Preludio Blood Tree

You might also like

You are on page 1of 12

Títulos nobiliarios:

Baja nobleza: caballero, paladín, barón y marques.

Alta nobleza: conde, vizconde, duque, archiduque

Realeza: virrey, príncipe y rey.

Los seis Reinos y los cinco reyes:

La liga de Ashlotte, está conformada por seis Reinos, cinco de ellos gobernados
por reyes y el sexto permanece conquistado:

El rey Edward Crownwell gobierna el Reino de Bristol, La reina Elizabeth Lemory


gobierna el imperio de Sigtunia, La reina Camila Rosebold gobierna el reino de las
islas de Liber, La reina Seline Montalvo gobierna el imperio de Abraxas, El rey
Hank Landa gobierna el imperio de Colstby, y por último el antiguo Reino de Tirya
era gobernado por una antigua y noble casa, y se divide en cuatro territorios: La
costa de Rigervim, el centro que es conocido como el valle fértil y que colinda con
el territorio de Bristol donde se encuentra la ciudad más grande, la vieja capital
del reino de Tirya: Melestorm; al sur está el desfiladero que separa los territorios
del sur, conformadas por las minas del territorio de Salesmir y el bosque negro
llamado así porque existe un camino formado dentro de las altas montañas que va
hacia las tierras inexploradas y el pantano de los nigromantes, este reino está
actualmente en manos de la armada negra.

Las antiguas doce familias reales:

Bristol: Archiduque Crownwell Señor de Ravenfall y Archiduque Duhamir señor de


Brisvane

Sigtunia: Archiduque Lemory Señor de Highlanding y Archiduque Windhood señor


de Alasmir

Las islas de Liber: Archiduque Rosebold señor de Mirrorsea, y Archiduque Vitaly


Señor de Volanti

Abraxas: Archiduque Montalvo señor de Blackstone y Archiduque Ditani Señor de


Burnsess

Colstby: Archiduque Landa señor de Terken y Archiduque Solastone señor de


Valamtir
Tirya: Archiduque Francaster Señor de Melestorm y Archiduque Blackthorn señor
de Salesmir

Solo aquellos miembros de estas familias pueden acceder al trono de sus


respectivos reinos, se creía que los Francaster habían desaparecido
completamente durante la guerra oscura y los únicos sobrevivientes Blackthorn no
son de la rama principal por lo tanto no pueden gobernar Tirya.

Escudos familiares:

Crownwell: un Grifo dorado coronado sosteniendo una espada, con dos hachas
cruzadas al fondo, de color verde oscuro.

Duhamir: un hipogrifo de plata, parado sobre sus patas traseras, con dos espadas
cruzadas al fondo, sobre un fondo azul fuerte.

El Antiguo y noble reino de Ashlotte: seis siglos antes de que se formara la liga,
los seis reinos eran gobernados por la familia real Ashlotte, los territorios solo
aumentaron la fortuna de la familia, nadie sabía de dónde venían pero los
antecesores de los Ashlotte conquistaron los territorios e instalaron su dominio allí,
durante esos siglos gobernaron bien, consiguiendo un reino estable y rico, hasta
que al último rey Ashlotte le sobrevino una desgracia; su esposa nunca pudo darle
un heredero varón solo pudo darle cuatro hermosas hijas, siendo la mayor, Sofía
Ashlotte, quien lo sucedería; por tal motivo decidió hacer un torneo, una vez que la
vejez comenzó a sentirse en su cuerpo, para asegurarse que el marido de su hija
y heredera fuera lo suficiente mente fuerte para proteger y mantener unido todo el
reino.

Vinieron de todas partes del reino, siendo los Crownwell, los Vitaly y los Lemory
los favoritos para ganar.

Ese día cuando la fiesta de inicio del torneo estaba en su apogeo llego un
desconocido, vestía ropa negra, su capa era de piel de lobo y la vaina de su
espada estaba forrada con piel de serpiente, su mirada era fría y su piel muy
pálida casi como la de un muerto.

Se dirigió directamente ante el rey y mientras caminaba los murmullos se todas las
personas se fueron apagando hasta quedar en completo silencio.
Cuando llego ante el rey, se inclinó en reverencia y se presentó: mi nombre es
Marcus Francaster, vengo a solicitar que cumpla la promesa que hizo a mi familia,
presentándome para competir por la mano de su hija.

Algunos de los nobles rieron pues su vestimenta y su apariencia no era la de un


noble como ellos, otros se mostraron sorprendidos o intimidados pues su mirada
fría y el acero negro de su espada, que saco para ponerla ante el rey, indicaba
que era un nigromante; pero el rey solo sonrió y le pregunto por su padre, él dijo
que se encontraba bien y que le mandaba saludos, una vez que el rey se mostró
complacido y tras examinar la espada que se le presentaba se la regreso a
Marcus y le dijo que podía participar, el extraño se puso de pie y acompañado de
un criado entro al castillo.

Esa noche los otros nobles se reunieron con el rey para preguntar el paradero de
ese extraño

El rey les conto que los Francaster eran un antiguo clan de nigromantes y
asesinos que vivían en la frontera entre el pantano negro y el bosque de la muerte
del territorio de Tirya y que cuando su tatarabuelo fue hacia ahí para conquistarla,
fueron ellos los que más resistencia opusieron y los que más bajas le causaron
pues eran magníficos luchadores, no le temían a la muerte y era necesario
sacrificar a varios soldados solo para matar a uno de ellos, cuando al fin los
derroto, el jefe del clan que resulto también tener por apellido Francaster, le juro
lealtad al rey y que él podía usarlos como quisiera, que ellos jamás lo
traicionarían; el rey a cambio les otorgaría el nombramiento de nobles y los
integraría al concejo cuando ellos lo pidieran; Que era precisamente lo que el
chico Marcus había hecho, pues solo así podría competir.

Durante el torneo, Marcus Francaster se destacó por su fuerza, su habilidad con la


espada y su brutalidad para vencer a sus contrincantes. Venció inclusive al
heredero de los Crownwell quien se decía era el mejor guerrero que el reino tenia.

Una vez que Marcus Francaster fue declarado campeón y se le presento ante
Sofía, al verlo, ella lo rechazo diciendo que jamás se casaría con un salvaje.

El chico solo sonrió e inclinándose de nuevo le dio la espalda y salió sin decir
nada. Esa noche Padre e hija tuvieron una violenta discusión.

Cuando Sofía salió de la sala del concejo, fue directamente a los jardines del
castillo buscando paz y silencio, ahí se encontró con Marcus quien solo observaba
el cielo y murmuraba para sí mismo, al verlo ahí recargado en un árbol mirando el
cielo lleno de estrellas, a ella le resulto curioso y desagradable al mismo tiempo.
Como Marcus escucho que alguien se acercaba, rápidamente giro la cabeza y al
ver de quien se trataba regreso a su posición anterior con una sonrisa burlona.

Ella se acercó a él y le pregunto -¿Qué haces aquí? El solo se encogió de


hombros y respondió: observar la luna y las estrellas.

Ella le pregunto si eso no podía hacerlo en su habitación, pero él dijo que no le


gustaba estar encerrado y que el aire fresco y el silencio de la noche lo hacían
sentir mejor.

Ella solo frunció el ceño y se recargo en un árbol contiguo al de Marcus, él no le


prestaba atención.

Así se quedaron callados unos minutos cuando ella le pregunto porque fue a
pedirle a su padre que respetara el acuerdo y lo convirtiera en noble.

Él le respondió: porque solo así se mantendrá el reino unido, por si no lo has


notado el resto de los nobles solo tienen la intención de hacerse con el poder y
reinar, no les importa nada más que hacerse con el trono y si no han traicionado a
tu familia y al reino es por los poderes latentes en la sangre de todos los Ashlotte.

Ella se quedó con la boca abierta, después reacciono y lo llamo mentiroso; el solo
sonríe y le dice: no es mi problema si no me crees, solo espero que tu terquedad
no destruya al reino.

Después con su sonrisa todavía puesta le pregunta a Sofía, ¿y porque no quieres


casarte conmigo?

Ella le responde: porque no te conozco, no sé quién eres ni de dónde vienes o


cuáles son tus intenciones y porque me pareces un hombre salvaje.

Él se ríe a carcajadas y le contesta: bueno quien soy pues ya lo sabes, tu padre


debió explicártelo todo, de donde vengo también lo debes de saber pues mi familia
sigue viviendo en los bosques de Tirya, mis intenciones son bastante claras y
honestas, mantener a salvo el linaje de mi señor, en pocas palabras protegerte; y
al decir que soy un salvaje, bueno, pues si lo soy, ya que a diferencia de esos
niños mimados, los Francaster somos uno con todo lo que nos rodea y desde que
aprendemos a caminar aprendemos a luchar y a sobrevivir.

Muy a su pesar a Sofía le da curiosidad y le pide que le explique, el extrañado le


pregunta el porqué de su interés, ella solo le dice que así podrá conocerlo más y
dejar de juzgarlo.

Con otro encogimiento de hombros comienza a explicarle: Los Francaster


venimos del pantano de los nigromantes, ahí nacieron nuestros antepasados, en
un momento dado y por razones que no están escritas en nuestras crónicas el
clan se vio obligado a viajar, de esta manera llegamos a los bosques de Tirya; ahí
nos instalamos y continuamos con nuestras tradiciones y nuestro entrenamiento,
ya que a un Francaster se le enseña desde pequeño a sobrevivir, cuando alcanza
cierta edad, a luchar y a asesinar y cuando es un adolescente a usar la magia
negra; una vez que nuestros estudios sobre la magia terminan, sin nada más que
con lo que tenemos puesto en ese momento, se nos obliga a alejarnos del clan y a
internarnos en el bosque; ahí deberemos estar, sin ponernos en contacto con
nadie del clan, sobreviviendo, y cazando hasta que no hayamos conseguidos dos
cosas, la piel de un lobo alfa, y la piel, colmillos y veneno de un basilisco joven.

Sofía al escuchar eso, con una mano en la boca, exclama: pero eso es imposible,
si intentaras atacar a un lobo alfa antes tendrías que acabar con toda la manada y
con un basilisco es aún peor, muy pocos sobreviven a un encuentro con esa
serpiente.

Así es, responde Marcus, muy pocos lo logran, es por eso que nosotros somos
especiales, ya que cada hombre y mujer adultos dentro del clan han sobrevivido a
ese viaje y regresado con esas cosas; si fueras a mis tierras y vieras a mi familia y
a los integrantes de mi clan, verías que todos tienen una capa como la mía, hecha
de piel de lobo, verías que todos tienen una funda de espada recubierta con piel
de serpiente y si me levantara la camisa, verías que debajo también traigo un
chaleco hecho de la misma piel.

Ahora entiendo porque mi padre les tiene tanto respeto, ustedes viven de forma
demente.

Solo un poco, pero es la manera en que se garantiza que podremos cumplir


nuestro trabajo.

¿Y cuál es su trabajo? pregunto Sofía.

Lo que sea que el rey nos ordene hacer, respondió Marcus, en este caso tu padre.

¿Y qué es lo que mi padre te ha pedido que hagas?- le pregunto Sofía.

Protegerte a ti y al reino.- respondió Marcus. ¿Y nada más?- bueno no


precisamente así; se supone que mi primera prioridad, es mantenerte a salvo a ti y
a tus hermanas, evitar que se casen con malos hombres y una vez casadas yo y
otros de mis hermanos seriamos sus sombras para mantenerlas vigiladas,
después a sus hijos y así sucesivamente. Una vez asegurado esto, debo de
encargarme de que el reino se mantenga a salvo, los Francaster debemos
asegurarnos de que nada ponga en peligro el reino y debemos eliminar a cualquier
enemigo que haya, antes incluso de que represente una amenaza real para la
estabilidad del reino o la seguridad de sus habitantes.

¿Eso fue lo que mi padre te pidió que hicieras? ¿Todo eso?, pregunto sorprendida
Sofía.

No- respondió Marcus, ese fue el acuerdo establecido entre tus antepasados y los
míos. No lo entiendo- dijo Sofía- cuando pasó eso y porque lo siguen
manteniendo, mi padre no me ha explicado nada de eso y yo de ti o de tu familia
jamás había oído nada hasta ahora.

No se sabe nada- respondió Marcus- porque el acuerdo era secreto y solo pasaba
de padre a hijo, se mantuvo así por una simple y sencilla razón, nadie más que los
ashlotte lo deberían saber, sino el resto de los nobles buscarían a los Francaster
para intentar contratar nuestros servicios u obligarnos a trabajar para ellos, cuando
el Rey Ashlotte le perdonó la vida al líder de los Francaster y se hizo el juramento,
esa fue la premisa principal, salvaguardar la seguridad del reino y asegurar la
supervivencia de los Ashlotte costara lo que costara.

Tu padre solo traspaso ese juramento a este caso en específico, y ya que no te


quieres casar conmigo y no pienso obligarte, deberé protegerte desde las sombras
incluso si es de tu propio marido y lo tenga que matar en su cama mientras
duerme a tu lado.

¿Y porque lo matarías, ehh? Pregunto Sofía con una risita

Por cualquier pretexto, respondió Marcus un poco más serio; porque te grito,
porque te levanto la mano, porque no te dejo satisfecha en la cama, o porque te es
infiel, por lo que sea en realidad.

¿Estás hablando en serio? Pregunto Sofía asustada. En parte si y en parte no


respondió Marcus, no mataría a tu marido por cualquier cosa, solo si intentará
hacerte daño, pero lo que si haría sería envidiarlo mucho ya que se casó contigo.

Después de decir eso, él se rio y ella también y así estuvieron hablando durante la
mitad de la noche.

Al día siguiente, cuando el padre le pregunto a su hija a quien quería desposar,


ella dijo que le diera un tiempo para valorar a los candidatos.

En ese tiempo ella y Marcus se conocieron mejor y aunque ella seguía pensando
que él era un salvaje, no era mala persona, era valiente y caballeroso, no era
presumido o egocéntrico y el hecho de que el siempre estuviera al pendiente de
ella y de sus necesidades la hacían sentir segura, por lo que al final, después de
seis meses de realizarse el torneo, Sofía Ashlotte se casaba con Marcus
Francaster, uniendo así a ambas familias y modificando el escudo real.

Ahora ya no era un fénix sobre una torre coronada con dos espadas cruzadas,
sino que ahora era un fénix, un lobo gigante y una serpiente real, alrededor de un
castillo coronado, con dos espadas y un campo de gules.

Así inicio el reinado de los Francaster, que solo duro medio siglo, pues las bodas
de las hermanas de Sofía, y las de sus hijas e hijos, trajeron la división, ya que la
ambición de las demás familias y la constante presión terminaron por desbaratar el
reino y dividirlo en seis, conformándose así la liga de Ashlotte que pervive hasta
nuestros días.

Personajes:

Viktor Francaster: viene de otra realidad, conocida como el mundo moderno o


mundo gris como lo llaman ahí; llega al mundo verde donde resulta que es el
último heredero de una familia antiquísima, los Francaster, legítimos gobernantes
del reino de Tirya; tendrá que pasar por mucho para poder reclamar su título y su
herencia. En el camino conocerá amigos muy leales y al amor de su vida, así
como férreos enemigos y poderes oscuros.

Rebecca Duhamir: Segunda hija de Rudolf Duhamir, Archiduque de Brisvane;


tiene dos hermanos Jonas y Randall. Se siente atraída por Viktor al momento que
lo conoce, y es gracias a él que logra evitar ser prometida en matrimonio con el
hijo de otro noble para aumentar la influencia de su familia, pero ¿qué más pueden
pedir los Duhamir que su hija y hermana se case con un futuro Rey?, la pregunta
correcta seria, ¿lo lograra?

Orden de caballería: Umbra Rioja

Tristán Malaking: Segundo hijo del marqués de Brockdale. Paladín de la


caballería de combate de los umbra; conoce a Viktor el tercer día de su llegada a
la academia de caballería y se vuelve su amigo, jinete experto, era el indicado
para comandar las cuadrillas de soldados a caballo e imprimirles las tácticas de
combate propias de su familia, famosos por ello.
Dorian Ironkrone: Tercer hijo del barón de AlaRück. Paladín de la infantería
pesada conformados por los crusher y los bonebreakers; se unió a Viktor tras
perder un combate de practica con él; amante de las hachas, se hace amigo de
Viktor cuando este le cuenta sobre los vikingos y la forma de pelear de estos,
como no le gustan los caballos, para él es mejor pelear a pie y con un hacha en
sus manos, mejor.

Janos Tyrfing: Tercer hijo del conde de Bridewick. Paladín de la contra caballería
de los umbra; al principio pertenecía a la orden de los elegidos, pero entra en
desacuerdo con ellos tras presenciar los continuos intentos por vencer y casi
matar a Viktor; se separa de ellos y solicita su entrada a la orden de Viktor; este lo
reta a combate y tras ganarle lo acepta; dado que tiene habilidad con la lanza
Viktor le propone que busque una técnica de combate que le permita eliminar a la
caballería.

Danielle Ravenhood: Primera hija del conde de Blackwood. Paladín de las


arqueras silvanas de los umbra. Ella era constantemente molestada por sus
compañeras por no parecer una dama y por preferir la vida silvestre y las
costumbres de los elfos. Cuando conoce a Viktor, a ella le gusta el hecho de que
no la considere rara y los elogios a su manera de disparar un arco; cuando ella
decide entrar a la orden de caballería, le pide a este que la pruebe como a los
demás, resultando en una batalla bastante impresionante donde ella casi vence a
Viktor. Tiene ciertos sentimientos hacia este pero no está segura del todo y envidia
a Rebecca por parecer más femenina que ella.

Vivian Baldwing: Segunda hija del barón de Calique. La llamada bruja de los
Baldwing, paladín de la infantería de asedio conformada por los Grifos, Sifones y
los maquineros. Estudiante de magia de la academia, bastante solitaria y retraída,
prefiere estar encerrada en el salón de prácticas que salir; amante de la alquimia,
ella conoce muchas fórmulas y sustancias que le pondrían los pelos de punta a
cualquiera, y ha inventado algunos aparatos bastante curiosos que podrían ser
utilizados en una batalla; es por esto que Viktor se interesa por ella, y a fuerza de
insistir logra sacarla de su encierro para que se una a la orden y poder
completarla.

Rafael Vitaly: Segundo hijo del Archiduque de Volanti. Amigo y aliado de Viktor,
líder de la orden de caballería, los Dragonborn. Se interesa por Viktor al ver sus
dotes como espadachín, proponiéndole que se una a su orden, pero este lo
rechaza, más adelante durante una batalla Viktor le salva la vida, por esta razón le
jura lealtad en agradecimiento, volviéndose su aliado y poniéndole su orden a su
servicio. Por insistencia de su madre, Rafael le presenta su hermana a Viktor,
queriendo unir ambas familias a través de este vínculo.
Susan Vitaly: Tercera hija del archiduque de Volanti. Hermana de Rafael. Por
concejo e insistencia de su madre ella es presentada a Viktor Francaster para
lograr un compromiso con él y aunque a ella le agrada Viktor, al principio no cree
que pueda haber algo entre ellos; tras una discusión con Rebecca donde ella
insinuó que no era lo suficientemente bonita e interesante para gustarle a Viktor,
toma como un reto el conquistarlo y se vuelve la rival declarada de Rebecca
muchas veces cayendo en situaciones comprometedoras y cómicas.

Saga Blood Tree

1.- El heredero

2.- El Ejecutor de Bristol

3.- El señor de Tirya

4.- La guerra de los seis reinos

5.- La sangre de Ashlotte y el nuevo reino


Ingredientes y forma de realización de la maldición devoradora y como contenerla:

Maldición devoradora:

Sangre de tu peor enemigo

Sangre de un inocente (para darle más fuerza)

Un poco de tu sangre

Metal bañado con la sangre de los muertos en batalla (acero maldito)

Horno encendido con fuego fatuo

Sal negra o de cementerio

Agua de pantano
Modo de preparación:

Enciende el horno de fundición con el fuego fatuo y calienta y trabaja el metal


hasta darle la forma de un cuchillo, una espada, una lanza, un hacha o cualquier
arma que vayas a llevar siempre contigo.

En la tina donde enfriaras el metal, mezcla el agua de pantano, con la sal negra,
después vierte la sangre de tu peor enemigo (recuerda que mientras más fresca
mejor) y por ultimo hazte un corte y pon una gotas de tu sangre para que la
maldición sepa quién será su portador (para darle mayor potencia a la maldición
puedes verter unas gotas de sangre de un inocente, puede ser un niño aunque
sería preferible un bebe no menor de tres meses).

Mezcla bien todos estos ingrediente y usa esa agua maldita para enfriar el metal
hasta que esté completamente terminada, por ultimo marca en ambos lados de la
hoja las runas de la maldición y después actívala con tu sangre.

La maldición devoradora: esta maldición otorga protección, habilidades de


combate y regeneración a través de la muerte de personas, mientras más
personas mueran usando la hoja maldecida, mayor serán los poderes que la
maldición te otorgara.

Advertencia: mientras más uses esta maldición, más te consumirá, hasta volverte
loco y mates por simple placer.

Hechizo de contención y neutralización:

Agua bendita

Sal purificada

Acero elvico

Fuego sacro

Una gota de tu sangre

La lagrima de una madre arrepentida (indispensable para que el hechizo funcione)


Con el acero elvico se forja un escudo o parte de una armadura o cota de malla
que será quien contenga el hechizo, en la tina para enfriar se añade el agua, la sal
y la lagrima, se mezcla bien y con eso se forja el contenedor del hechizo, al final
se añaden las runas del hechizo y se activa con una gota de sangre.

Este hechizo se usa principalmente como medio de protección y bloqueo de


maldiciones, así como para contener maldiciones más poderosas y evitar que
estas avancen o causen estragos en el cuerpo, normalmente se usa para frenar
una maldición de efecto prolongado en el cuerpo, pues evita que este avance y no
cause daños.

You might also like