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i | i | LA ESCUELA EN EL TIEMPO (CUADERNOS DE LA PRIMARIA DEL JUEGO AL ARTE INFANTIL LETICIA COSSETTINI EUDEBA eprronzan uNniversiTaRta DE BUENOS AIRES A mi hermena Olga i : : ~ INTRODUCCION ta edie ha sido revida por Is butora Olga Cossetiini dirigié 1a Escuela Experimental “Dr. Gabriel Carrasco”, desde 1935 hasta agosto de 1950. Ereuela primaria situada en Rosario be | ‘io Alberdi— en lis proximidades del ro, los huerts y pequete sembradios 4 ' Y Jas avenidas de acceso a la ciudad, ‘Les nifos Megaban de la bartiada pobre de pescadores y jomaleros, y de i | Ja del comercio préspero, pequefias industria’ 7"viviendas eéiodes entre erbo- I i ledas y jardines, EI hijo del pescador y el del qbrero;nel hijo del comerciante, : del profesional, del hombre cultivado y sensible. | ‘Era una escuela que aspiraba a hacer seres armonioses, no poets, ni ar- tistas, ni pintores, ni misites, ni mimos, no en desmedro del conocimiento y | « j de Ta realidad tal como cierta anquilesada pedagogia expreseba su prevenci6n : frente a aquel testimonio vital, . Se buscaba la verdad con humildad y un hilo subterténeo marcaba el h ritmo. Hombres, acontecimientos, sucesos, penetraban por las abiertas venta nas y Ia naturaleza con su devenir constante nos hacia pacientes, actives y Hisicos a un tiempo. La solidaridad era fuerza generatri2, Los gests minimos conducian al ajuste de las actitudes mutuas, Acorde el mbito, la conducta y respondia a una afinaciéa natural, ‘Nos visitaban hombres sencllos, maestros, artistas y estidiosos de comér- cas y patses diversos. Observaban “esa manera” de estar frente a la vida, de hablar, razonar, preguntar, movers, “eer” sin engafio. | Ninguna improvisacién; fue la nuestra bisqueda serena y valiente, La escuela dilataba su horizonte y enriquecfa sus vivencias. Eran el ro, sus plan tas y peces, la tierra y el campesino, el taller del artesano, la investigacién en el laboratorioy en la biblioteca; eral bro de eautivante mégene, 1 Museo © we de Bells Artes, el relato podtico, el concierto foncléatic en el que te ct. EDITORIAL UNIVERSITARIA DE BUENOS AIRES - laid 656 ! haa a Mosart la medicin y el efleal, la pledad y a termi, era el Teatro Pandas por Ia Universidad de Bueaor Ares Ge Nifios y el de teres, la fiesta de Iss cafias en Primavera, era el Coro de MECH HL DenesTO DE LEY . | “Nios Pjaros”. ‘Aun con programas oficiales, las materias perdian sus artificiosos_con- tomos y logrébamos una actividad constructiva y creadora. oe a (Cultivabamios todas Tas funciones mentales en armotiiosa toajuadiin, de arrollando cualidades fundamentales de penetracién y de sensibilidad en todas las materias. Este fue nuestro hallaago. ‘Le dabamos al nifio oportunidad de manifestar sus ideas y realizar sus experiencias en una actividad disciplinada, en In cual las propias dotes del maestro desempefiaban un papel de gran importancia, El macstro era una [presencia célida y alerta. Estas relaciones de amor hicieron posible el gozo del trabajo y la satisfaccién de la realizacién, ‘Del mundo circundante tomfbames Ia materia prima y la transform’ ‘bamos sin olvidar que Ja gracia es don natural del niffo. Foment&bamos su cre- ccimiento con un entrenamiento unificador de los sentides y lo ejercitébamos para la vida; el saber, el sentir y In antorrealizacién, identificéndolos con el propio ser. La armonia nacfa de la unificacién de todos los elementos, y del acorde entre la necesidad afectiva y la posbilidad de expresin y de realizacién. EI nifio adquirfa conciencia de belleza en todas Tas asignaturas y el arte fue parte integral de nuestro vivir, Como modesto testimonio ofrezco péginas de mi “Diario de clase” que abarca el periodo comprendido entre 1935 y 1950, tiempo en el que fui maestra de alumnos que yo conducfa desde el cuarto al sexto grado. Estas paginas traducen el clima de la escuela y en cisrto modo, el espfritu de los maestros compafieras mfos, que ayudaron con valor a Ia realjzacién de una obra. cariroxo 1 ‘EL ARTE ESTABA EN EL VIVIR COTIDIANO ‘Estos docutientos, en apsiencia eeparedor y de carmctees opuesos, se ofrecen como seordes interne: que eandvcen al aio y nos lo mues: twa por doquir, ‘Son Jes balbuceot de fa unidad, Preparan para percbir lo que seontels, ‘No se busgue Ta eoninuidad de temas © acgnaturs 1a continvidad esté en Ix fuerea interna que sosenia nuestro te bajo “Yo cuenio sencilamente Jo que acontecié. Me gustarfa Ia sums fnmente de senclez pars mgitener en estas piginas esa energie que ponta el “acento” ¥ In sgoieaca humana de una excueln que nece Fab de Is Bellen para cumpls ne ideal educativ. (Piginas del “Diario de clase”) ‘Marzo de 1986 Liego a la Escuela Normal de Rafael, Provincia de Santa Fe. All se habla levado a cabo una experiencia pedag6gica importan- te que desperté interés en algunos especiali- zades.* Extoy en un medio desconocide, Necesito acercarme al esprit de sus habitantes, en- contra la raiz de su vivir. Converso con las gente, observe sue habites. Vengo de una llanura interior y el sfo y sus hombres me Ihablan un Tenguaje subyugante. Este contac- to me es iti, Renuieva mi emocién y todas 18 mafianas lego a clase con un alma nueva. Bapiienca recogda por Olga Cosietil, “Es cela Serena", publicado en 1914 citado por Lon ‘bade Radice en "et ia ~~ estriles (Det “Diario de laze”, de Leticia Cossetini) ‘Algunes de mis alumnos viven en los ran- hos del barranco, otros en casas urbanas ale- igre y puleras. Los hay que cruzan el campo y llegan con’ sus alpargatas mojadss. Treinta nifios entre Ios nueve y los once afios. No pocos earecen de habitos de higie- ne; son impulsivas, sueltas de lengua y de ge to. Habiar, jugar, moverse groseramente; la ‘acusaciéa como costumbre. Escuchan 3 in- tervalos breves 0 se animan fagazmente para caer de nuevo en Ia indiferencia La faz educativa absorbe mi tiempo. Les revelo peco a poco el placer de sentise lim- ‘pos. Las accfones més simples se repiten has- ta sentir que pueden hacerse mejor. El mizido sos rodea. Salimos: gritos, ac titudes izsolentes. Puedo yo predcuparmie por dl programa?.Organizo pequefios. grupos: Joel es el piimero en crear ‘en tomo una cé- ula. Aun asi, las primeras exploraciones son cede el punto de vista del,orden que Dice. a

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