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Otro de los remedios naturales contra la gastritis son las tisanas de diversas hierbas.
Puedes probar diferentes combinaciones. Una de ellas es la que conforman la menta, el
hinojo y la melisa, empleando una cucharada pequeña de cada una por taza de té.
Anís, comino y tomillo también irán de maravillas, como así también romero, menta y
tomillo. Lo ideal para estas tisanas es que bebas una infusión después de cada comida.
Pero, de todos modos, lo esencial es evitar ciertas cosas que son las que realmente
dañan el estómago si sufres de gastritis: nada de fritos ni alcohol sería el primero de
los pasos, también rebajar el consumo de café y suprimir las especias fuertes. Puedes
consultar además, los remedios caseros para el dolor de estómago.
Ulceras:
Las úlceras estomacales son tremendamente molestas y te dan la sensación que
acabas de comer fuego mientras haces la digestión. Sus ardores son difíciles de
calmar, pero siempre hay remedios caseros y naturales para darte una mano. Aquí te
proponemos algunos.
La infusión de manzanilla puede llegar a ser uno de los más indicados remedios
naturales para las úlceras. Puedes beberla varias veces al día para calmar los ardores.
Es una planta que suele actuar muy bien sobre los problemas estomacales.
La tila (o tilo) puede llegar a andar muy bien para combatir las úlceras estomacales. Lo
indicado es realizar una infusión con la planta y beberla dos o tres veces al día. Es un
gran calmante de esta clase de ardores.
Las crucíferas (todas las plantas de las familias de las coles) pueden resultar más que
bien para esta clase de úlceras, ya que contribuyen a la regeneración de la mucosa
estomacal. En este caso, lo ideal es consumirlas tanto en las comidas como sus aguas
infusionadas.
No deberías dejar de tener en cuenta como remedio natural para la tos a este clásico
preparado de cebolla y limón. Se realiza simplemente machacando una cebolla
mediana de manera bien fina, se le adiciona el zumo de un limón y se coloca todo en
una taza de agua hirviendo, endulzando con miel o azúcar negro.
Uno de los buenos remedios caseros para la tos es recurrir a inhalaciones de vapores
de eucalipto y limón. Estas plantas tienen buen poder sobre este problema, ayudando
a descongestionar y a respirar mejor. Puedes hacerlo poniendo a hervir limones
cortados con hojas de eucalipto.
También puedes tener en cuenta otras plantas contra la tos como lo son el regalíz, el
tomillo, la salvia o la malva. Cualquiera de ellas, preparadas en infusión, quizás
colaboren a solucionar este problema.
Asimismo, si eres de los que padecen tos de manera habitual, este remedio casero
para la tos crónica, compuesto de elementos como el aloe vera, la miel o el limón
quizás te resulte de maravillas.
Repasando rápidamente, nos encontramos con que el choclo o maíz, por intermedio de
sus barbas, puede tener una gran acción depurativa para los riñones, incluso ayudando
a eliminar arenillas, prevenir infecciones, calmar dolores renales y también aumentar
el tránsito urinario. Por ende, no debería llamar la atención si este remedio casero
funcional.
REMEDIOS CON LA MIEL
A partir de la miel se pueden elaborar una gran diversidad de remedios caseros y
naturales con el fin de tratar diferentes afecciones, ya sea de uso interno como
externo. Las características nutricionales de este producto permiten que así sea, y que
puedan aprovecharse sus virtudes para mejorar la salud en diferentes aspectos. Cómo
ejemplo te brindaré 3 de estos remedios:
Como podrás observar la miel es más que un alimento para endulzar las bebidas y/o
comidas. Es un producto con diferentes propiedades medicinales, con la cual se pueden
elaborar un sin fin de remedios naturales y caseros para tratar diversas enfermedades.
Hidratación:
Según la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) es recomendable beber al
menos entre 1,5 y 2 litros de agua por día para mantener niveles de hidratación
adecuados.
Uno de los errores más frecuentes es esperar a tener sed para hidratarse o beber
agua, cuando esto sucede ya se ha perdido entre 1 - 2 % del peso corporal, situación
que puede llevar a problemas de salud.
Es necesario aclarar que esa pérdida de peso corporal es de agua, que rápidamente se
repone bebiendo; de ninguna manera se trata de pérdida de grasa corporal, por lo que
no es una manera de adelgazar.
Por eso es totalmente erróneo colocarse fajas plásticas o térmicas mientras se hace
actividad física para aumentar la sudoración, con la esperanza de quemar las grasas.
Lo único que se logra es perder peso en agua, deshidratarse y aumentar
peligrosamente la temperatura corporal.
La hidratación, antes de la aparición de la sed, es necesaria ya que con la transpiración
no sólo se pierde agua, sino también electrolitos como sodio, potasio y cloruros
compuestos esenciales para realizar reacciones químicas que permiten el buen
funcionamiento del organismo.
¿A qué no sabes que dos vegetales también son excelentes remedios naturales contra
la congestión nasal? Sí. Adivinasteis. El ajo y la cebolla, cuando no. Sus fuertes aromas
y sus innumerables propiedades también ahuyentan a la mucosidad. Hay quienes
recomiendan directamente mascar un diente de ajo, aunque a algunos les resulte un
tanto “salvaje” por el sabor. O directamente poner una cebolla partida al medio en la
mesa de luz mientras dormimos.
Mucho más amable es el aroma de la manzanilla. También con ella puedes preparar
inspiraciones similares a las recomendadas con el eucalipto. Es que es fundamental el
ingreso de vapor caliente para estimular la correcta secreción nasal.
Otra fruta que tiene grandes propiedades para combatir enfermedades y malestares es
el arándano. También es efectivo para contrarrestar la diarrea. Lo más recomendable
es que a la fruta la consumas directamente en forma de zumo mientras estéis
padeciendo los síntomas.
Aunque parezca extraño, la banana pisada es muy buena para combatir la diarrea.
También lo es el té de manzanilla. Y, algunos, aventurados dicen que otro de los
remedios caseros contra la diarrea es el refresco de cola. Sí, como oyes. Pero, claro
está, retirándole antes el gas con una cucharilla, para que no le de más trabajo al
aparato digestivo.
Otro de los remedios caseros contra la colitis es el agua de arroz, un típico “truco de la
abuela”. Para ello debes hervir arroz como para consumirlo blanco, sin sazonar, y colar
el agua de la cocción, reservándola. Esto provocará que no tengas tantas diarreas.