You are on page 1of 2

Todo Lo Que Hay Que Saber Sobre Las

Proteinas, Los Carbohidratos Y Las Grasas


Proteínas

En el funcionamiento del cuerpo las proteínas tienen un papel fundamental. En tanto


que los carbohidratos actúan como combustible y las grasas de reserva de éste, las
proteínas son como la máquina que hace funcionar al cuerpo

La falta de proteínas puede provocar anemia, falta de tonicidad muscular, fatiga y


propensión a las enfermedades.

Al ingerir alimentos ricos en proteínas, el cuerpo las divide en aminoácidos, a través del
proceso digestivo. En esta forma se distribuyen en las diferentes células según la necesidad.

Las fuentes de proteínas se clasifican en completas e incompletas. Las primeras son las que
aportan aminoácidos esenciales, que se deben ingerir diariamente. Estos se encuentran en
alimentos tales como la carne, los huevos, la leche, el queso y otros de origen animal. Las
incompletas están en los cereales, leguminosas y otros productos vegetales.
Las proteínas no utilizadas en el organismo en general, se almacenan en los músculos,
principalmente
Hidratos de carbono

Son la principal fuente de energía del cuerpo, el único combustible para el cerebro y
el principal para los músculos

Los hidratos de carbono tienen mucho poder, pero hay que saber elegir los adecuados.
Acá van unos tips para que aprendas a consumir los que necesita el cuerpo.

Los hidratos de carbono pueden ser compuestos o simples. Estos últimos proporcionan
un aumento de energía momentáneo, seguido del consecuente bajón, porque se digiere y
absorbe en el flujo sanguíneo rápidamente. Ejemplos: azúcar de mesa y miel.

Los complejos tienen un poder más sostenido, la energía se guarda durante un lapso más
prolongado. Como ejemplo se puede citar las legumbres, el pan, el arroz, los cereales, la
pasta, lso vegetales y la fruta.

No obstante el cuerpo necesita de una dieta equilibrada para funcionar


correctamente. Deberá estar compuesta de un 60% de hidratos de carbono (en su mayoría
complejos), un 30% de grasas y un 10% de proteínas. Hay que tener en cuenta que comer
hidratos de carbono en exceso produce que el cuerpo los almacene como grasas, y si se
consume muy poco el cuerpo se ve obligado a buscar las proteínas de lso tejidos como
principal fuente de energía.

Los glicógenos
Son la forma en que el cuerpo almacena los hidratos de carbono, que luego van a ser a los
que va a recurrir un deportista cuando necesite energía ya que son la mayor fuente de
energía durante la primera hora de actividad.
En cuanto a la energía para la actividad física, la duración y la intensidad de actividad
afectan al tipo y a la cantidad de energía consumida.

Para entrenamiento aeróbico, un 70% de la energía proviene de los glicógenos, mientras


que el resto proviene de la grasa.

Para los deportes que requieren ráfagas de energía cortas e intensas, como el tennis,
estos hidratos son la principal fuente de energía.

Los deportes de resistencia, que requieren una intensidad constante también recurren a
los glicógenos musculares. Después de los 90 a 120 minutos de ejercicios, las reservas de
glicógenos caen en picada, por eso luego el cuerpo recurre a las grasas.

Consumo adecuado
En base a una dieta de 2.000 calorías diarias, 275 gramos de hidratos de carbono es lo
normal.

Las Grasas o Lípidos

Se ha comprobado que hay que ser cautos con la ingesta de alimentos ricos en
grasas. Altos niveles de grasa en sangre no sólo significa que una persona sube de
peso sino que además genera depósitos de grasa en las arterias y puede elevar los
niveles de colesterol.

Las grass o lípidos protegen al organismo del frío y del calor. Y son disolventes para
las vitaminas como la A, D, E y K. Alrededor del 95 por ciento de los lípidos de
nuestro cuerpo son triglicéridos, compuesto formados por glicerol, con tres ácidos
grasos enlazados. Se clasifican en triglicéridos de cadena corta, mediana y larga.
Estas cadenas de lípidos pueden ser saturadas, como las de los alimentos de origen
animal o como las de los vegetales como el aceite de palta, el de coco o el cacao.
También las grasas pueden se monosaturadas. Tal es el caso del aceite de oliva, la grasa
de maní. Finalmente están las grasas polisaturadas que representan a la gran mayoría de
los aceites vegetales líquidos.
El otro 5 por ciento de grasa del organismo está compuesto por fosfolípidos, esteroles y
colesterol.
Las tres clases de grasa circulan por la sangre en forma de lipoproteínas. Son tan
importantes para el funcionamiento del cuerpo como lo son las proteínas y los
carbohidratos. Su ausencia puede provocar dermatitis, trastornos hepáticos y hormonales.
No obstante, el exceso de grasa también es contraproducente.
Hoy por hoy se ha comprobado que hay que ser cautos con la ingesta de alimentos ricos
en grasas, especialmente las de origen animal, y los alimentos con altos contenido de
carbohidratos. Altos niveles de grasa en sangre no sólo significa que una persona sube de
peso sino que además genera depósitos de grasa en las arterias y puede elevar los niveles
de colesterol.
Las grasa más recomendadas son los aceites líquidos como el de oliva, el de maní , el de
soja y el de germen de trigo.

You might also like