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Hacer dietas significa que al tiempo abandonas para “volver a las andadas”. Mejor es pensar de
una vez que vas a cambiar hábitos alimenticios definitivamente, teniendo como prioridad la salud
con lo cual viene la belleza Y EL EQUILIBRIO MENTAL. Lo más importante de este sistema
alimentario no es la cantidad que ingieras sino EL HORARIO en que comas y los tóxicos que dejes
de consumir.
Cualquier tipo de carbohidrato como HARINAS (pan, arepa, empanada, pasta), CEREALES (maíz,
arroz, avena) azúcar negra, papelón, miel de abejas. FRUTAS, sólo un tipo de fruta al día. FÉCULAS
(papa, apio, ocúmo, yuca, ñame), Ó PROTEÍNAS, pechuga de pavo, jamón, carne, pollo, atún, etc.
Cualquier tipo de CARNE (res, cerdo, pollo, pescado, cordero, conejo, pavo, salchichas, etc.)
Consomé sin verduras, ni fideos. Ensalada de VEGETALES CRUDOS (berro, tomate, pepino, lechuga,
zanahoria, etc.) aderezada con aceite de oliva, sal marina, pimienta y ajo. Nunca usar vinagre, ni
limón, ni aceite de maíz, ningún otro aceite vegetal)
La bebida, jugo natural de la fruta del día, SIN AZUCAR Y MÍNIMO MEDIA HORA DESPUÉS DE
COMER.
Consomé (pollo, pescado o carne), ensalada de vegetales crudos, pollo, pescado o carne,
preferiblemente a la plancha. Se puede sustituir la cena con OLEAGINOSAS: Merey, almendra,
maní, almendras, nuez, etc. (el equivalente a dos puños de tu mano) no más porque puedes subir
el colesterol.
CONSIDERACIONES:
-UN SOLO TIPO DE FRUTA AL DIA, las frutas solo se comen hasta la 1 de la tarde.
-1 vez a la semana podrás comer postre después del almuerzo, aunque es mejor si no lo haces.
Ya mucho hemos escuchado del binomio energía y sangre. La energía térmica calórica mantiene la
temperatura de los órganos para que a su vez estos puedan oxidar las calorías la glucosa y
producir más energías. Es imposible modificar a uno sin causar resonancia en el otro. Pero como
puedo apoyar la tonificación del QI o del XUE con parámetros alimenticios y acelerar la
recuperación de las personas?
Todas las recomendaciones que a continuación se exponen, deberán ir matizadas por el testeo
mediante Kinesiología con nuestros “filtros”, ya que sobre todo es imperativo tener en cuenta las
intolerancias e incompatibilidades de cada uno, por muy recomendable que sea tomar una
determinada fruta, hay que asegurarnos que la persona no presente una intolerancia alimentaria,
o incluso que le pueda causar una alergia. Por lo tanto todo se adecuará a medida del individuo
que estemos estudiando con el test.
Habrá que tomar más en cuenta el desayuno, haciendo énfasis en las frutas y cereales no
industrializados o su harina molida a partir de grano entero, en el peor de los casos “integrales”,
pues estos resultan ser las mismas harinas blancas a las que se les añade “alguna fibra” después.
Las harinas blancas o cereales industrializados, lo que traen consigo son flemas y materiales
sintéticos no metabolizables.
Habrá que abundar en frutas y hacer hincapié en un solo tipo de fruta al día, pues las mezclas y
ensaladas de frutas las hacen antagónicas e incompatibles en pH y enzimas.
Hay que comer una muy buena cantidad de frutas a primera hora de la mañana pudiendo
repetirse antes de las 9,00 h. de la misma fruta. Se puede acompañar con miel.
Comer solo cereales de grano completo o sus productos obtenidos a partir de granos enteros.
Avena, trigo, sorgo, centeno, arroz, maíz y otros. Se pueden mezclar entre sí pero no más de dos.
(No se mezclan con proteínas, estas se dejan para almuerzo y cena). Se les pueden añadir miel si
se desayuna dulce o vegetales crudos y aceite de oliva si se desayuna salado.
Se puede combinar la fruta dulce con cereales de grano entero y si se quiere, se les puede añadir
miel.
Otra alternativa serán las raíces y tubérculos, sopas de vegetales y todo lo asado pues la cocción
los transforma en polisacáridos almidonosos.
Nunca sopas con vegetales en la cena, ni frutas, ni cereales. Para las cenas consomé.
Recordemos, cereales y frutas son solo en la mañana pues en la tarde y la noche aumentan la
glucemia, colesterol, triglicéridos, engordan, edematizan, enlentecen, y causan otros trastornos
metabólicos.
No consumir zumos de frutas, mejor es la fruta integra, la licuadora y la máquina de zumos quitan
las fibras oxigenadas y lo alcalino de las frutas dejando solo lo ácido y mucho menos con azúcar o
edulcorante…, mas acido aun. El oxígeno debe llegar a todo el sistema digestivo y solo las fibras de
la fruta y los vegetales crudos tienen esa facultad de favorecer a las bacterias aeróbicas que
denominamos PRE-BIOTICOS. Ya no harían falta pro-bióticos. Con esto y abundante ingesta de
agua jamás habrá estreñimiento.
Habrá que tomar más en cuenta el almuerzo, la cena y la merienda de la tarde, haciéndose énfasis
en proteínas y vegetales crudos. Proteína animal, de la menos parecida a nuestra especie, mejor
peces y mariscos. Las leguminosas, semillas secas, son la mejor alternativa. Almendras, maní,
merey, nueces, pistacho, girasol y otros. Los granos, frijol, arvejas, lentejas y otros, también son
muy buenos, pero preparados sin proteína animal ni verduras o tubérculos. Recomendamos
reducir al máximo o eliminar la carne de res y cerdo. No es recomendable el pollo por los procesos
antinaturales y anabolizantes en su producción (al menos en Latinoamérica).
En el almuerzo y la cena hay que comer una generosa cantidad de proteínas (entre 50 y 100
gramos dependiendo de la edad) acompañadas de vegetales crudos, mejor con los verdes que
tienen clorofila con abundante oxígeno y sumamente alcalina para neutralizar lo acido de la
descomposición digestiva de las proteínas. Se puede añadir aceite de oliva virgen y sal marina sin
flúor. Cenar lo más temprano posible. Se puede sustituir o complementar con caldos y Consomé
elaborados sin verduras. Mejor de gallina, pescados o mariscos.
Una recomendación difícil de cumplir, es que no debemos acompañar las comidas con bebidas
alcohólicas, zumos de frutas, bebidas artificiales, ni siquiera agua, pues estos líquidos modificarán
el estado de acidez del estómago (PH).
Los vegetales crudos que tienen constatada acción en el aumento de la hemoglobina son; el
pimentón (mejor el rojo), el calabacín, celeri o apio España (rico en calcio, como todo lo verde
crudo), aguacate, zanahoria, remolacha, tomate (mejor el cherry), cebolla, ajo (picado en pedazos
pequeñitos), aceituna, palmito, alcachofa, pepinillos y otros. Sin vinagre ni limón ya que eso
cambiaría el PH del estómago y estropearía el resultado final, no habrá hematopoyesis. Además
favorecería la proliferación de bacterias anaeróbicas (ej. Helicobacter) causando lentitud y
plenitud intestinal, gases, obesidad, estreñimiento.
También valen los vegetales de muy breve cocción al vapor, brócoli, vainita, calabacín, hojas de
lostaza y otros
La merienda de la tarde sería recomendable con semillas secas, pudiendo combinarse varios tipos
entre sí. Almendras, maní, merey, nueces, pistacho, girasol y otros. La cantidad estipulada es lo
que cabe en un puño de cada quien, aportando así suficiente aceite antioxidante y
antienvejecimiento.
Y a todos aquellos que nos interesa mantenernos sanos, nos sirve tonificar el QI con el desayuno y
el XUE con el almuerzo y la cena. El secreto está en darle a la digestión humana su alimentación y
combinaciones naturales.
Porque nos movemos poco: Uno de los principales motivos de que engordemos es que tomamos
más calorías de las que necesitamos, o lo que es lo mismo, alimentos muy ricos en grasas y, en
cambio, llevamos una vida muy sedentaria: hacemos poco ejercicio, y es que incluso la compra se
hace por Internet…HAZ EJERCICIOS.
Porque pasamos hambre: Si disminuyes de forma drástica la ingesta de calorías durante el tiempo
que dure la dieta, seguro que consigues perder peso… pero también lo recuperarás rápidamente
porque tu alimentación será desequilibrada y, además, pasarás hambre. Lo realmente importante
para perder peso y mantenerse es aprender a comer: tu dieta debe ser saludable (con todos los
grupos de alimentos y las calorías suficientes) y debe enseñarte a elegir los alimentos
correctamente. Por eso, no tendría que haber apenas diferencia entre la dieta para adelgazar y la
de mantenimiento. BEBE AGUA A LA HORA DE LA ANSIEDAD Y LA FATIGA.
Por no cambiar de hábitos: Cambiar de hábitos poco a poco da mejores resultados y, sobre todo,
más duraderos, que hacer un esfuerzo puntual de un mes, para luego abandonar la dieta y
atiborrarse. Además, así comprobarás que una comida sana puede ser deliciosa.
Por culpa del estrés: Una reacción habitual ante el estrés es comer para calmar esa ansiedad. Las
cifras hablan por sí solas: el 59% de la población suele picar algo delante del televisor y,
generalmente, se trata de alimentos calóricos y ricos en grasas y azúcares. Son reacciones muy
humanas a las presiones, aunque en estos casos él se recomienda hacer algún tipo de actividad
física, flores de Bach, acupuntura y tratamientos alternativos que nos ayudará a reducir el estrés.
Además de los tratamientos propuestos, algunas de las cosas que se deben tener en cuenta son:
Descansar lo suficiente
Realizar alguna técnica de relajación que ayude a controlar la ansiedad y disminuir el estrés.
Se recomienda hacer algún tipo de actividad física, flores de Bach, acupuntura y tratamientos
alternativos que nos ayuden
El ejercicio físico interdiario, terapias con flores de Bach y otras, acupuntura, homeopatía y demás
terapias alternativas, serán de gran ayuda mientras se instalan los cambios.
ALIMENTACIÓN PARA UNA VIDA SANA, LARGA Y PLENA. POR JAVIER MANRIQUE S.
La Medicina Tradicional China (MTC) considera al ser humano como un microcosmos inserto en un
macrocosmos, es decir, como una entidad compuesta por materia y energía que se encuentra bajo
la influencia constante de dos fuerzas antagónicas y complementarias, el Yang (el cielo, el cosmos)
y el yin (la tierra). En este contexto, el hombre es un transformador de energía, contrarrestando o
adaptándose a factores externos con la finalidad de lograr y mantener un equilibrio, lo que se
traduce en la ausencia de enfermedad.
Dicho equilibrio requiere de un aporte energético constante para la elaboración de nuestra propia
energía defensiva. Para ello, contamos con dos fuentes: la respiración (energía yang) y la
alimentación (energía yin).
· Emocional: Incluye tanto la presencia como el manejo de ansiedad, tristeza, rabia, ira,
remordimientos, angustia, preocupaciones, codicia, etc.
· Alimentario.
Hoy en día, nuestra dieta está determinada por múltiples aspectos de la condición humana actual:
hábitos aprendidos de nuestras familias, los medios de comunicación, la industrialización, el ritmo
acelerado de la rutina diaria, la resistencia natural del ser humano a los cambios y la tendencia a
resolver las necesidades nutricionales por la vía más rápida.
Las consecuencias de una alimentación inadecuada son variadas: obesidad (tanto infantil como en
adultos), diabetes, hipertensión, accidentes cerebro-vasculares, infarto de miocardio, problemas
articulares (artritis y artrosis) y de columna, enfermedades degenerativas del sistema nervioso
central y así una larga lista de enfermedades, incluidos muchos trastornos emocionales.
El conocido proverbio “somos lo que comemos” cobra gran importancia y vigencia si consideramos
que la calidad de nuestra energía defensiva depende, de manera directa, de la calidad de nuestra
alimentación. En este sentido, planteamos una serie de recomendaciones con la finalidad de
brindar mayor información a la hora de escoger los alimentos e incentivar una nutrición acorde
con las necesidades de nuestro cuerpo:
· Agua: Vivir en el trópico implica que la cantidad de agua que bebemos a diario debe ser
suficiente para compensar las pérdidas de agua corporal por la vía de la sudoración. Entre 1,5 lt. Y
2 lt. Al día es una cantidad adecuada. Evitar consumir refrescos, jugos envasados y bebidas
saborizadas, los cuales tienen excesiva azúcar al igual que tomar agua con las comidas (diluye los
jugos digestivos reduciendo la calidad de la digestión).
· Preferir alimentos frescos y no los enlatados, los cuales contienen químicos como
conservantes y colorantes, dañinos para la salud.
· Usar sal marina (libre de yodo y flúor) y aliños naturales como: aceite de oliva, ajo y pimienta
recién molida.
· Consumir harinas integrales, las cuales contienen germen de trigo y son más ricas en fibra e
incluyen pan, arroz y pasta.
· Comer frutas de un solo tipo a la vez (no ensalada de frutas) y durante la mañana, nunca en la
tarde o en la noche.
· Eliminar el consumo de lácteos como leche, quesos, queso crema, mantequilla, suero,
cuajada, etc. El ser humano adulto no procesa adecuadamente la lactosa y la caseína de la leche
de vaca, lo cual explica el gran número de personas intolerantes a la lactosa y con reacciones
alérgicas tipo eczemas, rinitis alérgicas, etc. Recientemente varios estudios apoyan una reducción
en la dosis diaria de calcio como suplemento. Las fuentes alternativas de calcio son todos los
vegetales verdes (acelga, espinaca, lechuga, brócoli, apio España, etc.) y los frutos secos (la AHA
recomienda el consumo diario de un puño de almendras o nueces al día, como medida de
protección cardiovascular).
· El consumo de té se limita a dos tazas por día. Dicha cantidad ha demostrado protección
contra múltiples tipos de cáncer. Buscar los productos más naturales posibles, es decir, la hoja de
té sin procesar. Si el agua es potable no es necesario hervirla (las altas temperaturas destruyen los
antioxidantes presentes en el té).
En cuanto a los horarios de comidas, se debe desayunar entre las 7am y 9am, almorzar entre 1pmy
3pm, y cenar antes de las 7pm. A las horas indicadas se favorece una buena digestión y el máximo
aprovechamiento de los nutrientes. Se debe tomar el tiempo para comer, masticando unas veinte
veces cada bocado y se debe hacer sentado, en un ambiente tranquilo. La temperatura de las
comidas debe ser intermedia, evitando comidas muy frías (como tomar agua helada o con hielo) o
muy calientes.
El chocolate, los lácteos, el pan blanco y las harinas refinadas como el azúcar blanco, mantienen
elevados los niveles de serotonina (un químico presente en el cerebro que se relaciona con el
sueño, la percepción del dolor y el estado de ánimo), induciendo una falsa sensación de placer, lo
cual los hace alimentos altamente adictivos que se consumen con una frecuencia diaria y en
cantidades excesivas.
En caso de estreñimiento se recomienda una dieta alta en fibra: vegetales verdes (berro, alfalfa,
lechuga, etc.), frutas, abundante agua y harinas integrales. La adición de fibra en la dieta debe ser
gradual para evitar flatulencia. La evacuación debe ser espontánea, sin esfuerzo y sin el uso de
supositorios, pastillas de sábila u otros.
Finalmente, una alimentación adecuada debe ir acompañada de actividad física, la cual trae
beneficios no sólo para el cuerpo sino que también, gracias a la liberación de endorfinas, produce
una sensación placentera y de satisfacción, beneficiando nuestro estado mental. Son muchos los
deportes que se pueden practicar pero como mínimo se recomiendan las caminatas en terreno
plano sin parar, de treinta minutos de duración, tres veces por semana.