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207-
221, 2012
JEFFRY S. WADE
Durante el siglo XXI, habrá poco margen de error en la gestión de los recursos hídricos. El
agua dulce disponible equivale a menos de la mitad del 1% De toda el agua del planeta;
El resto es agua de mar, o se congela en glaciares o Hielo polar (Organización Mundial de
la Salud, 2002: 1). Los recursos de agua dulce son desiguales Distribuido en lugar y
tiempo. En la actualidad, aproximadamente 900 millones de personas El mundo carece de
acceso a cantidades adecuadas de agua potable, y más de 2.500 millones Servicios
básicos de saneamiento (OMS / UNICEF, 2010). Combinado con aumentos en La
deforestación, la urbanización, la fabricación, los proyectos de desvío de agua y Industrial,
estas condiciones han contribuido a una situación en la que los Sostenibilidad del agua
para las necesidades humanas y ambientales se está volviendo (Barghouti, 2002). La
incertidumbre se ve amplificada por los efectos potenciales de la Calentamiento y las
necesidades de una población proyectada de más de 9 mil millones de personas (Wolff Y
Gleick, 2000). La carga de la enfermedad resultante de agua insegura, saneamiento e
higiene es sustancial. La Organización Mundial de la Salud (OMS) basa su evaluación del
riesgo Múltiples factores, incluyendo la ingestión de agua insegura, el contacto con agua
insegura, La higiene inadecuada, la mala higiene personal y doméstica y la higiene
Prácticas y manejo deficiente de los recursos hídricos. Además de la diarrea Las
enfermedades, el agua insegura, el saneamiento y la higiene son factores de riesgo La
esquistosomiasis, el tracoma, la ascaridiasis, la tricuriasis y la anquilostomiasis y
Determinantes importantes en una serie de otras enfermedades, como la fiebre amarilla,
la malaria,
© 2011 El autor. Boletín de Investigación Latinoamericana © 2011 Sociedad de Estudios
Latinoamericanos. Publicado por Blackwell Publishing, 9600 Garsington Road, Oxford
OX4 2DQ, Reino Unido y 350 Main Street, Malden, MA 02148, EE.UU. 207
(L 'opez et al., 2007, Hall y Lobina, 2008). El sector privado fue considerado Un
ajuste inapropiado, porque normalmente no se enfoca en temas de pobreza,
subdesarrollo O el medio ambiente (Lobina y Hall, 2003). El énfasis principal de la
Privado está en las relaciones contractuales comerciales y la generación de
beneficios Infraestructura y servicios físicos, y no fomentando la Sentido de la
propiedad sobre un proyecto de agua, o involucrarse con comunidades pobres
Largo plazo de desarrollo (Lobina y Hall, 2003). Aunque la mayoría de los
administradores de agua entienden la importancia de una Sostenible de los
recursos hídricos (Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible Desarrollo,
2002), a finales de los años ochenta, gran parte del debate político se Centrado
exclusivamente en los enfoques orientados al mercado de los servicios de agua.
En 1992, el Conferencia Internacional sobre el Agua y el Medio Ambiente,
celebrada en Dublín, Principios generales de acción para revertir las tendencias
hacia el consumo excesivo, la contaminación Y las crecientes amenazas de la
sequía y las inundaciones. Los informes de la conferencia establecen
recomendaciones Para la acción a nivel local, nacional e internacional, que
colectivamente Principios de Dublín (Conferencia Internacional sobre el Agua y el
Environment, 1992). Estas declaraciones expresaron importantes consideraciones
para el establecimiento de Regímenes de gestión. El Principio 1 reconoció que el
agua dulce es un recurso finito y vulnerable Esencial para sostener la vida, el
desarrollo y el medio ambiente. Principio 2 Subrayó que el desarrollo y la gestión
del agua deberían basarse en una Involucrando a usuarios, planificadores y
responsables políticos en todos los niveles. Principio 3 expresado Comprensión de
que las mujeres desempeñan un papel central en la provisión, gestión y Protección
del agua. El Principio 4 afirmaba que: El agua tiene un valor económico en todos
sus usos competitivos y debe ser visto como Un bien económico. Sin embargo, se
reconoce que, dentro de este principio, Es vital reconocer primero el derecho
básico de todos los seres humanos a tener Agua limpia y saneamiento a un precio
asequible. Falta pasada de reconocer El valor económico del agua ha conducido a
un despilfarro y Perjudiciales del recurso. La gestión del agua como bien
económico es un Una manera importante de lograr un uso eficiente y equitativo, y
de Conservación y protección de los recursos hídricos. (Conferencia Internacional
Sobre el agua y el medio ambiente, 1992) Una lectura contextual del Principio 4
reconocería el papel económico del agua en Con el fin de desalentar los residuos,
pero incluiría una atención Planes y subsidios para dar acceso a un derecho
humano básico. Aunque incluyó Referencia específica a la asequibilidad, en el
debate sobre cómo implementar el Principio 4, Se utilizó una interpretación menos
matizada para justificar las convocatorias de Proyectos de abastecimiento de agua
y saneamiento. Bajo tales enfoques, las comunidades Se espera que asuman un
papel más importante en la exigencia de mejores servicios, Gestión, con una
demanda medida por la capacidad de contribuir con dinero en efectivo, Materiales
(Calaguas, 1999). En los últimos 20-30 años, muchos gobiernos de los países en
desarrollo han Se esforzó por financiar los costos de capital, operación y
mantenimiento del agua y saneamiento Sistemas, incluyendo aquellos asociados
con expansiones ocasionales y rehabilitación. Durante ese tiempo, el creciente
énfasis internacional en los enfoques Problemas sociales y medioambientales, y la
aparente inevitabilidad de la globalización Un nuevo examen del potencial del
sector privado para asumir esas responsabilidades.
Las ventajas percibidas por el sector privado en lo que respecta al acceso al capital y al
servicio Eficiencia parece prometer que podría reducir los costos al tiempo que aumenta
la calidad del servicio Y cobertura. Aunque por lo menos un estudio del Banco Mundial
demostró que no El sector privado frente al sector público en la provisión de servicios de
agua (Estache et al., 2005), estas percepciones y un énfasis generalizado en los enfoques
basados en el mercado Para resolver problemas relacionados con el desarrollo durante
este período, estimuló un Interés en la transferencia de estos servicios al sector privado
(Beecher, 1999, Thompson, 2001). La privatización y las asociaciones público-privadas se
debatieron El Foro de La Haya sobre la Seguridad del Agua (Declaración Ministerial de La
Haya, 2000), Conferencia Internacional de Bonn sobre el Agua Dulce (Conferencia
Internacional de Agua dulce, 2001) y la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible
(Cumbre Mundial Sobre Desarrollo Sostenible, 2002). En general, la privatización se
refiere a la "transferencia de algunos o todos los Operaciones de los sistemas públicos en
manos privadas. Hay muchas maneras de privatizar Agua, incluida la transferencia de la
responsabilidad de operar una entrega o tratamiento de agua, La transferencia de la
propiedad de activos físicos junto con las responsabilidades operacionales, O incluso la
venta de activos no físicos como los derechos de agua a empresas privadas "(Wolff
YHallstein, 2005: 11). De las cuatro categorías generales de privatización, la privatización
total Es menos común, porque la entidad corporativa debe asumir la responsabilidad total
del proyecto. Las asociaciones parciales del sector privado incluyen todas las situaciones
en las que la responsabilidad se comparte Entre el sector privado y el sector público a
través de una de varias formas contractuales Como contratos de servicios y de gestión,
contratos de arrendamiento o concesiones. Multinacional Empresas a menudo utilizan
estos arreglos contractuales para actuar a través de Filiales. Los modelos cooperativos
suelen adoptar la forma de una Sociedad anónima, combinando la propiedad pública y la
operación con los principios empresariales. Están sujetos a las regulaciones que controlan
otras compañías, pero la mayoría De las acciones son de propiedad pública. La provisión
del sector informal involucra recursos locales, de pequeña escala Operaciones que
tienden a ocurrir en países de bajos y medianos ingresos. Los más comunes Forma de
participación del sector privado, en términos de número y tamaño de la inversión,
Concesión (Budds, 2000). Los esfuerzos para privatizar los servicios de agua se basan en
varios argumentos que Eficiencia, conocimientos especializados y acceso al capital, en
comparación con las entidades públicas, con Inversiones que mejoren el acceso y la
disponibilidad, especialmente en las zonas rurales. Eso También se argumenta que los
contratos privatizados pueden incluir incentivos contractuales para Mejor rendimiento y
servicio, y que las tarifas de los usuarios alienten un uso responsable De recursos
escasos (Budds y McGranahan, 2003; Webreck, 2005). Hay argumentos igualmente
poderosos contra la privatización. La privatización fomenta Una perspectiva fragmentada
sobre cuestiones interconectadas. Una crítica esencial es que Puede que no sirva a las
comunidades subrepresentadas donde sea necesario los gastos de capital No son
rentables; Esto es particularmente preocupante en el mundo en desarrollo. Como
resultado, La privatización también corre el riesgo de no proteger los derechos básicos del
agua y el saneamiento. Los monopolios naturales producidos por la privatización tienden
a sobreprecio y subproducción, Lo que empeora las desigualdades económicas y la
asequibilidad del servicio de agua. Las empresas Las entidades que son elegidas para
administrar servicios privatizados al público normalmente son aversas A la participación
pública en el desarrollo de políticas y prácticas. Como sus beneficios son Directamente
afectados por la venta del recurso, los proveedores de agua privatizados a menudo El
potencial de la eficiencia del uso del agua y otras estrategias que ahorrarían dinero para
Consumidores. Los proveedores de servicios privatizados también tienden a ignorar los
impactos en los ecosistemas y
Parte de jh0nj
Jeffry S. Wade
La toma de decisiones equilibrando las consideraciones sociales, ecológicas y
económicas. Sin embargo,
Probablemente ninguna otra política o herramienta es tan importante para
promover la asignación equitativa como es
Una participación pública plenamente comprometida e informada.
A muchos niveles, las partes interesadas carecen a menudo de los conocimientos
y
Participación efectiva en el establecimiento de metas y políticas, por lo que la
creación de
A garantizar la participación continua e informada de las partes interesadas.
Importante
Las categorías incluyen la educación y la sensibilización sobre el agua; recursos
de información
Para la formulación de políticas; Regulaciones y cumplimiento; Infraestructura
básica; Y la estabilidad del mercado.
Parte del proceso es garantizar la disponibilidad de información y
La capacidad de utilizarlo para formular políticas y predecir las respuestas. Esto
requiere suficiente
Comprensión de los aspectos hidrológicos, biofísicos, económicos, sociales y
ambientales
Características de una cuenca para permitir que se tomen decisiones informadas.
También
Requiere cierta capacidad para predecir las respuestas más importantes de un
sistema a los factores
Tales como descargas de efluentes, contaminación difusa, cambios en el uso
agrícola o de otro tipo de uso de la tierra
Prácticas y la construcción de estructuras de retención de agua. Como ejemplos,
el drenaje de
Los humedales o la canalización de arroyos con fines agrícolas tendrán efectos
drásticos
Sobre la retención de agua y los niveles de agua subterránea; La limpieza de
tierras para la agricultura
Contaminación de sedimentos en las vías navegables cercanas, a menos que se
tomen
Las vías navegables. Es responsabilidad del gobierno y de los administradores del
agua construir
Estas capacidades en las comunidades interesadas.
En general, la GIRH tiene pocas posibilidades de éxito sin el apoyo del gobierno
central
Mediante la creación y mantenimiento de un entorno propicio. El papel de los
Gobierno debe ser uno de liderazgo, para facilitar y coordinar el desarrollo
Y la transferencia de competencias y prestar asistencia en la prestación de
asesoramiento técnico y
Apoyo financiero a grupos locales e individuos. Acuerdos institucionales
apropiados
Pueden ser necesarios para asegurar una colaboración interdepartamental eficaz.
En lugar de
Permitir a los organismos y departamentos llevar a cabo la planificación y la
reglamentación de
Actividades aisladas, un análisis institucional cuidadoso y una modificación
pueden
Compartir la información y aumentar el potencial de los proyectos con licencia
para
Recursos.
Una obligación estrechamente relacionada de los gobiernos centrales es asegurar
una
financiación. Debe haber un compromiso claro ya largo plazo del gobierno para
proporcionar
Financiero y de recursos humanos. Los compromisos presupuestarios generales
Cuando los mercados del agua y del saneamiento son viables, y cuando hay
Reinversión en el sector. Donde sea necesario, las decisiones de inversión y
reinversión
Deberían centrarse en la adopción de las mejores tecnologías y prácticas
existentes, incluida la
Instrumentos Foros multipartitos y consensuados para la GIRH deberían
Evitar las soluciones de denominador común más bajo a través de la adhesión a la
mejor gestión
(BMPs) y las mejores tecnologías disponibles (BATs) que se adaptan a las
necesariamente.
Las estructuras de gestión también deberían incluir la consideración del costo total
de los
Complementado por subsidios específicos. La expresión de este principio, sin
embargo,
Debe dar prioridad a los intereses de los pobres, que podrían no ser
suficientemente
Protegido, incluso con un sistema de subsidio asociado (Walker et al., 2000).
Cuando se aplica
En su sentido más estrecho, este principio puede entrar en conflicto con el
principio de que el agua es una
Beneficio y un derecho humano (International Water Association, 2002).
La aplicación de los principios de la GIRH requerirá nuevas formas de
"gobernanza del agua"
Como requisito previo para la construcción de servicios de abastecimiento de agua
y saneamiento.
La gobernanza, como término, implica la manera en que la política de asignación y
regulación
© 2011 El autor. Boletín de Investigación Latinoamericana © 2011 Sociedad de
Estudios Latinoamericanos
214 Boletín de Investigación Latinoamericana Vol. 31, No. 2