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Symploké revista filosófica octubre 2018

ISSN 2468-9777

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Symploké revista filosófica octubre 2018

La Revista
Integrantes de la Revista

Calomino, Hernán E. :: Director


Gutiérrez, Alejandro M. :: Director
Martinetti, Paula :: Editora
Valle, Lucas :: Corrector
Valls, Emiliana :: Correctora

Sección de Género

Fernández Romeral, Juliana :: Directora


Saavedra, Lucía D. :: Directora
Forni, Victor J. :: Corrector
Haber Ahumada, Santiago :: Corrector
 

Consejo evaluador Consejo evaluador internacioal


 
Abellón, Pamela :: Dra. en Filosofía Garrera-Tolbert, Nicolás :: Dr. en Filosofía
(UBA) (Universidad de Memphis)

Bertorello, Mario Adrián :: Dr. en Filosofía Malaspina, Ermmano :: Dr. en Filolofía


(UBA) (Università di Torino)

Bieda, Esteban :: Dr. en Filosofía Vigo, Alejandro :: Dr. en Filosofía


(UBA) (Ruprecht-Karls-Universität Heidelberg)

Cladakis, Maximiliano :: Dr. en Filosofía


(UNSAM) Consejo evaluador Estudios de Género
 
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(UBA) cia Política y de la Administración
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(UNSAM, UNIPE) Lenta, María Malena :: Lic. en Psicología
(UBA)
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(UBA)
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(UBA) Pierri Carla:: Lic. en Psicología
(UBA)
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Pico Estrada, Paula :: Dra. en Filosofía


(UBA)

Ralón, Graciela :: Dra. en Filosofía Revista Symploké


(UBA) ISSN: 2468-9777
hola@revistasymploke.com
Tursi, Antonio :: Dr. en Filosofía www.revistasymploke.com
(UBA) Pacheco 2558
CP 1431
Vecchio, Ariel :: Lic. en Filosofía Ciudad Autónoma de Buenos Aires
(UNSAM) Argentina

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Symploké revista filosófica octubre 2018

Índice
Nota de los Directores
Hernán Calomino - Alejandro Gutiérrez 5

La teología mística como ejercicio filosófico


Paula Pico Estrada 6 a 13

Seminario: Temporalidad y nihilismo


José Ordóñez García 14 a 28

El pensamiento trágico
Lucas G. Aldonati 29 a 38

Entrevista Luca Vanzago


Alejandro Gutiérrez 39 a 45

Sensatez y sentimiento
Guillermo Portela 46 a 51

Entrevista José Luis Ramón García


Ariel Vecchio 52 a 57

Reseña sobre El Capital de Karl Marx


Naím Valerio Yánez Alonso 58 a 63

Reseña de Rupertine del Fino


Carlos D. Romero 64 a 67

El antifeminismo de Otto Weininger


Dardo Scavino 68 a 73

Los procesos actuales de deslegitimación de las violencias basadas en el género...


Alejandra Lo Russo 75 a 82

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Symploké revista filosófica octubre 2018

Abortar como rechazo de ser para un hombre


Calvagno L. - Méndez M. 83 a 91

La formación docente universitaria con perspectiva de género


Autoras varias 92 a 99

Entrevista Nina Brugo


Fernández, J. - Saavedra L. 100 a 107

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Symploké revista filosófica octubre 2018

Nota
de los Directores
Consolidar un espacio de reflexión y so-
ciabilización del trabajo intelectual y académico
impone responsabilidades y constituye, asimis-
mo, un instrumento de visibilización de proble-
máticas que no debemos dejar pasar por alto. En
un contexto como el actual, donde la educación
pública y la investigación científica se encuentran
desfinanciadas y dejadas de lado, nuestra única
arma para hacer frente a esta situación, que pre-
tende reprimirnos, es la producción crítica. Asis-
timos a una coyuntura alarmante que constituye
un fuerte golpe al desarrollo del país y su futuro.
Es nuestra obligación oponernos fuertemente a
las políticas que se están llevando a cabo.
En este contexto, es de suma importancia
que las instituciones no resignen las actividades
académicas; al contrario, será imperioso que se
promuevan. El pensamiento crítico no debe ceder
frente a la lógica utilitarista de la gestión actual.
La presente Revista representa de modo directo
la actividad académica e intenta construir un es-
pacio de excelencia que refleje el trabajo de es-
tudiantes e investigadores. Symploké se sostiene
gracias a sus integrantes y no cuenta con apoyo
institucional que permita su existencia en mejo-
res condiciones. Queremos agradecer a nuestros
lectores, quienes, con paciencia, esperan cada nú-
mero de la Revista. También queremos agradecer
a Jorge Fernández y Antonio Tursi por el apoyo
recibido –y que seguimos recibiendo– y a todos
los integrantes de la Revista –editores, correcto-
res, comité académico– cuyo esfuerzo comple-
tamente altruista hace posible que hoy digamos
estas palabras. Palabras de un espacio que se ha
conquistado en comunidad, que ha crecido en
comunidad y se constituye como una pequeña y
presente voz colectiva.

Hernán Calomino / Alejandro Gutiérrez


Directores Revista Symploké

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Symploké revista filosófica octubre 2018

La teología mística
como ejercicio filosófico

Dra. Paula Pico Estrada


UBA - UNSAM


Buenas tardes a todos. Antes que nada pero densa lección es en sí misma un preguntar
quiero a agradecer a la profesora Cristina López metafísico o, por lo menos, eso es lo que propone
que me invitó y a todos ustedes por haber venido. el autor. Se trata de un preguntar que cuestiona el
No estoy demasiado segura de cuán atractivo es mundo tal como lo perciben el sentido común y
el título de esta charla que vamos a tener. Como el conocimiento científico. Vale decir que se trata
profesora de Filosofía Medieval, estoy muy cons- de un preguntar que cuestiona el simple atenerse
ciente de las prevenciones que inspira el nombre a lo ente y nada más que a lo ente, un tipo de
de la asignatura. atenerse para el cual la nada solo aparece como la
En su obra de 1935, titulada Introducción negación de lo ente. La ciencia, que le “concede
a la metafísica, Martin Heidegger dijo que la ex- a la cosa misma, de manera fundamental, explíci-
presión “filosofía cristiana” era una contradic- ta y exclusiva la primera y última palabra”3, dice
ción en los términos, comparable a “hierro de Heidegger, “no quiere saber nada de la nada”.4
madera”.1 Desde su punto de vista, lo mismo se Y sin embargo, en tanto se define como conoci-
podría decir de la filosofía judía y de la filosofía miento de algo, y no de nada, recurre a la nada
que se practicó en el Islam, mucha de ella tam- como su condición de posibilidad.5
bién judía y cristiana. Dado que la filosofía en Este conflicto lleva a aquella pregunta
la Edad Media surge a partir del encuentro entre que no es científica y que tampoco es de senti-
estas tres religiones y las tradiciones filosóficas do común, la pregunta por aquello más allá del
de la Antigüedad, podríamos concluir sin forzar ente, esto es, la pregunta metafísica. Se trata de
demasiado la cosa que la expresión “filosofía me- la pregunta sobre la nada, una pregunta que es
dieval” intenta definir un hierro de madera. inabordable para nuestro entendimiento, regido
Como es sabido, Introducción a la meta- por el principio de no contradicción. En efecto,
física comienza estableciendo la pregunta funda- ¿qué rigor lógico puede tener preguntarse qué es
mental de la metafísica, que sería “¿Por qué es lo la nada cuando la nada, por definición, no es?6
ente y no más bien la nada?”2 Un texto anterior, Como es sabido, Heidegger encuentra el devela-
titulado ¿Qué es metafísica? (1929), muestra miento de la nada en ese “radical temple del áni-
cómo llega Heidegger a esta pregunta. Esa breve
3 Martín Heidegger, ¿Qué es metafísica? Traducción de
1 Martín Heidegger, Introducción a la metafísica. Tra- Xavier Zubiri. México: Editorial Séneca, 1941, p. 19.
ducción de Ángela Ackermann Pilári. Barcelona: Gedisa, 4 Op.cit. p. 22.
1999, p. 17. 5 Op.cit. p.23.
2 Op.cit. p. 11. 6 Op.cit. pp. 23-27.
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mo” del Dasein que es la angustia.7 que se dice que algo es o no es. Según el primer
La descripción de Heidegger de la filo- modo, se dice que es “todo lo que cae bajo la per-
sofía medieval como un hierro de madera, como cepción del sentido corporal o de la inteligencia”
un malentendido, arraiga en este preguntar suyo y que no es “todo aquello que por la excelencia
sobre la nada, o sea en su idea de que la pregunta de su naturaleza escapa no solo […] al sentido
metafísica es la pregunta por la nada. La dogmá- sino a todo intelecto o razón”.11 Los otros cuatro
tica cristiana, dice, al introducir la noción de la modos en que se dice que algo es o no es son más
creación ex nihilo, convierte a la nada en el con- convencionales en relación a la historia de la filo-
cepto opuesto al ente auténtico, al summun ens, o sofía;12 los voy a dejar de lado para detenerme en
sea a Dios. De este modo, el indagar de la filoso- este, el primero.
fía cristiana no estaría tan lejos del de la ciencia: Aquello de lo cual -por escapar al sentido,
la preocupación se centra sobre lo ente y y no se a la razón y al intelecto- se dice que no es son
interroga a la nada.8 las esencias de todas las cosas, las cuales podrían
Mi intención en lo que sigue no es discu- ser comprendidas solo en su primer principio
tir con Heidegger cuál es la pregunta metafísica originario, es decir Dios, que tampoco es apre-
ni tampoco hacer una apología del filosofar en la hendido por ningún intelecto. Hasta acá, la nove-
Edad Media. Lo que me gustaría es tomar la idea dad de esta postura no es evidente: que Eriúgena
de que la pregunta metafísica es la pregunta por diga que Dios es inaprehensible para el intelecto
la nada y averiguar si realmente podemos decir y, como agrega, que “subsiste en sí mismo más
que la teología mística, esa expresión del pensar allá de toda creatura” no coloca a nuestro autor
que surgió a comienzos de la Edad Media, “no en un plano distinto de todos aquellos que, según
quiere saber nada de la nada”.9 Heidegger, convierten a la nada en el concepto
Las reflexiones de Heidegger en los dos opuesto al summun ens. La novedad aparece un
textos a los cuales me referí no se alejan dema- poco más adelante, cuando Eriúgena examina
siado de un concepto fundamental elaborado por los límites y los alcances del discurso teológico,
el filósofo medieval Juan Escoto Eriúgena, que inevitablemente regido, como todo discurso, por
vivió en el siglo IX (ca. 800-860) y trabajó en el principio de no contradicción.13 En este senti-
la escuela palatina de Carlos el Calvo (823-877), do, ningún nombre puede ser predicado en sen-
nieto de Carlomagno. En la tradición filosófica tido propio de Dios, pues todo nombre implica
escrita en lengua latina, es Escoto Eriúgena, en su opuesto y, en el plano no ya discursivo sino
efecto, quien por primera vez distingue a la nada ontológico, esto equivaldría a admitir que Dios es
no solo de lo ente sino también de la negación
de lo ente. En su obra de cinco libros La división
y con mayor aplicación en la medida en que las fuerzas
de la naturaleza, Eriúgena, consciente de que el me alcanzan me pregunto acerca de todas las cosas que
intelecto humano no puede dar cuenta de todo, o bien pueden percibirse por el espíritu o bien superan
propone como género generalísimo, en el plano la capacidad de este, me parece que existe una primera y
del discurso, el término “naturaleza”, que incluye extrema división entre aquellas que son y aquellas que no
en sí la división suprema de la totalidad, es de- son; de todas ellas surge un vocablo general que en grie-
go se llama physis, pero en latín, natura. ¿Acaso a ti te
cir, la división entre aquello que es y aquello que parece otra cosa?” (“Saepe mihi cogitanti, diligentiusque
no es.10 Hay cinco modos, precisa Eriúgena, en quantum vires suppetunt inquirenti,1 rerum omnium, quae
vel animo percipi possunt, vel intentionem ejus superant,
7 Op.cit. p.40: “En esa clara noche que es la nada de la an- primam summamque divisionem esse in ea quae sunt, et
gustia es donde surge la originaria patencia del ente como in ea quae non sunt, horum omnium generale vocabulum
tal ente: que es ente y no nada. Pero este «y no nada» que occurrit, quod graece φύσις, latine vero natura vocitatur.
añadimos en nuestra elocución no es, empero, una expli- An tibi aliter videtur?”)
cación subsiguiente, sino lo que previamente posibilita la 11 Cfr. ed.cit., p. 47. [0443A].
patencia del ente en general. La esencia de esta nada, ori- 12 Lo perceptible por medio de de los sentidos o del inte-
ginariamente anonadante, es que lleva, al existir, por vez lecto se dice que es, mientras que lo que lo trasciende se
primera, ante el ente en cuanto tal.” dice que no lo es; lo que permanece oculto en potencia se
8 Op.cit. pp.50-51. dice que no es, mientras que lo que se ha actualizado se dice
9 Op.cit. p.22. que es; lo que es inteligible se dice que es, lo que es ma-
10 Juan Escoto Eriúgena, Sobre la división de la naturale- terial se dice que no es; la naturaleza humana caída no es,
za, Traducción de Alfredo Fraschini. Villa María: Unidad la naturaleza humana restituida por la gracia divina se dice
Nacional de Villa María, Centro de Filología Clásica y Mo- que comienza a ser. Cfr. ed.cit., pp.47-59 [0443A-446A].
derna, 2015, p. 22, [0441 A]: “A menudo cuando pienso 13 Cfr. ed. cit., pp. 109-153, [0458B-0469A].
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“algo”, es decir, “una cosa” y no aquella otra. Por Dios desconocido. Pues bien, lo que adoráis sin
lo tanto, ni siquiera podemos decir de Dios con conocer, eso os vengo yo a anunciar.”17 A con-
propiedad que sea esencia (essentia) porque a la tinuación, Pablo identifica al Dios desconocido
esencia se le opone la nada (nihil). Y Dios no es con el principio de todo lo que existe y le niega
una esencia a la cual se le oponga la nada: 14 esto toda figura o forma aprehensible por los huma-
equivale a decir que no es un ente, ni siquiera un nos, aunque afirmando que somos de su linaje y
ente sumo, cuyo concepto opuesto sea la nada. que a tientas podemos hallarlo y encontrarlo. Si
Esta diferenciación entre un plano óntico, dentro bien varios del público se rieron de lo que siguió
del cual se oponen lo ente y la nada, y otro plano, a esto, es decir, de la doctrina de la resurrección
el de la nada originaria que funda la aparición de de los muertos, el texto evangélico dice que “al-
los entes, es así introducido en el Occidente lati- gunos hombres se adhirieron a él y creyeron, en-
no por Eriúgena. A su vez, él lo aprendió de un tre ellos Dionisio Areopagita, una mujer llamada
autor del siglo VI, de origen sirio, al cual tradujo Damaris y algunos otros con ellos.”18
del griego al latín. Ese autor, que todavía hoy ca- Este es el Dionisio que nuestro autor anó-
rece de nombre para nosotros, fue quien inventó nimo pretendió ser. Su texto más conocido, La
la expresión “teología mística”. Hasta fines del teología mística, gira, como veremos a continua-
siglo IX no fue filológicamente demostrado que ción, en torno de la noción del Dios desconocido,
nuestro autor no era quien decía ser: Dionisio, el inaprehensible y sin embargo fin del alma huma-
juez del Areópago al cual Pablo de Tarso convir- na, que busca divinizarse por medio de la unión
tió cuando predicó en Atenas. con Él. No solo el contenido de este texto refie-
re a su presunta condición de discípulo de Pablo
La teología mística de Dionisio sino que también lo hacen, de forma más explíci-
ta, otras obras del corpus, que consiste en cuatro
Como es sabido, en el capítulo 17 de los tratados y diez cartas. 19 En uno de estos trata-
Hechos de los apóstoles se narra la visita del após- dos, por ejemplo, llamado Los nombres divinos,
tol Pablo a Atenas, donde discute en la sinagoga el Pseudo Dionisio se declara discípulo de Pablo
con los judíos y en el ágora con los epicúreos y y dice que asistió, junto con Pedro y Santiago,
los estoicos y se indigna, además, al ver la ciu- el hermano de Jesús, a la muerte de la Virgen
dad llena de ídolos.15 Sus mismos interlocutores, María.20
encantados con lo pintoresco de su prédica sobre La primera referencia textual al cor-
Jesús y la resurrección (al respecto, el texto co- pus apareció durante el reinado del emperador
menta “Todos los atenienses y los forasteros que Justiniano (527-565), en un contexto polémico.
allí residían solo pasaban el tiempo en decir y en En una asamblea de obispos convocada en 532
oír la última novedad”)16, lo conducen al Areópa- por el emperador para solucionar la disputa entre
go, es decir, a la colina de Ares en la que estaba el monofisismo (que sostenía que en la persona
la sede del tribunal de Atenas, para que expusiera de Jesucristo la naturaleza divina absorbe a la na-
la nueva doctrina. De pie en medio del Areópago, turaleza humana) y el calcedonismo (que defen-
Pablo pronuncia una captación de benevolencia día las conclusiones del Concilio de Calcedonia,
que quinientos años después, reinterpretada por según el cual en Jesús las naturalezas divina y
nuestro autor anónimo, se convertirá en la pie- humana coexisten sin confusión), un grupo de
dra fundacional de la teología mística cristiana.
“Atenienses”, dijo Pablo, “veo que vosotros sois, 17 Hechos 17:22-23.
por todos los conceptos, quienes más respetáis a 18 Hechos 17:34.
19 El corpus Dionysiacum conservado está integrado por
la divinidad. Pues al pasar y contemplar vuestros cuatro tratados y diez epístolas: Acerca de los nombres divi-
monumentos sagrados, he encontrado también un nos, Acerca de la jerarquía celeste, Acerca de la jerarquía
altar en el que estaba grabada esta inscripción: Al eclesiástica, Acerca de la teología mística y diez epístolas.
Cf. Corpus Dionysiacum, I, ed. B. R. Suchla, Berlin / New
14 “Essentia ergo dicitur Deus, sed proprie essentia non York, De Gruyter, 1990 (“Patristische Texte und Studien”,
est, cui opponitur nihil; ὑπερούσιος igitur est, id est, super- 33) ; II, ed. G. Heil, A. M. Ritter, Berlin / New York, De
essentialis.” [0459D] Gruyter, 1991 (“Patristische Texte und Studien”, 36).
15 Cfr. Hechos de los apóstoles, 17:23-34. Utilizo la tra- 20 Dionisio Areopagita, Los nombres divinos. Estudio fi-
ducción de la Biblia de Jerusalén, Bilbao: Desclée de lológico-lingüístico con traducción directa y notas de Pa-
Brouwer, 1973. blo A. Cavallero. Buenos Aires: Losada, 2015, pp.245-246
16 Hechos 17:21. (DN III 2, 681C-D).
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obispos monofisitas citó como autoridad, entre que abandonar todas las operaciones cognosciti-
otros escritos, a los de Dionisio. Su adversario, vas, tanto las sensibles como las intelectuales, y
el sector calcedoniano, protestó que era por lo además, y aquí aparece el plano ontológico, tiene
menos sorprendente que un autor tan antiguo y que abandonar tanto lo que es como lo que no es
tan rodeado de gloria no hubiera sido conocido y (kaì pánta ónta ouk kaì ónta), para elevarse, en
citado antes. Por lo tanto, ya la primera vez que la medida de lo posible, hacia la unión con quien
se habla de Dionisio, se lo presenta como testi- existe por sobre todo ser y todo conocimiento.
monio autorizado de la fe y de la otra se cuestio- Estas instrucciones deberían ser resguardadas de
na su autenticidad.21 A pesar de las objeciones, los no iniciados, que están retenidos por lo ente
el corpus fue rápidamente legitimado. El papa y no creen que haya nada por sobre lo ente que
Gregorio Magno lo citaba ya en 593 y en 649 es sea o exista de modo supra-esencial.22 Dionisio
utilizado como autoridad decisiva en el Concilio llama a aquello que es de modo supra-esencial
de Letrán. la causa (aitía) de todo lo que es y dice que en
En el año 827, el emperador bizantino tanto causa todo puede ser predicado de ella pero
Miguel el Tartamudo regala al emperador occi- que, con mayor propiedad, todo debería ser nega-
dental Luis el Piadoso (hijo de Carlomagno) un do de ella. Inmediatamente, se vuelve a desplazar
manuscrito escrito en griego, que contenía el al plano metafísico: no se debería concluir que
corpus completo. El manuscrito es llevado a la las negaciones (apopháseis) sean los opuestos de
abadía de St. Denys, o sea, de san Dionisio, y el las afirmaciones (katapháseis) sino que la cau-
abad Hilduino hace la primera traducción al la- sa de todo es muy anterior a esto, más allá de la
tín. Cuarenta años después, en la corte de Luis privación, más allá de la negación y más allá de
el Calvo, Juan Escoto Eriúgena hace una nueva la afirmación. El capítulo concluye con una ale-
traducción del corpus y, lo que quizás sea todavía goría, en la que se comparan las condiciones del
más importante, utiliza las nociones y el vocabu- ascenso propuesto con las exigidas a Moisés para
lario filosófico del Pseudo Dionisio para desarro- su ascenso al Monte Sinaí.23
llar su propio sistema. Es así como aparece en la Este primer capítulo recoge la tradición
metafísica occidental la noción de una nada que cristiana previa sobre la mística y a la vez sienta
antecede tanto a lo ente como a la negación de lo las bases de una perspectiva nueva, que será re-
ente. Eriúgena elabora esta noción en un marco cogida, entre otros, por Escoto Eríugena, Alberto
filosófico; en la obra del Pseudo Dionisio aparece Magno, Meister Eckhart y Nicolás de Cusa. El
en un brevísimo tratado que lleva el título de La texto, además de denominar a las Escrituras
teología mística. “escritos místicos”, aclarando que encierran los
La teología mística es un tratado muy misterios de la palabra divina, describe el cami-
corto, en cinco capítulos, dirigido a Timoteo, su- no propuesto al discípulo como una iniciación,
puesto discípulo de Dionisio. El primer capítulo que debe elevarse hacia la cumbre de estos es-
contiene todos los temas que se van a desarrollar critos. Insistiendo con el tema y con el lenguaje
en el resto; como veremos, el plano gnoseológi- de los misterios, dice que tanto el camino como
co o epistemológico y el metafísico-ontológico aquello a lo que se acceda debe permanecer ocul-
están estrechamente ligados. El texto comienza to de los no iniciados. Y, en efecto, el adjetivo
con una invocación a la Trinidad supra-esencial, mystikós é ón tiene su origen en Grecia y refiere
supra-divina y supra-buena, pidiéndole que guíe a lo relativo a los misterios o habitual en ellos,
al autor y a su discípulo hasta la cumbre suprema algo escondido o secreto; substantivado como
de los escritos místicos (oi mystikoì lógoi), don- neutro plural, significa simplemente “misterios”.
de los misterios de la teología (que quizás podría Clemente de Alejandría (150-215 e.c.) fue quien
ser traducido, en este contexto como “la palabra introdujo en la literatura cristiana tanto el adjeti-
de Dios”) yacen en la brillante oscuridad de un vo “místico” como el adverbio “místicamente”.
silencio escondido. Sigue con una instrucción a
Timoteo de cómo alcanzar la visión mística: tiene 22 La teología mística 1.2 [1000A]: “Τούτων δὲ ὅρα,
ὅπως μηδεὶς τῶν ἀμυήτων ἐπακούσῃ· τούτους δέ φημι
τοὺς ἐν τοῖς οὖσιν ἐνισχημένους καὶ οὐδὲν ὑπὲρ τὰ ὄντα
21 La observación es de Enzo Bellini en su introducción ὑπερουσίως εἶναι φανταζομένους, ἀλλ’ οἰομένους εἰδέναι
a: Dionigi Areopagita, Tutte le opere. Traduzione di Piero τῇ καθ’ αὑτοὺς γνώσει τὸν θέμενον “σκότος ἀποκρυφὴν
Scazzoso, introduzione di Enzo Bellini. Milano: Rusconi, αὐτοῦ.”
1981. 23 Cfr. Éxodo 19:1-25.
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Si bien en Clemente mystikós conserva el senti- bien conocidos y el Pseudo Areopagita los des-
do griego de “escondido”, el término se inscribe cribe en el capítulo 3, que trata de las teologías
en otra concepción, de origen judío, cuyo repre- afirmativas y negativas. En ese tramo del trata-
sentante helenizado más influyente fue Filón de do, Dionisio describe parte del proyecto teoló-
Alejandría (20 a.e.c-50 e.c.). Esta concepción gico que se expresa en el conjunto de su obra.
considera que las Escrituras Sagradas tienen un El procedimiento afirmativo desciende desde lo
significado profundo que está oculto o que no es superior, la causa, hacia lo inferior, los efectos,
inmediatamente accesible para el lector medio. y se va ampliando, es decir, recurriendo a mayor
Clemente se refiere precisamente a este signifi- cantidad de expresiones, a medida que se aleja
cado como “místico”, comprensión que es reco- de Dios. Dionisio dice haber desarrollado este
gida en la generación siguiente por Orígenes de procedimiento afirmativo en tres momentos: en
Alejandría (184-253 e.c.), quien además adjetiva Las instituciones teológicas, presunta obra per-
así a la meta final del alma, la visión o contempla- dida, expuso los misterios de la Trinidad y de la
ción mística (mystikè theoría). Orígenes, justa- Encarnación; en Los nombres divinos expuso los
mente, es una de las fuentes cristianas del Pseudo nombres inteligibles de Dios, tales como Bien,
Dionisio. A esta brevísima historia del término Ser, Verdad y Vida; y finalmente en La teología
mystikós quisiera agregar una consideración del simbólica, otra presunta obra perdida, trató los
especialista Bernard McGinn que también es apli- nombres de Dios basados en el mundo material,
cable al Pseudo Dionisio. McGinn observa que el como por ejemplo borrachera o embriaguez. El
misticismo cristiano, especialmente en sus fases procedimiento negativo, en cambio, recorre el
formativas, siempre fue no solo escritural, o sea, camino opuesto. En el capítulo anterior, Dionisio
ligado al sentido escondido, espiritual o místico lo había comparado con la actividad de un escul-
de los textos sagrados, sino también eclesial, vale tor que quiere sacar a la luz la figura escondida en
decir, realizado solo en y por medio de la comu- un bloque de mármol y tiene que ir quitando todo
nidad.”24 Como otro tratado de Dionisio, titulado lo que impide verla. Del mismo modo, el proce-
La jerarquía eclesiástica, lo muestra, para él la dimiento negativo niega en un primer momento
liturgia y los símbolos utilizados en las Escrituras la multiplicidad de nombres de origen sensible
tienen un valor teúrgico, es decir, tienen eficacia propios de la teología simbólica, luego niega los
para alcanzar la unión con Dios.25 nombres de origen inteligible, que son menos que
Con todo lo anterior, parecemos estar los anteriores, para llegar finalmente a la ausencia
firmemente instalados en el dominio de lo ente: de palabras. En los dos capítulos siguientes, los
Sagradas Escrituras, Iglesia, verdades reveladas, últimos del tratado, se aplica este procedimiento
prácticas iniciáticas para acanzarlas… Y entre de remoción; el párrafo final, al cual solo puede
esas prácticas podríamos quizás situar el lengua- seguir el silencio, apunta, según entiendo, a una
je del Pseudo Dionisio, que con sus hipérboles, instancia metafísica más allá de lo ente y de la
paradojas, afirmaciones y negaciones parecería negación de lo ente. Cito:
estar desarrollando un método o un procedimien-
to por medio del cual alcanzar la unión con una No vive y no es vida. No es substancia (ousía), ni eternidad
instancia a la que llama “supra-esencial” pero a (aión), ni tiempo (khrónos). No es tocada (epaphé) por el
la que podríamos entender, quizás, como ese ente noûs porque no es ni conocimiento (epistéme) ni verdad
sumo al cual el lenguaje no puede alcanzar. Los (alétheia); […] no es algo de lo ente ni algo de lo no ente
dos primeros pasos de este procedimiento son […].26

24 Bernard McGinn, The Foundations of Mysticism. New


Esta instancia metafísica no es tematiza-
York: Crossroad, 1991, p. 86 da por Dionisio, para quien la respuesta humana
25 Además de que el corpus dionisiano presenta coheren- a la nada es el silencio. Con esto, también no-
cia interna, su mismo autor es explícito acerca de que las sotros tenemos una primera respuesta a nuestra
diferentes teologías examinadas en los diferentes tratados
no son sino diversos modos de hablar de Dios. (Cfr., por
ejemplo, TM 3.) En tanto que aquí examino solo cierta re- 26 La teología mística, 5 [1048A]: “[…] οὔτε ζῇ οὔτε
cepción del escrito La teología mística, dejo de lado otros ζωή ἐστιν· οὔτε οὐσία ἐστὶν οὔτε αἰὼν οὔτε χρόνος οὐδὲ
aspectos (no solo el teúrgico sino también el amoroso) que ἐπαφή ἐστιν αὐτῆς νοητὴ οὔτε ἐπιστήμη, οὔτε ἀλήθειά
darían una visión integral del proyecto teológico del Pseu- ἐστιν […] οὐδέ τι τῶν οὐκ ὄντων, οὐδέ τι τῶν ὄντων
do Areopagita. ἐστίν […]”.
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pregunta: ¿podemos decir que la teología mística serio, reside la superación del lenguaje substan-
no quiere saber nada de la nada? Esta respuesta cialista.
sería que la teología mística -o, por lo menos, el Si este primer momento en que Eriúgena
tratado del siglo VI que dio nombre a este tipo aborda a la nada puede todavía ser considerado
peculiar de experiencia filosófica- quiere saberlo epistemológico, el segundo momento es deci-
todo acerca de la nada: esto es, no quiere saber didamente metafísico. El cristianismo, como es
nada. Según la feliz expresión de McGinn, “La sabido y Heidegger nos recuerda, explica el dar-
única gnôsis verdadera de Dios es la agnosía.”27 se de las cosas a partir de la noción de creación
de la nada, ex nihilo. La nada, así, es concebi-
El prefijo super y la creación ex nihilo da como privación de ser: donde no había nada,
Dios puso el ser. Esta es una descripción bastante
Juan Escoto Eríugena, traductor y comen- correcta de, por ejemplo, la posición de Agustín
tador de Dionisio en el siglo IX, recoge el guan- de Hipona.28 En el libro III de La división de la
te y aborda a la nada —suponiendo que la nada naturaleza Eriúgena enfrenta el problema de la
fuera abordable —. Lo hace en dos momentos. creación. Su tratamiento es complejo y no exclu-
Primero, en el libro I de La división de la natura- ye la idea de la nada como privación. Pero va más
leza, Eriúgena recoge y analiza el vocabulario del allá. El filósofo irlandés recibió tanto de Orígenes
Pseudo Areopagita, comentando el uso recurren- como de Gregorio de Nisa (330-400) la doctrina
te del prefijo hypér, al que traduce como super. de la doble creación. Según esta doctrina, la ver-
Cuando introduje a Eriúgena en esta dadera creación se dio al ser creadas en el Lógos
charla, comenté que al examinar los límites y divino las causas o arquetipos primordiales de
los alcances del discurso teológico regido por el todo. Cuando Adán, causa primordial del lógos
principio de no contradicción, afirma que ningún humano, peca, la creación desciende a la materia,
nombre puede ser predicado en sentido propio de lo que nos permite hablar de una segunda crea-
Dios, pues todo nombre implica su opuesto y ni ción, una creación en tiempos y lugares, que es el
siquiera podemos decir de Dios con propiedad efecto visible de las causas primordiales.
que sea una esencia (essentia) que se opondría a Voy a dejar de lado el problema de la se-
la nada (nihil). También comenté que así ingresa gunda creación para no alejarme de nuestro pro-
en el Occidente latino la concepción de una ins- blema, que es la nada. La creación verdadera, la
tancia originaria y anterior tanto a lo ente como a creación de las causas primordiales, que es en
lo no ente, una instancia que no puede ser descri- realidad la creación del todo, es, dice Eriúgena,
ta como “un ente sumo”. Es decir: ni la teología creación de la nada. La diferencia con la concep-
afirmativa ni la negativa se refieren a Dios con ción clásica es que la nada a partir de la cual es
propiedad. Por eso mismo, según vimos, la cul- creado el todo es Dios. Esto significa que decir
minación es para Dionisio el silencio. Eriúgena, que Dios crea todo de la nada es decir que Dios
que es filósofo, no renuncia al lenguaje y encuen- “produce las esencias desde su sobre-esencia-
tra, justamente en el adverbio hypér utilizado por lidad, la vida desde su sobre-vida, el intelecto
Dionisio, el único modo posible de referirse con desde la sobre-intelectualidad”.29 Esta creación,
propiedad a la nada originaria. El motivo es que la única creación, se da por completo en el inte-
el adverbio hypér, cuando modifica a un nombre rior de esa nada originaria que puede ser llamada
divino, realiza la coincidencia entre la teología “bondad divina”. Consiste en una teofanía, o sea,
afirmativa y la negativa: al decir, por ejemplo, en una manifestación —las causas primordia-
que Dios es supra-esencial, la enunciación es po- les— a partir de una instancia que está más alla
sitiva (“Dios es”) y la significación es negativa tanto de lo ente como de la negación de lo ente.
(“no es esencia”). En esta conjunción de opuestos
se da para Escoto Eriúgena la superación del len-
guaje regido por las categorías aristotélicas, sin
por ello renunciar a la conexión entre el lenguaje
28 Véase al respecto (y para lo que sigue también) Natalia
y la realidad —o, mejor dicho, sin renunciar a la Strok, “La recepción del concepto de creatio ex nihilo eriu-
conexión entre el lenguaje y la nada—. En esta geniano en las historias de la filosofía de Bruckner, Tenne-
misma paradoja, en poder soportarla y tomarla en man y Rixner”, en Praxis filosófica nro. 37, julio-diciembre
2013, pp.127-146.
27 The Foundations of Mysticism, p. 175. 29 “La recepción del concepto de creatio ex nihilo”, p. 135.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

El sujeto de la mística misma voz narrativa asume la segunda persona.


El obispo se dirige aquí a un peregrino al que
Si todo lo que aparece está constituido a podríamos calificar de “abstracto”, un peregrino
partir de una nada originaria, si nosotros —por que representa a todos los monjes de Tegernsee, y
mucho que nos distraigamos con lo ente— esta- lo incita a ponerse en marcha por medio del pro-
mos constituidos a partir de la nada, ¿cuál sería cedimiento caracterizado antes, que consiste en
el estatuto de este sujeto que responde a la nada? una meditación especulativa a partir de un ícono
¿Podemos hablar de sujeto? Así como la nada no omnividente del rostro de Jesucristo. La exhor-
es un objeto, el ser humano abierto a ella tampoco tación hecha en segunda persona concluye con
puede ser concebido como un sujeto. Del mismo estas palabras:
modo en que la mística especulativa, como ejer-
cicio teórico, no encuentra su respuesta ni en la Y porque la visión del ícono te mira de igual manera en to-
noción de ente sumo, ni en la de la negación de lo das partes y no te abandona en ningún lugar a donde vayas,
ente, así tampoco la praxis mística configura un en ti se enciende la especulación. Y, estimulado, dirás:30
sujeto que pueda ser entendido ni como soporte
de actividades ni como negación del sujeto. Los En este preciso momento, la voz narrati-
dos autores medievales que traté en esta charla va cambia a la primera persona, y permanecerá
son autores de un corpus identificable y coheren- así hasta el final del tratado. Pero esta voz narra-
te y, en ese sentido, quienes los estudiamos y lee- tiva es nueva. No es Nicolás de Cusa quien ha-
mos los nombramos y los tratamos como sujetos. bla, sino el personaje al que llamé “un peregrino
Sin embargo, ellos mismos no son identificables abstracto”. Él es quien contará la historia del as-
por medio de un nombre propio y de ninguno censo. Es una primera persona, pero una primera
tenemos noticias biográficas. Dionisio, ya lo vi- persona mediada, distinta de la de, por ejemplo,
mos, es el Pseudo Dionisio. O sea que es y no es las Confesiones de san Agustín o La consolación
Dionisio. En el nombre “Juan Escoto Eríugena”, de la filosofía de Boecio. En esas obras, el narra-
el génerico “Juan” es especificado por un doble dor pretende ser el autor, que cuenta su propia
gentilicio, un gentilicio que se repite: una vez es historia. Aquí, el narrador utiliza el discurso in-
dicho en latín y la otra en un griego latinizado: directo y habla a través de un personaje ficticio,
Juan, el Irlandés de Irlanda. De él no sabemos el peregrino abstracto, que no se identifica con el
casi nada: ni cuándo nació, ni dónde se formó, autor. No solo esta serie de mediaciones desarma
ni cuándo y dónde murió. Como en el caso de la noción de un sujeto protagonista del ascenso
Dionisio, solo nos queda parte de su obra. sino que el género literario-filosófico en que se
La condición contradictoria del místico, inscribe La visión de Dios desarma la oposición
de quien no podemos decir sino que es sujeto y entre autor y lector. El género ha sido descrito por
no es sujeto, esto es, que arraiga en un fondo que Robert McMahon, que lo llama “ascenso medita-
no es fondo, recibe una vuelta de tuerca literaria tivo del alma”, y se caracteriza por una serie de
en un tratado del siglo XV, un tratado que, por estrategias que apuntan a la transformación es-
muchos motivos que no vamos a ver ahora, se piritual del que lee el texto.31 Con lo cual, a los
encuentra proyectado hacia la modernidad. El dos personajes del texto, el autor y el peregrino
nombre del escrito es La visión de Dios y tiene, abstracto, ambos narradores en primera persona,
esta vez, un autor bien identificable, el filósofo (y cada uno con su propia voz, nos sumaríamos no-
cardenal de la Iglesia de Roma) Nicolás de Cusa. sotros, los lectores en busca de comprensión, sus-
Pero aunque el autor sea identificable, el prota- ceptibles de devenir otros en el proceso.
gonista de este tratado no lo es tanto. La primera Para concluir, me gustaría decir que en los
sección, que incluye unas palabras de apertura, últimos dos años esos lectores en busca de com-
un prefacio y tres capítulos donde se detalla el prensión del opúsculo La visión de Dios fuimos
procedimiento a seguir durante el ascenso, está varios y todos nosotros integrantes de esta comu-
escrita en primera persona, y el narrador se iden-
tifica sin dar lugar a la duda con el autor, Nicolás
30 Nicolás de Cusa, La visión de Dios. Traducción inédita
de Cusa, obispo de Brixen, que habla a los mon- de Paula Pico Estrada: (h vii, c.4, n.9.)
jes de la abadía de Tegernsee y les da indicacio- 31 Robert McMahon, Understanding the Medieval Medita-
nes espirituales. Al comienzo del capítulo 4, esta tive Ascent: Augustine, Anselm, Boethius & Dante. Chica-
go: The Catholic University of America Press, 2006.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

nidad universitaria. Una vieja versión del texto


al castellano hecha por mí fue leída, comentada
y revisada en el marco del programa de práctica
y estudio de la traducción Interpres, que depende
de Lectura Mundi, es coordinado por el profesor
Alejandro González y tiene como asesores acadé-
micos a los profesores Laura Carugati y Antonio
Tursi. De ese trabajo resultó la futura publicación
del texto, donde la introducción y la traducción
son mías, la revisión es de la profesora Marcela
Borelli, a cargo de una de las cátedras de Lengua
y Cultura Latina de este departamento, y las notas
complementarias son de los estudiantes que par-
ticiparon en el proyecto. El texto del Cusano está
construido sobre la base de un lenguaje paradó-
jico, y el esfuerzo de cada uno de los estudiantes
consistió en dilucidar una determinada contradic-
ción. Dámaris Vanag se ocupa de cómo se cons-
truye un discurso que no sea discursivo, y para eso
abordó el procedimiento enigmático que propone
el Cusano. Gustavo Cruz hace un análisis de la
contradicción entre libertad y gracia, contradic-
ción que es a la vez coincidencia. Gastón Rossi
examina una paradoja clave en la metafísica de
Nicolas de Cusa, la tensión entre el principio ab-
soluto o desvinculado y lo principiado contracto
o determinado. Juan Manuel Ferreyra toma otro
aspecto de esta oposición, la contradicción entre
universal y particular, y Bruno Alfonzo muestra
cómo esa contradicción se vuelve visible, gracias
a las leyes de la óptica, en la mirada del ícono,
que parece mirar a todos y a cada uno a la vez.
Finalmente, Joaquín Adrogué aborda lo que para
Nicolás de Cusa es la contradicción máxima: la
unión de las naturalezas humana y divina en la
persona de Jesucristo.
Por sobre la contradicción máxima, el
resto es silencio.

* Este escrito fue la conferencia de inau-


guración del segundo cuatrimestre de 2018 en
la Escuela de Humanidades de la Universidad
de San Martín. Agradezco mucho a la profesora
Cristina López (Cefilo), que me invitó a dar la
charla. En la versión escrita, agregué notas y co-
rregí algunas repeticiones, pero mantuve el tono
coloquial

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Symploké revista filosófica octubre 2018

Seminario
Temporalidad y nihilismo*

Prof. Dr. José Ordóñez García


Universidad de Sevilla

Nota preliminar adoptando el sesgo de algo atemporal y, por tan-


to, presentarse como esencia, como algo que no
Eseidad. Con este término, una palabra cambia. En la confusión del cómo con el qué, en
que no contempla la RAE pero que es de uso co- el olvido de aquél, de la temporalidad constituti-
mún en Zubiri, y que existe en la lengua inglesa va del que dice el es del ente por caso, acontece la
(beingness) y la alemana (Seiendheit), queremos esencia, la metafísica, la forclusión de la tempo-
referirnos al despliegue que hacemos del es de ralidad. Así pues, la esencia representa el olvido
una cosa. De este modo, no la usamos, al modo fundacional del ser en cuanto a su modo de darse
de Zubiri, ni de la tradición tomista, en el senti- ahí en lo que se presenta y a raíz de un modo
do de “esencia”, sino en el de manifestación en del tiempo, el presente. Sin embargo, lo que se
relación al existente que dice el “es” de la cosa, le presenta es el cómo, o dicho de otra manera: el
del ente, tal como se le aparece a él. Un decir ya desde dónde es el cómo y el desde cuándo el pre-
dicho entre la cosa y el existente que la conoce sente, pero un presente que se agota precisamente
se instala afuera de la eseidad y en el interior de en la dación misma del ente: no parece correcto
la esencia. Si la existencia prima sobre la esen- aplicar en la circunstancia en la que me encuen-
cia, tal como queda establecido por la ontología tro, lo aplicado por otro en unas circunstancias no
fenomenológica, y su correspondiente analítica sólo diferentes culturalmente sino temporalmen-
existenciaria, entonces el término adecuado a esa te. El cómo siempre es deliberativo, tal como vio
corriente, fundada en la temporalidad, es el de claramente Aristóteles en su Ética a Nicómaco, y
eseidad. ¿Por qué? Porque el despliegue del ser muy posteriormente Heidegger en Ser y Tiempo.
del ente lo lleva a cabo el Dasein en una situación De este modo, la existencia siempre está al tanto
determinada, en un estado anímico determinado de su cómo en cada caso. Si decimos que el ser
y, sobre todo, en un determinado éxtasis del tiem- humano es mortal, simplemente nos limitamos a
po, el presente, a pesar de que ese presente se en- decir que su esencia es su existencia, o lo que es
cuentre íntimamente constituido por la anticipa- lo mismo en nuestro caso: que su esencia es la
ción y, en consecuencia, por su “haber sido”. El eseidad; su qué es su cómo. Digamos finalmente
problema estriba en que cuando un existente con- que el qué y la esencia es la técnica que inventa
creto, es decir, un ser finito, contingente y tempo- el existente para vivir como si no fuese temporal,
ral, dice el ser de un ente en cuanto a cómo es, no como si no fuese el que es.
puede pretender que eso dicho tenga legitimidad
más allá de él mismo, se interprete como un qué,
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Symploké revista filosófica octubre 2018

1.1. Teología, ya que, en ambos casos, se parte de un


fenómeno, la fe, que nada tiene que ver con el
Si el tiempo encuentra su sentido en la eter- tiempo —al menos en relación a su asunción y a
nidad, entonces tiene que entendérselo desde sus consecuencias existenciales. El teólogo cree,
ésta... desde la eternidad al tiempo. (CdT, 23 / sin la fe su posición es insostenible, el filósofo
BdZ, 107) piensa, y para él, la fe es un fenómeno singular,
[Diferencia entre la Teología y la Filosofía. entre otros, de estar en el mundo. No puede ha-
Diferencia entre el teólogo y el filósofo: creer ber fe sin mundo, que es su condición de posibi-
y pensar. El tiempo: una cuestión no teológica] lidad, como lo es para otros modos corrientes de
estar en el mundo. De igual manera, el tiempo, la
En los mismos sustantivos observamos temporalización —que es su forma originaria de
ya una diferencia que es radical: mientras que la mostrarse, por cuanto no es un mero concepto de
primera alude al conocimiento, a lo que da razón carácter sustantivo—, es constitutivo del existen-
de un algo concreto, diríamos que de un objeto te en toda su dimensión y de tal manera, que está
mental (Objekt) —pues no se trata de uno sen- presente en toda su actividad.
sible que tengamos ahí delante (Gegenstand), Así, pues, el Teólogo está en este mun-
a pesar de que abunden imágenes e ídolos ale- do, aunque su trato con él sea el de obviarlo, so-
góricos representativos y que, así, se den ahí en brepasarlo, sometiéndolo a una hermenéutica del
frente como una mesa o un árbol—, la segunda todo ajena a la realidad ontológica existencial.
se encuentra en las antípodas, puesto que care- Sin embargo, el filósofo, al menos el fenomenó-
ce de objeto pero no de sentido, ya que se trata logo existencial, no sólo está en el mundo, atento
de una actitud, de un como: no tiene objeto, pero a él, sino que establece el marco de actuación a
tiene como objeto el saber sin más. No parte de resultas de la estructura categorial derivada del
supuestos, o no debería, ni de ideas o conviccio- horizonte ontológico existencial, es decir: la tem-
nes, sino del puro deseo de saber cómo son las poralidad.
cosas y, en el caso que nos ocupa, cómo somos La diferencia entre Teología y Filosofía,
nosotros, que queremos saber cómo son las co- en cuanto pensar, puede cifrarse, entonces, como
sas, en cuanto somos, es decir: qué nos cabe espe- la que se da entre esencia y existencia; en una pri-
rar en cuanto sabemos cómo somos. Así, mientras ma la esencia sobre la existencia, en el olvido del
la Teología forma parte de la metafísica, en un tiempo, mientras que, en la otra, prima la exis-
sentido especial, y nos describe a Dios, su cómo, tencia sobre la esencia, el tiempo sobre la eterni-
a raíz de su qué representado por la Teología, la dad o como dice Heidegger: la esencia es la exis-
segunda, siguiendo su cauce más propio, cons- tencia, que es lo que nunca cambia en nosotros,
tituido por la fenomenología, su actitud, ha de lo que somos eternamente en general: mortales,
ventilárselas finalmente con la existencia, con la finitos, contingentes. Algo que no hemos deci-
nuda vida: cómo hemos de vivir, sin dejar de ser dido y que nos viene dado sin más. De ahí que,
lo que sabemos que somos, para llevar una vida Heidegger, de algún modo, nos indique que, así
buena, satisfactoria.1 Aquí es donde volvió la fi- como los animales vienen ya planificados y no
losofía a su verdadera tierra gracias a Platón, en tienen decisión alguna sobre su comportamiento,
cierta medida, a Aristóteles, en gran medida, y a también a nosotros nos ocurre lo mismo: la tem-
Heidegger, quien, al darse cuenta del extravío en poralidad nos marca la orientación de nuestro ca-
el que cayó, la asentó de nuevo en su lugar. mino. No podemos modificarla ni obviarla, pues-
Con Heidegger, por consiguiente, se re- to que, incluso yendo contra ella, viviendo como
tomó al Aristóteles más práctico y se volvió a si no fuésemos mortales, decidiendo ir contra lo
revitalizar el cómo, por largo tiempo caído en el que somos, no nos apartamos un ápice de nues-
olvido del ser. Es lo que hace el de Messkirch tra condición, que es nuestro destino; un ser ese
en El concepto de tiempo (Der Begriff der Zeit): nuestro, esencia, que consiste en estar, ex-sistir.
posicionar la cuestión temática en el sitio que Queriendo olvidar esa condición nuestra, no que-
verdaderamente le corresponde. De ahí que la riendo saber lo que sabemos de nosotros mismos,
Filosofía no pueda ser Teosofía y mucho menos transformamos ese ex-sistir, mediante el como
si, en un in-sistir. En nuestra opinión, algo de la
1 Sería interesante urgar, en otro momento, sobre la relación esencia de la técnica se pone ya aquí en juego.
de esto que decimos con la noción de Bienestar (Wellfare).
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Symploké revista filosófica octubre 2018

El tiempo, pues, no es un fenómeno teo- de a un fenómeno destacable por su carácter ex-


lógico, Heidegger dixit (CdT, 25 / BdZ, 108), ni tra-ordinario, infrecuente, mientras que el cómo
tiene que ver con la Teología, pertenece a la on- hay que buscarlo en la descripción que hacemos
tología, que es la disciplina que versa sobre cómo del acontecimiento: cómo sucedió, cómo se de-
somos, no sobre cómo nos gustaría ser, que es un sarrolló y, sobre todo, cómo me afectó. Es preci-
asunto de la moral, que es la deriva práctica de la samente el cómo lo que diferencia a un aconteci-
fantasía teológica. La diferencia entre la lógica miento de lo que no lo es, algo totalmente singu-
teológica y la lógica ontológica estriba en la ho- lar frente a lo ordinario. De ahí que el auténtico
nestidad ética de esta última frente a la forclusión acontecimiento para lo uno sea la apropiación, el
moral de la primera, que no nos salva de la muer- giro hacia la mismidad. ¿Suceden acontecimien-
te, aunque sí de nuestro saber de ella. tos todos los días? Posiblemente consideremos
de esa manera muchas noticias, pero, por lo ge-
1.2. neral, se trata más bien de noticias que de autén-
ticos acontecimientos. Si, por tanto, el aconte-
El tiempo es aquello en lo que se producen cimiento es algo excepcional, entonces también
acontecimientos. (29 / 109) el tiempo sólo aparece excepcionalmente, en la
[Los acontecimientos no son tiempo, ocurren medida en que lo pongamos en relación con los
en el tiempo] acontecimientos. Si no hay acontecimientos ¿qué
pasa con el tiempo? ¿es que el en del tiempo si-
Así dice Heidegger, aludiendo a gue estando ahí, aunque no haya acontecimien-
Aristóteles, para ver hasta dónde es posible es- tos? ¿un tiempo “vacío”? ¿un tiempo en sí? ¿se
tar de acuerdo con él. Si los acontecimientos encuentran los sucesos ordinarios fuera del tiem-
“ocurren en el tiempo”, no estamos pensando po? Hablando de este modo, en estos términos,
el tiempo como tal, no estamos diciendo qué es resulta que estamos tratando al tiempo como un
el tiempo, ni tampoco “cómo” es, sino que nos objeto común y corriente que está ahí frente a
limitamos a señalar una suerte de constatación mí (Gegenstand). Pero sabemos que no es así. El
que nada tiene que ver con la eseidad del tiempo tiempo no es algo sensible, medible. Es, más bien
sino, más bien, con algo así como el “dónde”. Al al contrario, una suerte de “medida” pero no de
decir en el tiempo estamos considerando a éste carácter cuantitativo sino afectivo. A este punto
como algo espacial, como una suerte de lugar llega Heidegger por medio de San Agustín. El
en el que hay cosas, acontecimientos (éstos sólo tiempo constituye el ámbito de aquello que nos
tienen lugar en el sentir del existente). De modo afecta, nos dice Heidegger citando al de Hipona:
que el horizonte de comprensión, la condición de
posibilidad de los acontecimientos, se encuentra Las cosas que pasan y te salen al encuentro producen en ti
en el tiempo. Al conducirnos así, que no se trata una afección que permanece, mientras ellas desaparecen.
Mido la afección en la existencia presente, no las cosas que
de la eseidad del tiempo, llegamos a él gracias a pasan produciéndola. Repito que es mi manera de encon-
los acontecimientos sin que el tiempo mismo sea trarme lo que yo mido cuando mido el tiempo. (33-34 /
uno de ellos, como es obvio. Así pues, en esta 109)
situación, nuestra comprensión del tiempo se va
a ver determinada por aquello que lo desvela: 1.3.
el acontecimiento. Esto nos obliga a conocer el
acontecimiento para que tenga sentido la presen- La pregunta acerca de qué es el tiempo ha
cia del tiempo, como la instancia que posibilita el acabado por remitir nuestra investigación al
suceder del acontecimiento. ser-ahí, si por ser-ahí se entiende el ente en su
¿Qué es un acontecimiento? ¿cómo es un ser que conocemos como vida humana. (34 /
acontecimiento? El nacimiento de un hijo o de 111-112)
una hija, la muerte de un ser querido, la dimisión [Para saber del tiempo es necesario saber pre-
de un político español relacionado con la corrup- viamente del ser-ahí. El ser-ahí es su cómo, no
ción, ganar la copa del mundo por primera vez, su qué. Su “cómo” son las categorías existen-
etc., es decir: aquellas cosas que sólo ocurren una ciarias]
vez en la vida. Hay acontecimientos individuales
y colectivos. Así pues, el qué del acontecer alu- En este punto damos con la manera que
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Symploké revista filosófica octubre 2018

tiene Heidegger de conducirse habitualmente puerta de acceso al existente, que la pregunta por
cuando se interroga por la eseidad de un ente, el tiempo, por su qué, pareciendo una pregunta
y este modo no es otro que el de establecer la por un afuera, es decir, una pregunta de carác-
eseidad de la cosa fuera de ella, como cuando se ter científico, se revela como un fenómeno que,
refiere a la esencia de la técnica como algo no de facto, es interior, que, pretendiendo conocer
técnico. Así pues, aquello que sea el tiempo tie- el tiempo, hemos virado hacia el existente. Y ese
ne que ver con aquél que se pregunta por él. De qué del tiempo se transforma, en un primer paso,
algún modo, el de Messkirch establece una dis- en un qué es el existente, para, finalmente, pasar a
tinción clara entre el objeto de la pregunta y el su- convertirse en un cómo. Ni la actitud científica ni
jeto de la pregunta, pues aquello que uno diga de su método son adecuados para abordar al ser-ahí.
aquél estará determinado, o al menos transferido, El paso del tiempo al ser-ahí lo facilita,
por el modo como se comporta el Dasein. Si éste pues, San Agustín. Comenzó Heidegger des-
tiene una determinada estructura en su modo de echando la teología como vía de acceso al tiempo,
ser, resultará claro que sus posibilidades de acce- y es gracias a un padre de la iglesia que encuen-
so a aquello que quiere conocer estarán limitadas tra la puerta de entrada al existente, a la “vida
y en directa relación con aquella. En cierto sen- humana” (menschliches Leben). ¿Se trata de una
tido, esta situación nos recuerda a Hegel, quien, cuestión pre-teológica, pre-religiosa?3 De algún
en su Fenomenología del espíritu, afirma que: “la modo, al menos podemos tener la certeza de que
aplicación de un instrumento a una cosa no deja se trata de la condición de posibilidad de toda
a ésta tal y como ella es para sí, sino que la mo- teología y de toda ciencia. Condición que, para-
dela y altera”.2 Y Heidegger no está muy lejos de dójicamente, ambas caen el su olvido perdiendo,
este apunte de Hegel. No conocemos el tiempo así, su legitimidad, en tanto en cuanto yerran en
como tal, como algo ajeno al existente, sino que su fundamento. No puede haber auténtica teolo-
caemos en la cuenta de que, en ese intento, lo que gía o auténtica ciencia –si es que ha de haberlas–
se abre es el acceso a nosotros mismos (dejemos si su labor pierde vista el fundamento existencial
a un lado la cuestión de si este planteamiento es en el que se sostienen: su correspondencia con las
otra forma de idealismo frente al materialismo). estructuras ontológicas del ser-ahí derivadas de la
Si conocer un árbol, no su “qué es” sino su “cómo temporalidad.
es”, supone ir más allá de la mera descripción La indicación fundamental de Heidegger
contemplativa que puedo hacer de él, entonces respecto a la singularidad más propia del existen-
ciertamente no hago otra cosa que comprobar mi te, en cuanto ente al que fija sus amarras la pre-
capacidad para desmontarlo, separarlo en partes gunta por el tiempo, es ésta:
y limitarme a describir las diversas cosas que se
me aparecen... pero entonces el árbol, como tal, La afirmación «yo soy» es la auténtica enunciación del ser
desaparece. En todo caso, y no conviene olvidar que ostenta el carácter del ser-ahí del hombre. (34 / 112)
esto, aquello que me interpela, el tiempo, en rea-
lidad no es algo ajeno a mí, no es ese árbol que Esta afirmación cuenta con una larga e
está ahí, ni siquiera este reloj. De hecho, tampoco interesante tradición entre nosotros. Alguien toca
resulta claro que el tiempo me interpele, puesto el timbre de una puerta y a continuación escu-
que volveríamos a situarlo como un ente para la cha: “¿quién es?”. Inmediatamente al otro lado,
sensibilidad. Heidegger ya sabe, tras visitar a San en muchos casos, ese alguien responde: “soy yo”.
Agustín, que el tiempo no se encuentra más allá Parece que, sin la primacía de la pregunta, una
del existente, pero tampoco más allá de los obje- respuesta como ésa carece de sentido. En Éxodo
tos, como algo metafísico, ni mucho menos teo- 3-14 tiene lugar, para la tradición religiosa de oc-
lógico, sino que se trata de algo que tiene que ver
con la interioridad, con la interiorización de un 3 Si “religio” significa “religamiento”, entonces la pre-cien-
determinado fenómeno. Por tanto, la mirada ha de cia heideggeriana puede ser entendida como la vía median-
girarse sobre sí misma, volverse hacia aquél que te la cual el existente se concilia con su ser, asume su cómo,
la temporalidad, y, así, su mismidad no en un “como si”
se pregunta. En consecuencia, lo que Heidegger fuese otra cosa a como se es (conviertiendo a la “religio”
concluye respecto al tiempo es que éste es la en una suerte de fármaco del olvido de sí), sino precisa-
mente regresando a sí, tomándose tal como es y viviendo
2 Op., cit. Trad. Wenceslao Roces. FCE, Madrid, 2000, p. en correspondencia con sus características ontológico-exis-
51. tenciarias.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

cidente y parte de oriente, el acontecimiento his- emerge ahora en su originariedad.


tórico de ese enunciado. Cuando Moisés, en el Entendemos que Heidegger asume esa
monte Horeb, le pregunta a Dios por su nombre, realidad fáctica del existente, la experiencia vital
éste le responde literalmente: “yo seré el que se- que experimenta cuando se cuestiona a sí mismo,
ré”4 [‫( הֶיְהֶא רֶׁשֲא הֶיְהֶא‬ehyeh asher ehyeh)]. Más cuando se pregunta por su ser. No tapona la an-
tarde volverá a aparecer ese mismo enunciado en gustia del existente ante su verdad, su saber de la
la voz de Jesús, cuando éste le contesta a los ju- muerte, fantaseando con una deidad que le permi-
díos: “Ciertamente les aseguro que, antes de que ta dejar de lado ese saber, ya irremediable. Dios
Abraham naciera, ¡yo soy!” (Juan 8 - 58). Se tra- no puede existir porque, de ser así, también es-
ta de una afirmación que, como vemos, presenta taría condenado a morir, como Jesús, como tam-
un tinte singular, divino, propio de la deidad más bién proclamó Nietzsche y antes Hegel: “Todo
que del ser humano. Sabemos que en la tradición lo que existe merece morir”6. La existencia es un
islámica la palabra “ser” sólo es propia de Al-láh, atributo de los mortales tomados tal como son, no
de modo que el ser humano carece de esa atribu- tal como les gustaría ser. De ahí que el enunciado
ción. En esas tradiciones, ser y existente se en- “yo soy” (ich bin) resulte, en Heidegger, tan en-
cuentran separados al pertenecer a dos estamen- gañoso como perplejo. Para el de Messkirch, esa
tos distintos. Por tanto, nosotros no podemos, o sentencia sólo tiene sentido a raíz de la tempo-
no debemos, ser, sólo nos queda parecernos, ser ralidad, es decir, que cuando estoy ocupado con
una imagen, un reflejo y, así, carecer de autono- algo o en algo, ese estar, que es temporal, no evi-
mía, de independencia, en definitiva, desconocer ta ni hace que desaparezca eso que soy: mortal.
el tiempo. Yahweh y Al-láh carecen de rostro, de Haga lo que haga, esté donde esté, haciendo lo
cuerpo, de lo que existe, de lo que cambia y de lo que esté haciendo, nunca dejo de ser lo que soy.
que muere. No se encuentran ni en el espacio ni Esta es la impresión, el afecto al modo agusti-
en el tiempo, porque son. Se trata de la diferencia niano, que perdura en mí hasta el final que ya sé.
absoluta, porque no existen. De modo que, de un Se nos podrá decir que esto parece tener relación
lado, se ubica el ser y, del otro, el espacio y el con el síntoma psicoanalítico de carácter pulsio-
tiempo, que es donde vivimos los existentes (en nal, pero, sin embargo, creemos que se da una
el tiempo), porque estamos (en el espacio). Dios diferencia importante, pues mientras el síntoma
es, el existente es-tá (es-ahí). Así podríamos re- aparece y desaparece en relación a la circunstan-
sumir esas tradiciones religiosas. Pero Heidegger cia propicia, la mortalidad, por contra, está ahí en
no se interesa por ellas, al menos de manera ex- cada caso y a cada paso de manera permanente.
plícita. Su interés se centra en el existente. Pero De ahí que la cura definitiva del síntoma no tenga
entonces, ¿qué habrá querido decir con ese “yo lugar con el análisis sino con la muerte, que es el
soy” como el enunciado propio del existente? ¿Se momento en el que dejaremos de ser mortales.
trata del giro originario que va de la teología al Volviendo al asunto, tenemos que tener en
pensar? ¿Una suerte de recolocación del enuncia- cuenta que hay una diferencia entre el “yo soy”
do allí donde realmente le corresponde? En cas- castellano y el “Ich bin” alemán. Como sabemos,
tellano la expresión “yo soy” es un palíndromo: Heidegger, en 1951, lleva a cabo un recorrido eti-
se lee igual de izquierda a derecha como de de- mológico del “bin” retrotrayéndolo a “Bauen”:
recha a izquierda. Desde la izquierda lo hacemos
como en latín, desde la derecha como en hebreo o Bauen, buan, bhu, beo es nuestra palabra «bin» en las for-
árabe. Por tanto, judíos, árabes, cristianos, todos mas ich bin, du bist... Entonces ¿qué significa ich bin? La
antigua palabra bauen, con la cual tiene que ver bin... quie-
leen lo mismo en castellano. Es un enunciado re- re decir: yo habito, tú habitas. El modo como tú eres, yo
flexivo, de retorno, como si se estuviese ante un soy, la manera según la cual los hombres somos en la tierra
espejo5, que actúa a modo de un eco que regresa es el Buan, el habitar. La antigua palabra bauen significa
a mí, dejándome a solas con mi mismidad. Ésta que el hombre es en la medida en que habita; la palabra
bauen significa al mismo tiempo abrigar y cuidar; así, cul-
4 Aunque la traducción más común y conocida es: “yo soy tivar (construir) un campo de labor (einen Acker bauen),
el que soy”. cultivar (construir) una viña.7
5 Lacan dice, en mi opinión, lo mismo, aunque de otra ma-
nera y en otra dirección, en su texto: “El estadio del espejo 6 Palabras parafraseadas de Mefistófeles en la tragedia de
como formador de la función del yo [je] tal como se nos re- Goethe Fausto, parte I, escena III (Despacho de Fausto).
vela en la experiencia psicoanalítica” (Escritos 1. México, (N. de la Edit.)
FCE, 2001, p. 86-93). 7 Heidegger, M, (1994): «Construir, habitar, pensar»,
18
Symploké revista filosófica octubre 2018

lación a lo que somos. De mi saber de mí no dice


Del “yo soy” de la conferencia de 1924, lo mismo una casa construida de manera consis-
pasamos al “yo habito” de 19518. De modo que, tente que una cabaña, que es menos consistente.
en alemán, ser y habitar se identifican, o dicho Y sabemos que Heidegger escribió gran parte de
más exactamente: ser consiste en habitar. El ser su obra en la cabaña de Todtnauberg. Tal vez en
humano es el que habita, para lo cual tiene que ese pequeño habitáculo encontró la medida ónti-
construir. Así es como se revela el carácter de ca de su convicción ontológica. La sencillez de la
arrojado y de proyecto, la dimensión existencial construcción representa perfectamente la corres-
del ser humano. De ahí que, ahora, tengamos que pondencia del ser con el habitar, su temporalidad
entender que existir consiste en procurarse una en el espacio. De ahí que sólo sea habitable una
habitación, un hábito. Pero si nuestro estar en el construcción que se apañe con la eseidad de la
mundo consiste en estar ocupados para lograr una existencia, un espacio que sea capaz de acoger al
habitación, esto sólo puede ser posible precisa- “soy como soy” y no al “soy como quiero ser”.
mente a instancias de nuestra precariedad, pues Las construcciones inhumanas son las del “que-
ella es la condición de posibilidad del habitar. El rer”, no las del ser. De ahí que la des-humaniza-
construir es solamente el medio, la técnica, para ción consista, aquí, en una des-habitación.
lograr ese habitar (y esto supone ya una crítica
a la consideración de la técnica tal como se nos 1.4.
muestra). Por tanto, el habitar y nuestro modo de
ser están estrechamente relacionados. Habitamos ...la propiedad del ser-ahí es aquello que cons-
porque somos mortales. Se trata de nuestro refu- tituye su suprema posibilidad de ser... (41 /
gio frente a lo abierto, frente a la angustia surgida 115)
a raíz de nuestro saber cómo somos. ¿Cómo pue- [Dificultad para conocer al Dasein: cómo co-
do soportar lo que sé que soy? ¿cómo obtener un nocer al que conoce. ¿Qué es eso de lo más
respiro ante mi acuciante haber-sido? Habitando, propio del Dasein? La eventualidad: lo que
procurándome un alivio en lo familiar, en lo hoga- puedo ser]
reño, en algo que represente una defensa contra la
intemperie, eso que Freud denominó “sentimien- Según Heidegger, el acceso al existente
to oceánico”, fuente de las religiones. Y, a veces, no se logra a raíz de una interpretación de su ser.
la casa dice más de nosotros mismos: cuán lejos Y esto no se debe a una limitación o incapacidad
o cuán cerca la construimos y disponemos en re- del conocimiento, sino que “hemos de asumir
una dificultad mucho más grave que la derivada
de la limitación del conocimiento humano” (40 /
en: Conferencias y artículos. Trad. Eustaquio Barjau.
Barcelona: Serbal, p. 129 («Bauen, Wohnen, Denken»,
114-115). ¿Cuál? En principio, y antes de dar con
Vorträge und Aufsätze. GA, Band 7. Frankfurt a.m.: una respuesta inmediata, Heidegger nos indica el
Virttorio Klostermann, s. 142). camino atendiendo precisamente a lo que se le
8 También en la Carta sobre el humanismo, escrita a Jean aparece al intentar acceder al ser del existente.
Beaufret en el otoño de 1946, aparece una alusión al habitar ¿Qué se le aparece? Justamente “la dificultad”.
en relación al ser y al lenguaje: “... el lenguaje es la casa
del ser: al habitarla el hombre ex-siste, desde el momento
En esto consiste la perplejidad: que el acceso al
en que, guardando la verdad del ser, pertenece a ella” (Über ser del existente es mediante la dificultad, o lo
den Humanismus. Frankfurt a.m.: Vittorio Klostermnn, que es lo mismo: la dificultad de ese acceso in-
1981, s. 24. Versión española de Helena Cortés y Arturo dica ya la propiedad del ser-ahí. Así pues, esta
Leyte. Madrid: Alianza, 2004, p. 43). Y otra no menos im- dificultad constituye la posibilidad de entrada al
portante es la que aparece en el texto dedicado a Hölderlin,
donde Heidegger se detiene a reflexionar sobre los versos
“ser-ahí en la propiedad de su ser” (41 / 115). Se
del poeta que rezan: nos revela entonces, ahora, el contenido de esa
dificultad: el acceso al ser del ser-ahí es para-
Lleno de méritos, sin embargo, poéticamente, dójico y esa es su posibilidad más propia. Es lo
habita el hombre en esta tierra. propio del ser-ahí, como la del manzano es dar
(«...dichterisch wohnet der Mensh...», Vorträge und
manzanas. Por tanto, lo propio en cuanto al exis-
Aufsätze. GA, Band 7. Frankfurt a.m.: Virttorio tente podría ser considerado como la traducción
Klostermann, s. 194. «...poéticamente habita el hombre...», hermenéutica que hace Heidegger del concepto
en: Conferencias y artículos. Trad. Eustaquio Barjau. de virtud aristotélica (areté). Así, el ser del ser-
Barcelona: Serbal, p. 166).
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ahí está en íntima relación con lo que le es propio el vivir mismo. No le quedó otra que hacer del
como tal. Su ser no se encuentra más allá de eso. pensar una manera de vivir. Tomar al pensar como
Se trata de una situación realmente curiosa, pues- algo fáctico haciendo de la fenomenología una
to que se pretende conocer el ser del ser-ahí a raíz suerte de acción. Siendo-en-el-mundo es como
de la descripción de algunas de sus estructuras puedo fijar algo así como el ser-en-el-mundo, de
fundamentales. Y parece que es aquí donde ra- ahí que la esencia no tenga sentido alguno para
dica el problema, ya que: ¿tenemos garantías de su trabajo. Decir que la eseidad del ser-ahí es ser-
que interpretando esas características podremos en-el-mundo, sólo es posible porque, de hecho,
dar con el ser mismo del existente? ¿no supone ya estoy en el mundo, al margen de que esto sea
esto confiar en que hay algo más allá respecto de un conocimiento explícito o no. En esto consiste
esas estructuras? ¿un “qué” en el que fundar el la perplejidad: en querer conocer al que conoce,
“cómo” descrito en las estructuras existenciarias? porque el que conoce de hecho está ocupado con
Heidegger no va por aquí. Se aparta de la tenta- el conocer o con cualquiera otra actividad. A lo
ción metafísica y resuelve la cuestión reuniendo sumo, el otro sólo me muestra lo que me espera,
el cómo de esas estructuras en la “propiedad”. pero lo que le ha sucedido a él, “aún no” me ha
Aquello que sea el Dasein ha de encontrarse sucedido a mí. Es la muerte lo que impide el co-
implícito en lo propio, en su propiedad, que no nocimiento del ser-ahí en cuanto ser-ahí, porque:
es algo que adquiera, sino que le viene ya dado, “de pronto su ser-ahí ya no es” (42 / 115). Así, lo
que se muestra fenomenológicamente a raíz de lo que todavía está no es algo acabado y lo que ya
dado. La sutilidad característica de Heidegger en no está deja de existir, desaparece como ser-ahí,
la continuación de su reflexión, para abordar la deja de ser-lo. De este modo llegamos al punto en
perplejidad, se muestra en lo siguiente: “¿Cómo el que Heidegger nos dice cuál es nuestra posibi-
podemos captar este ente en su ser antes de que él lidad más extrema: la muerte, mi muerte, como
alcance su fin?” (42 / 115). Es decir, Heidegger se aquella posibilidad tras la que sólo queda lo im-
conduce del mismo que Aristóteles, cuando éste, posible. Pues bien, es la muerte el fenómeno que
queriendo saber si una persona es feliz, argumen- nos vuelve a poner ante la cuestión del tiempo,
ta que eso sólo se puede conocer cuando haya por cuanto nos lo revela. Lo propio del ser-ahí es
muerto9. Por tanto, sólo cuando algo está quieto, saber de su muerte, tener su muerte como su po-
terminado, acabado, es cuando podemos emitir sibilidad más propia, su virtud más genuina. Pero
un juicio más o menos global sobre algún aspecto la muerte del otro no me vale. Cómo otro afronta
relacionado con él. Sin embargo, Heidegger cae su muerte sólo me sirve para saber que he de ser
en la cuenta de que la existencia, el vivir huma- yo quien afronte la mía, puesto que es ése un sa-
no, está en constante transformación y, debido a ber anticipado; está en juego mi haber sido, que
ello, no es posible conocer ese vivir cuando ya es el lugar de mi afección.
no hay vida, existencia. Sólo conoceríamos otra El tiempo reaparece en el texto en rela-
cosa, por ejemplo: las características de un cadá- ción a la muerte y a la posibilidad, de modo que
ver. Pero nuestro pensador no es forense ni anato- la relación entre ésta y aquél va de suyo. Sin esa
mopatólogo. Por tanto, no le queda otra que reco- anticipación no puede acontecer el tiempo, de ahí
nocer que: “El hecho es que yo estoy siempre en que la existencia sea un atributo exclusivo de la
camino con mi ser-ahí” (42 / 115). En consecuen- vida humana; puede haber otras formas de vida,
cia, ser-en-el-mundo, ser-con, hablar, etc., son pero carecen de existencia, de anticipación. Y
estructuras de carácter dinámico, que se limitan Heidegger abunda en aquella perplejidad, para
a ser abstracciones ligadas al devenir, puesto que, caer en la cuenta de que:
en cada caso, el Dasein ha de poner en marcha su
peculiar modo de actuar con respecto a lo que le Este haber sido, como aquello a lo que me encamino anti-
es propio. cipadamente, hace un descubrimiento en ese caminar mío
hacia él: es el haber sido de mí mismo... Este haber sido
Efectivamente, ese es el problema con el no es ningún “qué”, sino un “cómo”; es el “cómo” propio
que se encuentra Heidegger: atrapar la vida desde de mi existencia... de mi ser-ahí por antonomasia. (44-45 /
116-117)
9 Ética a Nicómaco, lib. 1, 10 - 1100a. Edición bilingüe
y traducción de María Araujo y Julián Marías. Madrid: Glosando el texto podemos decir: ya sé
Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, 1999, p. lo que me ocurrirá, ahora sé que, siendo como
12.
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soy, sabiendo lo que soy, y que me espera, vivo da ahora resuelta. No estamos en el tiempo, sino
mi sido, sabiendo que soy mi sido. Heidegger se que, radicalizando el comentario de San Agustín,
nos presenta, desde esta perspectiva, como un descubrimos el tiempo en aquél que se interroga
pensador trágico, griego: aún a sabiendas de que por él. ¿Podemos decir entonces que la afección
moriré, sin embargo, vivo porque desconozco las de la muerte, el nombre para su afecto, es el tiem-
causas que me producirán la muerte. Vivir es, por po? ¿que el tiempo es el afecto derivado de la an-
tanto, desenvolverse soportando la propia certeza ticipación? Parece que así es. Además, en cuanto
indeterminada. No es difícil entender ese extra- a la anticipación como su fundamento “el fenó-
ñamiento del existente por cuanto adquiere un meno fundamental del tiempo es el futuro” (47 /
saber de sí un tanto singular, pues con Heidegger 118). Así pues, nuestra existencia está determina-
nos encontramos en una situación que pareciera da por el advenir, el acontecimiento, de modo que
realmente absurda: “a pesar de”. Esta expresión el presente, en sentido estricto, no es como tal, a
resume perfectamente, en nuestra opinión, la de- pesar de que todo es se desenvuelve en un aquí
riva ética de la mismidad. No se trata de vivir y ahora. De hecho, instalarse en el aquí y ahora
“como si” no supiese mi “cómo soy”, que es el es más propio de los animales que del existente.
modo común de existir, el vivir “como se vive”, El afecto del tiempo no tiene lugar en el mundo
es decir: el impersonal uno cualquiera. Más bien animal, que sepamos. Por lo mismo, ahora se en-
al contrario. Con Heidegger, el existente que se tiende la crítica de Heidegger a la presencia, de
toma en serio a sí, asume ese “a pesar de” suyo ahí que su crítica a la filosofía griega ilustrada
como la guía ética de su existencia. Su “cómo” es no se refiera más que a la consideración del ser a
el fundamento que ha de orientar su ocupación, raíz del presente. Esto sólo se puede sostener bajo
su modo de estar en el mundo. De ahí que una la convicción de que el existente está en el tiem-
ética existenciaria, si se pudiese hablar en estos po y, por tanto, en uno de sus modos, como si el
términos, sólo puede aspirar a ser formal (Kant); tiempo fuese un fenómeno ajeno al existente. Lo
nada de moral prescriptiva.10 que me espera, aquello que me aguarda, que ha
Así pues, el sentido de la existencia reside de acontecerme, no ha sucedido como tal, pero,
en la muerte, en cada caso, y no es posible ir más no obstante, me afecta. Este modo de concebir el
allá de ella, de uno mismo, porque, incluso fanta- tiempo está en relación directa con el pasaje de
seando con el saber de la muerte a la manera de San Pablo, que Heidegger conocía, según el cual:
un “como si” no supiese de ella, en ningún caso “el Día el Señor vendrá como ladrón en plena no-
evito su acontecimiento, mi “cómo soy”. Esta op- che”.11 De modo que la actitud del creyente, su
ción ante mi “cómo” me procura una existencia “cómo” actuar ante esto, no sea otra que el estar a
cínica, pero no por ello deja la existencia su fun- la expectativa, en guardia, anticipándose.
damento. A lo sumo, lo olvida. No cabe duda de que se trata de una situa-
ción un tanto incómoda, por no decir estresante.
1.5. ¿Es posible vivir con la muerte en los talones?
Si ya sé lo que me espera, eso que me espera,
El ser-ahí, concebido en su posibilidad más ex- aunque aún no haya acontecido, sin embargo,
trema de ser, no es en el tiempo, sino que es el me afecta como algo que me está pasando. Es un
tiempo mismo. (47 / 118) futuro pasado que me cierne con un efecto real.
[La anticipación. El futuro. La peculiaridad de Pero es imposible mantenerse alerta sin más,
la intervención psicoanalítica sobre el futuro] como cuando se actúa ante el enemigo. No es eso.
La muerte no es un enemigo, tampoco se la con-
Así soluciona Heidegger la tarea que el sidera una amiga –nadie la elige–, es decir, no es
oráculo le encomendó a Sócrates. Ahora me algo ajeno a nosotros. Así pues, estamos atentos a
conozco, sé de mí, porque sé cómo soy. Si nos algo que somos nosotros mismos, a algo que, no
detenemos con atención en la afirmación de obstante, no se acepta comúnmente. En la vida
Heidegger, resulta que la confusión a la que nos ordinaria solemos vivir de espaldas a la muerte,
conducía el en, por su orientación espacial, que- procurando vivir como lo hacíamos antes de co-
nocer nuestro destino: un adulto con el síndrome
10 A raíz de esto estoy llevando a cabo un intento, de carác- de Peter Pan. ¿Es que, en este tema, Heidegger se
ter práctico y político, al que he denominado provisional-
mente “anarco-existencialismo”. 11 I Tesalonicenses 5:2.
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desenvuelve de manera muy parecida a aquellos anticipación aparece en todas esas pequeñas co-
que concebían a la filosofía como una consola- sas de nuestra vida diaria. Tengo tiempo, pero no
ción ante la muerte? Lo que resulta claro para el soy el señor del tiempo, porque no se trata de una
profesor de Freiburg es que no vale eludir ese sa- cosa ajena a mí. Más bien, todo se me da bajo
ber mediante los relatos que se refieren a una vida la condición, o dentro del horizonte, del tiempo,
más allá de la muerte. Eso pertenecer al “Uno”, puesto que mi relación con las cosas está deter-
a la tradición metafísica que se repite de forma minada por lo que me sostiene, por lo que soy.
acrítica y escolástica. ¿Cómo se ha de vivir en- Soy tiempo y las cosas se dan en mí, me afectan
tonces actuando de forma coherente con lo que agustinianamente, en el interior del tiempo. Sin
somos, pero sin llegar al estrés, a la ansiedad? embargo, en la vida cotidiana podemos obser-
Heidegger no da pautas en este sentido y es ló- var multitud de formas que intentan ocultar eso
gico que así sea. Si las diese estaría traicionando que somos, intentan ocultar el tiempo: “arrojar el
sus propios presupuestos, convirtiéndose en un tiempo al mal presente de la vida cotidiana” (47 /
moralista. Si el Dasein es en cada caso el mío, si 118). Corporación dermoestética, gimnasios, cre-
la muerte del otro no es una buena información mas antiarrugas y un sin fin de medios para poder
sobre la mía, si el cuidado es cuidado de sí... en- olvidar y forcluir lo que somos. La gran industria
tonces no es posible dictaminar una suerte de pro- de la “eterna” juventud, mucho más eficaz que la
grama genérico, una moral. La cuestión es ésta: teología, en forma de: clínicas dispuestas a ocul-
cada uno ha de resolver su vida atendiendo a la tar cualquier vestigio de la temporalidad en nues-
vivencia de sus posibilidades, las derivadas de su tro cuerpo, gimnasios para la eterna elasticidad,
posibilidad límite, de sus propias características farmacopea para no perder la tersura de nuestra
y, en definitiva, de su decisión, de su valor para piel, y, por supuesto, los seguros de vida. Como si
atreverse con el “qué hacer” con el tiempo que se la vida pudiera asegurarse más allá de lo que es.
tiene: “Manteniéndome por la anticipación en el No sé qué más seguridad precisa nuestra certeza
haber sido, tengo tiempo... No tener tiempo sig- indeterminada. En todos los casos el apego apa-
nifica arrojar el tiempo al mal presente de la vida rece como una resistencia a ese ser nuestro. Son
cotidiana.” (47 / 118). actitudes que se cifran en un enunciado del tipo:
Si antes habíamos visto que el Dasein no “¿qué puedo hacer para ir más allá de mi cómo?”.
está en el tiempo, sino que es tiempo, entonces Esta es la manera, la técnica, mediante la cual el
¿está el tiempo a mi disposición? No. No es un existente pierde el tiempo. Pero no se trata de un
instrumento o un ente ahí a la mano, como un a pérdida como cuando decimos: “he perdido los
reloj. Tener tiempo no significa eso. Por el con- zapatos”. La pérdida tiene aquí el sentido de un
trario, es mediante la acción que se manifies- “desaprovechar” el tiempo, es decir: tengo algo
ta ese tener. Se trata de un tener tiempo “para”. de lo que no quiero aprovecharme, más que en
La cuestión es: ¿qué puedo hacer con el tiempo el modo de no hacerme cargo de él, de no querer
que tengo? Daremos una respuesta adecuada en tenerlo, de no hacerme cargo de mí mismo. Ésta
la medida en que seamos capaces de tomar ese es una opción bastante corriente, pero en ningún
tiempo en aras de una tarea propia. Queda claro caso logra hacer desaparecer lo que se es.
que esa apropiación ha de corresponderse con el Otra consecuencia derivada de la anti-
saber de la anticipación, e decir: mi posibilidad cipación, desde su determinación ética, sería la
está en estrecha relación con el futuro, mi haber apertura y la ampliación del horizonte de expec-
sido. ¿Qué consecuencias se derivan de esto? tativas, o lo que es lo mismo: que la experien-
Entre las posibles hay una, en particular, muy cia de la temporalidad nos sitúa de nuevo en la
interesante: el desapego. La muerte, como ter- posibilidad, en la oportunidad de experimentar
minación, tiene sus advocaciones a lo largo de otros modos de actualizar la existencia, su vir-
la existencia, en el sentido de que todas nuestras tud. De ahí que la decisión se manifieste como el
actividades y experiencias se encuentran atrave- ejercicio más pleno de nuestra libertad: abrirse al
sadas por la temporalidad, como no podía ser de tiempo, a nuestro ser, es tomarse en serio nuestro
otro modo. Antes de nuestra desaparición se aca- destino y no poner condiciones a lo que acontece,
ban otras muchas cosas: un empleo, una relación, sino estar dispuestos al acontecimiento.
una tarea, un modo de encontrarse, incluso una
manera de ver las cosas. Digamos que nuestra
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Symploké revista filosófica octubre 2018

1.6. ciaria del tiempo, que podemos hablar del tiem-


po del inconsciente, del tiempo de la siega o del
La anticipación aprehende el haber sido como tiempo del trabajo. Al morir, no recordamos al
una posibilidad propia de cada instante, como existente en relación a su inconsciente, al menos
lo que es seguro ahora. El ser futuro, como po- no sólo en relación a ello, sino en relación a otras
sibilidad del ser-ahí en cuanto respectivo de muchas facetas suyas, dependiendo de quién lo
cada uno, da tiempo, porque es el tiempo mis- recuerde. Heidegger se refiere al Dasein en cada
mo. (49 / 119) caso, pero precisamente en relación a eso: a lo
[Certeza del pasado, certeza del futuro. Ser lo común en cada particularidad.
sido como lo que seré: muerte y síntoma] Lo seguro no puede asegurarse. Mi haber
sido no sería posible sin el saber del futuro. Y este
Dicho llanamente: sin muerte no hay saber representa la posibilidad a cada paso de mi
tiempo, sin saber lo que me ocurrirá no hay tem- existencia, lo seguro por antonomasia. Lo que no
poralidad. Y esto que sé, lo sé a cada momento, es admite duda es la consumación de mi posibilidad,
lo que me puede ocurrir a cada instante. Se trata esa que nunca desaparece, que poseo y me posee
de la posibilidad extrema tras la cual desaparece dominando todo ahora. La existencia está enton-
la posibilidad misma. No puede haber una noción ces asegurada gracias al haber sido, y existir con-
de certeza más anticartesiana, más realista. Aquí, siste en estar ocupado a la vez que determinado
el “pienso, luego soy” no sólo carece de interés, por mi posibilidad. En el reloj, por tanto, se pierde
sino que, además, resulta un modo de decir el ser el tiempo. Éste sólo se recupera, como tal, en la
de la manera más impropia. El pensar no consti- vivencia de la anticipación. De ahí que la expre-
tuye el ser del existente, es lo que sé de mí lo que sión “cuánto me queda” sea totalmente absurda,
me da qué pensar. En Descartes no hay preocupa- pues el existente se interpreta a sí mismo, de esta
ción por el “cómo”, puesto que su tesis presupone manera, como un condenado a muerte. Tendrá
el horizonte del “qué”, por tanto, ser mantiene en día y hora, e incluso situación, pero el existente
la vía de la esencia, de la metafísica. Incluso la común y corriente las ignora. Sólo el condenado
conocida sentencia de J. Laca: “pienso donde no tiene asegurado lo seguro en sentido pleno. En
soy, soy donde no pienso”12, mediante la cual, y su caso se trata de un acontecimiento que, de al-
corrigiendo a Descartes, pretende dejar claro que, gún modo, ya ha acontecido y no le queda otra
en la clínica analítica, lo inconsciente se caracte- opción que esperar, que es como se le manifies-
riza por ser constantemente presente. Se trata del ta el tiempo al Dasein en esas circunstancias; ha
síntoma, que aparece ya de un modo más origina- dejado atrás la angustia para ubicarse en la an-
rio en la categoría heideggeriana de anticipación: siedad. Tiene asegurado lo seguro, dicho de otro
mi sido es lo que seré. La certeza viene del futu- modo: tiene la certeza determinada. En esta es-
ro, ni del pasado presente (síntoma), ni del pre- cena, la muerte se presenta de un modo peculiar,
sente (inmediatez), puesto que se trata del ser-ahí ya que la determinación procede del otro, porque
en aquello que le es más propio. Lo inconsciente el otro, en ese contexto, origina la determinación,
puede estar asegurado o no, es decir, cabe la posi- es aquel que produce el acontecimiento de la de-
bilidad de que un existente tenga lo inconsciente terminación, la resuelve. Si el saber de la muerte,
ante sí y constituya un acontecimiento o, por el en cuanto certeza indeterminada, se le apareció
contrario, no repare en él. En cualquiera de los al Dasein con la muerte del otro, al reo, el otro,
casos, para que se dé ese fenómeno ha de suce- le revela además su determinación. Por tanto,
derle algo al existente, algo que sólo le ocurra a la anticipación del ser-ahí común y corriente se
él, algo que se instale de manera recurrente cada desplaza, aquí, hacia el otro. Dictando sentencia,
vez que se encuentre en las circunstancias ade- transforma la categoría existenciaria de la antici-
cuadas al afecto producido en su momento. Sin pación en la ansiedad del “cuánto me queda”, que
embargo, la presencia del tiempo en el psicoaná- es real, por inminente, pues el existente lo sabe
lisis no es un acontecimiento originario, puesto “ahora” y tiene en sus días la medida del número
que, con Heidegger, el tiempo es futuro, acontece y, así, del contar. Los que por ahora no estamos
como futuro en el interior del existente, no del condenados, y podemos angustiarnos, el número
sujeto, y es a partir de esta constitución existen- sólo nos es de utilidad para la actividad diaria, es
decir, para diferenciar unas ocupaciones de otras:
12 Escritos 1. México: Siglo XXI, 2001, p. 97.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

trabajo, diversión, vida familiar... Mientras que es intrasubjetiva. La afirmación “no todo es re-
nosotros experimentamos cierto bienestar por la lativo” sólo es cierta hasta un determinado pun-
indeterminación de nuestra certeza, el condena- to, es decir, ha de haber algo que no sea relativo.
do experimenta sufrimiento. Nosotros estamos Pero en esto reside precisamente la confusión,
abiertos al acontecimiento, mientras que a él éste una comprensión distorsionada de su sentido si
le ha sido ya desvelado. Está abierto, a su pesar, a tenemos en cuenta su fenomenología hermenéu-
la espera. Para nosotros, el cuándo, el cuánto, el tica fáctica. Decir “no todo es relativo” es afirmar
dónde y el cómo nos queda oculto. Si el ser futuro implícitamente que hay alguna o varias cosas que
da tiempo, en el instante de cada ahora nuestro, son relativas: unas lo son y otras no. Por tanto,
el existente ordinario vive de manera inminente habría que precisar cuáles son relativas y cuáles
o, al menos, sabe que la inminencia puede acon- no, y si hay una mayoría o una minoría de ellas.
tecer en cualquier momento,13 pues el saber de Sin embargo, así no resolvemos gran cosa, por
mi haber sido carece de poder o decisión sobre cuanto finalmente reconocemos que la relatividad
mi muerte: me puedo quitar la vida porque soy se da, al margen de su cantidad e intensidad. El
mortal, no al revés. Sin embargo, el que vive con término relativo alude a: concerniente, referente,
el conocimiento de su determinación muestra una perteneciente. Mientras que su contrario indica:
relación distinta con el “ahora”, en la medida en ajeno, extraño. Pero relativo también alude a:
que ese ahora suyo, en cada ocasión, se presenta condicionado, limitado, parcial, restringido. Y su
al modo de “ahora me quedan tantos días”. Su ser- contrario: absoluto, categórico, total, incondicio-
en-el-mundo también está determinado por un re- nal. Por tanto, “relativo” indica relación con algo,
cinto singular, específico. En él no puede escapar y, por lo general, parece que el Dasein siempre se
de la determinación, confinado en el Lager de los encuentra en algún tipo de relación, puesto que a
días contados. Aquí, el espacio se hace necesario su estructura ontológica le pertenece el ser-con.
para que los días puedan ser contados, nosotros, De esta manera, nada le es ajeno o extraño al
por el contrario, vamos haciendo espacios, des- existente, pues en ambos casos se da una rela-
velándolos, en la medida de que nuestro tiempo, ción determinada por lo ajeno o lo extraño. Tener
nuestro ahora, es abierto por indeterminado. Por que decidir cómo vivir la existencia sabiéndose
eso, nosotros no contamos los días, sino que los uno arrojado al mundo, sabiendo su futuro, y en-
vivimos, porque existimos [¿existe el reo a muer- frentarse a la angustia teniendo que asumir una
te?]. Así, mientras nosotros nos preocupamos por decisión, sin garantías, ponen al existente ante su
el cómo vivir la indeterminación, el condenado se mismidad sin ningún tipo de alivio. De ahí que
ocupa en el qué hago con la determinación. Heidegger dé al relativismo el sentido exacto que
tiene: angustia frente a lo que se es. El peligro del
1.7. relativismo, visto así, no es más que el resultado
de la resistencia, de una mala asunción, ante lo
La interpretación ordinaria del ser-ahí nos que se es.
amenaza con el peligro del relativismo. Sin El ser-con, categoría existenciaria gené-
embargo, la angustia ante relativismo es la an- rica, es, justamente, algo absoluto, por cuanto
gustia ante el ser-ahí. (57 / 123) no hay Dasein sin relación. Entender lo absolu-
[Todo es relativo al Dasein. El Dasein no es to como algo definitivo, incondicional, general
tiempo sino temporalidad] o universal, es correcto en cuanto al ser-con del
Dasein. ¿Tiene sentido afirmar la existencia de
Es una interesante anotación. Por lo co- algo al margen de la relación? ¿algo que se sos-
mún, el relativismo es considerado como una tenga sin necesidad de relación alguna? ¿un ser
amenaza, sobre todo en relación con posiciones sin “con”? Si el Dasein se encuentra determina-
de carácter esencialista, cuando, en realidad sólo do por la relación, no es posible que pueda te-
puede ser una amenaza para aquellos que se en- ner una experiencia al margen de ese fenómeno
rocan en una posición que, siendo subjetiva, sin constitutivo de su estructura. Por tanto, no puede
embargo, pretenden, y están convencidos, de que abrirse a un otro, a una diferencia, sin esa posi-
bilidad suya. Protágoras, Aristóteles, Feuerbach,
13 Sería interesante ver hasta qué punto esta inminencia Schopenhauer, Nietzsche, Marx, Freud, entre
pudiera constituir la condición de posibilidad del goce psi- otros, eran relativistas sin angustiarse ante el
coanalítico.
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existente, ante su carácter abierto, deliberativo. esa amenaza? En procurar que todos deliremos,
¿Diremos que la matemática, el matemático, re- que nos perdamos a nosotros mismos, cada una
presenta el recurso del existente ante la angustia y cada uno en cada caso, en aras de un ultramun-
de su mismidad? ¿de su ser-con que, en el otro, do, de un “como si” ajeno a la relatividad, a la
espejo de su muerte, descubre su temporalidad? temporalidad, a la existencia, a nuestra condición
2 + 2 = 4 es realmente algo tranquilizador, hoga- mortal, bajo el aspecto solemne de una moral. Y
reño, fiable hasta el punto de encontrarlo siem- ¿con qué finalidad? La de parecer que no somos
pre así adonde vayamos, hablemos el idioma que eso, soportar la angustia que nos produce la insis-
hablemos. Aquí, lo absoluto, categórico, es una tente negación de lo que somos, pero sin lograr
realidad mental (un Objekt freudiano), no fáctica ser nunca lo que nos gustaría. Jamás podremos
y, como tal, condicionada por el existente. En la experimentar lo que nos gustaría ser, porque es
matemática encuentra éste el olvido, un consuelo imposible ir más allá de nosotros mismos.
frente a aquello que sabe de sí, lo haga con plena ¿Qué tiene de positivo el relativismo?
conciencia o no. Matemática y teología represen- ¿qué enseñanzas podemos obtener de él? El texto
tan las dos técnicas más comunes para enviar al de Heidegger es muy explícito por cuanto rela-
relativismo, tal como lo describe Heidegger, lo tivismo y ser-ahí se identifican. Si “la angustia
más lejos de sí. Lo cual no lo elimina, puesto que ante el relativismo es la angustia ante el ser-ahí”,
la distancia también es una forma de relación, o entonces no es posible obviar la relación entre re-
dicho más concretamente: la manera más nítida latividad y existencia, que todo está en relación
de mostrar su inminente presencia, el no poder al existente; en relación a la temporalidad, a la
lograr librarse de ella. No es posible eliminar algo finitud, a la historicidad, en definitiva, al “cómo”.
que forma parte de nuestro ser, de una posibilidad Así pues, la eseidad no está más allá del ser-ahí,
nuestra que es constitucional y constituyente. Lo o lo que es lo mismo: la supuesta tendencia a lo
que se echa por la puerta vuelve a entrar por la absoluto, a la a-temporalidad del “qué”, consti-
ventana, decía Freud, y añadiríamos: en forma de tuye el fenómeno singular del olvido del ser en
matemática, que es más soportable. su manifestación originaria a raíz del “cómo”. En
Entonces, ¿por qué ese rechazo al re- consecuencia, la metafísica es la vía que huye del
lativismo? Heidegger nos dice que ese rechazo sí mismo, de la mismidad que no echa a un lado
adopta la forma de “la angustia ante el ser-ahí”. la realidad de la relación situacional. Marx, en su
¿A qué se refiere esa angustia, en qué se funda? momento, ya advirtió que todo ha de pasar prime-
¿qué es lo que angustia del ser-ahí? Cuando al- ro por la cabeza del ser humano. La angustia fren-
guien nos tacha de relativista como una crítica o te al relativismo representa un desplazamiento de
una invectiva, resulta que, en términos heidegge- la angustia ante sí mismo. Certeza indetermina-
rianos, nos está diciendo algo absolutamente pa- da, decisión e incertidumbre, entre otras, pueden
radójico, ya que nos espeta algo así como: “eres ser consideradas como enclaves de esa angustia,
un existente”, “eres lo que todos somos”. El que a la vez que la energía necesaria para construir un
nos recrimina por nuestro ser obtiene su legiti- paliativo artificial capaz de ocultar esa mismidad
midad precisamente a raíz de lo que le gustaría que no se quiere. Todo discurso en esta dirección
ser, lo que, de hecho, no es. Estamos ante una intenta forcluir el “como soy” mediante la fórmu-
situación curiosa, por cuanto el existente no solo la “como si fuese”. De este modo, el relativismo
renuncia a lo que es, a su manera de encontrarse resulta negado a raíz de un deseo insensato, por
en el mundo, sino que, además, se traslada a un cuanto ser trata del deseo en relación a la tempo-
ámbito dominado por el delirio en la forma de un ralidad, es decir: el deseo en relación a uno mis-
discurso de carácter matemático. Al delirar con mo, pero sin mismidad, sin mortalidad.
lo absoluto, el Dasein que se angustia ante sí en- ¿No es esto también nadismo? querer no
cuentra un alivio frente a lo insoportable, de tal ser como se es, ¿no es un fenómeno que trata de
modo, que su principio de placer aparece como la negar el ser como tal? Desde Parménides esta es
vía común y corriente de huida ante sí. No cabe la vía “por la que los hombres ignorantes vagan
duda de que es una posibilidad con la que cuenta bicéfalos”,14 la vía de la locura: ser como no se
el existente para tomar una decisión respecto de es, lo imposible e insensato, no ser como se es,
sí. El peligro gira ahora hacia el delirio, aquí re-
side lo realmente amenazador. ¿En qué consiste 14 Kirk, G.S. - Raven, J.E. Los filósofos presocráticos.
Madrid, Gredos, 1979, p. 379.
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lo insensato e imposible. Todo un precepto para bilidad. No se trata del “todo vale”, sino, como
ser tenido en cuenta como guía en las terapias de hemos dicho, del “no todo vale”, es decir, de la
trabajo personal, sobre todo en las de orientación deliberación respecto a lo conveniente y a lo in-
filosófica. Nihilista, o nadista, es aquel o aque- conveniente. Es a partir de aquí que se ponen en
lla que resuelve su angustia ante el fundamento juego todas las categorías de la analítica existen-
de su existencia huyendo de él. En las doctrinas ciaria. La angustia del ser-ahí ante sí mismo cons-
religiosas, las teologías derivadas de ellas y las tituye la vivencia originaria del encuentro con la
distintas morales, es donde podemos constatar apertura y la posibilidad, desde la que el ser-ahí
ese no querer saber del ser-ahí como el ente en ha de tomar alguna decisión respecto a su vida, la
el que reside toda apertura hacia los otros y hacia respuesta a: qué hago sabiendo cómo me encuen-
las cosas, el sentido, la aceptación, la condición, tro, cómo soy en ese encontrarme. Al igual que
el ser, en definitiva, de todo aquello que le afecta. la muerte del otro es una mala información sobre
Sólo una cosa escapa a su decisión y a su acción: la mía, del mismo modo, las decisiones del otro
el modo de encontrarse, la afectividad. En la lí- no son una buena forma de decidir respecto a mí,
nea de Nietzsche, aunque sin utilizar una de sus de ahí que, en muchos casos, sus decisiones me
expresiones, que con mayor intensidad resuena afecten sin que forme parte activa de ellas. Tanto
en castellano, Heidegger alude al resentimiento la deliberación aristotélica, como la autogestión
en esa angustia del ser-ahí ante el relativismo. kantiana, avalan y confirman el situacionismo
La moral suele ser el fenómeno que más direc- connatural a la fenomenología de la facticidad.
tamente se relaciona con aquél. Confundir el re- Esto supone una primacía de la ética frente a la
lativismo, en la línea de Heidegger, con el “todo moral. La primera, amparada por un deber ligado
vale”, expresión común y corriente del “Uno” al deseo, se manifiesta aquí como el ámbito ade-
para manifestar su oposición al relativismo, su- cuado para la apropiación y la mismidad. Si la
pone un error de bulto tanto a nivel óntico como angustia del ser-ahí ante sí mismo le amedranta
ontológico. Si pensamos que el relativismo es hasta tal punto que hace del relativismo un obs-
creer que todo vale, entonces es fácil identificar- táculo, en lugar de una oportunidad, se lanzará al
lo con el nihilismo, por cuanto dicha expresión frágil, aunque seguro esquife de la moral, cuyo
incluye, precisamente, la imposibilidad parme- timón está al mando del “Uno”. Pero, así, se verá
nídea del ser que puede no-ser y del no-ser que obligado a obedecer y a vivir protocolariamente,
puede ser. En la vía hermenéutica de Heidegger al conducirse por el criterio y el modo de vida del
cabe la afirmación: “no todo vale”. ¿Qué es lo vá- otro, es decir: haciendo dejación de su haber sido,
lido y lo inválido? ¿tendremos que subir al monte lo seguro, y a favor del haber sido del otro, como
Horeb para dilucidar la cuestión? Posiblemente si fuese el propio: alienado en lo que ignora. Es
el nihilista busque allí la seguridad permanente otro modo de estar en el mundo, fáctico, pero el
que le niega su existencia fáctica, girando desde miedo de uno no puede aspirar a convertirse en
sí mismo a un fantasmagórico más allá de sí. Una el miedo del otro. Plegarse a la moral establecida
seguridad que, por otro lado, ya tenía asegurada no significa superar el relativismo, sino asumir la
con el saber de la muerte. Sin embargo, no cae en resolución ética, el deseo, del otro, transformán-
la cuenta de que ese giro se debe a su decisión, dola así en moral.
esa relativo a él, es él mismo quien ha girado. No es posible, como sabemos, desarrollar
Sólo aquellos que son capaces de olvidar com- una moral a partir de los presupuestos heidegge-
pletamente esto, aquellos que logran imponer su rianos, al menos una moral con pretensiones de
deseo15 de manera delirante y alucinada, pueden convertirse en tradición, en repetición absurda,
situarse al otro lado del relativismo. Son los psi- en un “cómo” esencialista. Esto es sencillamente
cóticos. ¿Habrá algo de esto en el “uno / se dice” un oximoron. Y, sin embargo, Heidegger entien-
común y corriente, y, por ello mismo, más bien de que la repetición es una posibilidad inscrita en
una normalidad, una psicopatología de la vida nuestro modo de ser, puesto que deriva de nuestra
cotidiana? historicidad, pero sólo en la medida en que no se
Lo positivo del relativismo, si es que es pierda de vista al “cómo”: “El pasado como his-
legítimo hablar así –y lo es–, estriba en el hori- toria propia se puede repetir en el «cómo»” (57-
zonte que se abre a raíz de la apertura y la posi- 58 / 123). ¿Qué quiere decir Heidegger con esta
enigmática expresión? Aquí la palabra “pasado”
15 Que es incolmable por definición, como deseo que es.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

alude a lo ocurrido, a lo acontecido, por tanto, síntoma pulsional.]


no a lo sido, sino a lo que fue (Vergangenheit),
a cómo fue. No se trata de qué sucedió, sino de 1.8.
cómo sucedió, pues, de lo contrario, la repetición
no logra su objetivo: la igualdad. Así se desen- ... el tiempo es el genuino principium individua-
volvió Aristóteles para lograr conocer la acción tionis. (59 / 124)
justa, de forma que, mediante la repetición, se [La muerte y la igualdad de oportunidades. El
alcanzase la interiorización de lo justo. En la his- tiempo no es un “qué” sino un “cómo”]
toria conocemos a los hombres en acción, algo
que Marx ya sabía. Sólo a través del “cómo” cabe Esto es lo mismo que decir: la muerte es
la posibilidad de establecer un “qué” de carácter el principio de individuación. El haber sido (vor-
aproximativo, por cuanto está en directa relación bei), la certeza indeterminada, me diferencia, me
con una situación determinada, que, por lo de- singulariza. Tomarse esto en serio supone tomarse
más, ella misma es histórica; de repente aparece. con serenidad la apertura que me obliga a decidir
A raíz de esto ¿se puede ver en la exposición de mi vida a raíz de que ya sé lo que me espera. Al
Heidegger la presencia de la idea nietzscheana, parecer, los griegos definían a la muerte como el
y pre-freudiana, del eterno retorno de lo mismo? “irse con los más”, una expresión que pone en la
Si el “cómo” es la referencia que circunscribe y cuantificación lo común y singular de toda indi-
delimita a todo ser-ahí, entonces es cierto que viduación o, dicho de otro modo: al morir, todos
el desenvolverse de la historia, como aconteci- y todas somos lo mismo, porque sencillamente
miento, consiste en un regreso permanente del somos. Aquello que nos obliga a optar por un de-
“cómo”. Cuestión distinta es comprobar su diver- terminado modo de vida en común, constituye, a
sidad fáctica, óntica. la vez, lo que nos unifica en el ser, nos indiferen-
cia, dejando atrás toda individuación; uno entre
[El pasado que se repite no es realmen- los más. Aquello que se constituye en el princi-
te un pasado, en el sentido de un “fue”, sino un pio de la singularidad termina por arrojarnos a la
pasado que sigue siendo. Por tanto, se trata de fosa común de la indiferencia. Prueba de ello es
un “sido” que es. La compulsión inconsciente de la insistencia en una lápida conmemorativa que,
repetición representa perfectamente ese sido que ya muertos, de algún modo aún nos diferencie y
es. Tuvo su acontecer, pero sigue aconteciendo. llame la atención entre los más. Es curioso que
Se trata, por tanto, de la incardinación en un pre- quien vivió como uno entre los otros, busque en
sente continuo que impide la aparición del futuro, la muerte el anhelo de la singularidad, asegurarse
en la medida en que lo presente, que sucedió, con- entre los más como un cadáver excelente entre
tinúa sucediendo de manera que el futuro, como cadáveres.
tal, la posibilidad, no acontece, puesto que lo que En el texto de Nietzsche, «La visión dio-
sucederá es lo que ha venido sucediendo; don- nisiaca del mundo», leemos:
de hay historia no puede haber acontecimiento.
Aquí, el haber sido, como fenómeno que indica En la embriaguez dionisiaca... la naturaleza se manifiesta
algo que no ha sucedido, pero que sucederá con en su fuerza más alta: vuelve a juntar a los individuos y
los hace sentirse como una sola cosa, de tal modo que el
absoluta certeza, no cuenta, porque sólo se puede principium individuationis aparece, por así decirlo, como
repetir lo que ha ocurrido, no es posible repetir lo un permanente estado de debilidad de la voluntad.16
que ocurrirá, lo que me ocurrirá. La repetición, en
el caso de “lo sido que es”, lo inconsciente, no es, Como sabemos, Heidegger había leído a
por eso mismo, deliberativa. Lo inconsciente no Nietzsche con detenimiento. Si tuviésemos que
delibera, es acto puro. El sujeto del inconsciente llevar a cabo una reflexión para comprender esa
está más cercano a la matemática, a lo constata- afirmación, de una manera plausible, nos decan-
tivo, que a lo abierto, lo performativo en cierto taríamos por ésta: Nietzsche es al “Uno” lo que
modo. Al igual que ayer, hoy y mañana, 2 + 2 la “apropiación” a Heidegger. Aquel busca la
seguirán siendo 4. El cómo de lo inconsciente se ocultación y el olvido, guiado por el principio de
repetirá de la misma manera en aquellas circuns-
tancias donde el afecto sea convocado. Y aquí
reina sin medida el eterno retorno de lo mismo: el 16 El nacimiento de la tragedia. Trad. Andrés Sánchez
Pascual. Madrid: Alianza, 1979, p. 235.
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placer, mientras que éste dice “sí” al principio de


realidad ontológico existencial. Sin embargo, no * Eseidad del tiempo. Acotaciones y deri-
nos engañemos. Nietzsche se refiere a la expe-
vas.
riencia dionisiaca sin negar ni rechazar la tem-
poralidad. Según su lectura de los griegos de esa
Texto: Heidegger, Martin (2004): Der Begriff
época clásica, la experiencia dionisiaca sólo tiene
der Zeit. GA, Band 64. Frankfurt a.m.: Vittorio
sentido dentro de una duración, en los límites de
Klostermann. [El concepto de tiempo (20115ª).
la fiesta. Es una suerte de terapia que permite po-
Prólogo, traducción y notas de Raúl Gabás Pallás
der seguir soportando lo que se es, para no perder
y Jesús Adrián Escudero. Madrid: Trotta]
de vista el principio de individuación como con-
creción del principio de realidad. Si en Heidegger
la ocupación, nuestra manera ordinaria de estar
en el mundo, es una forma legítima de afrontar la
certeza indeterminada de nuestro haber sido, y de
saber hacer algo con nuestro principio de indivi-
duación, con Nietzsche, sin embargo, la fiesta re-
presenta el fenómeno que, en el interior de la du-
ración, logra con mayor contundencia el disfrute
de la experiencia del olvido de sí, de la muerte,
en el placer de una homogeneización plena. Y es
a raíz de esta componenda que podemos entender
la tendencia actual al goce. Si el placer consiste
en apartar de sí el principio de individuación, la
conciencia diferenciadora, entonces el existente,
que no quiere saber de su muerte, lo que sabe,
encuentra en la experiencia dionisiaca el cami-
no del olvido. Todo sufrimiento, todo dolor, toda
frustración, han de ser apartados, eliminados de
alguna manera, por cuanto son experiencias que,
precisamente, nos atan a la individualidad, a la
conciencia, pues cada uno de esos fenómenos son
signos de la temporalidad, del haber sido, indican
la presencia de la muerte. No hay mayor manifes-
tación del principio de individuación que la del
dolor, ni mayor manifestación de su olvido que
la alegría, la fiesta o el goce como su experiencia
más extrema. Desde esta interpretación podemos
comprender la alienación, en Heidegger, como el
dominio del imperativo del goce sobre la apropia-
ción del haber sido. La anticipación (Vorlaufen),
a resultas de ese imperativo del goce, no sólo no
desaparece, sino que se constituye en el combus-
tible de aquél, en la medida en que es la pulsión
de muerte la que domina la escena. La antici-
pación, que es un modo de tener conocimiento
del límite, de la individualidad, se convierte, o
subvierte, en el acicate de la desmesura. Y es en
esta experiencia de la desmesura donde la muer-
te es lo más cercano. De ahí que la experiencia
dionisiaca sea paradójica: cuanto más olvido del
principio de individuación más de cara se puede
aparecer.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

El pensamiento trágico
La innovación filosófica
de Nietzche en
El Nacimiento de la tragedia
Lic. Lucas G. Aldonati
UNSAM

Resumen El ser se muestra dionisiacamente


cuando lo familiar se hace inhóspito
El presente trabajo se propone realizar (Safranski, 2004: 82).
una introducción general a la obra El nacimiento
de la tragedia publicada por Friedrich Nietzsche Los primeros pasos de Nietzsche en Basilea
en 1872. La introducción a la obra se servirá del
análisis de dos perspectivas: por un lado, se ten- Con tan sólo 24 años de edad, el día 19
drán en cuenta los aspectos históricos que rodean de abril de 1869, Friedrich Nietzsche llega a la
a la obra y al autor; por otro, las interpretacio- universidad de Basilea para desempeñar su labor
nes e innovaciones conceptuales que la compo- como catedrático de filología clásica. El nombra-
nen. Si bien el aspecto histórico y el conceptual miento de Nietzsche fue, como destaca Sánchez
convergen en la crítica a Nietzsche por parte de Pascual, algo sorprendente. A pesar del asombro,
los filólogos clásicos de su época, éste genera el Nietzsche había recibido el título de doctor por
nacimiento de una nueva teoría filosófica: el pen- parte de la Universidad de Leipzig, sin haber pre-
samiento trágico. sentado ninguna tesis doctoral. El título otorgado
sentaba su fundamentación en una serie de artícu-
Abstract los publicados por el joven de Röcken en la revis-
ta Rheinisches Museum, dirigida por su maestro
The present work proposes to make a Ritschl. Una vez en Basilea, Nietzsche debía de-
general introduction to the work The Birth of mostrar a sus colegas filólogos que su nombra-
the tragedy published by Friedrich Nietzsche in miento no era producto de una arbitrariedad ni un
1872. The introduction to the work will be based acto de nepotismo.
on the analysis of two perspectives: on the one Para ello, debió escribir y presentar su
hand, the historical aspects that surround it will primera obra. Entre sus primeras clases, la lec-
be taken into account to the work and the author, ción inaugural “Sobre la personalidad de Home-
on the other, the interpretations and conceptual ro”, la influencia wagneriana y schopenhaueriana
innovations that compose it. Although the histo- y una serie de conferencias públicas, se comienza
rical and conceptual aspects converge in the criti- a gestar la idea de escribir un libro sobre la esté-
cism of Nietzsche by the classical philologists of tica de los trágicos y el pesimismo en la antigüe-
his time, it generates the birth of a new philoso- dad.
phical theory: tragic thought. Los primeros pasos de Nietzsche en la
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Universidad están marcados por el descontento y la más fuerte compasión de los oyentes. Pero en
el conflicto. La primera conferencia de Nietzsche julio de 1874 salió a la luz la segunda edición de
fue celebrada el día 18 de enero de 1870, con el la obra con un título principal más breve, a saber:
título “El drama musical griego”1. La segunda, el “El nacimiento de la tragedia”, acompañado esta
1 de febrero, con el título “Sócrates y la trage- vez de un subtítulo: “O Helenismo y pesimismo”.
dia”2. Salvo en Wagner que pretendía sesgar a El cambio de título tuvo como propósito subra-
Nietzsche para que teorizara sobre su producción yar sin ambigüedades que el gran problema de
musical, las conferencias provocaron odio y ra- la obra era la superación del nihilismo. Aun así,
bia. A estas presentaciones públicas se suma tam- poco conforme con las modificaciones, Nietzs-
bién el ensayo titulado “La visión dionisiaca del che añade en 1886 (dieciséis años después de la
mundo” escrito entre los meses de julio y agosto primera edición y año de la publicación de Hu-
de 1870. Sin embargo, será luego de pasar por mano, demasiado humano), un interesante ensa-
varios temas y cambios de títulos (La tragedia y yo de autocrítica. Esta obra es, según afirma C.
los espíritus libres, La jovialidad griega, u Ori- Niemeyer, considerada por muchos estudiosos
gen y meta de la tragedia), por un problema de de Nietzsche como una de las obras más comple-
salud que lo hace retirar de sus obligaciones aca- jas e importantes del autor. No sólo se trata de la
démicas a Lugano con su hermana, que se reúne primera obra que Nietzsche decide publicar, sino
finalmente con Wagner y enfoca la problemática que conforma el eje central de su pensamiento
de su obra. juvenil4. Un pensamiento influenciado principal-
El nacimiento de la tragedia del espíritu mente por la filosofía de Schopenhauer y la músi-
de la música fue publicada en enero de 1872 por ca de Wagner. De hecho, dirá Nietzsche años más
el editor de Wagner, E. W. Fritzsch en Leipzig tarde en su obra Ecce Homo (1888), que para ser
y es la opera prima de Friedrich Nietzsche3. La justos con El nacimiento de la tragedia (1872)
palabra música en el título de la obra evidencia, será necesario olvidar algunas cosas. Entre ellas,
según Germán Cano, el rol decisivo que tuvo ésta el repugnante olor hegeliano que emana debido al
sobre Nietzsche. La reflexión sobre la música fue estilo dialéctico y el amargo perfume cadavérico
el motor que espoleó al filósofo de Röcken a bus- de Schopenhauer. En Ecce Homo (1888), Nietzs-
car su propio camino filosófico porque la músi- che busca resaltar que El nacimiento de la trage-
ca cumplía, según él, una tarea. La música tenía dia (1872) “ha influido e incluso fascinado por lo
entre los griegos, según entiende Nietzsche, la que tenía de errado, por su aplicación al wagne-
tarea de transformar el sufrimiento del héroe en rismo, como si éste fuese un síntoma de ascen-
sión”5. Sin embargo, la recién citada afirmación
de Nietzsche debe ser leída en su contexto, pues
1 “En la primera conferencia Nietzsche desarrolla la tesis del
nacimiento de la tragedia a partir de las fiestas dionisiacas.
también sostiene que su escrito resultó un acon-
Con ello se mantiene todavía en el marco de la filología
clásica de la época. En la biblioteca de la Universidad de 4 Nietzsche, temprano (der frühe Nietzsche): “El cambio
Basilea Nietzsche había tomado en préstamo una obra en las concepciones de Nietzsche es considerable y
estándar acerca de la tragedia griega: la Historia de la frecuentemente desconcertante para el lector. No solo por
literatura griega, de Karl Ottfried Müller (1857), donde se ese motivo se distingue en la investigación de Nietzsche
hace referencia al culto de Dioniso como célula germinal entre las obras hasta 1876 (en particular GT, UB I-IV, así
del drama griego.” (Safranski, 2004: 62). como los póstumos de este período, por ejemplo, BA: el
2 “Sócrates rompe el poder de la música y pone en su lugar primer Nietzsche), a partir de 1878 (hasta 1882), por
la dialéctica. Sócrates constituye una fatalidad, pues con él tanto MA I y II, así como M y FW (el Nietzsche medio);
comienza un racionalismo que ya nada quiere saber de la y las posteriores (a partir de ZA: el último Nietzsche).
profundidad del ser. Sócrates es el comienzo de un saber Esta distinción puede justificarse, en lo que se refiere a la
sin sabiduría. Concretamente en la tragedia, el pathos del primera fase mencionada, con una confesión de Nietzsche
destino fue desplazado por el cálculo, las intrigas y las a partir de un escrito preparatorio para el prólogo de MA:
previsiones.” (Safranski, 2004: 65). «A los lectores de mis primeros escritos quiero declarar
3 “El día 20 de abril ofrece a W. Engelmann, de Leipzig, expresamente que he abandonado los puntos de vista
un libro bajo el título de Música y tragedia. Tras muchas metafísicos y artísticos que los dominaban esencialmente:
dudas, Engelmann no se decide a publicar la obra. Por ello ellos son de apariencia agradable, pero insostenibles» (NF
Nietzsche, con ocasión de una visita a Leipzig, a mediados 1876-77, 23 [159]). De este modo, «el primero Nietzsche
de octubre de 1871, entrega la obra al editor E. W. Fritsch, se mostraba, según confesión, como una fase con una
aun sin estar completa. El 18 de noviembre le envía más característica propia (metafísica artística) que, mientras
material, y por fin, el 12 de diciembre, le manda los últimos tanto, había perdido su validez”. (Niemeyer, 2012: 376).
capítulos.” (Sánchez Pascual, 2015: 18). 5 EH, KSA 6, “El nacimiento de la tragedia”, §1, p. 85.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

tecimiento para la vida de Wagner y que “sólo a tismo de un discurso histórico, el de la filología académica,
partir de aquel instante se pusieron grandes espe- que agotaba el posible terreno fértil que posibilitaba una
ranzas en su nombre”6. Pero si nos atenemos al cultura renovadora. (Cano, G., 2010: XXI).
momento puntual en el que fue publicada la obra,
las perspectivas, interpretaciones y comentarios Nietzsche estaba despreocupado de las
positivos sobre Nietzsche escasean. acusaciones de Wilamowitz porque era genero-
La recepción de El nacimiento de la tra- samente defendido por sus amigos Wagner y Ro-
gedia (1872) entre sus contemporáneos fue de- hde. El enojo en el propio Nietzsche en lo que
sastrosa. Pero el silencio de hielo provocado, el respecta a su obra es causado no por el contenido,
estupor, las cartas y cuchicheos de pasillos uni- sino por el modo de expresarlo. Al estilo elegido
versitarios que hacían circular limitadas opinio- refiere la expresión “repugnante olor hegeliano”.
nes, han dado cuenta de que la obra convertía a Nietzsche confesó a Rohde en una carta que, tan-
su autor en un “intempestivo”. Nietzsche, que ha- to la ciencia, como el arte y la filosofía crecían
bía querido acreditarse como filósofo por medio tan juntos dentro de él que engendraría “centau-
de su presentación, fracasó en su intento, lo cual ros”. Su “filología del futuro” estaba más rela-
perjudicó su fama en Basilea y en todo el entor- cionada a una filosofía crítica que a una aséptica
no de su disciplina originaria que fue la filología reproducción objetiva del mundo griego. Pero
clásica7. El primer ataque vino del joven prusiano para poder desplegar su plan, Nietzsche necesita-
Ulrich von Wilamowitz, quien fue años más tarde ba nuevos interlocutores. A este llamado de nece-
maestro indiscutible de la filología clásica alema- sidad, acompañan las palabras pronunciadas por
na. Wilamowitz exigía que Nietzsche se atuviera Nietzsche en su conferencia inaugural de 1869:
a lo que decía o abandonara la cátedra desde la “philosophia facta est quae philologia fuit” (“lo
cual se debía enseñar ciencia. La juventud filo- que fuera filología se ha hecho filosofía”).
lógica alemana, según Wilamowitz, tenía como
tarea aprender a buscar la verdad y no formular La obra como laberinto de ideas
especulaciones al estilo de Nietzsche.
En Ecce Homo, Nietzsche repara en la si-
Dicho en pocas palabras: «Nietzsche no buscaba la verdad». guiente idea: “Una «idea» –la antítesis de lo dio-
Éste era el principal reproche del filólogo Wilamowitz a esa nisiaco y apolíneo–, tras puesta a lo metafísico; la
«embriagada» visión a caballo entre la filosofía y la mala historia misma, vista como el desenvolvimiento
filología que representaba, desde su sobria sensibilidad de
de esa «idea»; en la tragedia, la antítesis superada
erudito, El nacimiento de la tragedia. Un reproche real-
mente sistemático, porque con ese categórico juicio de va- en unidad” . Así, según Nietzsche, supo confron-
8

lor el filólogo que le desafiaba expresaba el propio dogma- tar y poner cara a cara cosas que jamás se habían
mirado de frente como, por ejemplo, la ópera y la
revolución.
6 EH, KSA 6, “El nacimiento de la tragedia”, §1, p. 85.
7 “Los diez años de formación que Nietzsche pasó en los
Institutos de Enseñanza de Naumburg y Pforta (1854-64), Yo fui el primero en ver la auténtica antítesis: el instin-
la intensa formación recibida en sus estudios filológicos to degenerativo, que se vuelve contra la vida con subte-
en Bonn y Leipzig con excelentes profesores (O. Jahn, rránea avidez de venganza (el cristianismo, la filosofía de
Ritschl), así como los años de profesor y docente en el Schopenhauer, en cierto sentido ya la filosofía de Platón, el
Pädagogium y en la Universidad de Basilea, convirtieron idealismo entero, como formas típicas), y una fórmula de
a Nietzsche en un experto en el ámbito de la cultura la afirmación suprema, nacida de la abundancia, de la so-
clásica y en un gran conocedor de las exigencias elitistas breabundancia, un decir sí sin reservas aun al sufrimiento,
de los centros de formación humanística y de los métodos aun a la culpa misma, aun a todo lo problemático y extraño
filológicos de su tiempo. […] Nietzsche no persigue en de la existencia.9
los textos los temas «blandos», sino la genealogía de los
manuscritos, la crítica textual, la historia de la redacción, la Instinto degenerativo y afirmación supre-
crítica de las fuentes, la crítica de las tendencias. Describe el ma se entrelazan con la moral entendida como
principio de construcción de las colecciones de sentencias
y su tejido elemental y descubre el preámbulo de su propio síntoma de décadence y con el símbolo de lo
estilo aforístico en la forma epigramática de las sentencias dionisiaco, descubierto por Nietzsche a través de
de Teogonis. […] Nietzsche pensaba que la Antigüedad su experiencia más íntima de la historia. Nietz-
(«más antigua» o «arcaica») servía como instrumento para
la comprensión de la cultura moderna, para entenderla,
guiarla y superarla (NF 1875, 6 [2]).” (Niemeyer, 2012: 8 EH, KSA 6, “El nacimiento de la tragedia”, §1, p. 86.
197-198). 9 EH, KSA 6, “El nacimiento de la tragedia”, §2, p. 87.
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sche aclara que no se debe sustraer nada de lo placer y al horror de la realidad absoluta. Para po-
que existe, porque nada es superfluo. Todo lo que der soportar ese horror, el hombre debe apoyarse
existe y que, por ejemplo, la iglesia u otros nihi- en Apolo, dios de la forma, la claridad, el contor-
listas rechazan, pertenece a un orden de valores no fijo, del sueño claro y, sobre todo, de la indivi-
infinitamente mayor que, de seguro, no se alcan- dualidad. Lo dionisiaco es anterior a toda cultura,
za a comprender. Ahora bien, captar el instinto de precede a la civilización y aguarda bajo ella, es la
décadence exige coraje y un exceso de fuerza: dimensión amenazadora y a la vez seductora de
“pues nos acercamos a la verdad exactamente en lo monstruoso. Por ende, la cultura es necesaria
la medida en que al coraje le es lícito osar ir hacia en su justa medida, aunque Nietzsche denuncie la
delante, exactamente en la medida de la fuerza”10. arquitectura socrática en El nacimiento de la tra-
Pues conocer y decir sí a la verdad constituye, gedia (1872). En su obra se dejan vislumbrar las
para el fuerte una necesidad, para el débil implica experiencias elementales de la existencia: Apolo
cobardía y huida. Por ello, el débil no es dueño y Dioniso son la llave de acceso a eso primordial
de conocer, sino que tiene necesidad de la menti- que la metafísica evade.
ra, porque sólo en ella se siente conservado. Pero
toda esta discusión planteada por Nietzsche en Naturalmente, en El nacimiento de la tragedia el
1888 no coincide, a causa de no haber dado con joven Nietzsche desea intervenir en el debate que en el si-
el estilo justo por un lado y la falta de oídos pre- glo XIX se está planteando en torno al futuro de la cultu-
ra, pero por las tensiones y contradicciones que apunta, el
parados por otro, con los comentarios de 1872.
ensayo va mucho más allá de él. En cierto modo, marca la
Su estilo causó que no se perciba el propósito encrucijada entre la crítica del romanticismo a los ideales
principal del escrito. Dice Nietzsche al respecto: de la modernidad y algo ya en realidad muy diferente. Pese
“sólo se ha tenido oídos para percibir en él una a que Nietzsche recoge todos los debates de la tradición
nueva fórmula del arte, del propósito, de la tarea romántica, muestra al mismo tiempo la imposibilidad de
de Wagner, –en cambio no se oyó lo que de valio- su cura de la decadencia, un camino que posteriormente
so encerraba en el fondo ese escrito”11. Debido a seguirá. (Cano, 2010: LXXI)13
ello, queda por fuera del entorno filológico y sin
ser aceptado tampoco en el puerto de la filosofía. Pese a ser un texto laberíntico, ambiguo,
A pesar de quedar sin apoyo, el diagnóstico pro- lleno de máscaras, trampas y matices, pero, aun-
puesto en la obra no es errado, sino cierto y hos- que, tampoco exento de ironía, Nietzsche aclara
til. No es casual el enfado de los pregoneros de la que “Grecia y el pesimismo” habría sido un título
cultura alemana en la academia. El diagnóstico menos ambiguo para dejar en claro su propósito.
de Nietzsche surge de su visión de águila ante una Pues se trata, según él, de una enseñanza acerca
situación crítica causada por la racionalización de cómo los griegos acabaron con el pesimismo
técnica del mundo. Racionalización técnica que, y, mejor aún, de cómo y con qué lo superaron.
paradójicamente, ha desgarrado los velos de las Pero la aclaración y el énfasis que hace Nietzs-
ilusiones idealistas, el aura burguesa. La cultura che en Ecce Homo (1888) sobre el pesimismo se
se para frente a la fuerza dionisiaca del mundo enmarca en una crítica directa a la filosofía de
para crear una zona en la que se pueda vivir. Dio- Schopenhauer que no está presente en El naci-
niso, en tanto se presenta como el dios salvaje de miento de la tragedia (1872). La tragedia, afirma
la disolución, de la embriaguez, del éxtasis, de lo Nietzsche, es la prueba de que los griegos no fue-
orgiástico y de la ruptura de límites12, conduce al ron pesimistas, pero también se permite decir que
“Schopenhauer se equivocó aquí, como se equi-
10 EH, KSA 6, “El nacimiento de la tragedia”, §2, p. 88. vocó en todo”14. Parece ser que El nacimiento de
11EH, KSA 6, “El nacimiento de la tragedia”, §1, pp. 85-86.
12 “Seduce en lo dionisiaco una triple eliminación del límite, 13 Más adelante Germán Cano dice: “La cuestión
una triple superación del «principio de individuación» (1, fundamental ahora también es superar la inercia nihilista
554). El hombre supera los propios límites para pasar a la decadente –y su último residuo, el romanticismo. […] La
naturaleza, se siente uno con ella. En lo orgiástico, en el sublimidad romántica pasa a ser vista como un impúdico
amor y en la embriaguez de la masa también se deshace el des-velo, una insolente maniobra narcisista que agota los
límite con el otro hombre. Y el tercer límite es destruido canales nutricios culturales, una caída sin red inmediata
en el interior del individuo. La conciencia se abre a lo en un mal dionisismo, un residuo parasitario del pasado,
inconsciente. Un yo que se aferra angustiado a su identidad espectacular y confesional, ilusoriamente maquillado como
tiene que experimentar como amenazadora esta triple proyecto de futuro pero que, en su estéril pureza, es incapaz
destrucción del límite. Frente a esto, la disposición al placer de contaminarse con lo real”. (Cano, G., 2010: LXXIII).
del ocaso sería dionisiaca.” (Safranski, 2004: 69). 14 EH, KSA 6, “El nacimiento de la tragedia”, §1, p. 86.
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la tragedia (1872) resulta un escrito intempestivo Espíritu, naturaleza, arte, cultura, voluntad, etc.,
que incluso el propio Nietzsche no puede domi- rodean y exaltan al genio; pero, por otro lado, el
nar. El comienzo de la obra bajo los truenos de la entusiasmo del joven Nietzsche por la persona de
batalla de Wörth15, las meditaciones de sus pro- Wagner nubla o sesga algunas afirmaciones de
blemas ante los muros de Metz y las frías noches las cuales el propio Nietzsche se arrepentirá años
de septiembre, mientras trabajaba en el servicio más tarde, principalmente, luego de su ruptura
de sanidad, convergieron en una obra indomable con el músico en el festival de Bayreuth. Hasta
a la cual Nietzsche siempre tuvo que volver a re- entonces, el joven Nietzsche reconocía en Wag-
pensar. En esta obra se encuentran la mayor parte ner “el mayor genio y el hombre más grande de
de los temas que ocuparán a Nietzsche a lo largo esta época” (A Deussen, 25.8.1869). Pero aquello
de su vida filosófica, los cuales irá madurando o que podría describirse en Nietzsche como “trans-
mutando según el estado de su salud, lugar de re- ferencia paterna” (Vaterübretragung)16 a causa de
sidencia y demás factores. la muerte temprana de su padre, mutó de Ritschl
Antes de alcanzar la primera publicación a Schopenhauer y, de éste, a Wagner hasta acla-
de la obra, Nietzsche contó con una serie de es- rar en Humano, demasiado humano (1886) que
critos previos entorno al ámbito clásico y con es- “Nunca se ha hecho grande todavía el influjo de
bozos concretos referentes a la preparación de sus un hombre y de su obra sin que haya tenido discí-
ideas. Entre las ideas y tesis que se destacan en el pulos ciegos”17.
joven Nietzsche se encuentra la de considerar al
arte como “la tarea suprema y la actividad pro- El arte y las fuerzas creativas
piamente metafísica de la vida”. Esta propuesta
se encuentra en el prólogo a El nacimiento de la El entusiasmo wagneriano por parte del
tragedia (1872), dedicado al “sublime precursor” joven Nietzsche impregna a El nacimiento de la
Richard Wagner. Ligada a esa actividad metafí- tragedia (1872) de toda una problemática cultu-
sica, hace eco también la intención de configu- ral alemana. A la obra se haya entrelazada el nú-
rar una filosofía de formación elitista que tenga cleo estético y la revisión de la antigüedad clásica
la capacidad de crear artistas como Wagner y de promulgada por Wagner. Se debe considerar que,
mantener un sistema de valores determinado. En
los fragmentos póstumos de Nietzsche se puede 16 “«Transferencia paterna» (Vaterübertragung) es el
leer: “No hay tendencia cultural más excelsa que término psicoanalítico que designa un lazo afectivo muy
la preparación y la creación del genio” (NF 1871, intenso, enigmático a primera vista, impulsado por la
11 [1], KSA 7: 355). Y, sin ir demasiado lejos, la búsqueda del padre en una persona elegida como sustituta
figura del genio que aparece en el fragmento cita- del mismo. la transferencia paterna adquiere un dramatismo
especial, por ejemplo en forma del posterior y casi inevitable
do será un concepto central en la obra publicada «asesinato (simbólico) del padre», cuando la experiencia
y seguirá acompañado de la idea de preparación traumatizante de un amor paterno siempre anhelado pero
y creación. nunca vivido en realidad debe ser aniquilada. […] También
La idea de genio está rodeada, al menos en para entender a Nietzsche, que en realidad había crecido
El nacimiento de la tragedia (1872), de una car- sin padre a causa de la prematura muerte de este y que se
sentía expulsado de todos los países de padres y madres,
ga conceptual y emocional por demás compleja. hay que considerarlo, al menos en sus primeros años, como
un converso que transformó en conceptos su experiencia
15 Nietzsche asiste en septiembre a la guerra entre personal, circunstancia que ha dificultado a sus intérpretes
Alemania y Francia en el frente Occidental. “Asiste a la la comprensión plena de sus bandazos teóricos, a menudo
recogida de cadáveres en el campo de batalla, acompaña radicales, así como el vehemente rechazo de hombres
un transporte de heridos y se infecta él mismo de disentería que antes habían sido apasionadamente venerados por él”
y difteria.” (Safranski, 2004: 70). Allí, afirma Nietzsche (Niemeyer, 2012: 505).
que fue arrojado de nuevo hacia sí mismo, que desde ese 17 MA, KSA 3, §122. “Nietzsche debió encumbrar
momento no puede olvidar “imágenes terribles” de los rápidamente a Wagner al rango de sustituto de su padre
campos de cadáveres, de los moribundos y mutilados. pensando que, puesto que había nacido como su padre en
Delirio, voluntad y dolor le llegan al pensamiento como 1813, este habría podido llegar a ser más o menos como
abismos de la tragedia. Si bien Nietzsche en un primer era ahora Wagner si no hubiese fallecido precisamente
momento considera la guerra como una combinación de la el mismo año (1849) en el que el todavía por entonces
fuerza dionisiaca con el mundo de Heráclito, es decir, como revolucionario Wagner salía al campo de batalla contra
juego de destrucción y aniquilación, cambiará su parecer y el «absolutismo hipócrita» del que el padre de Nietzsche,
dirá que la guerra sólo beneficia al Estado a ganar dinero y por otra parte, se consideraba partidario” (Niemeyer, 2012:
arrogancia militar. 507).
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por parte de Wagner, la antigüedad clásica es ca- Pues si el arte justifica la existencia estéticamen-
paz de instruirnos en todos los tiempos a partir te, ello lo hace sobre el fondo de una crueldad.
de sus propias ruinas. Esa instrucción de la que
habla Wagner, hace referencia a la tolerancia o Esta «crueldad en la esencia de toda cultura» demuestra de
nuevo, según Nietzsche, que la existencia es una «herida
acostumbramiento del hombre en lo que respecta eterna» (1, 115), y la terapia del arte, la justificación esté-
al curso de la vida en el mundo. Nietzsche, por su tica, mantiene abierta la herida. Se sacrifican hombres en
parte, toma esta idea y la desarrolla, según entien- aras de la belleza del arte, y por ello la existencia del arte
de Gerhard18, como su primer pensamiento filosó- añade una nueva injusticia al perverso estado del mundo.
fico independiente. La afirmación nietzscheana: (Safranski, 2004: 77).
“sólo están eternamente justificados la existencia
y el mundo como fenómenos estéticos” (GT, KSA Sin embargo, de todas estas aclaraciones
1: 47) sienta sus bases en la propuesta wagne- no se sigue necesariamente ni tampoco puede re-
riana. La vida es trágica, pues ella se despliega ducirse El nacimiento de la tragedia (1872) a una
sobre lo monstruoso. En la vida dominan el su- obra totalmente centrada a fomentar una progra-
frimiento, la muerte y todo tipo de crueldades. Y, mática nacional-alemana. Nietzsche se preocupa,
por su parte, Wagner manifestaba su deseo por en su obra, por recuperar el significado metafísi-
fortalecer en los alemanes un significado político co de la vida y, a su vez, de resultar provocativo.
más elevado por medio de las aspiraciones artís- Por ello, problematizó el arte, junto con su fondo
ticas. Por ello, en los esbozos a la primera obra de oscuro de injusticia desde el cual crece, con los
Nietzsche se presenta la cultura y la justicia como movimientos del progreso social contemporáneo.
un dilema a resolver. O se desarrolla una cultura Pero, como resalta Sánchez Pascual, es el concep-
pensada en términos morales o, por el contrario, to de vida lo que constituye la columna vertebral
se configura estéticamente. Nietzsche, según ex- de la primera obra publicada por Nietzsche. Para
presa Niemeyer, manifestaba también su acuerdo hacer posible que la vida tome el lugar central de
con la intención wagneriana de preparar El ani- su filosofía, el filósofo de Röcken, reconsidera a
llo del Nibelungo19 como balada popular sobre la Dioniso, dios del éxtasis y antagonista de Apolo,
opresión del «genio alemán». el domador de la Naturaleza hacia el orden y la
La división entre hombres creadores, con belleza. Dioniso es tomado como una categoría
características artísticas tales que pueden conver- para la crítica del progreso y de la razón que re-
tirse a sí mismos en obras de arte, y los hombres presenta el dios Apolo.
del rebaño democrático, está presente en El naci-
Según Nietzsche fueron los griegos, mediante los dioses
miento de la tragedia (1872), pero se puede en- Apolo y Dioniso, quienes lograron expresar y a la vez
contrar a lo largo de toda la filosofía de Nietzsche «ocultar» una experiencia singular del mundo. Estos dos
con algunos matices diferentes. Esos hombres impulsos, el apolíneo y el dionisíaco, que en la esfera del
creadores, que vale la pena contemplar, no se jus- arte representan modelos opuestos estilísticos casi siempre
tifican por tener una utilidad social, tampoco me- en lucha, sólo una vez aparecen unidos: en el momento cul-
minante de la voluntad helénica, en la obra de arte de la
joran la humanidad, sino que simplemente logran tragedia ática. (Cano, G., 2010: XL-XLI).
encarnar sus posibilidades y las hacen intuitivas.
Así, una cultura estética y un aparato estatal esta- El sentir musical, expresado en clave dio-
rían justificados si esos ejemplares supremos pue- nisiaca, está ligado con la creación artística y,
den vivir y crear. Se genera, a partir de la elección sobre todo, frenética que inculcaba Wagner. La
estética, una tensión entre el trabajo mecánico y lucha entre lo apolíneo y lo dionisiaco se muestra
los artistas dotados de acción creadora. Ambos ti- como una resistencia de la naturaleza titánica y
pos de hombre participan en la elaboración de un bárbara frente a la coacción de un sistema esta-
suelo amplio, profundo y fértil para que el arte se tal, cruel y brutal. Pero la relación entre Apolo
desarrolle a pesar de los poderes del destino que y Dioniso es una relación creativa, donde ambas
actúa de manera justa e injusta para unos y otros. divinidades se complementan y refuerzan. “Las
pasiones y la música son dionisiacas, el lenguaje
18 Gerhardt, V., „Von der ästhetischen Metaphysik zur y la dialéctica en el escenario son apolíneos; am-
Physiologie der Kunst“, en N. Studien 13, 184, pp. 374- bas dimensiones juntas producen en la concien-
393. cia la representación clara de los poderes oscuros
19 Wagner, Richard (2008), El anillo del Nibelungo,
Madrid, España: Turner.
del destino” (Safranski, 2004: 67).
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De este cruce se da a conocer lo que Niet- consecuencias perduran hasta nuestro presente.
zsche llama “sabiduría dionisiaca”: un saber que Con él llega la voluntad de saber que se sobre-
parte de un presentimiento que penetra en lo des- pone a los poderes vitales del mito, de la religión
piadado, codicioso, insaciable y cruel de la vida. y del arte. Con la voluntad de saber, la vida de
La sabiduría dionisiaca es “una anticipa- desgaja del oscuro fundamento del mundo en el
ción de lo absoluto en la realidad, nunca com- que se hayan los instintos y las pasiones. Ade-
prensible. No es un más allá especulativo, sino la más, Nietzsche reconocía al Estado y a la educa-
quintaesencia de todo lo real, donde se desplie- ción transmitida bajo su dominio como un poder
gan el conocimiento, la vida y el arte” (Safranski, potencialmente represivo (Cf. Foucault, Vigilar
2004: 81). Más adelante explica Safranski sobre y castigar). Él consideraba ambas cosas como
el uso ontológico metafísico del término dioni- una variedad desvirtuada de lo apolíneo, es decir,
siaco: como una fuerza que se ejerce para guiar a la hu-
manidad hacia el surgimiento del hombre teórico.
La sabiduría dionisiaca es la fuerza de soportar la realidad La ausencia de perspectivas en esa guía
dionisiaca. Hay que soportar dos cosas: un placer nunca
conocido y un hastío. La disolución dionisiaca de la con- y la primacía del hombre socrático, teorético y
ciencia individual es un placer, pues con ello desaparecen de ciencia, como representa Ritschl (el alejandri-
las barreras y los límites del ser. Pero cuando la concien- no22), provoca la muerte del genio de la cultura
cia cotidiana se adueña de nuevo del pensamiento y de la trágica, ese genio que abraza el dolor eterno y
vivencia, entonces un hastío se apodera de lo dionisiaco afirma la vida. La cultura socrática llega desde
desencantado. (Safranski, 2004: 82-83). el racionalismo de Eurípides para enfrentarse a
la cultura trágica. Esta última, quiere superar el
Ahora bien, esta tentación nietzscheana engaño seductor de las ciencias dirigiendo su mi-
por dar nombre a lo inagotable se corresponde rada imperturbable a la imagen total del mundo
con la vieja tentación metafísica. De hecho Kant, para reconocer en él el dolor eterno como suyo.
en su Crítica de la razón pura20, había preveni- El hombre erudito debe ser liberado por medio
do esta tentación. Kant lo muestra como “cosa en del sentimiento musical dionisiaco. Esto es, a su
sí”; Schopenhauer le otorgó el nombre de “volun- vez, un mensaje de Nietzsche a la generación de
tad” y, Nietzsche, llamó a la realidad absoluta lo su tiempo al cual ve sofocado por la teoría.
dionisiaco.
Las innovaciones de Nietzsche
La muerte de la tragedia a causa del modelo
socrático Nietzsche señala en Ecce Homo (1888)
las innovaciones que aporta El nacimiento de la
La contraposición de esas divinidades tragedia (1872) a la mesa de discusión filosófica
con Sócrates es lo que origina la muerte de la tra- y filológica de su tiempo:
gedia21. Sócrates, según considera Nietzsche, es
síntoma de un profundo cambio cultural, cuyas Las dos innovaciones decisivas del libro son, por un lado,
la comprensión del fenómeno dionisiaco en los griegos: el
20 Kant, Immanuel (2009), Crítica de la razón pura, libro ofrece la primera psicología de ese fenómeno, ve en
Buenos Aires, Argentina: Colihue. él la raíz única de todo el arte griego. Lo segundo es la
21 “En El nacimiento de la tragedia Sócrates queda comprensión del socratismo: Sócrates, reconocido por vez
«desenmascarado» como gran Padre fundador del
resentimiento teórico hacia la vida. […] La medicina socrática 22 “El hombre alejandrino y el budista tienen algo en
es mala por abstracta, vacía, es decir, «universal» (GT, p. común: generan un mal disfraz defensivo frente a lo
128-133). O, como dirá más tarde [en las Consideraciones dionisíaco a fin de conservarse medrosamente a toda costa.
intempestivas], por renunciar a la tensión inherente a la De ahí que Nietzsche desarrolle en su ensayo una topología
vida. […] Para Nietzsche, la «terapia universal» socrática médica a tenor de las formas que inventan las diferentes
tiene diversos inconvenientes: en primer lugar, desdibuja culturas para gestionar y canalizar el flujo irreversible de lo
hasta la abstracción el arte médico de diferenciar entre una terrible, para soportar el peso trágico de la existencia. cuanto
pluralidad de enfermedades y curas; en segundo, propone más se erige el muro cultural contra la alteridad dionisíaca,
un fármaco no lo suficientemente amargo contra la supuesta más riesgo corre la vida en general de debilitarse y más
situación de decadencia (que por ello resulta venenoso, violencia indirecta se termina generando. Cuanto más se
contraproducente) y, como consecuencia y en tercer lugar, acoraza una cultura –y en esa medida menos conocimiento
cree ingenuamente remediar el problema haciendo la médico tiene de sus límites y fuerzas–, más inerme es en el
guerra a la enfermedad, apostando por una «racionalidad» fondo, y más se atrinchera moral e idealmente.” (Cano, G.,
a cualquier precio.” (Cano, G., 2010: XLIII). 2010: XLII).
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primera como instrumento de la disolución griega, como


décadent típico. «Racionalismo» contra instinto. ¡La racio- Tanto la música y la danza dionisiaca
nalidad a cualquier precio, como violencia peligrosa, como
como la representación escénica apolínea se en-
violencia que socava la vida!23
trelazan para potenciarse mutuamente y fundar
algo que trasciende el mero suceso artístico. El
Frente a la peligrosa racionalidad que so-
sueño y la ebriedad no descansan sólo en la fisio-
cava la vida Nietzsche reconoce la ausencia de
logía, sino que acompañan el significado estético
una figura fundamental en su libro. En todo el
y ontológico de la filosofía nietzscheana. El jue-
libro, dice Nietzsche, hay un profundo y hostil
go de contrarios de Heráclito tiene su resonan-
silencio contra el cristianismo. ¿Por qué el ata-
cia en esta oposición fundamental, debido a que
que al cristianismo no se encuentra presente de
todo lo que existe debe su ser a estas fuerzas de
manera más explícita en este libro? Nietzsche
la naturaleza. Dioniso y Apolo, en su libre pero
parece lamentarse o resaltar al menos esa ausen-
necesario juego, deben ir juntos para alcanzar su
cia con tono preocupante, pues el cristianismo no
cenit. En el corazón del mundo yace una contra-
puede situarse siquiera entre lo apolíneo o dioni-
dicción originaria que genera igualmente el dolor
siaco. Afirma Nietzsche: “Éste no es ni apolíneo
originario.
ni dionisiaco; niega todos los valores estéticos,

los únicos valores que El nacimiento de la tra- El «uno originario» dionisíaco, el «artista originario del
gedia reconoce: el cristianismo es nihilista en el mundo», se ve obligado a crear la realidad empírica como
más hondo sentido, mientras que en el símbolo una bella apariencia apolínea que a su vez se le contrapone
dionisiaco se alcanza el límite extremo de la afir- con el fin de seguir subsistiendo. De ese modo, encuentran
su justificación ontológica los sufrimientos de la existencia
mación”. Incluso, Nietzsche dirá que la alusión
individual. Esta eterna fuerza dionisíaca, creadora de la na-
a los sacerdotes cristianos como “pérfida especie turaleza, produce florecimiento y degeneración, de modo
de enanos” o de “subterráneos” no es suficiente que el gozo de surgir y crecer no se puede separar del dolor
para desenmascarar a tan pavoroso enemigo de la de la decrepitud y la desaparición. El héroe trágico perece
vida. ciertamente, por la fuerza creadora de lo dionisíaco –lo que
significa también: la infinita fuerza creadora y generadora
Los valores del arte trágico son valores
de la naturaleza– se despliega de la manera más ostentosa
estéticos que consisten en estimular a los hom- precisamente en el ocaso de sus ejemplares más brillantes.
bres fuertes a aceptar todos los diferentes aspec- El arte trágico se dilata de ese modo hasta convertirse en
tos que presenta la vida, y precisamente los más un acontecimiento cósmico. (Niemeyer, 2012: 504-505) 25
horrendos. Por ello, según Georges Goerdert, a
diferencia de lo que considera Aristóteles sobre El espíritu trágico contiene una verdad
el efecto catártico de la tragedia, ésta no serviría más profunda que la ciencia no consigue captar
exclusivamente para sentirse abatido y para di- y, apoyado en la filosofía de Heráclito, Nietzsche
solverse a sí mismo, sino que se encamina hacia logra transmitir esa idea de verdad dionisiaca.
una tarea mucho más profunda y compleja.
fuertes arrancan la belleza a lo horroroso. En este sentido
El decir sí a la vida incluso en sus problemas más extraños la cultura griega es fuerte. El sentimiento vital era trágico y
y duros; la voluntad de vida, regocijándose en su propia pesimista. La vida griega, una vez que ha despertado para
inagotabilidad al sacrificar a sus tipos más altos, –a eso fue hacerse consciente, mira ante todo al abismo. El horror está
a lo que llamé dionisiaco, eso fue lo que yo adiviné como allí al principio de la carrera del espíritu.” (Safranski, 2004:
puente que lleva a la psicología del poeta trágico. No para 85).
desembarazarse del espanto y la compasión, no para purifi- 25 “Lo originario significa lo «uno originario» (1, 38), el
carse de un afecto peligroso mediante una vehemente des- ser envolvente,
carga de ese afecto –así lo entendió Aristóteles–: sino para, que en definitiva no es comprensible. El concepto de lo
más allá del espanto y la compasión, ser nosotros mismos dionisiaco implica una decisión teórica, que por su parte se
el eterno placer del devenir, –ese placer que incluye en sí remonta a una experiencia fundamental. Ya para el joven
también el placer de destruir…24 Nietzsche el ser es algo movido, amenazador y seductor a
la vez. Lo vive en el relámpago, la tormenta y el granizo, y
23 EH, KSA 6, “El nacimiento de la tragedia”, §1, pp. 86- muy pronto aparece en sus esbozos el niño del
87. mundo de Heráclito, que lúdicamente construye y destruye
24 GD. “Son fuertes y tienen un rango alto aquel hombre mundos. Hay que haber experimentado el mundo como lo
y aquella cultura que son capaces de asumir una gran dosis monstruoso, como un ser donde la vida que ha despertado
de poder elemental dionisiaco sin romperse. Dicha fuerza a la conciencia no se encuentra segura. El ser se muestra
significa a la vez que la transfiguradora fuerza apolínea tiene dionisiacamente cuando lo familiar se hace inhóspito.”
que ser a su vez muy grande. Culturas e individualidades (Safranski, 2004: 82).
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Symploké revista filosófica octubre 2018

Nietzsche reconoce en Heráclito el filósofo más te produce individuaciones y que, produciéndolas, se des-
afín a su pensamiento y con quien se siente de garra a sí misma. Por ello es la vida dolor y sufrimiento:
el dolor y el sufrimiento de quedar despedazado lo Uno
mejor humor que en cualquier otro lado. El ca- primordial. Pero a la vez la vida tiende a reintegrarse, a
lor y la comodidad viene dada por “la afirmación salir de su dolor y reconcentrarse en su unidad primera.
del fluir y aniquilar, que es lo decisivo en la fi- Y esa reunificación se produce con la muerte, con la ani-
losofía dionisiaca: el decir sí a la antítesis y a la quilación de las individualidades. Por eso es la muerte el
guerra, el devenir, el rechazo radical incluso del placer supremo, en cuanto que significa el reencuentro con
el origen. Morir no es, sin embargo, desaparecer, sino sólo
concepto mismo de «ser»”26. Pero esa afirmación sumergirse en el origen, que incansablemente produce nue-
oscila entre el placer y el hastío. Placer en lo que va vida. La vida es, pues, el comienzo de la muerte, pero la
respecta a la desaparición de los límites mientras muerte es la condición de nueva vida. La ley eterna de las
que el hastío, por su parte, se debe al retorno de cosas se cumple en el devenir constante. No hay culpa, ni
la conciencia cotidiana y su vivencia. Se genera en consecuencia redención, sino la inocencia del devenir.
Darse cuenta de esto es pensar trágicamente. (Sánchez Pas-
un horror frente a lo dionisiaco desencantado que
cual, 2015; p. 24).
se asemeja a un desgarramiento. Lo dionisiaco se
horroriza de la conciencia cotidiana y viceversa:
La controversia generada a partir de la
entre ambas, actúa la voluntad de vida como afir-
obra de Nietzsche no constituía, vista retrospecti-
mación e inventiva encubierta bajo la capa del
vamente, una lucha de filólogos eruditos. Lo que
delirio o de la ilusión. Velo de la belleza o con-
estaba llevando a cabo Nietzsche, era la inmer-
suelo metafísico.
sión de una nueva propuesta filosófica: la visión
Nietzsche redobla la apuesta y dice que
nueva del mundo, el pensamiento trágico.
la doctrina del “eterno retorno” (entendido como
El pensamiento trágico es la intuición de
ciclo incondicional e infinitamente repetido de
la unidad de todas las cosas y su afirmación con-
todas las cosas) podría haber sido enseñada tam-
siguiente: afirmación de la vida y de la muerte, de
bién por Heráclito. Entonces, se comprenden de
la unidad y de la separación. Mas no una afirma-
tal afirmación por parte de Nietzsche, al menos
ción heroica o patética, no una afirmación titánica
dos cosas: por un lado, que el pensamiento más
o divina, sino la afirmación del niño de Heráclito,
abismal, el cual corresponde a la tarea más im-
que juega junto al mar. (Sánchez Pascual, 2015:
portante encomendada a Zaratustra, se encuentra
24).
esbozada en El nacimiento de la tragedia (1872).
Por otro lado, la comparación entre Heráclito y
Conclusiones finales
Zaratustra exalta la influencia del filósofo griego
en el pensamiento nietzscheano, idea a la cual E.
El desarrollo de la tragedia griega prepara
Fink en su obra La filosofía de Nietzsche27 alude
en Nietzsche una inmensa esperanza para que Za-
incansablemente.
ratustra despliegue su rol en el mundo. El filósofo
Según redacta Sánchez Pascual en su
de Röcken promete una edad trágica. El presente
“Introducción” a El nacimiento de la tragedia
socrático en el que se encuentra inmersa la cul-
(1872), de todo el contenido abordado por Niet-
tura, no sofoca ni extingue por completo la lla-
zsche en su obra, lo más importante y con aquello
ma dionisiaca de la creatividad y de los instintos.
que el lector debe quedarse, es con lo que se dice
Nietzsche insiste con que no se debe renunciar al
sobre la vida. Además, asegura que Nietzsche
espíritu dionisiaco de la música porque permane-
nunca fue más allá de lo propuesto en su libro. En
ce latente y oculto. El nacimiento de la tragedia
todo caso, expresa lo mismo con otra óptica, con
(1872), vista en retrospectiva, presenta la imagen
perspectivas y reformulaciones distintas. Sán-
del artista ditirámbico como la figura preexis-
chez Pascual resume la problemática de la obra
tente de Zaratustra. El camino hacia Zaratustra,
con las siguientes palabras:
como nuevo estilo de artista, comienza a gestarse
a partir de la ruptura entre Nietzsche y Wagner
Lo que Nietzsche expone en este escrito es su intuición y
su experiencia de la vida y de la muerte. Todo es uno, nos en el festival de Bayreuth. El Parsifal, entre otras
dice. La vida es como una fuente eterna que constantemen- cosas, han producido el quiebre y distanciamien-
to, por parte de Nietzsche, de aquel mundo que lo
entusiasmaba y sesgaba en su juventud. Aquella
26 EH, KSA 6, “El nacimiento de la tragedia”, §3, p. 89.
27 Fink, Eugen (1985), La filosofía de Nietzsche, Madrid, ruptura que provoca la emancipación del pensa-
España: Alianza. miento nietzscheano, deja ver su forma a través
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Symploké revista filosófica octubre 2018

de Humano, demasiado humano (1886). El es-


píritu libre adviene como la transfiguración del
concepto de genio; la metafísica de artista, por
su parte, muta en fisiología de artista y, posterior-
mente, en la función de filósofo artista. Todos los
pasos dados por Nietzsche (primeros esbozos,
conferencias, discusiones, admiraciones y ruptu-
ras) lo han conducido a ser el que tuvo que ser.
Nietzsche trazó, a partir de su primera obra pu-
blicada, el camino de su pensamiento filosófico.
Obra a la que vuelve incansablemente a repensar
y reescribir según las diversas experiencias que le
acontecen.

Bibliografía

Cano, Germán (2010), “Estudio introductorio”,


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Fink, Eugen (1985), La filosofía de Nietzsche,
Madrid, España: Alianza
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pura, Buenos Aires, Argentina: Colihue.
Niemeyer, C. (Ed.). (2012), Diccionario Niet-
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Nietzsche, Friedrich, (2013), Más allá del bien
y del mal, Madrid, España: Alianza.
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la tragedia, Madrid, España: Alianza.
_________________ (2013), Ecce Homo, Ma-
drid, España: Alianza.
Safranski, Rüdiger (2004), Nietzsche. Biogra-
fía de su pensamiento, Barcelona, España:
Tusquets.
Sánchez Pascual, A. (2012), “Introducción”,
en El nacimiento de la tragedia de F.
Nietzsche, Madrid, España: Alianza.
Wagner, Richard (2008), El anillo del Ni-
belungo, Madrid, España: Turner.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

Intervista
Luca Vanzago*

Alejandro Gutiérrez
Estudiante Lic. Filosofía- UNSAM

Perché ha scelto la carriera di filosofia e come confortato, mi ha convinto della validità di que-
è stato il suo approccio a questa? sta opzione, quindi sono andato avanti e poi ho
studiato anche altrove, sono andato in particolare
Io devo dire che mi sono spesso chiesto a studiare a Napoli, per un po’ di tempo e poi so-
perché avessi scelto filosofia. Perché oggettiva- prattutto, per sei anni, a Lovanio dove ho fatto
mente quello che è successo è che io ho cono- il master e il dottorato in un’università cattolica,
sciuto la filosofia a scuola, al liceo -perché qua anche se molto poco tradizionalista, molto avan-
in Italia si insegnava, si insegna ancora un corso zata in realtà, molto aperta. E lì a Lovanio c’è
di filosofia di tre anni, negli ultimi tre anni del il famoso archivio Husserl dove risiedono tutti i
liceo- e quando io ho cominciato a frequentare, manoscritti di Husserl che sono stati portati lì dal-
a sentire le lezioni di filosofia a scuola mi sono la Germania nel 1939 grazie al fatto che ci fu un
subito interessato e da un certo punto di vista ho interessamento di un religioso belga, padre Leo
detto: “questa è la mia via, la mia strada”. van Breda, che grazie al passaporto diplomatico
Però a posteriori devo dire che ho scelto ruiscì a portare in Belgio e quindi a salvare dalla
filosofia perché di fatto ho trovato nella filosofia distruzione tutto il lascito manoscritto di Husserl
tutta una serie di domande e di metodi che incon- che, essendo ebreo, sarebbe stato distrutto.
sapevolmente, effettivamente, erano questioni Diciamo che tutte queste tappe mi hanno
che io già mi ero posto fin da ragazzino, per cui dato qualcosa in più e poi forse un po’ più per
invece di fare tante cose diverse che potevano es- caso che per altro ma sono tornato qua e ho vin-
sere ognuna di esse valida -perché i miei interessi to un posto di ricercatore qua e... per me sono
erano tanti, io tra l’altro pensavo inizialmente di tornato a casa, ma questo non era previsto, da
fare fisica- ho capito che la filosofia mi permette- un certo punto non pensavo proprio di essere...
va di tenerle insieme, cioè la pluralità di interessi non pensavo neanche che sarei tornato in Italia.
che avevo era comunque una pluralità unitaria. Pensavo di cercare lavoro negli Stati Uniti perché
Grazie al fatto che la filosofia non parla di una con un dottorato di Lovanio si può tentare la car-
cosa in particolare, ma semmai parla di come si riera americana diciamo, è un titolo riconosciuto
parla delle varie questioni, quindi ho scelto filo- anche in America.
sofia in un certo senso proprio anche perché ho
trovato a portata di mano questa possibilità. Questa scelta di ritornare in Italia è stata
Poi ho studiato qua, a Pavia, e qui ho avu- esclusivamente accademica o c’è anche un al-
to comunque una formazione filosofica che mi ha tro motivo?
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Symploké revista filosófica octubre 2018

In realtà c’è un certo elemento di caso per- nista, espatriato in Germania, studioso di filosofia
ché io avevo fatto a suo tempo un concorso per e di matematica che mi ha molto aiutato, diciamo
insegnare nei licei, però non pensavo minima- dal punto intellettuale, a Napoli dove lui era spes-
mente di insegnare nei licei, non era quello che so invitato all’istituto italiano di studi filosofici,
volevo fare. Però ad un certo punto il Ministero importantissima fondazione creata dall’avvocato
dell’ istruzione che gestisce queste cose mi man- Marotta -che purtroppo anche lui è morto qual-
dò un telegramma in cui si diceva che avevo vin- che giorno fa- istituzione meritoria perché offriva
to una cattedra liceale. Io ero a Lovanio, stavo piccole borse di studio ai giovani per poter co-
studiando per il dottorato e qui mi sono trovato munque studiare, per poter approfondire i loro
un po’ in difficoltà nel decidere come fare, però interessi con dei seminari di una settimana che
ho pensato: “torno in Italia, provo, vedo come va. l’istituto affidava a importanti studiosi, europei,
Alla peggio mi licenzio”, però una cattedra licea- ma a volte non soltanto europei, e a cui parte-
le è comunque una cosa che non si butta via così. cipavano molti ragazzi di fatto, di solito appena
Quindi sono tornato a Pavia e nel tornare a Pavia laureati che cercavano ancora la loro strada, per
sono anche un po’ rientrato in contatto... non è cui ho avuto questa fortuna di conoscere questa
che avessi mai del tutto perso i contatti con i miei gente straordinaria che credeva comunque nella
referenti qui, cioè il mio relatore di tesi che aveva importanza di aiutare i giovani a studiare.
lo studio dove ci troviamo noi qui ora, si chia- Economicamente la cosa non era comun-
ma Fulvio Papi e la mia correlatrice di tesi che que semplice, i soldi erano pochissimi, però ci
è la professoressa Borutti che ha insegnato qui si arrangiava, magari si dormiva in treno ma si
fino all’anno scorso. Però sono diciamo rientrato viaggiava, si andava là e grazie a loro ho potuto
quindi in giro e poi quando è uscito il concor- comunque proseguire in un momento in cui te-
so per ricercatore l’ho fatto e ho vinto insomma, mevo che sarebbe stato difficile.
quindi mi è andata bene. Però è stato un po’ un Quindi diciamo che pur nella difficoltà
caso che sia tornato qua. di cercare la propria strada, secondo me è stato
anche un bene, perché magari a volte capita che
Come sono stati i suoi primi passi da studioso qualcuno abbia la strada spianata e vada avanti
all’università, i suoi primi anni all’università? rapidamente e poi magari si blocchi dopo perché
non ha dovuto in qualche modo far fatica, dicia-
Io devo dire che a differenza di altri ho mo così. Quindi non riesce a sviluppare del tutto
dovuto un po’ trovare la mia via da solo. Perché le proprie potenzialità oppure non si confronta
all’epoca a Pavia era molto difficile entrare in con problemi che se affrontati e risolti producono
università, c’erano pochissimi posti e in partico- una reale crescita. A posteriori, visto che mi è an-
lare gli allievi di Papi sapevano che dovevano in data bene, dico che è stata la cosa giusta per me,
qualche modo andare a cercare fortuna altrove, però insomma all’epoca non era banale comun-
perché qui le entrate erano assolutamente bloc- que la fatica. Questo da un punto di vista umano.
cate. Allora, anch’io sono entrato in quest’ottica, Dal punto di vista dei miei studi io mi ero
quindi ho cominciato a guardarmi attorno, infat- laureato con una tesi sul concetto di tempo in un
ti sono andato a studiare a Napoli, per esempio. pensatore inglese, prima matematico poi filosofo,
E in generale, pur sempre avendo buoni rapporti che si chiama Alfred Whitehead e quindi poi ho
con i miei maestri, però ho sviluppato delle linee sviluppato un po’ di tematiche che erano impli-
di ricerca autonome, mi sono connesso ad altri cite in quella tesi, in particolare il problema del
ricercatori. rapporto matematica filosofia, dei modelli mate-
Adesso, visto che stiamo parlando degli matici della scienza, ed è anche per questo che
inizi, voglio ricordare il nome di un uomo straor- mi sono messo in contatto con Toth, e questo a
dinario che purtroppo è morto da qualche anno, sua volta mi ha permesso di conoscere anche tut-
che si chiamava Imre Toth. Lui era nato in un ta una serie di altre problematiche che mi hanno
posto che quando è nato lui era in Ungheria ma fatto riscoprire la fenomenologia e poi quando
dopo la seconda guerra mondiale fu annesso alla sono andato a Lovanio ho trovato entrambe le
Romania, cioè la città di Timisoara. Ebreo, perse- cose perché lì c’è l’archivio Husserl e c’era anche
guitato prima dal regime filo-nazista ungherese e un piccolo archivio Whitehead quindi ho appro-
poi anche con dei problemi nella Romania comu- fittato di entrambe le opere.
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incoraggiare a lavorare, ma incoraggiare a lavo-


Succede spesso che passa molto tempo perché rare non significa dire: “bravo, bravo” e basta, si-
gli studenti si sentano pronti a produrre qual- gnifica dare il metro del lavoro già compiuto, dei
cosa o dire qualcosa su un autore o un tema. risultati già acquisiti e dire invece dove le cose
Quando ha sentito Lei che era pronto a pro- vanno ancora sviluppate, approfondite, riviste a
durre, quando era studente o invece quando volte. E non è facile perché poi viviamo in un
ha cominciato a fare lavori di ricerca? mondo in cui i rapporti umani sono importantis-
simi, cioè c’è anche soprattutto una dimensione
È un’ottima domanda questa perché og- di... io direi anche di amicizia tra maestro e allie-
gettivamente noi viviamo in un’ epoca in cui la vo, comunque io la vedo così, per cui può diven-
pressione a pubblicare è sempre più forte perché tare un po’ difficile dire al proprio allievo: “devi
di fatto la selezione avviene anche, non solo ma ancora lavorare”, perché può essere vissuta male,
in gran parte, sulla base delle cose già pubblicate, ci possono essere elementi anche caratteriali, ecc.
ma fin dai livelli più bassi perché adesso anche Quindi bisogna essere molto onesti, schietti e cre-
fin dal dottorato, fin dall’ammissione al dottorato are le basi, i presupposti per uno scambio comun-
ovviamente chi ha pubblicazioni parte avvantag- que mirante alla ricerca, non all’affermazione.
giato, quindi i giovani sono molto spinti a pub-
blicare e devo dire che secondo me è un po’ un Perché si è avvicinato alla fenomenologia, par-
errore perché inevitabilmente le pubblicazioni ticolarmente a Husserl, a Heidegger e alla fe-
forzate rischiano di essere anche premature, su- nomenologia francese?
perficiali. Certo, ci sono anche i casi di persone
di grande talento che sono già in grado a 25 anni Questo è in parte appunto l’effetto del
di scrivere trattati, ma è più l’eccezione che la re- percorso che ho fatto io, che è un percorso un
gola. Quindi quello che vedo è che in realtà molta po’ accidentato e casuale, però poi a posteriori di
gente pubblica generalmente grazie al fatto che nuovo uno ci vede anche una necessità. Cioè di
vengono aiutati dai propri maestri ma prematu- nuovo anche per quanto riguarda più specifica-
ramente. mente la fenomenologia, io qui, a Pavia, la feno-
Da questo punto di vista di nuovo in un menologia non l’avevo praticamente studiata. La
certo senso a me è andata bene perché non ho premessa è che ero studente negli anni ottanta e
potuto pubblicare subito, quindi magari anch’io qui in Italia negli anni ottanta, almeno per quan-
all’epoca avrei voluto avere dei titoli, perché to riguarda la filosofia cosiddetta continentale, i
come tutti i giovani mi ponevo il problema di es- nomi di riferimento erano essenzialmente due:
sere in grado di affrontare dei concorsi e quindi Heidegger e Derrida. Qui a Pavia in particolare
di non essere svantaggiato rispetto agli altri. Però non era proprio solo così perché grazie all’inse-
è andata com’è andata ed io le prime cose le ho gnamento di Fulvio Papi avevamo comunque un
pubblicate attorno ai trent’anni e penso che sia solido sostrato di studi kantiani, hegeliani, mar-
meglio perché in un certo senso bisogna appunto xiani anche, e marxisti, e gli sviluppi che que-
faticare molto e maturare molto prima di poter sti pensatori avevano avuto nel novecento e per
scrivere cose sensate. Voglio dire che uno può an- esempio si leggeva molto Foucault. Però devo
che scrivere bene subito, perché magari è capace dire che poi alla fine la moda, anche tra i gio-
di scrivere, perché ha imparato il mestiere, ma vani dettava legge; quindi Heidegger, Heidegger,
se sono cose originali devono venire comunque Heidegger e Derrida.
dopo uno sforzo prolungato e diversificato, cioè Ora io come tutti loro da un certo punto
ci vuole proprio davvero il lavoro del concetto, di vista mi sono trovato a imparare con quello
la fatica del concetto come disse Hegel. Quindi che si faceva e quindi Heidegger. Ora Heidegger
credo che sia giusto pensare di essere pronti pri- è un pensatore che può essere letto in tanti modi.
ma di pubblicare qualcosa, però mi rendo conto All’epoca era soprattutto forte, almeno qui in
che è molto difficile che uno da solo sappia quan- Italia l’interpretazione ermeneutica di Heidegger
do è pronto, quindi ci vuole anche uno sforzo da anche perché era quella che aveva diffuso Gianni
parte di chi valuta, di essere onesto e schietto nel Vattimo, che ovviamente era un nome, è un nome
giudicare il lavoro dei propri allievi. Perché qui ancora oggi ma all’epoca certamente tra i più in-
subentra anche uno scrupolo, quello di comunque fluenti qui in Italia, forse non solo. Quindi c’erano
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interpretazioni di Heidegger che si accentravano Lei ha scritto un libro, insieme a F. Savoldi


sul secondo Heidegger, Heidegger come pensato- e M. Ceroni intitolato La coscienza. Come si
re del linguaggio, poi la mediazione di Gadamer, può capire il rapporto tra la fenomenologia e
quindi diciamo un certo tipo d’interesse per la fi- le neuroscienze?
losofia heideggeriana. Ma io mi sono in qualche
modo reso conto che Heidegger poteva essere Allora intanto due parole su quel li-
interpretato meglio, compreso meglio, se si risa- bro perché ha una storia anche quello. Faustino
liva alla sua formazione fenomenologica. Quindi Savoldi, che anche lui purtroppo è scomparso da
il mio è stato un percorso all’indietro, cioè dal un anno, era un importante neurologo pavese, di-
secondo Heidegger e da Derrida, che del secondo rettore anche di quello che all’epoca si chiama-
Heidegger è in un certo senso uno sviluppatore va istituto di neurologia Casimiro Mondino di
anche se un critico, sono risalito allo Heidegger Pavia. Ma Savoldi, pur avendo una formazione
di Essere e tempo e dei corsi che intanto venivano schiettamente scientifica, di neurologo e anche di
pubblicati anche in italiano, via Essere e tempo psichiatra, aveva avuto anche una notevole for-
dove Heidegger era ancora molto un fenomenolo- mazione filosofica seguendo i corsi di importan-
go, anche se critico nei confronti di Husserl. E da ti filosofi che all’epoca insegnavano sia a Pavia
Heidegger fenomenologo sono risalito a Husserl sia a Milano, conosceva per esempio Enzo Paci
che mi ha offerto in un certo senso la base e poi da e aveva avuto questa intuizione che all’epoca era
lì, anche perché intanto io avevo appunto lavora- forse, da una parte più diffusa che non oggi, ma
to alla tesi su Whitehead -e qui in Italia c’era sta- dall’altra non era poi così comunque sviluppata,
to un filosofo che si chiama Enzo Paci che negli di mettere insieme la fenomenologia e lo studio,
anni 50 aveva introdotto il pensiero di Whitehead diciamo di quello che oggi chiameremmo neu-
in Italia e poi aveva operato un’interessantissima roscienze che all’epoca non si chiamavano così,
sintesi tra Whitehead e la filosofia cosiddetta del però l’idea era comunque di studiare appunto la
processo e la fenomenologia- e allora grazie an- neurologia, quindi il sistema nervoso, il cervello
che un po’ a questa suggestione - perché poi Paci in particolare ma non soltanto, e poi in generale i
ci ha lavorato ma ha lasciato molto da fare agli fenomeni legati al corpo inteso in senso però me-
altri - ho messo insieme un po’ di queste cose, dico e biologico, quindi non dal punto di vista di
quindi sono, diciamo, diventato uno studioso di quello che la fenomenologia chiama “il corpo”.
fenomenologia trovando in essa i presupposti te- Proprio per questo Savoldi aveva scritto
orici che mi sembravano più adeguati. Quindi un anche dei libri in cui offriva una chiave di let-
lavoro in qualche modo di riorientamento dello tura fenomenologica dei problemi neurologici in
sguardo, mio e dei problemi che mi sembravano generale o comunque legati all’approccio neuro-
importanti e quindi la fenomenologia è diventata biologico al cervello e alle esperienze, nella con-
un po’ la prospettiva di base, perché poi fenome- vinzione che invece un certo approccio di tipo
nologia vuol dire tante cose, è un linguaggio, è più materialistico-naturalistico, il quale è proprio
un metodo al di là dei pensatori, al di là dei nomi. degli approcci diciamo anglosassoni di filoso-
E quindi poi mi sono dedicato soprattutto ad al- fia della mente, non fosse adeguato a compren-
cuni temi fenomenologici, tipo essenzialmente la dere l’aspetto propriamente scientifico. Quindi,
temporalità innanzitutto, poi i temi della alterità, Savoldi non faceva quello che pure si faceva
dell’intersoggettività e poi ancora più recente- all’epoca, vale a dire opporre un certo tipo orga-
mente quelli della emozione, sensazione, sentire, nicistico-materialistico di neuropsichiatria con la
come dice Merleau-Ponty che sono temi, perché fenomenologia che invece doveva semplicemen-
ogni pensatore fenomenologico da la sua versio- te coprire il lato spirituale, e non seguiva neanche
ne, però poi l’importante è seguendo il precetto necessariamente l’approccio della psicopatologia
fenomenologico andare alle cose stesse, quindi che era nata con Jaspers e che qui in Italia ave-
cercare di studiare il problema al di là di quello va avuto notevoli sviluppi con pensatori come
che i singoli dicono. Quindi la fenomenologia mi Carniello, Calvi, Borgna e altri. Adesso anche
ha aperto un metodo particolare di indagine che quella è una corrente quasi dimenticata, ma per
mi è sembrato appunto quello più fecondo e più anni ha avuto invece un peso notevole, soprattut-
promettente. to dentro i corsi di laurea di medicina e psichia-
tria.
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Ma Savoldi faceva una cosa che all’epoca postazione li avrebbe risolti, ma questo della co-
forse era abbastanza, parlo degli anni 70, abba- scienza rimane un problema insoluto perché non
stanza inusuale, che invece poi qualcun altro ha si spiega come in un mondo fisico si dia qualcosa
sviluppato molto, vale a dire: una feconda inter- che chiamiamo coscienza che sembra non essere
connessione di linguaggi tra fenomenologia e di- fisico. E quindi da questo punto di vista la feno-
ciamo per brevità neuroscienze. Oggi questa cosa menologia invece parte da un’indagine sulla co-
è già più frequente perché grazie a Rizzolatti, scienza stessa non dalla base materiale della co-
Gallese e altri membri della scuola di Parma, ef- scienza. Questo poi naturalmente implica che si
fettivamente il dialogo tra fenomenologia e neu- possa e si debba cercare una convergenza e allora
roscienze è già più comune, ma anche se non da ci sono molti autori che ottimamente cercano da
tutti accettato però è una cosa che si sente dire. entrambi lati della barricata di andarsi incontro,
Io mi sono trovato un po’ coinvolto da di venirsi incontro invece di combattersi come è
Savoldi in un suo progetto che poi è stato quello stato più spesso.
che è sfociato nella pubblicazione del volume di Il corso che farò tra poco di gnoseologia
più di mille pagine dal titolo La coscienza perché tra l’altro si occupa di questo perché discuteremo
entrai in contatto con Savoldi e cominciando a di alcuni interpretazioni contemporanee del rap-
parlare lui mi invitò a far parte di un gruppo che porto tra fenomenologia e neuroscienza. Quindi
discuteva queste tematiche a partire dalle sue ope- questo è diciamo l’esito di un percorso che era
re, parlo di Savoldi, e nella prospettiva appunto nato per altri motivi ma che mi ha portato lì.
di metterle insieme, di raccogliere queste temati-
che e fare un volume. Quindi da questo punto di Cosa può dire della fenomenologia e il rappor-
vista la collaborazione con Savoldi è nata così, di to con questioni come il razzismo, l’omofobia
nuovo un po’ per caso e un po’ per necessità. Per e la rappresentazione politica?
caso perché non era previsto, non era immaginato
da nessuno dei due, per necessità perché una vol- Ci sono molti problemi connessi qui per-
ta che ci siamo conosciuti abbiamo cominciato ché da un certo punto di vista questi problemi
a parlare e abbiamo trovato questa comunità di fanno riferimento tutti a come comprendere, dal
interessi. punto di vista della esperienza umana, fenome-
E questo però probabilmente a sua volta ni che oltre a essere sempre più diffusi, penso
si spiega anche col fatto che la fenomenologia è appunto ad esempio alla rinascita dei nazionali-
una prospettiva che interessa direttamente chi si smi giocata anche su basi etniche, quindi qui in
occupa di mente perché oggettivamente la feno- Europa in particolare questa paura per i migranti
menologia è, non soltanto ma in gran parte anche che è fondamentalmente una paura razzista per
una riflessione sulla esperienza, quindi su ciò che un certo genere di persone che sono viste, anche
possiamo chiamare mente; però una riflessione se non lo si dice apertamente, come inferiori nel
molto diversa da quella che si trova, per esempio senso di essere comunque portatrici di una cul-
in ambito appunto anglosassone; cioè la differen- tura violenta, discriminante e inadeguata. In re-
za è che la filosofia della mente anglosassone, pur altà se questo sia così è tutto da vedere però è
con tutte le differenze sempre più articolate che chiaro che il discorso politico di base è proprio
ci sono adesso, è una riflessione in terza persona, quello che non si vogliono i migranti perché i
cioè si parla della coscienza come se non ci fosse migranti sono musulmani e i musulmani sono
un io ma si fosse di innanzi a una cosa. Invece la persone che non vanno bene, non ci piacciono,
fenomenologia parte da una riflessione in prima non sono cristiani -anche se poi chi lo dice ma-
persona, quindi quando parla di coscienza parla gari non sa nulla di quello che vuole dire essere
della mia coscienza, di colui che ne parla. Quindi cristiano. Quindi, secondo me la fenomenologia
è un approccio diverso che consente di vedere qui può giocare un ruolo importante nella misu-
meglio come affrontare determinati problemi, tra ra in cui da una parte insiste sulla necessità di
cui quello della coscienza stessa che è come dice tenere ferma l’attenzione sulla universalità della
Chalmers: “il problema difficile” nel senso che razza umana, diciamo. Ovviamente la fenomeno-
la scienza sembra -poi questo può essere anche logia non parla di razza, ma parla di umanità e
discusso- ma la scienza sembra in grado ormai di la fenomenologia almeno con Husserl, ma cer-
risolvere tanti problemi nel senso che la sua im- tamente con altri più recenti, ha sempre insistito
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sulla questione trascendentale, cioè sul fatto che ri contributi -perché tanti sono gli autori che ne
i soggetti umani sono soggetti umani e le diffe- hanno parlato- al problema dell’alterità. Un pro-
renze non hanno un valore ontologico, non sono blema che ovviamente poi non è un problema di
differenze reali, senza disconoscere però -e que- scuola o di corrente filosofica e quindi possiamo
sto è l’altro aspetto secondo me importante della benissimo anche far riferimento ad altri pensato-
fenomenologia- che se è vero che noi siamo tutti ri; però rimane il fatto che spesso quando si parla
esseri umani, tutti partecipiamo di questa, dicia- di alterità ci sono due alternative: o quello del po-
mo, condizione generale che è l’intersoggettivi- litically correct americano per cui le alterità non
tà trascendentale di cui parla Husserl, dall’altra sono neanche da considerare e questo però porta
parte però è anche vero che bisogna con ciò pur ad alcuni esiti paradossali del tipo di abolire i ge-
descrivere -perché questo fa la fenomenologia, neri grammaticali perché usare i generi gramma-
descrive- descrivere poi le diversità, le diversità ticali sembrerebbe discriminatorio quando invece
che si possono e si devono comprendere anche se si limita a seguire la regola di ogni lingua e ci
non devono essere con ciò ritenute né causa né sono lingue che non hanno il neutro e che devono
tanto meno motivo sufficiente per discriminare. per forza adeguarsi, ma anche quelli che hanno
Perché l’alternativa è quella di un universalismo il neutro comunque distinguono i generi maschi-
astratto che non parla alla gente oggi perché è un le e femminile, quindi quello è un atto censorio
discorso moralistico cioè “siamo tutti uguali”. In nei confronti della lingua che a volte può essere
realtà questo discorso non trova più corso pro- spesso violento in nome di una battaglia contro
prio perché evidentemente l’esigenza di costruire la violenza discriminatoria. E lì è fin troppo fa-
una personalità che possa far fronte ai problemi cile poi allora dire questi discorsi non portano da
-quindi un’esigenza diciamo anche psicologica, nessuna parte, hanno prodotto degli eccessi as-
empirica di ognuno di noi- è un dato di fatto reale surdi. E che sia troppo facile lo vediamo dal fatto
e non basta per evitare la deriva razzistica -o per che persino Trump ha denunciato gli eccessi del
altri versi la deriva omofobica che riguarda ad politically correct del discorso gender. Quindi, è
esempio un altro genere di discriminazione che evidente che sono bersagli molto semplici. A cui
questa volta passa per la scelta sessuale, ma che però si oppone allora il discorso della distinzione
comunque si trova radicata sullo stesso terreno, tra io e altro che porta, nel lungo periodo, in defi-
la costruzione della soggettività- non basta un di- nitiva alla discriminazione tra io che sono quello
scorso che si affidi ai buoni sentimenti, cioè “non giusto e l’altro che è quello sbagliato. Quindi la
è giusto” o “non è bello”, “non dobbiamo” perché fenomenologia permette di comprendere perché
è ovvio che di fronte a certe paure, poi magari si ponga il problema della alterità senza con ciò
paure rinfocolate da un discorso politico folle e né condannarsi a un discorso sterile, come quel-
criminale - qual è quello dei movimenti politici di lo politically correct, né a un discorso violento
destra che oggi stanno di nuovo tornando a sof- come di fatto quello del razzismo, del naziona-
fiare su questo evento della paura per il diverso, lismo. Io credo che la fenomenologia offra degli
quello io lo condanno e lo denuncio apertamen- strumenti teorici fondamentali, ad esempio cito
te… però queste paure ci sono e quindi bisogna ora soltanto un nome, un fenomenologo tedesco
comprenderle, cioè capire perché ci sono, questo attuale che si chiama Bernhard Waldenfels che ha
non significa giustificare, significa comprendere scritto cose fondamentali sul tema della alterità,
da dove vengono per poi eventualmente anche far ancora troppo poco noto e che varrebbe la pena di
fronte, cioè trovare un discorso che sia filosofi- studiare meglio e di conoscere. Qui in Italia sono
co, sia psicologico, sia anche politico che possa usciti un paio di libri tradotti delle sue opere, ma
adeguatamente rispondere a questi problemi. Ora io spero che possa essere conosciuto di più. Ci
per farlo bisogna comprendere e la fenomenolo- sono alcuni traduzioni in inglese ma la gran parte
gia questo fa alla fine, cioè cerca di comprendere. della sua produzione è ancora in tedesco e il tede-
Comprendere vuol dire qui capire come si strut- sco oggi lo leggono in pochi.
tura una personalità, quindi come si struttura un
soggetto e un soggetto si struttura anche nella in- Di solito finiamo con la domanda “cosa è la
terrelazione con la propria alterità. Qui il discor- filosofia”, ma mi sento tentato di domandare
so della alterità è fondamentale. cosa sia la coscienza. Alcuni preferiscono non
Forse la fenomenologia ha dato i maggio- rispondere, così che scelga Lei se vuole farlo.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

Io credo che sia sempre opportuno cerca- cata e questo è fare filosofia, se vogliamo.
re di rispondere e non sottrarsi alle domande an-
che se ovviamente in questo caso sono domande
enormi e uno non può immaginare di cavarsela a * Professore associato di Filosofia Teoretica all’U-
buon mercato. niversità degli studi di Pavia. Nato a Pavia il 21
Sulla coscienza mi limiterò a una battuta: aprile 1964. Laureato nel 1988 con una tesi sul-
la coscienza non è una cosa. Quindi si potrebbe la temporalità in Whitehead (relatore prof. Fulvio
rispondere alla domanda: “cos’è la coscienza?” Papi, co-relatori proff. Silvana Borutti e Lorenzo
dicendo: se cerchiamo una definizione della co- Magnani). Ha conseguito nel 1992 l’abilitazione
scienza in termini di cosa non la troveremo, la all’insegnamento della filosofia e della storia nei
coscienza è una relazione. È una relazione di re- licei; nel 1994 il diploma di perfezionamento in
lazione perché innanzitutto è una relazione a se filosofia contemporanea presso l’Istituto S. Orso-
stessa, per cui... questo soltanto per carità un pri- la Benincasa di Napoli; nel 1995 il Master of Arts
mo, minimo abbozzo di una risposta che porte- presso la Katholieke Universiteit Leuven, e nel
rebbe lontano. 2002 il PhD in philosophy presso la stessa univer-
Sulla filosofia. La filosofia è il domandar- sità. Ha inoltre frequentato vari corsi di perfezio-
si innanzitutto che cosa ci sia, che cosa esista, namento in filosofia presso l’Istituto Italiano Studi
che cosa noi ci troviamo costantemente a dover Filosofici di Napoli. È stato redattore della rivista
affrontare i più delle volte senza renderci conto Oltrecorrente e attualmente è membro del comitato
di che cosa tutto questo implichi, quindi avendo scientifico di Paradigmi, di Chiasmi International e
delle opzioni filosofiche implicite già precostitu- di Discipline filosofiche, e membro dello advisory
ite e i più delle volte anche semplificatrici. Ad board di Philosophical Inquiries. Collabora con
esempio, ne parlavamo poco fa, il razzismo è Aut-Aut. Fa parte dello European Centre for Pro-
anche una filosofia, ma chi lo fa, chi lo sceglie, cess Philosophy, del Merleau-Ponty Circle e della
chi lo segue non lo sa o non lo vuole sapere per- Società italiana di studi su Merleau-Ponty. Fa par-
ché generalmente c’è un atteggiamento di critica te del consiglio direttivo della Società Italiana di
nei confronti della filosofia, di disprezzo. Quindi Filosofia Teoretica.
la filosofia innanzitutto è una riflessione su ciò
che esiste, però è anche una riflessione su questa
stessa riflessione, quindi una riflessione che cerca
anche di problematizzare il modo stesso con cui
si affrontano questi problemi. Da questo punto
di vista è un’impresa estremamente complessa
e forse impossibile perché deve fare sempre co-
munque due cose: cioè deve chiedersi che cosa
c’è ma deve chiedersi cosa vuole dire chiedersi
questa stessa domanda. E questo però spiega per-
ché ci sono state così tante dottrine filosofiche
e ci sia anche uno sviluppo filosofico che ha un
suo senso, non è meramente casuale, non è una
sequenza senza senso, ma al contrario mostra di
avere tante ragioni, non una sola, non siamo più
all’epoca di Hegel e della sua storia della filoso-
fia, ma tante chiavi di lettura, ma plausibili, che
mostrino allora però anche perché siamo qui oggi
a farci ancora certe domande e perché in un certo
senso la filosofia sia ancora forse lo strumento in-
tellettuale più prezioso che l’uomo abbia, cioè la
capacità di relativizzare, di criticare, di prendere
le distanze, di non aderire a niente dogmatica-
mente, fosse questo dogma persino quello della
scienza. Anche la scienza deve e può essere criti-
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Symploké revista filosófica octubre 2018

Sensatez y sentimiento
El discurso de la pasión
frente al de la razón ilustrada

Guillermo Portela
Estudiante Prof. en Letras UNSAM

La ilustración del entendimiento sólo merece respeto el principio de una eclosión tan significativa que
si se refleja en el carácter, pero con eso no basta: habría que remontarse a la Edad Media para en-
surge también, en cierto modo, de ese mismo carácter, contrar un fenómeno de similar relevancia.
porque el camino hacia el intelecto lo abre el corazón. De esta forma, las fases del desarrollo de
Friedrich Schiller, Octava carta en la literatura que se siguen o se superponen en es-
La educación estética del género humano tos años de finales de siglo son: “la Ilustración,
el Sturm und Drang, el Clasicismo de Weimar,
Introducción que concluye con la muerte de Schiller en 1805,
y paralelamente a él, el primer Romanticismo de
Mientras los movimientos ilustrados de Jena en Berlín” (Raposo Fernández, 2006: 11).
Francia e Inglaterra estuvieron profundamente Es así que, frente a los fríos modelos del
enlazados con el progreso real, político-social, la Neoclasicismo de origen francés, surge este mo-
ilustración alemana no tuvo ningún fundamento vimiento pre-romántico que se denominó Sturm
social tan unívocamente determinante; “fue la und Drang (tormenta e ímpetu), que estableció
consciencia y la conciencia (moral) en el proceso como fuente de inspiración el sentimiento en
de crecimiento y búsqueda de sí mismo recorri- vez de la razón, y tuvo como modelo la obra de
do por el pueblo alemán durante el siglo XVIII” William Shakespeare. Pero sin embargo, según
(Barnhelm, 1968: 27/28). Esas indudables de- afirma Lukács, “hoy está claro que los verdaderos
bilidades de la ilustración alemana implicaban padres- del Sturm und Drang son Montesquieu,
elementos fecunda y auténticamente cargados de Diderot y Rousseau- y que la supuesta franco-
futuro, “como los comienzos del renacer del pen- fobia del movimiento se dirige aun más patéti-
samiento dialéctico o la anticipación configura- camente contra la esencia antinacional de las
dora y artística de numerosos problemas típicos pequeñas cortes absolutas alemanas” (Lukács,
del siglo XIX” (Barnhelm, 1968: 28). 1968: 68).
No obstante, aunque el impulso de la Este movimiento estético abarcó de 1767
Ilustración en general se recibe con retraso en los a 1785. Dicha reacción contra lo que era visto
países de habla alemana, en la fase ilustrada tar- como una excesiva tradición literaria racionalista
día se recupera rápidamente el terreno. Para la li- fue alentada por Johann Georg Hamann y, sobre
teratura alemana, que hasta el momento también todo, por Johann Gottfried von Herder y su discí-
se encontraba retraída con respecto al resto de pulo Johann Wolfgang von Goethe.
Europa, el último cuarto del siglo XVIII significa Las obras que vamos a analizar, Las pe-
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Symploké revista filosófica octubre 2018

nas del joven Werther de Johann Wolfgang von el Sturm und Drang, especialmente el Werther, se
Goethe y Los bandidos de Friedrich Schiller, se contraponen de modo irreconciliable” (Lukács,
encuadran dentro de este período de cambio de 1968: 69). Lo que Lukács señala es que esto es
la literatura alemana. En ellas, trataremos de rea- un contenido sumamente pobre y abstracto, aun-
lizar una lectura crítica de aquellos fragmentos que en algunas exposiciones se hinche con las
en los que se problematiza el pensamiento de la frases más grandilocuentes. “Se trata de que la
época y queda evidenciado, en muchas ocasio- Ilustración no habría tenido en cuenta más que
nes, allí donde el desborde de pasión convive y el ‘entendimiento’, el ‘intelecto’. En cambio, el
discute con las fuerzas racionales ilustradas; ma- germánico Sturm und Drang habría sido una su-
nifestando, entre otros aspectos, los ideales po- blevación del ‘sentimiento’ o el ‘ánimo’ y el ‘ins-
pular-revolucionarios de la burguesía; los rasgos tinto vital’ contra la tiranía del entendimiento”
pre-románticos como oposición a los valores bur- (Lukács, 1968: 71). Esta conceptualización, vana
gueses; la contraposición entre la personalidad y y exigua, es funcional a la exaltación de las ten-
la sociedad burguesa. dencias irracionalistas de la decadencia burguesa
y deja en un segundo plano todas las tradiciones
Werther, desventuras entre la Ilustración y el del periodo revolucionario del desarrollo de la
romanticismo burguesía.
Lo cierto es que el joven Goethe no es
Nombres como el de Jean-Jacques ningún revolucionario, ni siquiera en el sentido
Rousseau y su novela epistolar La nueva Eloisa, de aquel joven Schiller que supo producir dramas
que fue publicada en 1761 y resultó ser un nuevo de contenido social como Los bandidos. Walter
poder revolucionario, señalan un viraje decisivo Benjamin señala que Goethe “se somete una y
en la historia general de las ideas de Occidente y otra vez a la atracción por los asuntos revolucio-
el mundo. “La metamorfosis supone un rechazo a narios para luego desviarse del tema o dejarlo
la tradición clásica y neoclásica, y su reemplazo como fragmentado” (Benjamin, 1996: 143). Aun
por una teoría ‘expresiva’ del arte” (Warley, 2010: así, en esta novela, “Goethe deja que el elemen-
32/33). Es decir, una donde el sujeto se muestra to revolucionario en su juventud se exprese por
como un insondable recipiente de sentimientos. última vez en mucho tiempo” (Benjamin, 1996:
El espíritu creador ocupa la primera plana; a todo 144).
orden normativo o cualquier límite genérico se Por todo esto, señalamos que sería reducir
imponen las urgencias de su interioridad. engañosamente la significación del Werther el no
En Alemania, Goethe, quien en 1764 vió ver en él más que la configuración artística de un
publicada su novela Las penas del joven Werther, estado de ánimo sentimental exacerbado. Por eso
sigue el ejemplo de Rousseau. El intelectual gi- también, Lukács señalará (Lukács, 1968: 75) que
nebrino preanunciaba “el ciclo de la nueva sensi- las obras del joven Goethe significan una culmi-
bilidad, que, más allá de que puedan considerarse nación revolucionaria del movimiento ilustrado
algunos antecedentes, irrumpe en la Europa con- europeo, de la preparación ideológica de la Gran
tinental hacia finales del siglo XVIII y se extien- Revolución Francesa. De tal forma, vemos como
de revolucionariamente en la primera mitad del Werther aboga por la rebeldía popular con un ím-
siguiente hacia el mundo occidental en su con- petu emocional individual, una fuerza que podría
junto” (Warley, 2010: 33). Esta corriente, como ser colectiva:
ya señalamos, tiene en Alemania un nombre que
la designa clara y emblemáticamente: Sturm und ¿Te atreverías a llamar débil a un pueblo que gime bajo el
Drang. insoportable yugo de un tirano, si al fin estalla y rompe sus
En línea con esta nueva estética, en la car- cadenas? Un hombre que al ver con espanto arder su casa
ta del 9 de mayo, Werther no duda en poner la siente que se multiplican sus fuerzas y carga fácilmente con
pasión por encima de la razón: “¡Ay! Lo que yo sé un peso que sin la excitación apenas podría levantar del
puede saberlo cualquiera, pero mi corazón solo piso; un hombre que iracundo por sentirse insultado, aco-
me pertenece a mí” (Goethe, 2010: 90). mete a sus contrarios y los vence. (Goethe, 2010: 57)
Ahora bien, debemos aclarar que “es un
lugar común de la historia burguesa de la litera- Por ello, podríamos afirmar que en el cen-
tura y de la sociología vulgar que la Ilustración y tro de Las penas del joven Werther se encuentra
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Symploké revista filosófica octubre 2018

“el gran problema del humanismo revoluciona- tado, no vale más que el cobarde que se oculta del
rio burgués, el problema del despliegue libre y enemigo, por miedo a que se le venza” (Goethe,
omnilateral de la personalidad humana” (Lukács, 2010: 10/11).
1968: 75). Werther escribe a su amigo del hom- Lo que verdaderamente queremos remar-
bre de su tiempo, un ser desencantado y castrado, car es que el conflicto de Werther, su tragedia, es
él desearía un hombre completo, el hombre que ya la del humanismo burgués, pues muestra cla-
gestará la democracia burguesa revolucionaria: ramente la contradicción entre el despliegue libre
de la personalidad apasionada y la sociedad bur-
Mil veces he reflexionado, querido Wilhelm, sobre ese de- guesa misma encarnada en un Albert cauto y ra-
seo natural que tiene el hombre de ampliarse, de hacer des- zonador, genuino representante de los valores de
cubrimientos, de abarcar y dominar todo lo que le rodea; la comunidad, de la norma y las leyes; que des-
y después, por otro lado, sobre ese segundo pensamiento aprueba los arrebatos de su amigo, y sentencia:
interior que le asalta, de enterrarse a voluntad en ciertos “el que sigue los impulsos de una pasión pier-
límites, de no salir del surco trazado por la costumbre, de la facultad de reflexionar y se le mira como a
sin ocuparse de lo que sucede y pasa a diestra y siniestra. un borracho o un loco” (Goethe, 2010: 56). No
(Goethe, 2010: 33) obstante los consejos del amigo, Werther piensa,
como muchos de los de su época, que la vida del
Es así que todos los problemas éticos del hombre es un sueño. En la carta del 22 de mayo,
Werther parecerían desarrollarse bajo el signo de el joven héroe descarga su mirada pesimista de la
esa rebelión que representan las contradicciones Ilustración y su promesa de felicidad. El conoci-
internas del humanismo revolucionario burgués: miento racional aparece desacreditado:

Mira al hombre en su limitada esfera y verás cómo le atur- A mí también me acompaña esa sensación. Mas cuando
den ciertas impresiones, cómo le esclavizan ciertas ideas, compruebo los límites que se le han impuesto a la fuerza
hasta que al arrebatarle una pasión todo su juicio y toda creadora e investigadora del ser humano […] que todo el
su fuerza de voluntad, le arrastra a su perdición. (Goethe, sosiego que existe en determinado aspecto de la investiga-
2010: 58) ción no es más que una ilusa resignación. (Goethe, 2010:
14)
En esos ejemplos, queda claro que el jo-
ven Werther no solo padece por Lotte; es un alma En los estados de ánimo de Werther la
solitaria en una sociedad que no le gusta. “Le mo- burguesía de entonces encontraría caracterizada
lestan las relaciones burguesas, el ceremonial, y, su patología al mismo tiempo en forma aguda y
rebelde, libre y orgulloso, se opone al servilismo complaciente, manifiesta Walter Benjamin; allí
y al envilecimiento” (Bravo-Villasante, 1969: se despliega el “Weltschmerz” (Benjamin, 1996:
13). El joven ideado por Goethe, en su arrebato, 144) -dolor del mundo- de la época en todos sus
extiende su desorientación al género humano en matices.
general: “No puedo comprender a la especie hu-
mana, que tiene tan poco juicio, que se prostituye ¿Qué es el hombre, ese ponderado semidiós? ¿Acaso no
con mezquindad” (Goethe, 2010: 76). flaquean sus fuerzas justamente cuando más lo necesita? Ya
A sus penas se añade “un descontento sea encumbrado de felicidad o abrumado por la aflicción,
hacia el ambiente que lo rodea, donde hombres es detenido y vuelve a la honda y fría preocupación, justo
cautos y falsos tienen la mayor preponderancia” cuando creía poder perderse en la plenitud de lo infinito.
(Bravo-Villasante, 1969: 14). Werther es siem- (Goethe, 2010: 112)
pre el representante de la vida popular frente a
aquella rigidez aristocrática. “Y cada una de esas Como ya señalamos, en Werther no solo
contraposiciones es una enérgica remisión al he- está el dolor del amor sin fortuna que insufla sus
cho de que sólo en el pueblo pueden encontrarse emociones, sino que también se evidencia el or-
la captación real y enérgica de la vida y la ela- gullo burgués que tropieza con las barreras de
boración viva de sus problemas” (Lukács, 1968: clase:
81). En la carta fechada el 15 de mayo, Werther
sostiene “que quien se crea obligado a alejarse de Lo que más me fastidia son los fatales convencionalismos
lo que se llama el pueblo para mantenerse respe- sociales. Sé mejor que nadie de la importancia de las di-

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ferencias de clase, y las grandes ventajas que me deparan. pales quien, pese a su conversión y acatamien-
Pero que no se impongan en el camino, a mí que quisiera to de la ley hacia el final del drama, queda en la
gozar un poco más de alegría, que me tocara un destello memoria colectiva de sus contemporáneos como
más de felicidad en este mundo. (Goethe, 2010: 76) encarnación del heroico transgresor que se rebela
contra las normas sociales opresivas y reivindica
Y como todo el texto es el desarrollo de el derecho a la autodeterminación individual, “es
la interioridad del personaje, lo ideológico está todo un ejemplo de la nueva moral de la autenti-
atravesado por un matiz que hace de cada percep- cidad estética imposible en un mundo antiautén-
ción algo visible. “El problema central es siem- tico” (Molinuevo, 2009: 73).
pre el despliegue unitario y omnicomprensivo de A decir verdad, Schiller se vio obligado
la personalidad humana” (Lukács, 1968: 77). Así, a hacer algunas modificaciones para el estreno.
cuando se refiere a la Naturaleza dice: Por ejemplo, el realismo cruel de la historia,
que reflejaba la sociedad dieciochesca, tuvo que
Solo ella [la Naturaleza] es infinitamente rica y solo ella transformarlo en un hecho acaecido en siglos an-
es capaz de crear un gran artista. Se podrán decir muchas teriores para evitar susceptibilidades y reacciones
cosas positivas sobre las reglas, lo mismo más o menos de adversas por parte del público.
lo que se puede destacar de la sociedad burguesa. (Goethe, En este contexto, debutaba una obra que
2010: 17) acarrea todos los defectos y las virtudes, las ideas
y tendencias del momento, “los temas más can-
De tal manera, toda empresa que lleve a dentes de la ilustración tardía, combinados con
cabo el hombre debe seguir la unión de todas las elementos propios del Sturm und Drang, algu-
fuerzas, el absoluto que ayude a vencer todo obs- nos de ellos procedentes de la literatura trivial
táculo interno o externo. Werther busca amparo como la novela gótica y el […] drama familiar”
en la Naturaleza, como antes lo hizo en la fuerza (Raposo Fernandez, 2006: 13).
colectiva del pueblo, para huir del hastío que le De esta forma, las mismas páginas que
producen las reglas de la sociedad aristocrática. hospedan un discurso ilustrado dan lugar a la des-
Goethe ha dispuesto los hechos de esta ilusión que provocó la falsa promesa de felicidad
novela con un criterio muy juicioso. Pero casi anunciada y juramentada por el iluminismo. La
sólo elige personajes y acaecimientos que hagan violencia allana la frontera que la razón no habría
aparecer “las contradicciones entre la pasión hu- sabido derribar:
mana y la legalidad social” (Lukács, 1968: 79).
La totalidad de Las penas del joven Si la mezquina presión de esta cosa mezquina (sostiene la
Werther no es otra cosa que la arrebatada confi- pistola ante la cara) iguala el sabio al necio…el cobarde al
dencia de ese hombre gestado a las puertas de la valiente… ¿el noble al truhan? Hay tal armonía divina en
revolución burguesa, a la luz de la nueva omnila- la naturaleza inanimada, ¿por qué tiene que haber esa diso-
teralidad de la actividad humana tanto producida nancia en la racional? ¡No, no! Hay algo más, puesto que
como condenada a la ruina por la sociedad bur- yo todavía no he sido feliz. (Schiller, 2006: 181)
guesa. Este hombre nuevo se conforma en oposi-
ción de la sociedad estamental y en antagonismo En este párrafo, donde Schiller pone en
de la moral trivial pequeño burguesa. boca de Moor, no solo vemos una advertencia
pre-revolucionaria de cómo la violencia lograría
Los bandidos igualar las diferencias, sino que también pode-
mos advertir una fe en la naturaleza que, como
Los bandidos, que se estrenó el 13 de en Las penas del joven Werther, salvaguarda y
enero de 1782 en Mannheim, fue la primera obra está por encima de las leyes sociales. Se trata
dramática de Schiller y en ella, como en todos los de una Naturaleza por momentos embravecida
trabajos de la primera etapa creativa, los perso- que acompañaría el desequilibrio emocional de
najes se rebelan contra el orden establecido. La Karl y la pandilla de bandidos, “yo solo absorbo
historia se centra en dos hermanos enemigos y el infierno de las alegrías del cielo […] Aflígete
antagónicos, unidos, sin embargo, por el enfren- conmigo, Naturaleza” (Schiller, 2006: 151). Es
tamiento con el padre. una Naturaleza, que en contraposición a aquella
Karl Moor, uno de los personajes princi- naturaleza domada de la estética neoclásica, apa-
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Symploké revista filosófica octubre 2018

rece ya con la fisonomía sublime del romanticis- la humanidad que expresa Karl: “Humanos…
mo: “¡vosotros, verdes, románticos valles! ¡Oh, ¡Humanos! ¡Camada de cocodrilo falsa, hipócri-
toda esa escena del elíseo de mi infancia! […] ta! […] que cada fibra se despierte para ser furia y
refresca con delicioso susurro mi pecho ardiente” perdición” (Schiller, 2006: 100). En este sentido,
(Schiller, 2006: 151). Dieter Borchmeyer señala que “la irritación pri-
De igual modo, ya en la escena primera vada en contra de ese padre desprovisto de cariño
del acto primero, Franz había dado cuenta del po- crece hasta convertirse en odio universal hacia
der que tiene esa Naturaleza: todo el género humano, dice la propia reseña de
Schiller sobre los bandidos” (Schiller, 2006: 44).
Tengo derecho a estar enojado con la naturaleza, y por mi Es así que Karl, quien cree ser deshere-
honor que lo haré valer ¿Por qué no fui el primero en salir dado, se embarcará en una andanada de muerte y
del seno materno? ¿Por qué no fui único? ¿Por qué se me destrucción. El primogénito del conde de Moor,
cargó con el peso de la fealdad? ¿Justo a mí?. (Schiller, que reniega de los valores de la sociedad que lo
2006: 86) segrega como un apestado, busca refugio al mar-
gen de esta, en el bosque, y cree encontrar entre
Pero además, Franz, que desbordado de los parias y excluidos del mundo burgués un mo-
pasión grita “¡Asesinato y muerte!” (Schiller, delo alternativo de agrupación humana, basado
2006: 86), advierte, al igual que su hermano, de en la fraternidad y la solidaridad. A la perversidad
la utilidad de la violencia y su poder nivelador cobarde del hombre culto, opone Schiller la liber-
que quedará evidenciado con los sucesos revolu- tad salvaje y los nativos generosos instintos del
cionarios venideros de finales del siglo XVIII. Es salteador de caminos, a quien la injusticia social
así que se lanzará con un discurso que no carece arroja de su seno. “Al crimen cauteloso opone
de tintes de darwinismo social y de autorrealiza- el crimen franco; reivindica la libertad del hom-
ción individual: bre de la selva, y crea a Karl Moor” (Menéndez
Pelayo, 2012: 1193).
¡No, no! Estoy siendo injusto con ella [la Naturaleza]: sí Karl experimenta una crisis total de los
que nos dio ingenio, nos puso desnudos y pobres a la orilla valores burgueses, su conducta poco tiene que
de este gran océano del mundo… ¡Qué nade el que pue- ver con un proceder ilustrado; siente sosiego,
da, y el que sea demasiado torpe, que se hunda!. (Schiller, dice: “puro soy como el éter del cielo […] la paz
2006: 86) de mi alma ha vuelto, el tormento se ha apacigua-
do, el infierno ya no está” (Schiller, 2006: 205)
Pero, asimismo, en el alegato de Franz y cae de rodillas y llora violentamente de amor
subyace la idea, de por sí airada y revolucionaria, por Amalia. Sin embargo, en la misma escena,
de la igualdad de clases: pocas líneas más adelante, después de afirmar fe-
hacientemente: “¡Fuera, yo no asesino mujeres!”
Todos tienen el mismo derecho a lo más grande y a lo más (Schiller, 2006: 207), sentenciará que “¡la amada
pequeño, la exigencia se destruye con la exigencia, el ins-
tinto con el instinto y la fuerza con la fuerza. El derecho de Moor solo puede morir a manos de Moor! (La
reside en el vencedor y los límites de nuestra fuerza son asesina)” (Schiller, 2006: 207).
nuestras leyes. (Schiller, 2006: 86) No obstante, no es Karl el exclusivo por-
tador del ímpetu desmesurado, los demás perso-
De esta manera, podemos inferir de qué najes muestran escenas parecidas. Franz ataca
forma, el drama elaborado por Schiller muestra con toda su ira a Amalia: “Del cabello te arrastra-
por igual cómo la violencia derivada de la impo- ré a la capilla, con el puñal en la mano” (Schiller,
sición de condiciones de vida que estigmatizan 2006: 147); el Viejo Moor se levanta de sus si-
al individuo conduce a la disolución de los lazos llón, quiere agarrar a Franz por el cuello y grita:
sociales y, a su vez, “las reiteradas frustraciones “¡Monstruo! ¡Monstruo!” (Schiller, 2006: 120);
del marginado para integrarse desembocan en el Schufterle cuenta como arrojó un niño vivo a las
resentimiento y el deseo de venganza contra el llamas (Schiller, 2006: 135); Schweizer pega
género humano, que se traduce en una agresivi- el alarido: “¡A la mierda, asesino!” (Schiller,
dad de este dirigida contra la sociedad” (Pivetta, 2006: 177) al tiempo que mata a puñaladas a
2015: 1). Esto último, lo podemos visualizar Spielgelberg.
claramente en el desenfreno y repulsión hacia Si en Las penas del joven Werther adver-
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Symploké revista filosófica octubre 2018

tíamos la desilusión que comenzó a generar el Conclusión


proyecto ilustrado hacia finales del siglo XVIII,
en esta obra de Schiller, el desencanto en la razón En el último cuarto del siglo XVIII, el
como fórmula generadora de la felicidad del hom- hombre comenzó a interiorizar la nueva visión
bre también está presente en el discurso de sus romántica del mundo que estas obras analizadas
personajes, por ejemplo, Franz vocifera colérico: proponían. Una visión crítica con los valores ca-
“¿Qué hay que no pueda el miedo? … ¿Qué pue- ducos de las convenciones sociales. Una visión
den hacer razón, religión contra el abrazo helado que celebra a la naturaleza salvaje y el amor, la
de este gigante?1” (Schiller, 2006: 110). De este exaltación de la capacidad creativa del individuo
modo, podemos advertir como Schiller desmon- y sus sentimientos. Una visión de mundo en la
tó, en una breve línea, el poder de dos colosos, que prevalece el culto a la imaginación y las emo-
razón y religión. Otro tanto sobreviene cuando en ciones por encima de la razón. El nuevo héroe
el acto quinto Franz discute con Moser y anuncia, romántico será, tal vez, un hombre normal como
“¡no hay Dios!... Ahora estoy hablando en serio cualquier otro. Ahora bien, ese nuevo hombre en
contigo, te lo digo. ¡No lo hay!” (Schiller, 2006: conflicto con las convenciones sociales sería, se-
194). gún parecen presagiar Goethe y Schiller en estas
Algo parecido, con respecto a la desilu- obras, conducido a un final violento y trágico;
sión del proyecto ilustrado, ocurre en un diálogo pero eso, aún estaba por verse.
que Karl sostiene con su padre, allí, en un ges-
to específico de la literatura gótica, contrapone Bibliografía
la oscuridad del momento a la luz prometida por
la razón iluminista: “Está todo oscuro…laberin- Barnhelm, Minna von (1968). “Los sufrimientos del joven
Werther”, en Goethe y su época, Barcelona-México:
tos borrosos…no hay salida… sin estrellas que
Grijalbo.
guíen. […] Pero ¿para qué la avidez de felicidad? Benjamin, Walter (1996). Dos ensayos sobre Goethe,
¿Para qué el ideal de una perfección inalcanzada? Barcelona: Gedisa.
¿El aplazamiento de planes inconclusos? […] no Borchmeyer, Dieter (2006). “Schiller: la tragedia sobre
he sido feliz” (Schiller, 2006: 181). Asimismo en la pérdida del padre”, en Regula Langbehn, Miguel
esta cita, el joven Moor testimonia sobre la impo- Vedda y Marcelo Burello (eds.), Homenaje a Friedrich
sibilidad de lograr la satisfacción del hombre, la Schiller a los doscientos años de su muerte, Buenos
felicidad. Aires: Goethe Institut, II, pp. 39-49.
Menéndez Pelayo subraya que, en Los Bravo-Villasante, Carmen (1969). “Prologo” a Goethe,
Johann Wolfgang (1969). Werther. España: Salvat
bandidos, conviven encerradas “la utopía social
Editores, S.A.
y la utopía política del siglo XVIII, el ansia in-
Goethe, Johann Wolfgang (2010). Las penas del joven
definida de libertad, el odio contra el tirano, el Werther. Buenos Aires: Colihue.
humanitarismo, la universal tolerancia y la filan- Lukács, Georg (1968). Goethe y su época. Barcelona-
tropía, el encono áspero y reconcentrado contra México: Grijalbo.
la corrupción hipócrita de las pequeñas cortes Menéndez Pelayo, Marcelino (2012). Obras completa:
alemanas” (Menéndez Pelayo, 2012: 1193). Sin Historia de las ideas estéticas. Cantabria: Editorial de
embargo, todo está puesto de una manera inmo- la Universidad de Cantabria.
deradamente monstruosa, exuberante. Por esta Molinuevo, José Luis (2009). Magnífica miseria. Dialéctica
razón, en el prólogo a la primera edición, Schiller del romanticismo. Murcia: Cendeac.
Pivetta, Carola (2015). “Bandidos y (no) violencia en
se ampara de la posibilidad de haber ofendido
la narrativa alemana breve de tema criminal de la
algún elevado sentimiento y aclara, que todo re- Ilustración tardía (F. Schiller y A. G. Meißner)”. En
tratista del ser humano “se ve en esta necesidad Revista Herramienta debate y crítica marxista. Junio
si desea dar una copia diferente del mundo real y 2015. Buenos Aires: Ediciones Herramienta.
no afectaciones ideales o personajes de catálogo” Raposo Fernández, Berta (2006). “Prólogo” a Schiller,
(Schiller, 2006: 69). Así, opta porque la pasión Friedrich (2006). Los bandidos. Madrid: Cátedra.
aventaje a la razón en su capacidad ordenadora Schiller, Friedrich (2006). Los bandidos. Madrid: Cátedra.
de la realidad y dirima las controversias ideológi- Warley, Jorge (2010). “Introducción” a Goethe, Johann
cas que el raciocinio no habría podido allanar. Wolfgang (2010). Las penas del joven Werther.
Buenos Aires: Colihue.

1 El subrayado es nuestro.
51
Symploké revista filosófica octubre 2018

Entrevista
José Luis
Ramón García

Lic. Ariel Vecchio


UNSAM - UNAV - CONICET

La presente entrevista, pensada para el to no se instala solamente en el nivel del sig-


público general, del prestigioso Prof. Dr. J. L. Ro- nificante, sino que, equivocadamente o no, ha
mán García, Catedrático de Lingüística Indoeuro- traído confusiones que extralimitan el campo
pea de la Universidad de Colonia, Alemania, fue de la lingüística. Hago alusión a la distinción
realizada en el marco del encuentro Humboldt entre el empleo de los términos “indoeuropeo”
Kolleg, “Fiktion, Erkenntnis, Interpretation— e “indogermánico”. En una de sus últimas in-
Aristoteles’ Poetik, interdisziplinär” (Alexander tervenciones, Los nombres de los dioses en Gre-
von Humboldt Fundation). La reunión académi- cia e Italia: tradición y continuidad indoeuro-
ca aspiró a promover un diálogo transdisciplinar pea, presentada en la Universidad de Navarra,
acerca de la problemática de la ficción, el cono- Ud. realizó un comentario al respecto.
cimiento (Wissen/Erkenntnis/Kognition) y la in-
terpretación. Fue organizada por profesores de Sí, entiendo que en castellano se debe
emplear el término “indoeuropeo”, que es el mis-
las áreas de Filosofía (Prof. Dr. Alejandro Vigo),
mo que en las formas correspondientes en las len-
Filología Clásica (Prof. Dr. José Torres) y Teo-
guas románicas y en inglés , como en alemán lo
ría de la Literatura (Prof. Dr. Luis Galván) de la
es “Indogermanisch”. La distinción es puramente
Universidad de Navarra, España, y tuvo lugar los
convencional, y refleja dos concepciones geográ-
días 26, 27 y 28 de Octubre de 2017. El Prof. Lic.
A. Vecchio, Becario de CONICET y Docente de ficas. Acostumbro siempre a recomendar utilizar
la Escuela de Humanidades (Letras y Filosofía) en cada lengua la convención de cada lengua,
de la Universidad Nacional de San Martín, par- porque si hacemos historia del término en cues-
tión, su origen ha sido absolutamente inocente.
ticipó de la reunión científica en el marco de una
instancia de Investigación en UNAV, promovida En realidad el primero en emplear el término “in-
dogermanique” fue un geógrafo danés, Conrad
y auspiciada por el Centro de Estudios de Herme-
néutica (CEdeH) de la Universidad Nacional de Malte-Brum (1810), quien escribió en francés.
Para fundamentar la creación del término recu-
San Martín, dirigido por el Prof. Dr. Carlos Ruta
rrió a la geografía: estos pueblos se extendían
y coordinado por la Prof. Laura Carugati, del cual
desde el Ganges hasta el extremo del occidente
forma parte en calidad de Investigador en forma-
ción. germánico:
“... langues indo-germaniques qui règnent depuis
Comencemos esta breve entrevista con una les bords du Gange judqu’aux rivages de l’Islan-
aclaración terminológica. En verdad, este pun- de”.
52
Symploké revista filosófica octubre 2018

En inglés se utilizó el término “Indo-European” diversas lenguas. Ahora bien, siguiendo por ese
(Thomas Young, 2013), sobre la base de que la camino, podemos, además, ver si determinadas
mayoría de las lenguas son europeas y la que pa- palabras (y conceptos) se dan en determinadas
saba por más antigua se atestiguaba en India, y colocaciones (también llamadas “frasemas”) que
a partir de ahí se extendió el término a otras len- incluyen dos términos, por ejemplo [fama – in-
guas románicas y también germánicas, por ejem- mortal], [carro – del sol] [cielo – tierra], e incluso
plo en holandés. Tenemos que tener en claro que más [cielo – tierra – sostener]: si ello se atestigua,
es completamente inofensivo el término, sobre incluso con sinónimos, en diversas lenguas, po-
todo en su origen; hasta mediados del siglo XIX demos suponer que se trata de colocaciones here-
no comenzó a tener, en algunos círculos y auto- dadas, tanto en la forma como en el significado.
res, una carga ideológica deleznable, xenófoba y Ahora bien, si algunas palabras o usos de pala-
racista. Si me permite, le comento un último deta- bras son metafóricos, entonces también podemos
lle: en la Alemania federal, esto es, la occidental, intentar reconstruir colocaciones que implican
se ha dicho siempre Indogermanisch, en cambio una metáfora, como [verter – palabras]. Dicho
en la oriental, en la llamada República Democrá- de otra manera: si las palabras en cuestión tienen
tica Alemana estaba totalmente vetado el término un significado común, si las colocaciones tienen
Indogermanisch, que había sido sustituido por el mismo significado en las diversas lenguas co-
Indoeuropäisch. Unos años después, luego del tejadas, entonces podemos intentar reconstruir
cambio político, fui profesor invitado en la Uni- conceptos, metáforas y hasta aspectos de la con-
versidad de Rostock (1993) y en mis clases decía cepción del mundo en los hablantes de la lengua
con total naturalidad Indogermanisch, ante unos reconstruida. Obviamente en el momento que nos
alumnos, encantadores y muy motivados, que me alejamos de los límites de las lenguas atestigua-
miraban al principio con horror, pensado, quizá, das hay una componente de especulación. Al fi-
que era un nazi. Sin embargo, como le dije, este nal siempre acabamos, en el mejor de los casos,
uso del término nada tiene que con su origen. reconstruyendo una forma o una colocación a la
que ponemos un asterisco (*), que implica una
Mucho se ha dicho sobre los alcances de los es- propuesta más o menos razonable de la existen-
tudios del indoeuropeo. En otras palabras, es cia de una proto-forma, y el reconocimiento de
un tópico recurrente en las discusiones el hasta que, desgraciadamente, no podemos demostrar
dónde pueden echar luz sobre otros campos de que esa forma ha existido realmente. Es posible
conocimiento las investigaciones lingüísticas. reconstruir palabras o colocaciones formadas de
Ahora bien, desde su trabajo, por así decirlo, material indoeuropeo y según las reglas de for-
de campo en la indoeuropeística, ¿considera mación de palabras indoeuropea, pero que exis-
Ud. al indoeuropeo una lengua o una cultura, tieran de hecho en indoeuropeo, es algo que no
o una lengua y una cultura? podemos asegurar. A medida que nos alejemos de
las formas lingüísticas históricamente atestigua-
Digamos que en nuestra disciplina se em- das la precisión se difumina. Si me permite una
pieza el estudio desde las unidades lingüísticas formulación poco amable, siempre aconsejo dar-
más elementales, que son, como es sabido, los se a la fuga cuando alguien afirme que puede ex-
fonemas. A partir de lo cual se pueden construir plicar absolutamente todo, y más aún si pretende
morfemas, y a medida que nos alejamos de los fo- poder delimitar con precisión fases del indoeu-
nemas entramos en sistemas abiertos mucho más ropeo previas al indoeuropeo reconstruible sobre
difíciles de reconstruir, si bien podemos construir la base de la comparación. Es un caso claro de
formantes, sufijos desinencias, y demás. A medi- falta de realismo y, en última instancia, de con-
da que se intenta reconstruir unidades más com- tacto con la realidad –y demuestra, sobre todo,
plejas las dificultades aumentan: podemos inten- una falta de familiaridad con los problemas y con
tar reconstruir también, en el mejor de los casos, las posibilidades de resolverlos–. Cualquiera que
la estructura de la flexión nominal, la de la flexión esté razonablemente familiarizado con la compa-
verbal, así como elementos del léxico y afinar in- ración y reconstrucción IE tiene conciencia de las
cluso hasta proponer un sentido básico origina- limitaciones de la reconstrucción comparativa y
rio, subyacente en los significados, a menudo no de que en muchos aspectos es ilusorio aspirar a
coincidentes, de los términos atestiguados en las reconstruir con una garantía de certeza un siste-
53
Symploké revista filosófica octubre 2018

ma coherente de lo que llamamos IE o Proto-IE. acompañada de una traca de descalificaciones


Todo indoeuropeista competente conoce las di- contra el indoeuropeo que se intenta reconstruir
ficultades inherentes al método y las limitacio- y que se etiqueta peyorativamente como “clási-
nes para reconstruir “un” IE que sea realmente, co”, “brugmaniano”,“tradicional”, “conserva-
por tomar la formulación de Antoine Meillet, un dor” (pongan los epítetos que quieran). Todo ello
“système où tout se tient” y sabe que a medida se mueve en el ámbito de la diletancia y, lo que
que nos alejamos de los límites de la reconstruc- es peor, genera un dogmatismo que no sólo ope-
ción comparada entramos en el confortable terre- ra con la ignorancia, sino que la incorpora como
no en el que nada se puede refutar –ni tampoco constitutiva de la aproximación e impide siquiera
confirmar–. Sobre la base de lo reconstruido con tener idea de qué es lo que habría que saber.
ayuda de la comparación, es posible intentar, en
algunos casos, la reconstrucción llamada “inter- Dado que ha mencionado al pasar el método
na” que puede permitir establecer una cronología primario de la indoeuropeística, ¿podría de-
relativa. Así, en el caso de la morfosintaxis, si cirnos brevemente en qué consiste el método
la reconstrucción permite reconstruir diferentes comparativo?
formantes para una misma posición en el para-
digma, cabe en principio establecer una crono- El método comparativo parte de la base
logía relativa según el criterio de las anomalías de que el signo lingüístico es convencional y de
vs. formas regulares: las formas anómalas en el que, consiguientemente, no puede ser casualidad
interior del paradigma del que son parte, pueden la presencia de variantes de una misma forma en
entenderse como más antiguas que las que son lenguas que se extienden desde Irlanda e Islandia
regulares (o regularizadas). Es, por ejemplo, el hasta el Turkestán chino y que están separadas
caso de las desinencias medias primarias del ver- por una distancia temporal de casi 3000 años (las
bo en griego (y en IE), como hizo ver Martín S. lenguas anatolias se atestiguan a mediados del
Ruipérez en un artículo de 1952 que marcó épo- II milenio a.C., las bálticas a partir del Renaci-
ca: el paradigma con /-mai/, /-soi/, /-toi/, /-ntoi/ miento). La presencia en estas lenguas (o en al-
del arcadio y chipriota es “anómalo” respecto al gunas) de reflejos claramente emparentados entre
del ático y los demás dialectos, con vocalismo /a/ sí para términos como “padre”, “madre”, “nariz”,
generalizado, i.e. /-mai/, /-sai/, /-tai/, /-ntai/. Rui- “nido”, o de verbos como “llevar” o “ser” permi-
pérez propuso la explicación más sencilla: el tipo ten decir, asegurar que el parecido de unas len-
arcado-chipriota reflejaba una anomalía heredada guas a otras refleja una correspondencia, que en
(i.e. indo-europea), mientras que los demás dia- ningún caso puede deberse a un puro accidente
lectos habían generalizado el vocalismo /a/ de la casual (hay, por supuesto, palabras del lengua-
1.sg. a las demás personas por lo que hoy llama- je expresivo o infantil con las que no es posible
mos “analogía columnal”. Pero es obvio que la operar). Así pues, la reconstrucción IE opera con
reconstrucción interna puede permitir reconstruir lenguas de las que sabemos que históricamente
secuencias y fases previas en casos concretos, no están emparentadas. Se trata de, en un primer
en todos, y en ningún caso permite reconstruir es- paso, comparar y establecer correspondencias,
tadios previos en términos de sistema. comenzando por palabras atestiguadas en varias
De lo dicho resulta evidente que no hay de ellas y que sean reconocibles como el reflejo
ciertamente margen para un optimismo exagera- de un protoforma, que en un segundo paso habrá
do respecto a las posibilidades de la reconstruc- que reconstruir. Por ejemplo, el término para ‘pa-
ción. Pero lo que se ofrece como alternativa, con dre’ en latín, griego y sánscrito/antiguo indio:
la pretensión de reconstruir fases previas, que lat. pater - gr. πατήρ – sansc. n
pretendidamente sería también sistemas coheren- Se trata de establecer las corresponden-
tes es una extravagancia, que revela una descora- cias de cada segmento fonético: /p/ y /t/ son co-
zonadora falta de conocimientos y de realismo, munes a las tres lenguas, lo que permite recons-
a mitad de camino entre los errores de base y la truir sin más */p/ y */t/ (con asterisco, que indica
glotogonía. Ello es evidente cuando se postula que se trata de fonemas reconstruidos). Los otros
la existencia de tres fases (: ¡sistemas!) recons- tres segmentos difieren en su representación en
truibles de IE, de los cuales el más antiguo sería cada lengua, por lo que la reconstrucción del fo-
preflexional. La extravagancia va habitualmente nema en IE queda en principio abierta (se nota
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Symploké revista filosófica octubre 2018

convencionalmente como “IE */?/”): es óbice para intentar progresar en la medida de


(1) gr.lat. /a/ : ai. /i/ : IE */?/, lo posible y en el marco de lo que la reconstruc-
(2) gr. /ē/ : lat. /e/ (de */ē/) : ai. /ā/ : IE */?/, ción permite.
(3) gr.lat. /-r/ : ai. /-ø/ : IE */?/
Se trata en cada caso de decidir, con ayuda ¿Hay algún tipo de evidencia para determi-
de otros datos en la medida en que sean realmente nar con cierto grado de certidumbre el tiempo
controlables. Fijémonos en (1): cabe suponer o y el lugar en el cual se habría emplazado, si
bien (i) IE */a/ (que ha dado /i/ en antiguo indio), me permite la expresión, el “pueblo indoeuro-
o bien (ii) IE */i/ (que ha dado /a/ en latín y grie- peo”?
go’, o bien (iii) un fonema /?/ no atestiguado en
ninguna de las tres lenguas atestiguadas con las Sería deseable, pero es un dominio que
que operamos, que habría dado /a/ en griego y la- cae lejos de la actividad del lingüista y en el que
tín, e /i/ en el antiguo indio. Hay, de hecho, otros no tengo nada que aportar. De todos modos, y a
otros casos en que se refleja la misma correspon- la vista de lo que se ha hecho y se hace en los
dencia (e.g. gr. μέγα : ai. máhi ‘grande, alto’) y últimos años a la luz de la filogenética no creo
que permiten decidir a favor de la posibilidad que haya muchas razones para el optimismo.
(iii). La toma en consideración de otras lenguas Esto tiene una razón: el modelo lingüístico opera
(me perdonará que no entre en el detalle) permite con hechos, y sólo con hechos. El que se llegue a
concluir que el fonema era una laringal, concreta- proponer una forma con asterisco (*), no quiere
mente */h2/ y establecer tres leyes fonéticas, una ni siquiera decir que la forma reconstruida sea in-
para cada lengua: IE /*h2/ > ai. /i/, gr. /a/, lat./a/. doeuropea y le podamos anteponer la abreviatura
Con criterios similares (siempre que me permita “IE”: el que una forma sea reconstruible median-
no entrar en el detalle) cabe reconstruir para (2) te aplicación del método histórico-comparativo y
IE */ē/ y para (3) */-r/ (o bien ya /-ø/, como en an- de la reconstrucción interna no garantiza que la
tiguo indio, con reintroducción secundaria de /-r/ forma haya existido forzosamente. Pensemos en
en otras lenguas por influencia de otras formas el caso de fr. gendarme, pl. gendarmes que se ex-
casuales del paradigma): la forma reconstruible plicaría perfectamente a partir de un latín tardío
sería, pues, */ph2tḗr/ ‘padre’ o, más propiamen- *gentes de armas, que de hecho nunca existió. En
te */ph2tḗ(r)/, que refleja nuestras dudas sobre todo caso, la reconstrucción no dice absolutamen-
el fonema que cierra la palabra. Evidentemen- te nada sobre su cronología absoluta: salvo casos
te cuantas más lenguas atestigüen los reflejos de muy concretos, no se puede establecer una fecha
una determinada forma, más segura será la re- (ni un lugar), una vez que hemos, en el mejor de
construcción de la protoforma –y, por decirlo co- los casos, reconstruido la prehistoria lingüística
loquialmente, ponerle un asterisco y considerarla de un hecho concreto. El conjeturar si el indo-eu-
heredada, i.e. indoeuropea–. ropeo (más bien diríamos un primitivo continuo
En reconstrucción IE un primer paso es, indoeuropeo, con inevitables diferencias) se ha
obviamente, comparar y reconstruir el sistema formado y hablado en torno al 3000 o entorno al
fonológico y las leyes fonéticas de cada lengua. 4000 y dónde es algo que escapa al campo de es-
Lo mismo cabe hacer en el campo de la forma- tudio del indoeuropeista. Parece claro que la dis-
ción de palabras y de la morfosintaxis (nominal, ciplina que podría prestar apoyo en este terreno a
pronominal, verbal), así como, con menor mar- la lingüística es la arqueología. Pero, desgracia-
gen de precisión, con la sintaxis y la estructura de damente los modelos de la arqueología pueden
la frase simple y compuesta. De la misma mane- sólo aportar unos datos objetivos y unas fechas,
ra se puede intentar reconstruir términos con su pero difícilmente asociables o combinables con
semántica y, en una último estadio, colocaciones los hechos lingüísticos, que, a su vez, carecen
fraseológicas y hasta conceptos y manifestacio- de fecha objetiva. El que se pudieran combinar
nes de la “Weltdarstellung” de los indoeuropeos, los modelos de ambas disciplinas es un auténtico
siempre sobre la base (y a partir de) los hechos desideratum, pero realmente no es nada fácil.
lingüísticos. Como le digo, a medida que nos ale-
jamos de la fonética y la morfosintaxis entramos Llegamos a un punto clave y, por cierto, im-
en dominios donde la reconstrucción tiene una portante, que, por ende, precisa cierta aclara-
mayor componente de especulación. Pero ello no ción: ¿qué podemos decir sobre la combina-
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Symploké revista filosófica octubre 2018

ción entre lingüística y genética de pueblos, un movimiento único, sino complejo y constitui-
que en la actualidad ha dado lugar a tantos do por diferentes dominios, en diferentes moda-
estudios y papers con respecto al indoeuro- lidades y a lo largo de diferentes épocas –aunque
peo –comprendido en este caso como “lengua el detalle nos escapa por completo–. De hecho, es
e identidad genética”–? sabido que una migración no deja forzosamente
huellas arqueológicas –y que, aunque se acierte
Puedo decir francamente que me parece a establecer correspondencias entre migración y
un completo disparate, que implica una grosera cambio de cultura (con datación), nada de esto
ignorancia de lo que puede esperarse de la lin- permite obtener conclusiones lingüísticas, ni mu-
güística y un gratuito optimismo sobre la viabili- cho menos datar los hechos lingüísticos–. Pen-
dad de todo intento de identificar lengua con ge- semos en el caso del nacimiento de la llamada
nética: algo que resulta inconcebible hoy y que, cultura “Submicénica” en Beocia, que los ar-
lamento decirlo, evoca la más siniestra pseudo- queólogos sitúan entre 1150 y 1125 a.C.: que la
ciencia de los años treinta del siglo XX. Es difí- cultura “Submicénica” suponga una ruptura con
cilmente comprensible que se le pueda ocurrir a el período micénico y haya sido importada por
un Premio Nobel de genética como es el caso de migrantes procedente del Norte no es ni siquiera
Luigi Luca Cavalli-Sforza, pero lo triste que haya communis opinio entre arqueólogos: A. M. Sno-
lingüistas, que comiencen a introducir en los es- dgrass, The Dark Age of Greece (1971) sostuvo
tudios de nuestra disciplina conceptos como el que la cerámica y enterramientos Submicénica es
ADN. De lo que se trata en lingüística es de len- continuadora directa de tipos más modestos ya
gua, no de genes: con el ADN podemos saber si preexistentes en época micénica. En todo caso,
dos personas están emparentadas o no, lo que aunque se aceptara que el cambio es debido a
bajo ningún punto de vista podemos saber es si poblaciones foráneas, el poner una etiqueta al
hablan la misma lengua o no. Además, la aplica- dialecto de los responsables del cambio arqueo-
ción de los principios de la llamada filogenética lógico es algo que escapa por completo a las po-
(y de la “cladística”) a la fragmentación lingüís- sibilidades del arqueólogo y el lingüista a partir
tica ha dado resultados extravagantes, cuando no de los datos que sus respectivos modelos propor-
aberrantes. cionan. En este caso concreto, es posible afinar y
Desde hace unos años reina una auténtica precisar exclusivamente mediante la utilización
euforia sobre las posibilidades, que se presentan de la información de la tradición antigua, pero
en realidad como obligación, de una aproxima- ello no es posible en otros casos –y ello sin salir
ción multidisciplinaria entre arqueólogos, lin- de Grecia a partir de mediados del II milenio–.
güistas... y genetistas. Es una triple aberración Imaginemos las dimensiones de la dificultad de
conceptual, al margen ya de lo alarmante que aplicar el mismo modelo a procesos acaecidos
resulta ya de por sí el oír hablar de genes (¡otra dos, o tres o cuatro milenios antes, en un ámbito
vez!) y de ADN como argumento de relevancia geográfico mucho mayor. Es entrar de lleno en
lingüística. la ciencia ficción. Si a eso se le añaden las velei-
Cuando la genética aún no había entrado dades genetistas, siempre en la convicción ino-
en escena, ya era cosa sabida –o debería serlo– centona de que los genes guardan relación alguna
que la combinación de modelos arqueológicos con las lenguas, los resultados son forzosamente
con modelos lingüísticos era una quimera: el ar- delirantes. Como si bastara con el noble deside-
queólogo puede constatar un cambio de cultura ratum humano de saberlo todo, para que saberlo
material o la expansión de unos determinados ti- todo fuera mínimamente realista. Y lo peor es que
pos, pero ello no permite en modo alguno impli- el diálogo es imposible, según demuestra la ex-
caciones sobre la lengua de los portadores de tal periencia (la mía y la de cualquiera que lo haya
cultura material, ni mucho menos poner fechas intentado): cuando desaparece la lógica y se crea
absolutas a procesos de prehistoria lingüística. una realidad paralela, no cabe sino profundizar
Esto es evidente incluso en ámbitos geográficos en ella –e ignorar las limitaciones, evidentes, que
relativamente reducidos y con lenguas razonable- aquí he intentado esbozar–.
mente bien conocidas, como la Grecia prehistó- Me permito reproducir unas frases ex-
rica. Un caso característico es el de la llamada traídas de un artículo de divulgación de J.-P.
migración doria, que con toda seguridad no fue Demoule (profesor de prehistoria europea en la
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Symploké revista filosófica octubre 2018

Sorbonne), aparecido en EL PAÍS (22 abril 2018) rables entre sí: filología de los textos, compara-
con el sorprendente título El misterio del indoeu- ción, reconstrucción; y obliga a integrar hechos
ropeo. El artículo es, curiosamente, bastante más en sistemas. Es una actividad que exige trabajo,
sensato que las divagaciones diletantes del autor que ocupa tiempo y que convierte al indoeuro-
sobre la fragmentación del indoeuropeo (Mais où peista (al menos al razonablemente sensato) a ser
sont passés les Indo-Européens?,  2014), ya que un eterno aprendiz, no exento de una severa com-
cuestiona el valor de unas aproximaciones que no ponente de frustración ... pero que resulta fasci-
son menos especulativas que la suya propia. Con nante.
todo, se sigue deformando el problema... y se Lamentablemente el futuro no se presenta
concluye con el mantra habitual de la necesidad halagüeño: los estudios de indoeuropeística, que
de la colaboración multidisciplinar: se complementa(ría)n con los de filología clásica
y de lingüística general, pueden resultar margina-
En conclusión, aunque es indiscutible el parentesco les si, como suele ocurrir, las otras dos especiali-
entre las lenguas indoeuropeas, es muy probable que dades desdenân el trabajo en común. Al estudian-
la búsqueda de un fenómeno histórico único que pu- te de lingüística indoeuropea se les exige lenguas
diera ser su origen en forma de conquista militar es difíciles que no se estudian en el bachillerato y
una quimera. Debemos pensar más bien que en esas contenidos difíciles: partir de cero en la universi-
sociedades protohistóricas, que vivían dispersas en dad es realmente duro y, una vez llegados al final,
pequeñas comunidades de unos cuantos centenares encontrar un trabajo es cada vez más difícil, dada
de habitantes, se dieron mezclas constantes, cruces la presión existente a todos los niveles a favor de
y mestizajes escalonados durante varios milenios, la lingüística general. Lo peor, probablemente, es
aunque hubiera además brutales invasiones. Por otro la actitud capitulativa de una parte de los indoeu-
lado, la mayoría de las sociedades humanas tradicio- ropeistas en activo (al menos en Alemania), que
nales eran multilingües. Por eso, para seguir avanzan- están dispuestos a convertir nuestros estudios en
do, es indispensable una estrecha colaboración entre una disciplina ancilar de la lingüista general.
lingüistas, arqueólogos y biólogos

Al margen de la dificultad en seguir el


decurso lógico del párrafo, es difícil entender
cómo se puede seguir insistiendo en solucionar
un problema (o aclarar un “misterio”, en la termi-
nología de Demoule), que no se plantea nadie que
esté mínimamente familiarizado con las lenguas
indoeuropeas y con la reconstrucción
Lo peor es que en el complejo y bizantino
sistema de concesión de proyectos de investiga-
ción en diferentes países este tipo de especulacio-
nes son favorecidas con cuantiosas subvenciones,
lo que obliga a indoeuropeistas sensatos a presen-
tar solicitudes llenas de palabrería, en la convic-
ción de que eso es lo que se premia.

Agradecido por su excelente predisposición, le


haré una última pregunta –para no retenerlo,
pues soy consciente de sus múltiples activida-
des–, pero la desdoblaré: ¿cuál es la actuali-
dad de la indoeuropeística? ¿Por qué estudiar
el indoeuropeo hoy?

Creo que el indoeuropeo ha resultado


atractivo a muchos porque implica una serie de
actividades fascinantes que, además, son insepa-
57
Symploké revista filosófica octubre 2018

Reseña sobre El Capital


de Karl Marx
El don de la Libertad del Obrero

Naím Valerio Yánez Alonso


Estudiante de Filosofía - ULL

El presente trabajo pretende ser, por una Contexto de El Capital


parte, una apuesta comprensiva, que englobe el
contenido propuesto por El Capital, de forma que El libro El Capital, Crítica de la eco-
se sintetice su contenido y se llegue a analizar la nomía política se enmarca en el contexto de la
comprensión abordada en cada una de las seccio- Revolución Industrial, en el siglo XIX. Surge a
nes segunda y tercera del Libro I, “El Proceso de finales del siglo XVIII en Gran Bretaña, antes de
producción del capital”, –es decir, desde el capí- extenderse a lo largo de todo el mundo. Esta evi-
tulo cuarto al noveno, ambos inclusive–. dente revolución o crecimiento de la industria-
Por otro lado, pretendemos con este traba- lización originada en el estado británico, acabó
jo comprender qué ha supuesto El Capital para la convirtiéndolo en un Imperio debido a la expan-
sociedad en la que fue escrito y publicado y, ade- sión colonial y militar.
más, para nuestra sociedad actual. En el capítulo Si queremos fijarnos en el aspecto econó-
¿El don de El Capital? de este mismo trabajo, mico, es evidente que este desarrollo industrial
investigamos sobre el trabajo de M. Godelier y la provocó una consolidación con respecto al mo-
relación que tiene este don con la publicación de delo capitalista, originando la clasificación so-
El Capital para, en el siguiente capítulo, profun- cial entre el proletariado y la burguesía. De esta
dizar en este tema centrándonos en la libertad del manera, esta última clase, siendo la dominante,
trabajador y desde qué perspectiva ha de tenerse se serviría de las innovaciones tecnológicas para
en cuenta el libre albedrío del hombre, ¿trabajo conseguir un aumento de capital, además de la
como imposición o como don? explotación constante de los proletarios. La nece-
Sería, pues, una apuesta de síntesis y de sidad de las ciudades, con sus fábricas, de mano
investigación apostando desde este libro clave de obra barata, obreros que trabajasen en condi-
en la época de la Industrialización de Occidente ciones ínfimas, produjo una migración multitu-
para ser conscientes, una vez más, que Marx y dinaria del campo a la ciudad; aunque la mano
Engels no escriben para el pasado. Escriben para de obra fue progresivamente sustituida por la ma-
el hoy. Así, debemos fijarnos, en concreto, que la quinaria1.
libertad del trabajador, además de seguir siendo
un tema de actualidad, es un tema preocupante 1 Cabe destacar que debido a que la máquina podía hacer
ayer y hoy. más trabajo que el que hacían los trabajadores, esto gene-
rará el movimiento del ludismo, el cual se desarrollará en
la época con insistencia –alrededor del año 1811 a 1816–,
posicionándose en contra de este reemplazo del trabajador
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Symploké revista filosófica octubre 2018

Centrándonos en el aspecto político, ve- pondía a un ser único. Es, más que un desarrollo
mos que los aires de la Revolución Francesa y sus consecuente de fases y aspectos independientes,
ideales –liberté, egalité, fraternité– se verán mer- una cosmología. Aun teniendo eso en cuenta, sa-
mados por el auge de las monarquías europeas y bemos que la visión de Marx es más bien la de
el fracaso de Napoleón2. En el contexto francés, un personaje preocupado por lo económico. Cabe
revive la monarquía de Luis XVIII, además de la destacar aquí, su propia definición de El Capital:
creación de la Santa Alianza3. En su contra, habrá
ciertas revueltas revolucionarias tanto del prole- En la presente obra nos proponemos investigar el régimen
tariado –fallidas–; como de la burguesía, la cual capitalista de producción y las relaciones de producción y
teniendo ya el poder económico cosecha el poder circulación que a él corresponden […] Lo que de por sí nos
político en la Revolución de 1830. interesa aquí, no es precisamente el grado más o menos alto
En el ambiente de la ciencia, durante de desarrollo de las contradicciones sociales que brotan de
este siglo, surge el pensamiento darwiniano so- las leyes naturales de producción capitalista. Nos interesan
bre la teoría evolucionista, además de la socio- más bien esas leyes por sí, esas tendencias que actúan y se
logía y la psicología como estudios aislados. Le imponen con férrea necesidad. (Karl Marx, 2000: 14)
sigue el ambiente cultural desarrollado por el
Romanticismo. Ambos, ciencia y arte, se preocu- Con todo ello, nos centraremos principal-
parán de buscar la verdad en su campo concre- mente en el primer tomo de esta gran obra, Das
to, como preocupación principal. Surgen, pues, Kapital, el cual se centra en la definición de la ar-
ya en el campo filosófico el positivismo –de la ticulación de la producción capitalista, su sistema
mano de Saint-Simon, Comte y Stuart Mill–, el y elementos básicos.
vitalismo de Dilthey y, como no, el marxismo. En
sí, el desarrollo marxista conjuga el resultado de ¿Qué temática aborda el Libro I?
un análisis del socialismo utópico francés, la filo-
sofía alemana y el liberalismo económico desde Como hemos mencionado, el primer libro
una perspectiva crítica. de esta obra recoge una argumentación genera-
Podríamos decir que en sí misma, la idea lizada acerca de los modos de producción del
del marxismo no es solamente una idea cosmo- sistema capitalista, abarcando el conjunto de sus
lógica creada por Karl Marx, sino que a la vez primicias y su manera de estructuración, desde
es una visión filosófica basada en el materialismo aspectos generales y desde un punto de vista ana-
dialéctico, una apuesta de contrastación científica lítico. Especialmente, recoge el aspecto de la fase
–la dialéctica–, una revisión de la economía que productiva que el autor concebirá como el pilar
apuesta por un materialismo histórico y, a su vez, clave de toda la estructura del capitalismo y, más
un conjunto de pautas que llevar a cabo, es decir, ampliamente, de todo modo de producir.
una praxis. Asimismo, el libro se dividirá en siete sec-
Además de todo esto, la realidad con- ciones principales. Cada sección poseerá un nú-
tenida en el marxismo refleja una visión antro- mero de capítulos concretos. La sección primera
pológico-social futura desde una perspectiva se fijará en la mercancía y el dinero; la segunda
historicista, ya que expone una consecución de en la transformación del dinero en capital; la ter-
procesos de desarrollo: en primer lugar, la revo- cera en la producción del plusvalor absoluto; la
lución, seguido de la dictadura del proletariado, cuarta en la producción del plusvalor relativo; la
desembocando en la primacía del comunismo. El quinta en la producción del plusvalor abosluto y
marxismo es, por lo tanto, todo esto y, además, relativo; la sexta en cuanto al salario; y la séptima
economía política. en relación al proceso de acumulación del capi-
Realmente, aunque nos preocupemos por tal.
desglosar cada aspecto comprendido en el pen- Como hemos referido, nos centraremos
samiento de Karl Marx, para él, todo él corres- en la sección segunda y tercera. Concretamente,
en los capítulos desde el cuarto al noveno.
por la máquina. Provocaría un descontento de los trabaja-
Especialmente, fijándonos, en este trabajo, en la
dores y un sabotaje constante a las fábricas, destruyendo concepción de la libertad.
las máquinas que provocaban el paro laboral.
2 Waterloo, 1814.
3 Francia, Prusia, Austria y Rusia.
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Síntesis de la Sección II: La transformación del Síntesis de la Sección III: Producción del plus-
dinero en capital. Capítulo 4, Transformación valor absoluto. Capítulo 5, Proceso de trabajo
del dinero en capital y proceso de valorización

Comenzando con este capítulo cuarto, Distinguiremos, en este apartado, entre la


el único de la sección segunda, Marx parte del potencia que posee el obrero de su capacidad de
presupuesto de que la comprensión del capital va trabajo y del trabajo en sí como acto. Este sistema
más allá de la circulación de las mercancías pero laboral se compone del trabajo en sí, los objetos
que, aun así, este es el punto clave del mismo. de trabajo –que son las materias primas–, y los
Para el autor, existe una distinción en la forma medios de trabajo –herramientas necesarias para
de circulación del dinero como dinero y el dine- el desarrollo del mismo–. Hará referencia Marx
ro como capital, dándose una compra-venta en el en este punto a la concepción del hombre como
sistema. Sin embargo, esto sería infructuoso si un animal que fabrica instrumentos. Para él, la
no se consiguiese una cantidad de dinero supe- diferencia entre épocas es la capacidad de cómo
rior a la apostada al comienzo. De esta manera, hacer las cosas.
el sistema se convierte en un refluir del ciclo del Englobaremos el objeto y los medios de
dinero, donde lo clave «es el valor de cambio producción como factores objetivos y, la fuerza
mismo». Llamará “plusvalor” a este aumento de de trabajo como factor subjetivo. El conjunto de
dinero. La transformación de dinero en capital se ambos, será denominado por Marx como “traba-
dará en este nuevo movimiento, siendo un proce- jo productivo” –mercancía en sí, el valor de uso
so sin término. Veremos que el dinero se muestra de la misma o el servicio–. Cuando un capitalista
en proceso, o lo que es lo mismo, será capital. Lo pone en marcha el sistema productivo, desea el
característico de este capital será, por lo tanto, el plusvalor entre lo invertido en la materia prima y
plusvalor que se obtiene del mismo. Se supondrá, el producto obtenido. Analizará, a continuación,
en torno a la circulación, un intercambio de ele- los supuestos de que la formación de valor ge-
mentos equivalentes en utilidad –capital para el nere plusvalor y, dándose el caso, de que no se
vendedor y mercancía para el comprador–. genere. Dará como conclusión que el capitalista
Distinguiremos, en este punto, que tanto obtendrá capital desde el momento en que el tra-
el capital que rinde un interés como el corres- bajador exceda su jornada de trabajo más allá de
pondiente al comercio son anteriores al capital la necesaria para producir el trabajo en cuestión,
productivo. Para Marx, debe actuarse en la mer- generando así una situación legal y afortunada
cancía que se compra, en el consumo. Hablamos para el capitalista. En definitiva, que el dinero se
de la mercancía específica llamada “fuerza de transforme en capital supone que la generación
trabajo”, esto es, la agrupación de capacidades del valor se amplíe por encima del pilar clave y el
mentales y físicas que se dan en la persona de proceso denominado como simple se haya trans-
un ser humano, el obrero, el cual debe ser libre. formado, a su vez, en proceso de valorización.
Surgirá la idea, además, que la perpetuación del Al final de este capítulo, el autor hace
capital fuerza de trabajo consistirá en la descen- memoria de que en el proceso de trabajo y la
dencia del mismo trabajador, que no puede darse formación de valor, tendemos a una producción
de forma atrofiada, ya que supondría un proble- mercantil; siendo una forma capitalista la unidad
ma a tiempo largo. Se forma un entramado de cir- del trabajo y valorización del mismo en la pro-
culación y mercado, en el que el consumidor es ducción de las mercancías.
quien compra la mercancía del trabajo del obre-
ro, quien generará una fuerza, que se reflejará en Capítulo 6, Capital constante y capital varia-
capital. Entendemos, en este sentido, que tendre- ble
mos dos grandes ejes a través de los cuales se
pone en marcha la rueda capitalista: el obrero y el El trabajador genera una doble caracterís-
dueño de fábrica o capitalista. tica de su propio trabajo: por un lado el cualita-
tivo, es decir, la conservación de los medios pro-
ductivos y, por otro, el cuantitativo, generando
el valor nuevo. Normalmente, se transfiere valor
desde el medio productivo al valor del producto
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en sí, ocurriendo de forma progresiva mediante el la sobreexplotación del trabajador.


desgaste de los medios o, directamente. Aun así, Lo que resta de este capítulo será una su-
no se puede transferir desde el medio más valor al cesión de ejemplos sobre esta regulación laboral
que el producto posee en sí mismo. En el caso de que ha supuesto el modelo capitalista. Así, Marx
las materias naturales, no se genera ningún plus- expondrá que el plustrabajo surge antes que el
valor de sí mismas. Además, el trabajador tampo- capitalismo –en toda sociedad que posea clases,
co puede generar el valor de la nada, sino que es de hecho–. Comenzará aquí Karl Marx una di-
parte de un ciclo de valor que se reinvierte desde sertación de alrededor de setenta páginas sobre
los medios al trabajo y que luego se expresa en el ejemplos laborales, como el trabajo diurno y noc-
producto. turno o la lucha por la jornada normal de trabajo,
Existe el capital constante y el capital las cuales suponen la praxis de esta síntesis que
variable. El constante hace referencia al que no hacemos. A destacar el ejemplo de las luchas de
modifica el valor ni es transformado mediante el clases en Inglaterra, en la que se protestaba por
proceso de producción. Sin embargo, lo emplea- considerar al trabajador simplemente como tiem-
do en fuerza de trabajo es denominado capital po de trabajo. También importante la ejemplifi-
variable porque sí propone una modificación del cación del economista que proponía en 1770 ese
capital. A pesar de ello, hay que tener en consi- ejemplo terrorífico de hospedaje y obligación la-
deración que el capital variable no determina que boral a los más pobres, probablemente en lo que
los elementos que lo componen puedan cambiar acabaron convirtiéndose, para Marx, esas fábri-
de valor, existiendo un efecto de retroactividad cas capitalistas. En este sentido, también aborda
entre el medio y el producto. el autor en este punto el trabajo de los adultos,
niños y mujeres.
Capítulo 7, La tasa de plusvalor
Capítulo 9, Tasa y masa de plusvalor
Hasta este punto, tenemos claro que exis-
te un capital inicial y un capital final, siendo el La síntesis de este escueto apartado con-
plusvalor una consecuencia del cambio efectua- fluye en la descomposición de la masa del plusva-
do. Cobrará una importancia notoria el doble lor, explicitando la posibilidad de variación entre
análisis: el del proceso de valorización, y el aná- magnitudes. Aquí Marx hará hincapié en los lími-
lisis completo. Marx hará, en este sentido, una tes infranqueables del crecimiento y de la capaci-
analogía con las matemáticas y con la química. dad de que el trabajo supone una jornada laboral,
La creación de valor será «la conversión no individuo por individuo, sino una puesta en
de fuerza de trabajo en trabajo». Así, en el aná- marcha laboral de la sociedad en su conjunto.
lisis puro, el capital constante equivaldrá a cero. Finalmente, Marx aclara qué entiende él
Indicará aquí que, probablemente, y dependiendo por capitalista. Hace referencia a que éste no se
de la sociedad a la que nos refiramos, el plustra- refiere a un sencillo dueño de fábrica, ya que es
bajo será el que genere el plusvalor. Creará aquí una mezcla entre obrero y capitalista. Para él, el
Marx un debate en relación al rebajamiento del capitalista verdadero es aquel que genera plus-
tiempo de trabajo, llegando a la conclusión de valor sin intervenir directamente en el proceso.
que el plusproducto no debe equipararse con el Tiene la capacidad de convertir el capital en plus-
resto de la producción, solo con la que expone el valor sin estorbar en el proceso de producción di-
trabajo necesario. rectamente. Es, por lo tanto, el mejor «productor
de laboriosidad ajena» y «succionador de plus-
Capítulo 8, La jornada laboral trabajo». Será más evidente, incluso, cuando se
genere el traspase de la dominación del obrero a
Marx parte en este apartado de las premi- los medios de dominación a su inversa, siendo los
sas de que la compra-venta de la fuerza laboral se medios productivos los que dominen y mermen
da en su valor correspondiente y que la necesidad la capacidad del obrero, surgiendo así lo que en
será una fracción de la totalidad de esta jornada. términos marxistas sería la alienación del obrero.
Surge aquí la famosa comparación de En definitiva, un entramado donde se
Marx del capital con la figura vampírica que solo conjugan los medios productivos, el obrero y el
«chupa trabajo vivo» y anota aquí lo negativo de capitalista, la jornada laboral y el capital como
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tal. Todo ello para generar un plusvalor, una eco- Esto nos hace reflexionar, a su vez, en el
nomía que rija el orden social y que, casi sin dar- pacto que existe en el sistema capitalista de la de-
nos cuenta, repercute en nuestras vidas desde una volución de este dar. El don es, necesariamente,
silenciosa atalaya que impregna todo. un acto que nace de la gratuidad y no de la obli-
gación o del pago de algo. Sin embargo, el capi-
¿El don de El Capital? talismo obliga, en cierto aspecto, a que este dar
siempre se deba ver recompensado. Volvamos al
Me gustaría fijarme, en este momento, en ejemplo humano, en el que claramente se atisba
la visión que Maurice Godelier ofrece en la obra esta idea. Supongamos que un conocido nos invi-
El enigma del don. Cabe aclarar que la idea clave ta a cenar a su casa. En la relación del don, este
surge del pensamiento del antropólogo francés acto de invitarnos a una casa a pasar un buen rato,
Marcel Mauss en su Ensayo sobre el don (1914). charlar y comer, es sano, desinteresado y nutriti-
Pero, ¿qué tiene de relación la figura del capita- vo tanto para el anfitrión como para el comensal.
lismo con el don? Sin embargo, el capitalismo obligará a que tenga-
Resulta que esta capacidad del hombre mos que llevar una botella de vino, justificando
del don, se subdivide en tres características clave: el acompañamiento de la comida, o creando la
dar, recibir y devolver. De hecho, esta obra anali- sensación en el invitado de que deberá, posterior-
za en síntesis el sistema organizativo de diferen- mente, re-invitar al conocido a su casa para pasar
tes tipos de sociedades, con el fin de entender qué una velada similar. Lo contrario a esta ambien-
proceso surgen y definen a cada sociedad. tación del don. No es así lo que Marx, y lo que
Podríamos desarrollar, en base a este en- Mauss, reflexionan. Esta retroactividad constante
sayo, nuestra propia visión del capitalismo y el tanto económica como en las relaciones perso-
don. Desarrollaremos, en este sentido tres aspec- nales impiden un crecimiento exponencial de las
tos clave: el capitalismo como opresión al don, el mismas. De hecho, si no se da esa reciprocidad,
pacto de devolución del dar y el don que supone se romperán los lazos sociales. Así de simple en
el trabajador en el sistema capitalista. el sistema capitalista.
Comenzamos, por un lado, refiriéndo- En tercer lugar, fijarnos en el aspecto del
nos al capitalismo como una antítesis del don. don que supone la existencia del trabajador en el
Nuestro sistema económico pervierte la idea de sistema del capital. Sin el obrero, sin el trabajo
esta donación, ya que siempre existe un contra- constante de este proletariado, el sistema se des-
to mercantil, laboral, social, un pacto que genere moronaría. Aquí pondrá el peso Marx en su visión
plusvalor, trabajo material. Vemos como, incluso, de la lucha de clases en el Manifiesto comunista.
el trabajador es denigrado hasta el punto en que se Sin esa mano de obra que constantemente trabaje
convierte ya en una simple herramienta más del por encima de su capacidad no habría una rueda
proceso de producción. Sin embargo, el don es constante del capitalismo que girase en favor del
mucho más que eso. La donación exige una natu- capitalista. Es así como el peón es aplastado por
ralidad en cuanto al dar (Godelier, 1998: 64). No la rueda. Y es así como el don se pervierte. El don
es necesaria una reciprocidad cuando se da. Por es visto, para el empresario, como la vida misma
ejemplo, tenemos un amigo verdadero, de esos del trabajador, que le generará un capital. El tra-
que cuesta encontrar y por los cuales merece per- bajador observa el don como el salario que se le
manecer. Si ese amigo constantemente, con cada remunera a final de mes, capital también. En el
favor que nos hace o le hacemos, esperase algo a capitalismo, el don es, valga la redundancia, más
cambio, nuestra amistad se vería empobrecida. Y capital. Es este el sistema que se pone en marcha
no es una tontería. Estas relaciones económicas y que gira sobre sí mismo, aplastando al traba-
afectan incluso a este ambiente humano que men- jador, al don y en el que el único aparentemen-
cionamos. Debido a nuestra concepción de com- te beneficiado será el capitalista, si fuese capaz
pra de un producto a través de capital, cambio de de comprender el entramado del capital y saber
valor por valor, utilidad por utilidad, todo se em- cómo moverse en él.
pobrece. Pensamos que las relaciones personales
funcionarán de la misma manera capitalista, y no Libertad, don y actualización
debe ser así. Se pervierte la amistad, en este caso,
como pervierte la capitalización excesiva. Hace unos días, el presidente de los
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Estados Unidos, Donald Trump, cumplió un año ta. La realidad que plasmaba Marx en El Capital
de mandato en la Casa Blanca. Este hombre es un no solo se renueva, sino que persiste, se transfor-
ejemplo claro de control del capital. Es un em- ma, se adorna y se mimetiza con nuestra socie-
presario que sabe, por un lado, cómo moverse en dad actual para aparentar lo que no es y seguir
este círculo capitalista y, por el otro, cómo influir perviviendo. No puedo no asemejar el virus de
en los otros para que le produzcan. Es el ejem- la gripe, el cual se redefine cada año, contra el
plo claro del capitalista que no interviene direc- cual nos vacunamos, con el entramado capitalista
tamente en el círculo pero que se beneficia del que, al igual que el virus, es capaz de pervivir
mismo. Es, sin duda alguna, un nuevo arte. Pero aun sobreexplotando y maltratando a día de hoy
un arte contrario al dar y que siempre, sin ningu- capacidades humanas y sociales.
na excepción, pisa al escalafón inferior.
Marx entiende que el trabajador debe po- Conclusión General
seer, lo que reconocemos como el mayor don del
ser humano: libertad. Deberá estar libre bajo dos Como síntesis general de este traba-
aspectos: para disponer de su fuerza de trabajo jo, tener claro un elemento. Al igual que pasan
como mercancía y carecer de otra mercancía que desapercibidos los autores clásicos griegos, los
ofrecer para ganarse la vida. cuales poseen una ética filosófica sorprendente-
Nace, entonces, la capacidad laboral del mente nutritiva, y nos perdemos actualmente en
trabajador como un don cualitativo del que el propuestas patéticas de Mindfulness y proyectos
sistema capitalista desarrolla un usufructo. Es de la New Age, pasa lo mismo con El Capital y
una cualidad humana base, clave, fundamental la propuesta marxista. ¡Ya Marx ha aportado una
y que, en muchas ocasiones se ve menosprecia- visión grandiosa del sistema!
da. Y entendemos a Marx, el trabajador debe ser, Más allá de ser una visión utópica de la
ante todo, libre. En ocasiones, no lo será por la sociedad, considerada así para muchos, es des-
propia imposición del contexto sociocultural que tacable que estas praxis del sistema marxista han
le rodea y, otras veces, tampoco lo será debido sido mal puestas en marcha. La idea de Marx de
a la sobreexplotación o debido a la mala gestión convivencia, así como de rodillo económico, pro-
de los poderosos de la economía, generando unos ponen una no explotación de ningún elemento del
puestos de trabajo indignos. sistema. Así, se rompería la cadena del proletaria-
Otro ejemplo claro de desvirtuar la condi- do oprimido y el burgués opresor, generando una
ción laboral de la libertad es la de la esclavitud. igualdad social. Para él, las características positi-
Era un problema en el pasado y sigue siendo un vas socioeconómicas que definen el sistema capi-
problema en la actualidad. Por un lado, estará el talista no cesarían con los cambios que propone.
impuesto por el estado, por otro los que poseen Es una apuesta clara por el progreso, aportando
un fin de explotación sexual y, en su mayoría, con un cambio desde la base, desde abajo, de lo eco-
el fin de explotación económica. nómico, que impregnaría todo ámbito político y
Surgen, pues, hoy en día, una diferencia- social. Quedaría anotarnos la posibilidad de recu-
ción de clases no solo en cada uno de los paí- perar esta obra y aprender, una vez más de Marx,
ses del mundo, sino también entre sociedades. cómo se desarrolla el sistema capitalista y cómo
De esta forma, la globalización no solo aparenta mejorarlo.
una desestructuración de la desigualdad, sino que
la sigue generando aún más, ya que promueve Bibliografía
el rol del país consumidor y el país productor. Godelier, Maurice. (1998). El enigma del don. Barcelona,
Asimismo, en la actualidad hemos trasladado el Paidós.
Harich, Wolfgang. (1978). ¿Comunismo sin crecimiento?
modelo proletario-capitalista al panorama inter- Barcelona, Materiales.
nacional. Marx, Carlos. (2004). Contribución a la Crítica de la
Economía Política. Granada, Comares.
Nacen los consumidores de las grandes Marx, K., Engels, F. (1998). Cartas sobre El Capital.
potencias y los productores en países que han sido Barcelona, Edima.
Marx, Karl, (2000), El Capital: Crítica de la economía po-
denominados subdesarrollados. Paradójicamente, lítica. Madrid, Akal.
estos países serían potencias si los consumidores Roca Martínez, Beltrán. (2008). Anarquismo y antropolo-
no expoliasen sus materias primas y manos de gía: relaciones e influencias mutuas entre la antropo-
logía social y el pensamiento libertario. Madrid, La
obra. La rueda del capital, de nuevo, se reinven- Malatesta.
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Reseña de
Rupertine del Fino,
Philipp Mainländer

Carlos Dario Romero


Estudiante Lic. Filosofía- UNSAM

MAINLÄNDER, Philipp; (2018) Rupertine del crito por Carlos Javier González Serrano, Direc-
Fino, 1ra ed., traducción y prólogo de Manuel tor de la Sociedad de Estudios en Español sobre
Pérez Cornejo, epílogo de Carlos Javier Gonzá- Schopenhauer (SEES) y la revista Schopenhaue-
lez Serrano, Escolar y Mayo Editores S.L., Ma- riana. La organización del libro es bastante clara
drid, 152 páginas. (ISBN: 978-84-17134-30-3) y brinda al lector cierta comodidad apelando a
una edición muy cuidada; también destaca en-
El intento de poder transmitir los funda- tre sus cualidades las notas a pie de página que
mentos de la filosofía a través de muestras narra- permiten que un lector no familiarizado obtenga
tivas es uno de los tópicos que ha persistido a lo información sobre algunas referencias filosóficas
largo de la historia del pensamiento universal. En y literarias.
un período que abarca desde la Antigüedad hasta El prólogo, a cargo de Pérez Cornejo, está
nuestros días, se ha intentado reunir los princi- destinado a presentar la relación que hay entre:
pios y las cuestiones que plantea la filosofía junto Muerte en Venecia (Der Tod in Venedig) de Tho-
con la narración y poder, con ello, hacerlos llegar mas Mann, la posterior adaptación fílmica de
a un público más amplio: todo esto bajo el nom- Visconti que tiene su base en dicha novela, y la
bre de una creación comúnmente llamada novela presente obra de Philipp Mainländer.
filosófica. El presente libro es la primera traduc- Se inaugura con una breve referencia al
ción de una novela corta escrita por el filósofo y último fotograma del film de Visconti. El traduc-
literato Philipp Mainländer (Offenbach am Main, tor presenta la trama de la película con el fin de
1841 -1876), la cual puede incluirse dentro del poder explicar el argumento y las principales in-
género de la novela filosófica. fluencias filosóficas que tuvo Mann al momento
El libro consiste en la edición de una pri- de redactar su novela (entre ellas, Platón y Nietzs-
mera —e inédita— traducción del alemán de una che). Lo llamativo en el desarrollo del argumento
novela corta titulada Rupertine del Fino (1875) de la novela de Mann, en paralelo al de la película
de Philip Mainländer realizada por Manuel Pé- homónima, es la identificación del contraste es-
rez Cornejo, Director de la Sección Española de tremecedor entre ciertos términos como “volun-
la Internationale Philipp Mainländer-Gesell- tad de ilusión” y “voluntad de verdad” (ambos
schaft. El libro, que consta de 152 páginas, se relacionados con la verdadera realidad en la que
divide en dos secciones: la primera comprende se encontraba Venecia: con pestilencia y corrup-
la traducción y el prólogo, ambos elaborados por ción) y con la conciencia de Gustav Aschenbach
Pérez Cornejo; la segunda incluye un epílogo es- acerca de la imposibilidad de corresponder al
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amor del joven Tadzio. traductor al develar que, aún teniendo en cuenta
Lo interesante de este punto de partida es que el filósofo se suicida, la filosofía antedicha no
poder rescatar la importancia de un anteceden- promueve exclusivamente el suicidio ni tampoco
te de la novela de Mann: la obra Philipp Main- lo condena. Esto es así aunque Dios haya toma-
länder en la que intenta exponer su concepción do esa decisión y el ser humano pueda también
radicalmente pesimista de la existencia. Luego tomarla (por lo que resulta ser el camino “más
de formular una serie de especificaciones sobre expedito” pero no es el más recomendable).
la novela (fecha de redacción, motivos, primera Por el lado del “pesimismo pasivo”, el
versión original, entre otros) se presenta una in- traductor exhibe el interés del filósofo en la im-
terpretación que conjuga al filósofo de Offenbach plicancia que posee la acción político-social re-
am Main con el escritor de La montaña mágica, tratada con el ensalzamiento de la “Orden del
estableciendo así un posible paralelismo entre Grial” (orden creada por el filósofo) que deberá
ambos. liberar a la humanidad de los padecimientos de
Pérez Cornejo resalta los factores que la vida (Mainländer, 2014: 395-407). Por ende,
permiten fundamentar este paralelismo como, la solución no es el suicidio. Esto hace un guiño
por ejemplo, la localización de ciertas variacio- a otro punto que Pérez Cornejo (y también, más
nes de los términos nietzscheanos “apolíneo” y adelante, Carlos Javier González Serrano) se en-
“dionisíaco” en ambas obras: “espíritu”, “vida”, carga de poner a disposición: punto que consis-
“artista”, “burgués”, “norte” y “sur”. Incluso, Pé- te —y subsiste— en la figura del “héroe sabio”
rez Cornejo, tomando palabras de Joachim Hoe- (weise Held) de la filosofía mainländeriana. La
ll, remarca que en Rupertine del Fino “ya se en- particularidad de éste consiste en permanecer en
cuentran ciertos ingredientes que constituyen la el mundo para iluminar a los demás y tratar de
novela decadentista de fin de siglo” (Mainländer, eliminar los padecimientos de la vida, sea con
2018: 13). escritos, sea practicando la virginidad, sea con
Luego, Pérez Cornejo ahonda en una ex- compromiso político-social y facilitar un tránsito
plicación de los lineamientos generales de la filo- más rápido hacia la “nada absoluta”.
sofía de Philipp Mainländer prestando principal Pérez Cornejo aporta más información
atención al “fin de la metafísica” cuya preocupa- sobre el cuadro general de la filosofía mainlände-
ción no es dirimir si Dios existe o no: Dios existió riana al considerar, nuevamente, “la voluntad de
—como unidad pre-cósmica— pero ya no exis- morir” que late en cada uno de los seres del mun-
te, ha muerto (se ha “suicidado”). De su muerte do. Gracias a la “voluntad de vivir” —presentada
resulta el surgimiento del mundo que obedece a a través del amor sexual— disminuye su ampli-
una ley entrópica que posee más rasgos metafí- tud. Es por eso que la búsqueda de la muerte es
sicos que físicos. También, cabe aclarar, uno de considerada, desde el filósofo, como “el derroche
los puntos interesantes a remarcar de la filosofía de las fuerzas vitales”. Incluso, Pérez Cornejo
de Mainländer es su concepción de la vida como aprovecha el momento de la explicación para co-
“camino hacia la muerte” entendida como “re- locar, en palabras más poéticas, ese “camino a la
dención final” (Erlösung) donde ésta es anhelada muerte” como “aquella Roma tanática”: la tum-
por Dios. Inclusive el filósofo expresa que en la ba.
vida existe una “voluntad de morir” (Wille zum Se concibe y expresa más claramente el
Tod) enmascarada por una “voluntad de vivir” ideal perseguido por Mainländer —y se ingresa
(Wille zum Leben) la cual impulsa a los diversos en los albores de la creación de la novela— me-
seres en la existencia hacia el nihil negativum (la diante la impronta que éste le da a la poesía y a la
“nada absoluta”). narrativa como herramientas indispensables para
Mientras continúa el recorrido iniciado, su expresión.
puede reconocerse la utilidad de prólogo como Pérez Cornejo no escatima en espacio
herramienta de comprensión para posibilitar, con para presentar las características de cada uno de
ello, una supresión de interpretaciones superfi- los personajes y su incesante y necesaria alusión
ciales de la filosofía de Mainländer, por ejemplo, al trasfondo interpretativo-filosófico de las carac-
aquellas que consideran a dicha filosofía como terísticas de cada uno de éstos en conexión con
un “pesimismo pasivo” o una “apología del sui- los tópicos mencionados, por ejemplo, la relación
cidio”. Esto último queda bien explicado por el de Wolfgang Karenner con el “héroe sabio”, la
65
Symploké revista filosófica octubre 2018

identificación de la “voluntad de vivir” con Ru- de los tiempos”.


pertine y Otto, entre otros. Asimismo, se indica, como también lo
Una de las consideraciones apreciativas mencionó Pérez Cornejo, que gracias al ejemplo
finales que deja relucir el traductor es la búsque- del ingreso de la civilización en Roma y Grecia,
da por parte de Mainländer del conocimiento fi- toda fuerza está en continuo movimiento hacia su
losófico mezclado con el amor y la belleza, todo destrucción y, de este modo, se expone “el derro-
expuesto con una notable claridad. che de las fuerzas”.
Ya con este cuadro general de la novela, Por esto es que la interpretación hecha por
el lector puede ingresar a la lectura del epílogo. González Serrano es digna de mérito al presentar
Éste presenta una interesante —y enriquecedo- los vericuetos de una lectura pedagógica de la fi-
ra— interpretación. Ésta parte de la afirmación losofía mainländeriana que consiste en dominar
de “la nada como antídoto” que remite a la puesta la voluntad mediante la “razonabilidad”, expre-
en escena, por parte de Mainländer, de uno de los sado en la novela con uno de los consejos dichos
más anhelados proyectos pedagógicos coloca- por Wolfgang Karenner a la joven Rupertine: “—
dos en su obra filosófica monumental: Filosofía Hazme caso, Rupa, muéstrate razonable” (Main-
de la redención, también traducida por Manuel länder, 2018: 34). Esto se vincula con aquello que
Pérez Cornejo y Carlos Javier González Serrano dijo el maestro Schopenhauer, y reafirma Main-
(Mainländer, 2014). länder, acerca de la interminable lucha contra la
Otro punto a resaltar es que Mainländer, voluntad (Wille), en otros términos: “kein Sieg
desde su novela, nos presenta un historia —muy ohne Kampf” (“sin lucha no hay victoria”).
humana— en la que a pesar de que los seres Ya finalizando, el autor del epílogo re-
humanos se den de bruces constantemente con- alza aquel “signo de amor a la humanidad” que
tra aspiraciones frustradas, deseos imposibles o radica en las acciones realizadas por el “héroe
circunstancias onerosas, se muestra una idea del sabio” como la consciencia de la aniquilación al
desenvolvimiento del mundo y de su compren- considerar la “nada absoluta” como lo mejor, la
sión. Esto es posible gracias a un proyecto educa- abstención al placer y la reafirmación de la ac-
tivo accesible tanto para el lector primerizo como ción político-social para el mejoramiento de las
para aquel que se encuentra familiarizado con la condiciones de la humanidad. Además de mostrar
filosofía mainländeriana. que la novela expone una educación del género
González Serrano se detiene también en humano para llegar al nihil negativum, González
la figura del filósofo que encarna el “héroe sabio” Serrano permite, mediante una pregunta, plantear
(weise Held) y destaca la diferencia entre éste y un punto de futura investigación para los intere-
el “sabio”. Gonzalez Serrano expresa con esto la sados en la posible relación entre Mainländer y
superación del ideal “ascético-nihilista” defendi- Marx teniendo en cuenta el tema del “capital”
do por Schopenhauer remarcando el “héroe sa- (Mainländer, 2018: 150) que, al momento de la
bio” que propone Mainländer donde se reafirma muerte de Mainländer, se estaba expandiendo por
en éste la unión del conocimiento de la falta de Europa.
valor de la vida con el ejemplo y por tanto, con la Es notable la labor realizada por estos dos
propia acción (Mainländer, 2018: pp. 144-145). grandes estudiosos, quienes nos acercan la edi-
Continúa González Serrano con la alu- ción de una traducción muy cuidada de un filó-
sión a la importancia de la acción político-social sofo del siglo XIX que ha pasado desapercibido.
ya que ésta genera algo en el otro permitiendo Este tipo de trabajo posibilita que la comunidad
dar cuenta de la esperanza que tiene Mainländer de interesados en la filosofía de Mainländer,
en un escenario alternativo. Ésta se expresa en Schopenhauer et al. continúe en crecimiento. Se
uno de los poemas de Mainländer titulado Am resalta, nuevamente, el esfuerzo de estas dos per-
Grabe Virgil´s (“Junto a la tumba de Virgilio”) sonas por traer a la vista del público esta versión
(Mainländer, 2018: 146); transcrito en el epilo- de Rupertine del Fino cuyo método de trabajo de
go para la comodidad del lector. Aún así, y como traducción y elaboración de un prólogo y epílogo
lo menciona allí, no hay que dejarse engañar tan permite a todo lector poder contextualizar la obra
fácil por semejante esperanza ya que el mundo como también invitarlo a profundizar en el estu-
no es más que un paulatino movimiento hacia la dio de otras obras de Mainländer.
aniquilación total y así se ingresa a la “plenitud Se realza, sin dudas, el trabajo de traduc-
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Symploké revista filosófica octubre 2018

ción y la profundidad conceptual de esta edición


que permite una lectura cómoda, dando cuenta
de la capacidad de los responsables que pone en
evidencia la dedicación, esfuerzo y profundidad
que se ha puesto en semejante proyecto de tra-
ducción y edición.

Bibliografía

Mainländer, Philipp; (2014) Filosofía de la re-


dención, 1era ed., traducción de Manuel Pé-
rez Cornejo y edición de Carlos Javier Gon-
zález Serrano, Xorki, Madrid.
Mainländer, Philipp; (2018) Rupertine del Fino,
1era ed., traducción y prólogo de Manuel Pé-
rez Cornejo, epílogo de Carlos Javier Gon-
zález Serrano, Escolar y Mayo Editores S.L.,
Madrid.

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Symploké revista filosófica octubre 2018

El antifeminismo
de Otto Weininger

Dardo Scavino
UBA

La misoginia es, sin lugar a dudas, algo su sexo.2


omnipresente en nuestras sociedades patriarca-
les. Pero para comprender mejor este fenómeno, El deber que impone el genio
habría que especificar cuál es la mujer a la que se
dirige esta actitud hostil, pues hoy sabemos que Otto Weininger presentó esta tesis en un
hay tres dimensiones de lo femenino: la biológi- libro publicado en Viena en mayo de 1903, al-
ca, la sexual y la genérica. Tomemos el ejemplo gunos días después de celebrar su vigesimotercer
de Madeleine Pelletier. Al decir que la mujer de- cumpleaños y cinco meses antes de dispararse
bía liberarse de la mujer, esta autora no disimu- en el corazón. En noviembre llegó a las librerías
la su desprecio hacia un cierto género femenino una segunda edición de Sexo y carácter. La obra
cuya subjetividad había sido moldeada por una fue reeditada veintiocho veces hasta 1932. Los
sociedad histórica particular: una mujer educada jóvenes hitlerianos estaban fascinados con ella,
para ser madre, esposa y ama de casa, alejada de pues Weininger no se limitaba a denigrar a la mu-
la vida política y cultural de su país.1 Un contem- jer, sino que, a pesar de pertenecer a una familia
poráneo de Pelletier, el austríaco Otto Weininger, judía de origen húngaro, acometía también con-
también pensaba que la mujer debía liberarse tra los judíos.3 Proponía el siguiente paralelo: el
de esa mujer que él despreciaba en igual medi- judío es al ario lo que la mujer es al hombre.4
da. Salvo que, desde su punto de vista, la mujer Parecería que el propio Hitler fue seducido por
en cuestión no era la manifestación de un cierto
género femenino ni el producto histórico de una 2 A pesar de ello, algunos autores han propuesto una lectura
“feminista” de Weininger. Cf. Allan Janik, Wittgenstein’s
sociedad particular, sino la consecuencia de un
Vienna Revisited, Transaction Publishers, New Branswick,
destino biológico: si las mujeres se encerraban en 2001, p. 40 y Steven Beller, “Otto Weininger as Liberal?”,
la vida doméstica, alejándose de la política y la en N.A. Harrowitz y B. Hyams (eds.), Jews & Gender. Re-
cultura, era a causa de un instinto sexual que las sponses to Otto Weininger, Philadelphia, Temple Universi-
inducía a actuar de esta manera. He aquí la dife- ty Press, 1995, p. 91.
3 En un artículo publicado en 1909, André Spire sostiene
rencia entre una feminista como Pelletier y un an-
que Weininger se suicidó por su odio de sí: André Spire,
tifeminista como Weininiger: para ella, la mujer Quelques juifs : Israël Zangwill, Otto Weininger, James
debía liberar su sexo, para él, debía liberarse de Darmesteter, París, Mercure de France, 1913.
4 Sobre el vínculo entre antifeminismo y antisemitismo
en Weininger, cf. el libro de Nancy Harrowitz y Barbara
1 Madeleine Pelletier, L’emancipation sexuelle de la Hyams, Jews & Gender. Responses to Otto Weininger, Phil-
femme, París, Giard et Brière, 1911. adelphia, Temple University Press, 1994.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

el joven vienés, pues en una ocasión le habría di- especie lo que el hombre es a la historia, pues la
cho a Dietrich Eckart que Weininger era el único historia no sería nada más que el engendramiento
judío honesto que había conocido (cosa que no le de la humanidad por sí misma.
impediría prohibir Sexo y carácter a causa de sus Contemporáneo de Sigmund Freud, de
reivindicaciones quizá demasiado efusivas del Ludwig Wittgenstein, de James Joyce, de Gustav
amor homosexual). Klimt o de Albert Einstein, Weininger creía, con
Pero los nazis no fueron los únicos en ad- todo, haber nacido en una época de decadencia
mirar a Weininger. También lo hicieron Reiner donde ya no habían más creadores de la talla de
Maria Rilke, Robert Musil, Hugo von Hofman- su ídolo, Richard Wagner. En su opinión, la culpa
nsthal y, sobre todo, Ludwig Wittgenstein.5 Ray de ese declive la tenían las feministas, quienes
Monk, el biógrafo de este último, llegó a utilizar estaban liberando la sexualidad de las mujeres de
una expresión central de Sexo y carácter como todos los lazos impuestos durante siglos por la
título de su biografía: El deber que impone el ge- religión, socavando de esta manera el orden pa-
nio.6 Wittgenstein adoptó este imperativo como triarcal. Las mujeres podían así abocarse sin obs-
lema de vida tras leer a su compatriota. El deber táculos a la misión que les era propia: seducir a
del hombre era la creación genial, la invención los hombres para perpetuar la especie. Los hom-
original, el hallazgo revelador. El deber del hom- bres dedicaban su tiempo, entonces, a corretear
bre era la poiesis en sentido griego: traer al mun- detrás de las faldas de encantadoras señoritas,
do algo que hasta entonces no existía. El hombre en lugar de consagrarse a la vida del espíritu; no
debía consagrar su vida, sus estudios y sus es- pensaban más que en el coito en lugar de inclinar-
fuerzos a engendrar algo en el terreno del arte, de se religiosamente sobre el estudio y la creación.
la filosofía, de la ciencia o de la política –nuevas Con el fin de conquistar mujeres, querían pare-
normas, nuevos paradigmas, nuevos valores–, sa- cer ricos y fuertes, ocupándose de sus fortunas y
crificando todo lo demás en el altar de esa voca- sus cuerpos en vez de dedicarse a los estudios y
ción creadora. al desarrollo de sus espíritus. Para Weininger, la
Al atraer sexualmente al hombre, la mujer sociedad debía ser un templo consagrado al per-
lo alejaba así de esta vida creativa para encerrarlo feccionamiento espiritual de la humanidad, pero
en la vida reproductiva, la familia y el hogar.7 Tal con su feminización y el declive del patriarcado,
era, según el joven austríaco, su función prima- devenía una incubadora destinada a la reproduc-
ria: la mujer no era más que un instrumento para ción del ganado humano.
la perpetuación de la especie. Sólo existía para
engendrar o traer al mundo individuos biológi- Bien macho
camente semejantes a sus progenitores. Para al-
canzar esos fines, la mujer debía buscar hombres La diferencia sexual suponía para Wei-
capaces de darle hijos sanos y de cubrir sus ne- ninger una asimetría de los sexos. Para el hom-
cesidades. Pero no era ese el destino del hombre: bre, el sexo solo es un “apéndice” (Appendix)8:
él había sido creado para crear, para engendrar él debe, por así decirlo, satisfacer rápidamente
y traer al mundo individuos espiritualmente di- esta urgencia fisiológica con el fin de dedicarse
ferentes de sus antecesores. El engendramiento a su función principal. Esta “apendicitis” sexual
femenino era carnal y biológico; el masculino, del hombre “no constituye todo el objeto de su
cultural y espiritual. La mujer era entonces a la vida, lo que le permite separarla psicológicamen-
te del resto de sus actividades, y con esto hacerla
5 Sobre la importancia del pensamiento de Weininger en consciente.”9. Para la mujer, en cambio, el sexo
Rilke, Musil, Hoffmannsthal y Wittgenstein, cf. Franco
Rella, “Weininger nella cultura viennesse del primo nove-
era todo y todo era sexual. Weininger escribió:
cento” en Il silencio e le parole, Milán, Fetrinelli, 1981, “Der Mann hat den Penis, aber die Vagina hat
pp. 11-29. die Frau”10, es decir, “el hombre posee pene, pero
6 Ray Monk, Le devoir de génie, París, ODile Jacob, 1993. la vagina posee a la mujer”. “La mujer es total
7 En una conferencia pronunciada en 1945, el filósofo ar-
gentino Francisco Romero, que tres años antes había tradu-
cido el diario íntimo del austríaco, sostuvo que esa miso- 8 Otto Weininger, Geschlecht und Character. Eine prinzipi-
ginia “monstruosa” se explicaba por una aversión psíquica elle Untersuchung, Wien und Leipzig, Wilhelm Braumül-
hacia el sexo y las mujeres: Francisco Romero, “La mujer ler, 1909, p. 115.
en la filosofía”, Anuario de Filosofía Argentina y America- 9 Idem.
na, nº 14, año 1997, p. 171-210. 10 Ibid., p. 116.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

y únicamente sexual”, explicaba Weininger, “ya “patológica”, es decir, “interesada”. Así pues,
que su sexualidad se extiende por todo su cuerpo, concluyó el austríaco, la mujer no es moral ni in-
y, por así decirlo, se presenta con mayor densi- moral: es amoral (amoralisch), incluso si a veces
dad en algunos lugares que en otros”11. De esta finge realizar actos morales con el fin de atraer
manera, Weininger se adelantó algunos años a su la atención de los hombres. Es amoral, puesto
compatriota freudiano Otto Fenichel, autor de la que su comportamiento, aunque interesado, no es
ecuación Girl = Phallus.12 egoísta. Su comportamiento no se explica por un
Pero esta sexualización integral del cuer- instinto de conservación del individuo, sino de la
po y de la vida no era, a su juicio, más que una especie; sus actos no son útiles para ella, sino para
consecuencia del destino biológico de las hem- su descendencia. Es la abnegación maternal. Ella
bras de las especies animales. Basta con ver lo protege su descendencia al punto de sacrificar su
que sucede con la mujer, dice el filósofo vienés, vida. Protege su progenie también al resguardar-
en el momento en que ya no está en edad de te- la de la dura lex del padre o de los imperativos
ner hijos y su belleza comienza inexorablemente del deber. Las mujeres serían “interesadas” sin
a marchitarse: desarrolla una vocación de casa- ser egoístas, “patológicas” sin ser inmorales, de-
mentera, de celestina (Kupplerin)13, con el fin de dicadas sin ser obligadas. No se doblegan ante
que las nuevas generaciones de hembras cum- el imperativo kantiano —ante la universalidad de
plan la misión que había sido suya, ayudándoles la ley—, pero tampoco obtienen ningún beneficio
a conseguir nuevos reproductores. Así, Weinin- personal.
ger creía dar una prueba contundente a su tesis. De hecho, Kant no había considerado esta
Cuando las mujeres asisten al teatro, escribe, son posibilidad en su Crítica de la razón práctica.
seducidas por un solo aspecto de la trama: quie- Habrá que esperar hasta que Freud, unos años
ren saber si el hombre y la mujer de la historia lo- después de la publicación de Sexo y carácter,
grarán unirse carnalmente14.El austríaco admitía aborde la cuestión en Más allá del principio del
que la mayoría de los hombres tenían dificultades placer. Había conductas humanas que no podían
para liberarse de los impulsos sexuales a fin de explicarse según el principio de placer o de la
dedicarse exclusivamente a los asuntos espiritua- utilidad individual, conductas que incluso iban
les (tal habría sido el caso de Richard Wagner, de en contra del interés del individuo, empujándolo
quien Weininger decía que era “el hombre más hacia el fracaso o la autodestrucción. Freud pen-
grande sobre la tierra después de Jesús”). Había, saba que estas conductas podrían explicarse por
pese a ello, una diferencia entre la vida espiri- las pulsiones de índole sexual, ya que estas no
tual del hombre y la de la mujer, ya que ésta es- estaban al servicio de la conservación del indivi-
taba completamente dominada por su sexualidad: duo, sino de la especie. Estas pulsiones no serían
todo lo que hacía, incluso aquellas cosas que, en de vida, sino de muerte. Freud suponía que estas
apariencia, más distaban del coito, no tenían otro pulsiones podrían en última instancia explicar
objetivo que el de seducir a los hombres para los actos altruistas o “puros” de la razón práctica
atraerlos hacia éste. Eso quería decir que, en tér- kantiana. Weininger veía las cosas de otro modo.
minos kantianos, la mujer no podía dedicarse de Para él había tres posibilidades: 1) un hombre
manera “desinteresada” a cuestiones morales o puede ser egoísta o no, inmoral o moral; 2) estos
estéticas. actos pueden seguir el interés personal o la ley
Es necesario recordar que, para Kant, las universal, la utilidad o el deber; 3) él podía ser un
acciones morales y las creaciones artísticas eran santo porque también podía ser un pecador. Una
esencialmente “desinteresadas”. Por lo tanto, mujer no sabía sino ser amoral, porque, aun sin
Weininger suponía que las mujeres eran incapa- ser egoísta, nunca cumplía con su deber.
ces de llevar una vida verdaderamente moral o
artística. Retomando el léxico kantiano, la ac- La mujer-objeto
tividad espiritual de la mujer no es “pura” sino
Al remitirse a los trabajos de Breuer y
11 Ibid., p. 117.
Freud, Weininger intentaba demostrar que la his-
12 Otto Fenichel, The Psychoanalytic Theory of Neurosis, teria no era un caso clínico entre otros, sino una
Londres, Odges, 1990, p. 80. característica esencial de la psicología femenina.
13 Weininger, op. cit., p. 347. El personaje de la mujer virtuosa era sólo una ac-
14 Ibid., p. 349.
70
Symploké revista filosófica octubre 2018

tuación para seducir al macho, un papel que la La mujer de la que el hombre se enamora
mujer representaba hasta el punto de la frigidez o no es más que un personaje creado por él mismo
de la devoción religiosa. Ese personaje era el que a su imagen; pero esa imagen no es su aspecto
Freud llamaba un “yo ideal”. Pero existía tam- exterior. Weininger adopta aquí también posicio-
bién el espectador que la mujer trataba de sedu- nes kantianas: la belleza de la mujer sería apenas
cir al interpretar ese papel: ese espectador era el la proyección de los ideales morales del hombre
“ideal del yo”. En el caso de la histérica –llamada sobre un cuerpo que al austríaco le resulta más
también la “histriónica”–, ese ideal del yo era el bien poco agraciado. El autor llegará a decir que
padre o una figura paterna. La escena montada el amor es una suerte de asesinato, pues el hom-
por la histérica buscaba, según Freud, seducir a bre mata a la mujer de carne y hueso para reem-
esta figura paterna, lo que explica por qué la re- plazarla por una efigie idealizada que se dedica a
presión del deseo sexual también tenía, en su opi- venerar. Si la mujer es esencialmente histérica, el
nión, un origen sexual. hombre sería esencialmente fetichista. El mejor
Weininger pensaba entonces que las hipó- representante de la psicología masculina no sería
tesis de su compatriota acerca del componente se- Don Juan, sino Pigmalión.
xual de la cultura no valían para la masculinidad, Si bien el amor humano no puede separar-
pues el hombre se consagra a la vida del espíritu se de lo sensible o de la sensualidad, Weininger
cuando logra abstraerse de sus apetitos sexuales o supone que este amor no deja de ser esencial-
“separarse psicológicamente” de ellos; la mujer, mente platónico. El hombre no se enamora de la
en cambio, ve en la vida cultural sólo un medio mujer real, sino de una mujer ideal creada por él,
más para llevar a cabo su misión reproductiva. como aquella estatuilla de la que hablaba Sócra-
Esta es la razón por la que Weininger sostenía tes en un pasaje del Banquete: el agalma. El amor
que la cultura de su época se estaba feminizando: no es del orden de la atracción sexual, sino más
ya no era una cultura del genio o de la creación, bien del orden de la veneración religiosa: de la
sino de la seducción, del espectáculo, de la apa- misma manera en que el hombre de Feuerbach
riencia y de la coquetería moral o estética. adoraba un Dios que él mismo había creado, el
Llegamos así a otra de las tesis centrales hombre de Weininger veneraba a esa diosa que él
de Sexo y carácter: puesto que las conductas de mismo había esculpido. Por ello, Weininger afir-
seducción son dominantes en la mujer, ésta tien- ma que el hombre no desea unirse sexualmente a
de irresistiblemente a convertirse en el objeto del esa mujer sublime que lo fascina.
hombre. “El falo es la causa de que la mujer sea Una vez más, Weininger se aproxima-
completa y absolutamente carente de libertad” ba a Freud y a sus dos resoluciones asimétricas
[unfrei],15 afirmaba el austríaco. Weininger lle- del complejo de Edipo. La mujer ideal de la que
ga a comparar la sensación de la mujer frente al Weininger habla es muy similar a aquella mujer
falo con la sensación del hombre ante la cabeza sexualmente prohibida y sublimada que el hom-
de Medusa: “El falo ejerce sobre ella una acción bre encuentra, según el psicoanalista, detrás de
hipnótica, fascinante”.16 Por esta razón, la mujer todas las mujeres que ama: la madre. En cambio,
evita la visión del hombre desnudo: cuando con- el hombre amado por la mujer sería un substituto
templa el sexo del hombre, la mujer se encuentra de una mirada idealizada: la del padre. El hombre
cara a cara con su destino. Para Weininger, la di- es seducido por un “objeto” inaccesible; la mujer
visión sexual entre el hombre y la mujer coincide intenta seducir un “sujeto” distante y, por así de-
con la diferencia entre sujeto y objeto. Pero no cirlo, inconmovible.
debemos olvidar aquí que se trata del sujeto de
la tradición del idealismo alemán, es decir, de un El hombre es el porvenir de la mujer
sujeto que constituye su objeto. Es por ello que
Weininger afirma que la belleza femenina es una Evidentemente, no había genio femenino
creación del hombre. para Weininger. Sin embargo, el austríaco estaba
obligado a reconocer que hubo mujeres de genio a
15 Ibíd., p.341. Slavoj Zizek confronta la teoría del falo
lo largo de la historia, comenzando por la primera
de Weininger con la de Jacques Lacan: Slavoj Zizek, The poetisa lírica: Safo de Lesbos. Pero este ejemplo
Metastases of Enjoyment. Six Essays on Woman and Cau- resulta valioso para Weininger, pues los poemas
sality, Londres, Verso, 1994, pp. 224-233. de amor de Safo se dirigían a mujeres. En este
16 Ibíd.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

detalle, el autor encuentra la prueba de la mascu- cribía por ejemplo en una sección del Figaro de-
linidad de las mujeres geniales. Según su teoría dicada a Petits blancs y a De quelle couleur sont
de la bisexualidad, en efecto, la masculinidad y la les blancs ? de Aymeric Patricot:
feminidad no son dos realidades completamente
separadas, sino dos polos de un continuo. Todos Miseria financiera, miseria social, miseria psíquica, miseria
los hombres tienen algo femenino; todas las mu- familiar, incluso miseria sanitaria, Patricot deja hablar a sus
interlocutores, quienes le confían sus pesares, su sentimien-
jeres tienen algo masculino. Para Weininger, en- to de privación, su odio hacia los otros y hacia sí mismos;
tonces, todo era una cuestión de grados: pensaba le confían hasta la miseria sexual de los jóvenes proletarios
que los homosexuales masculinos y femeninos blancos, quienes, educados en el universo del feminismo
eran los valores intermedios entre los dos polos occidental, no pueden rivalizar con la virilidad ostensiva de
de la escala. Las mujeres que poseían atributos de sus competidores negros o árabes, que seducen a muchas
mujeres blancas –rubias preferentemente-, como lo prueba
genio, en su opinión, tenían un fuerte componen- el éxito del sitio blanchablacks.com, que Patricot interpreta
te masculino que las empujaba al lesbianismo. como la revancha simbólica de la colonización, sin ver que
No había mujer genial sin una cierta inclinación ello expresa también la antigua atracción de las mujeres por
hacia las otras mujeres y sin un poco de bigote. el macho dominante, el vencedor, siguiendo el ejemplo de
Weininger pensaba entonces que ciertas mujeres esas francesas que se acostaban durante la Segunda Guerra
podían liberarse de su naturaleza femenina, pero Mundial con soldados alemanes y luego americanos.17
para ello debían poseer un componente biológico
y sexual masculino. Esto quiere decir que la mu- Más allá de los habituales fantasmas se-
jer totalmente liberada sería, para él, un hombre.xuales del racismo, podemos discernir en este
Por lo tanto, para combatir la feminiza- texto una de las más flagrantes contradicciones
ción de la sociedad, Weininger proponía la mas- de la doctrina de Weininger: las mujeres moder-
culinización de la mujer. Puesto que la biología nas amarían siempre a los machos dominantes
femenina era la causa de todos los problemas, pero, sin que se sepa por qué, ellas los habrían
esta masculinización debía ser, en primer lugar, destronado, humillado, castrado. Pero eso no es
biológica. Weininger era consciente de que esta todo. Considerando “la antigua atracción de las
liberación de la humanidad era utópica (al menos mujeres por el macho dominante, el vencedor”
en su época): para liberarse de la sexualidad era –“antiguo” no significa aquí viejo, sino atávico-,
necesario renunciar a la procreación y a la per- ellas buscarían los novedosos “conquistadores”,
petuación de la especie. Una humanidad espiri- los invasores de Francia provenientes de culturas
tualizada no tendría entonces nada de animal; no patriarcales y desbordantes de testosterona. Zem-
tendría nada de especie biológica. Una humani- mour parecería inquietarse entonces por los cam-
dad totalmente espiritualizada, liberada de la se-bios que esos extranjeros estarían introduciendo
xualidad, sería un mundo sin mujeres, sin aquella en la cultura francesa; pero de hecho, estaría
mitad de la humanidad cuyo papel sería asumir queriendo que el hombre blanco, el buen ario, se
la reproducción de la especie. La liberación de convirtiera en ellos, o que los extranjeros con su
la humanidad, en su opinión, era imposible sin la “virilidad ostensiva” terminaran de una vez por
liberación femenina, pero, para llegar a ésta, lastodas con la cultura castradora del “feminismo
mujeres debían liberarse de su sexo y acercarse occidental”, restableciendo así la buena y vieja
biológicamente a los hombres. Así, el austríaco cultura patriarcal.
zanjaba la discusión bizantina sobre el sexo de Hay ciertamente otras huellas de la doc-
los ángeles: una humanidad perfectamente ange- trina de Weininger en el texto de Zemmour: cuan-
lical no conocería la diferencia sexual. do dice, por ejemplo, que las mujeres han amado
siempre a los “conquistadores”, él las ubica del
Conclusión lado de la naturaleza, pues su deseo no cambiaría
con los años. Los “jóvenes proletarios blancos”,
Sexo y carácter inspirará toda una tradi- por otra parte, serían el producto de una cultura
ción de la extrema derecha europea, aquella que histórica particular: han sido “educados en el uni-
explicará el declive de las sociedades a causa de verso del feminismo occidental” y no saben cómo
su “feminización” y la crisis del “patriarcado”. cambiar su manera de ser para competir con los
Uno de los promotores más populares de esas
teorías, el periodista francés Éric Zemmour, es- 17 Éric Zemmour, “Petits blancs et bonnes consciences”, Le
Figaro, 4 de diciembre de 2013.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

machos venidos del extranjero (remarquemos


aquí que el hispanismo “macho” ya sugiere que
–para una cierta cultura francesa- siempre vienen Dardo Scavino (2016), La fonction de la misogy-
del exterior, más específicamente del Sur). La nie dans la pensée d’Otto Weininger. En Maurice
“atracción de las mujeres” por los conquistadores Daumas and Nadia Mékouar-Hertzberg (dir.), La
sería algo natural; la actitud masculina de con- misogynie. Des vestiges du passé aux combats
quistar, cultural. Así, la feminidad sería biológi- d’aujourd’hui (pp. 63-73), Peter Lang.
ca, mientras que la virilidad sería histórica.
No habría entonces diferencia entre las Traducido en el marco del programa Interpres
mujeres de la horda primitiva, sumisas al macho de la Universidad Nacional de San Martín (UN-
dominante, y las mujeres de la actualidad; lo que SAM). Coordinador: Alejandro González. Par-
significa que las mujeres viven verdaderamente ticipantes: Gabriel Saia, Pedro Tenner, Santiago
fuera de la historia. Los jóvenes, en cambio, ha- Bellocq, Matías Amaya.
brían perdido el “antiguo” instinto de conquista
en tanto habrían sido enteramente moldeados por
una sociedad histórica dominada por la cultura
feminista (al menos los jóvenes europeos, ya que
los otros, incluso si viven en Francia, donde esta
cultura parece imponerse desde los años sesenta,
no habrían tenido inconvenientes para conservar
este instinto y su “virilidad ostensiva”).
Ciertamente hay diferencias entre Wei-
ninger y Zemmour, pues el austríaco no habría
lamentado “la miseria sexual de los jóvenes
proletarios blancos” mencionada por el francés,
sino que la habría percibido más bien como una
castidad beneficiosa. Pero, de cualquier mane-
ra, ambos comparten las mismas incongruencias
doctrinarias, pues es difícil saber por qué los
hombres (blancos) se habrían sometido un buen
día a esta cultura femenina, mientras que las mu-
jeres (¿blancas?) seguirían sus tendencias natu-
rales, biológicas, enteramente desconectadas de
la educación y la historia. Zemmour no explica
por qué la conducta sexual de los jóvenes blancos
(y por si fuera poco, “proletarios”, con toda la
connotación sexual de la antigua clase romana)
sería moldeada por la cultura dominante mientras
que la conducta de las mujeres occidentales sería
simplemente forjada por la naturaleza. Se abstie-
ne por otra parte de explicar por qué estas mu-
jeres dominan nuestra época si éstas desean ser
dominadas por los hombres. ¿Por qué las mujeres
occidentales han castrado a los machos blancos
para luego adorar la “virilidad ostensiva” de los
extranjeros? Es un misterio. Pero todos esos mis-
terios no son incógnitas de la ecuación femenina
que un día encontrarán una solución. Como los
misterios de la religión, se trata aquí de incon-
sistencias teóricas, el tipo de inconsistencias que
jamás impidieron a una doctrina conquistar los
espíritus ni traspasar las épocas.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

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Symploké revista filosófica octubre 2018

Los procesos actuales


de deslegitimación
de las violencias basadas
en el género y las vueltas
del patriarcado
Alejandra Lo Russo*
UBA

Resumen of violence, and to point out the specificities and


challenges that the professional teams working in
El presente trabajo se propone plantear the care of violence face in institutions. Different
los puntos de partida conceptuales para pensar current situations of violence allow us to reflect
las violencias basadas en el género en sus dos on the subjective transformations in men and
formas de manifestación: las violencias extremas women, and to summon ethical positions in
y las invisibilizadas. Asistimos actualmente a relationships to the other.
procesos de deslegitimación de estas violencias,
simultáneamente en las prácticas, en lo micro I. Puntos de partida en las violencias basadas
de las instituciones, su legitimidad patriarcal en el género
se sostiene. Interesa situar: la complejidad de
la trama social y subjetiva de las violencias Las violencias basadas en el género es
y puntualizar las especificidades y desafíos tema central y tradicional en el ámbito de los es-
que en las instituciones atraviesan los equipos tudios de género y subjetividad. Se dispone en
profesionales que trabajan en la atención de las la actualidad de un conjunto de saberes respecto
violencias. Diferentes situaciones de violencias de esta temática, formas de entender el problema,
en la actualidad permiten reflexionar sobre modos de intervención y revisiones de prácticas
las transformaciones subjetivas en varones y y experiencias obtenidas en contextos diversos.
mujeres, y convocar a posicionamientos éticos en Interesa en este artículo aportar al debate en este
las relaciones al otro. campo, algunas precisiones conceptuales y re-
flexiones producto de la experiencia clínica en la
Summary atención1 de mujeres que han atravesado diferen-
tes formas de violencias, y en el trabajo de forma-
The present work proposes to set out the ción de recursos humanos2 y profesionales, en el
conceptual starting points to think about violence
based on gender, in its two forms of manifestation, 1 Atención como psicóloga clínica en diversas institucio-
extreme violence and invisibility. At present we nes de salud del sector público y como psicoanalista en el
are witnessing processes of delegitimization of ámbito privado.
these violence, simultaneously in the practices, 2 Formación de recursos humanos desde la Facultad de
in the micro of the institutions, their patriarchal Psicología de la UBA, Cátedra Introducción a los Estudios
legitimacy is sustained. It is interesting to situate: de Género, y otras universidades públicas, en formación
de grado y posgrado, y en la supervisión y asesoramiento
the complexity of the social and subjective plot de equipos profesionales que trabajan en múltiples sectores
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asesoramiento y supervisión de equipos técnicos violencias basadas en el género, existen formas


interdisciplinarios dedicados a esta tarea. extremas: los femicidios y travesticidios, el mal-
Cabe decir aquí que la violencia en ge- trato físico y psíquico, la violación, el abuso se-
neral y las violencias basadas en el género en xual, la trata de personas con fines de explota-
particular se presentan como un problema social ción sexual y laboral, las prácticas excluyentes
complejo; para ubicarlo con mayor precisión, se y discriminatorias basadas en el género, la con-
trata de un problema que se sostiene en la tensión dición identitaria y de elección sexual. Existen
entre lo social y lo psíquico. Esta complejidad otras formas menos evidentes o invisibilizadas
está dada, en primer lugar, por la multiplicidad (Fernández y Giberti, 1989) de violencia que se
de sus determinaciones, es decir, se encuentran ponen en juego en la vida cotidiana, en los vín-
articuladas allí varias dimensiones que respon- culos, en las familias, en los lazos de parejas, en
den a lógicas diversas, el orden cultural violento el ámbito de lo privado y así como también en la
(Franco, 1999), el sistema patriarcal, las relacio- esfera pública. Son violencias, tratos injustos e
nes de poder socio-históricamente encarnadas en inequitativos, que se materializan en la vida de
las subjetividades (Benjamín, 1996), formando las mujeres a través de la desigual distribución y
parte de cuerpos y psiquismos, las pedagogías de uso del dinero, de responsabilidades domésticas
la crueldad (Segato, 2018), los sentidos y prácti- y de cuidado de otros y otras en las familias, de
cas de violencias con origen en la infancia como las posibilidades de desarrollo personal y laboral,
trama propia de la masculinidad tradicional hege- del libre ejercicio y exploración de la sexualidad
mónica (Lo Russo, 2012), entre otros aportes de y el erotismo. Estas formas de violencias invisi-
este marco. bilizadas así como las formas extremas se fundan
Por lo cual no es posible utilizar una sola en relaciones de poder, se instalan y reproducen
categoría conceptual, un único operador lógico por su legitimidad sostenida en la trama subjetiva
proveniente de una única disciplina para abordar- y social.
lo. Desde el enfoque que tensiona hacia el extre-
mo psíquico, psicológico, se cae en ocasiones en II. Las violencias extremas y los equipos téc-
reduccionismos, psicologismos, desde conceptos nico.
que fueron gestados y se utilizan en el interior de
los dispositivos del campo “psi”, y que luego se Asistimos actualmente a procesos de des-
trasladan sin mediaciones a procesos de otro or- legitimación de las violencias basada en el géne-
den. Este es el caso cuando se tiende a interrogar ro, la condición identitaria y de elección sexual,
sobre la responsabilidad o la participación de las estos procesos recorren diferentes circuitos. En
mujeres en las situaciones de violencia, sin tomar cuanto a las formas extremas de violencia, hay
en cuenta esa multiplicidad de determinaciones. un consenso actual que las rechaza, legisla y san-
En segundo lugar, su complejidad radica en la su- ciona, no solo para prohibir sino también, en teo-
perposición de otras problemáticas que se anudan ría, para prevenir su ejercicio. Se van instalando
de modo tal que hacen que se vuelva irreductible. nuevos modo de entender los lazos entre subje-
Suelen articularse en las situaciones de vida de tividades signadas por los imaginarios de géne-
las mujeres afectadas por las violencias proble- ro, nuevas formas que son producto de intensos
máticas de múltiple vulneración de derechos, ca- movimientos de trabajo y puja en la historia de
rencias habitacionales, falta de acceso y cobertu- las mujeres, y de personas afectadas por las vio-
ra de demandas relacionadas con su salud, la de lencias. Podría decirse, a grandes rasgos, que las
sus hijos e hijas y familia, dificultades en la inser- violencias extremas son en la actualidad conside-
ción laboral, pobreza, fragmentación de sus vín- radas intolerables, su legitimidad ha caído, pero
culos sociales, condición de migrantes. Esta es la simultáneamente en las prácticas, en lo micro de
realidad que predispone al padecimiento de las las instituciones, esa deslegitimación no es tan
violencias, arma vulnerabilidad y da persistencia efectiva, se sostiene en sus intersticios.
a las mismas, no solo como situaciones que exter- Para ver este proceso de mutación en al-
namente afectan a las mujeres sino como historia gunos ejemplos, se pueden tomar los casos de
propia, subjetivamente encarnada y vivida, que violencia basadas en el género en el ámbito de lo
marca un modo de existencia posible. familiar o en las situaciones de violencia sexual.
Entre los modos de manifestación de las Se observan allí los procesos de revictimización
de las mujeres en las instituciones que brindan
del Estado. asistencia, la “ruta crítica” (Sagot y Carcedo,
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Symploké revista filosófica octubre 2018

2000) que recorren sin poder obtener respuesta de las teorías de las que se disponen y de prác-
adecuada a sus demandas. La revictimización que ticas que están instituidas. Asimismo, que los
ocurre por la imagen culpabilizante que exponen integrantes de los equipos puedan reconocer y
los medios de comunicación, juzgando con fre- reconocerse, muchas veces como no exentos de
cuencia si estas mujeres son creíbles, son buenas vulneraciones propias. Los y las profesionales
víctimas, acordes a estereotipos impuestos, si sus suelen estar afectados por la sobrecarga que im-
relatos son coherentes y supeditados a los imagi- plica el trabajo institucional, la superposición de
narios tradicionales, se les cuestiona si han pres- las demandas complejas señaladas anteriormen-
tado consentimiento a esas prácticas violentas y te, los escasos recursos materiales disponibles
sí muestran las suficientes más marcas físicas en en general en materia de género, la burocracia
sus cuerpos de esa resistencia. de las estructuras institucionales, su funciona-
Es posible observar la persistencia de la miento fragmentario, inflexible y patriarcal, las
legitimidad de la violencia, por ejemplo, en otra modalidades de contratación laboral precarizada
de las formas extremas en que se manifiesta: la producto de procesos neoliberales de larga data,
trata de personas con fines de explotación sexual, y el no reconocimiento económico y simbólico
de la cual las mujeres y jóvenes pobres son sus de la alta profesionalización y experiencia fre-
principales víctimas. Allí cuando pueden ser li- cuentemente existente en estos equipos y reque-
bradas de ese delito por el cual se encuentran rida como condición necesaria para el abordaje
afectadas, se topan luego con procesos judiciales de esta temática.
que tienden a no tener fin, que no consiguen dar el A esta descripción de los equipos que tra-
efecto reparador a su sufrimiento psíquico. Se ar- bajan en el campo de las violencias debe sumarse
ticulan y repiten en las instituciones que trabajan los efectos de la traumatización vicaria (Figley,
con esta temática la deslegitimación de sus testi- 1995) que se manifiesta en los y las profesionales
monios, de las palabras de las mujeres damnifi- como un fuerte estado de tensión producto de ex-
cadas. El patriarcado se recicla infiltrado en las ponerse en forma permanente al trauma, al dolor,
instituciones, haciendo carne en ellas, no dando a procesos crónicos y al sufrimiento constante
credibilidad a sus historias de vida y revictimi- del otro. Este efecto, que ha sido descrito para el
zándolas al interior del propio sistema judicial. El trabajo con padecientes de traumas y catástrofes
discurso jurídico se mantiene en lo formal alojan- y también en otras áreas de intervención profesio-
do y en las prácticas expulsando, fragmentando nal como lo es la discapacidad (Cantis, 2008), es
y violentando. De este modo la legitimidad de la una consecuencia que se verifica cotidianamente
violencia se transforma y conjuntamente se reci- en el trabajo con víctimas de violencias.
cla el patriarcado. Por los modos en los cuales el Conjuntamente, como efecto conocido y
sesgo patriarcal permanece en las prácticas, hay específico en el trabajo con violencias, se produ-
mucho en lo cual trabajar en la transformación de ce en muchas ocasiones en los y las integrantes de
los imaginarios que circulan por las instituciones, los equipos la reproducción de los síntomas pro-
de usuarias y profesionales, más allá de las de- ducidos por la violencia que portan las personas
finiciones que deslegitiman a nivel del discurso damnificadas, como por ejemplo la afectación de
social la violencia extremas basadas en el género. las capacidades cognitivas o afectivas y el agota-
En relación a los equipos de trabajo técnicos y miento de la empatía. Puede observarse también
profesionales en este campo, por la complejidad el espejamiento institucional de la violencia, que
señalada anteriormente se requiere poder situar ocurre cuando se reproducen en los grupos pro-
los puntos de partida desde los cuales se inter- fesionales el circuito mismo de la violencia, la
viene, las múltiples vulneraciones de las muje- fragmentación en la dinámica de los equipos, el
res damnificadas, y también los contextos de las silenciamiento, el descreimiento y la descalifica-
instituciones y los equipos. Esta delimitación es ción. Estas son variables que causan un intenso
condición para elaborar las frustraciones que pro- sufrimiento psíquico a los y las profesionales y
vienen del trabajo en ese campo y poder sostener da origen a la necesidad de tomar distancia, y fre-
la tarea a largo plazo. cuentemente el abandono de la tarea. En la expe-
Uno de los desafíos de quienes trabajan riencia de asesoría y supervisión de equipos son
con población vulnerada por las violencias es el efectos esperables de observar, y una parte muy
sostenimiento de sus potencias intervinientes. importante de trabajar con ello es la formulación
Para ello, una cuestión a tener en cuenta será el de acciones para afrontarlos y de estrategias de
trabajar sobre las propias fantasías omnipotentes autocuidado. Vale decir que estas especificidades
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Symploké revista filosófica octubre 2018

van más allá de las características individuales sa por considerarse despedidos sin justa causa,
de técnicos y profesionales, no se ha de depositar la jueza interviniente confirma la existencia de
exclusivamente en ellos y ellas aspectos que son pruebas suficientes para que se hiciera efectivo
propios de la dinámica específica de este campo. el despido, consecuentemente, los empleados no
Nuevamente, se trata de no acotar a una lectura reciben indemnización por el cese de la relación
psicológica individual, ya que ésta es solo una laboral. Esta noticia de actualidad permite pensar
parte del problema; es importante poder ver, por en un caso concreto varias cuestiones sobre las
lo tanto, lo que se encuentra en tensión en lo gru- mutaciones sociales y subjetivas presentes, y las
pal que sostiene la particularidad de este trabajo. lecturas de la realidad.
En primer lugar, asistimos a una muta-
III. Deslegitimando las violencias cotidianas, ción que se produce en las instituciones, haciendo
hacia nuevas masculinidades que tenga consecuencias sobre las vidas de las y
los sujetos, con normativas que intentan reparar
La legitimidad del ejercicio de las violen- donde se produjo un daño y sancionar simbólica
cias basadas en el género, la orientación sexual y y materialmente a aquellos que en otros tiempos
la condición identitaria se encuentra en transfor- se consideraban a sí mismos con derecho a de-
mación, a la vez que el patriarcado se recicla y cir, actuar y tomar el cuerpo de las mujeres. En
persiste en formas sutiles y efectivas. La apuesta el debate sobre este fallo, entraron en confron-
al cambio se produce a partir de esfuerzos con- tación diversas posiciones, sobre si el relato de
trahegemónicos para abrir visibilidad a ciertos esa mujer era creíble (como suele ocurrir), si con
problemas y existenciarios que están allí y no ese fallo no se estaba cediendo a las presiones
han tenido hasta el momento representación en el sociales cuando en lo concreto no se disponía de
universo de lenguaje dominante. Se trata dar voz suficientes pruebas para concluir de ese modo,
a aquello silenciado, es una puja por la nomina- si no se estaba incurriendo en una injusticia con
ción, o bien por una forma nueva de representa- estos trabajadores reales víctimas del sistema ca-
ción, crucial en el mundo humano por naturaleza pitalista, y otras cuestiones por el estilo. No es
simbólico. Se trata de conflictos de poderes, por casual que fuese una jueza mujer la que aportó un
lo tanto no es un proceso que pueda darse tibia- fallo en este sentido que valió para crear mayor
mente, espontáneamente: hay una parte de radica- conciencia y sensibilidad en materia de género y
lidad necesaria, cierta fuerza disruptiva en juego, violencias, a la vez que colaboró a sentar un pre-
y no será esperando el consentimiento armonioso cedente para situaciones similares que afectan a
de las partes que esos conflictos de discursos, de otras mujeres.
prácticas, puedan dirimirse. Una perspectiva re- En segundo lugar, acerca de las subjeti-
lacional y política del problema permite entender vidades femeninas y la posibilidad de hacer una
aspectos que de otra manera permanecen opacos. denuncia pública respecto de una práctica histó-
El otro nivel de las violencias, aquellas que per- rica y masivamente padecida por las mujeres y
manecen invisibilizadas y se encuentran en muta- en extremo naturalizada en lo social patriarcal.
ción, puede verse en un ejemplo. Hace poco tiem- Hacer efectiva una denuncia implica una nueva
po se dió a conocer una noticia en los medios de posición de las mujeres en lo social y una trans-
comunicación con el siguiente titular: “Despiden formación subjetiva que habilita cada vez más a
a dos empleados por piropear” (Guizzardi, 2018). tomar la palabra. Se juega allí la anticipación y
La noticia así titulada remitía a un caso de acoso reconocimiento propio, a que se va a ser escu-
callejero ocurrido en una ciudad del interior del chada, que otros y otras podrán entender, recono-
país. Una joven denuncia en redes sociales que cer y legitimar esa denuncia, y eventualmente las
ha sido acosada verbalmente en la vía pública instituciones del estado sabrán alojar y responder
por dos empleados de una conocida empresa en a ello. Es una posibilidad dada por nuevos modos
esa localidad. Por su parte, la empresa al tomar de nominar socialmente antiguas prácticas. La
noticia de lo ocurrido sanciona a los trabajado- transformación de los imaginarios hace síntoma
res con el despido, argumentando que se encon- en el titular de la noticia, lo que antes era una
traban en horario de trabajo y con indumentaria forma de seducción desde las significaciones so-
de la compañía que los identificaba claramente, ciales hegemónicas, el piropear, resulta ser hoy
y planteando que el hecho perjudicó a la imagen insultante, agraviante. Se abre visibilidad a esa
y política de la empresa. En el posterior proceso dimensión de violencias en lo intersubjetivo, que
judicial que los empleados inician a la empre- requirió la construcción y acceso a nuevas regu-
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Symploké revista filosófica octubre 2018

laciones en los lazos al otro (Ley Nº 26485, 2009; desresponsabilizarlas, sino de una apuesta de la
Ley Nº 5742, 2017). mano con otras mujeres (ha sido así en la histo-
En este caso, el centro de la reflexión debe ria de este colectivo) a construirse en los hechos
residir en una cuestión fundamental: la posibili- concretos como ciudadanas plenas (Tajer, 2018).
dad de acceso de las mujeres al espacio público y La postura que apela a la simple responsabilidad
la circulación de las mismas de modo libre y se- de las mujeres, sin historizar sus vulnerabilidades
guro. Desde el enfoque de subjetividad y género y determinaciones específicas, produce un desli-
se realiza un análisis de la historia de este colec- zamiento hacia lo culpabilizante y la revictimiza-
tivo. En ese sentido, se deben tener en cuenta las ción, y espera de parte de ellas, en sus situaciones
particulares condiciones en las que transcurren de vida, reacciones heroicas, individualistas y
sus vidas. En este caso, se deben resaltar las múl- materialmente descontextualizadas.
tiples formas de violencias y su respectiva singu- El social histórico se está transforman-
larización. El modo de circulación de las mujeres do a toda prisa, los beneficios de ese cambio son
está determinado por el miedo a la agresión se- evidentes para las mujeres, para las personas con
xual, a los ataques reales y traumáticos aconte- opciones sexuales e identitarias diversas, mayo-
cidos con frecuencia en las historias de cada una res grados de libertad, mayores posibilidades de
y que inciden en la escasa posibilidad de sentirse decisión, mejores circunstancias para proyectar
seguras en los espacios públicos, en diferentes sus vidas. Pero se podría preguntar: ¿cuáles son
momentos del día o la noche; el mandato a transi- los beneficios de esta transformación para los
tar siempre acompañadas como modo imaginario varones? ¿Por qué los varones en posiciones de
de reaseguro, y los esfuerzos extras puestos en la hegemonía querrían transformarse, por qué ceder
producción de estrategias de cuidados necesarias los privilegios de los que disponen en ese lugar?
en el mundo patriarcal. En relación a estas esce- ¿Se trata de una demanda moral hacia ellos, de un
nas de violencias cotidianas que no solo se en- pedido de bondad?
cuentran en el espacio de lo público sino también El nivel de conflicto entre los géneros se
a experiencias vividas en lo privado, se originan incrementó y tiñe todos los espacios. No se tra-
fantasmáticas sumamente efectivas que forman ta de pensar que en épocas pasadas no existiera
parte de los mecanismos de control del cuerpo de conflicto, solo que se mantenía en estado latente.
las niñas desde pequeñas, que exceden en mucho Pero evidentemente la confrontación se volvió
las prácticas de cuidado y que sus efectos se ex- explícita e intensa, y los hechos muestran que
tienden aun en aquellas mujeres que no han pade- continuará por esas vías. Las jóvenes generacio-
cido violencia de modo directo. De modo tal que nes de mujeres ya no toleran ciertas situaciones,
va permaneciendo instituido un acceso restringi- como puede verse en el recorte periodístico: de-
do al espacio de lo público (ONU Mujeres, 2017) nuncian, se empoderan. Generaciones pasadas
a la vez que van limitándose diferentes áreas de dirimían (o no) los conflictos cotidianos con otras
sus vidas, como por ejemplo sus vías de acceso a estrategias, con el “cruzarse de vereda”, con la
espacios de aprendizaje, a las opciones de inser- cautela, con las estrategias posibles que caben en
ción en el mundo del trabajo, su socialización y la posición de subordinación, para resistir, para
esparcimiento, a las posibilidades de exploración no quedar capturadas totalmente y para de modo
de lo vincular, la sexualidad y exogamia. Todas eventual no caer en las trampas de la violencias y
estas consideraciones no tienen un equivalente en sus vueltas en recrudecimiento, ya que no siem-
los varones. pre el enfrentamiento directo se volvió un recurso
Subjetivarse, responsabilizarse para deci- posible y beneficioso para ellas. En la actualidad,
dir, tomar la palabra y acceder, no es un proceso lo que estaba latente, forzado al silencio, está
de orden meramente individual. De eso se habla ahora a simple vista por las estrategias de aque-
cuando se afirma que la subjetividad se sostiene llas otras que resistieron y pasaron por allí antes.
en la tensión de lo psíquico y lo social. Cuando Los varones más tradicionales se ven in-
tan frecuentemente se convoca a la responsabili- terpelados por la intensificación de los conflictos
dad de las mujeres en las situaciones de violencia, en sus vidas y se encuentran con la necesidad de
se ha de poder pensar qué grado de ciudadanía transformar su posición porque los costos de sos-
y libertad poseen en esas circunstancias particu- tener las mismas prácticas y significaciones pa-
lares para obrar y proyectar (Fernández, 2004); triarcales les conllevan una repetición constante
qué grado de ciudadanía en la dimensión formal de enfrentamientos, en algunos casos con sancio-
y en la subjetiva. En este sentido, no se trata de nes materiales concretas, en otros con la crítica
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social y familiar pero en lo principal para ellos ma es la de deconstrucción de estas prácticas y la


con alto sufrimiento psíquico. El malestar se ins- construcción de otras nuevas más igualitarias y
tala en sus vínculos íntimos, de amor, amistad, dadas en vínculos que toman al otro y otra siem-
familia, en sus relaciones de trabajo, en muchos pre como sujeto.
casos llevándolos a enfermar física o psicológi- ¿Cómo es que este cambio beneficia a to-
camente, o conduciéndolos a la soledad. Los va- dos/as? Solo para dar un ejemplo, otra noticia
rones más hegemónicos pueden llegar incluso a reciente que conmovió a la opinión pública fue
autopercibirse allí como víctimas, incomprendi- las denuncias por casos de abuso sexual en un im-
dos, abandonados, pero lo que realmente está en portante club de futbol de primera división en el
juego son los costos que pagan por no implicarse país (Clarín.com, 2018). La fiscal que interviene
en el cambio abrumador que está ocurriendo a su en la causa refirió que se identificaron 7 casos de
alrededor3. Tal como ha acontecido en la historia, jóvenes varones menores de edad abusados se-
las crisis de las masculinidades (Badinter, 1993) xualmente y obligados a prostituirse, y al menos
han sido reactivas al cambio operado por las mu- otras 10 víctimas potenciales. Este proceso ge-
jeres. Es un proceso el darse cuenta, entender que neró un efecto dominó para que otras denuncias
ceder el dividendo patriarcal no es pura pérdida puedan efectivizarse respecto de casos existentes
sino que vivir en un mundo menos violento, me- en otros clubes donde se practica fútbol, voley y
nos desigual, es ganancia compartida. gimnasia deportiva.
Para ellos, que se encuentran interpela- Estas denuncias son posibles a partir del
dos por el conflicto, se trata de poder pensar en proceso general de deslegitimación de las vio-
qué mundo desean vivir, qué expectativas tienen lencias, que constituyen las condiciones de po-
respecto de sus lazos a los otros y otras. Qué lu- sibilidad para que pueda quebrarse el implacable
gar y qué estatuto tiene el otro en sus vidas, si se pacto de silencio existente en el fútbol, campo
trata de considerarlas a ellas como objetos que de dominio masculino y de toda la imaginería
están allí para satisfacer las propias necesidades tradicional. La situación de explotación sexual
materiales, sexuales, narcisistas, o aquella otra es de varones menores deportistas era un secreto a
también una semejante, una igual, a quién se re- voces, basado en los intereses corporativos y va-
conoce como tal. Por lo tanto no se trata aquí de liéndose de las situaciones de vulnerabilidad de
una demanda moral sino más bien de un posicio- estos jóvenes, en cuanto a lo familiar, social y
namiento ético. (Bleichmar, 2009) económico, y por sus expectativas de progreso,
Si la objetualización de las mujeres ha sumado al mandato de hierro de ser profesionales
sido naturalizada en el socio histórico patriarcal, y llegar a primera división, cóctel explosivo de la
las prácticas intersubjetivas que provienen de esa masculinidad hegemónica para esa articulación
situación han perdido su legitimidad. Lo que an- de clase, edad y género. El rol del psicólogo in-
teriormente se constituía como un proceder ha- terviniente fue central en la detección los casos y
bitual, sano, deseable y esperable respecto de las en intervención sobre los mismos para llegar a la
masculinidades hegemónicas, se ha revelado al denuncia (Wall, 2018).
fin como un trato perverso y violento. El modo de abordaje profesional en esta
Para quienes trabajan en el campo de la temática es primordial. Una parte central es po-
generación de políticas públicas de género, en in- der deconstruir las significaciones imaginarias
tervención en lo social, en el ámbito comunitario, acerca del consentimiento4, aun cuando estos jó-
en la esfera clínica psicoanalítica, y/o en el sector venes puedan llegar a autopercibirse como autó-
educativo, se les impone la pregunta por cuáles nomos en sus decisiones y en sus actos. Resulta
son las vías de solución para este problema. El muy difícil para adolescentes y jóvenes en pleno
recurso a lo punitivo y la sanción de las prácticas proceso de afirmación de su masculinidad poder
patriarcales violentas solo puede ser una parte de identificar y entender que están siendo afectados
la solución, de acuerdo a las normativas vigentes por un delito que se ejerce sobre personas vulne-
en relación a los casos puntuales. La parte funda- rables material y subjetivamente, y donde el con-
mental que conlleva a la solución de este proble- sentimiento es producto del modo en que operan

3 Mientras se redacta este artículo, se está dando media 4 La figura de consentimiento no rige nunca para menores
sanción en la Cámara de Diputados de la Nación a la Ley y tampoco es tenido en cuenta para mayores en las situacio-
de interrupción voluntaria del embarazo. Enorme cambio nes que se encuadran dentro del delito de trata de personas
social y legal en la autonomía y autodeterminación sobre el con fines de explotación sexual y o laboral. (Ley Nº 26.364,
propio cuerpo de las mujeres. 2008)
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Symploké revista filosófica octubre 2018

y los medios que usan los delincuentes, el enga- masculina. Buenos Aires. Paidós
ño, las amenazas y la generación de dependencia. Cantis, J. (2008). Agotamiento profesional
Para los varones, la hegemonía como una posi- y traumatización en el campo de la
ción que garantiza la dominancia masculina les discapacidad. Revista Actualidad Psicológica
impide frecuentemente reconocerse vulnerables. “Discapacidad Hoy”. Nº 362.
La hegemonía en este y otros casos, no es algo Carcedo, A.; Sagot, M. Ruta crítica de las mujeres
de lo que se dispone efectivamente sino más bien afectadas por la violencia intrafamiliar en
algo a lo que se aspira como ideal. Los adoles- América Latina: Estudio de caso de diez
centes y jóvenes se miden en la mirada de sus se- países. Programa mujer, salud y desarrollo.
mejantes, necesitan sostener su propia dignidad. Organización Panamericana de la Salud.
Esperan el reconocimiento que proviene de su 2000
grupo de pares y también satisfacer las expec- Clarin.com. Abusos en el fútbol: qué se sabe hasta
tativas de ascenso social y/o éxito que tienen sus ahora del caso Independiente (06 de Abril de
familias. Por ello persisten en el silencio. Están 2018). Recuperado de https://www.clarin.
sujetados a múltiples mandatos, el de resistir den- com/sociedad/abusos-futbol-sabe-ahora-
tro y fuera del ámbito deportivo, la competencia caso-independiente_0_rJM7ZzBsG.html
como valor, el dominio del cuerpo, soportar el Fernández, A. M. (2009). Las lógicas sexuales.
dolor y perseguir el éxito sin importar los costos. Amor, política y violencias. Buenos Aires.
Esto se expresa en la intersubjetividad con otros Editorial nueva visión.
varones, en el sostenimiento de la imagen para Fernández, A.M. (2004): “Adolescencias
los otros y para sí mismos. y embarazos. Primera parte: Hacia la
Para concluir, la objetualización del otro, ciudadanía de las niñas” en Revista del
de las mujeres, de niños y niñas, de jóvenes, de Instituto de Investigaciones de la Facultad de
personas con condición identitaria y opciones Psicología, Universidad de Buenos Aires, n°
sexuales diversas, ha sido naturalizada en el so- 3, año 9, Buenos Aires.
cio histórico dando lugar a múltiples prácticas Fernandez, A. M; Giberti, E. (1989). La mujer y la
de violencia. Esta legitimidad patriarcal está en violencia invisible. Buenos Aires. Argentina.
mutación; como resultado podrá obtenerse una Editorial Sudamericana.
ganancia que sea compartida. La transformación Franco S. (1999). El Quinto: No Matar. Contextos
de las masculinidades hegemónicas es condición explicativos de la Violencia en Colombia.
necesaria en este proceso, la generación de nue- Bogotá. Colombia. Ed. Tercer Mundo.
vos modos de las masculinidades, plurales, co- Figley, C.R. (1995). Compasión Fatigue. Nueva
rrelativo al dislocamiento de los binarismos des- York. Ed. Brunner/Mazel.
jerarquizantes. Se trata aquí, como se ha dicho Guizzardi, A. [El show de la tele]. (2018, 6,
anteriormente, no de una demanda moral sino de 4). Despiden y acusan a dos albañiles por
un posicionamiento ético, y convoca a quienes piropear. Recuperado de https://www.
trabajan en estos temas a poner toda la inventiva youtube.com/watch?v=DGMCT6ShME0
necesaria para intervenir sobre estos procesos en Hayon, A. (22 de marzo de 2018). Abuso sexual
esa dirección. en Independiente. Pagina 12. Recuperado
de https://www.pagina12.com.ar/103183-
abuso-sexual-en-independiente
* Alejandra Lo Russo es Licenciada en Psicología Ley N° 5.306 Prevención y sanción del acoso
y Master en Ciencias Sociales y Salud. Jefa de callejero, Ciudad de Buenos Aires, 25 de
Trabajos Prácticos, Docente e Investigadora en la Enero de 2017.
Cátedra Introducción a los Estudios de Género de Ley N° 5.306 De protección integral para prevenir,
la Facultad de Psicología (UBA). sancionar y erradicar la violencia contra las
mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus
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Symploké revista filosófica octubre 2018

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82
Symploké revista filosófica octubre 2018

Abortar como rechazo de


ser para un hombre:
nacer otra mujer

Calvagno L., Méndez M.*


UBA

Resumen women as subjects of desire.

El aborto entendido como una práctica Les enseñemos a las niñas a sentir vergüenza. ‘Cierra
traumática para la mujer es producto de un las piernas, cúbrete’. Les hacemos sentir como si por
discurso que la cristaliza en el lugar de objeto. haber nacido mujeres ya fueran culpables de algo. Y así,
En la sociedad patriarcal la teoría psicoanalítica las niñas crecen y se convierten en mujeres incapaces de
conservadora, falocéntrica, construye la decir que tienen deseo. Crecen para ser mujeres que se
subjetividad femenina “normal” como ser para el silencian a sí mismas. Crecen para ser mujeres que no
otro traducido en el deseo de un hijo. La lectura pueden decir lo que realmente piensan. Y crecen –y esto
crítica de estos supuestos permite, por un lado, es lo peor que le hacemos a las chicas– para ser mujeres
visibilizar la estrategia política encubierta y, que han convertido la capacidad de fingir en una forma
por el otro, proponer una salida a lo traumático de arte.
del aborto: la posibilidad de inscribirlo Chimamanda Gnozi Adichie
simbólicamente en otro discurso que aloje y
habilite la emergencia de la mujer como sujeto de Introducción
deseo.
La época nos interpela. A veces de manera
Abstract más precisa que otras. Los movimientos sociales
deconstruyen, ponen en cuestión, interpelan,
Abortion, understood as a traumatic hacen estallar las categorías y las preposiciones
practice for women, is the product of a discourse vigentes de una sociedad. En Argentina, en el
that crystallizes them in an objectified place. año 2018 llega por séptima vez al Congreso de
In a patriarchal society, the conservative and la Nación el proyecto de ley de interrupción
phallocentric psychoanalytic theory, constructs voluntaria del embarazo. Es producto de un
the “normal” female subjectivity, as “being for movimiento que recupera la lucha histórica
the other”, translated into the desire of a child. feminista, logra transversalizar el debate en
The critical reading of these assumptions allows, todo el arco político e instala la necesidad de
on the one hand, to visualize the covert political democratizar el acceso a la salud para garantizar
strategy; and on the other, propose an exit to vidas dignas y vivibles. Como psicoanalistas,
the traumatism of abortion: the possibility of como agentes del sistema de salud y como actoras
inscribing it symbolically in another discourse políticas estamos interpeladas por la temática del
that empower and enables the emergency of aborto en la urgencia de la época.
83
Symploké revista filosófica octubre 2018

En este artículo problematizamos pretendemos subrayar que es a causa de la lógica


sobre el deseo de la mujer en su entramado falocéntrica que se construye la concepción de
sociocultural, haciendo una lectura crítica de una mujer-objeto en oposición complementaria
las teorizaciones psicoanalíticas imperantes. a un varón-sujeto omnipotente, quedando
Analizamos la posición subjetiva de la mujer en invisibilizada cualquier otra forma de referencia a
el acto de decidir sobre su condición gestante las mujeres. Analizamos esta categorización para
y el argumento que afirma el traumatismo de poner en cuestión su vigencia teórica y señalar
la práctica del aborto como condición sine qua cómo operan performativamente. En el mismo
non. En su lugar proponemos que lo traumático sentido nos referimos al deseo en singular, en
de la práctica no está determinado por el acto tanto el discurso patriarcal reduce y resume los
en sí, sino por su inscripción en el discurso del deseos de las mujeres a la función reproductiva
Otro. No desconocemos las condiciones por las como deseo de un hijo.
que se conforma el trauma en los sujetos y que Freud plantea a partir del complejo de
pueda acontecer en quienes abortan. Rechazamos Edipo –paradigma falocéntrico de la construcción
la idea del trauma como condición en el acto de de la posición sexuada, la elección de objeto y la
abortar. El trauma para el psicoanálisis acontece introyección de las reglas básicas de socialización:
en la singularidad de cada sujeto, pero entramado prohibición del incesto y asesinato– un destino
en los imaginarios sociales. Se constituye como particular para el varón y otro para la mujer. Por
traumático aquello que no logra ser metabolizado, intermedio de la prevalencia del falo como eje
simbolizado por el aparato psíquico, aquello rector de la diferencia sexuada, el desarrollo de
que queda más allá de las normas del principio la sexualidad es diferente en el niño y en la niña.
de placer/realidad. La ruptura de la homeostasis El niño en tanto posee pene –referente fálico–
del aparato psíquico no es sólo un cuantum asume su posición sexuada a partir del complejo
de energía excesivo, sino que se articula en su de castración, vía la angustia por la amenaza de
posibilidad de ser dialectizable, de articularse castración. En cambio en el caso de la niña, ella
en la cadena significante, de inscribirse en reconoce su carencia de pene y, por su primacía
un discurso. Pensar la legalización del aborto como objeto rector de esa etapa del desarrollo
como forma de inscripción no sólo es necesario sexual infantil, asume su castración que da
sino también urgente para asegurar la vida y la surgimiento a la envidia del pene. Para Freud la
salud de las mujeres. Con la misma urgencia, niña, motorizada por la envidia del pene, buscará
se presenta la necesidad de quebrar los sentidos recuperar el falo vía el deseo de tener un hijo.
asignados al deseo de las mujeres y su posición Luego, a consecuencia de esta envidia surgirá:
subjetiva frente a su capacidad gestante. Urge la un sentimiento de inferioridad con respecto al
inscripción del deseo de la mujer en una lógica varón, los celos como característica fundamental
subjetivante y no desde la carencia. de su vida anímica y un vínculo tierno debilitado
entre madre e hija, a razón de quien fuera la
El deseo de la mujer en el discurso psicoanalítico gestante del perjuicio de la falta de pene y un
distanciamiento de la actividad masturbatoria por
El psicoanálisis ha participado en la constituir su feminidad desde la pasividad. Vale
construcción del entramado del deseo de la mujer. un agradecimiento a Freud quien igualmente
Sigmund Freud se encontró con un imposible al aclara: “debemos cuidarnos de pasar por alto la
intentar –fallidamente– subsumir la sexualidad influencia de las normas sociales, que de igual
“normal” de la mujer al paradigma de la modo esfuerzan a la mujer hacia situaciones
maternidad. En sus desarrollos sobre la feminidad pasivas. Todo esto es todavía muy oscuro. No
ubica que la salida “normal” en el devenir descuidaremos la existencia de un vínculo
sexual de la mujer acontece por intermedio del particularmente constante entre feminidad y vida
deseo de un hijo y por tanto por ser madre. Si pulsional. Su propia constitución le prescribe a
hay algo oscuro de la sexualidad en la mujer es la mujer sofocar su agresión, y la sociedad se
justamente que no existe tal correlato directo lo impone” (1932/1986, p. 107). Él reconoce la
con la maternidad. El “enigma” de la mujer que insuficiencia de su análisis sobre la sexualidad
presenta la teoría freudiana sólo se sostiene en femenina y se arriesga al dejar por escrito que
tanto tal, en la medida en que ha sido definida en la construcción subjetiva es en un contexto dado.
referencia al hombre. Habilita a construir una teoría psicoanalítica que
Al referirnos a la mujer en singular, pueda interpelar su marco teórico en función
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Symploké revista filosófica octubre 2018

de las representaciones sociales de época y sobre la sexualidad femenina (Soler 2015, p. 42).
lugar. En efecto, la sociedad imprime en los
aparatos psíquicos las formas de desenvolverse Construcción de la identidad de género y
identitariamente, y los mecanismos internos equivalencia mujer-madre
pulsionales fijan a los sujetos en lugares que
determinan sus elecciones posibles. La teoría falocéntrica ha sido estudiada
Retomando en consecuencia de la lógica por diversas psicoanalistas feministas –
de desarrollo que propone, el destino de aquella Emilce Dio Bleichmar, Mabel Burin, Ana
feminidad “sana” se dirigiría hacia el deseo de María Fernández, Martha Rosenberg, Débora
tener un hijo a fin de que, a través de otro hombre, Tajer, entre otras– que han aportado luz a la
pueda recuperar el falo añorado. A lo que se añade construcción heteronormativa patriarcal del
la pasividad como actitud de espera hacia un deseo que constituye como “normal” una
hombre que, mediante su don, otorgue lo que le sexualidad normativa. No podemos inteligir esta
falta a una mujer: un hijo como subrogado de esa premisa sin considerar la constitución del par
falta constitutiva. Colette Soler (2015) refiere que feminidad/masculinidad. Emilce Dio Bleichmar
para Freud “el único destino conveniente para (1996) señala que Freud no contaba con la
una mujer, el que se podría llamar de asunción noción de género en su época para referirse a la
de la castración, es ser una mujer de un hombre” feminidad/masculinidad, pero aun así da cuenta
(p. 45). del origen de la estructuración de este par en el
Incluso la teorización lacaniana, que texto Psicología de las masas y análisis del yo,
ha releído los términos freudianos en clave de mediante el concepto de identificación primaria
estructuras de lenguaje, vaciando de sentidos en la relación del niño con sus padres en la
prefijados, sostiene la posición de la mujer como prehistoria del complejo de Edipo.
ser para el Otro. Soler revisa la cuestión de la Revisamos que la entrada al complejo
feminidad y aporta que la lectura de Jacques de Edipo es diferente según sexo en los escritos
Lacan resignifica la primacía falocéntrica a partir freudianos: para el varón la angustia de castración
de su conceptualización en la Significación del es el motor que lo adentra en él, mientras
Falo, que reposiciona el falo en tanto significante que para la mujer es la pérdida de amor. ¿Qué
de la falta estructural y estructurante del ser sucedió en la prehistoria del complejo de Edipo
hablante. para que llegaran a él en claves tan diferentes?
Coloquialmente podríamos transcribirlo de la
El falo, significante de la falta, se presta a representar, en siguiente manera: dado que el varón estima su
efecto, además de la diferencia sexual, la falta en ser que el pene más que cualquier otra cosa o persona que
lenguaje genera para todo sujeto, cualquiera que sea, y por lo rodea, la posibilidad de que se lo corten lo
eso la paridad en la falta resulta restablecida. (...) Lacan, angustia. No quiere ser como la niña castrada que
gracias a un ligero desfasaje, hace valer que en la relación vio. Por su parte, la niña primero asume tenerlo,
de los deseos sexuales, la falta fálica de la mujer se convierte luego se da cuenta de que – ¿ya se lo cortaron?–
en un beneficio de ser el falo, o sea, ser lo que le falta al no tiene y su madre tampoco. La odia por eso,
Otro. Este “ser el falo” designa a la mujer en tanto que, en envidia al varoncito que lo tiene y entonces su
la relación sexuada, ella es llamada al lugar de objeto. En angustia es volver a perder algo que nunca tuvo,
el amor, por la gracia del deseo del partenaire, la falta se que Freud denomina como pérdida de amor. “La
convierte en un efecto de ser casi compensatorio: ella llega angustia de castración no es, desde luego, el
a ser lo que no tiene. Es decir que en esos años, para Lacan, único motivo de la represión; ya no tiene sitio
la falta femenina se encontraba ya positivizada. Lacan alguno en las mujeres, que por cierto poseen un
mantiene una definición del ser femenino que pasa por la complejo de castración, pero no pueden tener
mediación obligada del otro sexo. De ahí, la serie de sus angustia ninguna de castración. En su reemplazo
sucesivas fórmulas para especificar el lugar de “la mujer”. aparece en las de su sexo la angustia a la pérdida
Todas hacen de ella el partenaire del sujeto masculino: ser de amor” (1932/1986, pp. 80-81). Entonces,
el falo, o sea el representante de lo que le falta al hombre, ¿qué es el pene para el pequeño varoncito sino
luego ser el objeto causa de su deseo, y finalmente, ser el la construcción de género de la masculinidad
síntoma en que se fija su goce. Todas, vemos, definen a hegemónica heteronormada y patriarcal? Por lo
la mujer como relativa al hombre y no dicen nada de su menos, no quiere ser como la mujer que pudo ver,
posible ser en sí, sino solamente de su ser para el Otro. Esta que está castrada, que ya le falta estructuralmente
distancia subyace implícitamente en todos los desarrollos ¿Cómo construye dicha significación a tan
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Symploké revista filosófica octubre 2018

temprana edad? construirse autosuficientes aunque no puedan


Freud así lo menciona en la Conferencia física ni emocionalmente. Su virilidad dependerá
33: “El primer objeto de amor del varoncito es de su posibilidad de exogamia y de su vida en
la madre, quien lo sigue siendo también en la la esfera pública. Dio Bleichmar (1996) da un
formación del complejo de Edipo, en el fondo, ejemplo: “Un niño de tres años y once meses ve
durante toda la vida. También para la niña barrer el suelo a su papá y ante tal espectáculo
tiene que ser la madre —y las figuras del ama y exclama ‘papá es un marica!’. La madre se ríe y
la niñera, que se fusionan con ella— el primer el padre no escucha bien y le pregunta a la madre
objeto; en efecto, las primeras investiduras de qué dijo el niño; ella aclara: ‘Ernesto dice que las
objeto se producen por apuntalamiento en la que barren son las mujeres’. El padre le contesta
satisfacción de las grandes y simples necesidades al niño: ‘tienes razón’, y sigue barriendo. El niño
vitales, y las circunstancias de la crianza son se enoja, permanece reconcentrado y distante del
las mismas para los dos sexos” (1932/1986, padre toda la tarde” (p. 109). El niño de dos años
p. 110). En esta cita de Freud se observa cómo que le dice al padre que es “marica” por barrer,
él caracteriza a la madre responsable de los que entiende que barrer es de mujeres, que a las
cuidados del hijo. Así, detrás de la libertad del mujeres le gustan los varones, que entonces si
niño está la sumisión de la madre, de todas las barrés sos mujer, y si sos mujer sólo te gustan
madres. Se podría pensar que en aquella época los varones, configura su género. Niño y niña
eran las mujeres quiénes se ocupaban de la configuran sus roles de género en esa dicotomía
crianza. Pero no se trata sólo de eso, en tanto del par masculino/femenino.
hoy en día sabemos que las funciones parentales En resumen, el padre se convierte
son ejercidas sin tal equivalencia. Se trata de simbólicamente en el “propietario” del deseo,
que, en esa lógica, se degrada a la mujer madre deseo de la madre. Nuevamente mujer-objeto,
a objeto. Nuevamente el niño es libidinizado y mujer para un hombre.
puesto subjetivamente como un amo con una Los roles de género que han sido
madre-esclavo. Sin miramientos por los afectos, históricamente construidos en la lógica de
deseos, valores que porta esa mujer más allá de familias heterosexuales, heteronormadas,
ser su madre. Si el deseo -propio- es el deseo del patriarcales, designan el destino de las mujeres
Otro (o sea someterse a la ley del Otro, esa ley es a estar replegadas a la esfera privada de las
patriarcal). Si la mujer desea, el deseo del Otro tareas domésticas y de cuidados; y el de los
es que ella se someta. Por lo tanto deseará ser varones a estar expulsados al mundo público, a
objeto del deseo del Otro. Se construye el deseo disputar lugares de poder, y volver en forma de
en función de un simbólico de época como un proveedores, sostén del hogar. La posibilidad de
sistema vincular, de comunicación patriarcal, de construir un deseo desde la autonomía deviene
diferencia jerárquica según sistema sexo/género. hereje a la mujer. Injuria que la condena a
María Luisa Pérez Cavana (2000) explica ser quemada, silenciada, torturada, violada y
a Jessica Benjamin quien plantea en relación al asesinada por corromper algún engranaje de la
vínculo del varoncito con la madre: “El niño que cadena. Además de edificar una posibilidad de
rompe de manera tajante con la identificación y existencia sostenida en el odio a su madre, a
con la dependencia corre el peligro de perder la su abuela, al infinito de la filogenia femenina.
capacidad de reconocimiento recíproco, ya que Entendiendo esta lógica del deseo de la mujer
se refiere al otro exclusivamente como objeto. ¿Qué cuestiona el aborto en este entramado?
[...] En las relaciones madre-bebé hay, según sus
investigaciones-las de Benjamin-, dos sujetos, Abortar como rechazo de ser para un hombre
y en esto difiere considerablemente de la teoría
freudiana en la que la persona cuidadora, la El aborto viene a quebrar el sentido
madre, tiene un papel de objeto de las necesidades cristalizado de la equivalencia entre mujer y madre
de la criatura y no existe como ser independiente” que el discurso patriarcal sostiene. La parodia de
(p. 223) “salir todas corriendo a abortar porque es legal”
Entonces, ¿cómo se configura esta con que el feminismo se burla de la querella de
diferencia de construcción de género? Nancy los antiderechos no hace más que reflejar que la
Chodorow (2000) plantea que por identificación inscripción del aborto en el orden social introduce
al “padre-sujeto” los varones deben poder la emancipación de los cuerpos de las mujeres
sostenerse autónomamente. Es decir, deben del control social sobre la gestación. Al mismo
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Symploké revista filosófica octubre 2018

tiempo que ubica el deseo de las mujeres en una la sexualidad del placer por la sexualidad de
lógica diferente que la de ser semblante de objeto, la reproducción. Acción que extraña al varón
tal como la propone la teoría lacaniana. El aborto heteronormado de la construcción subjetiva de
pone en discusión la identificación de la mujer en la mujer como sujeto de deseo, deseo de sentir
posición de objeto. Quiebra el sentido que otorga placeres. Como también la extraña a ella misma
el discurso patriarcal heteronormativo y viene al de su cuerpo y sus posibilidades. La ecuación
lugar de representar la condición subjetivante de placer=hijo como la única posibilidad de ser
las mujeres en tanto habilita un deseo no anónimo, mujer se subvierte con el aborto.
maternidades deseadas y mujeres deseantes. Si retomamos la construcción de la
El debate por la legalización del aborto sexualidad femenina desarrollada por Freud
trasciende la discusión del origen de la vida. como un universal de la construcción de las
No interpela esa premisa por más extraño que mujeres dentro del sistema patriarcal que ha sido
resulte. Interpela el agenciamiento del cuerpo sostenido y profundizado por el sistema capitalista
de las mujeres, su tradición de expropiación por como un modo de ser, como una existencia de
parte de la sociedad, de la lógica del intercambio época que fue construida con fines políticos y
de la fundación de las sociedades. La ausencia que fue naturalizada para sostener el status quo
de preocupación social por la manipulación de sin cuestionamientos, podríamos plantear que
embriones en los tratamientos de fertilización a la mujer que decide abortar la sociedad toda
asistida –esos mismos embriones que agigantan les quita su amor. El amor que teme perder, el
en papel maché si están dentro del cuerpo de una amor que se le quita, es el amor romántico que la
mujer– da cuenta de la hipocresía sobre la que construye como objeto de tutela de los varones
se sustenta el argumento “por las dos vidas”, que omnipotentes, todopoderosos. ¿Hay otro amor en
pretende más bien, sostener el status quo que el el discurso patriarcal? En esta lógica no hay otro
discurso patriarcal ha construído para las mujeres. lugar que el borde del abismo, de la angustia, de
¿Qué lugar en la sociedad se le asigna a la incertidumbre del porvenir más allá del amor
una mujer que rechaza esa equivalencia de manera romántico, más allá del destino de cuidadoras,
taxativa, parcial o contingente en su historia más allá del amor por trueque de cuidados.
personal? Una mujer embarazada que rechaza
la posición de “ser para un hombre” cuestiona el Nacer otra-mujer, rechazar la univocidad
entramado simbólico que el discurso hegemónico mujer-madre
impone. Si no hay otro destino en el universo
simbólico de una sociedad entonces no queda ¿Se puede postular que el aborto para una
otro lugar que el de resto. Mujer deshumanizada, mujer es traumático? ¿Cualquier mujer lo viviría
silenciada, negada, no nombrable, desaparecida. como un trauma?
El destino de una mujer que muere por practicarse Si definimos el aborto como un acto de
un aborto inseguro es el de la responsabilidad rechazar la feminidad normativa introyectada
individual, el rechazo a poder enlazarse en un en la mujer, entonces se puede decir que dicha
discurso que la aloje. La ausencia de estadísticas práctica es traumática. Es traumática en tanto no se
de las muertas por abortos inseguros reafirma su aborta sólo un feto sino que –fundamentalmente–
exclusión social. Decidir no nombrar, no inscribir se aborta el ser-madre. Se aborta la feminidad,
a esa mujer como una ausencia es análogo a la siendo la ecuación mujer=madre la única
desaparición de personas, mujer ni viva ni muerta, posibilidad de existencia para una mujer dentro
subversiva, subvertida. de la construcción subjetiva normativa.
El aborto genera debate y controversia ¿Es posible pensar el aborto por fuera del
porque viene a rechazar la feminidad normativa. trauma? ¿De qué depende la inscripción simbólica
Abre la vertiente de una mujer que desea desde de la interrupción voluntaria del embarazo en la
una posición de sujeto y no como objeto, que feminidad de la mujer? ¿Cómo influyen los otros
siente placer y lo siente en un cuerpo que le es y sus discursos en la interpretación subjetiva de
propio. Cuando Dora Barrancos, con su discurso la mujer sobre dicho acto? ¿El trauma es el acto o
en el Congreso, subraya enfáticamente que el entramado discursivo lo devuelve traumático?
la lucha por el aborto es la lucha por el placer Una concepción freudiana del trauma
femenino, discute con los supuestos freudianos postula que este se produce en dos tiempos: el
que definieron que la feminidad se logra si la evento actual (no necesariamente sexual) despierta
mujer cede su placer clitoridiano, si reemplaza après coup el recuerdo de un evento anterior
87
Symploké revista filosófica octubre 2018

(atentado sexual) ocurrido en la niñez. A partir de sos lo que jugaste, no sos el deseo de tus padres,
esta teoría Freud concibe la sexualidad del niño no sos lo que la sociedad espera.
por el encuentro traumático con la sexualidad del La posibilidad de una decisión autónoma
adulto. Parafraseando a Dio Bleichmar (1996) se inscribe como no-represión, como el rechazo
se podría decir que el encuentro del niño con los de la represión crónica establecida en la
estereotipos de género que los adultos proyectan subjetividad de la mujer, ya que la mujer debe
sobre él son resignificados como episodios a su represión su estado del ser. Para ser mujer
traumáticos. Es decir, los deseos de ser que los hay que reprimir, para ser mujer hay que reprimir
adultos imprimen en los niños cuando dividen sin dejar rastros de insatisfacción.1 Cuerpos en
las prácticas vivibles según el rosa y celeste del represión permanente. Reprimir implica no dar
género. Dichos estereotipos son disruptivos en cauce a lo que se quiere, ocultarlo, olvidarlo en
el devenir subjetivo y singular, ya que coartan apariencia, para que se asome en angustias que
a muy corta edad el desarrollo de sus deseos corroen, paralizan, que las devuelve autómatas.
según sus exploraciones individuales e imprimen La construcción de la subjetividad de
los propios –los sociales– que son diferenciales las mujeres las deja en el lugar anteriormente
y jerárquicos, subsumiendo los deseos de un descrito: mujeres desechadas en sus deseos,
género al otro. El atentado sexual –que bien se castigadas en sus demostraciones curiosas,
podría redefinir como atentado de género–contra etiquetadas y puestas en los márgenes, destinadas
las mujeres cobra materialidad en cada escena de a contener, cuidar, ser-para-el-otro es su única
la infancia que las mismas deben, por un lado, posibilidad de existir. Interrumpir un embarazo
reprimir sus deseos exploratorios, investigativos, dentro de la matriz discursiva que la objetivó
propios de la niñez; y por otro, sentir culpa cuando construyéndola como recipiente gestante de
llevan a cabo alguno al ser castigadas. Abundan humanos, la coloca hereje de ella misma. Es
ejemplos de esta diferencia: niñas que juegan toda falta en esa camilla, con el peligro de dejar
con porras sentadas en una esquina del patio, de existir. Si aborta, aborta su identidad. Si ser
mientras los niños juegan a la pelota en toda la mujer es ser madre y está eligiendo abortar, no
cancha; los deberes hogareños de poner la mesa, será madre. Entonces, no será mujer. Trauma.
mientras los niños miran la televisión; el castigo La quieren hacer desaparecer. Los imaginarios
por masturbarse en oposición al festejo de las sociales son los que la harán desaparecer.
erecciones del niño. Reflejo de la construcción de Y en este punto es importante pensar
familia heteronormada y patriarcal con la madre otra lógica del trauma, en términos de Freud
abocada a los quehaceres de la casa y el padre pensar el nacimiento, y en términos lacanianos
ausente por trabajo y ocio. el encuentro con el lenguaje. “Lo esencial en el
Según el postulado del trauma en dos nacimiento, como en cualquier otra situación de
tiempos, siendo el primero el atentado de género, peligro, es que provoque en el vivenciar anímico
y el segundo tiempo un acontecimiento actual que un estado de excitación de elevada tensión que
le dará sentido traumático al primero, se propone sea sentido como displacer y del cual uno no
tomar como evento actual la decisión de la mujer pueda enseñorearse por vía de descarga. [....]lo
de practicarse un aborto. Hecho que resignifica temido, el asunto de la angustia, es en cada caso
las situaciones de la niñez cuando la mujer fue la emergencia de un factor traumático que no
construida y libidizada, cuando fue empujada pueda ser tramitado según la norma del principio
a la represión de todos sus deseos legitimando de placer” (Freud, 1932/1979, pp. 86- 87). Un
sólo uno: el deseo-de-ser-madre. Construcción recién nacido y su llanto desconsolado por la
subjetiva que la posiciona en la actualidad mujer sorpresa del ingreso a lo desconocido, vivido per
en tanto madre, que circunscribe su estado del se como traumático por la irrupción de energía
ser, su existencia, a la elección de maternar. Su que pondrá a funcionar su sistema de forma
decisión de abortar devuelve lo vivido en su diferente a la costumbre intrauterina. Energía
ser niña como traumático. La interrupción del
embarazo como el rechazo de su feminidad, de 1 Las histéricas reprimían sus deseos moralmente pena-
su disposición de género asignada. Si no elegís dos, en consecuencia hacían síntoma en sus cuerpos, se
ser la niña que jugaba a la casita, dando de comer ocultaban a ellas mismas, no se mostraban deseantes, apa-
a su nenuco mientras limpiabas con la escoba y recían tullidas en sus cuerpos, siendo la enfermedad física
la pantalla perfecta para una sociedad que no quería saber
te secabas las manos en el delantal de cocina, de la sexualidad de las mujeres, ya que su visibilización es
entonces no sos mujer. Entonces hay trauma. No la amenaza al poder patriarcal.
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Symploké revista filosófica octubre 2018

que no podrá elaborar solo, sino que dependerá discursiva que cae en el acto autónomo de decidir
para ello de quienes lo sostengan libidinalmente, practicarse un aborto. Acercamiento angustiante
porque lo orgánico ya no tendrá lugar sino es en al agujero, a la incertidumbre de dejar de existir,
el entramado social del cual disponga. de no ser, y no saber qué ser ni cómo. ¿Hay
La decisión de abortar es aquel lugar de otros discursos donde entramar la experiencia de
desamparo. Es revisitar el lugar de desvalimiento interrumpir un embarazo? ¿Existen otras formas
del sujeto, volver a ser recién nacida. Abandonar de ser mujer?  
una lógica mujer=madre, para inscribirse en otra,
aquella que pondera la decisión de los sujetos sobre La esclavitud de las mujeres traducida en el
sus propios cuerpos sin distinción de género. Allí eufemismo del instinto materno
en el nacimiento, cuando se dependía íntegramente
del otro tanto en las necesidades básicas de   Dirá Lacan (1964/1987) “Al producirse
supervivencia como en las necesidades de ser en el campo del Otro, el significante hace
sostenidos y erotizados, cuando la unificación surgir el sujeto de su significación. Pero sólo
yoica, la entidad como sujeto no parcializado funciona como significante reduciendo al sujeto
dependía de ese otro, el reconocimiento de en instancia a no ser más que un significante,
quienes cuidaron ofrecía un todo todavía petrificándolo con el mismo movimiento con que
inasequible para ese ser, pero posible afectivizado lo llama a funcionar, a hablar, como sujeto (p.
que se experiencia a través de la satisfacción de 215). Cuando Freud explica que en el nacimiento
demandas. Nuevamente, la complejización del hay una carga de energía inmanejable por su
acto de subjetivación/socialización. Ese otro cantidad para el sujeto por lo tanto requiere de
del cual se depende para ser, a su vez, aliena, los otros, Lacan lo traduce como el impacto con
imprime sus representaciones sociales, y se el mundo del lenguaje que somete a los sujetos y
impone como el modelo de identificación. Aquí, a su vez los construye deseantes. La interrupción
en la interrupción de un embarazo se actualiza voluntaria del embarazo como una experiencia
la vivencia de una situación desconocida que donde emerge el sujeto de deseo, la posibilidad
posee la carga de la incertidumbre y reactiva la de bañarse en otro orden simbólico, en otro orden
necesidad de ser sostenida por otro que aloje, que discursivo. Es un nuevo nacimiento con la carga
proteja, que no deje al sujeto en la intemperie del traumática que implica y entonces volver a revivir
abandono, del desvalimiento más primario, que la posibilidad de no ser alojadas por ese otro, no
le ofrezca una trama discursiva donde inscribir ser escuchadas, y degradadas al lugar de objeto.
dicha experiencia. En consecuencia, o bien el La construcción subjetiva de la mujer
otro coloca la práctica singular/social en el lugar subsumida en la completud imaginaria del otro.
del pecado, de la ilegalidad, de lo ilegítimo, de la La necesaria inclinación hacia los cuidados del
traición, de la marginalidad; o bien en el lugar de otro para constituirse como un ser, porque no se
la decisión, de la autonomía, del deseo propio, de puede hablar de sujeto: no se puede darle a la
la palabra, lo simbolizable y entonces elaborable. mujer la capacidad deseante cuando la necesidad
Nacer otra-mujer, rechazar la univocidad mujer- de los otros siempre se impone. El otro se
madre. presenta imaginariamente como otro sin barrar,
Claro que se presenta como una amenaza que viene a arrasar con toda posibilidad futura
al yo el abandono del sistema de representaciones deseante. Para la mujer deseosa de abortar, de
que las construyó como mujeres. Es un temor y no-ser-madre, el feto es el representante de los
una pérdida en términos imaginarios/yoicos, imaginarios sociales legitimados. Traducidos
no en términos reales. Es decir, no se vuelven en el discurso moral alojado en las escuelas, en
psicóticas si deciden hacerse un aborto o si se las familias, en los trabajos: la heteronorma, la
las obliga a continuar un embarazo donde no hay monogamia, la necesaria fidelidad consecuente,
deseo. Pero sí se puede inferir que se las acerca sostenida por hilos en el escenario de la doble
al agujero, que se las pone en una situación de moral masculina, que la niega como sujeto
borde psicotizante por la ausencia de recursos deseante no materno, y la devuelve objeto
para inscribir simbólicamente la experiencia en gestante. El discurso de la medicina hegemónica
una trama discursiva diferente a la patriarcal que occidental que viene a refrendar, recrudecer
las cosifica. Hubo otro allí, en la primerísima y profundizar con argumentos científicos los
infancia, que la nombró, le dio una identidad, un religiosos, reduce los cuerpos de las mujeres a
modo de ser, una posibilidad de existencia. Trama la reproducción, invisibiliza y oculta los grises,
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Symploké revista filosófica octubre 2018

patologiza las decisiones y las diferencias. para habitar según las decisiones y el deseo
Una sociedad que construye el escenario para propio. Un otro de la escucha y el alojamiento
darle el protagonismo tendencioso a la mujer- que reconfigura la escena del desvalimiento para
madre. Incluso sin discurso religioso, el mundo construirla empoderadora, para darle entidad de
capitalista patriarcal también las prefiere madres. sujeto de deseo a la mujer que aborta. Otro que
Mujeres exiliadas a la maternidad, por fuera de devuelve la práctica del aborto dialectizable,
las competencias laboral, académica, sexual. elaborable, ya que habilita la aparición de sujetos
Las prefiere del otro lado de los “derechos del de deseo, y les da otra posibilidad de existencia:
hombre”, las prefiere del otro lado de los sujetos. mujeres-no-madre.
Reproducción obligatoria para asegurar un solo Es el lazo la grieta por la cual pueden
destino a más de la mitad de la población y para escabullirse. No es la explosión que borre la
perpetuar la esclavitud traducida en el eufemismo historia y deje un blanco. El lazo, entendido
del instinto materno. Cinismo social de construir como la puesta en palabras en lo público, es la
la existencia de las mujeres sólo en tanto madres, posibilidad de verse entramadas/entrampadas
negando al sujeto de deseo. en una estrategia social-histórica. Bandera que
no se depondrá nunca “lo personal es político”.
Otra inscripción posible donde emerja el La posibilidad de hacer de cada historia singular
sujeto de deseo una lucha colectiva. Bienvenido el estallido de
los géneros. En consecuencia, aunque la primera
¿No se puede inferir que en tanto se
batalla se juega en los cuerpos haciendo propios
construye subjetivamente a la mujer en la esfera
los placeres, decidiendo, abortando, siendo
privada siendo posible un único deseo, tener
madres, desde una lógica del cuidado, del lazo,
un hijo de un varón, para lograr su feminidad,
estallando la existencia autómata que no permite
es condición sine qua non que se la aísle
cuestionamientos, que acerca al borde psicotizante
socialmente para que el efecto culpógeno de su
de la soledad individualista donde las mujeres
infelicidad recaiga obligadamente sobre ella y su
devienen histéricas, quejosas, envidiosas, celosas,
sexo/género, psicopatologizando sus angustias y
frígidas. Agujerear al sistema para quitarle su
frustraciones?
brillo fálico omnipotente. Devenir identidades
Castoriadis (1997) sostiene “Yo (moi),
elegidas sin destinos subjetivos preestablecidos.
superyo, ideal del yo, son impensables, salvo
en tanto productos (a lo sumo, co-producidos)
del proceso de socialización. Los individuos
Bibliografía
socializados son fragmentos hablantes y
caminantes de una sociedad dada; y son
Castoriadis, C. (1997). El Imaginario Social
fragmentos totales; es decir que encarnan -en
Instituyente. Zona Erógena. Nº 35.
parte efectivamente, en parte potencialmente-
Recuperado de: http://www.ubiobio.cl/
el núcleo esencial de las instituciones y de las
miweb/webfile/media/267/Castoriadis%20
significaciones de su sociedad” (p. 3). El individuo
Cornelius%20-%20El%20Imaginario%20
mujer encarna las instituciones cargadas de
Social%20Instituyente.pdf
significaciones de su sociedad. Significaciones
Dio Bleichmar, E. (1996) “Feminidad/
compartidas que explican la operación del efecto
masculinidad. Resistencias en el psicoanálisis
de los chistes: en su remate inesperado, ligado
al concepto de género” en Mabel Burín y
a compartir representaciones y burlarse desde
Emilce Dio Bleichmar (Comp.), Género,
el mismo lugar, “las pibas contra el medioevo”.
psicoanálisis, subjetividad (pp. 100-139).
Las mujeres de hoy contra las representaciones
Buenos Aires, Argentina: Editorial Paidós.
arcaicas de un tiempo que no es el de la época,
Freud, S. (1924/1984). “El sepultamiento del
sembrado en sus cuerpos a fuerza de imaginarios
Complejo de Edipo”. En Vol. XIX - El yo y
sociales con forma de feto. Lo que buscan abortar
el ello, y otras obras (pp. 181-187). Buenos
es el medioevo encarnado hasta en el deseo.
Aires: Amorrortu.
Gracias a la porosidad del deseo, muta de acuerdo
a la reflexividad, se deconstruye, construye y Freud, S. (1925/1984). Algunas consecuencias
reconstruye por cambios de la posición subjetiva. psíquicas de la diferencia anatómica entre
Descamarse, hurgarse, mirarse, transformación los sexos. En Vol. XIX - El yo y el ello, y
promovida por un espacio habilitado por el otro otras obras (pp. 267-276). Buenos Aires:
90
Symploké revista filosófica octubre 2018

Amorrortu.
Freud, S. (1931/1986). Sobre la sexualidad
femenina. En Vol. XXI - El porvenir de
una ilusión, El malestar en la cultura, y
otras obras (pp.227-244). Buenos Aires:
Amorrortu.
Freud, S. (1932/1986). 32° Conferencia. Angustia
y vida pulsional. En Vol. XXII - Nuevas
conferencias de introducción al psicoanálisis
y otras obras (pp.75-103). Buenos Aires,
Argentina: Amorrortu.
Freud, S. (1932/1986). 33° Conferencia.
La feminidad. En Vol. XXII - Nuevas
conferencias de introducción al psicoanálisis
y otras obras (pp.104-125). Buenos Aires,
Argentina: Amorrortu.
Lacan, J. (1987). “Clase 16. El sujeto y el Otro:
La alienación”. En “El Seminario, Libro 11:
Los Cuatro Conceptos Fundamentales del
Psicoanálisis” (pp. 211-223). Buenos Aires,
Argentina: Editorial Paidós.
Pérez Cavana, M. (2000). “Feminismo y
psicoanálisis”. En Celia Amorós. (Ed.),
Feminismo y filosofía (pp 215-230. Madrid,
España: Editorial Síntesis.
Soler, C. (2015). “II. Che vuoi?”. En Lo que
Lacan dijo de las mujeres (pp. 40-56).
Buenos Aires, Argentina: Editorial Paidós.

* Calvagno Luciana Carla es Licenciada en


Psicología (UBA). Psicoanalista en consultorio
privado y perteneciente al Servicio de
Adolescencia del Hospital de Niños Ricardo
Gutiérrez. Correo electrónico: lucianacalvagno@
gmail.com

Méndez María es Licenciada en Psicología


(UBA). Psicoanalista en consultorio privado
y perteneciente a la Dirección de Género
y Diversidad Sexual de la Universidad de
San Martín (UNSAM). Correo electrónico:
mariamendezuba@gmail.com

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Symploké revista filosófica octubre 2018

La formación
docente universitaria
con perspectiva de género
La experiencia del seminario Introducción a los debates
de género y sexualidad de las carreras de Educación de la
Universidad Nacional de San Martín (UNSAM)

Autoras Varias*

Resumen research field on teacher training with a gender


perspective.
Desde el 2016, producto de un contexto
político de ampliación de derechos sexuales y Introducción
reproductivos, las carreras de Educación de la
UNSAM incorporaron a su oferta académica el Luego de largos debates, en el año 2006
seminario optativo Introducción a los debates de se sancionó en la Argentina la Ley Nacional
género y sexualidad. Tomando como punto de 26150 de Educación Sexual Integral (ESI). Entre
partida la experiencia de estudiantes que cursaron sus artículos se pueden observar algunas carac-
dicho seminario, el objetivo de este artículo es terísticas importantes y superadoras. En primer
analizar aspectos de sus participaciones: cómo lugar, el hecho de plantearse la educación sexual
llegaron al espacio y cómo los contenidos y como un derecho que debe ser garantizado por
discusiones propuestos en la materia modificaron todas las instituciones escolares de todos los ni-
y/o aportaron a su trayectoria docente. El veles, así como también de formación superior
propósito: aportar al campo de producción no universitaria. En segundo lugar, establecer el
académica sobre la formación docente con carácter integral de su abordaje. De este modo, se
perspectiva de género. trascienden visiones biomédicas o moralizantes
hegemónicas de la sexualidad y se incorporan sus
Abstract dimensiones histórico culturales, psicológicas,
éticas y afectivas (Morgade y Fainsod, 2015). La
Since 2016, as a result of a political Ley establece la creación del Programa Nacional
context of expansion of sexual and reproductive de Educación Sexual Integral perteneciente a
rights, the careers of Education of the UNSAM la órbita del Ministerio de Educación, Ciencia
incorporated into its academic offer the optional y Tecnología de la Nación, órgano responsable
subject Introduction to gender and sexuality del diseño de los lineamientos curriculares para
debates. Taking as a starting point the experience ESI, los cuales fueron aprobados por el Consejo
of students who attended the classes, the Federal de Educación en el año 2008. El enfoque
objective of this article is to analyze aspects of conceptual de la ESI se basa en cinco ejes trans-
their participation: how they arrived at the space versales: derechos, género, cuidado del cuerpo,
and how, the contents and discussions proposed diversidad y afectividad. Dichas dimensiones
there, modified and/or contributed to their training configuran una perspectiva respetuosa de los de-
as teachers. The purpose is to contribute to the rechos y de la igualdad de género, la cual reco-
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Symploké revista filosófica octubre 2018

noce la diversidad sexual y la afectividad como Luego de dos años de oferta del seminario
parte constitutiva de la subjetividad y el cuida- para los y las estudiantes de la UNSAM, el obje-
do del cuerpo y la salud como aspectos centrales tivo de este artículo es presentar algunas primeras
que se deben fomentar y garantizar (Ministerio reflexiones respecto de la experiencia de dictado
de Educación, 2015). de la materia. Estas, se organizan principalmente
Las discusiones alrededor de sus accio- en torno a dos preguntas. Una inicial centrada en
nes y materiales se vieron embebidas y poten- conocer cómo los y las estudiantes de la UNSAM
ciadas por posteriores debates en torno a otras llegan a este espacio optativo centrado en temá-
normativas: la Ley 26485 de protección integral ticas de género y sexualidad. Y un segundo inte-
para prevenir, sancionar y erradicar la violencia rrogante relacionado con cómo aquellos y aque-
contra las mujeres en los ámbitos en que desa- llas consideran que los contenidos y discusiones
rrollen sus relaciones interpersonales, la Ley propuestas en el seminario modifican y/o aportan
26618 de Matrimonio Igualitario y la Ley 26743 a su formación y práctica profesional. Así, los
de Identidad de Género. Desde entonces y sobre próximos apartados, se encontrarán abocados a
todo con la sanción de esta última normativa, toda responder dichos interrogantes con el objeto de
una serie de sentidos más amplios en torno a los reflexionar sobre aspectos aún poco explorados
cuerpos sexuados y su carácter de construcción acerca de la formación en género y sexualidad en
social e histórica profundizaron el respeto por la espacios de educación superior.
disidencia sexual (Morgade y Fainsod, 2015). De Atendiendo a ello, el artículo se organiza
igual modo, la mayor visibilización y mediatiza- en tres apartados. Uno inicial en el que se pre-
ción de feminicidios de mujeres jóvenes a partir sentan aspectos generales de dicho seminario: es-
del año 2015, llevó a que las temáticas vinculadas tructura, contenidos y equipo de trabajo. Luego,
con la violencia de género, presentes en los docu- un segundo apartado donde se procura responder,
mentos iniciales, adquiriesen una mayor centrali- de manera preliminar, los interrogantes señala-
dad (Morgade y Fainsod, 2015). dos. Se concluye con algunas reflexiones finales
La producción académica en torno a la y nuevas preguntas de indagación.
ESI se ha centrado, principalmente, en el análisis Por último, cabe destacar que los datos
de su implementación en las escuelas primarias que en estas páginas se analizan fueron construi-
y medias (Morgade y Alonso, 2008 Faur, 2015; dos a partir de nuestros registros de las interaccio-
Boch, 2015; Lavigne, 2010). En menor medida, nes durante las clases y de materiales producidos
en la relación entre dicha ley y la formación do- por los y las estudiantes durante el transcurso de
cente, centrándose la mayoría de las investigacio- las cursadas: formulario de expectativas; trabajos
nes en el análisis de su incorporación a Escuelas finales y evaluaciones de la enseñanza. En rela-
Normales e Institutos superiores (Morgade y ción al formulario, durante el primer encuentro
Fainsod, 2015; Stolze y Ramírez, 2015). En este de los dos cuatrimestres se instrumentó una guía
sentido, aún permanece poco explorada la vincu- la cual contenía algunas preguntas que buscaban
lación que las universidades han establecido con indagar cómo los y las estudiantes habían llegado
aquella normativa. A diferencia de las Escuelas al seminario, así como también sus expectativas
Normales e Institutos Superiores que están ple- con respecto a los contenidos y problemáticas a
namente alcanzados por la Ley 26150, en las uni- tratar. El segundo material, en cambio, constitu-
versidades, espacios donde también se forman ye una evaluación final de aprendizajes. Ésta se
docentes, aún se encuentran en curso las discu- realizó a partir de un trabajo individual basado
siones respecto a cómo compatibilizar los linea- en el análisis teórico de recursos audiovisuales
mientos de esta ley nacional con los planes de es- y escénicos propuestos durante las cursadas, los
tudio que se elaboran y se votan en las instancias cuales se relacionaban con una o varias unidades
autónomas de gobierno universitario. del programa.1 Por último, se considera la eva-
Como parte de dichas discusiones y acor-
de al contexto político de ampliación de dere- 1 El material audiovisual se encontraba compuesto por
chos sexuales y reproductivos, las carreras de las películas Suffragette [Sufragistas] (dirección de Sarah
Educación de la Universidad Nacional de San Gavron, Reino Unido, 2015, distribuida por Pathé,); Bread
Martín (UNSAM) consideraron necesario, desde and Roses [Pan y rosas] (dirección de Ken Loach, Reino
el 2016, incorporar a su oferta académica el se- Unido, 2000, distribuida por Lionsgate); The kid [El pibe]
(dirección de Charles Chaplin; Estados Unidos, 1921, dis-
minario optativo Introducción a los debates de tribuida por First National Pictures); The Help [Historias
género y sexualidad. cruzadas] (dirección de Tate Taylor, Estados Unidos, 2011,
93
Symploké revista filosófica octubre 2018

luación de la enseñanza efectuada hacia el final de San Martín”.4 El contexto de debates institu-
de las cursadas. En ella, los y las estudiantes cionales que fungieron como catalizadores de
pudieron valorar el (in)cumplimiento de sus ex- esta propuesta se vinculó con un conflicto de vio-
pectativas iniciales, los contenidos abordados, el lencia de género que involucraba a estudiantes
dictado de las clases, los recursos y material bi- de la casa, y que debió ser tratado en distintas
bliográfico utilizado. También pudieron expresar instancias institucionales –Consejos de Escuela,
aquellas nociones que cambiaron a lo largo del asesorías legales, Consejo Superior. Las decisio-
seminario y las ideas nuevas que este les ofreció, nes políticas originadas alrededor de estos de-
en conjunto con las principales dificultades que bates, condujeron no sólo a la aprobación de tal
se les presentaron durante las cursadas. Protocolo de actuación en el ámbito específico de
la Escuela de Humanidades, sino también, al de-
Un espacio de formación en género y sexuali- sarrollo de un ciclo de diálogos en las distintas
dad propio carreras alrededor de las desigualdades de género
en los ámbitos disciplinares.5
Desde su nacimiento en el año 1992, la Si bien estos antecedentes fueron mar-
Universidad Nacional de San Martín ha ofreci- cando un camino de institucionalización del abor-
do espacios de formación en temas de género y daje del género y la diversidad sexual al interior
derechos humanos. Sin embargo, en su mayoría, de dicha universidad, los espacios de formación/
se trataron de carreras a nivel de posgrado. En lo reflexión continuaron y aún continúan siendo ais-
que respecta a la formación de Licenciaturas y lados. En el caso concreto de la oferta académica
Profesorados Universitarios, se ofertaron un nú- de Educación —a partir de comprender la rele-
mero menor de seminarios optativos o de círculos vancia de una perspectiva de género en la forma-
de estudio con temáticas afines.2 ción de profesionales de la educación y conside-
Con la creación del Programa Contra la rando que una de las salidas laborales más elegi-
Violencia de Género “Valeria Gioffre” (PCVG)3 das son la docencia en nivel medio y la formación
en 2013, las temáticas de género y sexualidad de formadores, lo cual conlleva la necesaria apli-
cobraron mayor visibilidad y esto permitió la cación de la Ley de Educación Sexual Integral—,
sanción por Resolución de Consejo Superior la Dirección de las carreras decidió conformar un
del “Protocolo de Actuación en Situaciones espacio optativo denominado Introducción a los
de Discriminación por razones de Género y/o debates de género y sexualidad. Su no obligato-
Violencia de Género en la Universidad Nacional riedad se debe a la imposibilidad de realizar un
cambio en el plan de estudios de las carreras con
inmediatez ya que éste es un proceso prolongado
distribuida por Buena Vista International); Todo sobre mi de intervenciones y decisiones académicas y po-
madre (Dirección de Pedro Almodóvar; España, 1999, dis-
tribuida por Warner Bros); “Julio of Jackson Heights” (Di-
líticas.
rección de Richard Shpuntoff, USA, 2016); y el discurso
de Lana Wachowski tras recibir el premio HRC Visibility
Award disponible en https://www.youtube.com/watch?-
v=K2SN31i1EE8. En cuanto al material escénico, también
se ofreció a los y las estudiantes la posibilidad de asistir
y analizar el ciclo “Poemario Trans Pirado” de la “artista 4 El 8 de marzo de 2018 el PCVG se transformó en la Di-
trans sudaca” Susy Shock. Este ciclo se presenta los prime- rección de Género y Diversidad Sexual, dependiente de la
ros viernes de cada mes en el Centro Cultural Casa Bran- Secretaría Académica de la universidad. Esta Dirección
don en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Recuperado contiene las líneas de acción del PCVG, pero añade, como
el 09 de agosto de 2017 http://www.brandon.org.ar/ objetivo, procurar que las problemáticas de género consti-
2 Entre ellos, la materia “Historia del movimiento feminis- tuyan un eje temático transversal tanto en la formación de
ta y debates de las teorías de género, transgénero y queer” estudiantes y docentes, como en la labor de trabajadores y
dictado por la Dra. Vanesa Vázquez Laba desde el año 2015 trabajadoras de extensión universitaria. Recuperado el 10
en el Instituto de Altos Estudios Sociales (IDAES) de la de julio de 2018 http://noticias.unsam.edu.ar/2018/03/08/
UNSAM. la-unsam-inaugura-la-direccion-de-genero-y-diversi-
3 En noviembre de 2013 Valeria Gioffre, alumna de la ca- dad-sexual/
rrera de Psicopedagogía de la UNSAM fue asesinada jun- 5 El “Protocolo para la Actuación en Situaciones de Discri-
to a su madre, Silvana Eiriz, en un doble feminicidio en minación por razones de Género y/o Violencia de Género
manos de la ex pareja de Silvana. Este hecho provocó una de la Universidad Nacional de San Martín” fue aprobado
conmoción muy grande en la Universidad, dando lugar a por Consejo Superior en el año 2015 y se encuentra dispo-
la creación del Programa Contra la Violencia de Género nible en: http://www.unsam.edu.ar/pcvg/pdf/Protocolo-Re-
(PCVG). solucion230-15.pdf
94
Symploké revista filosófica octubre 2018

La propuesta de análisis y discusiones actuales respecto al gé-


nero y las identidades sexuales; b. propiciar la
Las carreras Licenciatura en Educación reflexión sobre las distintas áreas de aplicación
y Profesorado en Ciencias de la Educación de la —en el Estado en general y en las instituciones
UNSAM fueron creadas en el año 2003 y 2008 educativas en particular— de los debates y dis-
respectivamente. Con un enfoque histórico polí- cursos en torno al género y las identidades sexua-
tico de la educación, la formación hace especial les; c. facilitar un espacio de discusión colectiva
hincapié en una perspectiva multidisciplinar que donde los y las estudiantes puedan apropiarse de
entiende a la educación como un campo que pro- las herramientas presentadas durante las clases y
duce, reproduce y responde a los contextos socia- utilizarlas en futuros diseños de propuestas espe-
les, políticos e históricos. cíficas para dispositivos educativos.
Los planes de estudios garantizan la for- La dinámica propuesta para las clases
mación en seis áreas: pedagógica y sociocultural; es de taller. Este integra contenidos teóricos y
histórica y político-económica; de la psicología; actividades prácticas. Para ello, se propuso una
de la didáctica; de la administración y gestión y, construcción colectiva del conocimiento a partir
por último, de la investigación. Se suma para di- de los materiales teóricos de la bibliografía obli-
cho Profesorado un ciclo de formación docente gatoria, siendo algunos de estos elegidos por los
que fortalece el trayecto formativo en clave de y las estudiantes para exponer en cada encuen-
prácticas profesionales y trabajo docente. tro. Los ejes que atraviesan el programa son: a. la
Esta estructura involucra, a su vez, la construcción histórico – política de las demandas
realización de seminarios optativos a partir de de igualdad de género; b. género y sexualidad;
los cuales los y las estudiantes pueden elegir las c.la regulación de la sexualidad y el género; d.
temáticas en las que profundizar su interés. Sin infancia y relaciones de género; e. violencia y gé-
embargo, hasta el año 2016 no formó parte del nero; f. desigualdades de género y sexuales como
diseño curricular una formación con perspectiva injusticia social; g. derechos humanos y género.
de género propia de las carreras de Educación. En
este sentido, la oferta del seminario Introducción El equipo
a los debates de género y sexualidad procuró
atender, parcialmente, a dicho déficit curricular. Además de constituir un espacio integral
Este seminario se dicta un cuatrimestre al año y se con un abordaje interdisciplinario, las docentes
encuentra abierto a estudiantes de todas las carre- del seminario provienen de diferentes carreras:
ras de grado de las diferentes escuelas e institutos Psicología, Educación y Antropología. Esta di-
de la UNSAM y de universidades nacionales e versidad en sus perfiles permitió la construcción
internacionales. La materia brinda una aproxima- de un espacio con miradas, tematizaciones y mo-
ción a los estudios de género y a la historia de las dalidades pedagógicas diferentes que conviven
demandas basadas en la igualdad de género y la confluyendo y disintiendo. En los tres casos, sus
diversidad sexual, en las cuales el movimiento de trayectorias de formación en la temática se rela-
mujeres en general y el feminismo en particular cionan con el pasaje por instancias de formación
han ocupado un lugar central. A su vez, atendien- de posgrado -doctorados y maestría- y su parti-
do al desarrollo local de legislación de protección cipación en centros y equipos de investigación
de derechos específicos de los últimos años, se con inscripción institucional en la UNSAM, por
abordan los debates sobre la producción de cuer- ejemplo, en el Programa de Estudios Sociales
pos sexuados, la problematización de las jerar- en Infancia y Juventud del Centro de Estudios
quías de género y el acceso a derechos. En tal sen- Desigualdades, Sujetos e Instituciones (CEDESI)
tido, dicho espacio curricular se propone aportar de la Escuela de Humanidades. Sus intereses en
a la comprensión de los discursos, las prácticas este campo de problemas, no sólo se relacionan
y las relaciones de género institucionalizadas en con cuestiones del proceso de formación acadé-
y reguladas por el Estado en general, y desde las mica, sino también a sus militancias y participa-
instituciones educativas en particular, proveyen- ciones en espacios feministas y en organizacio-
do al alumnado de herramientas para el diseño de nes vinculadas a las diversidades sexuales y a los
propuestas específicas de problematización del derechos sexuales y reproductivos.
tema en dispositivos educativos. Entre los propó-
sitos específicos se encuentran: a. dar a conocer
y profundizar debates, fundamentos, categorías
95
Symploké revista filosófica octubre 2018

La deconstrucción de saberes previos y la re- cia a la problemática de la violencia de género


flexión sobre la propia experiencia como «un tema reciente» o «actual». A lo largo
de los encuentros, fuimos observando que parte
La primera edición del seminario con- de esta preocupación se vinculaba con las de-
tó con un total de quince estudiantes: catorce mandas esbozadas por el heterogéneo colectivo
de la Licenciatura y el Profesorado en Ciencias Ni Una Menos y su lugar en los medios masivos
de la Educación y uno extraordinario de la de comunicación.
Universidad Nacional del Litoral. Este último
se encontraba realizando una estancia de forma- «Hay silencios que dan escalofríos»
ción en la UNSAM. La segunda cohorte se en-
contró constituida por siete estudiantes de esta El análisis de los registros de las interac-
última universidad: seis correspondientes a las ciones producidas en las clases y de los materiales
carreras de Educación y uno a la Licenciatura en elaborados por los y las estudiantes —formulario
Artes Escénicas. En esta oportunidad, contó con de expectativas; trabajos finales y evaluaciones
dos estudiantes de la Universidad Autónoma de de la enseñanza—, arroja algunos primeros nú-
Barcelona que también se encontraban realizan- cleos de sentido significativos en torno a cómo
do una estancia de estudio en la UNSAM. Las los y las estudiantes se acercaron al espacio del
edades de los y las estudiantes oscilaba entre los seminario. En esta primera instancia de la inda-
20 y los 60 años de edad. La mayoría se encon- gación, se presentan una serie de insistencias y
traba en la mitad de las carreras, muy pocos y rasgos sobresalientes que permiten comenzar a
pocas estaban finalizándolas. Cabe destacar que identificar ciertos énfasis en dos aspectos.
la mitad de ellos y ellas se desempeñaba o habían Por un lado, en cuestiones más operativas
tenido experiencias como docentes en distintas respecto de cómo abordar el campo de la edu-
instituciones educativas. cación sexual en los espacios educativos en los
En una aproximación a sus conocimien- que aquellos y aquellas se desempeñaban como
tos previos, se observó confusión y deslizamien- docentes. Si bien conocían la existencia de la Ley
tos en torno a las nociones de género y sexo. En de Educación Sexual Integral, por lo general,
cuanto a la sexualidad, predominaba su asunción dicho conocimiento sólo se daba en su carácter
como una cuestión de índole personal, privada y normativo y no así en los aspectos de su imple-
circunscrita al momento del encuentro sexual y mentación concreta en las actividades áulicas. En
no como un proceso dinámico de construcción este sentido, la mayoría de los y las estudiantes
social e individual de sentidos que van cambiando expresaron con preocupación la falta de conoci-
a lo largo de las vidas de las y los sujetos (Lopes mientos y/o herramientas para abordar situacio-
Louro, 1999). En adición, y a partir de la premisa nes puntuales que se presentaban en las institu-
de la heterosexualidad y de la materialidad ina- ciones educativas en las que trabajaban. Desde el
pelable del sexo anatómico, existía entre aquellos inicio de ambas cursadas surgieron las preguntas
y aquellas una fuerte tendencia a pensar dichas ligadas al ¿qué? y al ¿cómo?: ¿Qué contenidos
nociones en términos binarios: hombre-mujer. y qué herramientas didácticas utilizar para poder
Por otra parte, resulta sugerente mencio- poner en acción aquello que menciona la ESI en
nar que gran parte de los y las estudiantes de am- sus lineamientos? Este énfasis se mantuvo cons-
bas cohortes relacionaban las problemáticas de tante a lo largo de los encuentros del seminario.
género con dos temas específicos: la «violencia Tal como lo mencionó Amalia en la primera
de género»6 y los «femicidios». No así con otras clase de 2017: «¿cómo se aborda la temática en
demandas asociadas al movimiento de mujeres, el plano de la cotidianeidad en las escuelas?»
los feminismos y el colectivo LGBTTIQ, como [Formulario de expectativas, 13/03/2017]. Por
por ejemplo, el derecho al aborto, el parto huma- otra parte, Romina también fue contundente al
nizado, la igualdad de oportunidades en el acceso mencionar: «Me pasó en el jardín que dos herma-
al trabajo, el cupo laboral trans, entre otras. En nitos me contaran que en su casa vino la cigüeña.
adición, pudimos identificar que hacían referen- Me quedé en silencio. ¿Cómo abordar esto? Hay
silencios que dan escalofríos» [Formulario de ex-
6 Se utilizan comillas bajas o españolas para introducir la pectativas, 07/03/2016].
voz nativa y términos propios de los/as sujetos/as de inves- En sintonía con lo anterior, una segunda
tigación. Para señalar conceptos o citas de autores/as y para
relativizar determinados términos o indicar su polisemia se
cuestión en la cual los y las estudiantes insistían
utilizan las comillas altas o inglesas. como motor de su acercamiento al seminario, se
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Symploké revista filosófica octubre 2018

vinculaba con una búsqueda de legitimidad al cotidianamente en el aula.


momento de tomar decisiones y realizar propues- Por último cabe señalar que, desde el
tas en sus instituciones que, si bien ellos y ellas inicio, la mayoría mostró entusiasmo, deseo y
comprendían que aportaban a una educación más curiosidad frente a los temas y debates presenta-
igualitaria entre varones y mujeres, las realizaban dos. Si bien algunas de las discusiones temáticas
con temor y de manera intuitiva y/o improvisa- parecían ser más interpeladoras que otras, por lo
da. Como expresó Romina, Directora de Nivel general, no se observó que pusieran distancia o
Inicial, en respuesta a la pregunta en torno a “los se comportaran a la defensiva frente a las acti-
problemas que deseaba abordar en el seminario” vidades propuestas. Incluso con temáticas movi-
expresó: «Llevarme herramientas para dar men- lizantes y/o complejas, y a pesar de esbozar la
sajes y líneas de pensamiento sin sentir que in- molestia frente a ciertas incertidumbres, predo-
vado un ámbito privado y particular. La sexuali- minaba entre ellos y ellas una continua disposi-
dad aún es tabú, aún hoy es algo que no se sabe ción a trabajar en profundidad con los materiales
cómo abordar en la Institución» [Formulario de sugeridos.
Expectativas, 07/03/2016].
Esta búsqueda de legitimidad se relacio- «¿Quién soy? ¿Por qué lo hago? ¿Cómo lo
naba con dos cuestiones. Por un lado, con ampliar hago?»
y profundizar los conocimientos que tenían sobre
determinadas normas, leyes, políticas públicas El segundo interrogante que orientó esta
que les permitieran justificar sus accionares fren- etapa inicial de exploración se encuentra relacio-
te a sus superiores y a las familias que constituían nado con conocer cómo los contenidos y las dis-
la comunidad educativa. Por otro lado, con ad- cusiones propuestas en el seminario modificaron
quirir un bagaje teórico que les permitiese lidiar y/o aportaron a los modos de comprender la rea-
con el alto flujo de información sobre violencia lidad social de los y las estudiantes y, específica-
de género y abusos sexuales que circulaba en las mente, a su formación y práctica profesional.
redes sociales y en los medios de comunicación Las devoluciones ofrecidas por aquellos
a los que no sólo ellos y ellas tenían acceso, sino y aquellas al final de las cursadas así como sus
también sus alumnos y alumnas. Como plantea- trabajos integradores, en conjunto con nuestros
ba Fernanda: «Quiero aprovechar el espacio para registros sobre los debates e interacciones produ-
aprender sobre la temática más seriamente (es cidas en el aula, evidenciaron que el abordaje de
decir, más allá de diarios, facebook, internet…)» temáticas de género y diversidad sexual conlleva-
[Formulario de expectativas, 13/03/2017]. Si ba de manera inevitable una interpelación tanto a
bien los y las estudiantes destacaban como un nivel profesional como personal. Esta se vuelve
aspecto positivo la centralidad que estos temas necesaria pero también compleja en el aprendiza-
ocupaban en los medios de comunicación y en je de estas nociones y perspectivas en el marco de
las redes sociales, entendían que, muchas veces, la formación docente y la investigación en educa-
las formas en las que estos eran abordados no ción.
era ni la correcta ni lo suficientemente profun- Para llevar adelante la presentación de
da. En relación a este punto, resulta interesante estos datos serán agrupados en dos dimensiones:
recuperar lo señalado por Carmela cuando se le “construir y participar en nuevos espacios profe-
preguntó sobre sus expectativas sobre el semina- sionales y políticos” y “armar mirada y diálogos
rio: «Interiorizarme en el tema más allá de los empáticos”. Esta distinción tiene fines heurísticos
debates de los que normalmente estamos rodea- y bajo ningún aspecto pretende señalar que en la
dos (medio de comunicación) y poder recuperar experiencia del trabajo docente lo profesional se
aportes para llevar a la práctica» [Formulario de encuentre escindido de lo personal. Por el con-
expectativas, 13/03/2017]. A pesar de asumir trario, recuperando el pionero planteo de Achilli
que sus acercamientos al campo temático habían (1986), concebimos a los y las estudiantes como
estado vinculados con el acceso a ciertos debates agentes sociales que desarrollan su práctica en el
a través de los medios de comunicación, existía campo educativo: sus formaciones y sus subjeti-
una fuerte expectativa por parte de las y los estu- vidades dialogan y se ven transformadas e inter-
diantes por problematizar dichas aproximaciones peladas de manera inescindible.
y que aquellas no se constituyan como la única Ahora bien, la primera dimensión, que
fuente de conocimiento y de insumos para tra- denominamos “construir y participar en nuevos
bajar con las situaciones que se les presentaban espacios profesionales y políticos”, se encuentra
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Symploké revista filosófica octubre 2018

vinculada con al menos dos aspectos. Por un lado, Como un proceso que atraviesa las vidas, los va-
con la apertura y búsqueda hacia nuevos debates lores, creencias y emociones de todos los sujetos
y espacios donde desarrollar su militancia y pro- y que se encuentra estructurado por ciertos mar-
fundizar su conocimiento académico. Por ejem- cos normativos y sistemas de derechos que son
plo, a través de la cursada del seminario Historia históricos y culturales (Ministerio de Educación,
del movimiento feminista y debates de las teorías 2015).
de género, transgénero y queer ofertado por el En sintonía con esto, la segunda dimen-
Instituto de Altos Estudios Sociales (IDAES) de sión, que denominamos “armar mirada y diálogos
la UNSAM y a cargo de la Dra. Vanesa Vázquez empáticos”, señala ese nuevo registro sobre aque-
Laba. En relación a este punto, algunos y algunas llo que le sucede a ellos y ellas y a los y las otras y
estudiantes también expresaron interés por orien- otros. Como lo mencionaba Ariana hacía el final
tar su formación de grado en investigación hacia de la cursada: «La mirada hacia el otro se me mo-
el campo disciplinar de los estudios de género y dificó. Las cosas ya no me pasan por el costado»
las sexualidades. Como lo planteó entusiasmada [Devolución oral de la evaluación de enseñanza,
Amalia en uno de los últimos encuentros de 2017: 27/06/2016]. Cabe mencionar que, entre algunos
«Lo que leímos lo llevo a un contexto concreto. y algunas de los y las estudiantes, dicha expec-
Me abre puertas para seguir leyendo. Mi tesina va tativa respecto de que el seminario funcionase
a ir por este lado» [Devolución oral en la evalua- como una “ruptura” en su modo de ver el mundo,
ción de la enseñanza, 26/06/2017]. En segundo adquiría una dimensión normativa, tornándose en
lugar, con la valoración del seminario como un una exigencia. Como lo planteaba una estudiante:
espacio propio y de encuentro con otros y otras «Vine al seminario para abrirme la cabeza, con
con los y las que compartir inquietudes comunes. las clases me di cuenta de que se trata de dejar de
En este sentido, gran parte de ellos y ellas mani- pensar en binarismos, que no hace falta etiquetar.
festaron sentir que la materia era un espacio ex- Eso es nuevo para mí» [Devolución oral en la eva-
cepcional para plantear estas discusiones, ya que luación de la enseñanza. 26/06/2017]. Aún así,
en sus vidas cotidianas o instituciones de trabajo “aprender a mirar a los demás de otra manera”,
no contaban con la disponibilidad para hacerlo: más respetuosa e inclusiva, era un ejercicio que
«Hay cosas que vemos acá que no las podemos muchos y muchas reconocían dificultoso y aún en
hablar con nuestros amigos, papás, novia, porque proceso: «Todavía me cuesta no encasillar. Me
si lo hacés sos como un extraterrestre» [Ariel, de- encontré con algo muy mío que nunca antes me
volución oral en la evaluación de la enseñanza, puse a cuestionar» [Devolución oral en la evalua-
27/06/2016]. ción de la enseñanza, 27/06/2016]. Por otra parte,
En este sentido, la reflexión colectiva en y en relación a esta dimensión, mencionar que
un espacio donde primaba el compartir intere- la construcción de dicha mirada supuso la reme-
ses comunes por sobre el silencio de lo que no moración frecuente, por parte de las estudiantes
se puede hablar —identificado por ellos y ellas mujeres, de escenas cotidianas que vinculaban a
tanto en instituciones como en pares, parejas y los modos genéricos restrictivos del patriarcado.
familias—, dió lugar, de forma paulatina, a tras- Dichos señalamientos les permitían introducir
pasar ciertos temores y a la construcción —aun- cuestionamientos a la organización social del gé-
que en proceso— de “otra mirada”. Disponerse nero y al lugar subordinado de las mujeres en la
a la reflexión personal, de forma grupal y en un sociedad. En relación a los cuatro estudiantes va-
clima de confianza, les posibilitó construir una rones, también expresaron, en diferentes momen-
comprensión más profunda y crítica de los con- tos, reflexiones asociadas a sus masculinidades.
ceptos y las categorías que al inicio de las cur- Algunos las vincularon con sus privilegios en el
sadas se expresaban de manera confusa y acríti- orden de la sociedad actual; otros, en cambio, a
ca. En el diálogo y la reflexión conjunta, aquella una matriz heteronormativa que les imponía mo-
conceptualización inicial de la sexualidad muy dos de relacionarse con los cuales manifestaban
asociada al ámbito de los encuentros sexuales — no sentirse cómodos. Por ejemplo, hacia el final
heterosexuales— comenzó a deconstruirse, para de la cursada del año 2017, Gabriel mencionó
dar lugar a representaciones más ligadas a lo pro- sentirse interpelado por los contenidos y debates
cesual y dinámico, a una forma de expresión que del seminario: «Además de adquirir herramien-
trasciende ampliamente la genitalidad y las rela- tas conceptuales me puedo hacer preguntas hacia
ciones sexuales y que se encuentra vinculada a la adentro: ¿Quién soy? ¿Por qué lo hago? ¿Cómo
identidad y a las formas de sentir y expresarse. lo hago? Y a partir de eso cambiar prácticas para
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Symploké revista filosófica octubre 2018

construir un mundo mejor ». [Devolución oral en guntarse ¿por qué razones las universidades en
la evaluación de la enseñanza. 26/06/2017]. el marco de su autonomía académica no contem-
plan una perspectiva de género transversal, tanto
Consideraciones finales en la estructura, como en la definición de los es-
pacios curriculares obligatorios?
Este artículo giró en torno a reflexionar
sobre la relevancia de la construcción de espacios Bibliografía
formativos en el ámbito universitario en general
y específicamente en las carreras destinadas a Achilli, E. (1986). La práctica docente: una
formar docentes e investigadores en Educación. interpretación desde los saberes del maestro,
Si bien el espacio del seminario Introducción a cuadernos de formación docente. Rosario:
los debates de género y sexualidad es un caso Universidad Nacional de Rosario.
particular y acotado al contexto de la Universidad Bach, A. (Coord.) (2015). Para una didáctica
Nacional de San Martín, el análisis de su dictado con perspectiva de género. Buenos Aires:
a través de cómo los y las estudiantes llegan al Miño y Dávila.
espacio y cómo se van de aquel, habilita la re- Lavigne, L. (2010). Notas sobre una modalidad
flexión sobre la relevancia de la perspectiva de de gestión de la sexualidad juvenil:
género en la formación docente universitaria. la 
educación sexual en una escuela media
La llegada de los y las estudiantes al seminario de la Ciudad de Buenos Aires, Argentina.
evidenció la vacancia de espacios formativos en 9 Seminario Internacional Fazendo Género
género y sexualidades, tanto a nivel universitario 9, Universidad Federal de Santa Catarina,
como no universitario, para docentes encargados Florianopolis, 23 al 26 de agosto de 2010.
y encargadas de aplicar la ESI al interior de las Lopes Louro, G. (1999) O corpo educado.
instituciones escolares y de educación superior. Pedagogías da sexualidade. Belo Horizonte:
Sus inquietudes y disconformidades respecto a la Autentica.
falta de conocimientos en la temática y sus expec- Morgade, G. y Alonso, G. (Comps.) (2008).
tativas por saldar dicho déficit en la cursada del Cuerpos y sexualidades en la Escuela. De la
seminario, da pistas para pensar sobre la prioridad “normalidad” a la disidencia. Buenos Aires:
de que, espacios como este, se constituyan como Paidós.
currícula obligatoria en sus formaciones. En este Morgade, G. y Fainsod, P. (2015). Convergencias
sentido, la mayoría de los y las estudiantes, hacia y divergencias de sentido en los talleres de
el final de las cursadas, señalaron la necesidad de Educación Sexual Integral de la formación
que el seminario Introducción a los debates de docente. Revista del IICE, 38, 39-62.
Género y Sexualidad forme parte de la currícu- Ministerio de Educación-Presidencia de la Nación
la obligatoria de las carreras de Educación, más (2011). La educación sexual en Argentina.
aún en un contexto en el que la implementación Balances y Desafíos de la Implementación
de la Ley ESI se enfrenta a múltiples obstáculos, de la Ley (2008 - 2015)
principalmente en materia de presupuesto y capa- Stolze, B. y Ramirez, S. (2015). Educación
citación docentes, pero también, en la impresión sexual y tradiciones pedagógicas en la
y distribución de materiales áulicos.7 formación docente. Temas de educación, 21,
Teniendo en cuenta que la Ley 26206 de 1, 153- 164.
Educación Nacional coloca especial énfasis en
el respeto a los derechos humanos y el fortaleci-
miento de vínculos solidarios sin discriminación * Gaitan, Ana Cecilia. CEDESI (UNSAM)-
ni violencia; que contempla la importancia de la CONICET, a.ceciliagaitan@gmail.com
igualdad de género en el acceso y la permanen- Funes, Mariana. UNSAM, marianaafunes@
cia a una educación de calidad y que, a su vez, gmail.com
jerarquiza la formación docente como un factor Llobet, Valeria. CEDESI (UNSAM)-CONICET,
clave en el mejoramiento de la calidad educativa valeria.s.llobet@gmail.com
y, por último, que las universidades se rigen por
la autonomía académica e institucional, cabe pre-

7 Recuperado el 12 de julio de 2018 https://www.pagina12.


com.ar/122385-para-evitar-la-obstruccion-de-la-esi
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Symploké revista filosófica octubre 2018

Entrevista
Nina Brugo

Lic. J. Fernández - Lic. L. Saavedra


UBA
¿Cuál fue su primer acercamiento “Camila”, María Luisa Bemberg. tengo hijos, en la actividad que
al movimiento de mujeres? En ese pequeñísimo contacto, yo desarrollo, sería totalmente
nos criticaban a las mujeres separada de las funciones que
Hay cuestiones que hacen a que participábamos con la ola cumplo y no siento la necesidad de
la temática de la mujer. No creo, revolucionaria de América Latina, tenerlos”. Se veía que si la mujer
como se dice a veces, que deba por decirlo de alguna manera. tenía hijos ya pasaba a ser relegada.
decirse la “problemática”. No Buscábamos un cambio estructural Una experiencia en el Movimiento
somos un problema. Hemos sido en el país. Las auto llamadas de Mujeres que tal vez considero
un tema, sobre todo en el siglo feministas nos decían que nosotras que fue como un “clic”, para mí,
XX, pues se toma más conciencia no tomábamos el feminismo, se dio mientras asistí a una reunión
de ello. Pienso que de algunas cuando estábamos siendo con compañeras que participaban
maneras casi todas las personas discriminadas en la política. De en el territorio en la Agrupación
que hoy por hoy decimos que hecho, por ejemplo, las mujeres no Evita. Una de ellas dijo: “Me
somos feministas o que vamos ocupábamos lugares destacados; encantan estas reuniones porque
haciéndonos feministas –porque ni nos otorgaban lugares de no hay un marido u hombre que
considero que una nunca va a responsabilidad las agrupaciones me diga: ‘callate, vos qué sabes de
acabar de ser feminista–, lo hemos llamadas “revolucionarias”. política’”. Aquí todas me respetan,
sido a veces sin saberlo o sin Conocí una sola que llegó a un alto diga lo que diga sobre lo que pienso.
entenderlo bien. cargo de conducción. Éramos muy Considero que estas experiencias
La primera vez que supe pocas las de lugares responsables fueron las que me marcaron. Es
sobre el feminismo fue hace como intermedios. En las tareas no ahí cuando tomé la primera idea
cincuenta años. Tenía participación había diferencias, pero sí, insisto, que las mujeres necesitábamos un
política en los años 70 y tuve en las responsabilidades que se espacio propio...
un contacto esporádico con lo otorgaban. Recuerdo muy bien a Además primero estamos
que fue UFA [Unión Feminista una compañera que murió cuando con la revolución social y después
Argentina]. Fue la segunda ola del el ejército paró el coche en el que veremos el problema de la mujer,
llamado feminismo –feministas iba con su pareja. Ella no tenía si es que hay un problema, porque
argentinas– donde había mujeres hijos y llevaba bastante tiempo tan claro no lo tenía. Ahí todavía
conocidas como la directora de de casada; un día le pregunté por hablaba de problema, no lo
cine feminista que hizo la película qué no tenía hijos y me dijo: “si entendía como temática. Después
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Symploké revista filosófica octubre 2018
cuando estuve afuera pocos años, 800 y 1000 mujeres de todo el país. corriendo y en menos de dos días
por persecuciones tuvimos que Muchas habían venido del exilio. después estaba en un avión yendo
irnos; tomé contacto con algunas Eran compañeras que habían a la otra marcha. ¡No me la podía
mujeres y el feminismo. Así estado en la lucha revolucionaria perder! De hecho, espero llegar
empecé a vislumbrar que el asunto de los ´70, habían sido perseguidas. al Encuentro número 33, que es
era mucho más profundo de lo que La cuestión es que a mi encantó. ahora, 2018 en Trelew.
yo había visto. Mi marido en aquel Me enamoré, no puedo decirlo de Bueno, realmente ahí, en el
entonces –que es el mismo que otra manera. La potencialidad de la movimiento de mujeres, con todas
tengo actualmente– era fanático mujer para producir cambios es la las organizaciones, las ONGs, las
de comprar libros cuando podía, que hoy vemos. redes, del Movimiento de Mujeres
porque por represiones había Como era abogada y Feministas, me vinculé, me fui
perdido varias bibliotecas. Cuando laboralista, empecé a trabajar metiendo. Me interesaban muchas
le reprochaba que estaba gastando cada vez más con las cuestiones temáticas. Empecé a atender en
mucha plata en libros, empezó a de las trabajadoras; me interesó Lugar de Mujer a mujeres que
comprarme libros de feminismo. más la temática de las mujeres sufrían violencia.
Los ponía en mi mesa de luz trabajadoras. Junto con otras Me acuerdo de una
diciendo: “ese es tu problema, compañeras de acá y otras que anécdota. Ahí se atendía mujeres
eso te toca a vos”. Entonces los vinieron de varias partes del país de distintos sectores sociales. Acá
miraba, a los libros, un poco de hicimos, en el año 1987 antes mismo en el estudio he atendido
reojo hasta que empecé a leerlos del 2do Encuentro Nacional de médicas, psicólogas, abogadas,
y a profundizar. Pero no tuve Mujeres, el 1er Encuentro de empleadas, pobres, de todos los
contacto con el movimiento en sí. Mujeres Trabajadoras, al que niveles sociales que se puedan
En México, con una compañera fueron bastante; algunas de imaginar. Me acuerdo que en una
argentina, asistimos a algunas ellas habían estado presas, entre oportunidad, creo que era una
cuestiones que tenían que ver con ellas Elsa Mura. Realmente fue médica, me dijo que el temor de
temáticas de la mujer. Nuestro hermoso organizar eso; no se le ella era que creía que la iba a matar.
regreso fue en el año 1984. Nos dio la continuidad por algunas Estaba aterrorizada, porque el nivel
enteramos de la organización del diferencias, pero el hecho real es de violencia que tenía y la amenaza
Primer Encuentro Nacional de que nos empezamos a encontrar en de muerte eran muy contundentes.
Mujeres en Buenos Aires que se todos los Encuentros posteriores. Quedé muy preocupada porque
hizo para el 24, 25 de mayo del Esto sería para mí introducirme no existía aún el lugar donde ir a
año 1986 en el teatro San Martín. en lo que podríamos decir el hacer la denuncia. Estaba un poco
Concurrieron mujeres políticas, movimiento de mujeres. asustada. Entonces llamé a una
sindicalistas, organizaciones Bueno, no podía faltar compañera que no era abogada
feministas que ya habían ni al segundo, ni al tercero, ni al pero al menos sabía un poco más
comenzado aquí. Nos juntamos cuarto y fui a todos: los 32. Dicen sobre la temática y había asistido
para ver cuál era el estado, qué que soy una invicta porque no a varios eventos internacionales
es lo que pasaba con la mujer en han encontrado a nadie a quien de violencia contra la mujer a
la Argentina. Muchas de ellas la vida le haya regalado esa principios de los años ´90. Le
habían estado en Nairobi, en una posibilidad, puesto que muchas conté mi preocupación y temor
Conferencia Internacional que faltaron a algunos o ya no asisten de que la mataran. Me contestó:
hubo en el año 1985. El hecho es por problemas de salud, etc. Así «pero no, no matan a nadie,
que con esa compañera, que nos que hasta ahora fui combinando acá no matan a nadie». Claro,
vinculamos en México, seguíamos todas las cuestiones laborales, de todavía no se había comenzado
conectadas por cuestiones militancia y familiares para asistir con los feminicidios. ¿Por qué?
políticas y juntas decidimos ir a a todos. Inclusive, me acuerdo Sucedía que entonces no mataban
ese Encuentro. Además, asistían que en el año 2000 el encuentro a nadie. Era porque las mujeres
mujeres integrantes de Organismos fue en Paraná, mi ciudad natal, no estábamos suficientemente
de Derechos Humanos, con los y ahí en Paraná resulta que 2 ó 3 preparadas, empoderadas (como
cuales ya estaba vinculada; una de días después estaba la Marcha utilizan esa palabra algunas
las que asistió fue Nora Cortiñas. Internacional de Mujeres en Nueva personas), para decir: “basta,
Ese Encuentro estaba dividido York a la cual había decidido hasta acá llegué”. Cuando las
en temáticas. Nunca supimos asistir, entonces: ¿cómo hacía con mujeres “desenvalentonaron”
exactamente cuántas fuimos: entre el Encuentro? Fue una odisea: salí a los violentos, dijeron: “NO,
101
Symploké revista filosófica octubre 2018
basta de violencia”; ellos no lo hablando de una mujer nacida en cosa que no se da.
aceptaron ni concibieron ese el siglo XIX. El esposo de ella, Cuando vengo acá,
enfrentamiento. Creo que de mi abuelo paterno, era contador Buenos Aires, mi padre empieza a
ahí viene todo lo que lleva a la y fue intendente de Paraná. Por averiguar. Para él todos los hijos,
persona a matar, al homicidio o el otro lado, el lado de mi madre, varones y mujeres, eran iguales,
mejor dicho feminicidios. Algunos mi abuelo era un escritor y poeta, podría afirmar “no patriarcal”.
o algunas dicen que se hizo una un literato reconocido; varios de Entonces me dice: “en la Facultad
moda. No es eso. Las mujeres por sus hermanos tuvieron actuación de Derecho [de la Universidad de
un lado decimos basta; y por otro política y también altos cargos en Buenos Aires] no te reconocen
lado, los golpeadores patriarcales la Justicia. Uno de los hermanos nada; en la Universidad Católica
comenzaron un incremento de la de él fue miembro del Superior va a haber en marzo un examen
violencia. Tribunal de Justicia de la Provincia de ingreso donde –estábamos a
He estado en muchísimas de Buenos Aires. Ese abuelo no comienzo de febrero del año 1963–
organizaciones, ongs, en política quiso terminar de estudiar en la podrían llegar a reconocerte las
de género, en política partidaria. Universidad porque decía que materias de Córdoba”. Entonces en
En fin, en un montón. allí se daba cuenta que perdían una carrera como esa, en la estatal,
la fe y para él lo más importante los años eran muchísimos –seis con
Sabemos que estudió en una era mantener la fe. Mi padre ingreso inclusive como mínimo. Y
Universidad Católica y viene de también fue siempre miembro pensaba: ¿podré o no podré? Era
una familia también de tradición de organizaciones católicas, fue demasiado. Frente a eso no dudé:
católica. secretario de la Acción Católica en me preparé para hacer el examen
Entre Ríos. Las dos familias muy de ingreso en la Católica. Lo único
Si, yo vengo de Entre católicas. que no sabía era si lo iba a poder
Ríos. Tanto por parte de padre Yo fui a un colegio de aprobar, porque había gente que
como de madre, son familias monjas, por supuesto, en Paraná. había estado un año estudiando,
tradicionales de Entre Ríos, De ese colegio habían egresado mis haciendo los cursos preparatorios,
“acomodadas”, “bienudas” de dos abuelas, mis tías, mis primas, etcétera. Y tenía que rendir cuatro
allí, lo que vulgarmente se dice en así que era el colegio tradicional. o cinco materias. Resulta que
las provincias. Mis antepasados Sin embargo, yo no quería ir a la el promedio para el ingreso en
han sido políticos importantes en Universidad Católica. Empecé a ese momento era 7.50 y con los
la lucha de la independencia; un estudiar Derecho en la Universidad exámenes saqué 7.75, me sobraron
tío abuelo abogado, por el lado Nacional de Córdoba, donde tenía 25 centésimos. Demasiado sobró
materno, ha sido gobernador, dos hermanos que ya estudiaban para una preparación rápida.
ministro de la nación, diputado ahí, y me fui a estudiar donde ellos Me inscribí en 1° (horario
nacional. Mi bisabuelo, paterno, estaban. Pero mis padres al año de la tarde) y 2° año (horario de
era escribano y murió siendo siguiente decidieron venir a vivir a la mañana) de la Católica. Vivía
diputado nacional. O sea, todos Buenos Aires y ellos dijeron: “No, en la facultad: iba a la mañana, a
acomodados, inclusive tuvieron una mujer no va a estar fuera de la la tarde y después al mediodía me
bienes, casi todos profesionales. casa, de la órbita familiar, menos quedaba y colaboraba. Trabajé
Es decir, provengo de familias recién comenzada la carrera”. Así en el centro de estudiantes, que
tradicionales argentinas, como que me vine obligada a seguir más que centro de estudiantes era
también de militancia católica estudiando a Buenos Aires. Pero venta de libros, porque cuando nos
muy importante. En general de los ya había aprobado tres materias metíamos en lo que corresponde a
dos lados; por un lado, una abuela en Córdoba. De algún modo no un centro de estudiantes común,
paterna que me marcó mucho, fue elegida para que esa fuera de las Universidades estatales
porque si no era presidenta era mi vocación. Recuerdo quería nacionales, nos sacaban corriendo.
vicepresidenta o secretaria de las estudiar psicología, me gustaba. No podíamos opinar de casi
organizaciones de beneficencia Pero psicología cuando empecé nada. Mi anteúltima materia para
o religiosas. Era el lugar público en Córdoba era lejos de donde terminar fue Filosofía del Derecho.
que les permitían a las mujeres. vivía y la Facultad de Derecho me Mi profesor era un cordobés con 3
Estoy hablando de una abuela quedaba más cómoda. Entonces apellidos –uno de ellos Pueyrredón,
que nació en el año 1878. O sea, me decía: “hago derecho y después fácil de acordarse por la Avenida.
hace muchos años. Ella se casó psicología”. Porque una siempre En unas de sus clases llegó a decir
de grande, en realidad estamos sueña que puede ser más y más, que era de derecho natural que
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Symploké revista filosófica octubre 2018
hubiera personas que nacían para en el que recién la gente estaba agrupaciones o partidos políticos
servir y otras para ser servidos. comprando su terreno. Era Villa unos ocho, cada uno en distintos
Aunque poco participaba en las Albertina, Budge, en Lomas de lugares.
clases, allí si le manifesté que no Zamora, para hacer promoción
acordaba con lo dicho por él. Se dio social y llevar cuestiones religiosas. ¿Esa fue la última interacción
una situación de discusiones que Acepté eso e íbamos también con con la iglesia?
dividió en dos a las personas que unas monjas dominicas que eran
allí estábamos. Bueno, la cuestión de una congregación dominica Ahí fue cuando me fui
es que cuando fui a rendir me hizo francesa, muy avanzadas. Eran alejando cada vez más y rompí con
dos preguntas fuera del programa casi todos estudiantes de estudios las cuestiones religiosas hasta hoy.
y al no poder responder me superiores, universitarios, e En el año ´75 tomé contacto con uno
aplazó. Me quedó pendiente para inclusive de universidad estatal. solo que había sido dominico: Juan
recibirme esa sola materia. Meses Muy progresistas. Estamos Ferrante. Él había estado preso en
después (cuando tuve otra mesa hablando de la época del Concilio la época de Lanusse y echado por
para rendir) se repitió la misma Vaticano Segundo, que fue un la Iglesia. Bueno, en el ´75 estaba
situación. Al tercer intento (solo a hito en la Iglesia Católica, en el en Tucumán pero vuelve a Buenos
un amigo le conté que intentaría de cual Juan XXIII permitió una Aires perseguido porque ya era la
nuevo y pedí que me acompañara) apertura mundial. Muchos de ellos época de Bussi. Nos encontramos
no sabía si aprobaría. El profesor terminaron siendo Sacerdotes del y formé pareja con él. Ya él en ese
se retiró de la mesa y otros dos Tercer Mundo, toda una corriente momento no tenía contacto con
me escucharon. Me llamó aparte de progreso importante en esos la Iglesia. Nos casamos, tuvimos
para decirme: “no sé si su examen años. Se da en el marco de los tres hijos. Primero teníamos
estuvo bien o mal, le puse 4 para años ´60. Entonces empiezo a ir diferencias políticas –las seguimos
que aprobara porque el decano Dr. con ellos y ellas. Igualmente yo ya teniendo en varios sentidos– y
Bidart Campos (al que nunca hablé tenía conexiones con compañeras él actualmente tiene una actitud
por esto) me dijo que lleva casi un y compañeros que estaban en la distinta con la Iglesia como la que
año sin recibirse por esta materia. política: era época de Onganía, se tengo yo aunque estemos juntos.
Le aclaro que si hubiera estado en hacían movilizaciones en contra.
primer año nunca la hubiera dejado Antes de ingresar o comunicarme ¿Cómo y cuándo comenzó a
aprobar, porque su forma de pensar con personas comprometidas en militar por el derecho al aborto?
es un peligro para la humanidad”. cuestiones políticas, al tener una
Ese fundamentalista, conforme a inquietud social muy grande de La primera vez fue cuando
su ideología, tenía razón... parte mía –eso es evidente– preferí vi una parejita de 17 años más
Es así como terminé buscar canalizar inquietudes o menos, en Villa Albertina.
en la Universidad Católica, sociales dentro de los sectores Vinieron y me dijeron que eran
consiguiendo de algún modo que que estaban ligados a la Iglesia. una parejita de novios, que ella
fueran los seis años que esperaba. Al final todas esas monjas (vivían estaba embarazada y qué era lo
unas treintena en una casa grande que yo pensaba del aborto. La
¿Y cómo fue, si la hubo, su cerca de Constitución) terminaron verdad que hasta ese momento
separación de toda esta tradición todas afuera de su Congregación, esa palabra para mí ni existía.
tan católica y de la Iglesia como echadas porque cuando se hicieron Entonces fui a ver a un dominico
institución? demasiado revolucionarias les especialista en cuestiones morales
dijeron: “bueno, hasta acá llegaron, y en teología moral y le comenté
Cuando me inscribí en la ahora vuelvan a lo tradicional”. el caso. Entonces me dijo algo
Universidad Católica me encontré En realidad los dominicos que me dejó como una pelota que
con los sacerdotes dominicos nos dejan afuera del grupo y va rebotando. Me dijo: “primero
que eran teólogos; yo no estaba nosotros nos empezamos a tienen que analizar cuál es el mal
militando dentro de la iglesia ni juntarnos con grupos políticos; menor: si tenerlo o no tenerlo”. Y
nada por el estilo. Entonces los empezamos a estudiar distintas me quedé dura. “Segundo, Santo
conocí y ellos nos invitaron, dos tendencias políticas que había y Tomás de Aquino en la época de
años antes más o menos de que cada uno tomó su camino. El grupo la Edad Media, (ningún sacerdote
finalizara mis estudios, a concurrir nuestro fue un grupo numeroso, hoy por hoy deja de estudiar a
a un barrio –no diría villa miseria, como treinta, pero terminamos Santo Tomás de Aquino) decía que
pero sí un barrio muy modesto– comprometidos políticamente en el embrión estaba en desarrollo,
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no era un ser completo: hasta los en América Latina, a pedido de poder participar activamente;
3 meses no tenía alma”. Y que, por las brasileras porque era el día inclusive ayudamos a muchísimas
otro lado, en el Derecho Romano que conmemoraban desde 1871 la compañeras. Creo que
no se consideraba persona hasta libertad de vientre. O sea, ligan, conseguimos casi todas un pasaje y
que no naciera. Entonces me quitó hacen un paralelismo de la libertad lo hicimos en un hotel. Era un hotel
la idea de que el aborto era una de vientre con la cuestión del aborto, del Automóvil Club, no recuerdo
cosa espantosa; pero eso sí es una porque toda esclava que tuviera en qué parte de Córdoba. ¿Qué es
cosa que no es para hablar fuerte; un hijo desde ese día, sea varón lo que más puedo recordar?
es una cosa tabú para hablar en voz o mujer, ya nacía libre. Entonces Bueno, recuerdo que se
baja. cuando escuche todo eso fue más decidió que era una organización
Estando ya en el que una participación activa. horizontal, en la cual convergíamos
Encuentro de las Mujeres me Recorrí varios talleres. A partir de diferentes ideologías políticas. Más
habían invitado a participar en entonces, me fui dando cuenta que que ideológico, porque en general
la organización del Encuentro había que seguir profundizando el casi todas nos considerábamos
Feminista Latinoamericano y tema e hice una hermosa relación feministas, diría de diferentes
del Caribe de San Bernardo que con Dora, que también era igual pensamientos políticos. Yo había
se haría en Noviembre de 1990. que yo: abogada laboralista. sido secretaria de las mujeres
Encuentros feministas que venían Comencé acompañándola en las en Frente Grande, pero ya no
de Bogotá desde el año ´81 y se actividades que eran sobre esa estaba en ese momento. Había
hacían cada tres años. Yo no había temática, incluidos talleres en los desaparecido Frente Grande
ido a ningún encuentro feminista Encuentros (Dora iba a casi todos prácticamente. Existían diferencias
latinoamericano todavía. No los Encuentros). En el año ´99 políticas entre nosotras, pero
estaba en condiciones de tomar la acompañé y participamos en nos unía fundamentalmente el
una responsabilidad de esas y tal un Congreso de la CTA en Mar objetivo común. Considerábamos
vez tampoco era tan desarrollado del Plata, cuando reformaron el que había que realizar una
mi feminismo como para hacerlo. estatuto, para que se pusiera la estrategia para conseguir una ley
No lo sé. Iba en camino. Y cuando despenalización del aborto: lo que despenalizara y legalizara el
fui al Encuentro Feminista en logramos. O sea que ya participaba aborto.
San Bernardo nosotras pagamos activamente, estuve y no deje de Fui como vulgarmente se
el hotel, pagamos la comida estar en todo lo que se fue formando dice cofundadora con ese conjunto
y tratábamos de comer en en esa lucha. Hasta fui cofundadora de compañeras. No puedo decir
comedores comunitarios, en de la Campaña Nacional por el qué cantidad éramos totalmente
sindicatos. Hacíamos cola para Derecho al Aborto Legal, Seguro y pero ocupábamos casi todo el hotel.
entrar. Entonces estando en la cola Gratuito, en el 2005. En el 2003, en La actividad que ya veníamos
un día se acerca Dora Coledesky el Encuentro de Rosario hicimos desarrollando era, por ejemplo,
–no sabía cómo se llamaba ella una gran asamblea por el derecho en los Encuentros, desde 2013 en
en ese momento– y me pide la al aborto en la que empezamos a Rosario, entregar pañuelos verdes.
firma, porque era de la Comisión profundizar. Fue la primera vez que En aquel entonces, conseguíamos
por el Derecho al Aborto. No se repartieron los pañuelos y luego dinero para comprarlos y podíamos
había todavía una cosa específica hicimos una gran marcha donde regalarlos. Me acuerdo de correr
de taller de aborto. Todavía en ese nos identificamos con la cuestión de un lado a otro, sobre todo en
Encuentro Feminista se veía con del aborto. Dos años después ya las aperturas de los Encuentros,
salud. Se hablaba, pero todavía no en Mayo del 2005, en Córdoba repartiendo pañuelos verdes todo
era tan específico. Cuando Dora me conformamos la Campaña. el tiempo. Por consenso fuimos
pidió la firma me asusté y le dije: nombrando a las compañeras
“¡no, cómo! ¿Qué derecho? No, yo En relación con el surgimiento que serían “articulantes”, porque
no firmo”. Me dijo: “Bueno, si no de la Campaña en el 2005 ¿tiene coordinación sonaba a dirección
querés firmar, no firmás”. Pero me algún recuerdo significativo de y lo que nosotras más queríamos
dejó la pelota picando y participé ese momento? ¿cómo recuerda mantener era la palabra de
en ese encuentro y veo que trataron ese momento fundacional? todas las participantes. Esto
en salud la cuestión del derecho no es una organización o una
al aborto e instituyeron ahí el 28 Sí, fue en Córdoba. ONG. No era una cuestión que
de septiembre como el Día de Lo que puedo recordar es que pudiéramos ponerle presidenta ni
Lucha por el Derecho al Aborto habían conseguido subsidios para vicepresidenta. Nunca lo hicimos,
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nunca nos inscribimos como una marcha impresionante del 28 La mayoría de la gente decía que
ONG. Es un movimiento en sí de Septiembre pasado. Fuimos no, que con este gobierno no se iba
mismo, un movimiento amplio. nombradas punto focal y global a poder tratar. Sin embargo dije:
para América Latina para la en Francia en el año 1975 salió
Con esto que dice, ¿qué piensa cuestión del aborto; vinieron con un gobierno de derecha; pero
que sucedió desde la primera vez compañeras de todo el país, fue con la diferencia que la que era
que se presentó proyecto de ley impresionante lo que hicimos. No ministra de salud había estado en
hasta hoy? pudo dejar de ser ignorada por la el holocausto y estaba apoyándolo
prensa y no había un político que ampliamente. Pero acá también lo
En 2006 comenzamos no lo supiera, de ningún partido apoyó el Ministro de Salud, para
a elaborarlo. Lo presentamos de ninguna rama. Porque en el mí sigue siendo Ministro de Salud,
primero en 2007. Congreso tuvimos posibilidades todavía no sabemos si se puede
de tener una comisión con revertir o no esa situación.
Desde el 2007 hasta hoy ¿por dictamen favorable, de hecho La cuestión es que esto fue
qué piensa que se pudo tratar? prácticamente dos o tres veces fue un boom y de hecho nosotras cada
¿qué piensa que posibilitó que el así y vinieron cuestiones de arriba vez crecíamos más en los sectores
proyecto fuera tratado? que dijeron: “No”. El gobierno estudiantiles, en los territorios,
anterior no quería, muchas de sus en los barrios, sectores no sólo
Bueno, primero nosotras integrantes sí, pero la autoridad universitarios sino secundarios
presentamos como sociedad civil, máxima decía: “No y no”. No lo también. Es un tema que se instaló
sin firma de ningún diputado ni visualizaba y creo que hasta el día en todas las casas y en todo lugar,
partido político, para que nadie de hoy no lo visualiza, más allá de no se pudo ignorar, se acabó el tabú
se apropiara; pero nadie se animó su voto. Si observamos su discurso y en la Argentina eso ya no tiene
a tomarlo y cayó. En el 2008, lo es un poco así, no es un tema que regreso, ya no hay retorno. ¿Pero
presentamos ya con 22 firmas de haya profundizado mucho. ahora qué pasó? No nos olvidemos
diputados de diferentes partidos Bueno, la cuestión es que los sectores más empecinados
políticos y después cada dos años cuál fue la intención, por parte anti derechos o fundamentalistas,
perdía estado parlamentario y lo de este gobierno, para llevarlo al como le decimos nosotras, son
volvíamos a presentar, cada vez discutir. Primero, creo que es un fatales, son terribles. Tienen
con más cantidad de firmas. Una tema que los liberales también una actitud agresiva total. Ayer
de las comisiones que tenemos en lo tienen; no nos olvidemos que estuve en la Cámara de Diputados
la Campaña es la de “cabildeo”, así el partido radical integra ese cuando se trató la reforma de la
le decimos nosotras. Vulgarmente espacio político de Cambiemos y Ley de Educación Sexual Integral.
se le dice lobby. Fuimos a uno y a los radicales en general –como la Porque a raíz de la forma en que
otro diputado y diputada y fuimos reforma universitaria– también había salido, por los consensos
avanzando. De hecho, creo que tienen como en todos los países del que hubo, no la aplicaron en casi
la Campaña empezó hace varios mundo una cuestión que tiene que todas las provincias. Entonces
años atrás y ya se visualizaba. De ver con el feminismo más liberal. ayer buscaron formas de hacer
algún modo, en la magnitud de los Feminismo liberal que existe en un dictamen para que sea orden
Encuentros de Mujeres en Rosario el mundo y tiene el aborto legal. público, obligatoria. Los mismos
hace dos años fueron setenta mil Somos uno de los pocos países que rechazaron la ley del aborto,
mujeres, en Chaco cuarenta mil, que no lo tienen. Ahora, ¿por qué los que decían: “No, no, no, al
una inmensidad para esa provincia. decidieron largarlo? La verdad aborto no. Primero anticoncepción
En las marchas, cada vez más, la que no tenemos la posta, ¿fue o primero educación sexual”.
demanda principal fue el derecho para tapar algunas cuestiones de Pero ayer mostraron la hilacha
al aborto. Hace tres años sale Ni problemática económica? No sé, porque hasta gritaban diciendo:
Una Menos. Con ese movimiento no sé si es eso porque nunca se “Los padres somos los únicos que
nosotras también adelante porque nos ha cruzado eso. ¿Creyeron tenemos el derecho de formar,
consideramos que el aborto que mientras tanto la gente estaba los hijos son nuestros, somos los
clandestino es una posibilidad entretenida en algo? No lo sé, únicos que podemos informar
de muerte, es una violencia. Por sería decir una cosa por otra. El sobre sexualidad”. “El Estado no
lo tanto queremos Ni Una Menos hecho real es que posiblemente tiene nada que hacer”. Para ellos
muerta por aborto clandestino. nosotras veníamos poniéndolo de los hijos son “objetos” propios y
Nosotras salíamos en la nuevo y con muchísimas firmas. no sujetos de derechos.
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Eso mostró hasta dónde hay social, en la organización cultural compañeras pero no me pensaba
sectores todavía muy gravemente patriarcal. Estamos cuestionando ir hasta no saber qué pasaba ahí.
enfrentados dentro de la sociedad. hasta la forma de la economía. Pasó una cuestión curiosa, cuando
Creemos que la reforma va a salir Desde el feminismo estamos la ex Presidenta Argentina dio su
y va a ser un triunfo porque se va a metiendo el dedo en la llaga locución hubo un silencio total
posibilitar la educación sexual que de un sistema social, político y de todos para escucharla, terminó
es una de las consignas principales. económico. Entonces frente a eso – cuando dijo: “dentro de quince
La primer consigna nuestra: ya lo decíamos en los ´70– la lucha años mis nietas van a tener 17 u
“Educación sexual para decidir”, y es larga, no va a ser corta. Ayer, 18 años y yo voy a tener 80 porque
“Anticonceptivos para no abortar. por ejemplo, vi una cosa que me tengo 65 y la ley va a estar”. La
Aborto legal para no morir”. Ahí llamó la atención: estaba sentada gente agacho la cabeza y el 80%
vamos a entrar de nuevo a ver qué con Martha Rosenberg y nos se fue en silencio sin ningún
pasa, porque seguiremos adelante. mirábamos porque nos dijeron que comentario. Yo me desesperaba,
No sé si el año que viene porque es no podíamos hablar en la reunión porque se desmovilizaron. Pero
un año electoral pero lo volveremos de la Comisión de Educación, y los bueno, ya lo vamos a lograr y lo
a presentar. anti derechos gritaban. Nosotras vamos a revertir.
Porque no se sabe cuándo. hablábamos entre nosotras, pero
En Argentina la política cada año muy poco. Éramos respetuosas de ¿Cómo describiría el momento
nos da sorpresas, pero sabemos todas las normas que nos daban y actual en el que se encuentra el
que no hay retorno y lo vamos a nunca fuimos tan respetuosas, pero movimiento de mujeres?
obtener independientemente de ahí sí lo éramos porque sabíamos
todo lo que piensen los sectores tan que nos estábamos jugando Creo que en este momento
fundamentalistas, mafiosos diría, mucho y no vamos a entrar en la el movimiento de mujeres es el
por la forma en la que actúan y por provocación. No hubo ningún fruto de los Encuentros, las redes
los gritos de ayer. incidente cuando en Senadores no que han conformado allí. Es una
salió. atracción para América Latina y
¿Cuando gritan por algo es no? Eso sí, cuando en senadores un referente del mundo. Además
no salió yo estaba empapada. El es un movimiento de mujeres,
Ya lo decía Cervantes, día era espantoso, frío, lluvia, no se dice feminista pero lo
“Ladran Sancho, señal de que llevaba un paraguas que se dio que hace es feminismo, aunque
avanzamos”. vuelta, se rompió entero y me no lo sepan sus protagonistas:
empapé. En ese momento había todas las que participan en los
¿Qué sintió cuando salió la un médico compañero. Quería ir Encuentros de Mujeres y en los
media sanción? al Hotel Castelar, donde estaban movimientos de mujeres. Porque
la mayoría de las compañeras, lo que está haciendo, la lucha por
Cuando salió la media pero él me dijo: “No, no llegas los derechos de las mujeres, eso es
sanción en diputados, tenía mis hasta allá, te estás empapando, feminismo. No me vengan con las
dudas. Hay una foto y unos no podes. Te llevo a ‘La Paz’, en agrupaciones y grandes libros, eso
videos en los que se ve que las Montevideo y Corrientes”. Era es feminismo también. Y creo que
compañeras que estaban al lado un bar de venta de cerveza; me cada vez están profundizando más,
mío empezaron a gritar y a gritar llevó ahí y habían puesto una porque lo están exigiendo. Ahora
en serio. Yo seguía seria, quería pantalla gigante, estaba repleto, cuando me invitan a una charla no
mirar bien. “¿No estaremos gente sentada en el suelo. Yo no quieren saber la anécdota de lo que
equivocadas? ¿Qué estamos sé, eran cuatrocientas personas. pasó tal día o qué dice el proyecto
gritando?”. Tenía mis leves dudas Me reconocieron y me entraron a de ley, quieren saber cómo, por
y el margen era tan chiquito que la aplaudir. Me tocó hablar y hay un qué, de dónde viene, cómo es, qué
verdad que fue una gran alegría, video ahí que juego con mi bastón. hace, qué es el feminismo. Es una
una gran emoción. Pero después Me pongo a escuchar lo que estaba profundización permanente que
dije: “ya, va a senadores”. Y ahí sucediendo en el Senado, no me fui nos obliga a nosotras a profundizar
ya tuve muchísimas dudas. Tal ni nada por el estilo. No pensaba y obliga a que las compañeras
vez viene de los años ´70 ¿no? irme de ninguna manera hasta no estemos profundizando todas
Lo relaciono porque estamos, de tener el resultado, como lo hice conjuntamente.
alguna manera, tocando una cosa con diputados. Había tomado una Además, como dije en un
fundamental en la organización habitación en el Bauen con otras video, a mí me pasa una cosa insólita
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que nunca creí que me llegara a yo, tenés que cederme el asiento”;
pasar. Sé que tengo varios años, sé se levantó con muy mal humor.
que mis años son muchos, años de Pero lo insólito fue que un hombre
experiencia y militancia, y las veo como de cincuenta años se corrió
a ustedes más jóvenes y estamos para impedir que me sentara. Ahí
en la misma, en igualdad. Porque tuve que volver a imponerme para
nuestra lucha nos iguala entonces conseguir el asiento. Obviamente
no hay una diferenciación. Y ese lo conseguí, me quedé sentada y
es el movimiento de mujeres en la a las pocas estaciones estaba tan
Argentina, eso son los talleres, eso lleno que tenía miedo de no llegar
es feminismo. bien a la puerta para poder bajar.
Entonces me paré un poquito antes
¿Qué le gustaría transmitirles y una chica joven, como de treinta
a las mujeres que seguimos su años me dice: “gracias por luchar
ejemplo de lucha y perseverancia tanto por nosotras”. Me doy vuelta
para defender nuestros y le digo: “¿me conoces?”. Y me
derechos? dijo: “¿cómo no la voy a conocer?
Y agregó: “escuché sus peleas por
Cuando me dicen el asiento, me iba a meter pero
“ejemplo”, me pregunto ¿qué decidí no hacerlo porque yo sabía
quiere decir ejemplo? Me lo que usted lo iba a conseguir”. Es
interrogo, no me considero. Por que es eso. Estamos haciendo
ejemplo, cuando me dicen: “vos eso, estamos luchando juntas. Es
sos un ejemplo, gracias por tu simple.
lucha”, digo: “ejemplo no, si
estamos luchando juntas, ¿qué
ejemplo?”. Ejemplo no sé, es algo
que me deja sin palabras y no sé * Nina Brugo es abogada
cómo responder. Hay una anécdota laboralista. Militante histórica
que les voy a contar. Esto fue por los derechos de las mujeres.
dentro de los martes verdes que Cofundadora de la Campaña
hacíamos. Iba para el Congreso un Nacional por el Derecho al Aborto
martes verde en el subterráneo y Legal, Seguro y Gratuito.
resulta que llegaba tarde a un lugar
que tenía que ir antes. La cuestión
es que hice combinación en el
subterráneo y como no andaban los
ascensores o escaleras mecánicas
corrí, llegué un poco agitada a la
última de las combinaciones que
hice para dos o tres estaciones,
nada más. Generalmente no me
siento por dos o tres estaciones. Si
me dan el asiento, les digo que no
porque ya me bajo; pero esa vez
sí lo necesitaba. Entonces elegí
el lugar donde dice “reservado”
y estaba con el bastón; un chico
estaba sentado en ese lugar, de unos
quince años más o menos. Le digo:
“este es mi espacio”. Y me miró
y ni bolilla me dio. Entonces me
puse fuerte y le digo: “este lugar
está reservado para personas como
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