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Filón

Pensador judío que recoge la cultura helénica para su doctrina religiosa de la salvación. Muestra una gran
preocupación por el alma del hombre y su camino de ascenso, camino de retorno, de vuelta a Dios,
inspirado en las Antiguas escrituras y la revelación de Moisés. "Todo progreso es para el hombre un
retorno. El pecado ha relajado los vínculos ontológicos y morales que constituyen la realidad
humana. La finalidad de la Ley y de la reflexión sobre la Ley, es reconstruir estos vínculos en la
vida, después de haber comprendido la naturaleza gracias al conocimiento".

Concepto de Dios:

Se trata de un Dios arquitecto que crea lo material a partir de un modelo inmaterial que lo precede. “Y si
se quiere hablar en términos más claros, se puede decir que el mundo inteligible no es otro que el
Lagos de Dios, estando Dios ya en acto de crear, porque la ciudad inteligible no es otra cosa que
el cálculo del arquitecto cuando ya proyecta fundar la ciudad”. El mundo es, por tanto, engendrado
por Dios, adquiriendo un carácter inferior. Dios es la causa activa, mientras la materia, que se supone
preexistente, es la causa pasiva que por sí misma no puede ser nada en concreto: Es Dios quien la
determina y la hace ser. “Dios, quien trajo el no ser al ser, lo puede todo. Imprimió su semejanza en
el universo haciéndolo único. Él es causa de la vida.”.

¿Cómo crea Dios? “Dios creó por bondad; no rehusó comunicar la excelencia de su propia
naturaleza. Sin ayuda de nadie, quiso hacer el bien sin reserva; pero Dios da según la capacidad
del que recibe.”

El hombre es la creación más amada de Dios. El alma de este es un soplo divino. “En resumen, el Dios
creador es un Dios trascendente, arquitecto, lleno de bondad, gobernador del mundo, providente
especialmente en la creación, con una particular solicitud por el hombre, juez benigno. La visión
del universo es muy positiva. Es copiado según las ideas, es único como Dios…”

El concepto de creación.

Dios lleva en sí el Logos, modelo de la creación del mundo inteligible. “El mundo inteligible no es otro
que el Logos de Dios”. Esto quiere decir que lo sensible está supeditado a lo inteligible, pues se sirve de
este último para su configuración. “Filón, comparando lo inteligible con lo sensible, nos dice: "lo
inteligible sobrepasa tanto a lo visible en resplandor y luminosidad, según mi juicio, como el sol
sobrepasa a las tinieblas, el día a la noche, el intelecto que conduce toda el alma, a los ojos del
cuerpo". Tómese en cuenta lo siguiente: “Pero recordemos que el mundo sensible es creado, con
perfección, según el modelo del mundo inteligible.”. También esto: “Quedémonos en el mundo
sensible. Filón nos dice que la forma toda entera, la totalidad de este mundo sensible, es imitación
de la imagen divina. Y como ya dijimos, Dios hizo único a este universo, a semejanza de su propia
unicidad.”

El mundo creado por Dios está gobernado por leyes y principios que también tienen su origen divino.
“Hay reglas y leyes que Dios ha definido como inmutables en el conjunto del mundo”.

“En resumen, Filón ve la creación como una gradación armónica y contrastada, que va desde lo
inteligible, pasando por lo genérico, hasta lo sensible. Y a su vez, en lo sensible sublunar, la ve
como una subida progresiva hasta el hombre. En lo sensible se hermanan el comienzo y el fin, el
cielo y el hombre, ambos siendo lo mejor de sus respectivos órdenes. El proceso 'de la creación
es ordenado, hermoso; está regido por las leyes del número.”
El concepto de hombre

El hombre es compuesto de cuerpo y alma, de substancia terrestre y soplo divino, participa de ambas
naturalezas. “Todo hombre, por su inteligencia, está íntimamente unido al Logos divino, porque el
hombre es una impronta, un fragmento, un reflejo de la naturaleza bienaventurada, y porque,
mediante la constitución de su cuerpo, está muy unido al mundo entero". Dios se sirvió de su propio
Logos para modelar al hombre, el más perfecto de los seres terrestres. Si bien el hombre está sometido a
leyes de la naturaleza, dice Filón que el universo fue preparado para el hombre: “Dios le ha preparado el
universo como festín y espectáculo para que viviera y viviera bien”.

¿Cuál es el pecado del hombre tras su caída? “Adán, jefe de la raza humana, gozó de una plenitud
extraordinaria, como quien es nacido de las manos de Dios. Pero la mujer fue la causa de su caída.
Es el entendimiento del hombre, seducido por el placer a través de las sensaciones. El castigo
consiste en una vida de penurias, en haber pasado de la inmortalidad a la mortalidad, de amo a
esclavo. Pero ha sido temperado por la misericordia de Dios Inteligencia y sentidos”

El entendimiento es la parte del alma que permite al hombre apreciar los inteligibles. “Pero no todo es
cognoscible para los mortales (169). Los hombres serán aptos para conjeturar lo verosímil y lo
plausible, pero no para captar la verdad pura; se fiarán más de la apariencia y de la sofística que
de Dios y de la sabiduría (170). Pero hay verdades que es razonable que el pensamiento humano,
poseído por el amor y la sed de la sabiduría, pueda alcanzar (171)”

El Logos en Filón – Rodolfo Vázquez

Tengamos presentes estas dos primeras nociones: “el logos en Filón será entendido dentro de un
marco espiritual, como razón inmaterial más que como razón material cósmica” y “el logos se
comprenderá ahora como una realidad distinta e inferior que "participa" de la razón divina”.

Téngase en cuenta que Filón parte desde una teología negativa, esto es, que remarca la
incomprensibilidad de Dios. Esto no quiere decir que no podamos conocer nada de Dios, sino que Dios
trasciende todas las cosas, incluso la inteligencia: “Dios está solitario, separado, porque es único y
nada semejante a Él”. Dado esto, el hombre necesita un medio para conocer a Dios. Precisamente, el
logos es ese medio o mediador. “El logos, afirma Filón, es el más antiguo de los seres; es el hijo
primogénito de Dios; es la imagen de éste. El logos, sin embargo, es inferior a Dios, se halla en la
frontera que separa la creación de lo creado. No es ingénito como el Padre, ni engendrado como
nosotros, sino intermedio entre los dos extremos”. El logos contiene las ideas o formas que
configuran la realidad material, y posee un carácter instrumental en el fenómeno de la creación y en el
fenómeno de la providencia, esto es, tanto en la creación como en el gobierno de Dios sobre el mundo.
“El mundo ha sido creado yes producido enteramente por una causa. El logos mismo del Creador
es el sello (sphragis) por el que cada ser ha sido informado. Por eso, cada una de las criaturas
posee desde el principio su forma (eidos) perfecta, por cuanto es la impronta y la imagen del logos
perfecto.”. Por último, cabe decir que el logos no es una potencialidad de Dios, sino una hipóstasis,
personificado y distinto a él (por lo tanto, ontológicamente inferior).
El dios incomprensible en Filón

“Éxodo 23 establece que la faz de Dios nunca podrá ser vista, sino sólo sus espaldas, esto es,
aquello con lo que carga, o, bien entendido, aquello que Él produce y que dependerá de Él, la
creación como su anverso.” Este fragmento nos presenta la idea inicial de que Dios no puede
aprehenderse como un objeto inteligible cualquiera, comprendiendo su esencia, sino que nuestro
acercamiento a él está mediado únicamente por su creación, es decir, su producto. Solamente de sus
criaturas, de su mundo, podemos encontrarlo de alguno u otro modo. “Todo lo que se sigue de Dios –
sus ‘espaldas’, según la cita bíblica– puede ser aprehendido por los hombres de bien, y a través
de esta aprehensión, les resultará evidente que Él existe, sin cualidad, sin género, sin especie, sin
diferencia”. En efecto, Filón presenta a Dios sin cualidad alguna, inefable, incognoscible, indeterminado,
cuyos predicados son propiedades de suyo, esto es, únicas como su esencia misma. Véase lo siguiente:
“Filón observa que ‘los compañeros del alma’, que pueden conversar con las naturalezas
incorpóreas inteligibles, no comparan al Existente con forma alguna de las cosas creadas, sino
que lo disocian de toda cualidad, y aprehenden a Dios como una ‘mera existencia’ sin figura
alguna; así la mente puede captar la concepción de la sola existencia, sin investirla de forma, a
pesar de que muchos no sabrán extraerse del ‘envoltorio de la carne’ para describir una naturaleza
que es auto-suficiente, simple”. Dios presenta una disimilitud con lo creado por él, de lo que se sigue
todo lo que hasta aquí se ha afirmado acerca de sus propiedades (no cualidades). “Los poderes de Dios
son sus predicados, pero al ‘Innombrable’ los epítetos con que nos dirigimos a Él no lo rozan
siquiera, al designar únicamente sus propiedades como Hacedor, pero no Su incognoscible
esencia.”

“No supongáis que la visión se le presentó a los ojos del cuerpo, pues éstos sólo ven los objetos
sensitivos, y éstos son compuestos, susceptibles de corruptibilidad, mientras que lo divino es no
compuesto e incorruptible”. Este fragmento revela la imposibilidad de aprehender a Dios por los
sentidos, del mismo modo en que también es afirmada tal impotencia respecto a la mente, es decir, a la
disquisición filosófica, la intelección, etc. “Filón infiere de lo anterior que por Su misma naturaleza es
imposible ver a Dios, e interpreta que ni siquiera la mente podría acceder a tal visión”. Filón
sustenta la incomprensibilidad de Dios en la imposibilidad de nombrarle. “Nada puede decirse de Él,
sino solamente que es”

¿Cómo crea el Dios de Filón, cómo produce? Encontramos en Filón una similitud al pensamiento
plotiniano respecto de la procesión del Uno: “Dios no cesa jamás de producir; del mismo modo en
que lo propio del fuego es quemar y lo propio de la nieve helar, así produce Dios”.

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