Professional Documents
Culture Documents
VI
La única circunstancia que puede servir de norma para el cambio recíproco de
diferentes objetos parece ser la proporción entre las distintas clases de trabajo que se
necesitan para adquirirlos.
Se ha de tener en cuenta el mayor esfuerzo requerido y el nivel desusado de destreza
o ingenio.
El producto íntegro del trabajo pertenece al trabajador.
La cantidad de trabajo comúnmente empleado en adquirir o producir una mercancía
es la única circunstancia que puede regular la cantidad de trabajo ajeno con que ella se
puede adquirir, permutar o disponer.
Cuando se utilizan vienes acumulados, algo debe abonarse como ganancia del
empresario, el valor de la obra se resuelve en salarios y beneficios.
Cuando la tierra se halla en el régimen de propiedad privada, la renta constituye un
tercer componente del precio de la mayoría de los artículos.
El valor real de todas las diferentes partes que componen se mide por la cantidad de
trabajo que cada una de esas porciones dispone o adquiere.
El trabajo no sólo mide el valor de aquella parte del precio que se resuelve en trabajo,
sino también el de aquella otra que se traduce en renta y en beneficio.
En todo pueblo civilizado las tres componentes entran el precio de casi todos los
bienes.
Componentes: renta para el terrateniente, salarios o sustento de los obreros, y el
beneficio para el colono.
A medida que vaya siendo más elaborada cualquier mercancía especial, la parte del
precio que componen los salarios y el beneficio es mayor que la que corresponde a la
renta.
VII