Taller: Creación de Imagen y Universidad del Claustro de Sor Juana

Personalidad marzo 2008

Hablaremos de cómo las creencias determinan tu calidad de vida, y del mayor poder que hoy día posees.
Una creencia es una percepción de la realidad que damos por cierta, nos permite explicarnos el mundo y guiar
nuestras acciones; existen las potenciadoras, que nos mueven a la acción, nos motivan, elevan nuestra
autoestima, nos hacen sentir bien; y las limitadoras, que nos paralizan, nos hacen sentir inseguros, con temor.
Por mucho que creamos en algo, debemos estar abiertos a otras posibilidades para no dejar de aprender. Si
crees lo que siempre has creído, entonces siempre pensarás como has pensado, siempre actuarás como has actuado
y obtendrás lo que siempre has obtenido; creencia, pensamiento, acción, resultado. Si quieres cambiar lo que
haces, los resultados que estas obteniendo, debes cambiar lo que piensas, “Si cambias lo que piensas…
cambias lo que haces”.
Aprender es ante un mismo estimulo mostrar una conducta diferente, locura seria, querer que pasen cosas
diferentes actuando de la misma forma.
Entre un estimulo y su respuesta hay un espacio, -siempre-, donde reside tu libertad y facultad para elegir
la respuesta, El no reparar en este Don, -libre albedrío- anula tu capacidad para cambiar. Este es tu mayor
poder: el poder de decidir.
Hasta que no puedas decir, profunda y honestamente, «Soy lo que soy como consecuencia de mis elecciones
de ayer», tampoco podrás decir con convicción «Elijo otra cosa».
El cambio es automático, el progreso no, lo que determina tu destino, tu crecimiento y tu felicidad no son los
conocimientos que tengas o tus condiciones, sino las decisiones que tomes y las acciones que emprendas.
Eres libre de elegir tu respuesta ante cualquier situación, responsable de controlar tu vida, de influir
poderosamente en tus circunstancias; Si no estás convencido de ser el creador de tu mundo, te hallas a merced de
las circunstancias, eres el objeto y no el sujeto, la victima.
Al elegir también optas por la consecuencia correspondiente. Por tanto, “Debes asumir la responsabilidad
por tus acciones, pase lo que pase”. Esto es una de las medidas que mejor definen el poder y la madurez de una
persona.
Dos modos de tomar de inmediato el control de tu vida son: hacer promesas, mantenerlas y cumplirlas, o establecer
metas y trabajar para alcanzarlas.
Reflexiona sobre esto: ¿Cuál es el valor que le das a tu palabra, contigo mismo, con los demás? ¿Qué % de
promesas cumples más? ¿Qué te dice el balance, eres demasiado egoísta, ensimismado en ti, o pones los intereses
de los demás por encima de los tuyos?
Nada destruye más rápido la confianza que hacer una promesa y no mantenerla. Trata de no utilizar la palabra
promesa a menos que estés totalmente preparado para pagar el precio que conlleve cumplirla.
El poder de comprometernos con nosotros mismos nos genera Confianza, Valor, Respeto propio, Poder, Autoestima;
con los demás nos proporciona Confianza, Credibilidad, Respeto, Influencia.
Todo en la vida es neutro, uno le da el significado que quiera, así, en vez de tener una Respuesta automática –
reactiva, ante un estimulo, da una Respuesta creativa y ante cada acontecimiento pregúntate: ¿Qué es lo mejor
que puedo hacer?, esta es quizás la pregunta más poderosa que puedes hacerte en cualquier circunstancia.
Todo ocurre por su motivo y razón, todo puede servirnos, enfocate en encontrar posibilidades y no en
obstáculos, no hay fracasos, sólo resultados. Por el hecho de vivir, la vida te da un pago: experiencia, usala a
tu favor, arriésgate más, ¿Qué intentarías hacer si estuvieras seguro de que no puedes fallar?, ¿Qué harías si
no tuvieras miedo?.
La receta del éxito es muy sencilla: 1.- Tomar conciencia, saber que quieres alcanzar, 2.- Tomar acción, 3.- Ver
el resultado obtenido, y, 4.- Cambiar si los resultados no son los esperados, hasta alcanzar el éxito.
Paga el precio, no hay éxito duradero sin una entrega personal, sin compromiso y perseverancia, la perseverancia
aporta más que el talento, aunque este nunca esta de más.
Tema para exponer 6/06/2018
 Luis Herrera Barbier  Página 1
Taller: Creación de Imagen y Universidad del Claustro de Sor Juana
Personalidad marzo 2008

Por otro lado, ¿Sabes de alguien que haya logrado éxito considerable haciendo algo que aborrezca?, uno
debe disfrutar el trayecto, aquí una metáfora nueva: “Haz de tu vida un juego”, poniendo la misma vitalidad, reto
y desafió de un juego a tu vida diaria, convierte tu vocación en vacación: matrimonio perfecto entre lo que
haces y lo que te gusta.
Y recuerda, tus mayores recursos son los humanos, un hombre aislado, por brillante que sea, difícilmente
puede rivalizar con el talento de un equipo eficaz que actúe en colaboración.
Ahora que sabes la importancia de decidir, de asumir la responsabilidad de tus actos y que requieres comprometerte
contigo mismo, repasemos las creencias poderosas que hemos revisado.
Si cambias lo que piensas… cambias lo que haces
Entre estimulo y respuesta hay un espacio donde reside tu libertad para elegir la respuesta
Asume la responsabilidad, pase lo que pase
Comprométete, contigo mismo, y con los demás
Todo en la vida es neutro, tú les das el significado que quieras
Todo ocurre por su motivo y razón, todo puede servirte
No hay fracasos, sólo resultados
No hay éxito duradero sin una entrega personal
“Haz de tu vida un juego”,
Tus mayores recursos son los humanos
Y recuerda:
¿Qué harías si no tuvieras miedo?

Tema para exponer 6/06/2018

 Luis Herrera Barbier  Página 2
Taller: Creación de Imagen y Universidad del Claustro de Sor Juana
Personalidad marzo 2008

Hablaremos de las creencias y como estas, determinan la calidad de vida que tenemos, así como del mayor don
(poder) que tenemos los seres humanos y que nos diferencia de todos los seres vivientes.

Una creencia es una percepción que tenemos de la realidad que damos por cierta, nos permite explicarnos el mundo
y guiar nuestras acciones; existen dos tipos: potenciadoras, aquellas que nos mueven a la acción, nos motivan,
elevan nuestra autoestima; y limitadoras, las que nos paralizan, nos hacen sentir inseguros.
“Si crees que puedes o crees que no puedes, en ambos casos tienes la razón”.
Pese a lo mucho que creamos en algo, debemos permanecer abiertos a otras posibilidades para no dejar de
aprender, de hecho, hoy día, la ciencia evoluciona en base a paradigmas: verdad que tiene validez hasta que no se
demuestre lo contrario.
Si crees lo que siempre has creído, entonces siempre pensarás en lo que has pensado y siempre actuarás como
siempre has actuado y obtendrás lo que siempre has obtenido; creencia, pensamiento, acción, resultado. Aquí tienes
una primera creencia poderosa: “Si cambias lo que piensas… cambias lo que haces”.
Te comparto dos definiciones; aprender: ante el mismo estimulo mostrar una conducta diferente, y locura: querer
que pasen cosas diferentes actuando de la misma forma.
Ya que hablamos de aprendizaje, exploremos el modelo de estimulo y respuesta, aquí podemos afirmar que: entre
estimulo y respuesta hay un espacio, donde reside nuestra libertad y facultad para elegir la respuesta, así, “Son sus
decisiones y no sus condiciones lo que determina su destino, su crecimiento y felicidad”; El no reparar en este Don,
-llibre albedrío- anula nuestra capacidad para cambiar.
Reconocer que somos responsables de nuestras elecciones y que tenemos la libertad de elegir requiere de:
Autodeterminación -ejercer nuestra libertad para poder escoger nuestra respuesta a los estímulos del medio
ambiente-, y de Responsabilidad –Nuestra Habilidad de respuesta-.
Hasta que una persona no pueda decir, profunda y honestamente, «Soy lo que soy como consecuencia de mis
elecciones de ayer», tampoco podrá decir con convicción «Elijo otra cosa».
Somos libres para elegir nuestra respuesta en cualquier situación, responsables de controlar nuestra vida, felicidad,
y, en última instancia, de influir poderosamente en nuestras circunstancias trabajando sobre el ser, sobre lo que
somos, pero al elegir también optamos por la consecuencia correspondiente.
Asumir la responsabilidad es una de las medidas que mejor definen el poder y la madurez de una personalidad; Si no
está convencido de ser el creador de su mundo, se halla a merced de las circunstancias, es el objeto y no el sujeto,
la victima.
Aquí una segunda idea poderosa: “Debemos asumir la responsabilidad por nuestras acciones, pase lo que pase”.
Esto requiere Comprometernos (cumplir acuerdos), Con nosotros mismos (que nos genera Confianza, Valor, respeto
propio, Poder, Autoestima) y con los demás (Confianza, Credibilidad, Respeto, Influencia).
Reflexiona sobre esto: ¿Cuál es el valor que le das a tu palabra, contigo mismo, con los demás? ¿Qué % de
promesas cumples más, las que son contigo mismo, o con los demás? ¿Qué te dice el balance, eres demasiado
egoísta, ensimismado en ti, o pones los intereses de los demás por encima de los tuyos?
El poder de comprometernos con nosotros mismos y con los demás nos proporciona la conciencia del autocontrol, y
el coraje y la fuerza de aceptar más responsabilidad por nuestra propia vida.
Nada destruye más rápido la confianza que hacer una promesa y no mantenerla. No deberíamos utilizar la palabra
promesa a menos que estemos totalmente preparados para pagar el precio que conlleve cumplirla.
Aquí dos modos de tomar de inmediato el control de nuestras vidas: hacer una promesa y mantenerla, o establecer
una meta y trabajar para alcanzarla.

Tema para exponer 6/06/2018

 Luis Herrera Barbier  Página 3
Taller: Creación de Imagen y Universidad del Claustro de Sor Juana
Personalidad marzo 2008

Ahora que sabes la importancia de decidir, de asumir la responsabilidad de tus actos y que requieres comprometerte
contigo mismo, revisemos algunas creencias poderosas.
Todo en la vida es neutro, uno les da el significado que quiera, dependiendo que enfocas, en base a eso actúas y por
tanto, construyes tu futuro, así, en vez de tener una Respuesta automática – reactiva, da una Respuesta creativa y
ante cada acontecimiento pregúntate: ¿Qué es lo mejor que puedo hacer?.
Todo ocurre por su motivo y razón, todo puede servirnos, enfocate en encontrar posibilidades y no en los
obstáculos, no hay fracasos, sólo resultados. Por el hecho de vivir, la vida te da un pago: experiencia, usala en tu
favor, ¿Qué intentarías hacer si estuvieras seguro de que no puedes fallar?, ¿Qué harías si no tuvieras miedo?.
La receta del éxito en realidad es muy sencilla: 1.- Tomar conciencia, saber que quieres alcanzar, 2.- Tomar acción,
3.- Ver el resultado obtenido (realimentación), y, 4.- Mostrarse flexible para cambiar si los resultados no son los
esperados, hasta alcanzar el éxito.
Eso si, paga el precio, no hay éxito duradero sin una entrega personal, sin compromiso y perseverancia, la
perseverancia aporta más que el talento, aunque este nunca esta de más.
Por otro lado, uno debe disfrutar el trayecto, ¿Sabes de alguien que haya logrado éxito considerable haciendo algo
que aborrezca?, Así que: “Haz de tu vida un juego”, poniendo la misma vitalidad, reto y desafió de un juego a tu
vida diaria, convierte la vocación en vacación: matrimonio perfecto entre lo que uno hace y lo que a uno le gusta.
Y recuerda, Nuestros mayores recursos son los humanos, un hombre aislado, por brillante que sea, difícilmente
puede rivalizar con el talento de un equipo eficaz que actúe en colaboración.
Solo así podrás alcanzar la madurez, (Proceso de crecimiento secuencial de dentro hacia fuera), pasando del
paradigma de Dependencia (tú cuidas de mí, tú (no) haces lo que debes hacer por mí, yo te culpo a ti), a uno de
Autodependencia (yo puedo hacerlo, yo soy responsable, yo me basto a mí mismo, yo puedo elegir) y
posteriormente a uno de Interdependencia (nosotros podemos hacerlo/cooperar/crear juntos, algo más importante).
Resumiendo:
Si cambias lo que piensas… cambias lo que haces
Entre estimulo y respuesta hay un espacio donde reside nuestra libertad para elegir la respuesta
Asumir la responsabilidad, pase lo que pase
Comprometete, contigo mismo, y con los demás
Todo en la vida es neutro, uno les da el significado que quiera
Todo ocurre por su motivo y razón, todo puede servirnos
No hay fracasos, sólo resultados
No hay éxito duradero sin una entrega personal
“Haz de tu vida un juego”,
Nuestros mayores recursos son los humanos

Y recuerda:
¿Qué harías si no tuvieras miedo?

Tema para exponer 6/06/2018

 Luis Herrera Barbier  Página 4