Corporación Universitaria Minuto de Dios

Maria Fernanda Paredes

Seminario de Psicoanálisis II

Análisis de la película “Un cuento chino” según la lectura “Los laberintos de la

neurosis obsesiva”.

Un cuento chino es una película argentina de comedia dramática escrita y dirigida por
Sebastián Borensztein y protagonizada por Ricardo Darín, Muriel Santa Ana e Ignacio
Huang. Fue estrenada el 24 de marzo de 2011.

Esta película cuenta la historia de Roberto (Ricardo Darín) es un malhumorado

ferretero argentino, quien tiene un frío contacto con el mundo que lo rodea. Lleva a cabo una
vida monótona y pasa el día coleccionando noticias insólitas del mundo publicadas en el
diario, contando los tornillos que compra para comprobar la cantidad y visitando a sus padres
en el cementerio. Cada tanto recibe la visita de Mari (Muriel Santa Ana), una dulce mujer
que vive en el campo, enamorada de él, y con quien tuvo una relación amorosa fugaz en el
pasado.

“La Neurosis es un conflicto entre el yo y el ello, se genera porque el yo no quiere

aceptar aquellas mociones pulsionales provenientes del ellos, por tanto, el yo se defiende
mediante el mecanismo de la represión, esa represión se revuelve contra ese destino y
siguiendo caminos por los que el yo no tiene ningún poder, busca sustituir e imponerse al yo
por la vía del síntoma, el yo al ver la amenaza se produce contra el síntoma de manera similar
a como se había defendido de la moción pulsional originaria, y allí se produce el cuadro de
la neurosis” (Freud, S.1923).

Tomando como referencia al personaje de Roberto, éste presentaba algunas conductas

que podrían considerarse obsesivas como; el contar las puntillas Phillips de la caja para
comprobar que venía la cantidad que mencionaba la caja, cuando esto no sucedía así se
disgustaba y hacia el posterior reclamo porque las puntillas no estaban completas; otra
conducta importante es que él apagaba las luces y se recostaba en su cama todos los días a
las 23 horas puntuales cada noche. Muchos de los fragmentos de la película se encuentra
desayunando siempre lo mismo, pan y té, con el pan sacaba el centro del pan y solo comía la
parte externa del mismo. Cabe mencionar que también tenía una colección de noticias de
periódico, el menciona que colecciona noticias ridículas que salen en los periódicos de todo
el mundo, otro punto a destacar es que no mantienen ninguna relación cercana o afectiva, a
su vez también presenta ciertos rituales como el ir cada sábado al cementerio a visitar la
tumba de sus padres y una colección de ‘porcelana’ de cristal que dejaba en un cajón en cada
cumpleaños de su madre junto con una foto de ella.

Teniendo en cuenta lo anterior es importante mencionar algunos acontecimientos que

posiblemente conllevaron al desnudamiento de la neurosis obsesiva. Roberto se encontraba
enlistado en el ejército y Argentina entro en guerra por tanto Roberto participo en ella y su
rostro salió en el periódico, su padre lo vio y recorto esa sección del periódico y la guardo,
cuando Roberto volvió a su casa, supo que su padre había muerto después de aquella noticia
y se acostó sobre la cama de su padre a las 23 horas en punto, a partir de ese entonces continua
acostándose a la misma hora y coleccionando recortes de noticias de periódicos. Por otro
lado, su madre murió cuando el nació, lo cual evidentemente impidió el conocer a su madre
a su primer amor. Es importante resaltar que en ocasiones en las noticias de amor y muerte
se imaginaba con Mari, pero él no mantenía ninguna relación cercana o afectiva con ella.
Con lo anterior se evidencia como Roberto creo un espacio seguro para sí mismo, con cosas
que seguir para no llevarse alguna sorpresa alguna.

Ahora bien, de acuerdo a Cuesta (2010) en su libro ‘Los laberintos de la neurosis

obsesiva’ “el obsesivo se siente culpable de algo que desconoce, de algo que no ha cometido,
por eso llega a dudar acerca de si no será él el culpable del crimen cuya noticia lee en la
prensa, incluso se acusa de la muerte de todos los muertos del cementerio más próximo a su
casa” Eso se evidencia en Robert, posiblemente en su estructura psíquica se sienta culpable
uno por la muerte de su madre ya que murió al él nacer y dos por la muerte de su padre
después de ver su foto en el periódico en los tiempos de guerra en Argentina, esa culpabilidad
también se evidencia cuando una las noticias estúpidas que le leyó a Junn era realmente lo
que Junn había vivido, se muestra la negación a esa culpa cuando se repite así mismo, ‘no
puede ser, no puede ser (…) alrededor de seis veces.
 “la culpabilidad en el obsesivo se refiere a un goce consumado fantasmáticamente del
cual se castiga sin llegar a la acción”. (Cuesta, 2010) puede ser que la culpabilidad que siente
respecto a la muerte de sus padres, sea la imposibilidad de mantener una relación afectiva
con las personas, y conlleva a contar las puntillas de la caja cada que se sienta mal o la gracia
que le causa imaginarse las noticias amorosas absurdas que terminan en muerte con Mari,
con quien no ha sido capaz de mantener una relación aunque ella sea de su gusto.

Por otro lado, dice Cuesta en su texto “los enfermos de neurosis obsesiva son sujetos que
experimentan impulsos extraños a su personalidad, sujetos que se ven obligados a realizar
actos cuya ejecución no les proporciona placer ninguno pero a los cuales no pueden sustraerse
y su pensamiento se encuentra invariablemente fijo a ideas ajenas a su interés normal. Ideas
que Freud denomina representaciones obsesivas o compulsivas y que pueden carecer de
sentido o bien ser indiferentes para ellos, pero que lo más frecuente es que sean totalmente
absurdas”, por ejemplo, Roberto colecciona porcelana de Cristal que compra en cada
cumpleaños para su madre y las pone junto a una foto de ella, puede que a él esto no le
proporcione un interés o placer alguno, pero posiblemente estos regalos hacia su difunta
madre permita disminuir esa culpabilidad inconsciente que él tiene al saber que su madre
murió por él nacer, viéndolo de esta manera, también la recolección de recorte de noticias es
una forma de disminuir el sentimiento de culpa al saber que padre recorto la foto del periódico
donde el salía y lo guardo, y tal vez por eso el decidió hacer lo mismo con todas las noticias
absurdas para cubrir de algún modo la culpabilidad por la muerte de su padre.

Para concluir y con lo anterior “Distingue Freud entre impulsos, actos y

representaciones. Los impulsos presentan un carácter infantil y desatinado, pero
generalmente su contenido hace vivir bajo un gran temor al sujeto, pues se ve incitado a
cometer graves crímenes de los que huye horrorizado por medio de toda clase de
prohibiciones, renuncias y limitaciones” (Cuesta, 2010), con esto se podría decir que
Roberto tiene una culpabilidad inicial con la muerte de su madre justo después de que el
nació, no se registra como fue su infancia, debió mostrar en su conducta algunos rasgos
obsesivos, y tal vez la muerte de su padre en lo que él estuvo luchado en la guerra, haya
desanudado la neurosis obsesiva (recordando que una estructura no es se modifique, sino
que se compone durante el paso de los estadios en la infancia) y posteriormente los rituales
que sigue diariamente para mitigar la culpa y/o evitar sus pensamientos obsesivos sobre de
que algo podría suceder si no se acuesta a las 23 horas, sino compra cada año la porcelana
de cristal o si no saca el relleno del pan.

Los rituales que él hace diariamente se interpretan como la forma de mitigar la culpa y
de alguna manera de hacer vivir en su colección a sus padres. Se puede suponer que si la
potencia creadora de Roberto está al servicio de la supervivencia e idealización de sus padres
hay en él una angustia psíquica que potencia sus síntomas. Se evidencia la singularidad, el
deseo del protagonista, esa culpabilidad y moral que no le permiten salir de sus circuitos, es
decir esta encapsulado en un síntoma. Esa moralidad se permite ver cuando el imagina un
escena sexual con Mari y termina en una tragedia, estas cosas que lo mantiene a Robert en
su síntoma, hasta que la sorpresa de un suceso que no logra controlar como el llegada Junn a
su vida, lo descontrola y permite que Robert logre llevar su síntoma permitiendo tener una
relación afectiva con los demás.

Referencias:
Bossi, P., Buscarini, J., Herrero, G., Kuschevatzky, A., Odell, B., Besuievsky, M., &
Borensztein, S. (2011) Un Cuento Chino. [Cinta cinematográfica] Argentina.

Cuesta, A. D., & Cuesta, A. D. (2010). Los laberintos de la neurosis obsesiva. Grupo Cero.

Freud, S. (1923). El yo y el ello en Obras Completas, Tomo XIX. Buenos Aires.