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Personaje

El personaje es probablemente la noción dramática que parece más evidente,


pero en realidad presenta las mayores dificultades teóricas.
La palabra latina persona (mascara) traduce la palabra griega que significa papel
o personaje dramático. Solo a través del uso gramatical de persona para
designar las tres personas (yo- tú- él), adquiere la palabra la significación de ser
animado y de persona humana. (Pavis, 2002)

Vestuario
En la puesta en escena contemporánea, el vestuario juega un papel variado y de
gran importancia, transformándose verdaderamente en esa “segunda piel del
actor” de la que habla TAIROV a comienzos del siglo. Esto se debe a que el
vestuario, siempre presente en el acto teatral como signo incluso del personaje
y del disfraz, se ha contentado por el largo tiempo con un rol simplemente
caracterizante para vestir al actor según la verosimilitud de una condición o de
una situación.
Actualmente, el vestuario adquiere, en el seno de la representación, un lugar
mucho más ambicioso, multiplica sus funciones y se integra al trabajo de
conjunto de los significantes escénicos. Tan pronto como aparece en escena, la
vestimenta se transforma en vestuario teatral: es sometida a los efectos de
amplificación, simplificación, abstracción y legibilidad.

Personaje

Noción fundamental del teatro, particularmente difícil de delimitar en la medida


en que el personaje, noción textual cuya función es la de ser un elemento en
una secuencia narrativa, es también el “soporte “de un ser humano, parte de un
conjunto de signos complejo, la representación.
La noción misma de personaje se volvió confusa por la doble naturaleza del
personaje teatral, ser de ficción al cual se une un ser viviente. El personaje es un
ser de papel al cual deberá corresponder un artista: doble estatus de un ser de
ficción*-sujeto de un discurso ficcional-y de un ser real y concreto, el actor. De
allí surgen las dificultades prácticas, el lexema personaje puede ser el sujeto de
enunciados ambiguos: es el “ser de papel” que ama, pero es el actor quien dirá
las palabras y hará los gestos de amor.

Vestuario

El Vestuario en el teatro es un sistema de signos que tiene tres funciones:


1)Expresar el teatro exhibiendo un elemento esencial (salvo excepción) de la
diferencia entre el teatro y la vida de todos los días; 2) expresar al individuo en
la particularidad de la persona, con insistencia sobre el cuerpo, sus
particularidades anatómicas y su gestualidad; 3) asegurar o confirmar la
referencia*, a la historia, a la clase social, o también a la historia del teatro
(vestuarios de tipos codificados). El vestuario mostrara el lugar y el momento en
que se desarrolla la acción. Puede que -y es un elemento interesante de la
diferencia entre el texto escrito y el texto espectacular-la referencia que
propone el vestuario sea diferente de la referencia inducida por el texto (por
ejemplo, una obra de Moliere en ropajes modernos). El juego escénico con la
referencia en el campo del vestuario es particularmente interesante en la
medida en que puede producir sentidos inesperados: otra relación, por ejemplo,
con lo político, con lo social, con lo histórico; otra relación también con lo
estético; por ejemplo, la riqueza a la vez semántica y estética del vestuario de
inspiración japonesa para Ricardo III (de Shakespeare, montado por
Mnouchkine).
Es que el vestuario, mas allá de sus funciones en el relato, es también un
elemento en las construcciones artísticas que propone la escena, en relación con
formas, colores, movimientos con los elementos del decorado; evidentemente,
el vestuario es una parte en la construcción de las imágenes escénicas.

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