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FACULTAD DE INGENIERÍA GEOGRÁFICA, AMBIENTAL Y ECOTURISMO

29-08-2015

TOXICOLOGIA

UNFV
EL DESASTRE DE BHOPAL
En la india, exactamente en la ciudad de Bhopal durante la madrugada del 2 al 3 de
Diciembre de 1984, ocurrió el peor desastre químico de la historia. En la fábrica de
pesticidas propiedad de la empresa Unión Carbide se produjo una fuga de isocianato de
Metilo (MIC) de uno de sus tanques de almacenamiento. Este accidente, producto de una
cadena de fallos, mostró una escasez de mecanismos de seguridad en la planta, que junto
al factor humano dejó un saldo de decenas de miles de muertos, que al día de hoy sigue
sin saberse una cifra exacta; además de medio millón de heridos.
La planta de Bhopal se construyó para abastecer a la creciente actividad agrícola en los
años sesenta, con el objetivo de aumentar el rendimiento de la producción agrícola con el
empleo de plaguicidas. La fábrica se dedicaba a la producción de SEVIN que fue creado en
1957, un pesticida que se presentaba como la solución a los problemas presentados por su
antecesor: DDT (Dicloro Difenil Tricoloetano) un compuesto de elevada toxicidad tanto por
ingestión como por contacto. El SEVIN, además de inocuo en humanos y medio ambiente,
presentaba unos bajos costes de producción y era altamente eficaz contra las plagas más
comunes; pero tenía una importante desventaja: en su proceso de fabricación se
empleaban sustancias muy tóxicas incluso más que el DDT, como lo son el fosgeno o el
isocianato de metilo.
En 1982, un período de sequía arruinó las cosechas de numerosos campesinos, que
dejaron de comprar SEVIN provocando que la fábrica de Bhopal perdiera más de la mitad
de su producción. Empezó así un plan de reducción de costes que se inició con la despedida
de numerosos empleados, en su gran mayoría técnicos y obreros especializados.
Posteriormente se redujeron los costes de mantenimiento, reduciendo la calidad de los
elementos de nueva compra e intentando aprovechar al máximo el tiempo de utilización de
los existentes, en claro detrimento de la seguridad de la planta. La última decisión tomada
por la dirección viene en el año 1983, en la que se acuerda que la fábrica permanecería
parada y solamente se pondría en funcionamiento cuando existiera demanda.
Era la tarde del 2 de diciembre de 1984, había poco trabajo porque la fábrica estaba parada
desde octubre, por pocas ventas. La Unión Carbide tenía planeado desarmarla y trasladarla
a Brasil, simultáneamente operarios reciben la orden de lavar una tubería, para evitar que
metales desprendidos por la corrosión entren en la cisterna y contaminen el MIC,
desencadenando una peligrosa reacción. Estos al estar mal capacitados para esta labor,
ignoraron que debían colocar discos metálicos para evitar que el agua de lavado entre en
la cisterna (dado que el MIC reacciona con el agua); mientras hacían su trabajo se inyectó
agua al sistema, pero esta no salía por uno de los cuatro surtidores de purgado debido a
que estaba muy corroído y esto lo obstruía los operarios los dejaron correr el agua 4 horas
esperando que el cuarto surtidor logre destaparse.
Y es aquí cuando ocurre el desastre; entra agua en la cisterna 610 con 42 Toneladas de
MIC. Cerca de la medianoche el operador de la sala de control avisa que la presión de la
cisterna es demasiado alta, a su vez, desconoce cuál es su temperatura porque el circuito
de medición estaba roto. Al notar esto el supervisor le restó importancia y lo adjudicó a que
el instrumento andaba mal. Un operario insiste por un el olor que emanaban los tanques de
almacenamiento, así que dos de ellos van a revisar la cisterna y ven un escape de gas. El
supervisor reacciona y teme que la contaminación pase a la otra cisterna con 20 Toneladas
de MIC, por lo tanto cierran la válvula sin advertir, pero esto resulto ser peor porque aumento
la presión hasta que finalmente se rompió el sarcófago y salto la cisterna, dando lugar a un
geiser mayor, y en este punto ya no quedaba nada que hacer.
El MIC al reaccionar con agua e impurezas arrastradas, se descompuso en varios gases
tóxicos. La gente había escuchado la alarma, pero como después cesó, no le dio
importancia. Una nube tóxica más pesada que el aire se arrastró por los alrededores de la
fábrica, empujada por el viento sobrevoló cerca de 40 km, alcanzando la ciudad de Bhopal
y a las familias cercanas a la fábrica, dejando sin vida todo lo que tocaba a su paso, tomando
como primeras víctimas a niños, ancianos y personas invalidas además de importantes
secuelas que todavía permanecen en la población.
Para comprender mejor la gravedad del desastre se debe conocer la toxicología del
isocianato de metilo, el cual es líquido incoloro con olor fuerte y sofocante que causa
lagrimeo, no es detectable a bajas concentraciones pero aparecen signos irritativos. Su
efecto por inhalación irrita las fosas nasales, faringe y bronquios, pudiendo llegar a provocar
síntomas pulmonares graves, dolor al tragar, sensación de falta de aire, edema de laringe,
fatiga, abundante secreción bronquial y dolor de pecho. En contacto irrita la piel y mucosas,
produce conjuntivitis con lagrimeo abundante y posibilidad de úlceras corneales graves. La
irritación de la piel cursará con enrojecimiento, hinchazón, y quemaduras ocasionalmente.
Por ingestión irrita toda la vía digestiva con dolor al tragar, irritación de boca y garganta,
abundante secreción de saliva, náuseas, vómitos espontáneos, dolor abdominal y posible
diarrea. Puede causar hemorragias digestivas y bajadas de la tensión. Una vez absorbido
el producto deprime y/o excita el sistema nervioso llegando a dar convulsiones. Puede llegar
a producir fallecimientos.
Una de las causas de este desastre fue que las ventas de Union Carbide decayeron a
finales de los 60, cuando una sequía arruino las cosechas. La empresa matriz se vio
obligada a reducir los costes de la fábrica de Bhopal y se diseñó un plan de viabilidad:
Más de la mitad de los empleados son despedidos y en mayor proporción los técnicos y
obreros especializados, con contratos más elevados.
Sus funciones son asignadas a obreros no especializados y con poco o ningún
conocimiento de química y seguridad. Se reducen costos de mantenimiento de las
instalaciones recortando el presupuesto para la compra de material. Por último se toma la
decisión de parar la planta.
Murieron los primeros días entre 15.000 y 30.000 personas, nunca se sabrá el número
exacto. Muchos no fueron reclamados por nadie porque murieron familias enteras. Además
hubo más de 520.000 heridos confirmados. Se estima que 6.000 a 8.000 personas murieron
en la primera semana tras el escape tóxico y al menos otras 12.000 fallecieron
posteriormente como consecuencia directa de la catástrofe, que afectó a más de 600.000
personas, 150.000 de las cuales sufrieron graves secuelas. Las secuelas en los
sobrevivientes fueron: serios problemas respiratorios y oculares, ceguera, problemas
reproductivos, retardo de crecimiento, problemas neurológicos y psiquiátricos.
Dentro de los efectos medioambientales, animales domésticos de todo tipo perecieron en
la catástrofe: caballos, perros, gatos, vacas, búfalos, aves, etc., que convivían en los
mismos espacios que el ser humano, por lo que centenares de cadáveres de estas especies
quedaron esparcidos por las calles de Bhopal. Horas y días más tarde, sus cuerpos se
descomponían a la intemperie, lo que suponía un doble riesgo para la población
superviviente: la posible aparición de una epidemia de cólera y el consumo de carne animal
infectada.
El medio ambiente también recibió un severo impacto. Según Greenpeace, en 1999 siguen
contaminadas las aguas de los pozos y la tierra por metales pesados, sin embargo, 5.000
familias siguen bebiendo agua contaminada sin ningún tipo de control o prohibición. La
presencia de sustancias tóxicas es 682 veces mayor que la dosis máxima aceptable. Dada
la situación, las autoridades indias distribuyen periódicamente agua potable a la población,
pero no en cantidad suficiente como para evitar el consumo indiscriminado de los pozos
contaminados.

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