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SUBDIRECCIÓN DE AMENAZAS GEOAMBIENTALES

EVALUACIÓN DE EFECTOS POTENCIALES (SENSIBILIDAD


GEOAMBIENTAL) POR APROVECHAMIENTO DE
RECURSOS DEL SUBSUELO
PLANCHA 5-09
INFORME FINAL

Bogotá , D.C., Colombia, diciembre de 2002


República de Colombia
MINISTERIO DE MINAS Y ENERGÍA
INSTITUTO DE INVESTIGACION E INFORMACION GEOCIENTIFICA,
MINERO – AMBIENTAL Y NUCLEAR – INGEOMINAS
TABLA DE CONTENIDO
Pag

CAPÍTULO 1 1
INTRODUCCIÓN 1
1.1 ANTECEDENTES POLÍTICO – ADMINISTRATIVOS 1
1.2 ANTECEDENTES TÉCNICOS 3
1.3 ESTUDIOS SIMILARES PRECEDENTES 6
1.3.1 Estudio de restricciones y posibilidades ambientales para los proyectos de
transmisión de ISA. 6
1.3.1.1 Metodología general 8
1.3.1.2 Metodología por dimensiones 9
1.3.2 Potencialidades y restricciones técnicas, económicas y ambientales para
el desarrollo minero- energético del país. UPME 11
1.3.2.1 Objeto y alcance de la herramienta 11
1.3.2.2 Diseño conceptual de la herramienta 11
1.3.2.3 Línea base 11
1.3.2.4 Sector minero 12
1.4 OBJETIVOS 13
1.5 ALCANCES 13

CAPÍTULO 2 15
MARCO CONCEPTUAL PARA EL ANÁLISIS DE EFECTOS POTENCIALES
(SENSIBILIDAD GEOAMBIENTAL) 15
2.1 EVALUACIÓN DE EFECTOS POTENCIALES Y EVALUACIÓN DEL RIESGO 15

CAPÍTULO 3 20
PROPUESTA METODOLÓGICA PARA EVALUACIÓN DE EFECTOS
POTENCIALES (SENSIBILIDAD GEOAMBIENTAL) 20
3.1 DETERMINACIÓN DE LA ACTIVIDAD ANTRÓPICA Y LAS
SUBACTIVIDADES GENERADORAS DE AFECTACIÓN 20
3.2 DETERMINACIÓN DE LOS EFECTOS Y EL POTENCIAL DE AFECTACIÓN 21
3.3 DETERMINACIÓN DE LA SUSCEPTIBILIDAD DEL MEDIO 26
3.4 ESTRUCTURACIÓN DE LA MATRIZ DE DECISIÓN 26
3.5 ANÁLISIS ESPACIAL DE LOS EFECTOS POTENCIALES 27

CAPÍTULO 4 28
DETERMINACIÓN DE LA ACTIVIDAD ANTRÓPICA Y LAS
SUBACTIVIDADES GENERADORAS DE AFECTACIÓN CASO – ACTIVIDAD
MINERA POTENCIAL EN LA PLANCHA 5-09 28
4.1 DEFINICIÓN DE LA ACTIVIDAD 28
4.2 FASES DE DESARROLLO DE LA ACTIVIDAD MINERA 29
4.2.1 Prospección y exploración 29
4.2.2 Explotación y beneficio del mineral 31
4.2.3 Procesamiento de minerales 31
4.2.4 Manejo y disposición de desechos y cierre de minas 31
4.3 TÉCNICAS DE EXPLOTACIÓN DE MINERALES 32
4.3.1 Minería a cielo abierto 32
4.3.2 Minería subterránea 33
4.3.3 Minería aluvial 35
4.3.4 Minería de disolución (solution mining) 36
4.3.5 Minería marina 37
4.4 EVALUACIÓN DEL POTENCIAL MINERAL EN LA PLANCHA 5-09 37
4.5 CARACTERIZACION DE LAS AREAS MINERAS POTENCIALES 38
4.5.1 Metales preciosos y metales básicos 38
4.5.2 Minerales preciosos (esmeraldas) 38
4.5.3 Minerales energéticos (carbón) 40
4.5.4 Minerales industriales 41
4.5.4.1 Sal (NaCl) 41
4.5.4.2 Yeso (CaSO4) 41
4.5.4.3 Fosfatos (P2O5) 41
4.5.4.4 Feldespatos (Fd) 41
4.5.4.5 Caolín (CA) 41
4.5.4.6 Talco 42
4.5.4.7 Arenas silíceas, chert, cuarcitas 42
4.5.4.8 Fluorita y barita 42
4.5.5 Grupo VII: Materiales de construcción 43
4.5.5.1 Arcillas (OH) y agregados pétreos (AP) (recebos, triturados y gravas) 43
4.5.5.2 Calizas (CaCO3) 43
4.6 IDENTIFICACIÓN Y DESCRIPCIÓN DE LAS SUBACTIVIDADES POTENCIALMENTE
GENERADORAS DE AFECTACIÓN 44
4.6.1 Descapote 45
4.6.2 Voladura 46
4.6.3 Arranque 46
4.6.4 Banqueo 46
4.6.5 Excavación subterránea 47
4.6.6 Beneficio y procesamiento de minerales 47
4.6.7 Disposición de estériles, colas y escorias 48
4.6.8 Descarga de efluentes 50

CAPÍTULO 5 51
DETERMINACIÓN DE LOS EFECTOS Y LOS NIVELES DE AFECTACIÓN 51

CAPÍTULO 6 54
ANÁLISIS DE LA SUSCEPTIBILIDAD DEL MEDIO 54
6.1 SUSCEPTIBILIDAD A LA EROSIÓN 54
6.1.1 Metodología 55
6.1.2 Aplicación de la metodología en la Plancha 5-09 55
6.1.2.1 Pendientes 55
6.1.2.1.1 Inclinación de las pendientes 56
6.1.2.1.2 Forma de las pendientes 57
6.1.2.2 Unidades de roca 57
6.1.2.3 Precipitación 58
6.1.2.4 Cobertura y uso del suelo 59
6.1.3 Mapa de susceptibilidad a la erosión 60
6.2 SUSCEPTIBILIDAD A MOVIMIENTOS EN MASA 61
6.2.1 Metodología 61
6.2.1.1 Unidades de roca 61
6.2.1.2 Geomorfología 62
6.2.1.3 Distancia a fallas (tectónica) 66
6.2.1.4 Relieve interno 66
6.3 SUSCEPTIBILIDAD A LA CONTAMINACIÓN DE LAS AGUAS SUBTERRÁNEAS 67
6.3.1 Metodología 67
6.3.1.1 Parámetro G (Groundwater) 68
6.3.1.2 Parámetro O (Overall) 68
6.3.1.3 Parámetro D (Depth) 68
6.3.1.4 Vulnerabilidad a la contaminación 70
6.3.2 Mapa de vulnerabilidad, Plancha 5-09 70
6.3.2.1 Parámetro Groundwater (G) 70
6.3.2.2 Parámetro Overall (O) 70
6.3.2.3 Parámetro Depth (D) 71
6.3.3 Vulnerabilidad a la contaminación, Plancha 5-09 71

CAPÍTULO 7 73
ESTRUCTURACIÓN DE LA MATRIZ DE DECISIÓN Y ANÁLISIS ESPACIAL
DE EFECTOS POTENCIALES 73

CAPÍTULO 8 75
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES 75

CAPÍTULO 9 77
BIBLIOGRAFÍA 77
CAPÍTULO 1

AMÍLCAR VALENCIA
ANDREA VILLARREAL

INTRODUCCIÓN
En el presente capítulo se expondrán algunas de las razones que hacen necesaria la
existencia de herramientas metodológicas que identifiquen los efectos negativos que
ocasionarán las futuras actividades antrópicas, y en donde la evaluación de efectos
potenciales (sensibilidad geoambiental) que se presenta en este estudio pretende ser un
aporte para la estructuración de dichas herramientas en aras del desarrollo sostenible de
los diferentes sectores económicos y, en particular, el minero-energético.

1.1 ANTECEDENTES POLÍTICO – ADMINISTRATIVOS

Si bien la problemática ambiental no está ceñida a los planes de desarrollo elaborados


cuatrianualmente, esos documentos necesariamente presentan una evaluación de los
principales problemas, los cuales muy seguramente seguirán vigentes por un tiempo
bastante más largo que el de un mandato presidencial, así estos planes lleguen a
cumplirse. Resulta, pues, acertado y oportuno retomar el Plan de Desarrollo anterior y el
vigente como diagnóstico inicial a la problemática ambiental existente en el país.

El pasado Plan de Desarrollo 1998-2002 y denominado “Cambio para Construir la Paz”


estableció como objetivo general de la política ambiental el de “restaurar y conservar
áreas prioritarias en las ecorregiones estratégicas, promoviendo y fomentando el
desarrollo regional y sectorial sostenible, en el contexto de la construcción de la paz. Este
objetivo recoge los tres propósitos específicos de la política, a saber: Conservar y
restaurar áreas prioritarias en las ecorregiones estratégicas, dinamizar el desarrollo
urbano, rural y regional sostenible, y contribuir a la sostenibilidad ambiental de los
sectores.”.

Según lo expresa el mismo documento, “la gran prioridad consiste en garantizar la


internalización de las variables ambientales en la formulación y ejecución de las políticas
públicas sectoriales, regionales y macroeconómicas”.

Dentro de los instrumentos que garantizan la efectividad de esta política, se propone


fortalecer los procesos de ordenamiento y planificación construidos desde lo local,
promoviendo su articulación a los procesos de desarrollo sectorial, regional y nacional,
apoyados en las directrices generales de ordenamiento y zonificación del uso del suelo,
impulsando a su vez la coordinación para que los programas sectoriales sean
ambientalmente sostenibles”.

1
En la propuesta de plan de desarrollo actual “Hacia un Estado Comunitario” se retoma esa
necesidad de hacer los sectores productivos cada vez más sostenibles ambientalmente,
incorporando dentro del programa “Sostenibilidad Ambiental de la Producción Nacional” el
desarrollo de aspectos principales como el de impulsar “la incorporación del componente
ambiental en los procesos de planificación sectorial. Se pondrá un énfasis especial en las
evaluaciones ambientales estratégicas…”; igualmente “se adoptarán nuevas medidas
para reducir los impactos ambientales sectoriales”.

Por todo lo anterior, se puede apreciar cómo desde hace varios años se viene planteando
la necesidad de involucrar en la planificación sectorial, instrumentos que faciliten las
consideraciones ambientales necesarias para orientar decisiones y estrategias de las
actividades productivas que las hagan más armónicas y sostenibles ambientalmente.

De esto se ha llamado mucho la atención desde las entidades de control, tal como se
observa en diferentes comentarios emitidos por la Contraloría General de la República en
sus informes “Estado de los Recursos Naturales y del Ambiente”; por ejemplo, en el
correspondiente a los años 1999-2000 se menciona que “las actividades productivas de
mayor impacto, como son la construcción de infraestructura, la minería y la producción
agropecuaria y sus políticas respectivas no contemplan la dimensión ambiental como uno
de los criterios básicos para la formulación de las mismas. En la mayoría de los casos, los
dos instrumentos principales atendidos son el licenciamiento y el fomento de la
producción limpia, a cargo del Ministerio de Medio Ambiente, y, en consecuencia, los
ministerios y entidades sectoriales no tienen compromisos.”.

Más adelante, en el capítulo Políticas Sectoriales y el Medio Ambiente, en particular la de


Explotación de Minas y Energía, se refiere a que la promoción del uso del gas natural
comprimido y el incentivo en los municipios para la implantación de sistemas de
transporte son propuestas coherentes. “Sin embargo, estas medidas, aunque acertadas,
resultan parciales. Se hace necesario conocer los impactos ambientales actuales y
potenciales de los desarrollos energéticos del país y de las acciones e inversiones
ambientales requeridas para crear las condiciones de sostenibilidad ambiental a nivel
nacional en este sentido, lo que permitirá contar con una visión sistemática del conjunto
sectorial”.

“Se hace necesario avanzar en la realización de una evaluación sistemática de la


situación ambiental frente a la operación energética nacional actual y de las estimaciones
esperadas de las estrategias y programas de expansión en curso para cada subsector,
tratando de establecer las implicaciones económicas, sociales e institucionales de la
degradación ambiental en la toma de decisiones sobre el desarrollo energético futuro de
cada uno de ellos”.

En otro aparte del documento, y con respecto a la agenda interministerial, se reconocen


acciones adelantadas por el sector como los proyectos pilotos de producción más limpia,
las guías ambientales sectoriales y los términos de referencia. Sin embargo “Aunque se
han adelantado estas acciones de carácter ambiental, a partir de la ejecución de la
agenda interministerial entre MinAmbiente y MinMinas, el mismo sector minero energético
reconoce “no haber incorporado de manera sistemática en el ciclo de las decisiones sobre

2
programas, políticas y proyectos de inversión una conceptualización integrada de
prevención de impactos sobre medio ambiente y recursos naturales””.

Por último, en el capítulo 2 - Ciudades y Medio Ambiente - en el numeral E - Impacto


Ambiental de la Actividad Industrial – se comenta que “Se observan importantes avances
en el desarrollo de la Política de Producción más Limpia. Sin embargo, la dinámica y ritmo
de generación de impactos exige en forma simultánea mayor esfuerzo, celeridad y
cobertura por parte de las autoridades ambientales. En este sentido se debían desarrollar
estudios regionales a fin de jerarquizar y priorizar los impactos ambientales generados por
la industria regional y su respectiva disminución y/o mitigación a través del desarrollo e
implementación de sistemas de información conectados bajo diseños que incluyan
criterios y metodologías similares y comparables”.

Como conclusión de todo lo expuesto, en particular con las conclusiones de la


Contraloría, si bien se ha realizado acciones tendientes a compatibilizar la planificación
sectorial con el medio ambiente, aún los logros son muy pobres y dejan suponer un
permanente y continuo deterioro de los recursos por falta de acciones correctivas y
preventivas de los sectores productivos.

1.2 ANTECEDENTES TÉCNICOS

Las nuevas tendencias mundiales con respecto a los estudios ambientales consideran
que para un futuro, el enfoque debe dejar de ser reactivo, y en cierta forma pasivo, frente
a las diferentes actividades antrópicas, para volverse más adaptativo y planificador, en
donde se sopesen las características ambientales y la existencia de los recursos naturales
renovables y no renovables de manera que desde el mismo diseño de la actividad se
considere la capacidad de acogida y la fragilidad del medio y se puedan evitar daños
irremediables o de costosa remediación que muchas veces convierten estos proyectos en
económicamente inviables.

Este tipo de evaluaciones que pretenden ofrecer información de enfoque planificador


sobre la fragilidad del medio frente a futuras actividades antrópicas, se conoce como
Evaluación Ambiental Estratégica y aún no presenta un desarrollo significativo a nivel
mundial en cuanto a metodologías, debido a su complejidad.

Resulta conveniente para ilustración traer párrafos de escritos que sustentan la necesidad
de este tipo de evaluaciones.

BAPTISTE, Luis. Ecología e impacto ambiental. Diplomado en metodologías para la


evaluación del impacto ambiental. Bucaramanga. Julio de 1997.

Anticipar los aspectos no sostenibles del desarrollo, así como las oportunidades y los
problemas para una gestión y un manejo apropiados de las tierras y de los recursos
naturales, es esencial en la realización de acciones y respuestas conducentes a la
aplicación de políticas de desarrollo sostenible a nivel de los países y zonas de vida en
Latinoamérica y el Caribe.

3
En particular, cabe plantearse la pregunta acerca de la factibilidad ecológica y tecnológica
para un desarrollo sostenible a nivel regional, en caso de implementarse los profundos
cambios necesarios en lo político, lo social y lo económico. Para esto se debe tener
información acerca del potencial productivo, las tierras necesarias para satisfacer las
necesidades básicas de la población y las orientaciones productivas de la región.
También se debe conocer cuál puede ser la situación ambiental y de los recursos
naturales en función de escenarios alternativos, con el fin de orientar las políticas de
desarrollo. Por último, el análisis debe aportar información sobre los costos y beneficios
de la aplicación de modelos sostenibles de uso de tierras, con el fin de establecer la
viabilidad económica y las necesidades financieras.

Los análisis basados en los tipos de información referidos permitirán elaborar respuestas
específicas a nivel regional y reforzar acciones a nivel local, en áreas con actividades
prioritarias. Esto con el fin de saber cómo la región puede contribuir a la solución de los
problemas globales, al tiempo que logra satisfacer sus necesidades básicas y de
desarrollo. En este sentido se deben tener algunos indicadores que señalen los resultados
que se podrán obtener a nivel regional y local a raíz de la aplicación de varias acciones de
manejo referentes al uso de las tierras.

RENGIFO, Ómar. Necesidades de investigación ambiental en el sector eléctrico


colombiano. III Simposio internacional sobre política y legislación ambiental.
Medellín. Noviembre de 1997.

Ejemplos de temas para desarrollar en el futuro cercano son: modelos de ocupación del
territorio como respuesta a la presencia de proyectos de desarrollo.

Otra necesidad es el desarrollo de modelos de decisión que permitan la inclusión de


variables de difícil cuantificación, como el impacto ambiental, dentro de contextos
decisorios dominados por consideraciones técnico-económicas, fácilmente expresables
de manera cuantitativa.

También es de especial interés el desarrollo, desde sus primeros pasos conceptuales, de


modelos de evaluación de impactos ambientales que permitan trabajar con información
escasa, incorporar valoración de impactos en el tiempo e incluir consideraciones de
incertidumbre en la información. El desarrollo de este tipo de modelos se ha visto
dificultado por la falta de decisiones de tipo político, tales como la valoración de impactos
ambientales en el tiempo – tasa de descuento ambiental – y la consideración del impacto
ambiental como una variable con una incertidumbre asociada y, por tanto, dable de ser
modelada de manera aleatoria.

El Sistema Nacional Ambiental (SINA) deberá aportar datos importantes para el


ordenamiento ambiental del país, mediante la digitación de las zonas ambientalmente
sensibles, la identificación de los parques nacionales naturales y demás sitios en los
cuales no deberá desarrollarse ningún proyecto, o en los cuales los usuarios deberán
acometer obras especiales de gestión ambiental.

Adicionalmente, identificar las zonas que estén en vía de convertirse en sitios saturados
por requerimientos de recursos o por la cantidad de emisiones y vertimientos, que

4
eventualmente hagan difícil la recuperación de las condiciones ambientales previamente
definidas por las autoridades regionales.

Una aproximación a la propuesta es desarrollar y aplicar una metodología para la


selección de sitios factibles en términos técnicos, económicos y ambientales, para la
ubicación de los proyectos de desarrollo, así como la selección de los corredores para los
proyectos lineales (vías, líneas de transmisión de energía, gasoductos y otras.

Para el proceso de análisis en la delimitación de zonas factibles para la instalación de


grandes proyectos de desarrollo, se propone que los equipos de la consultoría y los
propietarios de los proyectos utilicen tres herramientas que permitan el manejo y el
despliegue de información de forma integrada y confiable. Estas herramientas son:
¨Sistemas de información geográfico, análisis de matriz multiobjetivo y trabajo
interdisciplinario y multidisciplinario”.

Finalmente, las autoridades ambientales que trabajan en el desarrollo de instrumentos y


métodos físicos, biológicos y sociales de detección de impactos ambientales, que
sistematizan la escasa información existente para consulta, tanto de los usuarios como de
sus propios funcionarios y que desarrollan medidas e incentivos de tipo económico, que
lleven a una aplicación no traumática de la legislación ambiental.

CANTER, Larry. Manual de evaluación de impacto ambiental – Técnicas para la


elaboración de estudios de impacto. Mc-Graw-Hill, 1998.

Además de las elaboraciones informáticas, la evaluación de impacto ha abierto nuevas


áreas de investigación aplicada que son demandadas por las necesidades de los propios
estudios de impacto y que podemos dividir en dos grandes grupos: por un lado las que se
refieren a las fases previas al análisis de proyectos, nominalmente la evaluación
ambiental estratégica de planes y programas y, por otra parte, las que se refieren a fases
posteriores de desarrollo de los contenidos de las conclusiones de los estudios de
impacto, es decir, de técnicas sólidas de corrección del impacto.

Cada día es más patente la necesidad de establecer procedimientos de evaluación


ambiental estratégica que permitan evitar o corregir el impacto de las actuaciones que se
plantean en las fases previas de planificación y programación de los proyectos. La
exigencia de realizar una evaluación estratégica (o programática, como se le conoce en la
literatura norteamericana) se viene planteando desde distintos ámbitos.

Barbara W. Murck, Brian J. Skinner, Stephen C. Porter. Environmental Geology John


Wiley & Sons, Inc. 1996

• “GOALS AND DIRECTIONS:

Geology has always been an interdisciplinary science because Earth processes involve
interacting biologic, physical, and chemical processes. Yet we are discovering that the
interactions are more complex and dynamic than we would have believed as recently as a
few decades ago. We now know more about how the chemicals that are essential for life
move from the reservoir in biogeochemical cycles; how the Earth´s climate is intimately

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connected which oceanic and atmospheric circulation and with the distribution of land
masses; how volcanoes contribute to processes as diverse as the evolution of the
atmosphere and the shifting of continents. We also have a more profound appreciation of
the role of humans in geologic change and the need to study the Earth´s biophysical
system as a whole rather than in individual fragments.

In the future we need to refine and deepen this understanding. We need to understand
how to continue to derive practical benefits from Earth resources without jeopardizing their
future availability. We need to distinguish between the effects of human-induced change
and those of natural change and to be able to predict the impacts of both. Above all, in the
years to come we must improve the relevance of scientific knowledge to those who make
decisions concerning land use, resource management and environmental protection.
Scientific understanding must be combined with a commitment to take action on behalf of
the environment.

Como conclusión, y entendiendo que uno de los sectores en donde el gobierno tiene
plasmadas grandes expectativas de generación de empleo y de recursos para el país es
en la exploración y aprovechamiento de nuestros recursos naturales por parte de
inversionistas nacionales y extranjeros, y considerando los análisis realizados en los
párrafos anteriores, se hace necesario generar productos de investigación e información
de enfoque planificador que provean información enfocada hacia la fragilidad y la
capacidad de acogida del medio frente a esos futuros proyectos, de tal forma que los
proyectos puedan ser realizados dentro de lo que puede ser el concepto de Desarrollo
Sostenible.

1.3 ESTUDIOS SIMILARES PRECEDENTES

Para una mejor conceptualización del producto, se realizó una revisión de estudios
precedentes que poseían enfoques similares y que pueden brindar aportes para la
obtención de un mejor producto. Esta revisión arrojó como resultado dos estudios, de los
cuales se presenta a continuación una breve descripción con sus alcances y enfoque.

1.3.1 Estudio de restricciones y posibilidades ambientales para los proyectos de


transmisión de ISA.

El desarrollo de nuevos proyectos de expansión hace preciso contar con criterios


ambientales como instrumento en la toma de decisiones a nivel de planeación. El
proyecto aplica una metodología diseñada para la identificación, el análisis cuantitativo y
cualitativo y el georreferenciamiento con aplicación de un sistema de información
geográfica para los factores de restricción y posibilidad ambiental en los proyectos del
Plan Nacional de Expansión de la Transmisión.

El proyecto propone unas definiciones para unificar la terminología a utilizar. Esta es:

6
• Criticidad ambiental. Grado de dificultad a la que se somete la implantación de un
proyecto, se determina a partir de:
1. La caracterización (o descripción) de los factores ambientales.
2. Los distintos grados de vulnerabilidad propios de los factores ambientales
comprometidos en el área potencial de un proyecto.
3. De la complejidad de la gestión que deba adelantarse.
4. De los costos de gestión ambiental asociados a dicha complejidad.
• Restricción ambiental. Limitación total impuesta para la realización de un proyecto de
transmisión sobre un área geográfica determinada en razón de las características
ambientales.
• Vulnerabilidad ambiental. Carácter o condición ambiental que indica la capacidad de
asimilación y respuesta adaptativa de los sistemas y factores físicobióticos y sociales
frente al cambio, alteración, transformación o ruptura de las condiciones
medioambientales originadas por la implantación de un proyecto.
• Fragilidad ambiental. Carácter o condición ambiental que indica una muy baja o
ninguna capacidad de asimilación y respuesta adaptativa de los sistemas y factores
físicobióticos y sociales frente al cambio, alteración, transformación o ruptura de las
condiciones medioambientales originadas por la implantación de un proyecto, que
lleven incluso al estado de no recuperación del sistema o factor.
• Posibilidad ambiental. Condiciones del medio ambiente propicias para la implantación
de un proyecto que incluya un plan de gestión ambiental. Estas condiciones se derivan
a partir del análisis de las restricciones y criticidades ambientales. El ámbito
georreferenciable de la posibilidad ambiental coincide con el del conjunto de las áreas
de criticidad ambiental.
• Dimensiones analíticas. Son las grandes unidades en que metodológicamente se
divide un fenómeno para ser abordado en su estudio. Para el caso del medio
ambiente, las dimensiones analíticas están constituidas por los subsistemas del medio
natural y social; a partir de ellas se hace posible el análisis de las modificaciones
introducidas por los impactos efectivos o potenciales de un proyecto sobre el medio
ambiente, desde la perspectiva del subsistema y de su interacción con los demás.
• Escenario ambiental. Es la relación compleja del conjunto de factores ambientales en
un corte de tiempo determinado y sobre un espacio dado.
• Escenario cero. Es un escenario ambiental a tiempo presente.
• Variable. Elemento de estudio sujeto a cambio, a partir del cual se puede caracterizar
un componente del medio ambiente.
• Componente. Es todo aquello que de manera integrada forma parte en la
caracterización de una dimensión.

7
1.3.1.1 Metodología general

Se definen cinco dimensiones analíticas: física, biótica, económica, cultural y política.

Los factores de restricción ambiental son los aspectos del ambiente que por sus
características impiden la inserción de un proyecto de transmisión sobre un área
geográfica. Para determinarlos, cada dimensión debe identificar: restricciones de tipo legal
(L), restricciones por amenaza del proyecto al ambiente (A), restricciones por amenaza
del ambiente al proyecto (P), restricciones por complejidad técnica o tecnológica (T), por
excesivos costos (C). Las “zonas de restricción ambiental” son aquellas que por sus
características quedan enmarcadas por uno o más factores de restricción.

Los factores de criticidad ambiental son aquellos aspectos del ambiente que por sus
características dificultan la implantación de un proyecto de transmisión, para
determinarlos cada dimensión debe:
• Identificar condiciones de vulnerabilidad del ambiente propias a cada una de las
variables estudiadas (A).
• Identificar las características del ambiente que no representan amenaza grave para la
vida útil del proyecto (P).
• Identificar las características del ambiente que requieren de cierto grado de
complejidad técnica para la implantación de un proyecto (T).

Los pasos necesarios para establecer los niveles de criticidad ambiental asociados a cada
uno de los factores seleccionados son: a. especificación de las variables; b.
establecimiento del (los) criterio (s) y procedimiento; y c. definición de escalas que
delimitarán los niveles de cada factor; para esto se determina: el comportamiento de los
indicadores seleccionados y el procedimiento específico que la dimensión establezca.

Para determinar las zonas de criticidad ambiental por factor es necesario:


• En caso de factores simples (cuya criticidad se construye a partir de una sola variable)
ingresar al SIG, la información de la variable y los valores de criticidad.
• En caso de factores compuestos (cuya criticidad se construye a partir de dos o más
variables) ingresar al SIG la información de estas variables, de valores de criticidad y
de los valores de la escala por factor.

Para delimitar las zonas de criticidad ambiental por componente es necesario:


• Introducir al SIG la información pertinente a las escalas de criticidad para cada factor
de un mismo componente.
• Asignar a cada factor un valor de ponderación o realizar sumatoria.
• Aplicar método de superposición de superficies y “álgebra” de mapas del SIG.

8
Para delimitar zonas de criticidad ambiental por dimensión es necesario: asignar un valor
de ponderación a cada componente o realizar sumatoria y establecer criterios para tal
efecto.

Para delimitar zonas de criticidad ambiental general se cruzarán los resultados de la


caracterización ambiental por dimensiones. Para ello es indispensable: establecer criterios
para ponderar entre sí las cinco dimensiones analíticas, ponderar las dimensiones entre
sí, introducir esta información al SIG, ejecutar el modelo y obtener resultados.

1.3.1.2 Metodología por dimensiones

1. Dimensión Física. Se definieron tres componentes y seis variables.


• Componente geosférico. Variables: geología, geomorfología, geotecnia.
• Componente hidrológico. Variables: corrientes, cuerpos de agua.
• Componente climático. Variables: amenaza por descargas eléctricas atmosféricas.

Factores de restricción de la dimensión física: amenaza volcánica alta por flujos de lava,
explosiones dirigidas y nubes ardientes, glaciares, zonas altamente degradadas,
topografía escarpada, cuerpos de agua de dimensiones grandes.

Factores de criticidad de la dimensión física: amenaza volcánica alta por lahares,


amenaza por movimientos en masa y erosión, amenaza por inundación prolongada, alta
dinámica fluvial, régimen de las corrientes y amenaza por descargas eléctricas
atmosféricas, entre otros.

2. Dimensión Biótica. Dos consideraciones básicas orientan el análisis, las


evaluaciones y las decisiones de esta dimensión: el cumplimiento de la ley ambiental y
el interés por la prevención del deterioro y la conservación del ambiente y
Biodiversidad.
• Componente: ecosistemas.

Factores de restricción dimensión biótica: áreas protegidas, ecosistemas frágiles


contemplados en la ley sin normatividad vigente (páramos, humedales), ecosistemas
frágiles no contemplados en la ley (bosques primarios, enclaves xerofíticos: porciones de
ecosistemas terrestres con condiciones ambientales extremas, bosques de niebla).

Factores de criticidad dimensión biótica: ecosistemas contemplados en la ley, con


reglamentación vigente que permite la implantación de proyectos de infraestructura. Son
áreas que por su valor o su interés ambiental son reglamentadas y protegidas para
garantizar su conservación y su desarrollo sostenible; ecosistema vulnerables
contemplados en la ley, sin reglamentación vigente; ecosistemas vulnerables no
contemplados en la ley.

3. Dimensión Económica.
• Componente: estructura productiva. Variables: tamaño de predios, usos productivos e
infraestructura.

9
Factores de restricción dimensión económica: infraestructura: proyectos lineales, hidro y
termoeléctricas, aeropuertos, áreas urbanas, industrias dispersas por fuera de centros
urbanos.

Factores de criticidad dimensión económica: fragmentación de unidades productivas –


FRUP-, valor de predios.

4. Dimensión Cultural.
• Componentes: Demográfico, étnico-cultural y de patrimonio cultural.

Factores de restricción dimensión cultural: areas urbanas, áreas suburbanas, bienes de


interés cultural.

Factores de criticidad dimensión cultural: zonas rurales con diversas densidades de


población, grupos humanos con dinámica etnicocultural especial, territorialidades étnicas
y de los grupos de importancia local.

5. Dimensión Política.
• Componentes: Conflicto político y armado, organización y movilización social.

Factores de restricción: no hay

Factores de criticidad : áreas con potencial de sabotaje al proyecto (P), áreas con función
geopolítica para el conflicto (P), intensidad de la violencia (A), áreas de expulsión de la
población desplazada (P), áreas de atracción de la población desplazada (A).

Dimensión Componente Variable


Física Geosférico Geología
Geomorfología
Geotecnia
Corriente
Hidrológico Cuerpos de agua
Descargas eléctricas y atmosféricas
Climático
Biótica Ecosistemas Estado de protección jurídica
Capacidad de respuesta adaptativa
Económica Estructura productiva Tamaño de predios
Usos productivos suelo
Infraestructura
Cultural Demográfico Densidad de población
Étnicocultural Grupos étnicos
Grupos de importancia local
Patrimonio Histórico-Cultural Áreas patrimonio histórico y cultural
Tipos de paisaje
Política Conflicto armado Atentados a infraestructura productiva y de
comunicaciones
Violencia
Territorialidad
Organización y movilización social Capacidad de concertación de las comunidades
Presión a instituciones y potencial de movimiento
social.

Tabla1.1 Cuadro síntesis de componentes y variables seleccionadas.

10
1.3.2 Potencialidades y restricciones técnicas, económicas y ambientales para el
desarrollo minero- energético del país. UPME

1.3.2.1 Objeto y alcance de la herramienta

Establecer los condicionantes técnicos, económicos y ambientales para el desarrollo


minero energético del país, con el objeto de diseñar y elaborar a partir de ellos una
herramienta de planificación para el análisis de zonas potenciales de desarrollo de
actividades minero energéticas.

1.3.2.2 Diseño conceptual de la herramienta

Componentes de la herramienta:
• Manejo y consulta de información.
• Establecimiento de potencial, requerimientos, impactos y costos de cada subsector. La
caracterización del potencial considera los principales aspectos técnicos: geología,
topografía, geomorfología e hidrología; los requerimientos consideran infraestructura,
comunicaciones, amenazas naturales, condiciones de amenazas antrópicas; las
interacciones ambientales se clasifican en físicas, bióticas, sociodemográficas,
culturales, económicas y políticas; también se consideran aspectos de mercado y
costos de inversión y operación.
• Definición de restricciones y de criterios de búsqueda.
• Evaluación de potencialidades mediante análisis multiobjetivo. El método de análisis
multiobjetivo usado es el de estructura de preferencias del decisor, basado en
funciones de valor y método de distancias.

1.3.2.3 Línea base

Los bloques de información temática que hacen parte de la línea base son: relieve,
hidrografía, infraestructura, geociencias, amenazas, atmósfera y clima, áreas de manejo
especial, entidades territoriales, demografía, aspectos culturales, aspectos políticos,
aspectos económicos, suelos – vegetación, ecosistemas, endemismo, ecosistemas
estratégicos, amenaza sísmica nacional, amenaza volcánica, amenaza por fenómenos de
remoción en masa.

Dentro de las restricciones ambientales se tienen: parques nacionales naturales, áreas de


conservación de suelos, áreas de reserva hídrica, áreas de reserva marítima y lacustre,
áreas de reserva minera, áreas de recursos turísticos o culturales, reservas forestales,

11
reserva de fauna y flora, comunidades negras, grupos étnicos tradicionales, resguardos
indígenas.

1.3.2.4 Sector minero

A manera de ejemplo se presentarán los aspectos relevantes que se consideran en el


sector minero. La caracterización del potencial para cada mineral se realiza con base en
información geológica, tectónica, minera, geoquímica, geofísica y de catastro.

Para calificar la potencialidad un área para la ocurrencia de depósitos minerales, se


propone una metodología que considera la importancia relativa con las siguientes
condiciones: litología, fallas y otras facturas, mineralizaciones, anomalías geoquímicas,
anomalías geofísicas. Dentro de la clasificación del potencial se han analizado diferentes
aspectos específicos (condiciones anteriores) para la caracterización de los minerales
estratégicos: carbón, esmeraldas, fosfatos, materiales de construcción, níquel, oro, plata y
concentrados de cobre, plomo y zinc, yeso y caolín.

Para la clasificación de requerimientos se consideran los criterios: agua, vías de acceso,


infraestructura eléctrica, servicios, red de comunicaciones, disponibilidad mano de obra,
infraestructura de transporte.

En la desagregación del ambiente se consideran los componentes físico, biótico, cultural,


económico, político y sociodemográfico, que identificarán las principales interacciones
ambientales. A continuación se presenta la forma como se establecen algunas de las
interacciones proyecto-medio.

Interacción Física por Arranque de Materiales (IFAM): Se estima que puede representarse
mediante la siguiente expresión IFAM= FDC*FQ+FVV+FAC donde:
FDC: factor por distancia a la corriente más cercana.
FQ: factor de caudal de la corriente más cercana.
FVV: factor por velocidad del viento.
FAC: factor de acuíferos.

Interacción Biótica por Arranque de Material (IBAM): se estima mediante la expresión


IBAM= FEEC+ FDCI donde:
FEEC= Factor clase de ecosistemas.
FDCI= Factor de distancia a ciénagas (km).

Interacción Socioeconómica por Arranque de Material (ISEAM): se estima mediante la


expresión ISEAM = FUSC+FTTC donde:
FUSC= Factor por uso del suelo en la celda.
FTTC= Factor por tenencia de la tierra.

Interacción Sociodemográfica (ISD): se estima mediante la expresión ISD= DPR*FDCP


donde:
DPR= densidad poblacional rural (hab/km2).
FDCP= factor de distancia a centro poblado mas cercano.

12
Interacción Sociopolítica (ISP): cuyo factor ISP se califica asignándole un valor a la zona
de acuerdo con mapa de conflicto. Este mapa resulta de considerar la presencia de
actores sobre territorio y homicidios más presencia de actores sobre población civil más
infraestructura y cultivos ilícitos.

Interacción Física por Construcción de Vías: se estima mediante la expresión IFCV=


FEE+FDCP donde:
IFCV= interacción física por construcción de vías.
FEE= factor por ecosistema estratégico en un radio de 10 km a partir del final de la vía.
FDCP= factor de distancia al centro poblado más cercano.

1.4 OBJETIVOS

El objetivo general de este estudio es realizar una propuesta metodológica para la


evaluación de los efectos geoambientales potenciales por actividades de
aprovechamiento del subsuelo, que permita identificar unidades territoriales de igual
fragilidad ambiental o áreas homogéneas en cuanto a la susceptibilidad del medio para
ser afectado por una determinada acción; el análisis se soportará en los sistemas de
información geográfica SIG

Como objetivos específicos se tienen los siguientes:

• Elaborar una propuesta metodológica para la evaluación de los efectos potenciales


eventualmente causados por las actividades de aprovechamiento de los recursos del
subsuelo y considerar algunas de las componentes geoambientales que pueden ser
afectadas por estas actividades.
• Aplicar dicha propuesta a los potenciales yacimientos de minerales definidos por el
ACIGEMI del INGEOMINAS en la Plancha 5-09, para definir los efectos potenciales
esperados en caso de un futuro desarrollo minero. Los efectos geoambientales
considerados en esta etapa serán el de inducción de procesos erosivos, inducción de
movimientos en masa y contaminación de acuíferos

1.5 ALCANCES

Se esperan como resultados del estudio:

1. Que la propuesta metodológica planteada pueda constituirse en una herramienta para


la construcción de escenarios de planificación sectorial, así como para la consulta, el
análisis y la toma de decisiones frente a los futuros proyectos de aprovechamiento de
recursos del subsuelo.

2. Que la aplicación de la propuesta para los tres principales efectos geoambientales


como son la inducción de procesos erosivos, la inducción de movimientos en masa y
la contaminación de acuíferos, permita mostrar los beneficios y alcances que puede
tener la información resultante de la aplicación metodológica.

13
3. Que la propuesta sirva de directriz para el desarrollo de nuevas metodologías que
evalúen los demás efectos geoambientales y, en general, todos los efectos
ambientales que permitan una adecuada planificación sectorial.

4. Que se constituya en un instrumento flexible que permitirán actualizar y mejorar


metodologías, incorporar nuevos elementos de conocimiento y valoración que vayan
surgiendo en el transcurrir de la investigación ambiental del país

14
CAPÍTULO 2

AMÍLCAR VALENCIA

MARCO CONCEPTUAL PARA EL ANÁLISIS DE EFECTOS


POTENCIALES (SENSIBILIDAD GEOAMBIENTAL)
De acuerdo con los postulados conceptuales que se tienen para el análisis de efectos
potenciales, se puede hacer - hasta un cierto punto - un paralelo entre lo que significa la
evaluación de amenaza, vulnerabilidad y riesgo, y lo que puede representar la evaluación
de las actividades antrópicas, las componentes geoambientales del medio y su fragilidad,
y los efectos potenciales resultado de dicha interacción. Para facilitar el entendimiento
conceptual de lo que más adelante se desarrollará como propuesta metodológica, se
describirá ese “paralelo” que se evidencia entre estos dos tipos de evaluaciones.

2.1 EVALUACIÓN DE EFECTOS POTENCIALES Y EVALUACIÓN DEL RIESGO

El hombre ha venido haciendo uso de los recursos naturales para su desarrollo y ha


generado una disminución de los no renovables y un deterioro cada vez mayor de los
renovables. En este sentido se podría decir que el hombre, mediante sus actividades de
desarrollo, se ha venido convirtiendo en una amenaza para la naturaleza dado que ella
posee una susceptibilidad intrínseca (vulnerabilidad) en función de las características y
propiedades naturales específicas de cada área (pendientes, coberturas vegetales, tipos
de suelos existentes, cantidad y calidad de las aguas que pasan por la zona, existencia de
recursos acuíferos, clima, formaciones superficiales, entre otros).

La convergencia de actividades antrópicas y susceptibilidad de medio ambiente generan


distintos grados de riesgo de afectación sobre los componentes medioambientales, lo cual
determina diferentes grados de restricción frente a su uso y que la hacen más o menos
frágil a esas solicitaciones o modos de afectación.

En los análisis de fenómenos naturales, la interacción entre la amenaza y la


vulnerabilidad se plantea en términos de una evaluación del riesgo que intenta
establecer las consecuencias que puede tener para el hombre la materialización de ese
fenómeno sobre una comunidad; de la misma forma, como resultado de la interacción
entre las actividades de desarrollo del hombre y la susceptibilidad del medio, debe
plantearse una evaluación de efectos que permita identificar los posibles daños que el
hombre le podría ocasionar a la naturaleza, para así tomar acciones preventivas.

Es de anotar que mientras la evaluación del riesgo presenta una visión antropocéntrica,
donde el hombre es el afectado por fenómenos naturales, la evaluación de efectos
representaría una visión que podría llamarse “ecocéntrica”, donde el medio es el

15
elemento expuesto y el hombre, con el desarrollo de sus actividades, se convierte en
factor amenazante para la calidad y la cantidad de recursos medioambientales, que en
últimas afectan al mismo hombre.

Esta evaluación no representaría, aparentemente, ningún interés por parte del hombre, si
bien él actúa como amenaza. El interés del hombre por el deterioro ambiental nace en el
momento en que esos efectos que él ha ocasionado al medio, expresados en una
disminución de características y propiedades naturales, le resultan perjudiciales al no
poder hacer usufructo de los recursos naturales para sus actividades vitales o de
desarrollo, o al no encontrarlo en condiciones o con propiedades adecuadas para su
utilización, debido a su previo deterioro (Figura 2.1).

Incluso no sólo NO puede hacer usufructo de algunos beneficios de la naturaleza


(consumo de agua, siembra de cultivos, entre otros), sino que en algunas ocasiones se ve
amenazado por ella con fenómenos inducidos por sus propios proyectos de desarrollo
(deslizamientos en vías, avenidas torrenciales en cuencas deforestadas, subsidencia en
explotaciones mineras, entre otros).

“EFECTOS INDUCIDOS POR EL APROVECHAMIENTO DEL SUBSUELO”

“VULNERABILIDAD” “AMENAZA”
DETERIOROS
EFECTOS

Que SUBSUELO ACTIVIDADES ANTRÓPICAS


pueden
generar
ELEMENTO
AMENAZAS

EXPUESTO
INDUCIDAS

Figura 2.1. Amenazas derivadas de efectos por aprovechamiento del subsuelo.

16
En este punto, ya el hombre ve a la naturaleza como un factor amenazante para su
subsistencia, puesto que compromete sus necesidades vitales como la comida (deterioro
del suelo pérdida de capacidad agronómica), agua (deterioro del agua y modificación
de caudales contaminación del agua y agotamiento del recurso), la vivienda (pérdida
de soporte inestabilidad, subsidencia) e incluso su propia vida (avenidas torrenciales,
deslizamientos, aguas contaminadas con tóxicos y metales pesados). Es aquí donde se
plantea la necesidad de estudiar estos efectos que en un futuro se transformarán en
amenazas.

Todo esto ha llevado a plantear a nivel mundial la necesidad de estructurar procesos de


gestión ambiental que se enfoquen fundamentalmente a prevenir, mitigar, compensar y
remediar los efectos ambientales derivados de todas las actividades antrópicas y que en
un futuro pueden transformarse en amenazas para el mismo hombre.

Los procesos de gestión ambiental a nivel mundial se fundamentan básicamente en


estudios que han venido evolucionando en su enfoque al introducirse en las diferentes
etapas del ciclo de vida de los proyectos (Figura 2.2). Es así como inicialmente se
involucraron en la etapa de desarrollo, con un enfoque correctivo y que se puede calificar
de urgente, ya que intentaban responder a unos efectos ya ocasionados; en éste entran
los denominados Planes de manejo ambiental, Auditorías ambientales, Planes de
contingencia y Planes de seguimiento y control.
CICLO DE LOS TIPOS DE ESTUDIOS
PROYECTOS AMBIENTALES

Adaptativo Evaluaciones Ambientales Estratégicas


Planeación Evaluaciones de Efectos Potenciales
(Idóneo)
Semiadaptativo
Prefactibilidad Diagnóstico ambiental de alternativas
(Adecuado)

Reactivo
Factibilidad Estudio de Impacto Ambiental
(Obligatorio)

Desarrollo Correctivo Planes de Manejo Ambiental


Auditorias Ambientales
Finalización Planes de Contingencia
Cierre abandono Planes de Seguimiento y Control
(Urgente)

Figura 2.2. Tipos de estudios ambientales según el ciclo del proyecto.

17
Rápidamente se determinó la importancia de que en la gestión se involucrara la etapa de
factibilidad del proyecto con un criterio de prevención que dio lugar a los documentos que
hoy se conocen como Estudios de impacto ambiental y que son utilizados y aceptados en
la gran mayoría de países del mundo como instrumento para evaluar la viabilidad
ambiental de los proyectos.

Posteriormente, y con la posibilidad que existía en algunos proyectos de presentar dos o


más opciones para su desarrollo, y de seleccionar la técnicamente más viable (caso obras
viales), se consideró apropiado involucrar la variable ambiental como factor de decisión,
de tal forma que se propendiera por la ejecución de proyectos con los menores impactos
posibles y, por tanto, mucho más sostenibles. Estos estudios son lo que se han
denominado Diagnósticos ambientales de alternativas y que en la actualidad se
aplican a algunos proyectos específicos; estos estudios se realizan en la etapa de
prefactibilidad y se les reconoce un enfoque semiadaptativo en razón a que la selección
del proyecto intenta adaptarse a criterios de sostenibilidad.

Recientemente, en una intención por involucrar los aspectos ambientales en las etapas
previas a la definición de alternativas de proyectos o de planificación de sectores y
subsectores productivos y de desarrollo, se han venido proponiendo y realizando
evaluaciones que buscan establecer las consecuencias ambientales de este tipo de
proyectos y planes de gran escala, de tal forma que desde la concepción de los mismos
se pueda introducir la variable ambiental para hacerlos aún más compatibles y
sostenibles.

Estas evaluaciones son conocidas a nivel mundial como Evaluaciones ambientales


estratégicas, a las que se les reconoce un enfoque adaptativo que se puede calificar de
idóneo. En la actualidad, este tipo de evaluaciones no presentan un desarrollo
metodológico significativo por su complejidad, aunque existen algunos trabajos a nivel
mundial para planes específicos que se pueden referenciar como primeras guías en este
campo.

En esta última dirección es a donde apunta lo que se ha denominado Evaluaciones de


efectos potenciales (sensibilidad geoambiental), las cuales intentan identificar de una
manera preliminar los efectos que se pueden esperar en caso de que algún proyecto de
desarrollo o plan sectorial vaya a ser implementado.

Se puede definir entonces que las Evaluaciones de efectos potenciales (sensibilidad


geoambiental) son estudios de tipo predictivo y planificador que pretenden evaluar la
fragilidad del territorio frente al posible desarrollo de actividades antrópicas en términos de
los efectos potenciales que estas últimas pueden generar sobre las componentes
geoambientales del medio y que representarán en un futuro amenazas para la misma
actividad o para comunidades aledañas.

El objetivo de este tipo de evaluaciones es presentar espacialmente el comportamiento de


ese territorio frente a la actividad antrópica, de tal forma que se puedan brindar
alternativas de ubicación espacial de la misma en zonas con menor fragilidad, llamar la

18
atención sobre las componentes que probablemente sufrirán una mayor afectación para
profundizar su conocimiento en los estudios de más detalle, facilitar los análisis de costos
ambientales para que sean internalizados en los costos del proyecto, incluir mejoras en
los aspectos técnicos del proyecto para minimizar efectos negativos, entre otras
utilidades.

19
CAPÍTULO 3

AMÍLCAR VALENCIA
GUSTAVO NEIRA

PROPUESTA METODOLÓGICA PARA EVALUACIÓN DE EFECTOS


POTENCIALES (SENSIBILIDAD GEOAMBIENTAL)
Con base en los elementos conceptuales presentados anteriormente, se estructuró una
propuesta metodológica que se puede sintetizar en los siguientes pasos:

3.1 DETERMINACIÓN DE LA ACTIVIDAD ANTRÓPICA Y LAS SUBACTIVIDADES


GENERADORAS DE AFECTACIÓN

Es necesario identificar la actividad antrópica potencialmente alteradora de los recursos


del subsuelo, caracterizarla y desagregarla en unas subactividades generadoras de
afectación que facilitan la identificación de los efectos esperados y permiten una mejor
calificación del nivel de afectación para reflejar de manera más real el potencial deterioro
que ocasionará dicha actividad. Tomando como ejemplo la actividad minera, se pueden
identificar como subactividades típicas, según el tipo de minería y el mineral a extraer, las
que se presenta en la Tabla 3.1.

MATRIZ DE EFECTOS AMBIENTALES DEBIDOS A LA ACTIVIDAD MINERA


SUBACTIVIDADES
EXCAVACIÓN SUBTERRÁNEA

PROCESAMTO (PIRO, HIDRO,

DISPOSICIÓN DE ESTÉRILES,
TRITURACIÓN Y MOLIENDA

DESCARGA EFLUENTES
GRUPO MINERAL

TIPO DE MINERÍA

CONCENT. QUÍMICA
CONCENT. FÍSICA

COLAS, ESCORIAS
PERFORACIONES

DEL MINERAL
DESCAPOTE

COQUIZAC.)
ARRANQUE
VOLADURA

BANQUEO

SUCCIÓN

ALUVIAL X X X X
Materiales de construcción y
minerales industriales SUBTERR. X X X X X X X X X X

C. A. X X X X X X X X X X X
Carbón, minerales X X X X X X X X X
SUBTERR.
energéticos y minerales de
la industria del acero. C. A. X X X X X X X X X X

Metales preciosos y metales ALUVIAL X X X X X X


base
SUBTERR. X X X X X X X X X X

ALUVIAL X X X X
Minerales preciosos X X X X X X X
SUBTERR.

C. A. X X X X X X X X
C.A: Explotación a cielo abierto
Tabla 3.1. Relación entre actividades y subactividades para el caso minero

20
3.2 DETERMINACIÓN DE LOS EFECTOS Y EL POTENCIAL DE AFECTACIÓN

Una vez definidas las subactividades, es necesario establecer los efectos y el potencial
de afectación que dichas subactividades pueden ocasionar sobre las componentes
geoambientales y definir una calificación para los mismos.

Los efectos son definidos mediante las matrices conocidas como causa - efecto en donde
se muestra la posibilidad de ocurrencia de un efecto particular sobre el subsuelo a
consecuencia de una subactividad. Como ejemplo se muestra en la Tabla 3.2 una matriz
de subactividades contra efectos para el caso minero.

EFECTOS GEOAMBIENTALES
Inducción de procesos erosivos

3
Desperdicio de recurso mineral
1

Inducción de la meteorización

Inducción de movimientos en
Alteración del balance hídrico

Contaminación de acuíferos
Alteración de los drenajes

masa (incluye derrumbes

Alteración del patrimonio


internos conducentes a

Alteración de flujos
2

subterráneos
subsidencia)
del subsuelo

geológico
naturales
SUBACTIVIDAD

DESCAPOTE X X X X X X
VOLADURA X X X
ARRANQUE Y BANQUEO X X X X X X
SUCCIÓN X X X X
INYECCIÓN X X
EXCAVACIÓN
SUBTERRÁNEA
X X X X X
BENEFICIO Y PROCESAM.
DEL MINERAL
X X

DISPOSICIÓN DE ESTÉRILES,
COLAS, ESCORIAS
X X X X X X X

DESCARGA EFLUENTES X X X X X X X X

1
Se incluyen efectos debidos a: Afectación del régimen de caudales, Alteración de la escorrentía superficial, Obstrucción de acuíferos.
2
Pérdida de cohesión, liberación de componentes.
3
Se entiende como desperdicio toda cantidad de mineral (principal o asociado) que es de interés económico pero no es recuperado.

Notas: - Las etapas de trituración, molienda y concentración hacen parte del "beneficio" del mineral.
- La generación de drenajes ácidos de mina (AMD) y drenajes ácidos de roca (ARD) son contemplados como efluentes de descarga.

Tabla 3.2. Matriz de subactividades vs. efectos en minería

Luego de ser identificadas las interrelaciones, éstas se pueden calificar en términos de


unos potenciales de afectación con el uso de indicadores e índices, cuando éstos
existan, o el método Delphi (criterio de expertos), cuando no se cuenten con mediciones
cuantitativas. Conociendo las grandes deficiencias que se tienen en lo referente a

21
indicadores, índices y mediciones, inicialmente para este trabajo se propone la calificación
de expertos con una adaptación de la metodología expuesta por Conesa (1995) según la
cual, a partir de unos descriptores de la potencial afectación y unos puntajes de éstos, se
puede llegar a establecer calificaciones sobre la magnitud de los mismos.

Si bien la metodología propone unos valores que de manera absoluta no tienen un


significado real, en forma relativa sí pueden establecer de manera cualitativa lo que se
denominará los potenciales de afectación; éstos se jerarquizarán en cuatro (4)
categorías como son: bajo, medio, alto y muy alto.

Estas categorías, tal como se mencionó, serán establecidas para cada interrelación
subactividad – efecto a partir de unos descriptores que consideran no sólo la
intensidad de la alteración que se puede producir, sino también caracterizan una serie de
atributos cualitativos de dicha alteración. Los descriptores que sugiere la metodología de
Conesa (1995), y que serán utilizados para el análisis, son:

1. Naturaleza del potencial efecto. Hace referencia al carácter beneficioso o perjudicial


de la actividad sobre el componente geoambiental considerado, respecto al estado
previo. Puede ser:
9 Positivo. Aquel admitido como tal, tanto por la comunidad técnica y científica
como por la población en general.
9 Negativo. Aquel que se traduce en aumento de los perjuicios y demás riesgos
geoambientales en discordancia con la estructura natural de una localidad
determinada.

2. Intensidad del potencial efecto. Hace referencia al grado de incidencia o destrucción


potencial de la acción sobre el componente geoambiental considerado. Puede ser:
9 Total. Cuando la destrucción esperada es completa.
9 Alta. Cuando se espera una modificación del subsuelo o de sus procesos
fundamentales de funcionamiento con repercusiones importantes o destrucción
casi completa de los recursos.
9 Media. Cuando se espera una modificación del subsuelo o de sus procesos
fundamentales de funcionamiento con repercusiones apreciables o afectación de
las propiedades de los recursos.
9 Baja. Cuando se espera una destrucción mínima del factor considerado.

3. Extensión del potencial efecto. Hace referencia al área potencial de influencia del
efecto en relación con el entorno del proyecto. Puede ser:
9 Puntual. Cuando la acción impactante producirá un efecto muy localizado.
9 Parcial. Cuando la acción impactante producirá un efecto que se percibirá en
sectores del entorno, sin ser generalizado.
9 Total. Cuando el efecto se manifestará de manera generalizada en todo el
entorno.

4. Momento de manifestación del potencial efecto. Hace referencia al tiempo que


transcurrirá entre la ocurrencia de la acción y el comienzo del efecto. Puede ser:

22
9 Inmediato – corto plazo. Cuando el plazo de tiempo entre el inicio de la acción y
el de manifestación del efecto se considera nulo o menor a 1 año.
9 Mediano plazo. Cuando el plazo de tiempo entre el inicio de la acción y el de
manifestación del efecto se espera sea de 1 a 5 años.
9 Largo plazo. Cuando el plazo de tiempo entre el inicio de la acción y el de
manifestación del efecto se espera mayor a 5 años.

5. Persistencia del potencial efecto. Hace referencia al tiempo que transcurrirá entre la
afectación del componente geoambiental y su retorno a las condiciones iniciales por
medios naturales o mediante medidas correctoras. Puede ser:
9 Fugaz. Cuando la alteración no será permanente en el tiempo, con un período de
manifestación inferior a 1 año.
9 Temporal. Cuando la alteración no será permanente en el tiempo, con un período
de manifestación de entre 1 y 3 años.
9 Permanente. Cuando la alteración será indefinida en el tiempo.

6. Reversibilidad del potencial efecto. Hace referencia a la posibilidad de retorno del


componente geoambiental potencialmente afectado a las condiciones iniciales previas
a la acción, por medios naturales, una vez la acción se ha detenido. Puede ser:
9 Corto plazo. Cuando la alteración puede ser asimilada por el entorno, debido al
funcionamiento de procesos naturales, en un período inferior a 1 año.
9 Medio plazo. Cuando la alteración puede ser asimilada por el entorno, debido al
funcionamiento de procesos naturales, en un período de entre 1 y 10 años.
9 Irreversible. Cuando la alteración puede implicar una imposibilidad o dificultad
extrema (> 10 años) de retornar a la situación anterior a la acción que lo produce.

7. Recuperabilidad del potencial efecto. Hace referencia a la posibilidad de


reconstrucción, total o parcial, del componente geoambiental afectado por medio de la
intervención humana (medidas correctoras). Puede ser:
9 Recuperable de manera inmediata. Cuando el potencial efecto es totalmente
recuperable de manera inmediata, gracias a las medidas correctoras.
9 Recuperable a medio plazo. Cuando el potencial efecto es totalmente
recuperable en un período de 1 a 5 años, gracias a las medidas correctoras.
9 Mitigable. Cuando el potencial efecto puede paliarse o mitigarse de una manera
ostensible, gracias a las medidas correctoras.
9 Irrecuperable. Cuando el potencial efecto se estima imposible de reparar tanto
por la acción natural como por la humana.

8. Sinergia del potencial efecto. Aquel que se produce cuando el efecto conjunto de la
presencia simultánea de varios agentes supone una incidencia geoambiental mayor
que el efecto, suma de las incidencias individuales contempladas aisladamente.
Asimismo, se incluye en este tipo aquel efecto cuyo modo de acción induce en el
tiempo la aparición de otros nuevos. Puede ser:
9 Sin sinergismo. Cuando una acción que actúa sobre un componente
geoambiental se espera que no sea sinérgica con otras acciones que actúan sobre
el mismo factor.

23
9 Sinérgico. Cuando una acción que actúa sobre un componente geoambiental se
espera que presente un sinergismo moderado con otras acciones que actúan
sobre el mismo factor.
9 Muy sinérgico. Cuando una acción que actúa sobre un componente geoambiental
se espera que sea altamente sinérgica con otras acciones que actúan sobre el
mismo factor.

9. Acumulación del potencial efecto. Hace referencia al posible incremento progresivo


de la manifestación del efecto, cuando persiste de forma continuada o reiterada la
acción que lo genera. Puede ser:
9 Simple. Cuando se manifestará sobre un solo componente geoambiental, sin
consecuencias en la inducción de nuevos efectos.
9 Acumulativo. Cuando se incrementará progresivamente la gravedad del efecto al
prolongarse en el tiempo la acción que lo produce.

10. Relación causa – efecto. Hace referencia a la forma en que se manifestará el efecto
sobre un componente geoambiental, como consecuencia de la futura acción. Puede
ser:
9 Directo. Cuando se tendrá una incidencia inmediata en algún aspecto
geoambiental.
9 Indirecto. Aquel que supondrá una incidencia inmediata respecto a la
interdependencia o, en general, respecto a la relación de un sector ambiental con
otro.

11. Periodicidad del potencial efecto. Hace referencia a la regularidad con que se
manifestará el efecto. Puede ser:
9 Discontinuo. Cuando el efecto se manifestará a través de alteraciones irregulares
en su permanencia.
9 Periódico. Cuando el efecto se manifestará con un modo de acción intermitente y
continuo en el tiempo.
9 Continuo. Cuando el efecto se manifestará a través de alteraciones regulares en
su permanencia.

A partir de estos 11 descriptores que permiten una mejor caracterización de la potencial


afectación, se plantean una serie de calificaciones para cada uno de ellos de tal forma
que al final, matemáticamente, sea posible establecer unos valores que permitan
enmarcar cada uno de los efectos dentro de uno de los cuatro (4) rangos de potencial
afectación ya enunciados. De acuerdo con la metodología adaptada de Conesa (1995),
las valoraciones se presentan en la tabla 3.3.

Los valores a obtener inicialmente se encontrarían entre 13 y 88; sin embargo, debido a
que en la calificación se permitirá considerar algunos o todos los criterios mencionados, la
asignación dentro de las siguientes categorías dependerá del valor mínimo y máximo que
pueda tomar el potencial de afectación (PA). No obstante, la metodología deberá
considerar como un mínimo obligatorio los criterios de naturaleza, intensidad y
extensión.

24
NATURALEZA INTENSIDAD (I)
9 BAJA 1
9 IMPACTO BENEFICIOSO + 9 MEDIA 4
9 IMPACTO PERJUDICIAL - 9 ALTA 8
9 TOTAL 12
EXTENSIÓN (EX) MOMENTO (MO)
9 PUNTUAL 1 9 LARGO PLAZO 1
9 PARCIAL 4 9 MEDIO PLAZO 2
9 TOTAL 8 9 INMEDIATO 4
PERSISTENCIA (PE) REVERSIBILIDAD (RV)
9 FUGAZ 1 9 CORTO PLAZO 1
9 TEMPORAL 2 9 MEDIO PLAZO 2
9 PERMANENTE 4 9 IRREVERSIBLE 4
RECUPERABILIDAD (MC) SINERGIA (SI)
9 RECUPERABLE INMEDIATAMENTE 1 9 SIN SINERGISMO 1
9 RECUPERABLE A MEDIO PLAZO 2 9 SINERGICO 2
9 MITIGABLE 4 9 MUY SINÉRGICO 4
9 IRRECUPERABLE 8
ACUMULACIÓN (AC) RELACIÓN CAUSA – EFECTO (EF)
9 SIMPLE 1 9 INDIRECTO 1
9 ACUMULATIVO 4 9 DIRECTO 4
PERIODICIDAD (PR) POTENCIAL DE AFECTACIÓN (PA)
9 DISCONTINUO 1
9 PERIÓDICO 2 PA = +/-(3I + 2EX + MO + PE + RV + SI + AC + EF + PR + MC)
9 CONTINUO 4

Tabla 3.3. Valoración de descriptores. Adaptación de la metodología de Conesa (1995).

Como ya se mencionó, los potenciales de afectación de menor a mayor serán: bajo,


medio, alto y muy alto. Para establecer los valores para esos cuatro rangos de potencial
es necesario, de acuerdo con la fórmula aplicada a los criterios seleccionados, determinar
el valor máximo y mínimo que puede tomar la calificación. La diferencia entre ese máximo
y ese mínimo deberá ser dividida por 4 y esa cifra será el espaciamiento que debe
diferenciar los niveles (ver tabla 3.4)

Rango de valor Calificación


6 - 18.5 Bajo
18.5 - 31 Medio
35 – 43.5 Alto
43.5 - 56 Muy Alto

Tabla No. 3.4: Calificación según rango de valor

A manera de ejemplo, si se toman como descriptores naturaleza, intensidad, extensión


y momento, el valor máximo que puede tomar es 56 y el valor mínimo es 6; la diferencia
entre ellos es 50, que en 4 partes da un valor de 12,5. Entonces, el primer rango será
entre 6 y 18.5; el segundo rango será entre 18.5 y 31; el tercer rango será entre 31 y 43,5
y el cuarto rango será entre 43,5 y 56.

25
3.3 DETERMINACIÓN DE LA SUSCEPTIBILIDAD DEL MEDIO

Luego de haber analizado la actividad antrópica, sus efectos y el potencial de dicha


afectación, que es como si se caracterizara la amenaza, se debe determinar la
vulnerabilidad del subsuelo frente a esa actividad antrópica amenazante. Esta
vulnerabilidad propia de las características geoambientales del medio, será considerada
como la susceptibilidad del mismo a ser alterado por todos esos efectos que ocasionarán
las actividades antrópicas amenazantes. Por lo anterior, la metodología únicamente
requiere establecer las susceptibilidades del medio frente a los efectos que ocasionará
cada actividad.
Las susceptibilidades son propiedades o propensiones intrínsecas del medio a
desencadenar en mayor o menor grado un proceso de deterioro que conlleve a un efecto
negativo en las funciones naturales propias de cada componente geoambiental. Es así
como las zonas de recarga de acuíferos se pueden considerar como áreas de una alta
susceptibilidad a la contaminación de acuíferos por vertimientos de una actividad minera;
también áreas con macizos rocosos poco fracturados resultan de una susceptibilidad baja
a la inestabilidad de taludes generados por obras viales.

La evaluación de las susceptibilidades será realizada a partir de modelos analíticos que


integrarán información básica de las componentes geoambientales del territorio. Estos
modelos dependen totalmente de las escalas de trabajo que a su vez condicionan los
niveles de detalle de la información temática requerida; es por esto que algunos modelos
deben ajustarse a las diferentes escalas (detalle de la información).

La susceptibilidad debe ser calificada y categorizada para facilitar la evaluación de efectos


potenciales. Esta calificación puede ser elaborada a partir de indicadores o índices,
cuando éstos existan, o recurrir a niveles cualitativos generados a partir del conocimiento
de expertos en los casos en que no se cuente con otra información. Se propone para la
calificación de la susceptibilidad cuatro niveles: muy alta, alta, media y baja.

3.4 ESTRUCTURACIÓN DE LA MATRIZ DE DECISIÓN

Ya en este punto se cuenta, por un lado, con los efectos y el potencial de afectación que
la actividad antrópica puede ocasionar y, por el otro, con la susceptibilidad del medio
frente a este tipo de efectos; sólo resta plantear el análisis de la interacción proyecto-
medio, cuyo resultado se expresará en términos de los efectos potenciales esperados.

Para esto se hace necesario estructurar una matriz de decisión que determine el nivel del
efecto potencial a partir de los efectos y el potencial de afectación previamente definidos
para el proyecto, y de la susceptibilidad del medio frente a los mismos. Esta matriz de
decisión será elaborada a partir de la opinión de expertos y podría ser modificada para
análisis específicos.

26
3.5 ANÁLISIS ESPACIAL DE LOS EFECTOS POTENCIALES

Por último, y como resultado de la aplicación de la matriz de decisión, se realizarán


análisis espaciales de acuerdo con las susceptibilidades del medio de manera que se
puedan obtener mapas de efectos potenciales parciales frente a cada efecto considerado.
Igualmente, y mediante agregación cartográfica y la asignación de pesos según la
importancia de cada componente, se podría establecer un mapa de efectos potenciales
agregado para fines específicos.

Toda la propuesta se esquematiza en la Figura 3.1 que se presenta a continuación:

CARTOGRAFÍA PLANES, PROGRAMAS Y


TEMÁTICA PROYECTOS NACIONALES,
REGIONALES Y
SECTORIALES

MODELOS DE
SUSCEPTIBILIDAD

SUSCEPTIBILIDAD A CARACTERIZACIÓN DE
FENÓMENOS NATURALES PROYECTOS Y EFECTOS
Y EFECTOS INDUCIDOS

MATRIZ DE MATRIZ DE
DECISIÓN VALORACIÓN DE
PROYECTOS vs.
EFECTOS

MAPAS DE EFECTOS
POTENCIALES
Figura 3.1 Mapa del proceso técnico de la propuesta metodológica

27
CAPÍTULO 4

GUSTAVO NEIRA ARENAS


JHON JAIRO ENCINALES
EDUARDO CHILITO
AMÍLCAR VALENCIA

DETERMINACIÓN DE LA ACTIVIDAD ANTRÓPICA Y LAS


SUBACTIVIDADES GENERADORAS DE AFECTACIÓN CASO –
ACTIVIDAD MINERA POTENCIAL EN LA PLANCHA 5-09

Según la propuesta metodológica presentada para el estudio de los efectos potenciales,


inicialmente es necesario identificar y conocer la actividad antrópica potencialmente
generadora de impactos, así como las subactividades asociadas a la misma e identificar y
caracterizar los tipos posibles de afectación derivados de éstas. En este capítulo se
presenta la descripción correspondiente a la actividad minera, con especial relación al
área comprendida por la Plancha 5-09.

4.1 DEFINICIÓN DE LA ACTIVIDAD

Se entiende como minería a la técnica, la industria y la actividad económica que involucra


la explotación de las minas como fuentes de materias primas minerales (Diccionario de
Español, 2001). Como técnica, en cuanto a que utiliza métodos y tecnologías únicas,
especialmente diseñadas para lograr sus objetivos; como industria, porque comprende un
conjunto de operaciones destinadas a la obtención, la transformación y el transporte de
materias primas; y como actividad económica, en cuanto a que constituye un renglón
fundamental y determinante del desarrollo socioeconómico de cualquier país.

Rara vez un mineral se encuentra en estado puro en la naturaleza y siempre viene


acompañado de material estéril o sin valor económico. Debido a lo anterior, una vez un
mineral ha sido extraído de la mina, en la mayoría de los casos es necesario llevar a cabo
su preparación física y someterlo a una serie de procesos que lo transforman en un
material útil para suplir una necesidad determinada. El beneficio de los minerales consiste
en el proceso de separación, molienda, trituración, lavado, concentración y otras
operaciones similares, a las que se somete el mineral extraído para su posterior utilización
o transformación (Código de Minas, 2000). En general, los cambios experimentados por
un mineral durante su beneficio son sólo de naturaleza física y se centran en
modificaciones de tamaño y forma.

Algunos minerales como los materiales de construcción sólo requieren de las etapas de
beneficio para ser empleados por el hombre. Otros, tales como los minerales fuente de
elementos metálicos, requieren etapas adicionales de tratamiento y purificación con el fin
de obtener el elemento de interés. Estos tratamientos, por el contrario, sí involucran en

28
muchos casos transformaciones químicas y comprenden lo que se denomina la etapa de
procesamiento del mineral.

El procesamiento se puede llevar a cabo por diferentes métodos, casi únicos según el tipo
de mineral, y determinados en ocasiones por el uso final que se desea dar al producto. En
un sentido amplio, los procesos se pueden clasificar según el medio utilizado para
promover la ocurrencia de la reacción química que permita su separación o refinación. Por
una parte, los procesos hidrometalúrgicos emplean soluciones acuosas de reactivos
apropiados que, en contacto con el mineral, producen la transformación deseada
(Ingeominas, 2001). En otros casos, y con miras a mejorar la cinética de las reacciones,
los procesos se realizan a altas temperaturas, caso en el cual se denominan
pirometalúrgicos. Adicionalmente, algunas transformaciones deben ser promovidas con el
uso de corriente eléctrica (electrometalurgia) o por la presencia de microorganismos
(biohidrometalurgia).

4.2 FASES DE DESARROLLO DE LA ACTIVIDAD MINERA

Las etapas a través de las cuales se desarrolla un proyecto minero pueden ser entendidas
desde dos puntos de vista:

- Desde el punto de vista de la actividad económica: en este caso se puede decir que
una mina pasa por las etapas de Prospección – Exploración - Construcción y montaje
- Explotación y desarrollo – Cierre y abandono de la mina.
- Desde el punto de vista técnico del aprovechamiento del recurso: en este caso se
especifica la vida de la mina desde el momento de la identificación del yacimiento
hasta la rehabilitación del terreno minado. Estas etapas son: Prospección –
Exploración – Minado y beneficio – Procesamiento – Tratamiento y disposición de
Residuos - Cierre y abandono de mina.

Aunque el primer punto de vista (actividad económica) es el que se encuentra reflejado en


el Código de Minas Colombiano, en este documento se describirán las fases de desarrollo
según el segundo punto de vista (técnico), ya que así se tendrá una visión más precisa de
los efectos derivados de cada etapa.

La Figura 4.1 muestra un esquema aproximado del desarrollo de estas etapas, en el cual
se han destacado los puntos principales de generación de residuos contaminantes. A
continuación se presenta una breve descripción de cada una de las etapas.

4.2.1 Prospección y exploración

El Código de Minas define la prospección de minas como el proceso de investigar la


existencia de un mineral, y delimitar zonas prometedoras mediante el uso de técnicas
superficiales. Según el mismo Código, la prospección minera no requiere de autorización
o permiso alguno de orden ambiental, aunque cuando sea realizada en zonas de reserva
natural debe contemplar las mismas restricciones que rijan para trabajos e investigaciones

29
científicas (Código de Minas, 2000). Es una actividad de libre realización en el país
excepto en territorios definidos como zonas mineras de minorías étnicas (Articulo 39).

PROSPECCIÓN Y
EXPLORACIÓN

CONSTRUCCIÓN Y
MONTAJE

EXPLOTACIÓN (MINADO)
Descapote – Voladura – Arranque – Banqueo - Cargue y transporte –
Excavación subterránea – Socavación - Perforación

BENEFICIO DEL MINERAL


Trituración – Molienda –
Clasificación - Concentración

PROCESAMIENTO DEL MINERAL


- Procesamiento hidrometalúrgico: explotaciones de oro.
- Procesamiento pirometalúrgico: hierro y níquel.
- Coquización.

Disposición de desechos sólidos Descarga de efluentes


(Estériles, colas de beneficio y escorias) (Residuos líquidos de beneficio y
procesamiento; generación de
drenajes ácidos)

MATERIA PRIMA MINERAL


O PRODUCTO TERMINADO

CIERRE Y ABANDONO
DE LA MINA

Figura 4.1 Etapas técnicas del aprovechamiento minero

30
En cuanto a trabajos de exploración, el mismo Código señala que “los estudios, trabajos y
obras a que está obligado el concesionario durante el período de exploración por métodos
de subsuelo, son los necesarios para establecer y determinar la existencia y ubicación del
mineral o minerales contratados, la geometría del depósito o depósitos dentro del área de
la concesión, en cantidad y calidad económicamente explotables, la viabilidad técnica de
extraerlos y el impacto que sobre el medio ambiente y el entorno social puedan causar
estos trabajos y obras” (Articulo 78).

Es generalmente aceptado, y así lo expresa el Código de Minas Colombiano, que estas


etapas iniciales de un proyecto minero tienen poco o ningún impacto sobre el medio. Esto
se puede explicar teniendo en cuenta que el número y dimensiones de las perforaciones
que se realizan durante la exploración es bastante limitado y, por lo tanto, sus efectos son
prácticamente nulos comparados con los de las demás etapas del proyecto.

4.2.2 Explotación y beneficio del mineral

Estas etapas, que en su inicio incluyen los estudios de factibilidad e ingeniería de diseño,
así como el montaje de la infraestructura necesaria, comprenden la extracción y la
preparación del recurso mineral. Como se mencionó antes, prácticamente se puede
encontrar una técnica particular de minado y beneficio para cada mineral, aunque existen
métodos básicos y tecnologías bien establecidas. A partir de estas etapas, y hasta el fin
del proyecto, se presentan afectaciones del ambiente circundante de la mina.

4.2.3 Procesamiento de minerales

Constituye la etapa en la cual el compuesto mineral de interés toma su estado y su forma


finales para ser utilizado. Como se explicará posteriormente, los principales impactos
ambientales originados en esta etapa tienen que ver con un uso inapropiado de reactivos
químicos, un manejo inadecuado de residuos sólidos y líquidos, y la liberación a la
atmósfera de gases sin tratamiento. Además, es necesario tener en cuenta que en la
actividad minera no sólo se producen efluentes, sino que también se presentan pérdidas
de mineral. No es posible, mediante ningún método, remover todo el mineral útil de la
mina ni lograr la extracción de la totalidad del elemento o compuesto de interés que esté
presente en el mineral. En general, el nivel de extracción dependerá del mineral en sí y de
las técnicas empleadas para su extracción y procesamiento. Este “desperdicio” de
recurso también puede entrar a formar parte de los factores contaminantes de la
actividad, y sus efectos aún no han sido evaluados en Colombia.

4.2.4 Manejo y disposición de desechos y cierre de minas

El manejo y la disposición adecuada de los desechos de minería (descartes de mina,


colas de beneficio y procesamiento, gases, efluentes de mina y de proceso, entre otros),
deben ser cuidadosamente observados incluso desde el inicio del proyecto (etapa de
diseño). Un aspecto a considerar con especial cuidado es la posibilidad de generación de

31
drenajes ácidos en la mina o en los botaderos de descartes y colas, cuyo tratamiento
debe hacer parte del planeamiento minero.

En el mundo ya existen estrategias especiales de cierre que deben ser cuidadosamente


evaluadas para seleccionar la más conveniente de acuerdo con el mineral, las
características de la explotación, las restricciones legales y ambientales, y el mismo
entorno social del proyecto (Villas-Boas & Barreto, 2000). En términos generales, el plan
de cierre y abandono de la mina, que en muchos países del mundo y en varios
latinoamericanos ya hace parte de los requerimientos legales para desarrollar la actividad,
debe contemplar una estrategia cuyo objetivo es dejar controladas o mitigadas las
situaciones que puedan dar origen a impactos ambientales indeseados durante el
abandono y garantizar hasta cierta medida una condición ambientalmente segura en el
largo plazo.

Últimamente se ha empezado a introducir un nuevo concepto consistente en el diseño y la


ejecución de estrategias de “post-cierre”, las cuales contemplan planes de monitoreo
periódico que permiten establecer la permanencia en el tiempo de las medidas de cierre
de la mina.

4.3 TÉCNICAS DE EXPLOTACIÓN DE MINERALES

Aunque la explotación de los minerales se puede llevar a cabo por una variedad de
técnicas, muchas de ellas corresponden a modificaciones particulares de la clasificación
más conocida según la cual la minería se puede desarrollar por dos métodos: a cielo
abierto y subterránea. No obstante, existen ciertas particularidades, especialmente desde
el punto de vista ambiental, que hacen conveniente definir tres tipos adicionales de
minería: minería aluvial, minería de disolución y minería marina. En Colombia se
encuentran presentes los cuatro primeros tipos de minería, aunque a nivel experimental
también se han encontrado buenos indicios de la posibilidad de desarrollar explotaciones
exitosas en las costas de nuestros océanos.

4.3.1 Minería a cielo abierto

Desde el punto de vista ingenieril, la minería superficial o “a cielo abierto” presenta


grandes ventajas comparada con la minería subterránea, principalmente en cuanto a su
costo y la facilidad de mecanización. En este tipo de minería se tienen menos
restricciones para el diseño y el control de la operación, dado que se dispone de
parámetros más visibles y mejor conocidos, como las características de las rocas, las
condiciones del agua y la ley del mineral. Desde el punto de vista ambiental, la minería
superficial tiene efectos mucho más evidentes y, por lo mismo, trascendentales entre la
opinión pública.

En este método de minería, la excavación es relativamente simple (Ali, 1992); a medida


que el material estéril o de descapote es arrancado, el mineral subyacente es extraído
mediante la formación de bancos. A medida que los trabajos avanzan, el espacio abierto
creado se puede ir rellenando con material de descarte si las condiciones lo permiten, o

32
se va acumulando en pilas especialmente diseñadas para su almacenamiento. Los
bancos son conformados mediante perforación y voladura, y su número y tamaños
dependen del tamaño de la operación.

Las dimensiones de este tipo de minería pueden variar desde la más pequeña excavación
(pit) hasta explotaciones de gran tamaño, en las cuales los bancos, arreglados como
espirales en algunas minas o en niveles interconectados por rampas en otras, pueden
tener entre 8 y 40 metros de ancho. La altura del frente de los bancos puede estar entre 4
y 8 metros en roca débil y entre 15 y 20 metros en roca moderadamente fuerte. Pueden
también existir bancos con 60 metros de frente cuando la roca es fuerte y tiene pocos
defectos estructurales. La altura y el ancho del banco dependen del tamaño y el alcance
del equipo usado, aunque también son diseñados para garantizar una adecuada
estabilidad de talud. Esta pendiente puede oscilar entre 20 y 70°, con el fin de evitar la
falla de la roca. En la Figura 4.2 se presenta un esquema típico de minería a cielo abierto.

El mineral y la roca se extraen de los “pits” en un ciclo de perforación-voladura-carga-


transporte; para esto último se pueden usar buldózeres, camiones, ferrocarriles y
elevadores. Algunas explotaciones (open-pit) pueden llegar hasta profundidades de 300
metros mediante un banqueo descendiente en espiral. En otro tipo de minería a cielo
abierto, denominada “open-cast”, la explotación se hace en un banco unidireccional,
siendo este método más adecuado para depósitos horizontales ó de poco buzamiento.

Figura 4.2 Minería a cielo abierto (Ali, 1992).

En minería superficial se presentan pocas modalidades, y algunos autores consideran por


separado la minería aluvial, la minería de arranque (o de contorno (strip-mining), en la
cual se explota una pequeña acumulación superficial generalmente de carbón, mediante
el arranque progresivo de capas de material), y la minería de canteras (quarrying, en la
cual la extracción se realiza cuidadosamente, sin voladura, con el fin de preservar la
resistencia y la forma del material de construcción explotado).

4.3.2 Minería subterránea

En un cuerpo mineralizado, bien sea un manto o una veta, generalmente sólo la


dimensión más corta está expuesta a la superficie; por lo tanto, una pequeña zona de

33
explotación conduce a una rápida sobrecarga de estéril sobre la masa mineralizada, tal
que su remoción se hace imposible y obliga a la realización de minería subterránea.

En este tipo de minería (Figura 4.3) y cuando se dispone de una topografía favorable, se
perfora una entrada horizontal (adit) en dirección a la zona mineralizada. Esta entrada se
localiza preferiblemente al más bajo nivel accesible de la mineralización, de tal forma que
el material minado puede ser recolectado mediante gravedad. En el caso de minería más
profunda, se perfora un pozo (shaft) en el cuerpo mineralizado o cerca de él. El acceso al
mineral se lleva a cabo mediante rampas (incline, inclined shaft, o access spiral). Los
pozos cumplen diversas funciones, entre ellas permitir el acceso y salida del personal, la
ventilación de las labores de minería y, por supuesto, el transporte del material hacia la
superficie.

Figura 4.3 Sección transversal de un sistema de minería subterránea (Ali, 1992).

Dentro de la mina, las galerías avanzan (drifts) en dirección a la masa mineralizada o


perpendicular a ésta (cross-cuts); estos cortes perpendiculares conectan a los
longitudinales. También se perforan pozos inclinados (raise, hacia arriba; winze, hacia
abajo) que conectan diferentes niveles de explotación y cumplen funciones similares a las
del pozo principal (transporte de personal y mineral, y ventilación). El mineral es removido
dejando cámaras y pilares; estos últimos sostienen las paredes de la mina. En ciertas
ocasiones, y justo antes de que una mina sea abandonada, los pilares pueden ser
minados dejando colapsar las paredes. Así, los sistemas de minería subterránea pueden
ser de tres tipos: sostenidos naturalmente, con soporte artificial, o con colapsamiento
como parte del método de excavación.

Para el soporte de las excavaciones que lo requieran se utilizan refuerzos de madera,


acero, concreto o de la misma roca. Una vez se termina la explotación, y como alternativa
al colapso de los túneles, éstos se rellenan con roca estéril de la mina, o con colas o
residuos del beneficio o del procesamiento del mineral.

En Colombia, uno de los métodos más empleados, especialmente en la minería del


carbón y de sal, es el método de cámaras con soporte de pilares (Figura 4.4). Esta es
una técnica muy apropiada en el caso de cuerpos mineralizados horizontales o con poco

34
buzamiento, siempre y cuando los depósitos no sean muy profundos o la roca demasiado
débil para que los pilares puedan sostener los estratos superiores.

Figura 4.4 Sección transversal del método de minería de cámaras con soporte de pilares
(Ali, 1992).

Como se podría esperar, en explotaciones paralelas al manto y a la superficie, la


subsidencia es uno de los principales problemas. Se deben aplicar consideraciones de
mecánica de rocas para establecer los patrones de esfuerzos, los métodos de alivio de
condiciones de “rebote”, y el mejor diseño de pilares. El porcentaje admisible de
extracción de mineral es un factor principal de diseño, y en promedio la extracción es del
60%; pero si los pilares pueden ser colapsados de manera segura, la extracción puede
llegar al 90% o más. En minería profunda con alto nivel de esfuerzos, o en minas poco
profundas bajo terrenos ocupados, se deben dejar grandes pilares y, por lo tanto, se
aceptan bajos porcentajes de extracción. Esta condición también se aplica en las
cercanías de acuíferos, que deben ser mantenidos siempre intactos.

4.3.3 Minería aluvial

Aunque la minería aluvial se considera como un tipo de minería superficial, es


conveniente describirla por separado, ya que constituye una forma de explotación muy
arraigada en Colombia y otros países latinoamericanos para la obtención de oro y,
además, presenta efectos ambientales particulares.

La explotación aluvial de oro se puede realizar por métodos basados en tierra, o mediante
dragas. En tierra, se emplean métodos hidráulicos para remover bancos de grava de
hasta 50 metros de alto. El material desprendido se lava posteriormente con agua y se
amalgama, para extraer la parte útil. Es un método bastante simple de explotación, muy
poco mecanizado, y se aplica tanto a yacimientos vírgenes aluviales (o de placer) para
recuperación primaria, como en pilas de relaves o colas para recuperación secundaria.

Los métodos de dragado se aplican en depósitos de placer, en pequeños lagos


excavados para ese propósito, en ríos o en costas. Se utilizan dragas de cucharas y
dragas de succión, que pueden lavar hasta 1.500 ó 2.000 toneladas de grava por hora y
operan en agua hasta 30 metros de profundidad. La operación más grande de dragado en
Colombia se realiza en el Río Nechí en Antioquia, donde el material (grava) extraído por la
draga de succión es clasificado en tambores rotatorios y luego concentrado y

35
amalgamado. El material de descarte se deposita en bancos a lo largo del río o en sus
riberas. En la Figura 4.5 se muestra un esquema correspondiente a este tipo de minería.

Los problemas geológicos en minería aluvial están relacionados generalmente con la


complejidad de los depósitos y su difícil muestreo. Por otra parte, tal vez el problema
geoambiental más crítico es la preservación o la restauración de las condiciones
originales, en particular el lecho del río y de las áreas de acumulación de descartes.

Figura 4.5. Minería aluvial mediante dragado (Peters, 1987).

4.3.4 Minería de disolución (solution mining)

Este método, tradicionalmente aplicado en la extracción de sal, consiste en la perforación


de pozos espaciados en intervalos de unos pocos metros a cientos de metros y a
profundidades que pueden alcanzar 300 metros. Las unidades de explotación en el
sistema pueden ser pozos únicos por los cuales se transporta agua fresca y salmuera a
través de varios tubos concéntricos ubicados en el mismo pozo, o incorporados en una
galería con pozos separados de inyección y de producción.

Como característica, la minería de disolución en lechos o domos salinos permite obtener


una cavidad que puede ser usada como cámara de almacenamiento, por ejemplo, de
petróleo.

Además de sal, en otros países del mundo el método ha sido aplicado en la obtención de
cobre, uranio, oro y plata, mediante la inyección de soluciones ácidas y amoniacales. La
técnica se denomina lixiviación in situ (o minado hidrometalúrgico) y, aunque es un
método promisorio que permite reducir los costos de la minería subterránea
especialmente en el caso de depósitos de bajo grado, no es aplicable en la mayoría de los
casos, ya que depende en gran medida de la permeabilidad de las rocas.

Los aspectos geotécnicos involucrados en este tipo de minería son críticos y están
presentes desde la misma etapa de diseño. Temperatura, presión, resistencia de la roca,
y patrones de flujo deben todos estar perfectamente balanceados. Desde el punto de vista
geológico, se presentan problemas similares a los encontrados en un campo petrolífero:
los pozos cesan de operar, colapsan o se esterilizan debido a que algo sucede en el
extremo opuesto del delgado tubo.

36
En cuanto a la permeabilidad de las rocas, un depósito debe ser uniformemente
permeable en su estado natural o ser susceptible de permeabilización por algún método
tal como voladura convencional o nuclear, hundimiento de bloques, o fracturamiento
hidráulico (Peters, 1987). Por otra parte, el fracturamiento debe ser óptimo, ya que si los
fragmentos son muy finos, se empacan y bajan la permeabilidad, o si son muy gruesos,
no permiten la exposición suficiente del sólido a la solución lixiviante.

De la misma manera, el aislamiento entre el cuerpo mineral y la roca de las paredes debe
ser una condición natural o posible de ser inducido. Esto último puede lograrse mediante
la formación de una “cortina” por enlechado o compactación del área alrededor del
depósito por voladura. Como medida de prevención, también es importante mantener el
nivel freático estable.

En Colombia, este tipo de minería se aplica en la explotación de sal en Zipaquirá


(Cundinamarca).

4.3.5 Minería marina

Están incluidas en este tipo de minería, las operaciones de extracción de recursos


minerales que se realizan en las playas de los mares ó en sus lechos. Aunque en
Colombia aún no se realizan operaciones comerciales, en otras partes del mundo se lleva
a cabo la explotación de placeres en las costas, así como la explotación bajo el suelo
marino a partir de explotaciones basadas en tierra. También se realiza minería open-pit en
Alaska (explotación de barita) y en Maine, U.S. (cobre y zinc).

4.4 EVALUACIÓN DEL POTENCIAL MINERAL EN LA PLANCHA 5-09

Para la identificación y la caracterización de los recursos minerales existentes en el área


correspondiente a la Plancha 5-09, se utilizó la clasificación propuesta dentro del marco
del proyecto “Minerales Estratégicos para el Desarrollo de Colombia” (INGEOMINAS,
1995) en la cual se distinguen los siguientes grupos de minerales1:

- Grupo I (metales y minerales preciosos: oro, plata, esmeraldas, diamantes y


elementos del grupo del platino y de los corindones).
- Grupo II (metales base: cobre, plomo, zinc, aluminio).
- Grupo III (metales de la industria del acero: hierro y níquel).
- Grupo IV (minerales de metales especiales: mercurio y antimonio, aunque éstos no
son estratégicos para el desarrollo por sus implicaciones ambientales).
- Grupo V (minerales industriales: yeso, roca fosfórica, sal, caliza, dolomita).
- Grupo VI (minerales energéticos: carbón y petróleo).
- Grupo VII (materiales de la construcción: arcillas, agregados pétreos y piedras
ornamentales).

1
No se realizará la evaluación del potencial geológico minero para los Grupos III y IV debido a que no se cuenta con el
nivel de información apropiado para el desarrollo de esta actividad.

37
La descripción de cada grupo de minerales se realizó con base en la memoria explicativa
del Atlas Colombiano de Información Geológico-Minera para Inversión (en adelante
ACIGEMI, INGEOMINAS 2000) y se enfocó a caracterizar los principales parámetros
geológicos (litología, tectónica y tipos de mineralizaciones) y mineros (métodos de
explotación, grado de actividad de las explotaciones y rangos de producción).

Tabla 4.1. Rangos de producción por grupo de minerales (INGEOMINAS, 2000).


GRUPOS RANGO 1 RANGO 2 RANGO 3
I Hasta 0,05 t/año Entre 0,05 y 1 t/año Mayor de 1 t/año
Hasta 10.000 Qt * Entre 10.000 y 10.0000 Qt * Mayor de 100.000 Qt *
II Hasta 50.000 t/año Entre 50.000 y 25.0000 t/año Mayor de 250.000 t/año
III Hasta 10.000 t/año Entre 10.000 y 100.000 t/año Mayor de 100.000 t/año
IV Hasta 1.000 t/año Entre 1.000 y 30.000 t/año Mayor de 30.000 t/año
V Hasta 10.000 t/año Entre 10.000 y 100.000 t/año Mayor de 100.000 t/año
VI Hasta 10.000 t/año Entre 10.000 y 100.000 t/año Mayor de 100.000 t/año
VII Hasta 50.000 t/año Entre 50.000 y 200.000 t/año Mayor de 200.000 t/año
* En este grupo se incluyen las esmeraldas y otras gemas, cuya producción es en quilates.

4.5 CARACTERIZACION DE LAS AREAS MINERAS POTENCIALES

Considerando las características de los efectos geoambientales que ocasiona la


explotación de los diferentes tipos de minerales, y los diferentes tipos de minería que se
pueden desarrollar, se agruparon las áreas mineras potenciales de la siguiente forma:

4.5.1 Metales preciosos y metales básicos

Los minerales considerados en estos grupos son: minerales de oro y metales básicos
(cobre, plomo, zinc).

En la zona de la Plancha 5-09 se han reconocido cinco áreas importantes para


exploración, las cuales están ubicadas sobre la Cordillera Central y aparecen
relacionadas con depósitos epitermales de metales básicos y preciosos; estas zonas
corresponden a los batolitos de Ibagué y Sonsón, Antioqueño y del Bosque-Manzanares,
y las zonas de Los Nevados y Aranzazu-Salamina. En la Tabla 4.2 se presenta un
resumen de las características principales de estos depósitos.

Para el análisis de los efectos potenciales, considerando las características de los


potenciales yacimientos y el tipo de minería que se ha venido desarrollando en la zona, se
asumirá como método de explotación probable el subterráneo.

4.5.2 Minerales preciosos (esmeraldas)

Las áreas potenciales seleccionadas en la Plancha 5-09 para exploración esmeraldífera


comprenden dos cinturones (oriental y occidental) orientados aproximadamente en
dirección N-NE y localizados en los flancos este y oeste de la Cordillera Oriental, en los

38
departamentos de Cundinamarca, Boyacá, Santander, Meta y Casanare. En la Tabla 4.3
se presenta una breve descripción de estos cinturones esmeraldíferos.

Tabla 4.2 Caracterización de las áreas con potencial para oro y metales básicos
ZONA GEOLOGÍA INVENTARIO MINERO
POTENCIAL
El Batolito de Ibagué tiene composición granodiorítica a En el Batolito de Ibagué, los skarn de Mina Vieja y
cuarzodiorítica, presenta mineralizaciones auríferas de El Sapo, han sido objeto de pequeña minería y
tipo filoniano y depósitos de skarn, asociadas a facies muestran contenidos de 2-3% de Cu, 1-3 g/t de Au
magmáticas tardías, usualmente porfiríticas como son y 10-20 g/t de Ag. Las mineralizaciones filonianas
Batolitos de los stocks de Payandé y Santa Isabel. presentan tenores de oro hasta de 10 g/t. Los
Ibagué y Sonsón prospectos de pórfido cuprífero de los Andes y
El Batolito de Sonsón, de composición Chili-Infierno constituyen importantes objetivos de
predominantemente cuarzodiorítica, presenta exploración.
mineralizaciones auríferas de tipo filoniano en la zona En el Batolito de Sonsón se presentan
comprendida entre Sonsón, Nariño y Pensilvania, explotaciones auríferas subterráneas en vetas y
donde aún permanecen inexploradas las posibilidades filones en los distritos mineros de Sonsón y
de ubicar depósitos auríferos de tipo diseminado. Florencia, con contenidos de Pb, Zn y Cu.
De composición predominantemente cuarzodiorítica En esta área se conocen varias explotaciones
con algunas variaciones a granodiorítica, de textura auríferas de tipo filoniano; así mismo, se presentan
gruesa, masiva y equigranular, localizado en la parte otras muy significativas con depósitos de placer
septentrional de la Cordillera Central. Encaja auríferos de tipo aluvial, como las que ocurren en la
principalmente mineralizaciones epitermales y zona comprendida entre los municipios de
Batolito mesotermales de metales preciosos de tipo filoniano y Concepción y San Vicente pertenecientes al distrito
Antioqueño diseminado. minero de Don Matías, en el Departamento de
Antioquia.
Las minas son de pequeña producción (rango 1),
cuyos procesos de beneficio se basan
principalmente en concentración por batea o
pequeños canalones. En algunas minas se efectúa
el arranque por medio de retroexcavadoras y
minidragas para los placeres.
Está constituido por una granodiorita de textura En el área existe actividad minera de pequeña
fanerítica equigranular, asociada con mineralizaciones escala, de tipo filoniano, particularmente en el
Batolito del auríferas de tipo filoniano en el Sector de San Martín, Sector de San Martín.
Bosque – muy posiblemente relacionadas con facies tardías de
Manzanares este evento magmático que tuvo lugar durante el
Paleógeno, con posibilidades de mineralizaciones
auríferas diseminadas.
El área se localiza en la parte occidental de la Plancha Se conocen varios distritos mineros, entre los
5-09, entre Manizales y la población de Cajamarca; cuales se destacan el de Cajamarca, Salento y
Los Nevados está representada por rocas metamórficas del Manizales, dentro de los cuales sobresalen los
Complejo Cajamarca y en menor extensión rocas prospectos de San Antonio, La Morena y el
volcánicas y piroclásticas, en estrecha relación con los Gallinazo. Las mineralizaciones son tanto de tipo
volcanes del Tolima, Santa Isabel, Ruiz y Machín. filoniano como diseminado, con presencia de
algunas brechas hidrotermales.
La unidad litológica dominante es el Complejo volcano- Hacia la parte occidental del área se conoce
sedimentario Quebradagrande, el cual ha sido intruido actividad minera de tipo filoniano.
por plutonitas calcoalcalinas e intrusivos subvolcánicos
Aranzazu – del Terciario, con los cuales se presentan asociadas las
Salamina mineralizaciones auríferas de tipo filoniano que se
conocen en la región, particularmente hacia el
occidente, donde son más frecuentes las intrusiones
porfiríticas de composición dacítico-andesítica del
Mioceno.

Para el análisis de los efectos potenciales, considerando las características de los


potenciales yacimientos y el tipo de minería que se ha venido desarrollando en la zona, se
asumirán como métodos de explotación probables el de cielo abierto y el subterráneo.

39
Tabla 4.3 Caracterización de los cinturones esmeraldíferos
ZONA GEOLOGÍA INVENTARIO MINERO
POTENCIAL
Está localizado en la parte noroccidental del Anticlinorio de En este cinturón se
los Farallones en el flanco este de la Cordillera Oriental. En el
conocen los distritos de
área, las rocas encajantes de los yacimientos esmeraldíferos Gachalá, Ubalá y Chivor, en
son sedimentitas marinas del Cretácico Inferior,
los cuales se destacan los
representadas por el Grupo Cáqueza, particularmente por las depósitos de Chivor,
Calizas del Guavio en el Distrito de Gachalá y por las Lutitas Buenavista, Mundo Nuevo,
Cinturón de Macanal en el Distrito de Chivor. El Diamante, Las Cruces, El
Esmeraldífero Toro, Vega de San Juan,
Oriental Los yacimientos esmeraldíferos tienden a ocurrir en los Achiote, Sagrada Familia,
planos de intersección de las fallas inversas con las fallas de Pavarañado, Gualí y La
rumbo, las cuales al parecer sirvieron de canales a los fluidos Providencia.
hidrotermales, y la mineralización se encuentra asociada con
brechas y en zonas de fracturas y venas a menos de 200
metros de los planos de falla.
Localizado en el flanco oeste de la Cordillera Oriental en la Este cinturón comprende
cresta del Anticlinorio Villeta-Portones. La mineralización se los distritos de Coscuez,
encuentra en sedimentitas marinas del Cretácico Inferior, Muzo, Peñas Blancas y La
representadas por las Formaciones Rosablanca (Peñas Palma/Yacopí, donde se
Blancas), Paja (Coscuez) y el Grupo Villeta, dentro de lutitas destacan los yacimientos de
negras a grises, carbonosas, con intercalaciones calcáreas, Muzo, Coscuez, Peñas
Cinturón bien estratificadas y usualmente piritosas. Blancas, La Corona, La
Esmeraldífero Calichona, Penjamo,
Occidental La mineralización esmeraldífera está controlada por la Aposentos, La Mina y El
intersección de fallas de rumbo con fallas inversas, en la cual Peñón.
se presentan brechas y grietas de tensión afectadas por
fracturamiento hidráulico, el cual al parecer fue un proceso
importante en el desarrollo de los sistemas de fracturamiento
asociado con los fluidos hidrotermales.

4.5.3 Minerales energéticos (carbón)

La mayor parte de los depósitos carboníferos se localizan en los departamentos de


Cundinamarca y Boyacá. Dada la extensión del yacimiento carbonífero, se han
establecido unas zonas mineras que incluyen los municipios de Samacá, Sotaquirá, Belén
y Checua-Lenguazaque. La característica fundamental de estos depósitos carboníferos es
el número de mantos (se han logrado identificar entre 12 y 17 mantos de carbón, cuya
potencia varía de 0,7 a 1,5 m) con un rango de bituminoso bajo-medio a alto volátil; los
carbones bajos y medios son óptimos para coquización.

La minería se adelanta por sistema subterráneo, con métodos alternos de cámaras y


pilares, y tambores paralelos o ensanche de tambores. Las técnicas de arranque van
desde el uso de picas manuales hasta el uso, en varias minas, de martillos picadores,
combinado con el empleo de locomotoras diesel para el transporte del mineral a los patios
de acopio. Debido a lo anterior, la producción de la mayoría de las minas de las dos zonas
mineras se clasifica en el rango 1 (Tabla 4.1).

Para el análisis de los efectos potenciales, considerando las características de los


potenciales yacimientos y el tipo de minería que se ha venido desarrollando en la zona, se
asumirá como método de explotación probable el subterráneo.

40
4.5.4 Minerales industriales

En la Plancha 5-09 se identifican explotaciones mineras de tres de los seis minerales de


este grupo definidos como estratégicos (INGEOMINAS, 1995): sal, yeso y roca fosfórica.
No obstante, algunos minerales no estratégicos para el desarrollo de Colombia que hacen
parte de este grupo se describen por ser de importancia económica para el desarrollo
minero regional.

4.5.4.1 Sal (NaCl)

En Cundinamarca se reportan explotaciones salinas en la mina inactiva de Nemocón y la


mina activa de Zipaquirá, con un desarrollo por sistema subterráneo mediante la técnica
de inyección de agua a presión, que desplaza al método de cámaras largas utilizado en el
pasado; la producción de esta mina en 1997 alcanzó 143.000 toneladas, y se ubica en el
rango 3. En Restrepo (Meta) se encuentra la mina activa de Upín, que es explotada por
sistema subterráneo mediante técnicas de inyección de agua a presión; su producción la
ubica dentro del rango 1.

4.5.4.2 Yeso (CaSO4)

Los yacimientos de yeso están asociados a la Provincia Metalogénica Continental


Oriental, específicamente al Distrito Minero de Páez (Boyacá). Además, se reportan
algunas otras minas localizadas en el Valle Superior del Magdalena, en los municipios de
Nilo, Jerusalén y San Juan de Río Seco (Cundinamarca); algunas de estas minas están
activas y adelantan sus labores mineras por el sistema a cielo abierto, con técnicas de
arranque y cargue, y con una producción que las ubica en el rango 1.

4.5.4.3 Fosfatos (P2O5)

La actividad minera de roca fosfórica se encuentra asociada a la Provincia Metalogénica


Continental Oriental en los municipios de Iza y Cuítiva (Boyacá); los depósitos se explotan
por sistema a cielo abierto en terrazas, con arranque por bulldozers; la mina de Iza
produce unas 24.000 t/año con un tenor promedio de 22% de P2O5. En Pesca (Boyacá) se
explotó, a mediados de la década de los ochenta del siglo XX, una mina en forma
subterránea por el método de cámaras y pilares.

4.5.4.4 Feldespatos (Fd)

Las principales minas activas se ubican en Montebello (Antioquia), con minería a cielo
abierto que alcanza una producción de rango 1. En los municipios de Ibagué, San
Bernardo y Alvarado (Tolima), la extracción alcanza una producción cercana a 100.000
t/año, y se destaca la mina El Vergel.

4.5.4.5 Caolín (CA)

Las principales explotaciones se hallan en La Unión (Antioquia) y pertenecen a la


Provincia Metalogénica Central. El mineral se explota por sistema a cielo abierto y es

41
sometido básicamente a un lavado y clasificación de tamaño en hidrociclones, para luego
ser utilizado principalmente como materia prima en la industria cerámica y de las pinturas;
la producción aproximada es de 51.000 t/año.

También se presentan zonas potenciales, en la Cordillera Oriental, en jurisdicción de los


municipios de Arcabuco, Charalá, Tutasa y Sativanorte, donde la minería es a cielo
abierto y la producción se ubica dentro del rango 1.

4.5.4.6 Talco

En el flanco oriental de la Cordillera Central se presenta una zona de bajo potencial para
este mineral asociada a su vez con minerales de yeso y materiales de construcción en
rocas del Complejo Quebradagrande; cubre los municipios de Pácora, Salamina y
Aranzazu.

En los municipios de Herveo, Casabianca e Ibagué (Tolima) se presentan tres


explotaciones; los depósitos están asociados a esquistos clorítico-actinolíticos y esquistos
anfibólicos del Complejo Cajamarca, a partir de los cuales se generaron por
metamorfismo retrógrado e hidrólisis, los minerales magnésicos primarios; se presentan
en lentejones pequeños distribuidos en las zonas de fractura de las rocas metamórficas
que los contienen.

4.5.4.7 Arenas silíceas, chert, cuarcitas

Se presentan franjas delgadas con una potencialidad baja para estos minerales sobre las
cuales no existe actividad minera; se asocian a rocas arenosas del Cretácico y Terciario, y
se localizan principalmente en los municipios de Siachoque, Boyacá, Ciénega,
Ventaquemada y Turmequé. Es importante el desarrollo de programas de exploración
para definir la existencia de depósitos y tener un mejor conocimiento de la potencialidad
de estas zonas.

4.5.4.8 Fluorita y barita

Se presenta una amplia zona de orientación noreste con potencial bajo que cubre parte
de los departamentos de Boyacá y Santander. Según el Mapa de Rocas y Minerales
Industriales (INGEOMINAS, 1995), para esta zona no se tienen plenamente identificados
depósitos, prospectos, manifestaciones y actividad minera actual que confirmen un
verdadero potencial geológico-minero; esta zona se asocia a calizas y lodolítas calcáreas,
conglomerados, areniscas y arcillolitas hacia la parte inferior del Cretácico.

También se han reportado explotaciones de barita en jurisdicción de los municipios de


Bolívar, La Paz y Aguada, que pertenecen al grupo de depósitos de fisura y relleno de
cavidades en rocas sedimentarias; las explotaciones son de pequeña escala, poco
tecnificadas y con una producción intermitente que cubre un bajo porcentaje de la
demanda nacional.

42
Para el análisis de los efectos potenciales, considerando las características de los
potenciales yacimientos y el tipo de minería que se ha venido desarrollando en la zona, se
asumirá como método de explotación probable el de cielo abierto.

4.5.5 Grupo VII: Materiales de construcción

4.5.5.1 Arcillas (OH) y agregados pétreos (AP) (recebos, triturados y gravas)

Las explotaciones para extracción de materiales de construcción se concentran hacia la


periferia de las ciudades capitales, donde se abastece el mercado de la construcción en
agregados pétreos y productos de arcilla como ladrillos, tejas, pisos y tubos de gres.

En la Cordillera Oriental, las arcillas y los agregados pétreos provienen de sedimentitas


terciarias, conos y terrazas aluviales cuaternarias. Las primeras son explotadas a cielo
abierto con técnicas artesanales; ocasionalmente la explotación es mecanizada con
transporte a los molinos y hornos para su beneficio. La extracción de triturados y gravas
se desarrolla con cierto grado de tecnificación en las etapas de arranque y beneficio; las
gravas son explotadas con técnicas mineras a cielo abierto, mediante labores
mecanizadas y procesos de beneficio que van desde la reducción de tamaño, clasificación
en tromeles y lavado. Las empresas mineras que producen estos materiales llegan a los
rangos 2 y 3 de producción.

En la Cordillera Central, las explotaciones de materiales de construcción se concentran en


los alrededores de las ciudades de Medellín, Manizales e Ibagué; la extracción se realiza
sobre depósitos que provienen de rocas insitu y de aluviones de los ríos que drenan la
cordillera, de donde se obtienen grandes cantidades de rajón, triturados, gravas y arenas.

En general, la minería de este recurso se obtiene por técnicas de explotación a cielo


abierto. Para la extracción de arenas, recebos y triturados se tienen métodos manuales,
como el banqueo y frentes únicos; sólo algunas pocas minas cuentan con técnicas de
arranque, cribas estáticas para su beneficio y retroexcavadoras para la carga del material.
La mayoría de las empresas productoras se encuentran dentro del rango 1 y sólo algunas
ladrilleras logran ubicarse en los rangos 2 y 3.

4.5.5.2 Calizas (CaCO3)

En las cordilleras Central y Oriental, la actividad minera en roca calcárea se obtiene de


diferentes unidades litoestratigráficas, como las formaciones Tibasosa en Boyacá,
Payandé en el Tolima y Chipaque en Cundinamarca. Los principales usos están en la
industria del cemento y en menor grado para la fabricación de cal agrícola y fundentes.

En la Cordillera Central tienen importancia los yacimientos de Guacamayo ubicados en el


sector sur de Ibagué; además, los yacimientos de Nare, Río Claro y Abejorral en Antioquia
y el de Neira en Caldas.

La minería de la industria cementera como las de Río Claro, Nare, El Cairo y Diamante se
ejecuta con el método de sublevel caving, donde se utilizan técnicas de banqueo
mecanizadas y voladuras. La mina La Concha de Cementos Caldas que actualmente se

43
encuentra inactiva, fue explotada mediante sistema subterráneo aplicando la técnica de
cámaras vacías.

En la Cordillera Oriental se encuentran las empresas cementeras de Boyacá, Paz del Río
y Samper, que cubren las necesidades de cemento portland en la Región Andina y
efectúan una minería con técnicas de explotación muy similares a las anteriormente
expuestas. Estas empresas se ubican en el rango 3 de producción y cuentan con los
avances tecnológicos actualizados para la explotación y la transformación de la materia
prima, generalmente con tecnología de punta utilizando maquinaria pesada en los frentes
de explotación y en las plantas de beneficio y transformación.

Para el análisis de los efectos potenciales, considerando las características de los


potenciales yacimientos y el tipo de minería que se ha venido desarrollando en la zona, se
asumirá como método de explotación probable el de cielo abierto.

4.6 IDENTIFICACIÓN Y DESCRIPCIÓN DE LAS SUBACTIVIDADES


POTENCIALMENTE GENERADORAS DE AFECTACIÓN

Teniendo en cuenta la anterior discusión acerca de los diferentes métodos de explotación


minera, y con el conocimiento del potencial existente en el área de estudio y los posibles
métodos de explotación a utilizar para su extracción, se elaboró un listado general de las
principales subactividades asociadas a las actividades mineras que se desarrollan en esta
zona. Para la elaboración de este listado, se conservó el esquema de desarrollo técnico
del aprovechamiento minero presentado en la Figura 4.1, seleccionando o agrupando
aquellas subactividades que pueden conducir a algún grado de afectación según lo
considerado en el esquema metodológico aplicado. La lista de subactividades es la
siguiente:

- Descapote
- Voladura
- Arranque
- Banqueo
- Excavación subterránea
- Beneficio y procesamiento de minerales
- Disposición de estériles, colas y escorias
- Descarga de efluentes

La realización de una u otra subactividad depende tanto del tipo de mineral explotado,
como del tipo de minería empleado. Teniendo en cuenta el desarrollo histórico de la
actividad minera colombiana y asumiendo que los desarrollos tecnológicos no implicarían
un cambio profundo en los sistemas de explotación, se podría esperar que en el área
correspondiente a la Plancha 5-09 la explotación de los minerales existentes se siga
realizando principalmente mediante minería a cielo abierto o minería subterránea. Así, el
tipo de minería empleado contemplará una combinación propia de subactividades tal
como se muestra en la Tabla 4.4. Como se puede ver en la misma tabla, se ha llevado a
cabo una pequeña modificación a la clasificación de los minerales explotados propuesta
por el MEDC (INGEOMINAS, 1995) con el fin de abordar los efectos de manera conjunta

44
y con mayor correspondencia según el tipo de mineral explotado y el sistema de
explotación.

Tabla 4.4. Actividades y subactividades generales llevadas a cabo durante la ejecución de


un proyecto minero en el área de la Plancha 5-09.
SUBACTIVIDADES GENERALES PROPIAS DE LA MINERÍA

BENEFICIO Y PROCESAMIENTO DE
MINERALES

Materiales de construcción Cielo Abierto X X X X X X X

Minerales industriales Cielo Abierto X X X X X X X X X X

Carbón. Subterránea X X X X X X X X

Metales preciosos y metales base Subterránea X X X X X X X X X

Subterránea X X X X X X
Minerales preciosos

Cielo Abierto X X X X X X X

A continuación se presenta una descripción de cada una de las subactividades


identificadas.

4.6.1 Descapote

Consiste en la remoción de la capa vegetal, la capa de suelo y todas las demás capas
suprayacentes al depósito con el fin de acceder al recurso mineral. Es una subactividad
típica de la minería a cielo abierto y tiene importantes efectos negativos tales como:

- Alteración de los patrones de drenaje natural.


- Inducción de procesos erosivos en las zonas descapotadas.
- Pérdida de suelo.
- Aumento de la escorrentía superficial.
- Inducción de movimientos en masa.

Además, como consecuencia del descapote, generalmente se presentan graves efectos


relacionados con la alteración del balance ecosistémico regional.

45
4.6.2 Voladura

La voladura, aplicada tanto en minería superficial como subterránea, consiste en la


fragmentación y el agrietamiento de la masa rocosa mediante la detonación de un
explosivo en un barreno o conjunto de barrenos, para hacer más fácil la extracción del
mineral y permitir el acceso a capas más profundas del mismo.

Debido a que las ondas explosivas se transmiten tanto a través del macizo rocoso como
en la superficie, la voladura descontrolada puede conducir a daños en estructuras por
agrietamiento y derrumbes. Estos efectos negativos se presentan especialmente cuando
la voladura se lleva a cabo sin realizar previamente un estudio de estabilidad del macizo
rocoso y de las obras de infraestructura adyacentes. También se pueden presentar graves
consecuencias si no se realiza un adecuado diseño de voladura, que contemple las
características del explosivo utilizado, la geometría de la voladura, el área de expansión
de las ondas, y los tiempos de iniciación y retardo.

La voladura se realiza prácticamente en todo tipo de minería, excepto en aquella de


materiales de construcción como los mármoles en los cuales se debe evitar cualquier
fracturamiento del mineral. Sus principales efectos se relacionan especialmente con la
inducción de movimientos en masa.

4.6.3 Arranque

Consiste en la extracción propiamente dicha del mineral del frente de explotación el cual,
debido a su baja coherencia producida por voladura o perforación, se desprende
fácilmente para ser llevado a los sitios de acopio, beneficio o procesamiento. El arranque
puede ser con pico manual o con martillo picador, perforación manual y explosivos,
perforación semimecanizada y explosivos, o perforación mecanizada y explosivos.

La operación de arranque se realiza tanto en minería superficial como en subterránea, sin


importar el tipo de mineral. Como efectos, además de inducir la ocurrencia de
movimientos en masa, también puede acelerar los procesos erosivos debido a la
exposición continua de nuevas superficies del mineral a la atmósfera.

4.6.4 Banqueo

Un banco es una terraza que, en minería open pit y canteras, forma un nivel único de
explotación por encima del cual se lleva a cabo el arranque de los minerales y los
materiales de descarte de un frente de explotación. En el banqueo, el mineral o el material
de descarte es removido en capas sucesivas, hasta conformar uno más bancos. Esta
operación se puede realizar en diferentes partes, o a diferentes elevaciones, de la misma
mina o cantera.

La conformación inicial de un banco puede ser realizada mediante la perforación y la


voladura de hileras de huecos situados en el frente de explotación. Las dimensiones de
los bancos, que se van conformando a medida que se va extrayendo el material, varían
según el tamaño de la operación de minería.

46
Aunque el banqueo también puede ser realizado en grandes operaciones de minería
subterránea, en Colombia es una operación típica de minería a cielo abierto y sus efectos
tienen que ver principalmente con la inducción de procesos erosivos y, si no se realiza
apropiadamente conservando una adecuada pendiente del talud, puede también originar
movimientos en masa.

4.6.5 Excavación subterránea

Como su nombre lo indica, consiste en la extracción del recurso mineral, junto con el
estéril, en una operación de minería subterránea. El material extraído es transportado en
la mayoría de los casos a la superficie, para las subsiguientes operaciones de beneficio,
transporte o almacenamiento.

Para la excavación se puede utilizar una variedad de técnicas cuya selección depende,
principalmente, de factores económicos y de geología del yacimiento. Comúnmente se
realiza taladrando una serie de orificios donde se colocan las cargas de explosivo en un
número y siguiendo un patrón de acuerdo con la amplitud y la dirección del túnel que se
esté conformando. Posteriormente se lleva a cabo el arranque del material mediante
técnicas mecanizadas. En Colombia, sin embargo, muchas operaciones de pequeña
minería aún utilizan técnicas manuales de excavación.

Entre los principales efectos de la excavación subterránea se encuentran la subsidencia


(que se presenta especialmente cuando se intenta construir sobre antiguos terrenos de
minería subterránea que han sido excavados cerca de la superficie) y la afectación de
aguas subterráneas. La contaminación de las aguas es particularmente importante
cuando se trata de minas de carbón o de metales que presentan asociaciones
mineralógicas con sulfuros y metales pesados, lo cual conduce a la formación de drenajes
ácidos.

4.6.6 Beneficio y procesamiento de minerales

El beneficio de minerales comprende todo el conjunto de operaciones empleadas para el


tratamiento de menas y minerales por medios físicos y mecánicos con el fin de separar los
componentes valiosos de los constituyentes no deseados haciendo uso de las diferencias
en sus propiedades físicas. En estas operaciones están incluidas la trituración y la
molienda del mineral, así como la concentración del mismo. Mediante esta última, se
busca eliminar el material que no es de interés económico con el fin de disminuir el
volumen de mineral a procesar. Para esta separación se pueden utilizar propiedades
físicas (diferencia de densidad, atracción de campo magnéticos, eléctricos) o
físicoquímicas de los minerales.

No todos los minerales requieren el mismo grado de preparación (trituración, molienda,


concentración), sino que éste depende de las características intrínsecas del depósito y del
tipo de mineral explotado.

Como se observa en la Figura 4.5, en la cual se describen las diferentes etapas de


beneficio y procesamiento de los minerales, los minerales preciosos como las esmeraldas

47
sólo requieren de una operación de clasificación que generalmente se lleva a cabo con
agua, y durante la cual los efectos que se presentan tienen que ver con el aporte de
sedimentos a las corrientes de agua. La mayoría de los otros minerales, por su parte,
requieren de procesos adicionales de trituración, molienda, clasificación y concentración,
antes de ser llevados a la etapa de procesamiento en la forma de un material que
contiene la mayor cantidad de especie útil obtenida de la mina.

El procesamiento incluye el conjunto de operaciones y procesos a los cuales se someten


los minerales con el fin de separar sus compuestos o elementos de valor económico. En
la mayoría de los casos, este procesamiento requiere del uso de energía (calor) como en
los procesos de coquización, fundición, fusión y refinación, o de reactivos químicos (como
en el caso de oro que requiere el uso de cianuro y mercurio). Debido a lo anterior, el
procesamiento tiene como principales consecuencias las relacionadas con la afectación
de las corrientes de agua.

4.6.7 Disposición de estériles, colas y escorias

Prácticamente durante todas las etapas de beneficio y procesamiento de los minerales se


producen residuos sólidos los cuales, dependiendo de la naturaleza del mineral explotado
y la tecnología empleada, pueden conducir a graves impactos ecológicos. Los problemas
derivados de las emisiones pueden ser particularmente severos cuando se utilizan
técnicas de minería artesanal, las cuales, debido al escaso control que se realiza en las
operaciones, generan elevadas cantidades de rocas y partículas de mineral crudo o
semitratado que entran a las corrientes de agua e incrementan los niveles de sólidos
suspendidos y su pH natural.

Los residuos sólidos generados durante el beneficio de minerales preciosos, materiales


de construcción y de gran parte de minerales industriales, consisten básicamente de
estériles y material particulado cuya disposición requiere la construcción y la adecuación
de escombreras en las cuales se realizan labores de revegetación con el fin de integrar el
material estéril al paisaje natural del área. En el caso de minerales de metales preciosos,
metales base y carbón, que pueden llegar a contener importantes cantidades de
compuestos reactivos y restos de sustancias químicas empleadas en su procesamiento,
el impacto puede ser más fuerte debido a los riesgos de formación de lixiviados capaces
de transportar compuestos, metales pesados e iones en solución hasta las corrientes
naturales y alteran severamente la calidad del agua tanto superficial como subterránea, y
el ecosistema del cauce y de las riberas. Esto requiere el establecimiento de un sistema
de drenaje adecuado en la escombrera y, si es del caso, la aplicación de tratamientos de
neutralización/precipitación de compuestos nocivos a los lixiviados.

Por otra parte, el diseño y la construcción de las escombreras deben observar


cuidadosamente ciertas especificaciones de altura y ángulo de talud de acuerdo con el
tipo de material, entre otras, con el fin de prevenir la ocurrencia de deslizamientos y
derrumbes, y mantener en un mínimo la generación de procesos erosivos.

48
MINERAL DE LA MINA

MINERALES
PRECIOSOS
TRITURACIÓN

CLASIFICACIÓN
CLASIFICACIÓN

MOLIENDA
MATERIALES DE
CONSTRUCCIÓN
CLASIFICACIÓN

CARBÓN
CONCENTRACIÓN

METALES
PRECIOSOS MIN. INDUSTRIA LAVADO
(ORO Y PLATA) DEL ACERO Y
METALES BASE
COQUIZACIÓN

ORO ORO
ALUVIAL FILONIANO SINTERIZACIÓN/
CALCINACIÓN

CIANURACIÓN

Tipo de mineral
AMALGAMACIÓN PRECIPITACIÓN FUSIÓN Ruta de proc
esamiento.

FUNDICIÓN REFINACIÓN

Figura 4.5. Rutas de beneficio y procesamiento según el tipo de mineral.

49
4.6.8 Descarga de efluentes

Desde el minado hasta el procesamiento del mineral, prácticamente todas las operaciones
mineras requieren el uso de grandes cantidades de agua que, si es descargada al
ambiente sin ningún tratamiento, constituye uno de los signos más visibles y criticables de
una minería llevada a cabo de manera irresponsable. Aparte de los problemas
ambientales sobre el ecosistema y las fuentes de agua que ya han sido mencionados, las
descargas continuas é indiscriminadas de corrientes artificiales de efluentes pueden
inducir movimientos en masa y procesos erosivos en terrenos de otra manera estables,
aunque susceptibles a estos fenómenos.

Un caso particularmente preocupante de generación y descarga de efluentes peligrosos


se presenta en el caso de minas de carbón y metales como oro, en los cuales la roca
encajante muchas veces contiene altas cantidades de sulfuros minerales los cuales, al
entrar en contacto con el agua y el oxígeno de la atmósfera, dan lugar a la formación de
drenajes ácidos que a su vez pueden reaccionar progresivamente con las rocas que
encuentran a su paso y liberar metales pesados y otros contaminantes. Este fenómeno,
debido a su importancia, ubicuidad y permanencia poscierre de la mina, ha obligado la
inclusión de restricciones en la legislación minera de muchos países, orientadas a reducir
sus impactos y garantizar que quien realice la explotación asuma la responsabilidad del
tratamiento de estos efluentes. En Colombia, sin embargo, el conocimiento de este
fenómeno y las técnicas de tratamiento no está muy extendida y en algunas regiones se
ha evidenciado la necesidad de aplicar técnicas de mitigación de sus efectos.

50
CAPÍTULO 5

AMÍLCAR VALENCIA
EDUARDO CHILITO
GUSTAVO NEIRA

DETERMINACIÓN DE LOS EFECTOS Y LOS NIVELES DE


AFECTACIÓN
De acuerdo con la misión institucional, y teniendo en cuenta las limitaciones en cuanto a
metodologías estandarizadas y validadas para la determinación y la evaluación de los
diferentes efectos que ocurren sobre el subsuelo, se definieron los siguientes efectos
como los que serán considerados para el presente estudio en la Plancha 5-09:

1. Inducción de movimientos en masa. Hace referencia a la modificación por parte de


un proyecto de las condiciones naturales de un terreno que inducen a su inestabilidad.
Esta modificación puede deberse a cambios de pendiente, sobrecarga en la corona de
los taludes, alteración de las condiciones de humedad del terreno o modificación en
los elementos de agarre natural del mismo (alteración de la cobertura vegetal).

2. Inducción de procesos erosivos. Hace referencia al incremento de la susceptibilidad


de los materiales constitutivos del suelo y subsuelo al desgaste y posterior transporte
de los mismos, debido a las actividades humanas que implican eliminación de la
cobertura vegetal y descapote del suelo para realizar la construcción de obras de
infraestructura o acceder a recursos en el caso de la actividad minera superficial.

3. Contaminación del agua subterránea. Hace referencia al incremento en la


concentración de elementos nocivos que alteran la calidad del agua subterránea para
los diferentes usos humanos (riego, consumo humano, industrial, recreación, función
ecosistémica entre otros). El ingreso de sustancias que contienen dichos elementos
en grandes concentraciones a unidades acuíferas expuestas, altera la calidad del
agua, limitando el aprovechamiento de dicho recurso para uno o más usos.
Actividades como la disposición de desechos y residuos peligrosos de origen
doméstico o industrial, disposición y vertimiento de materiales y lixiviados en la
actividad minera, vertimiento de aceites y combustibles durante la explotación de
hidrocarburos, pueden causar contaminación de diferente tipo e intensidad a los
recursos hidrogeológicos.

Definidos los efectos sobre los recursos del subsuelo, objetos del análisis en la Plancha 5-
09, así como las actividades y subactividades por aprovechamiento del subsuelo que los
causan, es posible establecer interrelaciones entre efectos y actividades mediante la
utilización en este caso de matrices causa – efecto, las cuales permiten determinar
diferentes grados de afectación en los recursos del subsuelo por una actividad dada, en el
territorio analizado.

51
En el caso concreto de la actividad minera, se utilizan diferentes métodos de acuerdo con
el tipo de minería de que se trate y de los métodos de explotación: aluvial, cielo abierto y
subterráneo. Teniendo en cuenta que los efectos gaoambientales varían de acuerdo con
tipo de minería y tipo de mineral, en la Tabla 5.1 se presenta la matriz causa-efecto para
el potencial desarrollo de la actividad minera en la plancha 5-09, con base en la Tabla 3.1
del Capítulo 3.

Tabla 5.1 Matriz causa-efecto para la potencial actividad minera en la plancha 5-09
SUBACTIVIDADES GENERALES PROPIAS DE LA MINERÍA
GRUPO MINERAL A EXPLOTAR

MOLIENDA DEL MINERAL


EXCAVACIÓN SUBTERRÁNEA

PROCESAMTO (PIRO,

DISPOSICIÓN DE ESTÉRILES,
CONCENT. QUÍMICA

HIDRO, COQUIZAC.)
CONCENT. FISICA

DESCARGA EFLUENTES
TRITURACIÓN Y
TIPO DE MINERÍA

COLAS, ESCORIAS
DESCAPOTE

ARRANQUE
VOLADURA

BANQUEO
BENEFICIO Y PROCESAMIENTO DE
MINERALES

Materiales de construcción X X X X X X X
Cielo Abierto

Minerales industriales X X X X X X X X X X
Cielo Abierto

Carbón. X X X X X X X X
Subterránea

Metales preciosos y metales base X X X X X X X X X


Subterránea

X X X X X X
Subterránea
Minerales preciosos

X X X X X X X
Cielo Abierto
Inducción de
* * * * *
GEOAMBIENTALES

movimientos en
SOBRE LA
masa
ESTABILIDAD DEL
EFECTOS

* * * * *
SUBSUELO Inducción de
procesos erosivos

SOBRE LOS
ACUÍFEROS
Contaminación del
agua subterránea * * * * *

Una vez identificada la interacción entre los efectos seleccionados y las actividades
mineras potenciales, se procede a calificar estas interacciones mediante la metodología
adaptada de Conesa, (1995), tal como se expuso en el Capítulo 3. Dicha metodología,
considera una serie de descriptores de afectación, entre los cuales es requisito mínimo el
de naturaleza, intensidad y extensión.

El objetivo final es categorizar los efectos de acuerdo con su potencial de afectación para
poder dar una mayor relevancia al análisis de la susceptibilidad del medio frente a ese
efecto. Para esto, y luego de que hayan sido calificadas todas las interrelaciones, es
necesario realizar un promedio, por cada efecto, de los valores encontrados en todas sus

52
interrelaciones; de acuerdo con los valores promedio obtenidos, se le asignará un nivel de
potencial de afectación bajo, medio, alto o muy alto de acuerdo con la metodología
expuesta en el Capítulo 3.

Para el caso de la Plancha 5-09, se utilizaron como criterios los mínimos requeridos:
naturaleza, intensidad y extensión. Con éstos se realizó la calificación del potencial de
afectación que tiene la actividad frente a cada uno de los efectos. Considerando que para
el caso de la Plancha 5-09 se tienen cinco tipos de actividad minera potencial, los
resultados de la evaluación del potencial de afectación, para cada uno de ellos de
acuerdo con la metodología descrita en el capitulo 3 se presenta en la tabla 5.2.

Tabla 5.2 Potencial de afectación de las actividades antrópicas por tipo de efecto
GRUPO MINERAL A TIPO DE MINERÍA EFECTOS GEOAMBIENTALES POTENCIAL DE
EXPLOTAR AFECTACIÓN
Metales preciosos y Minería subterránea Inducción de movimientos en masa Medio (23)
metales base Inducción de procesos erosivos Medio (22)
Contaminación de acuíferos Alto (26)
Minerales preciosos Minería subterránea Inducción de movimientos en masa Alto (27)
(esmeraldas) Inducción de procesos erosivos Alto (34)
Contaminación de acuíferos Bajo (12)
Minerales preciosos Minería cielo abierto Inducción de movimientos en masa Alto (27)
(esmeraldas) Inducción de procesos erosivos Alto (30)
Contaminación de Acuíferos Bajo (10)
Materiales de Minería cielo abierto Inducción de movimientos en masa Medio (21)
construcción y Inducción de procesos erosivos Alto (31)
minerales industriales Contaminación de Acuíferos Baja (6)
Minerales energéticos Minería subterránea Inducción de movimientos en masa Medio (19)
Inducción de procesos erosivos Medio (22)
Contaminación de acuíferos Alto (26)

53
CAPÍTULO 6
EDUARDO CHILITO
ÉDGAR CARRILLO
ANDRÉS RUIZ
JOHN JAIRO ENCINALES
ROSALBINA PÉREZ
MARTHA ROJAS
AMÍLCAR VALENCIA

ANÁLISIS DE LA SUSCEPTIBILIDAD DEL MEDIO

Una vez evaluadas las actividades antrópicas y los efectos que pueden ocasionar sobre el
medio, es necesario determinar la fragilidad de éste para asimilar los cambios inducidos
por las intervenciones humanas. Esta cualidad territorial se define como la susceptibilidad
del medio al deterioro cuando se desarrolla una actividad antrópica sobre él; para su
análisis se determinó la susceptibilidad intrínseca, es decir, aquella que está determinada
por características propias del medio.

Evaluar la susceptibilidad del medio frente a los tres efectos definidos (inducción de
procesos erosivos, inducción de movimientos en masa y contaminación de acuíferos)
implica caracterizar todos los factores físicos de relevancia presentes en un área
determinada en el momento en que la actividad antrópica es propuesta. En este caso,
relevancia significa todos aquellos aspectos del medio que definen la susceptibilidad y
sobre los que la actividad propuesta puede influir.

Bajo este enfoque, el análisis de susceptibilidad se constituye en una parte fundamental


para predecir los efectos potenciales que una determinada actividad antrópica puede
ocasionar sobre el medio. A continuación se presenta la metodología seguida para
evaluar la susceptibilidad del medio a los tres procesos mencionados.

6.1 SUSCEPTIBILIDAD A LA EROSIÓN

Erosión es el proceso físico de modificación y destrucción del relieve de la corteza


terrestre debido a la acción de agentes externos también llamados exógenos, que pueden
darse tanto por causas naturales como por la acción directa del hombre. Estas
modificaciones vienen definidas esencialmente por la acción de desgaste y posterior
retirada del material rocoso y por la acumulación final de los materiales transportados.

Según el anterior concepto, susceptibilidad a la erosión se puede definir como la


propensión del suelo a ser afectado por agentes externos cuando éste ha sido expuesto
por alguna actividad antrópica. La susceptibilidad indica entonces la facilidad o la
resistencia del suelo a ser erosionado por los agentes exógenos.

54
6.1.1 Metodología

Para determinar la susceptibilidad del medio a la erosión se pueden emplear diferentes


metodologías que utilizan información básica del área en estudio tales como relieve,
erosividad de la lluvia y erodabilidad del suelo, en el caso de USLE (Wischmeir, W, 1976)
y características hídricas del suelo (modelos MUSLE y WEPP (Flanagan, et al 1995)).

La elección y la aplicación del modelo depende de los objetivos del estudio, del nivel de
detalle deseado y del tipo y cantidad de información disponible. De acuerdo con lo anterior
y dada la restricción de la información, para determinar la susceptibilidad del medio a la
erosión en la Plancha 5-09 se diseñó una metodología que solo retoma algunas de las
variables utilizadas por los modelos antes mencionados.

Las variables utilizadas son: pendientes (inclinación y forma), unidades de roca, cobertura
vegetal y precipitación, representada esta última en el mapa de isoyetas; una vez
definidas las variables claves en el análisis, a cada una de ellas se le asignó un peso que
busca resaltar la importancia relativa de cada variable respecto a las otras (Tabla 6.1).
Además, para cada variable se establecieron rangos o categorías con sus respectivos
ponderadores. El tratamiento específico que se le dio a cada variable se presenta en la
aplicación de la metodología.

Tabla 6.1. Ponderación de las variables para la susceptibilidad.


Variable Porcentaje (%)
Inclinación de la pendiente (PINPE) 30
Forma de la pendiente (PFORPE) 10
Unidades de roca (PUNIROC) 20
Precipitación (PPREC) 15
Cobertura y uso del suelo (PCOB) 25

Finalmente, el mapa de susceptibilidad del medio a la erosión se obtiene a partir de la


superposición de las diferentes variables involucradas en el análisis mediante el uso de
los sistemas de información geográfica SIG; previo a la superposición de los mapas se
establecieron cuatro (4) niveles de susceptibilidad: baja, media, alta y muy alta.

6.1.2 Aplicación de la metodología en la Plancha 5-09

A continuación se presenta la aplicación de la metodología propuesta para el caso


concreto de la Plancha 5-09.

6.1.2.1 Pendientes

Para considerar la variable pendiente en el análisis de susceptibilidad a la erosión fue


necesario elaborar un Modelo Digital de Terreno, MDT, para lo cual se utilizó cartografía
básica, a escala 1:500.000, publicada por el Instituto Geográfico Agustín Codazzi, IGAC.
Antes de confeccionar el modelo fue necesario preparar la información para su utilización

55
en procesos SIG. La generación del MDT se realizó a partir de las curvas de nivel y
mediante una interpolación lineal. Una vez elaborado el MDT, se generaron los mapas de
inclinación y forma de las pendientes.

6.1.2.1.1 Inclinación de las pendientes

La inclinación de la pendiente de un terreno se expresa como el grado de declive o


relación entre las distancias vertical y horizontal de dos puntos en términos porcentuales.
Varios pasos fueron necesarios para crear el mapa de pendientes. El MDT fue filtrado
inicialmente en las direcciones X y Y; filtros simples fueron usados en la creación de los
mapas direccionales. Una vez creados los mapas direccionales DX67 y DY67, se genera
el mapa de pendientes mediante la siguiente ecuación:

Penbu= raddeg(atan((hyp(DX67,DY67)/20))

Donde: raddeg es una función que representa el tamaño del pixel en metros.

Como resultado se obtuvo el mapa de pendientes; el cual con el criterio de dominio de


rango fue clasificado en un mapa de inclinación de pendientes; en él se establecen rangos
de pendientes que permiten realizar el análisis de susceptibilidad a procesos erosivos, ya
que este fenómeno muchas veces ocurre en ángulos específicos y en ciertos puntos
donde el poder de retención que maneja el terreno en un lugar son excedidos por la
fuerza de gravedad, bajo la influencia de otros mecanismos de disparo, tales como la
lluvia o los sismos.

Los rangos se les asignan categorías, las cuales fueron seleccionadas con base en la
experiencia de estudios anteriores; éstas a su vez, con el criterio de los profesionales,
fueron calificadas con un peso de acuerdo con su potencial incidencia en la generación de
procesos erosivos. Las categorías y el peso asignado a cada categoría se presentan en la
Tabla 6.2 y el resultado en el mapa de inclinación de las pendientes.

Tabla 6.2 Peso asignado a la inclinación de las pendientes.


Rangos de Categoría Peso
pendiente
0-5° Planas a leves 1
5°-10° Leves 2
10°-20° Levemente empinada 2
20°-30° Moderadas 3
30°-45° Empinadas 4
>45° Escarpadas 5

56
6.1.2.1.2 Forma de las pendientes

La definición de la forma de las pendientes permite demarcar las partes cóncavas, convexas
o rectas del terreno, lo cual es indicativo de la propensión a la erosión y movimientos en
masa. En el mapa resultado se muestran valores negativos que indican pendientes convexas
y valores positivos que indican pendientes cóncavas. Los valores cercanos a 0 representan
pendientes rectas o áreas planas.

Con base en el criterio de los profesionales, se estableció una calificación del peso de esta
variable frente a la Categoría Peso susceptibilidad a la erosión tal
como se muestra en la Tabla 6.3 y cuyo resultado se
Cóncavas 1
presenta en el mapa de forma de las pendientes.
Convexas 5
Tabla Rectas 3 6.3 Peso asignado a la forma
de las pendientes.

6.1.2.2 Unidades de roca

Las unidades de roca se definieron a partir del mapa litológico de la plancha 5-09 (Atlas
Geológico Digital de Colombia) a escala 1:500.000, elaborado por INGEOMINAS.

El mapa litológico fue depurado y ajustado en su formato para facilitar los análisis SIG de
acuerdo con los objetivos específicos del estudio. Una vez preparada la información,
utilizando criterios geomecánicos, se agruparon las unidades en 15 categorías a fin de
asignarle un coeficiente de ponderación a cada tipo de roca.

14 - Pzia: Anfibolitas, esquistos, cuarcitas y mármoles (Cm) -AECM


8 - Pgt: Arcillolitas con intercalaciones de areniscas arcillosas (Clco) – CL/S
8 - Kpgt: Arcillolitas y limolitas con carbón (localmente areniscas) – (Clce) – CL/SL
5 - Ngc: Areniscas con intercalaciones de arcillolitas (Clce) – S/CL
5 - Pzsm: Areniscas cuarzosas con intercalaciones de limolitas y arcillolitas (Clce) – S/SLCL
5 - Kit: Areniscas cuarzosas con intercalaciones de lodolitas y calizas (Clce) – S/M
5 - Jc: Areniscas y lodolitas con intercalaciones de conglomerados (Clce) – SM/Co
5 - Ksm: Areniscas, lodolitas silíceas y lutitas - bancos de calizas (Clce) - SML
10 - Kim: Calizas y lodolitas calcáreas, conglomerados y areniscas (Cm/Clce) – LLCoS.
14 - Trm: Calizas, localmente con metamorfismo de contacto (Cm) - L
11 - Ksv: Complejos ultramáficos (Cm) - U
5 - Pgc: Conglomerados, areniscas cuarzosas y arcillolitas (Clce) - CoSC
1 - Qal: Depósitos aluviales, lacustres y glaciares (Clco/Clin) - CoA
2 - Qc: Depósitos de ladera, abanicos aluviales - incluye flujos de lodo (Clin) - ACoLo
9 - Try: Dioritas, cuarzodioritas y granodioritas (Cm) - G
12 - Kiz: Filitas con intercalaciones de arenáceas calcáreas y chert (Cf/Clce) – F/SL
9 - Kia: Gabros (Cm) - U
9 - Ksg: Granitos y granodioritas (Cm) - G
9 - Jg: Granodioritas, granitos y granófiros (Cm) - G
11 - MPtg: Granulitas, migmatitas, anfibolitas y neises biotíticos (Cf) - GAN
13 - Jp: Lavas y piroclastitas andesíticas con intercalaciones de areniscas y arcillolitas (Clin) -
SuSC

57
13 - Ja: Lavas y piroclastitas riolíticas y riodacitas (Clin) – SuG
10 - Kst: Lodolitas con intercalaciones de calizas (Clco) - MC
10 - Jm: Lodolitas y areniscas con intercalaciones de calizas (Clco) – MS/L
10 - Pzim: Lutitas, limolitas, calizas y areniscas calcáreas (Clco) - MSLS
7 - Pziev: Metarenisca, metalimolitas, pizarras, mármoles, filitas y cuarcitas (Clce) - SPFC
9 - Ngo: Monzodioritas, dioritas piroxénicas y hornbléndicas (Cm) - G
9 - Pgg: Monzodioritas, monzonitas, sienitas y gabros (Cm) – GU
9 - Pzsis: Ortoneises graníticos, neises hornbléndicos y migmatitas (Cm) - G
11 - Kiw: Peridotitas y serpentinitas (Cm/Cf)) - U
4 - NgQp: Piroclastos, localmente con flujos de lodo y depósitos aluviales (Clin) - SuCo
6 - Ngf: Pórfidos andesíticos y dacíticos (Cm) - G
3 - Qtz: Terrazas aluviales y lacustres (Clin) - Co
9 - Pgo: Tonalitas a granodioritas (Cm) – G
15-Trm: Calizas localmente con metamorfismo de contacto (Clco) – MS/L

El mayor peso se asignó a las unidades de roca con más alto grado de meteorización,
descomposición e inconsolidadas, o que presentan una composición heterogénea; los
depósitos coluviales (Qc), piroclastos de caída (Qpc) y materiales cuaternarios aluviales,
tienen entonces los mayores pesos relativos en la escala de 1 a 5. Las unidades
agrupadas y los valores de los pesos asignados a cada unidad se presentan en la Tabla
6.4 y los resultados de la agrupación en el mapa de unidades roca.

Tabla 6.4 Unidades de roca y peso asignado.


CATEGORÍAS DESCRIPCIÓN SIMBOLO PESO
1 Qal UA 2
2 Qc UB 3
3 Qtz UC 3
4 NgQp UD 4
5 Ngc, Pzsm, Kit, Jc, Ksm, Pgc UE 3
6 Ngf UF 1
7 Pziev UG 2
8 Pgt, Kpgt. UH 4
9 Try, Kia, Ksg, Jg, Ngo, Pgg, Pzsis, Pgo UI 2
10 Kim, Kst, Jm, Pzim UJ 4
11 Ksv, MPtg, Ki UK 1
12 Kiz UL 3
13 Jp, Ja UM 3
14 Pzia UN 3
15 Trm UO 4

6.1.2.3 Precipitación

El agua de la lluvia provoca erosión del subsuelo a través del impacto de las gotas sobre
su superficie y por acción de la escorrentía superficial responsable del transporte de las
partículas disgregadas. Su acción erosiva depende de la distribución pluviométrica y de su
intensidad.

58
Para considerar la precipitación en el análisis de susceptibilidad a la erosión, se construyó
un mapa de isoyetas medias anuales. Inicialmente se realizó un inventario de estaciones
y se obtuvo un listado preliminar de 647 estaciones de observación ubicadas dentro de los
334 municipios que conforman la zona de estudio. Estas estaciones fueron sometidas a
una preselección de acuerdo con la fecha de su instalación, cantidad de datos faltantes en
la serie y longitud del período de registro, para lo cual se procuró que para todas ellas
éste período fuese mayor de 15 años. De las estaciones preseleccionadas se eligieron las
que presentaron los registros más completos en un total de 249 estaciones para el
análisis de precipitación.

Con el apoyo de planos hipsométricos del área, es decir, aquellos que muestran las
curvas de nivel que definen los cambios de elevación del territorio, fue posible establecer
un patrón de distribución territorial de la precipitación media anual, el cual se representa
en el mapa de isoyetas y de donde, mediante el establecimiento de rangos, se
establecieron cinco categorías de precipitación tal como se indica en la Tabla 6.5 y se
presenta en el mapa de isoyetas clasificadas.

El análisis de este plano permite observar la forma como se distribuye la precipitación


anual en el área comprendida por la Plancha 5-09; los valores más bajos de precipitación
se observan en los departamentos de Cundinamarca y Boyacá con valores cercanos a
los 600 mm; entre las cordilleras que enmarcan la cuenca del río Magdalena se
presentan, para la zona de estudio, precipitaciones entre los 1.000 y 2.500 mm,
aproximadamente. Las precipitaciones máximas se registran al suroriente del área, sobre
la Cordillera Oriental y en la zona de Caldas, con valores que superan los 6.000 mm. De
lo anteriormente consignado, es claro que la precipitación anual tiene una gran variación
en el área estudiada y que pasa desde valores tan bajos como los 600 mm anuales en
parte de los departamentos de Cundinamarca y Boyacá, a más de 6.000 mm hacia las
estribaciones orientales de la Cordillera Central.

Tabla 6.5. Peso asignado a los rangos de precipitación.


CATEGORÍAS DE RANGO PESO
PRECIPITACIÓN
Muy baja <1000 1
Baja 1001 - 2000 2
Media 2001 - 3000 3
Alta 3001 – 4.000 4
Muy alta >4.000 5

6.1.2.4 Cobertura y uso del suelo

La cobertura vegetal es protección natural de un terreno contra la erosión y un importante


atenuante contra los movimientos en masa. Se destacan tres funciones de la cobertura
vegetal directamente relacionadas con la erosión y los movimientos en masa: protección
contra el impacto directo de las gotas de lluvia, aumento de la infiltración por la producción
de poros en suelo por las raíces y dispersión de la energía del agua de escurrimiento.

59
El mapa de cobertura y uso del suelo se obtuvo a partir de la interpretación visual de la
imagen de satélite LandSat TM de 1988. Como resultado de la interpretación se
identificaron 10 tipos de cobertura. A cada tipo de cobertura se le asignó un peso, en
donde el mayor peso corresponde a aquellas unidades que presentan mínima cobertura
vegetal (zonas eriales) y el menor peso a aquellas coberturas que ejercen un mejor efecto
de protección sobre el suelo. La descripción y los pesos asignados a cada tipo de
cobertura se presentan en la Tabla 6.6 y se muestran en el mapa de cobertura y uso del
suelo.

Tabla 6.6. Tipos de cobertura vegetal y peso asignado a cada cobertura.


TIPO DE
DESCRIPCIÓN PESO
COBERTURA
Bosque primario Este tipo de cobertura se incluyó aquellos bosques naturales intervenidos y
intervenido fuertemente intervenidos pero que aún conservan árboles de gran tamaño. 1
El bosque secundario comprende áreas arboladas de crecimiento secundario
Bosque
secundario
y compuestos por árboles de tamaño relativamente grande, muchos de los 2
cuales no pierden sus hojas durante la época seca.
Superficies y volúmenes de agua estática o en movimiento lento, sin
Cuerpos de agua vegetación o con vegetación, que reposan sobre la superficie terrestre. 1
Agrupa todos aquellos elementos inherentes a las actividades realizadas por
Cultivos el hombre para la producción de alimentos, principalmente. 4
Comprende las construcciones o edificaciones hechas por el hombre para su
servicio y beneficio en las que comúnmente usa materiales como el hierro,
Edificaciones cemento, ladrillo, madera etc. y presentan un arreglo geométrico
3
característico.
Este tipo de cobertura se caracteriza por presentar áreas casi totalmente
desprovistas de vegetación (salvo algunas manchas muy localizadas) donde
Eriales el suelo orgánico (horizonte A y B) ha sido removido casi por completo y en la 5
superficie se encuentra aflorando el horizonte C del perfil, como cobertura
dominante.
Misceláneos de Dentro de esta categoría se reunieron todos los cultivos y pastos que no
presentaban una cobertura significativa ya sea de cultivos o pastos y que por
cultivos y pastos lo tanto su representación cartográfica como unidades puras se dificulta.
3
Misceláneos de Integra todos los cultivos y rastrojos que no presentaban una cobertura
cultivos y significativa ya sea de cultivos o rastrojos y que por lo tanto su representación 3
rastrojos cartográfica como unidades puras se dificulta.
Vegetación de carácter herbáceo no leñosa considerada dominante en
términos de porcentaje de ocupación de la superficie terrestre, con relación a
Pastos otras coberturas vegetales y que están dedicados, principalmente, al 2
sostenimiento de animales domésticos, como bovinos y equinos.
Vegetación de páramo corresponde a tipos de vegetación arbustiva que
Vegetación de
páramo
generalmente presenta ramificaciones desde la base del tallo, cerca de la 2
superficie del suelo y una altura casi siempre inferior a 4 metros.

6.1.3 Mapa de susceptibilidad a la erosión

El mapa de susceptibilidad a la erosión se obtuvo a partir de la siguiente expresión:

SE= PINPE*0,30 PFORPE*0,10 + PUNIROC*0,20 + PPREC*0,15 + PCOB, 0,25.

60
El mapa fue clasificado en cuatro (4) categorías de susceptibilidad: baja, media, alta y
muy alta. La categoría muy alta indica áreas que por su origen litológico, condiciones
morfodinámicas, precipitación y cobertura, presentan poca resistencia a sufrir procesos
erosivos cuando son expuestas por alguna actividad antrópica. La categoría de
sensibilidad baja señala las áreas que por sus características intrínsecas presentan fuerte
resistencia a los procesos erosivos cuando son expuestas por alguna actividad antrópica.

6.2 SUSCEPTIBILIDAD A MOVIMIENTOS EN MASA

Los movimientos en masa pueden considerarse como uno de los fenómenos geológicos
más recurrentes que afectan el área comprendida por la Plancha 5-09. La evaluación de
la susceptibilidad a este tipo de fenómenos se ha efectuado considerando la siguiente
tipología de movimientos: deslizamientos y flujos del tipo solifluxión (coladas de barro y
aludes de derrubio).

Para la obtención de este tipo de mapas es recomendable considerar todos los aspectos
que puedan relacionarse con el medio y que tengan un indudable protagonismo. Sin
embargo, en el presente trabajo se eligió un número determinado, pero representativo, de
ellos a saber: unidades de roca, geomorfología, distancia a fallas, relieve interno y
cobertura y uso del suelo.

6.2.1 Metodología

Para el análisis de susceptibilidad del medio a los movimientos en masa se ha seguido la


metodología propuesta por Carrillo (2001), la cual parte de la consideración de los rasgos
básicos del territorio en relación con los caracteres climáticos, que en conjunto permiten
esbozar un esquema referido a los procesos geomorfológicos actuantes.

Las variables que utiliza esta metodología son las siguientes: unidades de roca,
geomorfología, distancia a fallas, relieve interno,y cobertura y usos del suelo. Para
calificar la susceptibilidad del terreno, a cada variable se le asignó un porcentaje tal como
se indica en la Tabla 6.7.

Tabla 6.7. Ponderación de las variables para la susceptibilidad.


Variable Porcentaje (%)
Unidades de roca 27
Geomorfología 22
Distancia a fallas (tectónica) 17
Relieve interno 22
Cobertura y uso del suelo 12

6.2.1.1 Unidades de roca

Para considerar este factor en el análisis de la susceptibilidad del medio a los


movimientos en masa, se utilizó el mapa de unidades de roca descrito en la evaluación de
la susceptibilidad del medio a la erosión.

61
6.2.1.2 Geomorfología

El mapa geomorfológico se generó a partir de la interpretación visual de la imagen de


satélite LandSat TM del año de 1988 y fue calibrado con visitas rápidas de campo, el
mapa geológico elaborado por INGEOMINAS, (INGEOMINAS, 1997) y una serie de
documentos sobre trabajos geomorfológicos de diversa índole realizados en el área de
estudio (Cortéz & Malagón, 1984; Zink, 1996; IGAC, 1985). Los resultados y los pesos
asignados a las regiones geomorfológicas se presentan en la Tabla 6.8 y en el mapa
geomorfológico.

Tabla 6.8. Categorías geomorfológicas y pesos asignados.


PROVINCIAS REGIONES PESO
GEOESTRUCTURA
GEOMORFOLÓGICAS GEOMORFOLÓGICAS
Morfología heredada de
2
glaciar
Zona montañosa con
4
control estructural
MONTAÑOSO
Zona montañosa
PIEDEMONTE 3
denudacional
Zona de piedemonte 5
CORDILLERA

Región montañosa apretada 4


Valles en sinclinal 4
Valles con cañones
4
VALLES profundos
INTRAMONTANOS Altillanura degradada 4
ALTIPLANICIES Altiplano colinado 3
Sabana 2
Abanicos aluviales 2
FLUVIAL Depósitos fluvioglaciares 3
Colinas deposicionales 3
Planicies aluviales 2
VALLE ALUVIAL ALUVIAL
Valles colinados bajos 2

a. Geoestructura

Para el área cubierta por la Plancha 5-09 se presentan dos grandes geoestructuras:
Cordillera (representada por el tramo central de la Cordillera Oriental y el borde oriental de
la Cordillera Central) y valle aluvial (Valle del Río Magdalena).

b. Provincias geomorfológicas

Se identificaron las siguientes provincias:

• Montañosa
• Piedemonte

62
• Valles intramontanos
• Altiplanicie
• Fluvial

c. Regiones geomorfológicas

De acuerdo con la escala de trabajo definida para la presente investigación (1:500.000), la


zonificación geomorfológica de la Plancha 5-09 se basa en la delimitación de regiones
geomorfológicas como la mínima subdivisión posible que permite el análisis y la
descripción de las diferentes porciones homogéneas del territorio. La revisión de la
información geológica existente de la Plancha 5-09, la imagen de satélite LandSat TM de
la zona y el reconocimiento de campo, permitieron determinar las principales regiones
geomorfológicas del área de estudio. En total se identificaron las siguientes regiones
geomorfológicas.

• Morfología heredada de glaciar

La morfología heredada de glaciar corresponde a geoformas que evidencian una actividad


de tipo glaciar por encima de los 3.000 msnm; su morfología típica es suave y ondulada
con vertientes alargadas; los valles son profundos en forma de U con fuertes pendientes
en sus flancos (>60º). Se ubica principalmente en el macizo de Sumapaz, en las zonas de
páramo que rodean al Altiplano Cundiboyacense y en la región de Chingaza.

Esta unidad se considera como relativamente estable desde el punto de vista de los
procesos morfogenéticos actuales y como buena almacenadora de agua. Las principales
características morfológicas de estos páramos son de origen erosional e incluyen circos,
artesas, ollas glaciares y morrenas.

• Zona montañosa con control estructural

Las zonas montañosas con control estructural, en el caso de la Cordillera Oriental, se


trata de superposición de bancos de roca sedimentaria dispuestos alternativamente hasta
alcanzar espesores de más de 250 m. En la Cordillera Central, esta unidad corresponde a
los conjuntos ígneos y metamórficos de edad jurásica poco alterados y compuestos por
rocas duras, que generan relieves fuertes, y con las unidades arenosas del Cretácico. Se
localizan principalmente al oeste y centro de Cundinamarca, en la parte occidental del
Macizo del Sumapaz, en los Cerros Orientales que bordean la Sabana de Bogotá, en las
estribaciones de los Farallones de Medina al oriente de Cundinamarca y en las partes
altas de la cuenca del río Negro oriental y Santander y Caldas.

• Zona montañosa denudacional

La zona montañosa denudacional se define como una geoforma positiva de morfología


fuerte que ha sido expuesta a la acción de múltiples procesos erosivos. Esta unidad está
ubicada en toda la barrera oriental de la Cordillera Central y conforman la vertiente oeste
del Valle del Magdalena.

63
• Altillanura degradada

La altillanura degradada representa geoformas correspondientes a una antigua llanura


agradacional constituida por estratos horizontales de sedimentos y materiales volcánicos
que fueron sometidos a una intensa erosión fluvial que transformó su morfología inicial al
dejar expuestas una serie de terrazas o "mesas". Están ubicadas en la parte central y
norte del área cubierta por la Plancha 5-09, y abarcan parte de los departamentos de
Cundinamarca, Boyacá y Santander, y al sur, en jurisdicción de los municipios de
Anapoima, El Colegio y Viotá (Cundinamarca).

• Zona de piedemonte

La zona de piedemonte es una geoforma resultado de la acumulación de materiales


producto de la erosión o el desplazamiento gravitacional de zonas ligeramente más
elevadas. Esta unidad está ubicada en la parte inferior de los escarpes. El cambio
geomorfológico con respecto a estos últimos es notorio y sus inclinaciones no superan el
50%. Es frecuente la presencia de depósitos de vertiente que corresponden a las zonas
de acumulación de fenómenos de remoción en masa generados en los escarpes.

La litología cambia respecto de la encontrada en la unidad montañosa con control


estructural. En esta última, las litologías duras (areniscas, rocas ígneas y metamórficas
frescas) imprimen al terreno la topografía abrupta por la competencia del material,
mientras que en los pie de escarpes las lutitas hacen que la topografía sea irregular y las
pendientes sean relativamente moderadas.

• Región montañosa apretada

La región montañosa apretada define zonas montañosas alineadas y estrechas que se


ubican en el Departamento de Cundinamarca en una franja angosta entre los municipios
de Anolaima, Cachipay, Quipile, Vianí, Bituima, Chaguaní, Guayabal de Síquima, Albán y
se extiende hacia el occidente hasta Guataquí y Nariño. La topografía de este sector se
caracteriza por la presencia numerosa de ‘cuchillas’ con relieves abruptos, vertientes
largas e irregulares, silletas y numerosos procesos de remoción en masa.

• Valles en sinclinal

Los valles en sinclinal son geoformas controladas principalmente por estructuras


sinclinales, lo que las diferencia de los valles amplios, generados principalmente por la
actividad fluvial. Se destaca el Sinclinal de Guaduas que controla el río Negro occidental,
con una dirección predominante N-S.

• Valles con cañones profundos

Los valles con cañones profundos, como su nombre lo indica, son valles estrechos,
alargados, profundos, con una red de drenaje de tipo subparalelo, de media densidad. Se
ubican en las regiones montañosas donde las corrientes fluviales tienden a unirse con sus

64
tributarios y formar el río principal, como en la zona al occidente del piedemonte de la
Cordillera Oriental, al sureste de Cundinamarca y en el cañón del río Chicamocha.

• Altiplano colinado

Altiplano colinado corresponde a una franja alargada con dirección aproximada suroeste-
noreste que hace parte del llamado Altiplano Cundiboyacense y su característica principal
radica en la intercalación de zonas planas de corta extensión con algunos cerros bajos
que corresponden a estructuras sinclinales y anticlinales. Está ubicado a una altura que
oscila entre los 2.600 y los 3.200 msnm.

• Sabana

La sabana son geoformas caracterizadas por tener una superficie relativamente horizontal
a subhorizontal que forma una altiplanicie nítida y fácil delimitación debido a que los
patrones de cultivo son contrastantes y resaltan ampliamente sobre las rocas adyacentes
del Terciario y Cretácico. En esta geoforma se ubica la ciudad de Bogotá. La unidad se ha
desarrollado, en su gran mayoría, sobre sedimentos lacustres. Además, acoge parte de la
cuenca alta del río Bogotá, el cual la recorre en sentido aproximado norte-sur.

• Abanicos aluviales

Abanicos aluviales son geoforma semicircular con su parte superior más estrecha y
empinada. Se originan allí donde las corrientes irregulares, con grandes fluctuaciones de
caudal y abundante carga de sedimentos, emergen de un territorio elevado hacia un
sector más bajo y abierto, con un marcado cambio del gradiente que produce la
deposición diferencial de su carga de sedimentos por la disminución repentina del poder
de transporte.

• Depósitos fluvioglaciares

Los depósitos fluvioglaciares son depósitos grandes ubicados sobre el Sinclinal de


Fusagasugá (sur de Cundinamarca), en las estribaciones del páramo de Sumapaz con
fuerte disección por numerosas corrientes; su forma general es alargada hacia el
suroeste. Se presentan a manera de niveles escalonados (terrazas), donde el nivel más
antiguo es el que se encuentra a mayor altura y el que mas ha sido sometido a la
disección fluvial.

• Colinas deposicionales

Las colinas deposicionales son geoformas correspondientes a una antigua llanura


agradacional constituida por estratos horizontales de sedimentos y materiales volcánicos
que fueron sometidos a una intensa erosión fluvial que transformó su morfología inicial y
dejó una serie de colinas expuestas.

65
• Planicies aluviales

Planicies aluviales son geoformas de gran extensión relacionadas con la actividad fluvial
del río Magdalena y grandes ríos de la zona de piedemonte, planas o relativamente
planas y que concentran la escorrentía proveniente de las zonas cordilleranas. Están
determinadas por los aportes longitudinales de sedimentos acarreados por el río principal,
los cuales pueden encontrarse dispuestos en un solo plano o en varios niveles de terraza,
cuyos escarpes y taludes siguen una dirección más o menos paralela a la del valle aluvial.

• Valles colinados bajos

Los valles colinados bajos son geoformas que corresponden a valles interiores que a su
vez contiene pequeñas colinas dentro de ellos.

6.2.1.3 Distancia a fallas (tectónica)

Para determinar la distancia a fallas se utilizó el mapa de fallas de la Plancha 5-09;


mediante el uso del filtro DISTACE del programa ILWIS 3.0 se calculó la distancia y se
generó un mapa de pixeles, el cual fue reclasificado en rangos de distancia y a cada
rango se le asignó un peso, tal como se indica en la Tabla 6.9.

Este parámetro parte del supuesto de que las rocas más cercanas a las fallas presentan
un mayor fracturamiento y menor resistencia al corte. De acuerdo con esto se asignó
pesos, como se muestra en la Tabla 6.9.

Tabla 6.9. Pesos asignados de acuerdo con la distancia a fallas.


DISTANCIA A FALLAS (m) PESO
0 – 500 5
501 – 1.000 4
1.001 – 6.000 3
6.001 – 15.000 2
> 15.000 1

6.2.1.4 Relieve interno

El relieve interno hace referencia a las máximas diferencias de altura entre los lechos de
las corrientes y las divisorias de aguas, y se expresa como la máxima diferencia de altura
del terreno por unidad de área (km2). El mapa de relieve interno se generó a partir del
Modelo Digital de Terreno, MDT, y se utilizo para ello el filtro Rank Order, el cual asigna
valores a los pixeles, generando un mapa de píxeles. A partir del mapa de pixeles se
estableció un rango de valores para el grado de relieve interno, tal como se indica en la
Tabla 6.10.

66
Tabla 6.10. Pesos asignados de acuerdo con el relieve interno.
GRADO DE RELIEVE INTERNO (m/km2) PESO
> 600 5
225 – 600 4
75 – 225 3
50 – 75 2
< 50 1

6.3 SUSCEPTIBILIDAD A LA CONTAMINACIÓN DE LAS AGUAS SUBTERRÁNEAS

El agua subterránea es considerada frecuentemente un recurso renovable, pero


recientemente las circunstancias indican que es un recurso no renovable en la cantidad y
la calidad requerida por las necesidades urbano industriales. La contaminación y la
explotación excesiva del recurso limitan cada vez más su utilización en los diferentes usos
que le da el hombre. Algunas veces la contaminación del agua subterránea ocurre en
forma natural, pero usualmente es el resultado de las actividades humanas en la
superficie de la Tierra.

El análisis de susceptibilidad a la contaminación tiene como objetivo establecer en qué


zonas el recurso hídrico subterráneo es vulnerable a la contaminación, ya sea por
procesos geológicos o actividades humanas. Los mapas de vulnerabilidad de los
acuíferos a la contaminación permiten identificar las unidades acuíferas que por sus
características de naturales podrían ser susceptibles de ser contaminadas en diferente
grado durante el desarrollo de una actividad antrópica dada.

La estimación de la vulnerabilidad es un proceso secuencial que parte de la


caracterización de los sistemas acuíferos relevantes, de acuerdo con sus características
hidrogeológicas. La vulnerabilidad a la contaminación es función de la resistencia de la
zona no saturada a la penetración de contaminantes y a su capacidad de asimilación o
reducción de dichos agentes (Espinoza & Ramirez, sitio web HidroRed). Dicha
resistencia depende del grado de confinamiento, la profundidad del nivel del agua dentro
del medio poroso permeable, así como la humedad y permeabilidad vertical en la zona no
saturada. La capacidad de atenuación depende de los procesos fisicoquímicos que se
verifican en la zona no saturada de dispersión, dilución, decaimiento, hidrólisis, adsorción,
entre otros.

De acuerdo con lo anterior, la vulnerabilidad a la contaminación de un acuífero define la


susceptibilidad natural de un acuífero en base a sus características hidrogeológicas
intrínsecas, para ser contaminado por elementos o sustancias provenientes de medios
externos a él.

6.3.1 Metodología

Existen diversas técnicas de valoración de la vulnerabilidad de los acuíferos, y la elección


de la técnica está en función de las necesidades y la disponibilidad de información en

67
cada caso. Para el caso de la Plancha 5-09 se utilizó la metodología GOD por ser de las
más utilizadas y reconocidas, especialmente cuando no existe mucha disponibilidad de
información (Espinoza & Ramirez, sitio web HidroRed)..

El método de evaluación de la vulnerabilidad GOD (Groundwater occurance, Overlyin


lithology and Depht to groundwater), se fundamenta en la valoración de tres de los
principales parámetros que condicionan la vulnerabilidad de un acuífero frente a la
contaminación en general.

El método define escalas numéricas que califican cuantitativamente cada parámetro


(Groundwater, Depth y Overall), de acuerdo con su contribución en la protección de las
aguas subterráneas. En estas escalas, los valores mas bajos, representan mínima
susceptibilidad de ingreso del contaminante al acuífero y los máximos, mayor
susceptibilidad de ingreso de sustancias contaminantes al mismo (Figura 6.1). Los
intervalos están relacionados con las características hidrogeológicas de cada tipo de
acuífero en cuanto a su exposición, permeabilidad y profundidad.

6.3.1.1 Parámetro G (Groundwater)

El Parámetro G describe el tipo de acuífero de acuerdo con sus características


hidrogeológicas y cuyo índice puede variar entre 0 cuando no existe acuífero y 1 cuando
el acuífero es de tipo libre, y los valores intermedios corresponden a acuíferos artesianos
o surgentes, confinados y semiconfinados.

6.3.1.2 Parámetro O (Overall)

El parámetro O corresponde a la caracterización de la zona no saturada del acuífero. Su


evaluación considera dos características: el grado de fracturamiento de la roca y las
características litológicas de la misma, que definen su porosidad, permeabilidad,
contenido o retención específica de humedad de la zona no saturada en acuíferos libres o
del estrato confinante, en acuíferos confinados. Los rangos de valores asignados a este
índice determinan la permeabilidad en la zona no saturada o el estrato confinante según
el material predominante y varían entre 0,41 para materiales impermeables y 1 para
materiales permeables.

6.3.1.3 Parámetro D (Depth)

El parámetro D se refiere a la profundidad del nivel freático en acuíferos libres o a la


profundidad a la que se encuentra el techo del acuífero, en los confinados. Este
parámetro varía entre 0,4 y 1, donde el menor valor corresponde a la mayor profundidad a
la cual se encuentra el nivel freático lo que lo hace menos vulnerable y 1 la menor
profundidad de mismo nivel donde es máxima la vulnerabilidad a la contaminación.

68
Figura 6.1. Sistema GOD para la evaluación del índice de vulnerabilidad del acuífero.

69
Los dos primeros parámetros, G y O, pueden considerarse como estables en el tiempo,
mientras que el tercero, para el caso de los acuíferos libres, está sujeto a la oscilación
natural de la tabla de agua y al régimen de explotación del acuífero.

6.3.1.4 Vulnerabilidad a la contaminación

La vulnerabilidad a la contaminación es el resultado de la multiplicación simple de los


parámetros GOD. La vulnerabilidad toma valores entre 0 y 1, donde el mínimo valor
señala las zonas con ninguna o muy baja susceptibilidad a la contaminación o ausencia
de acuíferos; y el valor 1 la máxima susceptibilidad a la contaminación de acuerdo con las
características hidrogeológicas de la zona y la profundidad a la cual se encuentra las
unidades acuíferas. La vulnerabilidad, para el caso de efectos potenciales, se
categorizará en cuatro rangos: muy alta, alta, moderada y baja.

6.3.2 Mapa de vulnerabilidad, Plancha 5-09

A continuación se aplica la metodología GOD, para la Plancha 5-09. Las unidades


hidrogeológicas utilizadas, así como la valoración de los parámetros GOD, son tomadas
de INGEOMINAS (2001), como se muestra en las tablas 6.11, 6.12 y 6.13.

6.3.2.1 Parámetro Groundwater (G)

Los rangos para este parámetro se han tomado tal como se define en la metodología en
general ya descrita.
Tabla 6.11. Categorías utilizadas para el parámetro G.
CONDICIÓN DEL ACUÍFERO ÍNDICE G
contaminación
Susceptibilida

Acuífero no confinado (libre) 0,75 a 1,00


Acuífero semiconfinado 0,75 a 0,35
d a la

Acuífero confinado 0,20 a 0,35


Acuífero surgente 0,00 a 0,20
Ningún acuífero 0,00

6.3.2.2 Parámetro Overall (O)

Los rangos para el parámetro O, en esta plancha varían entre 0,35 y 1, donde los valores
más bajos corresponden a materiales arcillosos y los más altos a arenas mientras que los
valores intermedios corresponden a materiales intermedios como se muestra en la Tabla
6.12. Este parámetro es el resultado de análisis de expertos en el tema, sobre un mapa
denominado de predominio litológico.

Para definir el predominio litológico, se evalúa la zona no saturada para acuíferos libres o
el estrato confinante para los confinados, se utiliza información de columnas litológicas,
registros de pozos, estudios geológicos, geoeléctricos e hidrogeológicos regionales e
información sobre el estado del recurso. A partir de esta información se infiere el grado
de consolidación o fracturamiento de los sedimentos, y de las rocas con flujos

70
intragranulares o a través de fracturas o carstificación, para las áreas de recarga. Esto
permite establecer la facilidad con que se mueve un contaminante a través de esta capa.

Tabla 6.12. Rangos de valores asignados al parámetro O.


PREDOMINIO LITOLÓGICO ÍNDICE O
Susceptibilidad a
la contaminación

Gravas 0,85 a 1,00


Arenas 0,75 a 0,85
Arcilla/grava o arena (intercalaciones) 0,65 a 0,75
Grava con matriz arcillosa 0,55 a 0,65
Limo 0,45 a 0,55
Arcilla 0,35 a 0,45

6.3.2.3 Parámetro Depth (D)

El parámetro D o profundidad de la tabla de agua o del techo del acuífero confinado se


define a partir de información del nivel estático de los aljibes en los acuíferos libres, ya
que representan la primera capa saturada o más superficial o por datos de algunos pozos,
cuya profundidad no supera los 30 m y captan el acuífero más superficial. Las mediciones
se hacen preferiblemente en épocas de lluvia, para considerar los niveles más altos, los
cuales representan las condiciones más críticas, posteriormente se realiza una
interpolación en el programa Surfer con el Método Krigging y se generan las isolíneas
para cada acuífero. Este parámetro también fue tomado de los mapas de isolíneas de la
profundidad del nivel freático. Para la plancha los valores de este parámetro se presentan
entre 0,7 y 1 (Tabla No. 6.13).

Tabla 6.13. Rangos de valores asignados al parámetro D.


PROFUNDIDAD DEL AGUA INDICE D
Profundidad menor de 2 m 1,0
Susceptibilidad a la
contaminación

Profundidad entre 2 y 5 m 0,9


Profundidad entre 5 y 10 m 0,8
Profundidad entre 10 y 20 m 0,7
Profundidad entre 20 y 50 m 0,6
Profundidad entre 50 y 100 m 0,5
Profundidad mayor de 100 m 0,4

6.3.3 Vulnerabilidad a la contaminación, Plancha 5-09

Las unidades de vulnerabilidad de este mapa son el resultado de la combinación de los


parámetros GOD en sistemas de información SIG, realizada en el presente trabajo. Es de
aclarar que para el análisis de efectos potenciales se modificará la metodología para dejar
únicamente cuatro (4) rangos de vulnerabilidad que representa la susceptibilidad a la
contaminación, dado que la primera categoría definida en GOD corresponde a una
vulnerabilidad despreciable, que en este caso corresponde a la ausencia de acuífero o
capas muy impermeables que dificultan el flujo de cualquier contaminante y, por lo tanto,
no tiene ninguna incidencia sobre los efectos potenciales.

71
Tabla 6.15. Categorías de calificación de la susceptibilidad. Modificado de la metodología
GOD.
INDEXACIÓN SUSCEPTIBILIDAD DESCRIPCIÓN
En estos acuíferos, las capas confinantes representan un
obstáculo que dificulta mucho un flujo significativo hacia el
acuífero. La vulnerabilidad está restringida a
contaminantes muy móvil o persistente y a eventos de
0 – 0,30 Baja contaminación continuos durante largos períodos de
tiempo. El impacto causado en el acuífero se caracteriza
por ser de efecto a largo plazo y sus manifestaciones
sobre la calidad del agua, tan débiles que suelen pasar
inadvertidas durante mucho tiempo.
Corresponde a los sectores del acuífero cuyos índices de
vulnerabilidad global caen entre 0,3 y 0,5. En estos sitios,
la vulnerabilidad está restringida a contaminantes
relativamente móvil o persistente, o bien, a eventos de
0,31 – 0,50 Media contaminación continua, causados durante largos períodos
de tiempo; la vulnerabilidad también es alta, si los eventos
ocurridos en estos sitios son puntuales, pero muy
intensos.

Corresponde al rango de índices de vulnerabilidad global


entre 0,5 y 0,7. Se considera que en estos sectores, el
0,51 – 0,70 Alta
acuífero es vulnerable a muchos contaminantes, excepto a
aquellos que son rápida y fácilmente biodegradables.
Este calificativo se aplica a los sectores de un acuífero en
donde el producto de los índices de cada parámetro, se
halla entre 0,7 y 1,0. Se consideran que estos sectores
0,71 – 1,00 Muy alta son vulnerables a la mayoría de los contaminantes y que
el impacto de un evento de contaminación en dichos sitios
trae consecuencias adversas relativamente rápidas para la
mayoría de escenarios de contaminación.

72
CAPÍTULO 7
AMÍLCAR VALENCIA
EDUARDO CHILITO
GUSTAVO NEIRA
ROSALBINA PÉREZ

ESTRUCTURACIÓN DE LA MATRIZ DE DECISIÓN Y ANÁLISIS


ESPACIAL DE EFECTOS POTENCIALES
Los efectos potenciales son el resultado de la aplicación de matrices de decisión en
donde se confronta el potencial de afectación de la actividad con la susceptibilidad del
medio, definidos en los capítulos 5 y 6, respectivamente, para posteriormente definir áreas
donde se presentarán diferentes niveles de afectación sobre alguna de las componentes
del subsuelo. Confrontar el potencial de afectación y la susceptibilidad en matrices de
decisión resulta valioso, ya que los efectos resultantes varían dependiendo no sólo de la
propensión intrínseca del territorio, sino de las características de la eventual actividad.

En la Tabla 7.1 se presenta la matriz de interacción entre la susceptibilidad del medio y el


potencial de afectación para identificar la magnitud de los efectos potenciales. Esta matriz
se aplica a cada una de las susceptibilidades del medio y mediante el uso de los SIG se
hace una reclasificación de los efectos potenciales en cuatro niveles ampliamente
conocidos.

Tabla 7.1. Matriz de decisión para definición de los efectos potenciales.


Potencial de
Afectación Muy alto Alto Medio Bajo
Susceptibilidad
Muy alta Crítico Crítico Severo Moderado
Alta Crítico Severo Moderado Compatible
Media Severo Severo Moderado Compatible
Baja Moderado Moderado Compatible Compatible

Efecto potencial compatible. Se presentará en aquellas áreas en las cuales existe una
mínima posibilidad de que la eventual ejecución de actividades mineras conduzca a
cambios en la calidad ambiental del medio, y su recuperación, mitigación y control pueden
llevarse a cabo naturalmente o con una mínima intervención humana.

Efecto potencial moderado. Se presentará en aquellas áreas en las cuales, aunque


existe cierta posibilidad de que la eventual ejecución de actividades mineras conduzca a
cambios en la calidad ambiental del medio, su recuperación, mitigación y control no
requerirían de técnicas intensivas o costosas.

Efecto potencial severo. Se presentará en aquellas áreas en las cuales existan altas
posibilidades de que la eventual ejecución de actividades mineras conduzca a importantes

73
cambios en la calidad ambiental del medio, y su recuperación, mitigación y control
seguramente requerirían de grandes esfuerzos técnicos y económicos. Estos cambios en
la calidad ambiental pueden incluso representar situaciones de riesgo para el desarrollo
de la actividad.

Efecto potencial crítico. Se presentará en aquellas áreas en las cuales existan


posibilidades muy altas de que la eventual ejecución de actividades mineras conduzca a
profundos y extensos cambios en la calidad ambiental del medio, con un elevado costo
social y bajas posibilidades de recuperación, incluso con la adopción de medidas
protectoras o correctoras complejas. Estos cambios en la calidad ambiental pueden
incluso representar situaciones de riesgo para el desarrollo de la actividad.

El análisis de efectos potenciales por cada tipo de efecto (inducción de movimientos en


masa, inducción de procesos erosivos y contaminación de acuíferos), y para cada una de
las actividades mineras consideradas (materiales de construcción y minerales industriales
– cielo abierto, minerales energéticos – subterráneo, metales preciosos y metales base –
subterráneo, y minerales precisos – cielo abierto y subterráneo) dieron como resultado la
generación de quince (15) mapas de efectos potenciales parciales que fueron englobados
en seis (6) de la siguiente forma:

• Los análisis de efectos potenciales por las eventuales actividades minero energéticas,
metales preciosos y metales base, y minerales preciosos fueron integrados en un solo
mapa por cada tipo de efecto para un total de tres (3). Esto fue posible puesto que las
áreas de potencial mineral espacialmente se ubicaban en diferentes sitios del
territorio.
• Los análisis de efectos potenciales por las eventuales actividades mineras de
materiales de construcción y minerales industriales fueron integrados en un solo mapa
por cada tipo de efecto para un total de tres (3).

Los resultados de los análisis se presentan en los siguientes mapas anexos:

• Mapa de efectos potenciales por actividades de aprovechamiento de minerales


energéticos (carbón), metales preciosos (oro) y metales base, y minerales preciosos
(esmeraldas) - Inducción de movimientos en masa.
• Mapa de efectos potenciales por actividades de aprovechamiento de minerales
energéticos (carbón), metales preciosos (oro) y metales base, y minerales preciosos
(esmeraldas) - Inducción de procesos erosivos.
• Mapa de efectos potenciales por actividades de aprovechamiento de minerales
energéticos (carbón), metales preciosos (oro) y metales base, y minerales preciosos
(esmeraldas) - Contaminación de acuíferos.
• Mapa de efectos potenciales por actividades de aprovechamiento de materiales de
construcción y minerales industriales - Inducción de movimientos en masa.
• Mapa de efectos potenciales por actividades de aprovechamiento de materiales de
construcción y minerales industriales - Inducción de procesos erosivos.
• Mapa de efectos potenciales por actividades de aprovechamiento de materiales de
construcción y minerales industriales - Contaminación de acuíferos.

74
CAPÍTULO 8

AMÍLCAR VALENCIA
ROSALBINA PÉREZ
EDUARDO CHILITO
GUSTAVO NEIRA

CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

Con base en los resultados de este estudio, las técnicas de análisis de información
utilizada y las metodologías seguidas para su ejecución, se puede mencionar las
siguientes conclusiones y recomendaciones generales:

• Un proceso metodológico de evaluación de efectos potenciales como el desarrollado


en este estudio constituye una herramienta fundamental para la predicción de los
posibles efectos geoambientales generados en un eventual desarrollo de actividades
de aprovechamiento del subsuelo, como en este caso la minería. La propuesta
metodológica presentada y aplicada en este estudio a la región geográfica
comprendida por la Plancha 5-09 representa un primer paso en el desarrollo de este
tipo de metodologías en nuestro país. No obstante los altos requerimientos en cuanto
a tipo, cantidad y, sobre todo, calidad de la información necesaria para llevar a cabo
estos análisis, la aplicación de esta metodología presenta gran coherencia con los
objetivos planteados para el estudio, y sus resultados brindan elementos básicos de
información para la toma efectiva de decisiones en torno a la actividad minera.

• En este estudio, la actividad minera considerada en el área de la Plancha 5-09 fue la


que se definió en un producto precedente denominado “Atlas Colombiano de
Información Geológico-Minera para Inversión– ACIGEMI” adelantado por el área de
Minería del INGEOMINAS (INGEOMINAS,2000). Los recursos identificados como de
potencial explotación fueron: materiales de construcción y minerales industriales,
minerales energéticos (carbón), metales preciosos (oro) y metales base, y minerales
preciosos (esmeraldas); para cada uno de ellos se seleccionó el tipo de explotación,
las características identificadas para esos yacimientos y la actividad minera existente.
A partir de esto último, se definieron las actividades y subactividades inherentes a
cada tipo de minería y sus posibles efectos, para luego abordar la correspondiente
evaluación de la susceptibilidad.

• Para la evaluación de la susceptibilidad del medio a la inducción y generación de los


efectos seleccionados para este estudio (inducción de procesos erosivos, inducción de
movimientos en masa y contaminación de acuíferos), se utilizaron metodologías
existentes, algunas desarrolladas o modificadas durante el desarrollo de este trabajo.
Estas metodologías consideran como variables geoambientales de mayor incidencia

75
en la generación y el desarrollo de los efectos estudiados las siguientes: geología,
geomorfología, cobertura y uso del suelo, relieve y precipitación. Es importante
resaltar que las metodologías aplicadas resultan correspondientes y apropiadas para
análisis a escalas 1:500.000.

• Para determinar la susceptibilidad geoambiental y la definición de los efectos


potenciales, se usó un sistema de información geográfica SIG que permitió el análisis,
el manejo, la superposición y la combinación de las coberturas requeridas.
Considerando el volumen de información que se maneja para estos análisis
espaciales, el apoyo de los sistemas de información complementado con el desarrollo
de un aplicativo específico para la evaluación de efectos potenciales fue de gran
ayuda para facilitar y agilizar los procesos.

• Los resultados del estudio se encuentran plasmados en seis mapas de efectos


potenciales, producto del análisis independiente de los tres (3) efectos seleccionados,
aplicado a dos (2) grupos de minerales. Se considera que estos productos permiten a
las entidades planificadoras, a las corporaciones autónomas regionales, a los
inversionistas y a la comunidad en general, identificar las áreas con mayor fragilidad
ambiental frente al desarrollo de futuros proyectos mineros. Este conocimiento facilita
la toma de decisiones frente a alternativas de ubicación espacial de la actividad
(cuando esto sea posible), permite la identificación de los principales componentes del
medio a ser afectados, la estimación de las medidas de manejo que se deben prever y
sus costos preliminares, y también orientar pautas en los términos de referencia para
estudios detallados, con énfasis en aquellas componentes del medio donde se
esperan alteraciones críticas a severas.

• Con el objetivo de llevar a cabo futuros desarrollos y ajustes metodológicos, es


importante verificar la existencia de la información en un estado apropiado y de
calidad aceptable para asegurar así la generación de resultados confiables y
coherentes. La información cartográfica digital debe estar bien estructurada,
armonizada y debidamente soportada en bases de datos, ya que el esfuerzo que se
requiere para la adecuación, el ajuste y la estructuración de la misma en muchos
casos supera el que se realiza para los análisis espaciales y la definición de los
efectos. Se subraya, en este mismo sentido, la importancia de realizar una verificación
en campo de los resultados obtenidos para corroborarlos o ajustarlos cuando sea
necesario.

• De acuerdo con los resultados obtenidos, se hace necesario enriquecer los análisis
con metodologías de susceptibilidad más detalladas (escalas 1:10.000 a 1:100.000),
así como considerar los efectos ambientales que no fueron incluidos en este estudio,
debido a la falta de información y metodologías para evaluarlos. Sería conveniente
establecer alianzas estratégicas con otros institutos de investigación, que permita
abordar con rigor científico la generación de metodologías de susceptibilidad para
componentes del medio hídrico superficial, biótico y socioeconómico, en las cuales el
INGEOMINAS no tiene competencia. Esto permitiría consolidar análisis más integrales
del territorio.

76
CAPÍTULO 9
BIBLIOGRAFÍA

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