmulas o recetas mágicas, si me gusta-
consciente, ni los beneficios son ría aportar pautas o indicadores, algu-
reconocibles. Lo que activamente nos que nacen de mi experiencia pericial
busca el sujeto es captar la atención y que considero pueden facilitar la tarea
sobre su persona o asumir el rol de de identificación o diagnóstico del simu-
enfermo. La ausencia de un objetivo lador:
externo claramente identificable nos
permitirá realizar el diagnóstico • Frecuentemente las personas simu-
diferencial. ladoras suelen describir alteracio-
nes psicopatológicas inexistentes,
• Detectar factores de riesgo de simu- en tanto no se documentan conve-
lación: nientemente (como luego veremos
en el caso de estudio), o trastornos
— Existencia de incentivo externo. alejados de las características clíni-
cas. Por ejemplo “el asesino del
— Presencia de trastorno antiso- rol” intentaba simular un “trastor-
cial de la personalidad (aunque no de personalidad múltiple” des-
la experiencia pericial nos dice cribiendo la relación y el diálogo
que en realidad no es un ele- entre distintas personalidades,
mento tan discriminante, ignorando que en este trastorno
muchas veces los rasgos his- disociativo una personalidad no
triónicos o el trastorno histrió- tiene conocimiento de la existencia
nico de la personalidad están de las otras.
en la base de este tipo de
actuaciones).
• En esta misma línea, los cuadros psi-
• Rastrear posibilidades de meta- copatológicos suelen ser planos, es
simulación. Es decir, constatar en la decir no evolucionan con el paso
anamnesis antecedentes de enfer- del tiempo e incluso en ocasiones

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empeoran, en vez de evolucionar reconoce que pasa su tiempo resol-


hacia la remisión, sin fundamento viendo sopas de letras.
clínico.
• Resulta conveniente realizar la
• Así mismo, suele resultar delatador exploración en varias sesiones, por-
de una posible simulación, la ausen- que con alta probabilidad el sujeto
cia de representaciones afectivas, o aportará información inconsistente
lo que es lo mismo la falta de reso- y/o modificará el contenido de su
nancia emocional al relatar los fal- discurso al relatar los falsos sínto-
sos padecimientos. También es fre- mas. Síntomas que no se correspon-
cuente la exteriorización de emocio- derán con la impresión y/o observa-
nes fingidas, generalmente en ción clínica.
forma de eclosiones de llanto fácil-
mente controladas. O la sobreactua- • En la línea anterior, también es pro-
ción o dramatización (como le ocu- cedente recabar información de ter-
rre a nuestra paciente). Desde mi ceros (parientes, padres, cónyu-
punto de vista, los simuladores ges… de las presuntas víctimas), al
están haciendo una “puesta en objeto de corroborar la información
escena” y creen que cuanta más proporcionada o por el contrario
afectación psíquica proyecten detectar posibles inconsistencias
mayores posibilidades tienen de ser (como ocurre en el caso de estudio
creídos. al entrevistar al esposo de la infor-
mada).
• Por otra parte, muchos de estos suje-
tos que verbalizan haber tomado • En frecuente que los simuladores
medicación durante largos periodos cedan al sesgo confirmatorio de
de tiempo e incluso aportan fotoco- preguntas periciales sugestivas y/o
pias de las prescripciones médicas, sugerentes de dificultades o altera-
no son capaces de describir física- ciones psicopatológicas.
mente los fármacos o de puntualizar
la dosis diaria a preguntas del perito • En esta misma línea, al aplicar cues-
(como veremos más tarde). tionarios o test de autoinforme,
suelen contestar positivamente a
• Las incongruencias al aportar la ítems que rastrean la presencia de
información sobre los cuadros clíni- síntomas o alteraciones que la per-
cos alegados, son en muchas oca- sona no había comentado con ante-
siones, grotescas y atentan contra la rioridad, en la entrevista de explora-
lógica y las leyes de la naturaleza. ción.
En el caso de estudio la informada
manifiesta que tiene graves proble- • Por otra parte, las pruebas proyecti-
mas perceptivos, incluso llega a ver- vas (como ocurre con la produccio-
balizar que no puede ver, que no nes gráficas de tipo expansivo, en
puede leer, pero en otro momento sujetos que alegan sintomatología

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depresiva) o las psicométricas que simulando, entre otros síntomas,


cuentan con escalas de validación, desorientación en tiempo, lugar y
permiten en ocasiones objetivar la persona y dificultades expresivo-
disposición de la persona a falsear comprensivas, y terminó hablándo-
la realidad. me con fluidez y entusiasmo de la
importante responsabilidad que
• En el abordaje pericial resulta proce- tenía en su trabajo, la cantidad de
dente solicitar explicaciones al infor- dinero que ganaba y el porcentaje
mado sobre el significado de deter- por cada venta que hacía, sus pro-
minados términos o expresiones clí- piedades inmobiliarias y la ubicación
nicas, porque en ocasiones pueden espacial de las mismas.
resultar vacías de contenido. En un
caso extraído de mi práctica foren-
se, una víctima de un accidente de ANALISIS DE UN CASO PRÁCTICO
tráfico que refería depresión, ante
preguntas aclaratorias respondía: Información preliminar
“que me canso mucho, me canso
hasta de hablar”. Nuestra informada es una mujer de
53 años que trabajaba como administra-
• Cuando el cuadro simulado com- tiva en una empresa de construcciones.
porta una alteración psicomotriz, es
aconsejable ampliar el tiempo de El objetivo de la pericial que se nos
exploración, toda vez que, con alta solicita se concreta en lo siguiente:
probabilidad, el sujeto acusará el
cansancio y el síntoma se tornará “Se emita informe sobre el origen
intermitente (recuerdo el caso de un concreto del cuadro clínico que presen-
imputado que simulaba un movi- ta, estado actual, si ha curado la enfer-
miento automático involuntario en medad que padece y si para ello ha
el miembro superior izquierdo y que necesitado tratamiento médico o quirúr-
a lo largo de la hora y media de gico.”
exploración fue variando alternati-
vamente el miembro afectado: pri- Según se desprende del estudio de
mero un brazo, luego el otro, des- autos: la denuncia se interpone por
pués una pierna y luego la otra). acoso laboral contra su jefe inmediato
superior (con el que compartía despa-
• La pericia del profesional forense al cho en horario laboral de 8 a 17 horas).
abordar la exploración y su capaci-
dad para desviar la atención del La formulación de la citada denuncia
simulador de su estrategia o “puesta se realiza en los siguientes términos: “El
en escena”, puede ser la clave para señor X me considera su enemiga y ejer-
desmontar el engaño. Como ejem- cía sobre mí una presión constante, en
plo relataré el caso de un imputado forma de provocaciones, amenazas,
por delito de sangre, que comenzó injurias constantes y en algunas ocasio-

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nes también agresiones… todo ello en miento, ansiedad, llanto incontrola-


el horario laboral. Mostraba una actitud do y pesadillas recurrentes”.
de nula colaboración y de obstaculiza-
ción en el desempeño de mi trabajo, Transcurridos dos meses (uno de baja
dando lugar a numerosos roces e inci- laboral al que se une el de sus vacacio-
dentes. Aprovechaba cuando no había nes estivales), la informada vuelve a su
testigos, para insultarme, amenazarme e puesto anterior “trabajando a plena
incluso agredirme, llegando en una oca- satisfacción”, hasta que tras reincorpo-
sión, tras una disputa laboral a agarrar- rarse el acusado, es trasladada de nuevo
me por el cuello y decirme: la próxima a la “choza”. Esta situación condiciona
vez te mato”. finalmente una baja por incapacidad
laboral, en la que continúa en el
El suceso que finalmente condiciona momento de nuestra intervención.
la judicialización del caso es el siguiente: Según el informe médico del Insalud por
“Ese día, el acusado tras insultarme y presentar:”un cuadro grave de neuro-
discutir acabó cogiendo unas tijeras, me sis depresiva, con trastornos en la
amenazó con ellas y finalmente me suje- personalidad y el habla”.
tó por la fuerza cortándome un mechón
de pelo, mientras me insultaba y me De la información recogida en la
vejaba, diciéndome cosas como “mamo- exploración pericial destacamos lo
na no sirves ni para chuparla”. siguiente:

Después de ocurrir este incidente, la Se practica la exploración en dos sesio-


presunta víctima sufre “una crisis nervio- nes (con una demora de 14 meses desde
sa y un ataque de histeria”. Y la empre- la interposición de la denuncia), en la
sa (al objeto de evitar el contacto con el segunda se entrevista también al esposo
agresor), acuerda su traslado, según de la informada, para cotejo de datos.
consta en la denuncia “a una pequeña
oficina dentro del almacén, completa- Respecto a Antecedentes familia-
mente aislada y rodeada de materiales: res, Dª Concha es la tercera de una
chapas, ruedas, etc. que ella denomina familia compuesta en origen por los
la choza, prácticamente sin asignación padres y tres hijos. Se describe dinámica,
de puesto efectivo”. familiar, funcional. No se reconocen
antecedentes psicopatológicos o proble-
Ante este traslado, “situación de trato mas relacionados con el presente con-
injusto, degradante e indigno, soy presa flicto psicolegal.
de un nuevo ataque de histeria y de un
fuerte shock emocional”. Antecedentes personales sin rele-
vancia clínica. Escolarización y proceso
El médico de cabecera emite un infor- de socialización normalizados.
me en el que consta: “padece un tras-
torno de estrés agudo, con síntomas Incursión en el mundo laboral hacia
de desesperanza intensa, aturdi- los 16 años. Después de desarrollar tra-

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bajo en cadena en otra empresa, recala Estado de ánimo expansivo, sin apre-
en la que se producen los hechos de ciable resonancia emocional al rememo-
autos (ingresa como auxiliar de labora- rar los hechos denunciados, que por el
torio, posteriormente como auxiliar de contrario son relatados con altas dosis
archivo y por último asciende a adminis- de teatralidad.
trativo). No describe conflictiva con
compañeros o superiores hasta que En la segunda sesión de exploración
eclosiona el problema que nos ocupa. la informada exhibió el mismo tono
emocional, si bien aparecieron en deter-
A los 22 años contrae matrimonio, minados momentos episodios de llanto
tiene dos hijos de 24 y 16 años. Refiere que impresionaban de simulados, rápi-
buen ajuste marital después de superar damente controlados.
separación temporal de hecho.
Capacidad de juicio e ideación ajusta-
En el plano personal proyecta un dos.
buen autoconcepto, se describe como
una mujer sociable, extrovertida, afecti- Refiere y documenta haber solicitado
va, no rencorosa, alegre, luchadora. atención del médico de cabecera y de la
unidad de psiquiatría del centro de salud
Según impresión clínica destacan ras- y haber participado en terapia de grupo.
gos de asertividad e histrionismo.
No reconoce consumo abusivo de
Exploración psicopatológica: La drogas o sustancias estupefacientes, sí
peritada se encuentra consciente, en fumadora.
buen estado de alerta. Orientada en
tiempo, lugar, persona y situación. Con respecto al relato del presunto
acoso laboral denunciado, Dª. Concha
Coherente, sin alteraciones en el len- describe, (en contraposición con lo refle-
guaje o en el pensamiento, ni en conte- jado en la denuncia), una situación de
nido ni en curso. No delirios ni alucina- confrontación y pugna, no de acoso, en
ciones, ni sintomatología psicótica. tanto no existe asimetría en la relación.
De la información recabada se infiere
Memoria de evocación y fijación con- que los dos actores de la relación miden
servadas. sus fuerzas y llegan a protagonizar inci-
dentes como “el del corte de cabello”,
Presenta adecuadas capacidades en el que nuestra víctima responde cum-
expresivo-comprensivas para el inter- pliendo su amenaza de arrancar la lista
cambio verbal, apreciándose verborrea y de teléfonos de aquel (la negativa a
dificultad articulatoria que impresiona prestársela es el detonante de la discu-
de simulada. sión) rompiéndola posteriormente.

Desarrollo cognitivo-intelectivo Por otra parte, la bidireccionalidad de


medio, según impresión clínica. la disfunción entre ambos se refleja en

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numerosos intercambios verbales pre- lo que lee, que ve rallas o bichos y


senciados por terceros, que se recogen “si pasa de un color a otro ve
en el expediente instruido por la empre- cosas rojas” (pero paradójicamen-
sa (…”en un momento dado Dª Concha te reconoce que ocupa gran parte
le dijo al acusado que “no servía ni para del tiempo resolviendo sopas de
tomar por culo”, a lo que éste respondió letras).
“ni tu para hacer una mamada”).
— También refiere problemas de
En relación al cuadro psicopatológi- memoria y desorientación espacial
co presuntamente reactivo a los (aunque a preguntas se sitúa
hechos denunciados, la informada aporta correctamente y describe el itine-
una información ingente y desordenada rario a seguir para regresar a su
que resulta de difícil interpretación. domicilio).

Se describe como una persona inca- — Dificultad articulatoria “porque


paz, mermada y sin autonomía perso- tiene paralizada la cara”, (a tal
nal, prácticamente inválida: efecto se realiza un TAC que
resulta normal).
— Refiere que no puede hacer la
compra, ni la comida, ni limpiar, ni En este sentido y a tenor de la
planchar, lo cual contradice la observación clínica, reflejar que en
información proporcionada por su algunos momentos aparece un
esposo. habla “gangosa”, si bien la perita-
da controla la elevación en el tono
— Que no puede conducir porque se de voz, la modulación y el énfasis
despista. de las palabras, acompañándose
de una grosera gesticulación y/o
— Que “se le cae la baba, que no teatralización. En buena parte del
tiene fuerzas, que le flojean las tiempo de exploración el habla se
piernas, los brazos” (lo que con- normaliza, probablemente porque
trasta con la vigorosa exhibición por relajación cede el control de la
gestual en las sesiones de explora- conducta simuladora.
ción). En esta línea, verbaliza que
en algún momento tuvo proble- — En el plano anímico refiere sinto-
mas para subir las escaleras, para matología depresiva y tendencia al
vestirse o para ducharse (a pre- repliegue sobre si misma, con acti-
guntas sobre posible mejoría expli- tud fóbica frente a los que le ro-
ca que “ahora salgo de la bañera dean (“tengo miedo a salir a la
sola porque me agarro a la puerta, calle... voy como los tontos con la
aunque tengo miedo a caerme”). cabeza agachada porque no quie-
ro ver a nadie”). En la exploración
— Así mismo explica que no ve, no no se objetivan indicadores emo-
puede leer seguido, no entiende cionales o síntomas compatibles,

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apareciendo un llanto controlado • Además la sintomatología descrita


sin correlato emocional, que cesa resulta imprecisa y desajustada, y no
rápidamente cuando se le formula responde a ninguno de los cuadros
otra pregunta. La negativa a rela- psicopatológicos que se le han diag-
cionarse con los demás o la ten- nosticado, ni a ningún otro de los
dencia al aislamiento y al repliegue manuales diagnósticos al uso, CIE-
sobre sí misma contrasta con el 10 o DSM-IV-TR.
estilo de relación que establece
con la perito, en tanto adopta una • Por otra parte, no existe proporcio-
actitud invasiva tanto en los gestos nalidad entre los hechos denuncia-
como en la verborrea expresiva. dos y descritos por la informada, y
el cuadro psicopatológico presunta-
— La severidad de la problemática mente reactivo.
alegada incluye también una
transformación de la personalidad • Así mismo resulta incongruente que
(“ya no soy la misma persona, no no aparezca una progresión o evolu-
sé quien soy), lo que probable- ción en la sintomatología, después
mente explique el diagnóstico del de más de un año de evolución.
INSALUD, que alude a “trastornos
en la personalidad”. • También apoya el diagnóstico de
simulación que cuando a Dª Con-
— Por último, con relación a los tra- cha, le pedimos que resuma y con-
tamientos recibidos, refiere y crete los motivos que le impiden
documenta prescripción de anti- trabajar (después de haberlos son-
depresivos y ansiolíticos (pero a deado de forma prolija y detallada),
preguntas, duda y no sabe preci- aduzca razones irrelevantes e incon-
sar la dosis o las características gruentes, expresándose en los
físicas de los fármacos). siguientes términos: ”necesito estar
sin dar golpes, sin dar voces, tengo
que estar moviendo mucho la boca,
DIAGNÓSTICO DE SIMULACIÓN necesito un tratamiento”, olvidando
la incapacitante severidad de su
En primer lugar y ateniéndonos al “ficticia problemática”.
Manual Diagnóstico y Estadístico de los
trastornos mentales, DSM-IV, el caso de • Por último, cuando al finalizar la
estudio se inserta en un contexto médi- entrevista (obviando el “rosario” de
co-legal. problemas y síntomas que acaba de
relatarnos), le participamos que no
• Existe una marcada discrepancia encontramos motivo para demorar
entre los trastornos o síntomas que su reincorporación laboral, reconoce
la paciente verbaliza padecer y lo que efectivamente podría hacerlo,
que puede objetivarse en la explora- pero no en el último destino que le
ción pericial. habían asignado.

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Detección y valoración pericial de la simulación o producción intencionada de síntomas, en un caso práctico...

• Entendemos por tanto, que la infor- asignado, “la choza”). Por lo que
mación recogida es compatible con emitimos un diagnóstico de SIMU-
producción intencionada de sínto- LACION Z76.5, (V65.2), según esta-
mas, por motivación o ganancia blece el Manual Diagnóstico y Esta-
secundaria (posiblemente evitar la dístico de los Trastornos Mentales,
reincorporación al destino laboral DSM-IV-TR.

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