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Ensayo de Filosofía

¿Qué es un Pueblo
Originario?

Alumno: Jean Guicharrousse Gutiérrez


III°A

Profesor: Hery Abalos


Introducción.
En el siguiente ensayo se dará a conocer una postura personal en torno a la pregunta que
está dentro del título de este escrito: “¿Qué es un Pueblo Originario?”; en el cual
obviamente siempre se deberá mantener una coherencia y claridad al momento de
explicarla.

Esta pregunta se puede abordar desde distintas maneras que pueden ir desde los libros
de Historia, la perspectiva contemporánea sobre Qué es un Pueblo Originario (y
quienes los integran).

Tesis.
Los argumentos que se entregarán en este escrito giran en torno a la siguiente
problemática:

“¿Realmente les damos el respeto que se merecen a nuestros Pueblos Originarios?”

Se abordará desde la perspectiva contemporánea y los libros de Historia

Argumentos.
Hay múltiples razones para decir que si y a la vez que no les damos el respeto que se
merecen a nuestros pueblos originarios, porque todo esto parte con los periodos
precolombinos.

Esto muchos podrían no saberlo debido a que no se menciona frecuentemente dentro de


los salones de clases que con muchas personas de mi edad frecuentamos, todo parte con
la Expedición de Hernando de Magallanes en el año 1520 en la cual se descubrió las
costas de la Patagonia y Tierra del Fuego (Habitadas por los hermanos Tehuelches o
Aónikenk) y ocurrió el contacto entre un Pueblo Originario chileno y las expediciones
Españolas (Destáquese que la expedición de Magallanes fue la primera proveniente
de Europa en llegar a lo que actualmente es territorio de Chile)

Obviamente después sus expediciones sucesoras fueron las de Diego de Almagro (1536)
y Pedro de Valdivia (1541), esta última catalogada como la más “exitosa”.

Desde el periodo llamado “La Conquista” (la cual fue iniciada por Valdivia en 1541)
se iniciaron los atropellos hacia nuestros pueblos originarios, los hermanos Pehuenches
precisamente. Se les arrebató su identidad con múltiples acciones, la cristianización en
la cual se les quitaba su identidad, el llamarlos “Araucanos” palabra procedente del
quechua awqa, "salvaje", "indómito" (el cual los representaba bastante) que también en
ciertos contextos llega a significar “enemigo”, las profanaciones a sus bosques sagrados
en los cuales protegían al Pehuén (también llamada Araucaria Araucana). Durante
años se realizaron múltiples atropellos hacia sus calidades de Seres Humanos,
prácticamente tratándoseles como si fuesen criminales de la peor calaña (lo cual es
irónico debido a que los españoles que llegaron a Chile lo eran) o animales con el peor
trato a recibir. Se escribieron decenas de decretos por parte de la corona e iglesia
española en los cuales se obligaba a tratar con mayor humanidad a los indígenas, lo cual
casi nunca se respetó (siempre se encubrían los maltratos).

En la actualidad por parte de los gobiernos más actuales (1973-2018), las tierras que
siempre les han pertenecido desde su existencia en la Tierra han sido vendidas por el
Estado de Chile a las forestales Europeas (¿Qué irónico no?) entregándoles concesiones
bastante largas en donde muchas veces fueron talados sus árboles sagrados hasta el
punto de dejar sumamente reducida su población forestal. En los últimos años guerrillas
como la Coordinadora Arauco-Malleco (CAM) han intentado recuperar las tierras que
les pertenecen (sus integrantes son todos Mapuches) a través de múltiples maneras que
van desde la quema de las forestales hasta armar sus bases de operaciones dentro de las
tierras de sus árboles sagrados (los cuales les han concedido el permiso de estar allí,
obviamente una creencia religiosa nativa de ellos). El Estado de Chile ha respondido a
todos estos intentos de recuperación prácticamente “militarizando” la Región de la
Araucanía demostrando el gran abuso de poder que cometen las fuerzas armadas de
nuestro país, van desde simples detenciones hasta prácticamente (y sin escrúpulo
alguno) disparar a quemarropa a los hermanos mapuches u obligando a niños pequeños
de esa etnia a quitarse sus ropas en medio de las frías temperaturas para realizar los
controles de identidad correspondientes ; en simples palabras se les trata de terroristas
por reclamar sus tierras.

Desde el año 1541 hasta estos años más recientes no se les han entregado el respeto y
admiración que merecen, nosotros los mestizos (eso es lo que somos, una mezcla entre
Europeos y nuestros Pueblos Originarios) deberíamos todos dejar estas actitudes
arribistas en las cuales al “Chileno Promedio” literalmente le afecta el color de piel
sintiéndose superior como si fuesen simpatizantes de las ideas del susodicho Partido
Nacionalsocialista Obrero Alemán (Conocido popularmente como “Partido Nazi”), si
se compara con otros países prácticamente Chile está sumamente lejos de ser un país
desarrollado, debido a que los países dentro de esta categoría tienen sumamente
protegidos a sus Pueblos Originarios y sus sagradas tierras al punto de siempre
considerarlos una gran prioridad al momento de hablarse de forestales, mineras que
empiezan a instalarse en esos países.
Síntesis.
Para ir sintetizando este texto tristemente hay más factores negativos que positivos (los
cuales son pocos). Hasta en el momento en que se termina de escribir este ensayo se
sigue en el mismo círculo de señalar a los Pueblos Originarios como seres primitivos
que no tienen derecho a vivir en paz, como terroristas, en una Región de La Araucanía
militarizada por el Estado Chileno e incluso presencia de Campañas electorales en las
cuales se promueve un descarado apoyo al uso de Fuerzas Militares contra el pueblo de
los hermanos Mapuches.

Tristemente los pocos factores positivos que existen son la presencia de agrupaciones
como la CAM y Organizaciones No Gubernamentales que entregan todo su apoyo
económico y moral a esta lucha que el Pueblo Mapuche ya lleva 477 años sin terminar,
su único deseo es recuperar sus tierras y nada más.

Conclusión.
En la tesis señalada al principio, cito:

“¿Realmente les damos el respeto que se merecen a nuestros Pueblos Originarios?”

Se refiere a una duda que tiene tantos factores negativos como positivos de los cuales el
propio conquistador de en ese entonces y el chileno han sido culpables: El que cada día
las identidades indígenas vayan desapareciendo e incluso destruidas por los propios
estereotipos.

A modo personal me hago la siguiente pregunta: ¿Habrá alguna manera de cambiar toda
esta situación?, ¿El Estado podrá abrir los ojos de una vez?, ¿La gente tomaría
consciencia de la gran pérdida cultural y natural que estamos perdiendo?, ¿Las empresas
forestales tomarían algo de consciencia? Esa pregunta quizás nunca llegue a tener
respuesta, al menos por ahora mientras no se avance.

Jean Guicharrousse Gutiérrez

Alumno Colegio Humberstone, Iquique, Chile.

*(Destáquese que a los pueblos se les menciona como “hermanos”, todo somos seres
humanos, no hay como negar que somos iguales independiente de nuestro color de
piel)*

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