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April Bostic - Eros, My Love PDF
April Bostic - Eros, My Love PDF
para fans.
Esperamos que este trabajo realizado con gran esfuerzo por parte de los
staffs tanto de traducción como de corrección, y de revisión y diseño, sea
de vuestro agrado y que impulse a aquellos lectores que están
adentrándose y que ya están dentro del mundo de la lectura. Recuerda
apoyar al autor/a de este libro comprando el libro en cuanto llegue a tu
localidad.
Moderadora de Traducción:
Pily
Traductoras:
Alisson Lectora
Agoss Pily
Katiliz94 Vessky
Kmi25
Corrección:
Pily
Revisión y Recopilacion:
Pily
Diseñadora:
DayiCullen
Sinopsis
Eros, MyLove
Sobre la Autora
Gabrielle Foster, nunca pensó que iba a enamorarse de un personaje
mitológico. Después de leer las páginas de un misterioso blog, se encuentra
todavía enamorada y sintiendo simpatía hacia un joven que dice ser el
dios griego Eros. La revista lo pinta como un dios trágico y solitario con un
corazón generoso que anhela compañía. Pero el blogger anónimo es una
mujer clínicamente loca, así que Eros no podría existir... ¿verdad?
Tan pronto como el autobús se detuvo, nadie supo cómo formar una
línea ordenada. Algunas personas empujaban y oprimían a otras. Todos
queríamos el alivio del amargo tiempo. Justo cuando pensé que no podía
volverse peor, fui a bizquear un momento cuando un copo de nieve
aterrizó en mi nariz. Ahora estaba más ansiosa por meterme dentro del
autobús.
No solo la autora había hablado sobre sus sentimientos por Eros, también
había narrado sus conversaciones. Eros decía haber pasado miles de años
influenciando los corazones de los hombres pero nunca podía satisfacer su
propia necesidad de amor y compañía. Le había dicho a la mujer que su
padre, Hermes, le había prohibido aceptar una amante mortal en la Tierra.
El diario tenía pintado a Eros siendo un egoísta y trágico dios griego del
amor.
Obsesión hasta el punto de la locura con él, clamó la autora. Hasta este
día, fue persistente en que Eros existe y habita en nuestro mundo. Después
de leer su diario, concluí en que él solo era un hombre normal que había
sufrido un intenso dolor de corazón a largo plazo y enfermedad mental.
Sentía pena por la autora. Estuvo tristemente desilusionada, crédula, y
quizás tan sola como el joven del que se había enamorado.
Sabía que llegaría tarde para trabajar porque el autobús tenía la hora
atrasada. Saqué el teléfono para ver la hora. Eran las cinco menos diez,
normalmente la hora en la que comenzaba mi turno en el Tic-TocDiner.
—Mi autobús no llegó a tiempo, pero casi estoy ahí. Dile a Jack que voy
a llegar unos pocos minutos tarde.
Ella suspiró.
—Uh, se lo imaginaba. No te preocupes por eso. Solo llega aquí cuando
puedas. No es gran cosa. De cualquier manera ahora no estamos
ocupados, y probablemente no lo estaremos. Si las personas son listas, se
quedaran en casa con este tipo de clima.
Sobre él estaban las palabras Tic-TocDiner. Pensé que estaba loca por
llevar una falda de lana, medias, y obvios zapatos de cuero Mary Jane en
este tipo de tiempo.
Caminé hacia la parte trasera del Diner para colgar el abrigo y puse el
bolso en la taquilla. Lo había puesto en el mostrador cuando Tanya salió
de la cocina con una jarra de soda en la mano. Cuando me notó, una
ensanchada sonrisa apareció en su cara. Su pelo negro azabache estaba
estilizado en unos rizos sueltos que le golpeaban los hombros. Llevaba el
mismo uniforme monocromo que tenía yo debajo del abrigo: un suéter
blanco con el logo de Tic-Toc en el pecho izquierdo y vaqueros negros.
Jack requería que vistiéramos de blanco y negro, normalmente blanco
arriba y negro abajo.
—Sí, podrías decir eso. La nieve está cayendo con fuerza, y realmente
está frío en el exterior.
—Juro que ese tipo viene aquí todas las noches. Debe amar realmente
la comida —dijo Tanya antes de que se fuera.
Pasé por la oficina de Jack, pero él dijo mi nombre, por lo que di marcha
atrás y asomé mi cabeza en la puerta.
—¿Qué pasa?
Suspiré.
—Está bien. Entiendo que los autobuses llegan tarde a causa del
tiempo. Sólo ponte en tu tiempo normal, ¿de acuerdo?
Me dio una sonrisa, y vi las arrugas a los lados de sus ojos avellana. No
pude evitar sonreír de nuevo. Jack era un jefe comprensivo, y me gustaba
eso de él. Algunas veces, tuve que terminar mi turno temprano porque me
daban calambres menstruales. Tan pronto como había mencionado
"calambres," no me preguntó más. Sólo me dijo que fuera a casa. Jack
tiene dos hijas mayores y una esposa, por lo que había aprendido a nunca
cuestionar a una mujer cuando está en esa época del mes.
—Ahora a trabajar.
—No estoy de humor para el especial, así que creo que voy pedir un
sándwich de pollo a la parrilla y patatas a la francesa, por favor.
1
Arroz pilaf: modo hindú de cocinar el arroz. con carne de borrego o res, acompañado
habitualmente de té y con algún condimento picante.
A causa de mi estado actual de las emociones, mi voz se escapó en un
susurro ahogado.
—¿Quién eres?
Tartamudeé.
Parpadeé rápidamente.
—¿Perdón?
Mi boca cayó.
—¿Has venido aquí desde hace casi un año sólo para verme?
Él asintió.
—El hecho de que no me has visto aquí cada día no significa que no te
he visto a ti. Has servido a muchos clientes, y me hice parecer como uno
más. Siempre has sido tan buena conmigo. Nunca dejaste de tratar de
conversar conmigo, aunque yo murmuraba unas palabras a cambio.
Suspiró.
¿Qué diablos está pasando? ¿De verdad estoy hablando con un dios
griego?
—No entiendo.
—Tu corazón ha sufrido mucho, y soy la razón por la cual tus relaciones
nunca duran—. Sacudió la cabeza ligeramente y tenía una expresión
culpable—. Oh, mi querida niña, no es tuculpa.
—Me tomó un tiempo darme cuenta por qué seguía con esto. Es porque
soy el que te necesita. Ya no puedo esperar más. Quiero estar contigo y
llevarte a casa conmigo. Es la única manera.
—Entonces te lo mostraré.
Sonrió.
—¿Por qué no? ¿Qué pasa con mi familia? ¡No puedo dejarlos!
—Porque quería una relación contigo, pero eso habría sido imposible. Va
contra las reglas.
—Eros… —El me calla presionando su largo dedo índice sobre mis labios.
—Puedes cerrar los ojos si tienes miedo, mi amor. —Me mira fijamente
desde debajo de la capucha con borde de piel. Me mira con un cariño
real, y una encantadora sonrisa se dibuja en sus labios—. Pero no creo que
quieras perderte esto.
Aunque las luces de la ciudad eran una borrosa raya de colores, la vista
aérea era impresionante. Me pareció extraño que volar con él no me
afectó un poco después. Al principio, mis oídos estallaron y no pude ver ni
respirar, pero entonces algo mágico sucedió. De alguna manera, volando
a velocidades de vértigo en esta gran altitud, Eros me protegía del peligro.
Oí el sonido de los pájaros. Abrí los ojos con cautela y vi que estábamos
volando sobre un bosque denso. Eros se sumergió hasta que volamos justo
por encima de las copas de los árboles. Me quedé boquiabierta de
asombro cuando me di cuenta de que la noche se había convertido en
día. El cielo lleno con tenues nubes blancas que se extendía hasta el
infinito.
Miré a Eros, su pelo ondeando con el viento y reluciente bajo el sol. Verlo
desnudo durante el día me robó el aliento. Su belleza física era injusta para
todas las mujeres.
Nos aferramos el uno al otro e hicimos el gran salto dentro del éxtasis. El
espectacular clímax entre nosotros había llegado y los dos gritamos con
pasión. Sentí que Eros se vino dentro de mí, su semen salpicándose contra
mi cérvix. Mi cuerpo le dio la bienvenida a su semen y aceptó cada gota.
Me vine duro, y comprimí su pene en un amable apretón. Sin aliento, cerré
los ojos y agarré a Eros en mis brazos. Él y yo compartimos nuestros cuerpos
y almas en el Monte Olimpo. Me preguntaba si los otros dioses estaban
cerca y habían presenciado nuestra erótica manifestación de amor.
Abril Bostic es una autora romántica de Nueva Jersey, que disfruta de
desatar su creatividad dejando que su imaginación funcione salvaje. Su
amor por los libros de romance la inspiró a convertirse no sólo en lectora,
sino también en escritora.