You are on page 1of 14
NUESTRO VATICINIO Y¥YSUCEDIO NOMAS -“CUARTA DIMENSION’’ FUE EL UNICO MEDIO PERIODISTICO QUE ANTICIPO EL ATENTADO DE RONALD REAGAN EN ESTE NUMERO LO REITERAMOS CON MAS INFORMACION EDITORIAL « LA EXISTENCIA et DE VIDA EN OTROS PLANETAS Hace unos dias lel esto: “La Te Tierra ys terrestres que el garrollo de una Inteligencia Superior ha sido, en nuestro Planeta, un fendmeno natu- ral y continuo; y no la conse- cuencia del azar o de cir- cunstancias excepcionales; en ese sentido, cal brotes de inteligencia mayoria de los lugares de de un modo y oro, duzca la vida”. Estas palabras dichas en la década del 70 serén quizé incansablemente_repetidas en los préximos aftos, en for- ‘ma muy natural y cotidian: pero no eran ni remotamente pronunciadas hace tiempo atras; los cientiticos pensan- do o hablando sobre la posi- bilidad de vida en el Univer- so, siempre reaccionan con negaciones totales 0 absolu- tas asi como con un escepti cismo muy terminante y defi- nitivo. Qué ha pasado? Esas palabras que lel las dijo, nada menos que el-pro- fesor FRANK DRAKE, del Centro Nacional de Astrono- mia de la Universidad norte- americana de Cornell que agregé més adelante, afir- maciones como ésta: “La in- teligencia es el nico medio eficaz de permanecer con vi- da, de imponerse como ser o entidad; sélo subsisten o evolucionan las especies més aptas, las més inteli- gentes (as! terminaron los di- nosaurios); lo mismo fque sucedié aqui puede ocurrir en otros planetas, otros siste- mas estelares, otras gala- xias, otras constelaciones; no cabe mas remedio que pensar que donde hay vida, debe haber inteligencia”. Palabras, conceptos, que munes; pero ahora, hoy; no son de ayer y menos de ante- ayer. ¢Por qué ese cambio tan drdstico y total en el pen- samiento dogmatico cientifi- co? La Ciencia-Ficcién gasté millares de letras de molde, paginas de libros, peliculas, etc. abarcando siempre el te- ma de la posibilidad de vida extraterrestre; ipa siempre se la creyé ficcién, literatura, no realidad; salvo honrosisi- mas excepciones muy poco se /a tomé en serio, desde ef punto de vista de ciencia pu- fa; eran y son, aun para muchos de nuestra contem- poraneidad, fantasias, i venciones, imaginaciones, elucubraciones, del ser hu- mano, siempre proclive a abrir Su mente a “mas alld de Ja realidad circundante”’. Pe- ro ahora, no; hoy dia, el cuen- tista de Ciencia-Ficcion es tomado como un hombre “que se anticipa a los tiem- pos”, se piensa en estarama de la literatura como NOVE- LISTICA DE ANTICIPACION, y ya esta ultima palabra estd indicando otro concepto, otra realidad; el cuento, la novela de SCIENCE FICTION son temas del futuro, hechos coneretos del porvenir. cA qué se debe este giro publi- Co, y mucho mas de la orto- doxia, por la aceptacién de vida extraterrestre? FRANK DRAKE expresa que “la disposicién anatémica resulta de /a inteligencia su- perviviente y triunfante, y que, por eso mismo, si hay seres inteligentes en otros sistemas, se parecen o se parecerén algun dla a no- sotros, los humanos;una ma- no, debe permitiries manejar armas, con las cuales defen- tuertes; una cabeza debiera coronar el cuerpo para otear of horizonte, y divisar al “enemigo”; en la cabeza de- be tener dos ojos porque /a visién binocular es mas ven- tajosa; la boca deberé estar cerca de Ja vista para ver lo que se come; solo la nariz podrla eventualmente faltar, aunque existe en todos los animales, con formas dife- rentes. Los extraterrestres pueden o deben o tienen, que ser similares a nosotros; punto de vista, que en épo- cas anteriores, ‘‘no fun- cionaba”; ni por supuesto, se pensaba; Giordano Bruno y Galileo Galilei, supieron de “intolerancias" y represa- lias, ante pensamientos “audaces”, conceptos que estaban mas alla de realida- des conocidas. éQué ha pasado? ¢Por qué ese vuelco ideolégico? Lo que antes se negaba siste- maticamente, hoy se afirma con real y auténtica certeza. El grande motivo, el mas amplio, por supuesto, es la apertura cientitica de nuestro tiempo, con los ulti: mos hallazgos dentro de nuestra civilizacién tecnoldgi- ca. Por ejemplo, los hallazgos de moléculas, divididas en 10, 11.0 12 &tomos dentro de Jas nubes que flotan entre los cuerpos celestes, y que pueden compararse a las del organismo humano; des- cubrimiento de una de las grandes ciencias de la ac- tualidad, desconocida hace unos aflos, y que es la RA DIOASTRONOMIA, la que frecuenta a esas grandes pa- rabolas de metal que rodean todo nuestro Planeta, y que indagan permanentemente nos suenan conocidos, co-___derse de otros seres més —— el Espacio Exterior. existencia de “esa vi- da” en la materia diluida de esas nubes, en un medio tan hostil y dif cil, como es el es- pacio interestelar, hace pen- sar indudablemente que la existencia de vida extra- terrestre es mucho més pro- bable de /o que pensamos. Lo mismo sucede ante los 17 metegritos carbonosos, que el Dr. Cyril Ponamperuma analiz6 para encontrarse de cara a una gran verdad: en esos cuerpos celastes habla aminoacidos, estaba alli el acido dixodiribonucleico, el fundamento de nuestro exis- tir, y de nuestro deambular terrdqueo. Las cépsulas espaciales norteamericanas 0 rusas han encontrado también en “atmosteras” 0 suelos pla- netarios extraterrestres, al AGUA, y también al OXIGE- NO; sabemos por nuestro de- sarrollo histérico planetario que a través de distintos me- canismos se han formado grandes cantidades de molé- Culas organicas que contor- man posteriormente fos pri- mitivos seres vivos, de hace 4000 millones de afios; esa materia organica primigenia permitié el advenimiento de otros organismos mas | complejos, capaces de pro- ducir oxigeno por fotosinte- sis, formando entonces | méstera; reconocemos y aceptamos que todos Ios of- ganismos multicelulares tienen’ ‘necesidad” de oxl- geno, y no viven ni evolu- cionan sin él; éste surge y es- 14en el agua, por lo tanto sin este elemento, no existe vi- da, al menos como nosotros la conocemos. También sabemos que la vida-vida puede adaptarse a muy dispares condiciona- mientos y contornos; el ser humano que vive en el Al- tiplano boliviano 0 en la An- tartida; en el t6rrido Congo africano o en las heladas nieves de! Himalaya 0 Acon- cagua, es un permanente ejemplo de esa adaptabili- dad; as! también algunos or- janismos vivos “aceptan” jos 90 0 95 grados de tempe- ratura, y siguen viviendo; to- do ello quiere decir que en la inhospitabilidad dél Univer- . 80 todo, como en su misma inmensidad, debe haber ne- cesaria como seguramente muchos, pero muchos, focos de vida. El hombre de la actualidad tiene la seguridad y certeza que hay vida extraterrestre; Jos mas encarnizados ene- migos de esta idea, los cien- tificos ortodoxos, la aceptan en su gran mayorla; pocos quedan ya en el rincén de aquel escepticismo del pa- sado, tan cercano; por eso este mismo FRANK DRAKE, desde su atalaya de la radio- astronomla, se anima a ha- cer aseveraciones audaces, como légicas, razonables, y con conocimiento de causa. Este profesor Drake es el autor de! “Mensaje a las Estrellas”, aquella imagen televisada enviada en los pri- meros aflos de la década del 70, donde se contaban los hechos més salientes de la civilizacién terrestre, me- diante sefiales radiales su- mamente potentes, tratando de agotar las millones de combinaciones posibles entre estrellas y trecuencias radiofénicas, porque...exis- ten 400 mil millones de siste- mas planetarios dentro de una galaxia, Hamada Via Lactea, a quien a su vez hay que multiplicar por cien mil millones. de galaxias, aumentada por las muchas frecuencias radiofénica: que son posibles de emitir, como recibir; pero también, como dice Drake, “en 1960 me cost6 dos meses en- contrar dos estrellas para ef envio de un solo canal; hoy los nuevos adelantos tecno- légicos me pueden permit dar con esas mismas estrellas en centésimas de segundos”. Todo hace indicar que es- ta “creencia” en /a existen- cia de vida més alld de nuestro Planeta Tierra, y es- te movimiento de ideas co- mo filosotico, nos hace ubi- car dentro de un contexto universal, ese mismo del “NO ESTAMOS SOLOS” y nos permitiré llegar al siglo XX, dentro de escasos 20 afos, al CONTACTO; al en- cuentro tan esperado con una civilizacién extra- terrestre, que para nosotros, los que aceptamos no solo a Ja ciencia oficial sino que in- vestigamos en las paracien- cias (las ciencias tu- 1a, las ciencias del futuro) puede estar mucho mas cer- cano de lo que suponemos; esa realidad de ja ovnilogia, de fa parapsicologla, del esoterismo, que vivimos en la actualidad, tiene cada vez més connotaciones con una etapa futura, que se precipi- ta para casi ser simulténea con lo presente; un presente- futuro, que es un hoyo un va. El dia que lleguemos a la HORA CERO DE NUESTRA HUMANIDAD, como Io veni- mos pregonando hace mas de veinte afios en la investi- gacién, como en estas agi nas desde hace casi una cada, nos va a enfrentar con un tesoro de conocimientos, hechos y filosofias, que ni si- quiera podemos ‘imaginar actualmente; pensamos que LA REALIDAD SUPERARA LAS IMAGINACIONES MAS INALCANZABLES. Y lo curioso, que este pen- samiento nuestro, que tozu- damente venimos sefalando desde hace tanto tiempo, ahora se ha hecho carne en muchos cientiticos, en aquellos, frenéticos ortodo- xos que no visiumbran esta enorme posibilidad humai como existencial; las nuevas ciencias, como la Radio- astronomia, la Electrénica, Ja Cibernética, etc., etc., nos estan sumergiendo paulati- na como trenéticamente, en un mundo inso: ado ha- ce muy pocos afios atrés. El Hombre, el pequefto ha- bitante dei Planeta Tierra, empieza a dimensionarse en Ja realidad césmica, en su encuentro definitivo con ef Universo; ese entrentamien- to (sin agresién) que buscé desde el surgimiento de la vi- da en este esferoide corpuscu- Jo planetario de un sistema planetario, llamado Solar. GRACIAS POR ESTAR.* St:

You might also like