You are on page 1of 34

Ciencias Económicas 28-No.

1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521

Competitividad, Especialización y Mercado Laboral


en el Cantón de Pérez Zeledón: Un Análisis
de Economía Regional

Rafael Arias Ramírez.1


Leonardo Sánchez Hernández 2

ÍNDICE DE CONTENIDO

Resumen . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 170
Summary. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 170
Introducción. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 170
1. Generalidades del cantón de Pérez Zeledón . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 171
2. Aspectos Teóricos y Metodológicos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 172
2.1. Coeficientes de Localización Económica. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 172
2.2. Análisis shift-share y dependencia espacial.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 173
2.2.1. Análisis Shift Share Clásico (MC). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 174
2.2.2. Críticas al modelo Shift-Share. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 175
2.2.3. Modelo Esteban-Marquillas (ME-M): Introducción
el empleo homotético. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 176
2.2.4. Matriz de Pesos Espaciales y Autocorrelación Espacial . . . . . . . . . . 177
2.2.5. Shift-Share Espacialmente Modificado (MME). . . . . . . . . . . . . . . . . 178
3. Aplicación del modelo de coeficientes de Localización Económica
y Shift Share a las subregiones de Costa Rica. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 179
3.1. Unidad de estudio. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 179
3.2. Bases de datos consultadas. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 179
3.3. Limitaciones de las bases de datos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 179
3.4. Soluciones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 180
3.5. Metodología para estimar la matriz de pesos espaciales utilizada
ara las variantes del modelo Shift-Share . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 181
3.6. Estimación de la I de Moran para Costa Rica. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 184
4. Principales resultados del modelo de coeficientes de localización económica. . 187
4.1. Perfil económico de Pérez Zeledón. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 188

1 Especialista en economía del desarrollo y economía 2 Economista de la Universidad de Costa Rica, espe-
regional; doctor Universidad de Minnesota, USA, cialista en economía espacial y economía del desa-
profesor Escuela de Economía, UNA, e investiga- rrollo. Investigador del Instituto de Investigaciones
dor del Instituto de Investigaciones en Ciencias en Ciencias Económicas (IICE) y del Programa
Económicas, UCR. de Desarrollo Urbano Sostenible (PRODUS),
Universidad de Costa Rica.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


170 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

5. Principales resultados del modelo: Cambio en la participación del empleo


(Shift-Share) espacialmente modificado. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 193
5.1. Subregión San Isidro: Descomposición del Efecto Locacional. . . . . . . . . . 194
5.2. Análisis subregional comparativo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 194
6. Conclusiones. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 197
Bibliografía. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 198

RESUMEN

El artículo que aquí presentamos es resultado del estudio de caso de la economía local
de Pérez Zeledón y forma parte de la investigación que en economía regional hemos
venido realizando en el Instituto de Investigaciones en Ciencias Económicas (IICE)
desde el año 2005. En este estudio aplicamos una serie de instrumentos técnicos,
propios de la economía regional, para identificar los grados de especialización
y competitividad de la economía de Pérez Zeledón, utilizando coeficientes de
localización. Para el análisis del mercado laboral se hizo uso del modelo Shift-Share,
el cual permite determinar el cambio en la participación del empleo espacialmente
modificado y descomponer el crecimiento del empleo en cuatro efectos: el efecto
nacional, el efecto sectorial, el efecto regional o competitivo y el efecto “locacional”.

PALABRAS CLAVE: Competiti v idad, Especialización, Mercado L aboral ,


Coeficiente de Localización, Dependencia Espacial, Economía Regional.

ABSTRACT

This article we present results from the case study on the local economy of Pérez
Zeledón and is part of the research program in regional economics that we have been
conducting at the Institute for Economic Research (IICE) since the year 2005. In this
study we applied a series of instruments for the analysis in regional economics to
identify levels of specialization and competitiveness of the economy of Pérez Zeledón
by using coefficients of localization. Regarding the analysis of the labor market we
applied the Shift Share model, which allows determining change in the participation
of employment spatially modified and dividing employment growth in four effects: the
national effect, the sectorial effect, the regional effect and the location effect.

KEY WORDS: Competitiveness, Specialization, Labor Market, Coefficient of


Location, Spatial Dependence, Regional Economics.

Introducción generadoras de empleo de esta subregión, así


como el grado de especialización productiva y las
Este trabajo de investigación tiene como ventajas competitivas de las distintas actividades
objetivo principal identificar la estructura y diná- que se desarrollan en la misma.
mica productivas de Pérez Zeledón (subregión San El estudio se realiza para el periodo com-
Isidro) y facilitar así el diseño y aplicación de polí- prendido entre mediados de los ochenta y prin-
ticas públicas y privadas, tanto a nivel local como cipios de la presente década. Primero, se esti-
nacional, para el desarrollo del cantón, tomando man los coeficientes de localización industrial
en consideración sus propias particularidades. para el cantón, con el propósito de localizar
Para ello se realiza un análisis de las característi- las principales actividades económicas que se
cas de localización de las actividades económicas desarrollan en Pérez Zeledón. Luego se hace un

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 171

análisis de ventajas competitivas por activida- piña, que ha generado empleo pero no pequeña
des económicas en esta subregión comparada propiedad o pequeños empresarios.
con las otras subregiones del país. La economía del cantón de Pérez Zele-
Posteriormente, se analiza el cambio en dón presenta una escaza diversificación de sus
la participación del empleo en el cantón de actividades productivas, lo cual ha limitado las
Pérez Zeledón, mediante el análisis Shift Share posibilidades de desarrollo para sus habitantes
espacialmente modificado, lo cual permite iden- y un mejor aprovechamiento de los recursos
tificar en cuales actividades económicas el can- naturales y humanos con los que cuenta. Para
tón presenta ventajas competitivas y grados de alcanzar lo anterior se requiere, además de
especialización. reconocer los recursos naturales y humanos
existentes, identificar, localizar y promover las
actividades económicas en las que el territorio
1. Generalidades del cantón cuenta con potencial, para mejorar la especiali-
de Pérez Zeledón zación y competitividad de su economía.
Aspectos como la seria crisis de los pre-
El cantón de Pérez Zeledón es una zona
cios del café y la presencia previa de emigrantes
de colonización relativamente reciente y rápida,
de Pérez Zeledón en Estados Unidos son dos
ocurrida en los últimos 70 años que lo enfrentó
factores importantes en el gran aumento de
pronto a los límites físicos y ambientales de una
la emigración a ese país. Sin embargo, no se
zona muy montañosa, de altas pendientes y
puede dejar de lado, la importancia que tiene
precipitaciones.
en ese fenómeno el agotamiento de la frontera
San Isidro del General, es la principal
agrícola en las montañas del cantón, la degra-
ciudad de Pérez Zeledón, la cual a su vez es la
dación de los recursos naturales en la misma
capital de la Región Brunca. Esta concentra
zona y las dificultades para que los pobladores
la mayoría de oficinas regionales del gobierno
central y del sector privado aunque está algo rurales puedan sobrevivir como empresarios
alejada de los núcleos urbanos de los otros cinco independientes. Esto último se debe ligar tam-
cantones. De acuerdo con el censo del 2000, la bién con el espíritu emprendedor de muchos
población de toda la región alcanza casi los 300 de los habitantes del cantón, hijos y nietos de
mil habitantes y Pérez Zeledón representa más colonizadores.
del 40% del total regional. Este cantón se ha convertido en el prin-
El distrito de San Isidro del General es cipal centro de aglomeración y desarrollo de la
una de las ciudades más importantes del país, no región Brunca. Esta región se caracteriza por
solo por ser el centro principal de la subregión ser una de las regiones con menor desarrollo
que lleva el mismo nombre, sino, por presentar relativo comparada con las demás regiones
grandes potenciales comerciales. No obstante, que conformar el territorio nacional. Los bajos
aspectos como la topografía y el sistema radial indicadores socioeconómicos y una estructura
de carreteras significan un aislamiento relativo productiva con escasos encadenamientos pro-
que limita su desarrollo sobre todo cuando se ductivos y generación de empleo más calificado,
compara con otras ciudades intermedias o cen- son factores a tomar en consideración en el
tros de aglomeración de otras subregiones. diseño e implementación de políticas públicas
La variabilidad climática que presenta que puedan contribuir con un mayor desarrollo
este cantón, posibilita la producción de una para la región. Este estudio para la subregión
cantidad importante de productos agrícolas de San Isidro puede contribuir con resultados e
con necesidades ambientales muy diferentes. información relevantes para la toma de decisio-
Sin embargo, las actividades económicas del nes a nivel subregional y regional para enfren-
cantón, se han concentrado tradicionalmente en tar los retos de mejorar la capacidad productiva
los cultivos de café y caña de azúcar. En los últi- y la generación de mayores oportunidades para
mos años en las partes planas del cantón estos el desarrollo humano de las distintas regiones y
cultivos han sido sustituidos por el cultivo de la subregiones del país.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


172 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

2. Aspectos Teóricos y
Metodológicos

2.1. Coeficientes de Localización Económica

El estudio de los coeficientes de locali-


zación industrial, como genéricamente se le Donde:
conoce, se inicia con la obra de Alfred Weber,
pionero en sentar las bases de la teoría de la ei,r es el empleo en la industria i en la región r
localización industrial e introducir el concepto ei,r es el empleo total en la economía nacional
de economía de aglomeración, y se desarrolla Er es el empleo en la región r
rápidamente en los años 50. A partir de enton- ET es el empleo total en la economía nacional.
ces, podría decirse que los ulteriores aportes
a esta metodología, que pretende establecer la El valor del cociente expresa la relación
sustentación de una región geográfica a partir entre la participación del sector “i” en la región
de aquellas actividades económicas que proveen “r” y la participación del mismo sector en el
el empleo y el ingreso básico sobre las cuales total tomado como patrón de referencia y se
se desarrolla el resto de la economía, sufrieron utiliza, por tanto, como medida relativa de con-
una complejidad creciente y resultaron en nue- centración del empleo interregional.
vos enfoques, aunque manteniendo casi inalte- Los valores o rangos que puede adop-
rable la premisa básica. tar este cociente se comportan de la siguiente
Los estudios de Walter Isard (1960) en forma:
materia de análisis regional vinieron a dar
sustento teórico al factor localización en las - qir = 1: cuando el tamaño relativo del sector
decisiones de los agentes económicos. Su aná- i en la región r es idéntico al tamaño rela-
lisis parte desde la perspectiva clásica de la tivo del mismo sector en todo el país o en
sustitución para abordar aspectos cada vez más el patrón tomado como referencia. (No hay
complejos de la economía espacial. Es por ello concentración en esta actividad).
que Isard ha quedado como el especialista que
- qir < 1: cuando el tamaño relativo del sector
realiza aportes sustanciales a la teoría de la
i en la región r es menor al tamaño relati-
localización, toda vez que buena parte de las
vo del mismo sector en todo el país o en el
contribuciones posteriores se han basado en
patrón tomado como referencia. (Tampoco
sus trabajos.
hay concentración en esta actividad).
El estudio de los coeficientes de locali-
- qir > 1: cuando el tamaño relativo del sec-
zación industrial, en resumen, establece que el
crecimiento sostenible de un ámbito geográfico tor i en la región r es mayor al tamaño
se basa en aquellas actividades que proporcio- relativo del mismo sector en todo el país o
nan el empleo y el ingreso sobre los cuales se en el patrón tomado como referencia. En
apoya el resto de la economía. este caso se trata de una concentración del
Siguiendo a Kass (1973, 429-430), el empleo regional en esta actividad.
coeficiente de localización para una industria se
puede definir como la razón de la proporción de Gilmer, Keil y Mack (1989, 218), consi-
la fuerza laboral dedicada a una industria entre deran que el fundamento racional principal del
la correspondiente proporción de la fuerza labo- cociente de localización es que una localidad
ral nacional. Es decir, los coeficientes de loca- es autosuficiente en una actividad económica
lización para los grupos industriales indican la cuando el coeficiente es igual a 1. Si para una
cantidad relativa de actividad en cada grupo. industria específica el coeficiente es mayor que
El cociente de localización del empleo la unidad, se dice que la comunidad será un
para una industria i en una región r puede ser exportador neto de esos bienes y/o servicios y
expresada como: estos se encontrarán dentro del perfil industrial

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 173

de la comunidad (Duncan et al. 1960, 199-211; subregional. Dichos supuestos pueden resumir-
como se cita en Kass, 1973, 429). se de la siguiente manera:
De acuerdo con Miller, Gibson y Wright
(1991, 65), el cociente de localización (o razón - Los patrones y los hábitos de consumo de la
de autosuficiencia) es una técnica que ha sido subregión que se analiza son similares a los
ampliamente utilizada por investigadores en de nivel nacional
el campo de la geografía económica y en la - La totalidad de la demanda de la subregión
economía regional desde la década de los cua- es satisfecha por la oferta que se produce en
renta. Nelson, Drummond y Sawicki (1994, esa subregión
33), afirman que este es un análisis que destaca - La productividad de los factores de pro-
por su gran simplicidad y por su habilidad para ducción (tierra, trabajo y capital) en dicha
describir la intensidad relativa de los cambios subregión es similar a la productividad de
en la actividad industrial de una forma fácil de los mismos a nivel nacional
entender. - La tecnología empleada en el nivel subre-
Para Kass (1973), los patrones y distri- gional es similar a la empleada en el nivel
bución de las actividades económicas varían de nacional.
una comunidad a otra. Esto, unido a la simplici-
dad del método, ha implicado que los coeficien-
tes de localización hayan sido frecuentemente 2.2. Análisis shift-share y dependencia
utilizados (a veces inapropiadamente) como un espacial
método breve para estimar los multiplicadores
de la base económica. El análisis shift-share es una importante
Esta técnica, sin embargo, presenta limi- herramienta utilizada en economía regional
taciones que deben tomarse en cuenta. Una para medir los componentes del crecimiento
debilidad ha sido analizada por Gibson y Wor- regional. Según Herzog y Olsen (1977, 441),
den (1981), quienes encontraron que la metodo- esta técnica creada a inicios de la década de
logía del cociente de localización es en algunos los sesenta se utilizó como una herramienta
casos carente de utilidad. Conclusión a la que analítica. Posteriormente, gracias a transforma-
llegan luego de contrastar con los resultados ciones en el modelo original, esta sería incor-
obtenidos en un enfoque-encuesta (valores ver- porada y ampliamente utilizada en el campo
daderos) con los obtenidos mediante el cociente de la economía regional. Dunn (1960, como se
de localización. Sus resultados revelan que en cita en Mayor y López, 2005, 865), afirma que el
la mayoría de los casos el multiplicador deriva- principal objetivo de esta técnica es la posibili-
do del cociente de localización exagera el verda- dad de cuantificar los cambios o sesgos geográ-
dero multiplicador, al menos cuando estudiaron ficos en la actividad económica.
comunidades pequeñas. Por otro lado, Miller et Su popularidad se debe, fundamental-
al. (1991, 65), afirman que “hay evidencia que mente, a su considerable potencial analítico y a
sugiere que el coeficiente de localización pro- los pocos requerimientos estadísticos exigidos
duce mejores resultados en regiones grandes de para su utilización. Únicamente, se considera
estudio.” la evolución de una variable entre dos instantes
Además de las limitaciones menciona- de tiempo en unidades geográficas diferentes,
das anteriormente, el estudio de coeficientes con la que se obtiene tres elementos: el efecto
de localización industrial está sometido a una nacional, el efecto estructural y el efecto regio-
serie de supuestos que llevan implícitos un nal. Siguiendo a Berzeg (1978, como se cita en
esquema de economía de mercado sobre el cual Mayor y López, 2002, 3), desde un punto de
giran otras consideraciones teóricas, por ejem- vista teórico, el análisis shift-share asocia el
plo, polos de desarrollo o polos de atracción nivel de desarrollo de la región con la composi-
de flujos económicos, que generan radios de ción sectorial. Dado que regiones menos desa-
entendimiento de la estructura y del desarrollo rrolladas tienen una alta dependencia del sector

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


174 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

primario, y las más desarrolladas se encuentran es la tasa de crecimiento del empleo a nivel
especializadas en servicios. nacional.
No obstante, existen fuertes críticas
sobre el esquema básico. Entre ellas se encuen-
tra la que plantea que el modelo clásico no
elimina la interdependencia entre los diferentes
efectos de la misma estructura industrial y por
otro lado considera a las unidades geográficas o
espaciales como independientes unas de otras. (3)
Dado lo anterior se hace necesario intro- es la tasa de crecimiento del sector o rama de
ducir modificaciones al esquema básico. La actividad i.
primera modificación es la introducción del

concepto de empleo homotético propuesta por
Esteban-Marquillas (1972) que elimina la inter- (4)
dependencia de los efectos que dependen de la
misma estructura industrial. Asimismo, se intro- es la tasa de crecimiento del empleo en la subre-
ducen las matrices de pesos espaciales que solu- gión j con respecto al sector i
ciona el problema de la dependencia espacial.
La siguiente sección se compone de seis Siguiendo a Mayor y López (s.f., 4), la
componentes. La primera se refiere al esquema ecuación (1) se descompone en: efecto nacional
clásico del shift-share; en la segunda se introdu- ENij = Eij r que consiste en la inercia que supo-
ce el concepto de empleo homotético atribuido ne crecer al mismo ritmo que el país; el efecto
a Esteban-Marquillas; la tercera trata de aspec- sectorial mezcla industrial (industria-mix) ESij
tos relacionados a la existencia de autocorre-
= Eij (ri-r) que recoge la influencia sobre el cre-
lación espacial y a la introducción de matrices
cimiento de la especialización de la actividad
de pesos espaciales; la cuarta al shift-share
productiva en sectores con tasas de crecimiento
Espacialmente Modificado; en la última se pre-
por encima o por debajo de la media – es decir
sentan y comparan los resultados obtenidos en
el efecto será positivo en todas las regiones si
los modelos anteriores.
el empleo en el sector i crece más rápido que
el empleo total (ri > r) –, y el efecto regional o
2.2.1. Análisis Shift Share Clásico (MC) competitivo ERij = Eij (rij -ri) que toma en cuenta
el dinamismo que presenta un sector en una
Se puede denotar por Eij la magnitud del región en comparación con el dinamismo de
empleo correspondiente a la rama de actividad i ese mismo sector a nivel nacional. Este será
(donde i = 1, …, S) en la subregión j (donde j=1, positivo si el crecimiento en el empleo regional
…, R) en el periodo inicial y E'ij el valor corres- en ese sector es más rápido que el crecimiento
pondiente de la misma variable en el periodo final. en ese mismo sector a nivel nacional (rij > ri).
El cambio en el empleo se puede expresar como: Keil (1992, 471) destaca tres propiedades
del modelo

- corresponde al crecimiento del


Donde:
empleo en la i-ésima rama de actividad; luego,
es el crecimiento del empleo en
la j-ésima subregión, tal que
es el crecimiento del empleo en la economía
(2) de referencia (en este caso Costa Rica).

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 175

- Cua ndo se suma n los efectos regio - - No existe comercio internacional o inte-
rregional.
na les en j el result ado es cero,
, por lo que Igualmente, se han discutido problemas
conceptuales, como el de ausencia de funda-
ERij representa los cambios en el empleo en
mentación teórica o la existencia de problemas
respuesta a ventajas comparativas. de agregación espacial o sectorial o de capaci-
dad predictiva (Richardson, 1978). Brown (1969)
- Cuando se suman todas las ramas de acti-
realizó la primera contrastación del poder pre-
vidad por componente del esquema bási- dictivo de la técnica comparándola con otras
técnicas mediante el cálculo de los coeficientes
co del shift-share, es decir,
de la desigualdad de Theil para la diferencia
y, estas expli- entre el valor predicho y los reales, concluyendo
sobre la inestabilidad del efecto competitivo o
caran parte del crecimiento pero a un nivel
regional para las industrias.
regional o subregional j. Siguiendo a Polèse Por su parte, Richardson (1978), en un
(1998, 391-392) estos efectos agregados pue- conocido artículo de revisión sobre el estado del
den ser interpretados de la siguiente forma: análisis regional, fue muy crítico con la técnica,
el efecto nacional a nivel regional ENj mide y señaló que los beneficios de la misma eran
el crecimiento que hubiera tenido la región aparentes, pues es un método que solamente
si hubiera crecido al mismo ritmo que el ordena los datos estadísticos, sin valor expli-
país en su conjunto. En segundo lugar, el cativo. Los argumentos de Richardson fueron
efecto estructural ESj brinda el crecimiento contestados por Fothergill y Gudgin (1979).
que hubiera tenido la región tomando en La primera crítica se refería al problema
cuenta su estructura empleo inicial. Por de obtener resultados distintos según el nivel
último el efecto regional ERj capta los demás de desagregación que se emplee. Fothergill et
factores que hubieran podido a contribuir al. (1979) explican que este es un efecto normal,
a un crecimiento superior o inferior a la que responde a los problemas asociados con la
media nacional, tales como desplazamientos agregación de unidades en clases. Siempre que
de actividades económicas de una región a sea posible es conveniente comparar “iguales
otra. Esta última propiedad permite inter- con iguales.” Para estos autores, es posible que
pretar algunos resultados a nivel regional, los valores tienda a un valor estable con la
pero deja de lado la especificidad por rama desagregación. Sin embargo, las diferencias
de actividad. encontradas han sido menores, y dependen
especialmente de las diferentes tasas de creci-
miento de cada una de las ramas agrupadas en
2.2.2. Críticas al modelo Shift-Share una “industria” y de la concentración espacial
de esas ramas (Badia Roig, 2005).
El modelo shift-share clásico supone La segunda crítica se refiere a la elec-
implícitamente un conjunto de hipótesis que ción de pesos, es decir, dado que la estructura
han sido discutidas con frecuencia. Dinc, Hay- industrial de la región va variando a lo largo
nes y Qiangsheng (1998) señalan las siguientes: del tiempo, se trata de determinar si se toma
como punto de partida la estructura del pri-
- La tecnología regional es semejante a la mer año examinado, la del último año o una
nacional combinación lineal de ambos. Fothergill et al.
- La mano de obra regional es tan productiva (1979) señalan que este problema no se presen-
como la nacional ta normalmente con un grado de importancia
- Las características regionales de la demanda tal que inhabilite las conclusiones obtenidas en
son similares a la media nacional el análisis.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


176 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

En tercer lugar, critican la inestabilidad i de la región j podría tener si la estructura del


del efecto diferencial o competitivo. Este efecto, empleo en tal región fuera igual a la estructura
siguiendo a Badia Roig (2005, 152) no muestra nacional” (Esteban-Marquillas, 1972, 251). La
un patrón consistente a lo largo del tiempo, y incorporación del empleo homotético en el
según Richardson (1978) esto hace que el análi- esquema básico del shift-share permite elimi-
sis no sea una buena herramienta de proyección. nar la interrelación entre el efecto sectorial y
Sin embargo, Fothergill et al. (1979) cree que el regional. Ya que permite obtener un efecto
esto no se debe a la técnica, sino a lo que ocurre competitivo libre de esta interdependencia.
en la práctica, y que la técnica se limita a reflejar. El empleo homotético se denota como:
La cuarta crítica, siguiendo a Badia Roig
(2005, 153) se refiere a la subestimación de la
influencia de la estructura industrial. Un cam-
bio en una industria puede afectar otras indus-
trias por medio de los multiplicadores y las rela-
ciones que existen entre ellas. Todo cambio en (5)
el componente estructural debería tener efectos
multiplicadores, que se dejarían sentir en otras Cuando se introduce la ecuación (5) en la
industrias y servicios a través de las relaciones identidad shift-share (1) se obtiene la siguiente
inter industriales y los cambios en el consumo ecuación:
(consumidores y gastos del gobierno). Fothergill
et al. (2005) reconocen ese efecto, pero afirman
que su magnitud depende de la del multiplica-
dor y del componente estructural
Dinc et al. (1998), como se cita en Badia (6)
Roig (2005, 153) “señalaron que una crítica
importante se deriva de que el crecimiento En la ecuación (6) el efecto regional del
resultante del las relaciones inter industriales y análisis clásico se descompone en dos partes;
efectos secundarios del multiplicador se aíslan
E*ij (rij -ri) representa el efecto competitivo neto
explícitamente y se hallan incluidos en el com-
(ECN), el cual mide la ventaja/desventaja com-
ponente competitividad regional, siendo que
petitiva de la región j con respecto al sector i
debería contar en la de componente de compo-
de la nación. Por otro lado, (Eij = E*ij) (rij -ri) es
sición industrial.” Estos dos efectos combinados
denominado efecto locacional (EL) y toma en
causan un problema de asimetría cuando se
cuenta el grado de especialización de la región j
comparan dos regiones con períodos base dis-
tintos. Entonces, los efectos no son estadística- en la producción del sector i3.
mente independientes uno de otro. En el Modelo Shift-Share de Esteban Mar-
Por último, se criticó que el análisis shi- quillas (M E-M), se tiene que por construcción
ft-share es meramente descriptivo, y no permite no hay diferencias en el signo del efecto compe-
determinar la capacidad de una región para titivo en relación con el análisis clásico; ya que
retener o atraer a las industrias en crecimiento se las tasas de crecimiento no se ven modificado
(Badia Roig 2005,154). En este sentido, el análi- (rij -ri). No pasa lo mismo con la magnitud del
sis debe completarse con hipótesis adicionales efecto ya que la variable empleo Eij es sustituido
de investigación que expliquen la dinámica de por el empelo homotético E*ij (subregión posee
la atracción empresarial industrial. misma estructura de empleo que el país). En
cuanto al efecto locacional, se pueden presen-
tar cuatro posibles resultados (Herzog y Olsen
2.2.3. Modelo Esteban-Marquillas (ME-M):
Introducción del empleo homotético 3 Esta relación se deriva del hecho de que el empleo

homotético puede ser expresado en términos de


El empleo homotético en el sector i de la
región j se define como “el empleo que el sector cociente de localización, .

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 177

2001, 445) dependiendo del signo del compo- componente competitividad (rij -ri), los cuales se
nente especialización (Eij - E*ij) y al signo del resumen en el siguiente cuadro:

Cuadro 1
Modelo Shift-Share Esteban-Marquillas: Posibles resultado del efecto locacional.

Efecto Especialización Competitividad


Locacional
(EL) (Eij - E*ij) (rij -ri)

1 Desventaja Competitiva,
- + -
Especialización

2 Desventaja Competitiva,
+ - -
Sin Especialización

3 Ventaja Competitiva, Sin


- - +
Especialización

4 Ventaja Competitiva,
+ + +
Especialización

Fuente: Herzog & Olsen, 2001.

El efecto locacional muestra si una debe ser considerada una realidad aislada de los
región se especializa, (Eij - E*ij) > 0, en aquellos territorios que la rodean, sino que la estructura
sectores donde disfruta de ventaja competitiva económica de cada unidad espacial dependerá
(rij -ri)>0. Además, el elemento competitividad en mayor medida de aquellas regiones conside-
(rij -ri) del efecto locacional es el mismo del radas “vecinas”. Lo cual supone la existencia de
efecto competitivo neto, por lo que es de espe- un cierto grado de autocorrelación espacial.
rar que este componente tenga el mismo signo De acuerdo a Cliff y Ord la autocorrela-
que el efecto competitivo neto. No obstante la ción espacial es la “característica según la cual
introducción del empleo homotético soluciona la presencia de una determinada cantidad o
únicamente el problema de la interdependencia calidad de la variable estudiada en un determi-
de los efectos y no la interdependencia espacial, nada zona o región haga más o menos probable
para ello se hace necesario la introducción de la su presencia en las zonas o regiones vecinas”
matriz de pesos espaciales. (1973, como se cita en Toral, 2001, 101). En
nuestro caso un test de autocorrelación, como
el Índice de Moran (I) permite verificar si el
2.2.4. Matriz de Pesos Espaciales y
Autocorrelación Espacial empleo observado en una subregión j es inde-
pendiente de los valores del empleo observado
Como se mencionó anteriormente, el en las subregiones vecinas.
análisis clásico considera a las unidades de Una matriz de contigüidad se puede
análisis (subregiones) como realidades indepen- construir utilizando diferentes criterios. Para
dientes. Este supuesto entra en contradicción el cálculo de la I de Moran se utiliza una matriz
con la ley de geografía de Tobler la cual afirma booleana W basada en criterios de adyacencia.
que “todo está relacionado con todo, siendo esta Tal que el valor de wij es 1 cuando dos subre-
relación más fuerte en aquellas cosas que se giones comparten una frontera común, y cero
encuentran más cerca” (Toral 2001, 101). Mayor en caso contrario. Los elementos de la diagonal
y López (2005, 7) afirman que una región no principal son nulos.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


178 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

(10)

es la suma de la matriz de pesos espaciales.

La I de Moran para un año t viene dada por:

(11)

(12)
(7)
Donde: Mientras que la desviación típica y los
valores Z correspondientes a una N(0,1) vienen
dados por:

(8) (13)

es la media del logaritmo natural (neperiano)


del empleo x it en la subregión i. Y W jk es la
matriz binaria de contigüidad. (14)
La interpretación del Índice de Morán es
análoga a un coeficiente de correlación conven-
cional, ya que su numerador se interpreta como 2.2.5. Shift-Share Espacialmente Modificado
la covarianza en unidades espaciales contiguas (MME)
y su valor oscila entre -1 (cuando existe una
fuerte correlación negativa) y 1 (cuando existe Este modelo incorpora una variación del
una fuerte correlación positiva). concepto de empleo homotético propuesto por
Con la finalidad de determinar la signi- Esteban- Marquillas; referido a un ámbito más
ficancia estadística de la I de Moran se calcula próximo a la región. El empleo homotético
un estadístico z (0,1) bajo el supuesto de alea- respecto a las regiones vecinas puede definirse
toriedad en el cálculo del primer y segundo como “el empleo en el sector i de la región j si
momento de la I de Moran. La normalidad de la estructural sectorial de esa región coinci-
este estadístico “depende del número de víncu- diese con la de su entorno o grupo de regiones
los considerados y de cómo están conectados, vecinas” (Mayor & López, 2005, p.13). Donde:
es decir, de la estructura de la matriz de pesos
espaciales, de forma que con 20 localizaciones
puede asumirse normalidad” (Mayor y López
2005, 16).
La varianza de la I de moran viene dada
por: (15)
No obstante, una opción más elaborada
es la utilización de matrices de pesos espaciales
tal que:
(9)

Donde: (16)

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 179

lo que supone utilizar un empleo espacialmente 3. Aplicación del modelo de


Coeficientes de Localización
modificado en función de una matriz de pesos
Económica y Shift Share a las
W , en lugar de una variación del empleo homo- subregiones de Costa Rica
tético. No obstante la definición (16) plantea el
3.1. Unidad de estudio
inconveniente de que, es
decir la suma del empleo espacialmente modifi- El modelo de coeficientes de localización
cado no coincide con las magnitudes originales. económica se aplicará a las 22 subregiones defi-
nidas en 1979 por geógrafos de la desaparecida
Para solucionar este problema se utilizan pon- Oficina de Planificación (OFIPLAN), del Depar-
deraciones sectoriales modificadas espacial- tamento de Desarrollo Regional. Las subregio-
mente, que se calculan como: nes son una división intermedia entre el cantón
y la región. Son muy útiles para el análisis que
nos ocupa ya que el cantón es una división
territorial demasiado pequeña y, por ende, con
exagerada variabilidad aleatoria.

(17)
3.2. Bases de datos consultadas
Tal que:
Para analizar la evolución del empleo
mediante los coeficientes de localización y
medir los componentes del crecimiento a nivel
subregional, a través del Shift-Share, se uti-
(18)
lizaron los datos de empleo de los censos de
población de 1984 y del 2000. Aunque el nivel
Ecuación que guarda cierta relación de desagregación que se trata de analizar son
con la ecuación (15), pues en lugar de utilizar las subregiones, los datos se calcularon a nivel
distrital, para posteriormente agruparlos en
datos del empleo de las regiones vecinas, uti- subregiones.
liza el empleo espacialmente modificado en Además para la elaboración de los mapas
se utilizaron los segmentos censales digitaliza-
función de la matriz de vecindad. Gracias a dos a partir de los mapas impresos del Instituto
esta variante se cumple Nacional de Estadísticas y Censos (INEC).

que, al introducir (18) en sustitución del empleo


homotético de la ecuación (6), se tiene la ecua- 3.3. Limitaciones de las bases de datos

ción del Modelo Shift-Share Espacialmente La aplicación de los datos de empleo en


modelos comparativos genera dificultades. Una
Modificado:
de ellas es la relacionada con la codificación de
la Clasificación Industrial Internacional Unifor-
me de todas las actividades económicas (CIIU)4;

(19)
4 “CIIU es una clasificación por clases de actividad
económica y no una clasificación de industrias o
Donde se obtiene un efecto competiti- de bienes y servicios. La actividad realizada por
vo neto y un efecto locacional espacialmente una unidad estadística es el tipo de producción a
modificado, respectivamente. que se dedica” (INEC, 2000, p. 7).

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


180 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

debido a que en el censo de 1984 se utilizó la el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE),


CIIU revisión 2 y en el 2000 la CIIU revisión 3, manejan un sistema de planillas centralizado,
lo que supone variaciones importantes en las lo que genera importantes sesgos en la localiza-
categorías. El CIUU revisión 2, agrupaba las ción de las actividades productivas.
actividades económicas en 9 categorías princi-
pales (ramas de actividad económica), mientras
que el CIUU 3 utiliza 17 categorías. La segunda 3.4. Soluciones
dificultad se basa en la agregación de datos,
pues únicamente en el censo de 1984 se presen- Para subsanar el descalce en la codifi-
tan de modo subregional. cación de ramas de actividad económica entre
Por otro lado, los datos de empleo pro- los censo de 1984 y del 2000, se debe aplicar un
venientes de los censos de 1984 y del 2000 proceso de homologación basado en las Tablas de
presentan dos limitaciones adicionales impor- Correlación entre la CIIU 2 y la CIIU 3 prepara-
tantes5. La primera de ellas es concerniente a la das por el INEC (2000, 175). Esta equiparación
actualidad de la información, pues han pasado no presenta grandes inconvenientes6 cuando se
aproximadamente 10 años desde que se realizó realiza a las 9 grandes categorías del CIIU 2 que
el último censo. La segunda está relacionada se presentan en el Cuadro 2. La solución consiste
con el tipo de información obtenida, ya que a en tomar los datos de empleo provenientes del
las personas se les preguntó a qué se dedicaban, censo 2000, codificados a 5 dígitos y se equipa-
pero no el lugar donde laboraban. Esto, genera ran con los CIIU Rev. 2, para obtener finalmente
problemas cuando se analizan unidades espa- datos a nivel subregional del empleo codificado
ciales pequeñas como distritos o cantones. del acuerdo al CIIU Rev. 2 para 1984 y 2000.
Sin embargo, dado que el análisis se Estos permiten aplicar los análisis de coeficien-
enfoca en el cantón de Pérez Zeledón (subregión tes de localización y shift-share respectivamente.
San Isidro) zona que es la capital de la Región Cuadro 2
Brunca, la cual concentra la mayoría de ofici- Detalle de las grandes ramas de
nas regionales del estado y del sector privado, actividad según el CIUU Rev. 2
es de esperar que las personas en su mayoría
Código CIIU
laboren en dicha subregión. Detalle
(rev.2)
Pese a las limitaciones, los datos de
empleo de los censos presentan ventajas sobre Agricultura, caza, silvicultura y pesca 1
otras fuentes de información como las Encues- Explotación de minas y canteras 2
tas de Hogares de Propósitos Múltiples (EHPM) Industrias manufactureras 3
y los datos de planillas provenientes de la Caja
Electricidad, gas y agua 4
Costarricense del Seguro Social. En el caso de la
EHPM, los datos de empleo son significativos a Construcción 5
un nivel regional, situación que no permite rea- Comercio por mayor y por menor y
6
lizar una agregación a nivel subregional, y por restaurantes y hoteles
ende impide su utilización en este trabajo. Por el Transporte, almacenamiento y
otro lado, los datos de empleo provenientes de la 7
comunicaciones
CCSS consideran únicamente el empleo formal, Establecimientos financieros, seguros,
lo que genera un sesgo en la muestra total de bienes inmuebles y seguros prestados a 8
empleos pues se dejan de considerar los empleos las empresas.
de empleados por cuenta propia o de empresas Servicios, comunales, sociales y
al margen de la legalidad. Además, algunas 9
personales.
empresas e instituciones de importancia, como
Fuente: INEC.

5 Estas limitaciones no eliminan la validez de los


datos para realizar los distintos análisis: cocientes 6 Lo que sí sucede cuando se trabaja con desagrega-
de localización y shift-share. ciones de 4 dígitos, por ejemplo.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 181

Para lograr agrupar la información 3.5 Metodología para estimar la matriz


de empleo en el censo del 2000 en térmi- de pesos espaciales utilizada para las
nos de la s 22 subregiones, es necesario variantes del modelo Shift-Share
obtener los datos por distrito, y a partir de
estos formar las agrupaciones que confor- Un aspecto importante a tomar en cuen-
man cada subregión. Es importante recal- ta es la introducción de una matriz de pesos
car que los distritos existentes en el censo espaciales en el análisis shift-share. Existen
de 198 4 dif ieren de los existentes en el diferentes programas que permiten crear matri-
censo del 2000, sin embargo, mediante las ces de contigüidad basadas en criterios geográ-
bases del censo del CCP 7, es posible obte- ficos llamadas matrices tipo Roocks, bishops y
ner el empleo por rama de actividad a nivel queen`s. “En un mapa continuo con nueve loca-
de subregiones en el año 1984 y hacer la lizaciones próximas, la contigüidad respecto de
construcción de estas a partir de los dis- la localización central puede definirse de tres
tritos con el censo del 2000. maneras principales” (Toral 2001,103).

Cuadro 3
Matrices de contigüidad

Rooks Bishops Queen`s

a b C A b C a b C

d e F D e f d e F

g h i G h i g h I

Fuente: Elaboración propia con base en Toral (2001).

Como puede observarse, la localización Para el análisis del shift-share se utilizó


central correspondiente a los tres criterios es
una variación de la matriz de pesos Cliff-Ord,
“e”. Estos criterios de contigüidad presentan
la limitación de que las localizaciones vecinas donde los elementos de la matriz se calculan
quedan sujetas a 4 si se utilizan matrices tipo
como la longitud de la frontera común, ajus-
Rooks o Bishops y a 8 si se utilizan matrices
tipo Queen`s. Consecuentemente, se excluye la tada por la distancia inversa entre las loca-
posibilidad de utilizar tales criterios (y los soft-
lizaciones, o sea, , donde bjk es la
ware respectivos) ante la imposibilidad de fijar
el número de regiones vecinas a 4 u 8. Por esta proporción de la frontera común entre j y k
razón los cálculos de la autocorrelación espacial
con respecto al perímetro total de j, y djk es la
fueron realizados programando en Sistemas de
Información Geográfica, específicamente con distancia entre las unidades espaciales inves-
“spacial autocorrelation”, lo anterior permite
tigadas. Por otro lado con el fin de facilitar su
analizar la autocorrelación espacial indepen-
dientemente del número de subregiones vecinas interpretación la matriz de pesos será estanda-
con las que cuente una subregión.
rizada de tal forma que los elementos de cada
7 Basado en el INEC. fila sumen.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


182 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

Para determinar la distancia entre las - Una vez identificados los centros de cada
diferentes subregiones, se utilizaron diferentes subregión (ciudades principales) y las rutas,
pasos: se utilizó el programa Sistemas de Informa-
ción Geográfica (Arcgis), para cuantificar
- Primero se identificaron las principales ciu- en metros las distancias que separan cada
dades de cada subregión. subregión desde su principal ciudad, a través
- La distancia que se tomó en cuenta es la que de las rutas mencionadas anteriormente.
va del centro de una ciudad al centro de otra - Es importante mencionar que normalmen-
ciudad. Lo anterior implica que para cada te se estima la distancia lineal entre dos
ciudad se calculaban 21 distancias. ciudades para realizar este cálculo, lo cual
- Posteriormente, del total de carreteras facilita las estimaciones, y genera un valor
nacionales que comunican cada uno de los aproximado, sin embargo, dado que el país
centros de las subregiones, se utilizaron presenta una geografía tan irregular, la uti-
únicamente aquellas rutas que maximiza- lización de esta técnica presenta grandes
ran la distancia entre una subregión y otra. limitaciones, sesgando las verdaderas dis-
De esta manera, las rutas que se utilizaron tancias entre una ciudad subregional y otra.
fueron: 1, 2, 3, 4, 10, 18, 21, 32, 34, 121, 141, Por este motivo, se utilizó las principales
154, 226, y 239. rutas de comunicación generando un valor
exacto entre una subregión y otra.

CUADRO 4
Subregiones de Costa Rica: principales ciudades de cada subregión

Subregión Ciudad Subregión Ciudad

San José San José Los Santos San Marcos


Heredia Heredia Nicoya Nicoya
Alajuela Alajuela Cañas Cañas
Cartago Cartago Santa Cruz Santa Cruz
Puntarenas Puntarenas Liberia Liberia
San Ramón San Ramón Coto Ciudad Neily
Turrialba Turrialba San Isidro San Isidro
Grecia Grecia Buenos Aires Buenos Aires
Caraigres Frailes Guápiles Guápiles
Puriscal Santiago Limón Limón
Quepos Quepos San Carlos Ciudad Quesada

Fuente: Elaboración propia con base en información de MIDEPLAN.

Al igual que la distancia entre las ciu- perímetro de la subregión. Una vez obtenidos
dades de una subregión y otra, el perímetro estos datos se construye una matriz cuadrada
y la frontera común entre las subregiones, simétrica del tipo Cliff-Ord, la cual es ponde-
fueron estimadas con Sistemas de Informa- rada por filas.
ción Geográfica, utilizando herramientas de La siguiente figura muestra las 22 subre-
geo-estadística espacial, midiendo los dife- giones del país, así como sus respectivas ciuda-
rentes segmentos censales que componen el des y las rutas que las comunican.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 183

FIGURA 1
Subregiones de Costa Rica: Distancia entre ciudades principales,
medida a través de las principales rutas nacionales

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


184 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

3.6. Estimación de la I de Moran En el cuadro 5 se presenta una matriz


para Costa Rica binaria para las subregiones de Costa Rica. Esta
puede interpretarse como sigue: la subregión
Como se mencionó anteriormente, una San José (A) comparte frontera común con las
matriz de contigüidad se puede construir uti- subregiones: Heredia (B), Cartago (C), Alajuela
lizando diferentes criterios. Para el cálculo de (D), Caraigres (I) y Puriscal (J). Por lo que es de
la I de Moran se utiliza una matriz booleana esperar que la relación con éstas sea más fuerte
W basada en criterios de adyacencia. Tal que el en comparación con las otras regiones.
valor de wij es 1 cuando dos subregiones com- Como se mencionó anteriormente para
parten una frontera común, y cero en caso con- determinar la significancia estadística de la
trario. Los elementos de la diagonal principal I de Moran se calcula un estadístico z(I) bajo
son nulos. el supuesto de aleatoriedad en el cálculo del
primer y segundo momento de la I de Moran.
La normalidad de este estadístico “depende del
número de vínculos considerados y de cómo
están conectados, es decir, de la estructura de
la matriz de pesos espaciales, de forma que con
20 localizaciones puede asumirse normalidad”
(Mayor y López 2005, 16).

CUADRO 5
A B C D E F G H I J K L M N O P Q R S T U V

Donde: San José (A), Heredia (B), Alajuela (C), Cartago (D), Puntarenas (E), San Ramón (F), Turrialba (G), Grecia (H), Caraigres (I), Puriscal (J), Quepos (K), Nicoya (M), Cañas (N), Santa Cruz (O), Liberia (P), Coto (Q), San Isidro (R), Buenos Aires (S), Guápiles (T), Limón (U) y San Carlos (V)

De esta manera los resultados de la I de rrelación espacial. El estadístico z(I) es signifi-


Moran para el caso de Costa Rica vienen dados cativo a un nivel de significancia del 5%. Esto
por el cuadro 6. sugiere que subregiones con un elevado (bajo)
Los resultados de la I de Moran a nivel empleo se encuentran cerca de otras subregio-
subregional sugieren la existencia de autoco- nes con un empleo relativamente alto (bajo).

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 185

CUADRO 6 por la distancia inversa entre las localizaciones,


Costa Rica: Test de Autocorrelación
Espacial 1984-2000 o sea, , donde bjk es la proporción de
Año I de Moran z(I) P la frontera común entre j y k con respecto al
1984 0.2909 2.7212 0.0033 perímetro total de j, y djk es la distancia entre las
2000 0.3548 3.2349 0.0006
unidades espaciales investigadas8. Por otro lado
Fuente: Elaboración propia. con el fin de facilitar su interpretación la matriz
Además, esta relación se hace más intensa en el de pesos será estandarizada de tal forma que los
2000, donde la I de Moran es mayor a la corres-
elementos de cada fila sumen 1 (Ver cuadro 7).
pondiente en 1984.
La matriz de pesos binaria presenta algu- En el cuadro 7, además de la relación
nas limitaciones entre ellas la no inclusión descrita en la matriz binaria se pueden apre-
de relaciones asimétricas, que es un requisito ciar otros aspectos basados en el criterio de
incluido en los cinco principios establecidos Cliff-Ord, puesto que puede observarse con
por Paelink y Klaasen, que son además: inter- cual subregión se espera la relación espacial
dependencia, asimetría, alotopía, no linealidad sea más fuerte. En el caso de San José descrito
e inclusión de variables topológicas (Mayor y con anterioridad es de esperar que la relación
López 2005, 8). espacial sea mayor con Cartago9 que con las
demás subregiones con las cuales comparte
Para el análisis del shift-share se utiliza
fronteras. Esta herramienta permite modificar
una variación de la matriz de pesos Cliff-Ord, el esquema propuesto por Esteban-Marquillas
(1972) para incorporar el efecto espacial y uti-
donde los elementos de la matriz se calcula
lizar el esquema del Shift-Share Espacialmen-
como la longitud de la frontera común, ajustada te Modificado (MME)

8 Se utilizará la distancia en Km vía carreta entre


las dos ciudades principales de una subregión j y
una subregión k.

9 Esto basado en el criterio de Cliff-Ord.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


CUADRO 7 186
Costa Rica: Matriz de pesos espaciales a nivel subregional de tipo binario

A B C D E F G H I J K L M N O P Q R S T U V
A 0.000 0.248 0.117 0.403 0.000 0.000 0.000 0.000 0.095 0.101 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.036 0.000 0.000
B 0.406 0.000 0.539 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.054 0.000 0.000
C 0.130 0.368 0.000 0.000 0.018 0.038 0.000 0.397 0.000 0.026 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.011 0.000 0.012
D 0.752 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.119 0.000 0.000 0.085 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.011 0.000 0.033 0.000 0.000
E 0.000 0.000 0.055 0.000 0.000 0.533 0.000 0.000 0.000 0.198 0.060 0.000 0.000 0.154 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000
F 0.000 0.000 0.064 0.000 0.289 0.000 0.000 0.414 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.233
G 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.168 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.365 0.467 0.000
H 0.000 0.000 0.582 0.000 0.000 0.358 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.060
I 0.209 0.000 0.000 0.140 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.241 0.049 0.361 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000
J 0.236 0.000 0.054 0.000 0.133 0.000 0.000 0.000 0.256 0.000 0.188 0.132 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000
K 0.000 0.000 0.000 0.000 0.105 0.000 0.000 0.000 0.135 0.490 0.000 0.166 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.094 0.009 0.000 0.000 0.000

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


L 0.000 0.000 0.000 0.071 0.000 0.000 0.041 0.000 0.255 0.088 0.042 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.502 0.000 0.000 0.000 0.000
M 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.007 0.938 0.056 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000
N 0.000 0.000 0.000 0.000 0.142 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.011 0.000 0.000 0.607 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.241
O 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.825 0.000 0.000 0.175 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000
P 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.088 0.597 0.315 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000
Q 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.985 0.000 0.015 0.000
R 0.000 0.000 0.000 0.013 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.035 0.722 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.217 0.000 0.013 0.000
S 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.007 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.389 0.487 0.000 0.000 0.117 0.000
T 0.150 0.138 0.040 0.073 0.000 0.000 0.238 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.186 0.176
U 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.494 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.008 0.040 0.156 0.302 0.000 0.000
V 0.000 0.000 0.036 0.000 0.000 0.427 0.000 0.128 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.262 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000 0.147 0.000 0.000

Donde : San José (A), Heredia (B), Alajuela (C), Cartago (D), Puntarenas (E), San Ramón (F), Turrialba (G), Grecia (H), Caraigres (I), Puriscal (J), Quepos (K), Nicoya (M), Cañas (N), Santa Cruz (O),
Liberia (P), Coto (Q), San Isidro (R), Buenos Aires (S), Guápiles (T), Limón (U) y San Carlos (V)
Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández
Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 187

4. Principales resultados del Las actividades que le brindan cierto


modelo de coeficientes de grado de especialización a Pérez Zeledón en el
localización económica. sector primario tienen sus raíces en el cultivo
del café. Sin embargo, hacia el 2000 se ha dado
Los resultados del modelo de coeficientes un aumento significativo de la actividad gana-
de localización económica se muestran en los dera. Asimismo, el cultivo de piña, ocupa una
cuadros 8 y 9. En el caso del cantón de Pérez parte importante del área cultivada del cantón.
Zeledón, que está representado por la subre- Además, otras actividades productivas con cier-
gión San Isidro (comprende la misma área), es ta importancia relativa que se desarrollan en el
posible identificar cierto grado de especializa- cantón son caña de azúcar, piña, frijol, cítricos,
ción en las actividades del sector primario. Si maíz, tiquizque, mora y mamón chino.
se comparan los años de 1984 y 2000, se nota Las actividades pecuarias, que le per-
como Pérez Zeledón ganó competitividad en las miten gozar de cierta competitividad a Pérez
actividades ligadas a la explotación de minas y Zeledón, se desarrollan en casi todos los distri-
canteras y levemente en el sector agrícola, caza tos, sin embargo, el sector bovino se desarrolla
y silvicultura, pues pasa de un coeficiente de mayormente en Pejibaye y en menor grado en
1.846 (1984) a 2.246 (2000) en el caso del sector Cajón. Por su parte, el sector avícola se desa-
agrícola y de 0.294 (1984) a 1.312 (2000) en las rrolla principalmente en los distritos de Daniel
actividades mineras. Flores, San Isidro, Cajón y Páramo.

CUADRO 8
Subregiones de Costa Rica: Coeficientes de Localización Industrial, 1984.

Fuente: Elaboración propia con datos del Censo de Población de 1984.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


188 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

CUADRO 9
Subregiones de Costa Rica: Coeficientes de Localización Industrial, 2000

Fuente: Elaboración propia con base en datos del Censo de Población de 2000.

4.1. Perfil económico de Pérez Zeledón tanto algún grado de concentración, los valores
menores a 1, se representan con color blanco.
El análisis de los coeficientes de locali- Dado que la subregión Pérez Zeledón
zación para las 22 subregiones de Costa Rica solo muestra concentración en las activi-
permite identificar 7 perfiles de subregiones. El dades agrícolas y mineras, se expondrán
cuadro 10 muestra estos perfiles, los cuales están solo cuatro mapa s que muestra n dicha s
asociados a las características económicas gene- act ivid ades en los per iodos cen sa les de
radoras de empleo de cada subregión, y al cambio 1984 y 2000.
experimentado en los dos periodos intercensales Como se mencionó anteriormente, la
(1984-2000). Con respecto a Pérez Zeledón, no se mayoría de subregiones muestran concentración
presentó un cambio importante en los periodos del empleo en el sector primario, a excepción de
intercensales, el sector primario continuó siendo las subregiones que se encuentran en su mayoría
la principal fuente de empleo del cantón. dentro de la GAM (San José, Heredia y Alajuela),
Con el fin de identificar los perfiles eco- las cuales presentan un mayor porcentaje de
nómicos de manera espacial, se utilizaron sis- población urbana y una alta concentración de
temas de información geográfica (GIS), para comercios y servicios, lo que indica que la pobla-
generar mapas que mostraran las concentracio- ción se dedica en su mayoría a las actividadades
nes de empleo en cada rama de actividad eco- típicas de estos sectores. Además las subregiones
nómica, para cada período censal y subregión. de Puntarenas, Liberia y San Cruz presentan
La simbología del mapa muestra el valor del coeficientes mayores a la unidad, pero meno-
coeficiente, en color se representan solo aque- res al resto de subregiones con concentración
llas subregiones con valores mayores a 1 y por de empleos en esta actividad, probablemente

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 189

CUADRO 10
Perfiles Económicos de las Subregiones de Costa Rica

Subregiones Perfil de subregión 1984 Perfil de subregión 2000


San José – Heredia Concentración del empleo en diversas No presentan cambio
actividades (excepción Agricultura y
minas)
Alajuela- Cartago Concentración menos diversa que Aumento de Manufactura y
San José y Heredia Construcción en Cartago y pérdida en
comercio en Alajuela.
Sta Cruz – Liberia – Nicoya -Quepos Agricultura y Construcción Aumenta servicios
– Puntarenas Aumenta construcción en Quepos y
Nicoya
Limón Agricultura y Transporte No cambia

San Ramón – Grecia Concentración del empleo en el Sector primario se mantiene


sector primario Aumenta construcción en ambas,
Industria Manufacturera en Grecia

Los Santos –Turrialba - San Carlos Se mantiene Agricultura


– Cañas Concentración Agricultura Aumenta Electricidad, gas y agua
Pérez Zeledón y Resto subregiones Agricultura Agricultura no cambia
Fuente: Elaboración propia.

por funcionar como centros turísticos donde competencia entre agricultores por el uso de los
el comercio y los servicios empiezan a tener suelos más fértiles
importancia. (Ver figuras 2 y 3). En el caso de Costa Rica, al análisis espa-
Al analizar las figuras anteriores, es posi- cial sobre la concentración del empleo de las
ble observar cómo el país ha concentrado las actividades del sector primario, durante los dos
actividades del sector primario fuera de las últimos periodos censales, confirma parte de la
principales subregiones urbanas. Este com- teoría planteada. Las actuales subregiones de
portamiento se podría entender a la luz de las San José, Heredia y Alajuela, fueron zonas con
teorías de localización agrícola elaborados por una alta concentración de actividades agrícolas
Von Thünen, para quien las actividades agríco- varias décadas atrás. Sin embargo, y como se
plantea en la teoría de la localización, la presio-
las tienden a distribuirse debido a las fuerzas
nes del crecimiento poblacional, hicieron que
centrípetas alrededor de un mercado, hasta
estas subregiones comenzaran a crecer en todas
una distancia donde los retornos por unidad del
las direcciones, pero usualmente cerca de las
suelo sean igual a cero (Dunn, 1967). En otras
zonas ya urbanizadas (mejores suelos), absor-
palabras, debido a los efectos de la distancia, la biendo suelos de gran fertilidad que podrían
intensidad del uso del suelo tiende a decrecer a ser utilizados para las actividades agrícolas, y
medida que esta aumenta. alejando cada vez más las actividades primarias
Estudios posteriores a Von Thünen cons- de las demás actividades.
tataron que los asentamientos humanos tien- El fenómeno anterior explica por qué los
den a localizarse primero en los mejores suelos, coeficientes de localización más altos, dentro
y cuando todos estos han sido ocupados, las del sector primario, se ubican en las subregio-
presiones del crecimiento poblacional obligan nes más periféricas y de amplia base agrícola,
al uso de aquellos menos fértiles. Por lo tanto, donde las presiones del crecimiento poblacional
la intensidad del uso del suelo, se deriva de la no son tan marcadas. Entre estos, destacan

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


190 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

FIGURA 2
Pérez Zeledón y Resto de Subregiones de Costa Rica: Coeficientes de Localización
económica para Agricultura, Caza, Silvicultura y Pesca, 1984.

FIGURA 3
Pérez Zeledón y Resto de Subregiones de Costa Rica: Coeficientes de Localización
Industrial para Agricultura, Caza, Silvicultura y Pesca, 2000.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 191

Buenos Aires y Los Santos, zonas rurales con Por otra parte, las subregiones guana-
gran porcentaje de áreas cultivadas de café y castecas (Cañas, Liberia y Nicoya) también
granos básicos y las subregiones de Guápiles, muestran concentración del empleo en el sec-
Limón y San Carlos, donde predominan los cul- tor agrícola, principalmente por el empleo
tivos de banano y piña. generado en las actividades tradicionales de
Además, como se muestra en las figuras exportación como el ganado vacuno o el desa-
2 y 3, Coto y San Isidro, también presentan rrollo de cultivos no tradicionales, así como
concentración del empleo en las actividades la producción para el mercado interno de gra-
agrícolas, principalmente por el empleo gene- nos básicos. Dentro del sector primario las
rado en actividades como cultivo de café, arroz, subregiones que presentan concentración del
caña de azúcar, piña y en los últimos años por empleo en el sector pesquero y que se explica
la introducción de palma aceitera y el pláta- por su ubicación geográfica son Puntarenas,
no. Además las subregión de Caigres, muestra Quepos, Nicoya, Santa Cruz, Liberia y Buenos
cierta concentración respecto a otras zonas Aires, y en menor medida Cañas y Coto. Por
del país, lo cual no es de extrañar ya que esta otra parte, como se muestra en las figuras 4 y
subregión representa los distritos más periféri- 5, varias subregiones presentan cierta concen-
cos de Desamparados, Aserrí y Acosta, así como tración en la actividad minera, sin embargo
el distrito de Corralillo en Cartago; todas zonas Cañas, Coto y Puntarenas son los que presen-
que presentan una amplia base agrícola. tan los mayores coeficientes.

FIGURA 4
Pérez Zeledón y Resto de Subregiones de Costa Rica: Coeficientes de Localización
Industrial para Minas y Canteras, 1984

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


192 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

FIGURA 5
Pérez Zeledón y Resto de Subregiones de Costa Rica: Coeficientes de Localización
Industrial para Minas y Canteras, 2000.

Por otra parte, Von Thünen plantea que de Von Thünen, con la evidencia encontrada en
si la actividad agrícola se pudiese concentrar, las 22 subregiones de Costa Rica, sobre concen-
como la producción industrial, se situaría cerca tración del empleo agrícola es evidentemente
del mercado y la distancia sería un coste insig- que no se presentan las condiciones de espacio
nificante en el precio del producto, pero como isotrópico planteadas.
la agricultura requiere grandes cantidades de Por un lado, existen diferencias en la pro-
superficie, es necesario que se sitúen a diferen- ductividad de la tierra. Las características del
tes áreas geográficas. Por lo tanto, los produc- terreno en las subregiones de Santa Cruz, Libe-
tos se transportarán desde diferentes distan- ria, Cañas, son diferentes de las encontradas en
cias, lo que provoca un aumento del coste para la subregión Buenos Aires, Limón, Los Santos
la producción más alejada de los centros de o la subregión Coto. Además existen grandes
aglomeración. diferencias de topografía entre una subregión y
Para Von Thünen, la renta de localiza- otra. Costa Rica cuenta con una diversidad muy
ción, a cualquier distancia del mercado, depende grande de montañas, ríos, grandes pendientes,
de su rendimiento, precio y costos. Dependiendo planicies, valles, archipiélagos y golfos, lo cual
de las características de los productos se creará crea dinámicas económicas diferentes entre los
un sistema gradado de cosechas. Según su teo- diferentes territorios.
ría, los usos del suelo agrícola interiores serán Asimismo, el acceso a los mercados a
más intensivos que los de las franjas exteriores causa de las vías de comunicación (más rápidas
y esto hace que las zonas internas tengan más o más baratas), juega un papel muy importante
mano de obra y puedan ser más pequeñas. Al dentro de la localización de las actividades. No
contrastar la teoría de la localización agrícola es posible afirmar que cada subregión cuenta

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 193

con un sistema de vías de comunicación simi- arroz, ubicados cerca de las industrias proce-
lar, los tiempos de viaje en todas las subregiones sadoras, o en la subregiones de Grecia y San
son diferentes, ya sea producto de la congestión Ramón, el cultivo de café relativamente cerca
vial o por los problemas en la infraestructura. de las plantas procesadoras.
Por otro lado, no se puede descartar que pueda
haber más de un mercado dentro de la misma
subregión. 5. Principales resultados
Los aspectos anteriores conllevan a que del modelo: Cambio en la
el modelo concéntrico de Von Thünen no apli- participación del empleo (Shift-
que necesariamente a la realidad actual de las Share) espacialmente modificado
subregiones de Costa Rica. Sin embargo, hay
que tomar en cuenta que el modelo de Von El cambio en el empleo de la subregión
Thünen se gestó a inicios del siglo XIX, cuando San Isidro (cantón de Pérez Zeledón) repre-
los mercados nacionales tenían una conforma- senta un 2,0% del aumento en el empleo que
ción muy distinta a la actual. tuvo el país entre 1984 y el 2000, lo que en
Por último, es importante mencionar términos absolutos representa 5.518 empleos.
que hoy en día, en Costa Rica los usos agríco- El empleo en esta subregión se expandió a un
las tienen un fuerte comportamiento indus- ritmo menor que la media nacional (Cuadro
trial en muchas subregiones. La agricultura 11), lo cual se refleja en un efecto nacional que
sin tierra, los invernaderos y sobre todo ciertos explica un 164,4% del cambio en el empleo total
cultivos tradicionales se sitúan cerca de los de la subregión. Las ramas que más aportan a
mercados, tal como si fueran plantas indus- este efecto son: la agricultura, caza, silvicultu-
triales. De esta manera encontramos en la ra y pesca (106,3%); y los servicios personales,
región Coto, plantaciones de palma, piña y sociales y comunales (26,4%).

CUADRO 11
Subregión San Isidro: Descomposición de los cambios subregionales en el empleo
entre los censos de 1984 y 2000Fuente: Elaboración propia con base a los censos de
población de 1984 y 2000

Efecto
Cambio Efecto Efecto Efecto
Rama de actividad Regional o
total Nacional Sectorial “Locacional”
Competitivo

Cambio total absoluto 11.804 19.407 -9.161 4.462 -2.905

Cambio total relativo 100,00% 164,40% -77,60% 37,80% -24,60%

Agricultura, caza, silvicultura y pesca 2,30% 106,30% -104,10% 0,10% 0,10%

Minas 0,40% 0,10% -0,10% 1,10% -0,60

Industria manufacturera 14,90% 9,10% 2,60% 9,80% -6,60%

Electricidad y agua 1,40% 1,10% 0,40% -0,40 0,20%

Construcción 7,30% 5,90% 0,60% 1,20% -0,50%

Comercio al por mayor y al por menor 27,90% 12,60% 14,60% 1,30% -0,60%

Transporte, almacenamiento y comunicac. 8,30% 1,20% 2,70% 17,10% -12,80%

Establecimientos financieros y otros 7,00% 1,70% 4,70% 2,00% -1,40%

Servicios personales, sociales y comun. 30,60% 26,40% 1,00% 5,60% -2,30%

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


194 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

En la subregión San Isidro (cantón de donde existe ventaja competitiva y la subregión


Pérez Zeledón) la concentración de empleo en ha optado por especializarse en dicha actividad.
ramas de lento crecimiento genera un efec- Por otro lado, la subregión San Isidro
to negativo en el cambio en el empleo de la no muestra ventajas competitivas en las acti-
subregión (-77,6%). Al igual que otras subre- vidades de electricidad gas y agua, sin embar-
giones este efecto se encuentra asociado a la go los resultados derivados del modelo shift
concentración del empleo en la rama agrícola share modificado, muestran un efecto locacio-
(-104,1%). nal sin especialización en dicha actividad, lo
El cantón ha ganado ventaja con respec- que implica un patrón adecuado, ya que no se
to a las subregiones vecinas en ramas como: está especializando en una actividad sin ventaja
transporte y almacenamiento (17,1%); la indus- competitiva.
tria manufacturera (9,8%) y en menor medi- San Isidro, es una de las subregiones
da los servicios personales, sociales y comu- con más oportunidades de especializarse en
nales (5,6%). Estas ramas ejercen una mayor actividades donde existe cierto grado de venta-
influencia sobre el efecto regional que explica jas competitivas. Como se muestra en el cua-
un 37,8% del aumento en el empleo dentro de dro 12, con excepción de las actividades de
la subregión San Isidro. Esta subregión presen- electricidad, gas y agua, y el sector agrícola,
ta un aprovechamiento inferior al que derivaría donde ya está especializado, en el resto de acti-
de especializarse en aquellas ramas donde ganó vidades presenta ventajas competitivas pero sin
mayor dinámica, lo que se refleja en un efecto especialización.
“locacional” negativo que explica un -24,6% del Esa falta de especialización que presenta
cambio en el empleo. la subregión San Isidro en actividades con ven-
El cambio en el empleo se encuentra tajas competitivas, se encuentra asociada a la
concentrado en servicios personales, sociales y
poca diversidad productiva, a la falta de encade-
comunales (30,6%); en comercio al por mayor
namientos y articulación entre los distintos sec-
y por menor (27,9%) y en menor medida indus-
tores productivos, que permita aprovechar los
tria manufacturera (14,09%).
recursos existentes y generar mayor valor agre-
gado en todas las etapas productivas, elementos
5.1. Subregión San Isidro: Descomposición que han logrado aprovechar otras subregiones,
del Efecto Locacional que cuentan con ventajas y especialización en
dichas actividades.
El efecto “locacional” mide el grado de
especialización en una determinada rama de
actividad, lo que permite identificar si la subre- 5.2. Análisis subregional comparativo
gión se especializa en aquellas ramas en las que
ganó ventaja con respecto a las subregiones De acuerdo con las propiedades del aná-
vecinas. A diferencia de los otros efectos, éste lisis del cambio en la participación del empleo
tiene cuatro posibles interpretaciones: a) Ven- que destaca Kiel (1992, 471), si se suman todos
taja competitiva b) Desventaja competitiva c) los efectos en i, es decir, todas las ramas de
Especialización d) No especialización. actividad, los efectos obtenidos son atribuibles
El cuadro 12, muestra una matriz con a la región. En el cuadro 13 se presentan los
las 22 subregiones del país en las filas y en las resultados obtenidos para el método de cam-
columnas las 9 ramas de actividad económica. bio en la participación del empleo, a un nivel
En cada entrada de la matriz se muestra el efec- subregional, dejando de lado la especificidad
to locacional derivado del modelo shift share sectorial. Las 4 subregiones ubicadas en el cen-
modificado. tro del país (San José, Heredia, Alajuela y Car-
En el caso de la subregión San Isidro tago) presentan un efecto nacional mayor en
(cantón de Pérez Zeledón), es posible observar términos de empleos ganados; sin embargo,
un patrón adecuado dentro del sector agrícola, como se explicó en la sección metodológica la

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 195

CUADRO 12
Subregiones de Costa Rica: Resultados del efecto
locacional por ramas de actividad

CUADRO 13
Costa Rica, Resultados del Análisis en el Cambio en la Participación del Empleo Espacialmente Modificado por
subregión, 1984-2000.

Fuente: Elaboración propia.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


196 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

importancia en relación al cambio en el empleo A nivel subregional, el método indica que


de la subregión puede variar. Esta situación sólo tres subregiones perdieron dinámica o ven-
se explica por la diferencia en la estructura de taja competitiva con respecto a las subregiones
empleo (Eij) que hay en estas subregiones con vecinas: San José, Turrialba y Cañas. No obstan-
respecto a las demás. Ya que en 1984 el 53,9% te, la magnitud del efecto sectorial o concentra-
del empleo estaba concentrado en estas cuatro ción en industrias de rápido crecimiento le
subregiones, mientras que en el año 2000 este permite a San José contrarrestar la pérdida de
porcentaje aumentó a un 58,7%, competitividad en término de empleos perdidos,
No obstante, parte de la concentración no sucede lo mismo con las otras subregiones.
de empleos en estas cuatro subregiones se debe Un signo positivo en el efecto “locacional”
a la concentración de ramas de rápido creci- indica que la subregión se especializa en ramas
miento. Con excepción de Limón las industrias en las cuales ganó ventaja competitiva sobre las
de mayor crecimiento representadas por un subregiones vecinas. El método espacialmente
efecto sectorial positivo se encuentran ubicadas modificado sugiere que de las 22 subregiones en
en el centro del país. Estas industrias o sectores Costa Rica, sólo Heredia, Cartago y Los Santos
de crecimiento rápido con respecto a la media presentaron un efecto “locacional” positivo.
nacional son: comercio al por mayor y menor, Dentro de las subregiones que crecen a
hoteles y restaurantes; establecimientos finan- un ritmo mayor a la media nacional destaca
cieros, seguros y bienes inmuebles; transporte, la diferencia que existe en las subregiones del
almacenamiento y comunicaciones e industria Valle Central, ya que a diferencia de las demás
manufacturera. San José muestra una dinámica subregional
El signo negativo del efecto sectorial, negativa. Mientras que Cartago se diferencia
tal como se puede observar en las demás porque el empleo en la rama agrícola aumentó
subregiones indica una débil concentración en el periodo en estudio. Por su parte, Alajuela
en industrias de rápido crecimiento, o bien, y Heredia poseen una serie de características
una alta concentración en industrias de poco similares pero se diferencian por el aprovecha-
crecimiento como la agricultura, ganadería, miento de las ventajas competitivas (efecto loca-
silvicultura y pesca; explotación de minas y cional). Por otro lado, dentro de este grupo se
canteras10. De tal forma, subregiones que tie- encuentran dos subregiones que no tienen con-
nen una alta dependencia de la agricultura, centración de empleo en industrias de rápido
ganadería, silvicultura y pesca, están asocia- crecimiento como son Limón11 y Guápiles, pero
das a un efecto sectorial negativo mayor como que tienen un importante efecto competitivo
es el caso de Guápiles, San Carlos, Coto, San que les permite superar la influencia de tener
Isidro y Buenos Aires. concentración de empleo en la agricultura.
CUADRO 14
Subregiones que crecen a un ritmo mayor a la media nacional
Dinámica Regional

Concentración de empleo en Industrias de Rápido Crecimiento Positiva Negativa


Crece Agricultura Cartago  

Disminuye Agricultura Heredia y Alajuela San José
Crece Agricultura. Guápiles y Limón.  
No
Disminuye Agricultura    

Fuente: Elaboración propia.

10 Este sector representa un bajo porcentaje del 11 En el caso de Limón el efecto sectorial es positivo
empleo a nivel nacional con un 0.22% en 1984 pero la magnitud y la estructura de empleo no per-
y un 0.14% en el 2000, situación que también se miten afirmar que posea concentración de empleo
reflejada a nivel subregional. en industrias de rápido crecimiento con

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 197

Las restantes subregiones se encuen- empleo en la agricultura, una dinámica subre-


tran en el grupo de aquellas que crecieron a gional positiva y aumento del empleo en la
un ritmo menor a la media nacional. Todas agricultura. En el lado opuesto están Cañas
tienen concentración de empleo en industrias y Turrialba que presentan dinámica negativa,
de menor crecimiento. En el caso de Los San- concentración de empleo en agricultura rama
tos, San Isidro, Buenos Aires y San Carlos, en la cual el empleo decreció en el periodo en
se caracterizan por tener concentración de estudio.

CUADRO 15
Subregiones que crecen a un ritmo menor a la media nacional

Dinámica Regional

Concentración de empleo en Industrias de Rápido


Positiva Negativa
Crecimiento

Los Santos, San Isidro, Buenos Aires,


Crece Agricultura  
San Carlos
No Puntarenas, San Ramón, Grecia,
Turrialba,
Disminuye Agricultura Caraigres, Puriscal, Quepos, Nicoya,
Cañas
Santa Cruz, Liberia, Coto

Fuente: Elaboración propia.

El otro grupo contempla las restantes de trabajo con un detalle que las encuestas de
subregiones y son aquellas donde la agricultura hogares no permiten. El énfasis del análisis
ha perdido importancia relativa pero que tienen se concentra en tres aspectos relevantes: la
ventaja en otras ramas de actividad, por lo que concentración y localización del empleo de las
tienen un alto potencial en términos de empleo, diferentes actividades económicas, las ventajas
pero que aún no han podido aprovechar ya y desventajas competitivas de las subregiones, y
que no se encuentran especializadas en esas su especialización.
ramas. Por ejemplo las subregiones ubicadas El análisis de los coeficientes de Loca-
en la Región Chorotega tienen un alto potencial lización para las 22 subregiones de Costa Rica
en el área comercial y de servicios, pero no se permite identificar 7 perfiles de subregiones.
encuentran especializados en estas ramas. Estos perfiles están asociados a las característi-
cas económicas generadoras de empleo de cada
subregión y al cambio experimentado entre los
Conclusiones
dos periodos intercensales (1984-2000). En el
En esta investigación se han estudiado caso de Pérez Zeledón (Subregión San Isidro)
las características y evolución de los mercados se ubica en el último perfil, caracterizado por
subregionales de trabajo en Costa Rica, espe- no presentar cambios durante el periodo censal
cíficamente se analizó el caso de la subregión 1984-2000, siendo las actividades agrícolas su
San Isidro (cantón de Pérez Zeledón) utilizando principal fuente de empleo.
los censos de población de 1984 y 2000 como La mayoría de las investigaciones que
fuentes primaria de información. Se reconoce utilizan la técnica Shift Share no abordan de
que esto limita las posibilidades del análisis, forma explícita la interrelación existente entre
ya que los datos más recientes datan del año las unidades geográficas consideradas, limitán-
2000; sin embargo, ello permite avanzar en el dose el análisis a la dependencia de la evolución
conocimiento de los mercados subregionales de las regiones respecto del patrón nacional.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


198 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

Sin embargo, la aplicación de la técnica Shift Bibliografía


Share al caso de las subregiones de Costa Rica,
considera los sesgos geográficos en la actividad Aguiló, Eugene. (1998). Políticas turísticas. En
económica. Mella, J.M. (coord.). Economía y política
Esta investigación reconoce la necesidad regional en España anta la Europa del
de incluir de forma explícita la interacción siglo XXI. Madrid: Akal.
espacial y la interdependencia, donde se con-
sidera que los efectos tradicionalmente obteni- Alburquerque, Francisco. (2004). Desarrollo
dos no son independientes, es decir, las regio- económico local y descentralización en
nes con estructuras similares y que pueden América Latina. Revista de la CEPAL No.
ser consideradas como vecinas en función de 82, 157-171.
distintos criterios ejercen su influencia en el
crecimiento de una región particular, por lo Badia, Carmen. (2005). Industria y concen-
que se aplicó el modelo shift-share espacial- tración de cultivos: la contribución de
mente modificado a partir de la definición de la industria del frío en la fruticultura
las matrices de vecindad. leridana. Tesis doctoral. Universitat de
Los resultados del análisis de cambio en Girona, Cataluña, España.
la participación del empleo (shift share espa-
cialmente modificado) son interesantes, pues Beckmann, Martin. (1959). City Hierarchies and
muestran que la subregión San Isidro es una the Distribution of City Size. Economic
de las cuatro subregiones que se especiali- Development and Cultural Change, 6,
zan en actividades productivas en las cuales 243-248.
presentan ventajas competitivas. El resto de
subregiones, de acuerdo con este análisis, se Berzeg, Korhan. (1978). The empirical con-
están especializando en actividades donde no tent of shift-share analysis. Journal of
presentan ventaja competitiva. Esto demuestra Regional Science, 18 (3), 463-469.
– en términos económicos – un problema de
asignación de recursos, pues existe una alter- Bonet, Jaime. (1999). El crecimiento regional
nativa de especialización productiva que podría en Colombia, 1980-1996: Una aproxi-
mejorar el bienestar. En este sentido, se puede mación con el método Shift-Share.
generar una disyuntiva entre la posibilidad de (Documentos de Trabajo Sobre Economía
que las autoridades públicas intervengan con Regional, Centro de Estudios Económicos
medidas de fomento para canalizar recursos Regionales, Banco de la República).
hacia las actividades ventajosas, o dejar que sea
el mercado el que se encargue de hacer dicha Brakman, Steven; Garretsen, Harry y Van
asignación. Ambas medidas tienen un costo, Marrewijk, Charles. (2001). An intro-
que no se puede cuantificar en este estudio, duction to geographical economics.
pero que las instituciones públicas pertinentes Cambridge, United Kingdom: Cambridge
deben evaluar. University Press.
Otro de los resultados importantes es
que la subregión San Isidro presenta siete acti- Brown, James. (1969). Shift Share Projections
vidades económicas donde cuentan con ven- of Regional Growth: Empirical Test.
taja competitiva, pero no con especialización. Journal of Regional Science, 9, 1-18.
Esto indica que Pérez Zeledón cuenta con
un gran potencial productivo que no se está Callejón, María. (1998). Concentración geo-
aprovechando al máximo. De ahí la importan- gráfica de la industria y economías de
cia de focalizar las inversiones hacia aquellos aglomeración. Facultad de Ciencias
sectores donde las ventajas competitivas sean Económicas y Empresariales, Universidad
notorias. de Barcelona.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 199

Camagni, Roberto. (2002). On the concept of Doryan, Eduardo; Sánchez, José A.; Pratt,
territorial competitiveness: sound or L a w r e n c e ; G u t i é r r e z , F r a n c i s c o;
misleading? Department of management, G a r n i e r, L e o n a r d o ; M o n g e ,
economics and industrial engineering, Guillermo y Marshall, Lucía.
Politecnico di Milano: Italy. (1999). Competitividad y Desarrollo
Sostenible: Avances conceptuales y
Capone, Francesco y Boix, Rafael. (2005). Orientaciones Estratégicas. Alajuela,
Sources of Competitiveness in Tourist Costa Rica: INCAE, CLACDS.
Local Systems: An Application to Italy.
45th Congress of the European Regional Dumais, Guy; Ellison, Glenn y Glaeser, Edward.
Science Association, Vrije Universiteit (1997). Geographic concentration as a
Amsterdam. dynamic process (NBER Working Paper
No. 6270). National Bureau of Economic
Centro Internacional de Política Económica Research.
para el Desarrollo Sostenible (CINPE).
(2007). Estudio Económico de la GAM. Duncan, Otis; Scott, Richard; Lieberson,
Informes de avance e informe final Beverley y Winsborough, Hal. (1960).
para la consultoría de análisis   eco- Metropolis and Region. Baltimore, USA:
nómico. (Elaborado para el Proyecto The Johns Hopkins Press.
P R U G A M ). H e r e d i a , C o s t a R i c a :
CINPE. Dunn, Edgar. (1960). A statistical and analytical
technique for regional analysis Papers
Ciccone, Antonio. (2001). Efectos de aglomera- of the Regional Science Association, 6,
ción en Europa y en EE.UU. Barcelona, 97-112.
España: Centro de economía internacio-
nal, Universidad Pompeu Fabra. Dunn, Edga r. (1967). The L ocation of
Agricultural Production. Gainesville:
Ciccone, Antonio y Robert E. Hall. (1996). University of Florida Press.
Productivity and the Density of Economic
Activity. American Economic Review, 86, Esteban-Marquillas, Joan Maria. (1972). Shift
54-70. and Share analysis revisited. Regional
and Urban Economics, 2 (3), 249-261.
Cliff, Andrew y Ord, John Keith. (1973). Spatial
autocorrelation. London: Pion. Farrell, Gilda; Trillón, Manuel y Soto, Paul.
La competitividad territorial  : cons-
Cliff, Andrew y Ord, John Keith. (1981). Spatial truir una estrategia de desarrollo terri-
processes: models and applications. torial con base en la experiencia de
London: Pion. LEADER. Innovación en el Medio Rural,
Cuaderno No. 6 – Fascículo 1. Bruselas :
Dinc, Mustafa; Haynes, Kingsley y Qiangsheng, Observatorio Europeo LEADER.
Li. (1998). A comparative evaluation of
shift-share models and their extensions. Fothergill, Stephen y Gudgin, Graham. (1979).
Australasian Journal of Regional Studies, In defence of shift-share. Urban Studies,
52 (1), 275-302. 16 (3), 309-319.

Diniz, Francisco y Gerry, Chris. (2002). A pro- Fujita, Masahisa, Krugman, Paul y Venables,
blemática do desenvolvimento rural. Anthony. (1999). The spatial economy.
Compéndio de Economia Regional, 14, Cambridge, Massachusetts: The MIT
535-570. Press.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


200 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

Fujita, Masahisa y Thies, Jacques-Francois. Hoover, Edgard. (1951). Localización de la


(2002). Economics of Agglomeration: actividad económica. Fondo de Cultura
Cities, Industrial location, and Regional Económica: México.
Growth. Cambridge, UK: Cambridge
University Press. Instituto Nacional de Estadística y Censos
(INEC). (1984). Censo de Población de
Gibson, Lay James y Worden, Marshall. 1984.. San José, Costa Rica: INEC.
(1981). Est im at ing t he Economic
Base Multiplier: A Test of Alternative Instituto Nacional de Estadística y Censos
Procedures. Economic Geography, 57, (I N E C). (2 0 0 0). C la sif icac ió n d e
146-159. Ocupaciones de Costa Rica. San José,
Costa Rica: INEC.
Gilmer, Robert; Keil, Stanley y Mack, Richard.
(1989). The Service Sector in a Hierarchy Instituto Nacional de Estadística y Censos
of Rural Places: Potential for Export (INEC). (2000). IX Censo Nacional de
Activity. Land Economics, 65 (3), 217-227. Población. San José, Costa Rica: INEC.

Glaeser, Edward. (1998). Are Cities Dying? Isard, Walter. (1960). Methods of Regional
Journal of Economic Perspectives, 12 (2), Analysis: an Introduction to Regional
139-160. Science. Cambridge: Technology Press.

Glaeser, Edward. (2003). The New Economics Jones, Barclay y Solomane, Koné (1996). An
of Urban and Regional Growth. En Exploration of Relationships between
Gordon Clark; Maryann Feldman y Meric Urbanization and Per Capita Income:
Gertler (Eds.), The Oxford Handbook of United States and Countries of the World.
Economic Geography (pp.83-98). New Papers in Regional Science, 72 (2), 135-
York: Oxford University Press. 153.

Henderson, Vernon. (1988). Urban Development: Kass, Roy. (1973). A Functional Classification
Theory, Fact and Illusion. New York: of Metropolit a n Communities.
Oxford University Press. Demography, 10 (3), 427-445.

Henderson, Vernon; Shalizi, Zmarak y Venables, Keil, Stanley. (1992). On the value of homo-
Anthony. (2000). Geography and develo- theticity in the shift-share framework.
pment (Policy Research Working Paper Growth and Change, 23 (3), 469-493.
Series 2338). Washington, D.C.; The
World Bank. Krugman, Paul. (1991). Increasing Returns
and Economic Geography. Journal of
Herzog, Henry y Olsen, Richard. (1977). Shift- Political Economy, 99 (3), 483-499.
share Analysis Revisited: The Allocation
Effect and the Stability of Regional Krugman, Paul. (1997). Desarrollo, geografía
Structure. Journal of Regional Science, y teoría económica. Barcelona, España:
17 (3), 441-454. Antoni Bosch Editor.

Hewings, Geoffrey. (1976). On the accuracy Lemelin, André y Polèse, Mario. (1995). What
of alternative models for stepping-down About the Bell-shaped Relationship
multicounty employment projections to Between Primacy and Development?
counties. Economic Geography, 52 (3), International Regional Science Review,
206-217. 18 (3), 313-330.

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


Competitividad, especialización y mercado laboral en el cantón de Pérez Zeledón... 201

L e w i s , W. A r t h u r. (19 5 4). E c o n o m ic ASEPELT-España, Actas “Anales de


Development with Unlimited Supplies Economía Aplicada”. León, España.
of Labour. The Manchester School of
Economic and Social Studies, 22 (2), McCann, Philip y Dewhurst, John. (1998).
139-191. Regional size, industrial location and
input-output expenditure coefficients.
Lizano, Eduardo. (1999). Ajuste y Crecimiento Regional Studies, 32 (5), 435-444.
en la Economía de Costa Rica, 1982-
1994. San José, Costa Rica: Academia de Miller, Mark; Gibson, Lay y Wright, Gene.
Centroamérica. (1991). Location Quotient: A Basic Tool
for Economic Development Analysis.
Lösch, August. (1954). The Economics of Economic Development Review, 9 (2),
Location. New Haven: Yale University 65-68.
Press.
Nazara, Suahasil y Hewings, Geoffrey. (2004).
Loveridge, Scott y Selting, Anne. (1998). A Spatial structure and Ta xonomy of
review and comparison of shift-share Decomposition in shift-share analysis.
identities. International Regional Science Growth and Change, 35 (4), 476-490.
Review, 21 (1), 37-58.
Nelson, Arthur; Drummond, William y Sawicki,
Lugo, Sonia y Mungaray, Alejandro. (2002). David. (1994). Economic base analysis of
La competitividad regional de Baja employment trends by economic sector.
California. Comercio Exterior, 52 (8), Economic Development Review, 12 (3),
660-666. 32-38.

Marmolejo, Carlos y Roca, Josep. (2008). La Nourse, Hugh. (1969). Economía Regional:
localización intrametropolitana de las Estudio de la estructura, estabilidad y
actividades de la información: un aná- desarrollo económico de las regiones
lisis para la región metropolitana de (J. M. Carreras Puigdengolas, Trad.).
Barcelona 1991-2001. Revista Electrónica Barcelona, España: Oikos-Tau, S.A.
de Geografía y Ciencias Sociales, 268 Ediciones. (Trabajo original en inglés
(12),. publicado en 1968).

Mayor, Matías y López, Ana Jesús. (2005). El Nuhn, Helmut. (1972a). Estado actual, organi-
análisis shift-share espacial: nuevos zación y problemas de la planificación
desarrollos. Universidad de Oviedo, nacional en Costa Rica y consideracio-
Departamento de Economía Aplicada. nes para una reorganización incluyendo
la planificación regional. San José, Costa
Mayor, Matías y López, Ana Jesús. (2006). Shift- Rica: Oficina de Planificación Nacional y
share espacial versus filtrado espacial. Política Económica (OFIPLAN).
Una aplicación al empleo regional.
Universidad de Oviedo, Departamento de Nuhn, Helmut. (1972b). Regionalización de
Economía Aplicada. Costa Rica para la planificación del desa-
rrollo y la administración. San José, Costa
Mayor, Matías; López, Ana Jesús y Pérez, Rica: Oficina de Planificación Nacional y
Rigoberto. (2004). La elaboración de Política Económica (OFIPLAN).
escenarios basados en análisis shift-
share. Aplicación a las perspectivas Oficina de Planificación Nacional y Política
de empleo regional. XVIII Reunión Económica (OFIPL A N). División de

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521


202 Rafael Arias Ramírez y Leonardo Sánchez Hernández

Planificación y Coordinación Regional. International Regional Science Review,


(1978). Regionalización de C osta 16 (1), 1-48.
Rica. San José, Costa Rica: Oficina
de Planificación Nacional y Política Richardson, Harry. (1986). Economía regional
Económica (OFIPLAN). y urbana. España: Alianza Editorial

Papageorgiou, Yorgos y Thisse, Jacques. (1985). Rodríguez Miranda, Adrián. (2006). Desarrollo
Agglomeration as special interdepen- económico territorial endógenos. Teoría
dence between firms and households. y aplicación al caso uruguayo (Serie
Journal of Economic Theory, 37 (1), Documentos de Trabajo). Uruguay:
19-31. Instituto de Economía.

Peterson, George et al. (1991). Urban Economies Schumpeter, Joseph. (1934). The theory of
and National Development, Washington economic development. Cambridge,
D.C.: Office of Housing and Urban Massachusetts: Harvard University Press.
Programs, USAID
Silva, Iván. (2005). Desarrollo económico local
Polése, Mario. (1998). Economía urbana y y competitividad territorial en América
regional: introducción a la relación entre Latina. Revista de la CEPAL No. 85, 81-100.
territorio y desarrollo. (Germán Pérez y
Elena Pou., Trad.). Cartago, Costa Rica: Sobrino, Jaime. (1999). El contexto espacial de
Editorial Tecnológica de Costa Rica. las actividades económicas (Documento
de Trabajo No. 30). México DF, México: El
Porter, Michael E. (2003). Locations, Clusters Colegio Mexiquense.
and Company Strategy. En Gordon Clark;
Maryann Feldman y Meric Gertler (Eds.), Tirado, Daniel; Pons, Jordi y Paluzie, Elisenda.
The Oxford Handbook of Economic (2006). Los cambios en la localización
Geography (pp. 253-274). New York: de la actividad industrial en España,
Oxford University Press. 1850-1936. Un análisis desde la Nueva
Geografía Económica. Revista de Historia
Quigley, John M. (1998). Urban Diversity and Industrial, (31), 41-64.
Economic Growth. Journal of Economic
Perspectives, 12 (2), 127-138 Tolley, G.S. y Thomas, V. (eds.). (1987). The
E c o n o m ic s o f Ur b a n i z a t io n a n d
Rauch, James E. (1993). Productivity Gains Urban Policies in Developing Nations,
from Geographic Concentration of Washington D.C.: World Bank.
Human Capital: Evidence from the
Cities. Journal of Urban Economics, 34 Von Thünen, Johann Heinrich. (1966). Isolated
(3), 380-400. state (Carla Wanterberg, Trad.). New
York: Pergamon Press. (Trabajo orginal
Richardson, Harry. (1973). Economía Regional: titulado Der isolierte staat in beziehung
Teoría de la localización, estructuras auf landwirtschaft und nationalökono-
urbanas y crecimiento regional (Juan mie publicado en 1826).
R. Cuadrado Roura, Trad.). Barcelona,
España: Editorial VICENS-VIVES. (Trabajo Weber, Alfred. (1929). Theory of the loca-
original en inglés publicado en 1973). tion of industries. (Carl Friedrich,
Trad.).Chicago, Illinois: The University of
Richardson, Harry. (1978). The state of regio- Chicago Press. (Trabajo original publica-
n a l economic s: A sur vey a r t icle. do en alemán en 1909).

Ciencias Económicas 28-No. 1: 2010 / 169-202 / ISSN: 0252-9521

You might also like