You are on page 1of 24

Petrarca

Francesco Petrarca.

Nombre completo Francesco Petrarca

Nacimiento 20 de julio de 1304


Arezzo

Defunción 19 de julio de 1374 (69 años)


Arquà Petrarca, Padua

Ocupación Escritor, humanista y poeta

Lengua de Italiano y latín


producción
literaria
Obras notables Cancionero

Petrarca - Wikipedia, la enciclopedia libre


es.wikipedia.org/wiki/Petrarca
Francesco Petrarca (Arezzo, 20 de julio de 1304 – Arquà Petrarca, Padua, 19 de julio de 1374)
fue un lírico y humanista italiano, cuya poesía dio lugar a una corriente literaria que influyó en
autores como Garcilaso de la Vega (en España), William Shakespeare y Edmund Spenser (en
Inglaterra), bajo el sobrenombre genérico dePetrarquismo. Tan influyente como las nuevas formas
y temas que trajo a la poesía, fue su concepción humanista, con la que intentó armonizar el legado
grecolatino con las ideas del Cristianismo. Por otro lado, Petrarca predicó la unión de
toda Italiapara recuperar la grandeza que había tenido en la época del Imperio romano.

Índice
[ocultar]

 1 Biografía

 2 Obras

o 2.1 Obras latinas en verso

o 2.2 Obras latinas en prosa

o 2.3 Colecciones epistolares

o 2.4 Obras en italiano o «lengua vulgar»

 3 Véase también

 4 Referencias

 5 Enlaces externos

Biografía[editar]
Hijo del notario Pietro (Petracco) di Ser Parenzo, pasó su infancia en el pueblo deIncisa in Val
d'Arno, cercano a Florencia, pues su padre había sido desterrado deFlorencia por
los güelfos negros en 1302 a causa de sus relaciones políticas conDante, que era güelfo blanco. El
notario y su familia marcharon luego a Pisa y aMarsella. Los exiliados llegaron a Aviñón en 1312 y
Francesco se instaló enCarpentras donde aprendió humanidades con el profesor
toscano Convenevole da Prato. Pasó toda su juventud en la Provenza, asimilando la lírica
trovadoresca, y empezó a estudiar Derecho en Montpellier a comienzos del otoño de 1316; allí
conoció a varios miembros de la familia Colonna, y luego pasó a la Universidad de Bolonia; ya
entonces manifestó un gran amor por la literatura latina clásica, en especial por Cicerón; pero su
padre, enemigo de esas lecturas, que veía poco provechosas, arrojó esos libros al fuego en 1320;
la leyenda cuenta que la desesperación de Petrarca fue tal que tuvo que sacar lo que quedaba de
ellos de la chimenea.

Tras la muerte de su padre regresó a Provenza e hizo los votos eclesiásticos menores. El 6 de abril
de 1327, viernes santo, vio por primera vez a Laura, la mujer que idealizaría en sus poemas,
en Aviñón. Poco se sabe de ella, aunque es muy posible que fuese la dama Laure de Noves,
casada con un antepasado del marqués de Sade y, por tanto, llamada tras su matrimonio Laure de
Sade (1310–1348). Por ella sintió una pasión pura y constante, como la que Dante Alighieri había
sentido por Beatrice Portinari, la Bice deLa Divina Comedia. Vivió
entre 1337 y 1353 en Vaucluse o Fontaine de Vaucluse, un lugar con la fuente más caudalosa de
Francia, en las cercanías de Aviñón. Tuvo dos hijos, Giovanni y Francesca, (en 1337 y 1343), sin
poder asegurarse si fueron fruto de una o dos relaciones. Nunca los referenció en sus obras
directamente, teniéndose constancia de que el varón, que murió joven, le dio disgustos a diferencia
de su hija quien le proporcionó la alegría de varios nietos.1 Petrarca terminó sus días en Arquà;
según afirma la tradición, lo encontraron muerto sobre un libro que estudiaba.

Francesco Petrarca.

El 26 de abril de 1336 Petrarca junto a su hermano y otros dos compañeros, escaló elmonte
Ventoso de los Alpes de 1.909 metros y más tarde escribió una memoria del viaje en forma de
carta a su amigo Francesco Dionigi. Como en ese tiempo no era usual escalar montañas sin fin
práctico alguno, se considera ese día la fecha de nacimiento delalpinismo como deporte y a
Petrarca como uno de los precursores del mismo.

Su vida transcurrió al servicio de la Iglesia y de la poderosa familia Colonna. Poseído por una
pasión de bibliófilo, de la que da cuenta el capítulo consagrado a la bibliomanía de su De remediis,
viajó constantemente por Europa (Francia, Italia, Países Bajos, España, Inglaterra) buscando
códices de autores clásicos, y se convirtió en poeta laureado por el Senado de Roma por su
poema latino en hexámetros Africa.

El encuentro con Giovanni Boccaccio en Florencia fue decisivo para sus ideashumanistas y junto a
éste se constituyó en figura principal del movimiento que intentó rescatar la cultura clásica de los
siglos oscuros en el primer Renacimiento italiano; intentó armonizar el legado grecolatino con las
ideas del Cristianismo. Por otro lado, Petrarca predicó la unión de toda Italia para recuperar la
grandeza que había tenido en la época del Imperio romano. Vittore Branca escribió sobre él que

Se presenta como una especie de Jano que mira a la vez hacia el pasado y el porvenir, la antigüedad y la

cristiandad, la frivolidad y el recogimiento, el lirismo y la erudición, el interior y el exterior [...] Ocupa en la historia de

la poesía y de la cultura de Europa cristiana y moderna un lugar excepcional: jamás, quizá, un escritor haya tenido

una influencia tan decisiva ni tan prolongada.

Como filólogo en el curso de sus viajes pudo rescatar del olvido a algunos autores clásicos.
En Lieja descubrió el discurso Pro Archia poeta de Cicerón y en Verona, Ad Atticum, Ad
Quintum y Ad Brutum de este mismo. Una estancia en París le permitió encontrar las elegías
de Propercio y en 1350 la revelación de Quintiliano marcó, a decir del poeta, su renuncia definitiva
a los placeres de los sentidos. Petrarca fue el gran redescubridor de Vitruvio y tras la difusión por el
florentino de la obra de este autor clásico, podemos afirmar que decir Vitruvio es decir todas las
bases de la arquitectura Renacentista.2

Obras[editar]

Laura y Petrarca, miniatura delCancionero.


Su obra principal es el Canzoniere, publicado originariamente con el nombre de Rime in vita e
Rime in morte de Madonna Laura y que fue ampliando con el transcurso de los años. Es aquí
donde Laura se constituye en el objeto idealizado de su amor, representante de las virtudes
cristianas y de la belleza de la antigüedad. Posteriormente se denominaría Cancionero
petrarquista a las colecciones de poemas líricos creadas por diferentes autores a manera
del Canzoniere del Petrarca.

Poco antes de su muerte, publicó I trionfi («Los triunfos»), dedicados a exaltar la elevación del
alma humana hacia Dios.

Petrarca fue autor también del poema épico Africa, que canta en hexámetros las hazañas del
conquistador romano Escipión el Africano, y una colección de biografías de personajes ilustres.
Escribió además Bucolicum carmen, un conjunto de églogas de estilo virgiliano, epístolas y un
elogio de la vida retirada, De vita solitaria. Sus primeras composiciones, Africa y su primera prosa,
por ejemplo Secretum, un diálogo imaginario con San Agustín, estaban escritas en latín, pero
solamente I trionfi y el Canzoniere lo están en el dialecto toscano del italiano.

Los poemas del Cancionero fueron escritos en italiano: se trata de una colección de más de
trescientos sonetos y otros poemas (canciones, sextinas, baladas y madrigales), la mayoría de los
cuales revelan la historia de su pasión por Laura y los avatares y estados espirituales y
emocionales por que atravesó, incluso después de la muerte de su amada, cuando su recuerdo la
transforma en un ángel (donna angelicata) que intercede a Dios por él para transformar su
pecaminoso amor profano en amor divino a la sabiduría y la moral. Se puede dividir en dos partes,
coincidiendo con la muerte de su amada en la peste negra de 1348, cuando el autor da un giro a
su vida tras las vanidades juveniles para profundizar en valores espirituales. Su creación final se
convierte enpalinodia de la inicial.3 En la obra se intercalan algunos dedicados a amigos y a otros
temas, para marcar como miliarios lacronología de esa historia, así como otras composiciones que
tienen la función de romper la monotonía métrica del conjunto.

La utilización del verso de once sílabas (endecasílabo) y sus perfectos sonetos encandilaron a
poetas de los dos siglos siguientes y tuvieron influencia en el Siglo de Oro español, aunque
algunos autores los rechazaran y los juzgaran como extranjerizantes.

Obras latinas en verso[editar]


Retrato de Francesco Petrarca, Andrea del Castagno, Ciclo de los hombres y mujeres ilustres.

 Ciclo degli uomini e donne illustri


 Africa, escrito entre 1339 y 1342, y después corregido y retocado. Poema heroico incompleto
sobre la Segunda guerra púnica y en particular sobre las gestas de Publio Cornelio Escipión.
 Bucolicum carmen, compuesto entre 1346 y 1357 y constituido por doce églogas sobre temas
amorosos, políticos y morales.
 Epistole metricae escritas entre 1333 y 1361, 66 cartas en hexámetros, de las que algunas
tratan sobre amor, aunque la mayoría trata sobre política, moral o materias literarias. Algunas
son autobiográficas.
 Carmina varia, que recogen poemas dispersos en varios lugares:
1–6: F. Petrarchae, Poemata minora quae extant omnia, vol. III, Medioelani 1834.
7–24: K. Burdach, Von Mitteralter zur Reformation. IV. Aus Petrarcas Altestem Deutschen
Schülerkreise, Berlin 1929.
25: E.H. Wilkins, The Making of the "Canzoniere" and other petrarchan Studies, Roma,
Edizioni di Storia e Letteratura 1951, p. 303.
26: G. Billanovich, «Un carme ignoto del Petrarca», Studi petrarcheschi, V (1989) pp. 101–
125.
Obras latinas en prosa[editar]
Retrato de Francesco Petrarca.Altichiero, 1370 - 1380.

 De viris illustribus (1337), colección de biografías de hombres ilustres


redactada a partir de 1337 y dedicada a Francesco da Carrara, señor
de Padua en 1358. Su intención original era reunir las vidas de personajes de
la historia de Roma desdeRómulo hasta el emperador Tito, pero sólo llegó
hasta Nerón. Después añadió personajes de todos los tiempos, comenzando
por Adán y terminando en Hércules. Como quedó incompleta su
amigo Lombardo della Seta la continuó hasta la vida deTrajano.
 Rerum memorandarum libri (1350), colección de ejemplos históricos y
anécdotas reunidas con un propósito de educación moral.
 Itinerarium ad sepulcrum Domini, descripción de los lugares que se va
encontrando en el viaje desde Génova a Jerusalén.
 Secretum o De secreto conflictu curarum mearum, compuesto entre 1347 y
1353, y en seguida revisada, diálogo imaginario en prosa latina en tres libros
entre el poeta mismo y San Agustín, en presencia de una señora muda que
simboliza la Verdad. Como examen de conciencia personal, afronta temas
íntimos del poeta y por esto no fue concebido para divulgarse, por lo cual
lleva ese título. El primer libro trata del mal en general y concluye, según el
pensamiento agustiniano, que eso no existe, sino que es una insuficiente
voluntad de bien causada por las pasiones terrenas que anegan el espíritu.
Petrarca mismo no puede guarecerse de la acidia. En el segundo libro, se
analizan las pasiones negativas de Petrarca mismo, incluida
la envidia de Dante Alighieri. En el tercero examina otras dos pasiones del
poeta, en particular el amor por Laura y por la gloria, consideradas las dos las
más graves culpas de Petrarca y las que le impedían acceder al equilibrio
espiritual por el que suspiraba. Le da la razón a San Agustín, pero no sabe
cómo liberarse de ellas.
 De vita solitaria (1346–1356 circa) Tratado religioso y moral elaborado en
1346 y sucesivamente ampliado en 1353 y en 1366. Exalta la soledad, tema
querido para el ascetismo medieval, pero el punto de vista con que la observa
no es religioso: al rigor de la vida monástica contrapone el aislamiento
laborioso del intelectual, dedicado a las lecturas y a las varias escrituras en
lugares apartados y serenos, en compañía de amigos y de otros
intelectuales. El aislamiento del estudioso es un marco natural que favorece
la concentración. De aquí deriva la expresión de Humanismo cristiano de
Petrarca.
 De otio religioso (1346–1356) es un tratado que exalta la vida monástica y
el otium o tranquilidad de espíritu definida como la mejor condición de vida
posible.
 De remediis utriusque fortunae (1360–1366) es una colección de
breves diálogos escritos en prosa latina, compuesta de 254 escenas de
diálogos entre entidades alegóricas: prima la «Alegría» y la «Razón»,
después el «Dolor». Son diálogos educativos y morales para reforzar al
individuo contra los golpes de la fortuna, tanto la buena como la adversa.
 Invectivarum contra medicum quendam libri IV (1355)
 De sui ipsius et multorum ignorantia (1368)
 Invectiva contra cuiusdam anonimi Galli calumnia o Contra eum qui maledixit
Italiam
 Epistole (Familiares, Seniles, Sine nomine, Variae)
 De gestis Cesaris
 Psalmi penitentiales
 Posteritati, epístola excluida por su propia voluntad de la colección Seniles,
en la que se describe a la posteridad con los atributos que pueden ser
propios del humanista (la recuperación de la ciudadanía clásiuca y el amor
por el latín)
 Contra quendam magni status hominem
 Collatio laureationis
 Collatio coram Johanne rege
 Collatio inter Scipionem, Alexandrum, Hannibalem
 Arringhe
 Orationes
 Testamentum.
Colecciones epistolares[editar]

Estatua de Petrarca, Galería Uffizi,Florencia.

De extrema importancia son las cartas latinas, que, recogidas en orden


cronológico, ofrecen la imagen autobiográfica del poeta; Petrarca tendía a ofrecer
de sí mismo una figura ideal. Algunas fueron revisadas e incluso vueltas a escribir
de nuevo. Van agrupadas por títulos como Familiares, Seniles y Sine nomine
liber, que contienen algunas sobre política y polémicas; por fin, las Variae.

Obras en italiano o «lengua vulgar»[editar]


En tiempos de Patrarca, al italiano se le conocía como «lengua vulgar», pues la
lengua considerada culta era el latín.
 El Canzoniere (título original: Francisci Petrarchae laureati poetae Rerum
vulgarium fragmenta). Comprende 366 piezas: 317 sonetos, 29 canciones,
9 sextinas, 7 baladas y 4 madrigales. Otras piezas poéticas anduvieron
perdidas o fueron incluidas en otros manuscritos.

La mayor parte de estas rimas son de tema amoroso; una treintena son de tema
moral, religioso o político. Son célebres las canciones «Italia mia» y «Spirto
gentil», en las cuales el concepto de patria se identifica con la belleza de la tierra
natal, soñada libre de las luchas fratricidas y de las milicias mercenarias. Entre las
canciones más recordadas se recuerdan más «Chiare, fresche e dolci acque» y
entre los sonetos «Solo e pensoso».

La colección es dividida entre los editores modernos en dos partes: rimas in vita y
rimasin morte di Madonna Laura, es decir, las rimas en vida y las rimas tras la
muerte de Laura. En realidad, Petrarca cuidó bien la estructura sucesiva del
Cancionero incluyendo rimas ya compuestas en su juventud para Laura y otras
mujeres, pero atribuyéndolas en esta ocasión a Laura. En muerte, dedica poemas
a Laura ya fallecida como el único puro amor que conduce a Dios, según una
concepción teleológica y mística del amor que se encuentra ya en el Dante de
la Vita nuova y la Divina Comedia. Sería impropio hacer coincidir la colocación de
varios textos en la obra con el efectivo orden cronológico de la composición. El
amor a Laura es el centro anímico de la rica y original poesía de Petrarca, en la
cual todo en función de eso deviene literatura y deseo de gloria literaria.

Petrarca perfeccionó las formas de la tradición lírica medieval y de la lírica


provenzal, cambió la forma de la sextina y reelaboró los modos poéticos. La
amada de Petrarca es un ser superior espiritualmente al poeta al cual este rinden
homenaje, pero no tiene todavía nada de sobrehumano, ella es modelo de virtud
y de belleza. Asocia el nombre de Laura al lauro, al laurel poético de la gloria
literaria, y juega con su nombre cambiándolo con l'aura (el viento) como en el
soneto «Erano i capei d'oro a l'aura sparsi».

La segunda parte del Canzoniere se concluye con la canción Alla Vergine («A la
Virgen») en la cual el poeta se dirige a María e implora perdón y protección.

 I trionfi
 Frammenti e rime extravaganti
 Testi del Vaticano latino 3196.
SONETOS DE PETRARCA: EL CANCIONERO
CXXXII

Si no es amor, ¿qué esto que yo siento?


mas si no es amor, por Dios, ¿qué cosa y cuál?
Si es buena, ¿por qué es áspera y mortal?
si mala, ¿por qué es dulce su tormento?

Si ardo por gusto, ¿por qué me lamento?


Si a mi pesar, ¿qué vale un llanto tal?
Oh, viva muerte, oh deleitoso mal,
¿por qué puedes en mí si no consiento?

Y si consiento, error es quejarme.


Entre contrarios vientos va mi nave
-que en alta mar me encuentro sin gobierno-

tan leve de saber, de error tan grave,


que no sé lo que quiero aconsejarme
y, si tiemblo en verano, ardo en invierno.

CXXXIV
SONETO A LAURA
Paz no encuentro ni puedo hacer la guerra,
y ardo y soy hielo; y temo y todo aplazo;
y vuelo sobre el cielo y yazgo en tierra;
y nada aprieto y todo el mundo abrazo.

Quien me tiene en prisión, ni abre ni cierra,


ni me retiene ni me suelta el lazo;
y no me mata Amor ni me deshierra,
ni me quiere ni quita mi embarazo.

Veo sin ojos y sin lengua grito;


y pido ayuda y parecer anhelo;
a otros amo y por mí me siento odiado.

Llorando grito y el dolor transito;


muerte y vida me dan igual desvelo;
por vos estoy, Señora, en este estado.

LXI
BENDITO SEA EL AÑO
Bendito sea el año, el punto, el día,
la estación, el lugar, el mes, la hora
y el país, en el cual su encantadora
mirada encadenóse al alma mía.

Bendita la dulcísima porfía


de entregarme a ese amor que en mi alma mora,
y el arco y las saetas, de que ahora
las llagas siento abiertas todavía.

Benditas las palabras con que canto


el nombre de mi amada; y mi tormento,
mis ansias, mis suspiros y mi llanto.

Y benditos mis versos y mi arte


pues la ensalzan, y, en fin, mi pensamiento,
puesto que ella tan sólo lo comparte.

CCXCII
EN LA MUERTE DE LAURA
Sus ojos que canté amorosamente,
su cuerpo hermoso que adoré constante,
y que vivir me hiciera tan distante
de mí mismo, y huyendo de la gente,

Su cabellera de oro reluciente,


la risa de su angélico semblante
que hizo la tierra al cielo semejante,
¡poco polvo son ya que nada siente!

¡Y sin embargo vivo todavía!


A ciegas, sin la lumbre que amé tanto,
surca mi nave la extensión vacía...

Aquí termine mi amoroso canto:


seca la fuente está de mi alegría,
mi lira yace convertida en llanto.

SONETO
Bendecidos el año, el mes, el día
y la estación y el sitio y el instante
y el hermoso país en que delante
de su mirar mi voluntad rendía.

Y bendecida la tenaz porfía


de amor entre mi pecho palpitante,
y el arco y la saeta y la sangrante
herida que en mi corazón se abría.

Bendecida la voz que repitiendo


va por doquier el nombre de mi amada,
suspiros, ansias, lágrimas vertiendo.

Y bendecido todo cuanto escribe


la mente que al loarla consagrada
en Ella y sólo para Ella vive.
sonetos de petrarca: el cancionero - cuaderno de literatura universal
alpajeslituniversal.blogspot.com/.../sonetos-de-petrarca-el-cancionero.ht...

Cancionero (Petrarca)

Manuscrito de las obras de Petrarca. Escuela florentina, realizado para el primerduque de Urbino Federico III de
Montefeltro (1444-1482). Contiene lasRimas y los Triunfos.

Cancionero (Canzoniere en italiano) es el nombre con que popularmente se conoce la obra lírica en
vulgar toscano de Francesco Petrarca Rerum vulgarium fragmenta(Fragmentos de cosas en vulgar),
compuesta en el siglo XIV, y publicada por primera vez en Venecia en 1470 por el editor Vindelino da
Spira.

Índice
[ocultar]

 1 Características

 2 Fuentes originales

 3 Génesis

 4 Lengua

 5 Métrica

 6 Estructura

 7 Los cancioneros petrarquistas

 8 Fortuna en España

 9 Enlaces externos

Características [editar]

El título original de la obra escrito en latín es: Francisci Petrarchae laureati poetae Rerum vulgarium
frammenta. Aunque Petrarca cifró su gloria poética en sus versos (en latín) y no en sus rimas (en
vulgar), que motejaba de fragmenta (fragmentos) y nugellae(naderías), lo cierto es que elaboró
cuidadosamente su Cancionero durante años, corrigiendo y reescribiendo, añadiendo y desechando; de
manera que la obra poética final se corresponde con un propósito perfectamente meditado y consciente
del poeta.

Y así, en su Cancionero, pueden advertirse unas características particulares, requeridas por cualquier
otro cancionero posterior al que desee aplicársele el adjetivo de petrarquista.

 La obra, aunque compuesta de fragmentos, de rime sparse, debe ser unitaria.

 El hilo argumental del cancionero es la vivencia amorosa que se narra en primera persona.

 Debe estar dedicado a una sola dama. Tal es así que Petrarca en el definitivo manuscrito sustituyó
una balada (Donna mi vene spesso ne la mente), que podía inducir a creer al lector que había
amado más de una Laura. Excepciones a esta regla son el fragmento CLXXI (El nudo en el que
Amor me retuviera) o el segundo cuarteto del CCCXVIII (Al caer de una planta, que arrancada).

 El cancionero debe tener una secuencia narrativa que conduzca al lector a través de la historia del
sentimiento amoroso del poeta. Esto se traduce en que los poemas deben aparentar haber sido
escritos cronológicamente en el orden en que aparecen en la obra.

 El tema es el amor e non solo. El cancionero se salpica con poemas a la amistad, políticos,
morales, patrióticos o anecdóticos que, al poder ser fechados más fácilmente, sirven para acentuar
la progresión narrativa de la que se ha hablado en el punto anterior.
 El cancionero debe ser polimétrico, de modo que las formas métricas se correspondan con el
estado anímico y el mensaje que quiere trasmitir el poeta en cada momento.
Fuentes originales [editar]

Debido al deseo de pulcritud y mejora con que escribía Petrarca, que solía volver una y otra vez sobre el
texto, existen varios manuscritos diferentes en los que se puede estudiar cómo fue modificando Petrarca
el texto.

Se estima que Petrarca empezó a reunir sus fragmenta en 1336-38. La primera redacción
(denominada forma Correggio en honor a Azzo da Correggio, su destinario) data de 1356-58 y, aunque
no se ha conservado, puede ser reconstruida a partir del material recogido en el Codice degli
abrozzi (Vaticano Latino 3196) manuscrito por la mano del propio Petrarca. Una redacción
inmediatamente posterior a esta, y primera que se conserva, es la denominada forma Chigi del
manuscrito Vaticano Chigiano L.V. 176 copiado por Giovanni Boccaccio (1359-63). La versión definitiva
del Cancionero se encuentra en el manuscrito Vaticano Latino 3195, en parte idiógrafo (esto es, copiado
por un copista bajo la supervisión del autor) y en parte autógrafo, en el que trabajó Petrarca hasta su
muerte.

Además de estos tres manuscritos se conservan otros dos que muestran redacciones intermedias entre
la forma Chigi y la definitiva forma vaticana: el manuscrito Laurenziano 41,17 que contiene la
llamada forma Malatesta y el manuscrito D II, 21 de la Biblioteca Queriniana de Brescia (forma
Queriniana).

Génesis [editar]

Petrarca, curiosamente, debe su inmortalidad literaria a una obra escrita en una lengua en la que no
creía. Hijo de un notario florentino exiliado, el vulgar toscano era únicamente su lengua materna; el latín,
en cambio, era la lengua habitual con la que solía escribir, mantener correspondencia e, incluso, hacer
las apostillas en su Cancionero. Por ejemplo, el comienzo de la canción Che debb'io far? (fragmento
CCLXVIII) era Amor, in pianto ogni mio riso è volto, pero lo sustituyó por el definitivo porque non videtur
satis triste principium (no veo el principio lo bastante triste); y en otros márgenes escribe Hoc placet pre
omnibus (esta versión me gusta más que las demás) o Dic aliter hic (dígase aquí de distinto modo).

Pero tuvo el capricho de componer poesía en una nueva lengua que le daba la posibilidad de
experimentar con ella y perfeccionarla. Y lo hace con los temas que le eran naturales al vulgar: los
heredados de la lírica provenzal que a través de la escuela siciliana habían llegado a los poetas
toscanos del Dolce stil novo. De ahí la fuerte influencia que el amor cortés ejerce en el Cancionero.

Lengua [editar]
La lengua del Cancionero se caracteriza por la vaguedad y por la simplificación.

Petrarca excluye de su vocabulario tanto los cultismos excesivos como las palabras excesivamente
bajas, de suerte que su Cancionero se compone tan sólo de 3.275 voces. Con ello logra crear una
lengua franca que los tratadistas del Cinquecento, conPietro Bembo a la cabeza, coronaron como la
lengua italiana para la poesía.

También es notoria la imprecisión física con la que está escrita la obra. Petrarca tan solo habla de los
ojos, siempre inevitablemente bellos (i begli occhi), el bello gesto (il bel viso) y los dorados cabellos (i
capei d'oro). Apenas hay otras referencias físicas en la obra. Y los tres adjetivos que acompañan a los
tres vagos rasgos de Laura se mantienen a lo largo de la obra sin que el paso del tiempo (ya la acabe
de conocer, ya hayan pasado dieciséis o diecisiete años) pueda alterarlos. Tan sólo el célebre
fragmento XC (Era el cabello al aura desatado) sugiere que sea aquel hermoso brillo, hoy ya apagado.
Pero toda la descripción recrea el pasado en que eran bellos los ojos, rubios los cabellos y bello el gesto
y contribuye a la imagen invariable del aspecto de Laura.

Métrica [editar]

El Cancionero tiene influencia capital en dos aspectos de la métrica: el ritmo del endecasílabo y las
formas estróficas.

De un lado, hace prevalecer definitivamente los ritmos del endecasílabo a maiore con acento en la sexta
sílaba y a minore con acentos en la cuarta y la octava, lo que determina que en la poesía culta española
(que, a partir de Boscán y Garcilaso, adopta los metros italianos), sean éstos los ritmos más habituales.

Del otro, influye determinantemente en cuáles serán las estrofas que se cultiven a partir de entonces en
la poesía culta. Sólo cinco formas incluye en su Cancionero: sextina, balada, madrigal, canción y soneto.
Perfecciona y afina el madrigal que en el Cinquecentoalcanzará su apogeo musical; fija definitivamente
el esquema de la canción heredada de la escuela siciliana; y, por último, lleva al soneto a su absoluta
perfección propiciando que se convierta en la estrofa, quizás, más importante de la lírica europea
occidental. Su preferencia por los sonetos compuestos por cuartetos y no serventesios y con tercetos
con esquema CDE CDE o CDC DCD (junto al CDE DCE), determina que estos sean las formas con que
se compongan los sonetos en España.

Estructura [editar]
Este apartado es sólo un esbozo y debe ser reescrito

El Cancionero se compone de 366 fragmentos (317 sonetos, 29 canciones, 9 sextinas, 7 baladas y


4 madrigales) tradicionalmente divididos en dos partes: las rimas en vida de Madonna Laura y
las rimas tras la muerte de Madonna Laura. Esta división, no obstante, se debe a los editores de la
obra y no al propio Petrarca y está sugerida tanto por el contenido como por el hecho de que en el
manuscrito definitivo hay varias hojas en blanco entre la composición CCLXIII y la CCLXIV.

Se abre con un soneto a modo de prólogo Los que escucháis en rimas el desvelo en el que el poeta
presenta su obra como el fruto de su primer error juvenil y que, tras pedir la disculpa de su lector, se
cierra con el tópico del vanitas vanitatis (que cuanto agrada al mundo es breve sueño).

Los siguientes poemas introducen la intensidad con la que el poeta prueba el amor:

Por hacer más galana su venganza


y cobrar mil ofensas en un día,
ocultamente el arco Amor traía
como el que ocasión busca en su asechanza.

Cubría la virtud con gran pujanza


ojos y corazón de la porfía,
cuando a allí donde mellarse otra solía
bajó su flecha con mortal prestanza.

Y así turbada en el primer asalto,


no tuvo tanto ni lugar ni aliento
con que pudiese en la estrechez armarme;

o bien al monte fatigoso y alto


con astucia apartarme del tormento,
del que hoy quisiera y ya no puede hurtarme.

(Fuente: wikisource)

A lo largo del Cancionero, Petrarca va componiendo los tópicos de la poesía amorosa que en
ocasiones vierte con especial acierto. Especialmente célebre es el fragmento XXXV en que
desarrolla el tópico del amante que, fugitivo, huye de todo y sólo es incapaz de esquivar su
propio Amor:

Solo y pensoso los más yermos prados


midiendo voy a paso tardo y lento,
y acecho con los ojos para atento
huir de aquellos por el hombre hollados.

Otro alivio no encuentro en mis cuidados


que me aparte del público escarmiento,
porque en los actos del dolor que aliento
muestro traer los pasos abrasados;

tanto que creo ya que montes, llanos,


selvas y ríos saben los extremos
de vida que he ocultado a otro testigo.

Mas no sé hallar senderos tan lejanos,


tan ásperos que siempre no marchemos
yo hablando con Amor y Amor conmigo.

(Fuente: wikisource)

Las composiciones amorosas de la primera parte abundan mucho en la belleza (vaga


belleza) de la amada, en que reside la elevación espiritual y trascendencia del amor de
Petrarca. Hay, por ejemplo, tres canciones (las denominadas Tres Hermanas) dedicadas
exclusivamente a la alabanza de los ojos (bellos) de Laura. Léase, por ejemplo, el
fragmento LXXII (Gentil señora, veo).

Al respecto de las descripciones idealizadas de Laura, el fragmento XC incluye


admirablemente gran parte de los tópicos que incluyen la habitual glorificación de la
amada:

Era el cabello al aura desatado


que en mil nudos de oro entretejía;
y en la mirada sin medida ardía
aquel hermoso brillo, hoy ya apagado;

el gesto, de gentil favor pintado,


fuese sincero o falso, lo creía;
ya que amorosa yesca en mí escondía,
¿a quién espanta el verme así abrasado?

No era su andar cosa mortal grosera,


sino hechura de ángel; y sonaba
su voz como no suena voz humana:
un espirtu celeste, un sol miraba
cuando la vi; y si ahora tal no fuera,
no porque afloje el arco el daño sana.

(Fuente: wikisource)

Y los tercetos del fragmento CLVII desglosan en sus seis versos el canon petrarquista
de la belleza femenina:

El gesto ardiente nieve, la crin oro,


las cejas ébano, y los ojos soles,
por los que al arco Amor no ha errado el tiro;

perlas y rosas en que el mal que adoro


formaba ardiente voz entre arreboles;
cristal su llanto, llama su suspiro.

(Fuente: wikisource)

En la segunda parte de la obra, ante la desolación por su muerte, Petrarca obra


en Laura un proceso de beatrización que en sueños o en la imaginación lo
consuela y le promete la unión eterna en el cielo. Así en la rima CCCII:

Me alzó mi pensamiento adonde era


la que busco y no hallo ya en la tierra,
y allí entre los que tercio cielo encierra
la vi más bella y menos altanera.

Tomó mi mano y dijo: «En esta esfera


serás conmigo, si el afán no yerra:
que soy quien te dio en vida tanta guerra
y acabó el día antes que el sol cayera.

Mi bien no cabe en pensamiento humano:


solo a ti aguardo, y lo que amaste loco,
que un bello velo fue, quedó en el suelo».

Mas, ¡ay! ¿por qué me desasió la mano?


Que, al eco de su acento, faltó poco
para que me quedase allá en el cielo.
(Fuente: wikisource)

El Cancionero se cierra con un arrepentimiento absoluto por haber amado:

Llorando voy los tiempos ya pasados


que malgasté en amar cosas del suelo,
en vez de haberme levantado en vuelo
sin dar de mí ejemplos tan menguados.

Tú, que mis males viste porfïados,


invisible e inmortal, Señor del cielo,
Tu ayuda presta al alma y Tu consuelo,
y sana con Tu Gracia mis pecados;

tal que, si viví en tormenta y guerra,


muera en bonanza y paz; si mal la andanza,
bueno sea al menos el dejar la tierra.

Lo poco que de vida ya me alcanza


y el morir con Tu presta mano aferra;
Tú sabes que en Ti sólo hallo esperanza.

(Fuente: wikisource)
Cancionero (Petrarca) - Wikipedia, la enciclopedia libre
es.wikipedia.org/wiki/Cancionero_(Petrarca)
Francesco Petrarca Biografía de Francesco Petrarca - quién es,
información, datos ...
www.buscabiografias.com/bios/biografia/.../7644/Francesco%20Petrarca

(20/07/1304 - 18/07/1374)

Francesco Petrarca

Poeta y humanista italiano

Nació el 20 de julio de 1304 en Arezzo (Italia). Su padre fue un desterrado del mismo grupo
político de Dante. A la edad de ocho años se trasladó junto a su familia de la Toscana a Aviñón
(Francia). En 1326 falleció su padre, y Petrarca, que había estado estudiando Leyes en la
Universidad de Bolonia, regresó a Aviñón, donde pronunció los votos eclesiásticos menores, hacia
1330.

El Viernes Santo de 1327, vio por primera vez a Laura, la mujer idealizada por el poeta, cuyo
nombre inmortalizó a través de sus poemas líricos. Realizó viajes por toda Italia, Francia, Alemania
y los Países Bajos. En 1330 conoció al escritor Giovanni Boccaccio en Florencia, con quien ya había
mantenido correspondencia desde algún tiempo antes. Ambos se situaron al frente de un
movimiento de redescubrimiento de la cultura de la antigüedad clásica.

Entre 1353 y 1361 reside en Milán y hasta 1374, entre Padua, Venecia y Arquà (Véneto). Le
nombraron poeta laureado por el Senado de Roma, en 1341.

Escribió en latín e italiano. Entre sus obras en latín destacan África (1338-1342) y De viris illustribus
(hacia 1338), una serie de biografías de personajes ilustres. Además en latín escribió églogas y
epístolas en verso, el diálogo Secretum (1343), y el tratado De vita solitaria (1346-1356). De sus
obras, la más famosa es una colección de poemas en italiano titulada Rime in vita e morta di
Madonna Laura (posterior a 1327) y que después fue ampliada a lo largo de su vida y se conoce
como Cancionero.

Francesco Petrarca falleció en Arquà el 18 de julio de 1374.


SONETO CXXXII:

Si no es amor, ¿qué es esto que yo siento?

Mas si es amor, por Dios, ¿qué cosa es y cuál?

Si es buena, ¿por qué es áspera y mortal?

Si mala, ¿por qué es dulce su tormento?

Si ardo por gusto, ¿por qué me lamento?

Si a mi pesar, ¿qué vale un llanto tal?

Oh! viva muerte, oh delectuoso mal,

¿por qué puedes en mi, si no consiento?

Y si consiento, error grave es quejarme.

Entre contrarios vientos va mi nave

- que en altamar me encuentro sin gobierno -

tan leve de saber, de error tan grave,

que no sé lo que quiero aconsejarme

y, si tiemblo en verano, ardo en invierno


PALABRAS PRELIMINARES

Poeta y humanista italiano, considerado el primero y uno de los más importantes poetas líricos
modernos. Su perfeccionamiento del soneto influyó en numerosos poetas posteriores, desde los
españoles Garcilaso de la Vega y Quevedo hasta los ingleses William Shakespeare y Edmund
Spencer. Su amplio conocimiento de los autores de la antigüedad y su restauración del latín clásico
le valieron la reputación de "primer gran humanista", pero, además, contribuyó definitivamente a la
instauración del italiano vernáculo como lengua literaria. Petrarca, de nombre completo Francesco
Petrarca, nació el 20 de julio de 1304 en Arezzo. Cuando tenía ocho años, su familia se trasladó de
Toscana a Avignon (Francia). En 1326, tras la muerte de su padre, Petrarca, que había estado
estudiando Leyes en la Universidad de Bolonia, regresó a Avignon, donde pronunció los votos
eclesiásticos menores, hacia 1330. El viernes santo de 1327, vio por primera vez a Laura
(posiblemente la dama Laure de Noves, hacia 1308-1348), la mujer idealizada por el poeta, cuyo
nombre inmortalizó a través de sus poemas líricos, y que le inspiró una pasión que se ha
convertido en proverbial por su constancia y pureza.

Durante su vida, transcurrida principalmente al servicio de la iglesia y de la familia Visconti,


viajó por toda Italia, Francia, Alemania y los Países Bajos. En Florencia, en 1330, conoció al
escritor Giovanni Boccacio, con quien ya había mantenido correspondencia desde algún tiempo
antes. Ambos se situaron al frente de un movimiento de redescubrimiento de la cultura de la
antigüedad clásica, de rechazo hacia la escolástica medieval y de defensa del nexo entre las
creaciones pagana y cristiana. Entre 1353 y 1361, Petrarca permaneció en Milán y, hasta 1374,
entre Padua, Venecia y Arquà. Probablemente, como consecuencia de sus frecuentes viajes, se
desarrolló en él el deseo de ver a Italia unida, administrando la herencia del Imperio Romano.
Merecedor de un gran respeto durante su vida, fue nombrado poeta laureado por el Senado de
Roma, en 1341. Murió en Arquà el 18 o el 19 de julio de 1374. Su creencia en la continuidad entre
la cultura clásica y las doctrinas cristianas le llevaron a impulsar el humanismo europeo, una
síntesis, en definitiva, de ambos ideales, el pagano y el cristiano. Petrarca escribió en latín e
italiano. Entre sus obras en latín destacan África (1342), un poema épico sobre el conquistador
romano clásico Escipión el Africano, y De viris illustribus (1338), una serie de biografías de
personajes ilustres. También en latín escribió églogas y epístolas en verso, el
diálogo Secretum (1343), y el tratado De vita solitaria (1356), en el cual defendía una "vida
solitaria", dedicada a la naturaleza, el estudio y la contemplación. Su amplia colección de cartas ha
resultado muy útil por la cantidad de detalles históricos y biográficos que contienen.

La más famosa de sus obras es una colección de poemas en italiano titulada Rime in vita e
morta di Madonna Laura (posterior a 1327), y que después fue ampliada a lo largo de su vida y se
conoce como Cancionero. Es una colección de sonetos y odas, inspirados casi todos ellos en su
amor no correspondido por Laura, y reflejan a la perfección el carácter del poeta y de su pasión
amorosa en un italiano vernáculo extremadamente melodioso y refinado. También en Laura se
inspiró para componer otro conjunto de poemas, Triunfos (1352-1374), que detallan la elevación
del alma humana desde el amor terrenal a su realización a través de Dios. Muchos de ellos fueron
transformados en madrigales por el compositor italiano Claudio Monteverdi. El Cancionero de
Petrarca actuó como un diapasón en la literatura europea de la época y del renacimiento. En
España, el marqués de Santillana escribió siguiendo sus planteamientos Sonetos hechos al itálico
modo, pero fue el valenciano Ausias March el verdadero difusor de la poesía petrarcana. Su
concepto idealizado de la mujer —Laura— pervivió hasta bien entrado el siglo XVI. Pero esta
poesía también encontró detractores que rechazaban el endecasílabo, como Cristóbal de
Castillejo, por considerarlo ajeno a la tradición castellana y preferir el dodecasílabo tradicional.

Publicado inicialmente en El Poder de la Palabra


Barcelona - Nueva York
DATOS BIOBIBLIOGRÁFICOS

Francesco Petrarca nació el 20 de julio de 1304 en Arezzo, Italia. A la edad de ocho años su
familia se trasladó a Aviñón, Francia. Petrarca estudió leyes en la Universidad de Bolonia, pero
regresó a Aviñón al morir su padre en 1326. En esa ciudad pronunció los votos monásticos
menores. El viernes santo de 1327 conoció a Laura, mujer idealizada por él (como Dante idealizó a
Beatriz). Le dedicó sus poemas líricos, conocidos por su pureza. Petrarca viajó por Europa, y en
1330 en Florencia se reunió con el escritor Giovanni Boccaccio; ambos se dedicaron al
redescubrimiento de la cultura de la antigüedad clásica y a la defensa en la unión de las creaciones
paganas y cristianas. Fue nombrado poeta laureado por el senado de Roma en 1341. Entre sus
obras destacan "África", la serie de biografías "De Viris Illustribus", el diálogo "Secretum y el tratado
"De Vita Solitaria". De su obra poética, la más conocida es elCancionero, a la que tituló "Rime in
vita e morta di Madonna Laura". Falleció en Arquà el 18 de julio de 1374.

You might also like