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i at rte et en alan ee en eal ABUSOS Y VICIOS DE LA YERBA ACCION SOD Cer EMER colt Tm mT itt Numero 155 - Julio 1995 QUIEN ES LA EDUCACION? TEMA CENTRAL x ao I“ situacién lingiifstica del Paraguay no se marca ni se dibuja con nitidez. Su curso es tan sinuoso y hasta im- previsible como nuestro rio Pilcomayo. Mas atin; podemos saber algo de su situacién actual, pero es bastante problemético saber cul seré el rumbo y situa- cién de su futuro. zCémo entonces trazar una politica lingiifstica en esas condi- clones? {Qué papel asignar a las Jenguas del Paraguay en el pro- ceso de educacién? La problematica es amplia y compleja, como nuestra vida. Pero no por ello, incontrolable, siempre y cuando haya ciertas pautas de polftica lingiiistica. tHay quedejar quecorrasinmés, como aparente siempre lo ha he- cho, segiin su curso “natural”? Enestas paginas quisiera tra- tar el tema de la conveniencia de aprender guaran{,como parte de la solucién del futuro lingiistico del Paraguay. Aprender guarani en un contexto de orientacin hacia el bilingiiismo. Seguin las cifras del Censo de 1992 son hablantes de guaraniel 87% de la poblacién paraguaya, El cuadro estadistico de las len- guas en el Paraguay se presenta de este modo: 22 ACCION 155 =» eg oh EbGex3| LENGuas} I ‘S6lo guarant 37% Castellano y guarani 50% ‘Solo castellano 7% Otros idiomas 6% 100% Sin embargo, el observador més distraido se da cuenta ense- guida que las politicas educati- vas y los medios de comunica- cién no se rigen por esas estadis- ticas. Las necesidades no esta- rian, pues, satisfechas, pero po- cos estarfan sintiendo su falta, iQuién debe aprender guarani? Enprincipioel quenolosabe. Los que ya saben guarani no ten- drian necesidad de aprenderlo. Sucede, sin embargo, que toda lengua es un gran tesoro de po- tencialidades que sdlo se actuali- zan a medida que la persona las @jercita; es decir, enlamedidaen quehablaousalalenguamedian- te la escritura u otros medios. La lengua se conserva en la memoria de un pueblo onacién - alguien a veces la registra y la depositaen undiccionario-, pero s6lo vive cuando hay una comu- nidad de personas que se comu- nican entre sf usando las pala- bras de esta lengua. Ahora bien ese uso siempre Puede ser ejercido con mayor Aprender guarani, ¢para qué? Debes tener en cuenta que el juego de Tenguaje es, por ast decirlo, algo im. previsible;es decir, que carece defun- damento. Nirazonable, ni no razona- ble. Es como nuestra vida. Wittgenstein Bartomeu Melia, sj. perfeccién. El uso puede serinci- piente, rutinario, incorrecto, sin gracia, sin gusto, sin ton ni son, pobre, ridiculo odesagradable;y por el contrario, excelente, creativo, adecuado, agradable, dulce, apropiado, rico, digno 0 atrayente. Nadie nace dominan- do el uso de una lengua; la len- gua es algo que se aprende. La Tengua en desuso muere; con el uuso crece. Todos tenemos que aprender siempre més lengua, porque su dominio total es practicamente inabarcable. Pero también es cierto que hay grados de uso de la lengua suficientes y satisfactorios, sin Megar a ser muy elevados. Lascomunidadeslingifsticas tienen varias formas de hacer aprender una lengua: haciendo escuchar y repetir lo escuchado, dando prestigioal que hablabien, ridiculizando 0 volviendo la es- paldaal quehabla mal. Explican- do el uso correcto de la lengua mediante reglas, corrigiendo lo que se dice fuera de lo comin, aumentando el caudal de pala- bras usadas. Los que saben guarani siempre pueden apren- der més guarani, y la sociedad tiene que tener medios para ha- ceraprenderguarani.;C6mo? Lo veremos después. julio 1995 —L_ 4Deben los paraguayos apren- der el guaran? Sies paraguayo “natural”, es decir nacido en esta tierra, resul- taun tanto anormal que no haya aprendido la lengua desu comu- nidad nacional, hablada, como veiamos por més del 87% de sus conciudadanos. El paraguayo natural que no habla guarang es que en alguna época de su vida, por circunstanciasprobablemen- te ajenas a su decision, se ha en- contradoaisladode la comunica- cidn general con su pueblo; esta Persona -a veces serd toda una familia- habra considerado de poca monta el comunicarse con el comuin de los paraguayos. De hecho ha construido su mundo con hablantes de otras lenguas, que como él hablan exclusiva- mente el castellano, el alemén,el francés 0 el coreano. Hay que Teconocer que hay ambientes en el Paraguay donde no corre el guarani, como tam- Poco corre en otros el castellano. éTiene que aprender guarani . este ciudadano pa- raguayo? Varias ra- zones asi lo aconse- jan. El hecho de no saber guarani puede i Provocareneléluna especie de resenti- miento, que se camufla en senti- mientode superiori- * dad. Quienes no sa- ben guaranf fécil- mente desarrollan unaactitud agresiva, como si se encontra- rananteun obstécu- Jo molesto e inespe- rado. En muchas circunstancias de la vida esa persona que no sabe guaranise verd ensituacionesun tantoembarazosas. Miraconsus- picacia al hablante de guarani - puede ser una persona que él considera “inferior” ,comosuem- pleado, su mucama,el peén dela Julio 1995 estancia, el pobre de la calle- de quien llega a sospechar segun- das intenciones, y hasta ocultos manejos. Peor todavia si su do- minio del guaraniesmuy escaso, que entonces la comprensién a medias, le lleva ala risa de bobo, o al enfado. Pero la razén mayor y ms profunda para aprender guarani deriva del hecho de que el no hablante de guarani se autoexcluyedemuchosdislogos, de la relaci6n con sectores am- pliosdelapoblacisn y dela com- prensin misma de elementos esenciales de su ser paraguayo. iNo hay en ciertas politicas castellanizantes un sentimiento de despecho contra una riqueza quenoseconsigue condinero,de la que uno no puede apoderarse sin mas? Quien se cree pelotajdra, Por su posicién econémica o su poder ‘politico, al no poseer la lengua, quisiera excluirla del mapa. Sino puede ser miaqueno sea de nadie, Enel Paraguay la persona que no sabe guarané representa un cierto peligro, pues puede llegar a reacciones imprevisibles. Por otra parte hay extranjeros que, en llegando al Paraguay, 0 después de varios aftos de esta- TEMA CENTRAL dia hansentidoel deseo deapren- der guarani. Y algunos, mal que mal, lo han conseguido. ;Cudles sonlasrazones queleshan movi- do? Estas personas deseaban pa- recerse a la mayoria de los Paraguayos, querian captar algo més dela cultura de este pueblo, querian entender y ser entendi- dos, tenfan algo que decir que sélo en guarani podia llegar a ciertos sectores de las personas con quienes trataban. Aprendie- ron pues guarani comerciantes, misioneros, voluntarios en pro- gramas de ayuda, estudiosos de Ja cultura paraguaya. ¢Por qué hay paraguayosque no llegan a sentir este tipo de motivaciones? {Qué puede aprenderse del guarani? 5 De una lengua, de cualquier lengua, lo que se aprende es un modo de ver el mundo, una cul- tura. Si otra lengua tuviera exac- tamente la misma cosmovision que la mia, los mismos recursos, el mismo sistema, no tendria mucha gracia aprenderla. Si otra lengua apenas difiere de la mia en el sonido de las palabras, en que las palabras suenan diferen- temente, no parece que aporte ACCION 185 23 TEMA CENTRAL de dominio restringido, que no cosa. Basta con que alguien me ofrezca una buena traduc- cién y asunto concluido. ‘Ahora bien, lo que justifica la existencia de las lenguas es la existencia de sumundo. A lo lar- godelossiglos laslenguassehan hecho y se han modificado, han rogresado o se han debilitado, enlamedida en que su mundo se ha desarrollado y se ha fortaleci- do. Nada como una lengua para crear un mundo. Lalenguaguaraniexpresa un mundo propio, una historia, una cultura, una manera deaprehen- der y sistematizar experiencias. No hay que tener miedo en decir que el guarant tiene su propia figura, sustenta una cultura de- terminada y se ha desarrollado para expresar un mundo que no es igual al que se dice en castella- no. El guarani corresponde toda- via a una forma de vida que yo caracterizaria como una vida in- digena vivida por una sociedad nacional:la paraguaya. Loqueseaprendedel guarani es precisamente eso, y ninguna otra experiencia lingiifstica lo puede dar tancabalmente. Elcas- tellanoofrece otras posibilidades, que pueden ser mayores, pero que no son las mismas. La inserci6n en esa cultura - ya que no hay otro término mas apropiado, si no es el guarani flande reko- es lo més importante que se aprende del guarani. En segundo términose puede aprender del guaranimuchas pa- labras, giros y expresiones que ensanchan cierta visiéndel mun- do. Losescritores, oradores y tra- bajadores de la comunicacién se ven continuamente en la necesi- dad de consultar diccionarios generales o especializados para aumentar su vocabulario y cons- truir su expresin de modo co- rrecto y variado. Enriquecer el vocabulario del guaranf es una tarea que hay que tomar en serio, como lo hacen los trabajadores de la cultura en otras lenguas. ee .. Pero no creo que sea pedag6- que se espere del guarant pueda duplicarexactamente todo lo que se dice en castellano, y en esa especie de pareo y con- frontacién tenga que adaptar vocablos antiguos 0 crear nue- vos, para etiquetar conceptos de Ia vida moderna. Al castellano lo queesdel castellano, yal guarani To que es del guarani. ‘Una lengua noes menos len- gua aunque use muchos présta- mos de otros lenguas. El inglés, concretamente es una de las len- guas més vocablos extrafios ha incorporado -un verdadero jopard-y los ha asimilado sin em- acho. El guarani,comootraslen- guas, es algo mas que un tubo por el que circulan palabras; es ‘un estémago en que se digieren experiencias. Y de esas experien- cias vive una cultura y un pue- blo. {Qué se aprende en guarani? Se aprende en guarant a ha- blar de las cosas de cada dia, lo cual no es poco. El guarani ha- blante tiene una lengua de todos los dias que es importantisima para la construccién de la perso- na humana, sussentimientos,sus valores, sus relaciones, su me- moria y su sociabilidad. La la- mada lengua coloquial, por ser la de més uso en la conversacién, no es menos estimable. Hablar en familia, con los amigos, con los vecinos de la comunidad, es- cuchar y conversar en lacalle,en el trabajo, enla fiesta, es una acti- vidad que llena el tiempo y las aspiracionesde la mayoria de las mujeres y de los hombres, de ni- fos y ancianos. La inmensa ma- yoria de la humanidad ha vivido con gran dignidad y no poca sa- bidurla haciendo uso de esa len. gua coloquial. Ciertamente el progreso de los conocimientos y de las artes ha incrementado notablemente losnombresdelascosasyelmodo de decirlas. Se crean en todas las lenguaslenguajesespecializados todos poseen. Aun en las mal Tamadas “tribus primitivas” exis- tenesoslenguajesespecializados, ionados con frecuencia con igion y con la salud. Los Guaranies poseyeron y poseen en esos dos campos una notable riqueza de vocabulario y un modo de decir poético que des- pierta la admiraci6n y encanta, Poder tener un acceso directo ala poesia guarani, lade los ndi- genas, la recogida en lasobrasde Ledn Cadogan, por ejemplo; yla de los paraguayos, como Emiliano R. Fernéndez, Teodoro S. Mongelés, Dario Gémez Serrato, y tanto otros, esalgo que valela pena. A noser que alguien estéen contra de toda y cualquier poesia,detoda y cualquier litera- tura. En guarani se aprende una sabiduria popular que ha queda- do cristalizada en dichos y pro- verbios, en los famosos y diverti- dos fie’énga, picantes y “verdes” muchos de ellos, alegres inyec- ciones de buen humor que sacu- den al mas dormido. Y esta todo el campo de los “casos”, por los que circula la savia de una histo- ria y modo de entender la vida, que tiene profundas raices. ¢Va- mos a practicar con la cultura paraguaya la deforestacién le- vada a cabo en la ecologia? La lengua guarani abarca un territoriodecultura quecontiene no pocos recursos, y esto es 10 que se debe explotar en primer lugar. Vienedespuéslacuestionque parece preocupara tantos: ;cOmo seaprenderdmateméticasy otras ciencias lamadas abstractas en guarani? Una salida es que S¢ tome en préstamo palabras de otras lengua generales, como lo hicieron esas mismas lenguas ge” nerales que las tomaron presta- das del griego o del latin. La cit~ culacién de palabras entre le guas no tiene fronteras. También el espafiol incorporé amer canismos y no pocos guaranis” julio 1995 ri mos. No es la palabra suelta la quehacela purezaoimpurezade una lengua, sino el modo como se engarza en el conjunto. Puedo admitir que el guarani eneste momento no est adapta- do para este tipo de discurso. Ha upéi? {Estuvo nunca adaptado el castellano al uso del lenguaje in- dustrial moderno, de los auto- motores, de las computadoras, del popular ftitbol? Y sin embar- go ha asimilado y tragado, modi- ficdndolo, cuanto le parecié ne- cesario al efecto. Para ciertos discursos esté el aprendizaje de nuevos recursos. Esto es Io que hacen todos los cespecialistas. Los botinicos y los farmacéuticos, los médicos y los. quimicos, y tantos otros, hablan castellano -es decir usan la gra- matica del castellano-, pero con muchisimas palabras de origen externo, Cada especiatidad echa manoderecursosespecificos,que hoy constituyen un.universo cul- tural supranacional, en el que se esfuman los colores locales. Elparaguayo quenoaprende en guaranf a cultura paraguaya es facilmente un extranjero en su tierra. Dénde se aprende guarani? En la casa y en la calle. En familia y en sociedad. Estos son los lugares “naturales”, que es julio 1995 dondesedalacomunicacién réal. La escuela apenas es el apoyo que permite sistematizar conoci- mientos que ya estan en uso. Porello laescuela nosuele ser el lugar més apto para aprender una lengua. En el mejor de los casos en la escuela se crean con- diciones para el uso correcto y el enriquecimiento dela lengua. En esto hay queser bastante claro ya que de ahi provienen no pocas frustraciones. Las familias cam- pesinas desean que sus hijos e hijas aprendan el castellano y san quella escuela se lo dara. Ahora bien, la escuela rural del Paraguay nunca ha estado en condiciones de crear un ambien- te en el que se aprenda una se- gunda lengua como el castella- no. Losbilingiies paraguayoshan conseguidoesa competencia gra- cias a que hay dos culturas, dos sociedades y dos ambientes en los ‘cuales corren sucesivamente, a veces mediante alternancias muy répidas, dos idiomas. Gra- cias a este mecanismo se ha for- ‘mado esa mitad de bilingiies del Paraguay. Nilosque han pasado por la escuela son por ello bilin- giles, ni todos los bilingiies han pasado por la escuela. Quiere decir esto que la ense- fanza del guaran{-o del castella- no- en la escuela es del todo in- TEMA CENTRAL ‘itil. Deningunama- nera. Los programas de educacién bilin- giie intercultural, si son realistas, tien- den a crear condi- ciones y ambientes en que el guarani y el castellano sean deseados y usados como instrumentos de comunicacién provechosa y agra- dable. Para ello tanto los padrés, los pro- fesoresylospropios alumnos, segtin su grado y capa- cidad, tienen que ser conscientes de hasta donde va lo que se ofre- ce. Ni se vuela en el aprendizaje de una lengua, peronoesnormal que se pase estancado por afios en un punto muerto, como suce- de por ejemplo, enel aprendizaje del inglés en los colegios de se- cundaria. La pedagogia escolar del guarani no tiene que ser pesada ni odiosa. Hay profesores que piensanaumentarel prestigiodel guarani haciéndolo aparecer di- ficil. Las academias y escuelas que ofrecen cursos de lenguas extranjeras hacen exactamente lo contrario, y con raz6n. Una len- gua se aprende mas como juego agradable que como ingrata ta- rea. Noa todos habran convenci- do las razones dadas aqui. Péro creo que son razonables. Dos lenguas oficiales en el Paraguay son dos lenguas usa- das y aprendidas por la mayoria delosciudadanos paraguayos. Y esto es posible y muy deseable. O AccION 185 25 CURIOSIDADES HISTORICAS Como tantas otras “drogas”, la yerba mate ha tenido una historia ideo- légica en la que se refleja la economia, la politica y hasta la religion. Las curiosas opiniones sobre la yerba son un teflejo de la sociedad, sus modas y sus gustos. Esta es nuestra tercera nota histérica sobre el tema (ver ACCION, n? 153 y 154). Abusos y vicios de la yerba mate eXerba del diablo o yerba de Santo Tomds? Las opiniones es- wvjeron por mucho tiempo divi- , debido sobre todo a los quesu granconsumo traia sigo. ‘Abusos en la explotacién yenel comercio Un primer abuso estaba en la gran cantidad de yerba que se consumia. Si se usaba abusi- vamente habia que producirlaen grandes cantidades. Y esto origi- naba a su vez una explotacién inhumana de los yerbateros. Ga- nancia de pocos, mal de muchos. Seguin el historiador jesuita Pedro Lozano, el propio gober- nador Henandarias ya se habria dado cuenta de las consecuen- cias desastrosas que para losmis- mos indios ibaa tener la explota- cién dela yerba mate, esa misma yerba que ellos consumian tana gusto. 38 accion 155 Bartomeu Melié, sj. “Por el tiempo en que empe- zaban los espaiioles a aplicarse mésal beneficio de la yerba, des- cubrié casualmente que los in- dios remeros de su embarcaci6n Ievaban una talega del género; disimul6 por entonces, pero ape- nas salt6 en tierra, lo hizo que- mar en la plaza puiblica de Bue- nos Aires, diciéndoles: No extra- ‘iis esta demostracién, porque me mueve @ ello el gran amor que os profeso; .. esta yerba ha de ser fatal rruina de vuestra numerosisima na- cidn, y jojalé jamds ninguno de vo- sotros hubiera descubierto a los es- pariolesel pernicioso uso della, que tan caro 0s ha de costar en los tiem- pos futuros!” Elmayorabuso enlacuestin de la yerba fue el modo de su comercializacién, que perjudica- baa los yerbaterose incluso asus productores. Sigue diciendo Lozano: “El dia de hoy es la granjeria -el ma- yor negocio y lucro- de mayor interés que produce la provincia del Paraguay, no para los indios y para los espafioles que la bene- fician, sino por los mercaderes que la van a comprar ala Asun- cidn o Villarrica, o la encuentran ya en Santa Fe 0 Buenos Aires, desde donde 1a conducen en gruesas cantidades, por la pro- vincia de Tucumén, hasta Poto- si,ymasadelante, por el reinode Chile, embarcada hasta Lima; y alguna pasa, bien que poca, a Espafia y a Inglaterra. Sin em- bargo, el gobierno de este reino parece ha hecho esfuerzo para que no se introduzca, por no dar esa ganancia a los espaiioles, po- litica que si la observara Espaiia con otras drogas superfluas que nos viene por sus manos, y por las de otros extranjeros, evitaria la extracci6n de varios millones, y enriqueciera con lo que ellos, disfrutan para hacernos guerra a nuestra costa.” Por lo que parece, la yerba mateestuvoa puntodeser objeto de una especie de guerra comer- cial, un competitivo comerciode “drogas” que ya se insinuaba en aquel tiempo. Y esque gran parte del dominio del mundo no solo se establece a partir del control de alimentos, sino de la difusiéiy de las drogas. Se dirfa que nin- giin gran imperio politico se ex- tiende sin que con ély por medio de élno se insintie la aficina algin tipo de droga, “dura” como el opio, la cocaina, la heroina, o “blanda” como el tabaco, el café 0 la coca-cola. Seestuvoa punto de tener un imperio del mate, pero -por suerte © por desgracia- éste no se consolidé. El vicio de la yerba En 1596 el procurador Alonso dela Madrid atribuia a la yerba casi todos los vi- cios, y por lo tanto debia ser suspendida su misma pro- duccién. Enumera por lo me- nos 6 grandes dafos que se siguen del consumo dela yer- ba. El primer dafio era de los propiosindios que “padecian infinitamenteenmontes y pa- rajes pantanosos y contraian muchas enfermedades”. En su ausencia sus familias se velanademsdesamparadas. Otro daito consistia en que los vecinos y soldados de la mis- ma Asuncinseendeudaban més alladesu posibilidadescompran- do yerba al menudeo. Lo que escandalizaba a nues- tro procurador era que “se ha extendido tanto el vicioy la mala costumbre de tomar yerba entre losespafioles, sus mujeres e hijos que exceden en elloa losindios”. Este vicio pues debia ser extirpa- do, “aunque no sea més que por el pundonor que deben tener los julio 1995 CURIOSIDADES HISTORICAS espajioles”. Las ruedas de mate se vol- vian, siempre siguiendo a nues- tro critico procurador, “conver- saciones de furia infernal contra las vidas, honras y famas de los préjimos con grandes desver- giienzas”. Elabuso dela yerba era moti- vo de no servir a Dios como se debia, “porque por tomarla, no ‘oyenmisanisermones, quebran- tanlosayunosy dan malejemplo a los hijos que siguen a los pa- dres”. Esteabuso dela yerba era por fin perjuciicial a la salud, hacien- do al hombre inttil para la gue- 11a, quitandole el brio, y Hevan- do a torpezas quel procurador, Por ser “tan sucias”, no se atreve a mencionar. Debido a lo que se considera- ba vicio y abuso lovieron prohi- biciones y hasta excomuniones sobre los que tomaban yerba mate. En 1596 el gobernador del Paraguay Hernandariasfulmina- ba con 10 pesos de multa y 15 dias de cArcel a quien fuese sor- prendido bebiendo yerba. El gobernador Diego Marin Negrénseexpedia con no menos determinaci6n: Hay en esta gobernacién gene- ralmente entre kombres y mujeres un vicio abominable y sucio que es tomar algunas veces al dia la yerba con gran cantidad de agua caliente, con grandisimo dati de o espiritual xy temporal, porque quita totalmente la frecuencia del Santisimo Sacra- mento y hace a los hombres holgazanes, que es la total rui- na de esta tierra y como es tan general, temo que hola podran guitar, si Dios no lo hace. Anti-matero fue también el primer provincial de los jesuitas en el Paraguay, el padre Diego de Torres Bo- lo, aunque vefa con bastan- te realismo que el “vicio” estaba demasiadoarraigado, para que desapareciera lue- g0: Casi todos los que usan de este vicio dicen en confesion y fuera de ella que es vicio, pero que verdaderamente no se pue- den enmendar y entiendo que asilocreen,ylousan cada dia... No digo el esciindalo que los espartoles y sacerdotes dan con este vicio... El tal vicio hacia que la gente “no puede aguardar a quesediga la misa sintomar esta yerba” y cuando van, “salen con gran nota de la misa a orinar frecuentemente”. Todas las razones, prohibi- cionesy excomunionesdel mun- do no bastaron para detener el uso de la yerba. ¥ asi tampoco tardaronenaparecerlas virtudes casi divinas de la yerba. Y de eso vamos a tratar en la proxima entrega: Del buen uso y virtudes de la yerba mate. ACCION 155 39

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