You are on page 1of 8

UNIVERSIDAD NACIONAL DE INGENIERÍA

FACULTAD DE INGENIERÍA GEOLÓGICA, MINERA Y


METALÚRGICA
ESCUELA PROFESIONAL DE INGENIERÍA DE MINAS

PRÁCTICA 9
ESTUDIOS DE IMPACTO AMBIENTAL

CURSO: MINERÍA Y MEDIO AMBIENTE


INTEGRANTES:

 Vásquez Ticla, Hanz Yammir


 Chang Barboza, Miguel
 Reyes Coronado, Jorge

DOCENTE:

TUIRO SALVADOR, MARÍA CARMEN

Lima – Perú
Junio, 2018
1.- Indicar en qué casos se presenta un EIA, ¿Qué tipos de Estudios
Ambientales hay que entidades se encarga de evaluar cada una; Que
tiempo se contempla para cada etapa actualmente?

El reglamento de protección ambiental minero, aprobado años antes de que se


dictara la ley del sistema nacional de evaluación del impacto ambiental, señala en
sus definiciones que el EIA debe efectuarse para la realización de actividades en
concesiones mineras, de beneficio, de labor general y de transporte minero. Es
necesario precisar que por su antigüedad el reglamento no identificó categorías de
estudio de EIA.

Específicamente, en el desarrollo del reglamento ambiental se señala que el EIA es


exigible a:

a. Los titulares de actividades mineras que pasen de la etapa de exploración a


la de explotación.
b. El concesionario minero y/o de beneficio que proyecte realizar ampliaciones
de producción en sus operaciones o de tamaño de planta de beneficio
superiores al 50%.
c. El concesionario minero y/o de beneficio que proyecte realizar ampliaciones
de producción en sus operaciones o de tamaño de planta de beneficio y que
cuenten con un PAMA. El EIA se presentará respecto de la ampliación de
operaciones a efectuar.

Inicialmente, las actividades de exploración minera quedaron fuera del ámbito de


regulación del EIA. Posteriormente, en 1998, mediante decreto supremo 038-98-
PCM se estableció que dichas actividades también se sujetaban a la presentación de
una evaluación ambiental, una figura muy similar al EIA, con la diferencia de que
en su reglamentación se excluyó el tema de la audiencia pública en la fase de
revisión por la autoridad.

Con posterioridad, con el decreto supremo 020-2008-EM, se planteó un nuevo


régimen con respecto a las actividades de exploración minera. Estas se clasifican en
dos categorías dependiendo del número de plataformas de perforación, del área
efectivamente disturbada y de la longitud de los túneles a construir. Según la
categoría, se presenta una DIA para la categoría I o un EIA-sd para la categoría II.

TIPOS DE EIA
Según la Ley del Sistema Nacional de Evaluación Ambiental Nº 27446 (2005),
pueden ser:

Categoría I
Para Proyectos Sin impactos ambientales negativos significativos correspondiendo
la presentación de una Declaración de Impacto Ambiental DIA

Categoría II
Para Proyectos con impactos ambientales negativos significativos corresponde la
presentación de un Estudio de Impacto Ambiental Semi-detallado EIA-Sd

Categoría III
Para Proyectos de gran envergadura con impactos ambientales negativos
significativos corresponde la presentación de un Estudio de Impacto Ambiental
detallado EIA-D
2.- Describir las partes que se deben desarrollar para elaborar cada tipo de
Estudio Ambiental de un proyecto minero

El Enfoque Para un Proceso de EIA

El proceso de EIA debe ser considerado como el desarrollo de un conjunto de


actividades dinámicas y flexibles; y por lo tanto, debe ser adaptado a actividades
específicas. En este sentido, esta guía trata de los componentes ambientales
generales y la manera de evaluarlos; enfatizando, que cuando el usuario de este
documento lo considere conveniente puede modificar, seleccionar y añadir a las
pautas generales presentadas en esta guía lo que sea necesario para satisfacer los
requerimientos específicos que pudieran surgir o para adaptarse apropiadamente a
los términos de referencia propuestos por la autoridad ambiental pertinente.

Un proceso de EIA se compone básicamente de los cinco pasos siguientes:

 Establecer las condiciones ambientales existentes


 Identificar anticipadamente los tipos de impactos, utilizando las metodologías
más apropiadas al tipo de proyecto y a su naturaleza
 Estimar la extensión y magnitud de los impactos previstos
 Interpretar el significado de los impactos
 Comunicar los resultados a la autoridad pertinente.
El proceso de EIA requiere una evaluación total, multidisciplinaria e
interdisciplinaria de los impactos ambientales existentes del proyecto propuesto y,
cuando se requiera, de planteamientos de alternativas apropiadas para el proyecto
o sus componentes.

Requerimientos para el Informe del EIA

Los requerimientos para los estudios de EIA se establecen en el Decreto Supremo


016-93-EM (modificado por el Decreto Supremo 059-93-EM), principalmente en el
Anexo 2, Partes 1 y 2.

En atención a lo descrito, el formato del EIA debe contener:

I. Resumen Ejecutivo
II. Antecedentes
III. Introducción
IV. Descripción del Área del Proyecto
V. Descripción de las Actividades a Realizar
VI. Efectos Previsibles de la Actividad
VII. Control y Mitigación de los Efectos de la Actividad
VIII. Análisis de Costo/Beneficio de la Actividad a Desarrollar
De conformidad con el artículo 23 del Decreto Supremo 016-93-EM, se deben
presentar al Ministerio de Energía y Minas (MEM) dos ejemplares del EIA. Luego de
recibido el EIA y/o la ampliación solicitada, el MEM lo revisará dentro de un plazo de
45 días. Si el MEM no emitiera comunicación alguna al proponente del proyecto en
un plazo de 45 días de presentado el EIA, éste quedará aprobado automáticamente.
Evaluación de Impacto Ambiental – Proceso General

3.- Explicar en qué consiste un estudio de línea base, que información nos
proporciona.

Los aspectos a considerar en una investigación de línea base son diversos y en


algunos casos complejos. La importancia de unos y otros variará en función de las
características del proyecto minero y el medio donde se desarrollará. Por ejemplo
no será lo mismo desarrollar un proyecto minero en una árida y remota región
(e.g., Desierto de Atacama; Chile) que hacerlo en un entorno lleno de bosques,
lagos, y vida en general (e.g., Columbia británica; Canadá). De cualquier manera,
aun las regiones más áridas del planeta albergan vida, y en algunos casos pueden
constituir ecosistemas únicos. El que un geólogo o un ingeniero no sean capaces de
reconocer dichos hábitats no significa que no existan, de ahí que resulte vital contar
con otros profesionales, por ejemplo, botánicos, zoólogos, para la realización de la
EIA.
En términos generales, los siguientes son los parámetros que deberá cubrir la
investigación de línea base:

 Paisaje; en términos de importancia relativa, por ejemplo, zonas de


reconocida belleza, tengan o no la categoría de reserva, parque nacional o
regional. En estos últimos casos resulta obvio que la zona tendrá un nivel de
protección a través de la legislación vigente que prohibirá o restringirá las
actividades mineras.
 Hábitat; entendiendo este término como "territorio que presenta unas
condiciones ambientales determinadas y que está habitado por un conjunto
de seres vivos para los que tales condiciones son las adecuadas".
 Suelos; se deberá contar con una adecuada caracterización de éstos, que
permita prever los problemas que puedan derivarse de la infiltración de
efluentes mineros (e.g., drenaje ácido, soluciones cianuradas). Recordemos
que no todos los suelos responden de igual manera a la infiltración de
contaminantes.
 Flora; aquí debemos disponer de un catálogo florístico (listado de plantas),
poniendo especial énfasis en aquellas plantas que reciben una especial
protección por estar en peligro de extinción.
 Fauna; tratamiento del tema equivalente al de la flora.
 Geoquímica de la zona; deberemos conocer las características químicas
del medio, poniendo especial énfasis en los suelos.
 Rocas; la investigación geológica previa generará sin duda abundantes
mapas, sin embargo en este apartado deberemos prestar especial atención a
la fracturación (fallas redes de diaclasas), con vistas a evaluar las posibles
infiltraciones de soluciones.
 Aguas de superficie y subterráneas; aquí hay que determinar una serie
de parámetros:
 Extensión y morfología de cuenca de drenaje (área de la cual una
corriente y sus tributarios reciben agua).
 Las características químicas de los cursos de superficie y lagos.
 Las características químicas de las aguas subterráneas.
 Las variaciones estacionales del nivel freático.
 La productividad de los pozos de agua.
 Usos del suelo; agricultura, ganadería, usos recreacionales, cercanía a
núcleos urbanos, etc.
 Ciencia y cultura; zonas de interés geológico, paleontológico, arqueológico,
antropológico.
5.- Explicar con un ejemplo en qué consiste un plan de cierre, cuáles son
sus etapas, cuando comienza y cuánto dura.

PLAN DE CIERRE DE MINAS

La legislación peruana cuenta desde la década del noventa con un marco normativo
ambiental que busca garantizar un adecuado cuidado del ecosistema al momento
de realizar cualquier actividad minera. Dentro de los componentes de esta
legislación se encuentra los planes de cierre de minas.

Al respecto, el presente Informe Quincenal busca explicar los planes de cierre,


tanto los progresivos como los definitivos, señalando la importancia y necesidad de
cada uno de ellos.

El ciclo de vida de una mina

El aprovechamiento de los recursos mineros pasa por las etapas de exploración,


construcción, operación y cierre. No se avanza a una siguiente etapa hasta no
haber culminado la anterior, siendo la última de éstas el cierre definitivo de la mina
(ver diagrama).

Una mina, además, puede tener varias zonas productivas y diversas actividades
dentro de toda su área geográfica. Cuando una de éstas deja de operar se procede
a su cierre, considerándose dicha acción como un “cierre progresivo”. Así, se puede
observar del diagrama que en paralelo a las etapas del ciclo de vida de la mina se
desarrolla programas progresivos de cierre de la misma.

¿Qué es un plan de cierre?

El plan de cierre es un instrumento de gestión ambiental donde se establecen


pautas a ser efectuadas por el titular de la actividad minera (empresa), a fin de
rehabilitar las áreas utilizadas por éste. Se busca que la rehabilitación alcance
características compatibles con un ambiente saludable, seguro y adecuado para el
desarrollo de la vida. La rehabilitación se llevará a cabo mediante la ejecución del
plan, el cual se establece de acuerdo a las características particulares de la mina.

La presentación de un plan de cierre es obligatoria para toda empresa minera que


se encuentre en operación, inicie operaciones o las reinicie. También es obligatoria
para las empresas que se encuentran en la etapa de exploración, tal como se puede
observar en el diagrama.

Principales características

El plan de cierre de minas es complementario


al Estudio de Impacto Ambiental (EIA) y del
Programa de Adecuación y Manejo Ambiental
(PAMA). Estos planes tienen la estructura que
se detalla en el cuadro adjunto, la cual es
discutida en audiencias públicas y con diversas
autoridades del Estado, como la DIGESA o el
INRENA.

En el caso del cierre temporal, progresivo y


final se debe contemplar el desmantelamiento
de equipos e instalaciones, estabilización de los
residuos y re vegetación de la zona. La idea es
asegurar que no quede ningún rastro de la actividad minera que cause impactos
negativos posteriores al cierre y así proteger la vida humana y hacer un uso
beneficioso de esas tierras.

El plan incluye, además, el presupuesto del cierre, el cronograma de su ejecución y


las garantías respectivas. Las garantías están constituidas por el costo del cierre y
todos los gastos directos e indirectos que se deriven de ejecutarla. La ejecución se
da por incumplimiento del plan, por parte de la empresa minera, y es la Dirección
General de

Minería del Ministerio de Energía y Minas (MEM) el ente encargado de fiscalizar el


cumplimiento, así como ejecutar las sanciones correspondientes.

En el caso de venderse la operación minera, el comprador deberá continuar con la


ejecución progresiva del plan, así como el cierre definitivo y su posterior monitoreo.
El monitoreo post cierre permite verificar el plan de cierre ejecutado.

Primer e importante paso: la elaboración del plan de cierre

Antiguamente no se contaba con legislación ambiental en el sector minero, por lo


que las minas no concebían el cierre y no tenían conocimientos científicos para
mitigar impactos ambientales.

En la actualidad, las normas ambientales indican que todas las empresas mineras
deben contar con un plan de cierre aprobado por el MEM a través de la
Dirección General de Asuntos Ambientales Mineros (DGAAM). Cabe señalar que
dichos planes se volverán más detallados a medida que avance el ciclo de vida de la
mina y que se cuente con una mayor cantidad de información.

Con el cierre de una mina se busca que no quede ningún vestigio de la actividad en
la zona donde se trabajó inicialmente. En síntesis, los planes de cierre son una
manera de evitar el problema de pasivos ambientales mineros, ya que impide la
creación de éstos. Así, un correcto cierre se convierte en una herramienta de
gestión responsable,

You might also like