3. La fe.

3.1 Naturaleza de la fe teologal.

- Aceptar a Dios que se revela.
- La fe es la “virtud sobrenatural mediante la cual, impulsados y ayudados por la gracia de Dios, creemos que
son verdaderas las cosas divinamente reveladas por Él, no por la verdad intrínseca de las cosas conocidas con
la luz natural de la razón, sino por la autoridad del mismo Dios que se revela, que no puede ni engañarse ni
engañarnos” .

3.2 Sus propiedades.

1) Sobrenatural: es siempre y necesariamente gracia y don de Dios, no el resultado de una conquista humana.
2) Libre: sólo se cree si libremente se quiere creer.
3) Oscura: porque la verdad de su objeto no puede ser alcanzada ni por evidencia ni por demostración; porque
una vez alcanzado el objeto de fe, éste excede completamente la capacidad de la mente humana.
4) Cierta: certeza, indudabilidad. Su fundamento es la autoridad infalible de Dios que no engaña.
5) Teologal: establece una relación inmediata entre Dios. Fe absoluta en Dios, adhesión personal, compromiso
e incondicional.
6) Eclesial: en la Iglesia.

3.3 Inteligencia y voluntad en el acto de fe.

- Inteligencia: es la facultad espiritual humana por la que puede conocer la esencia de las cosas (abstracción),
los universales.
Creer a Dios que se revela se traduce en un juicio que afirma la verdad de lo revelado. Hacer juicios es propio
de la inteligencia.
- Interviene en 3 momentos:
1) Entender la palabra que se le dirige;
2) Juzgar la verosimilitud, la plausibilidad y credibilidad
3) Asentimiento: pronunciando el “amén”.

- Voluntad: es la tendencia espiritual hacia lo concebido por la inteligencia.

Es necesario querer para creer. Nada me obliga a creer. La voluntad consiente a lo que la inteligencia conoce, y
si no quiere creer, no cree. Sin embargo, no basta con querer para creer porque la fe es gracia, pero sólo el que
quiere creer acaba creyendo.
S. Agustín: para el que quiere creer tengo todos los argumentos del mundo, pero para el que no quiere creer no
tengo ninguno.

- Las operaciones intelectuales o razón práctica:

0) Intelecto agente. Facultad que hace las cosas inteligibles en acto, y lleva a cabo la abstracción de las
especies inteligibles de sus condiciones materiales.
a) Abstracción o simple aprenhesión. Abstrae lo universal de lo particular.
 b) Juicio: acto mediante el cual afirmamos o negamos una propiedad de un sujeto. Es donde se da la
verdad: la adecuación del entendimiento con la realidad.
c) Razonamiento: Encadena proposiciones lógicamente conectadas y llegamos a otra proposición
verdadera que antes desconocíamos.
- En el juicio se deben considerar dos actos de la razón: uno sobre el que se aprenhende la verdad sobre algo
(inteligencia) y otro por el que la razón asiente a aquello que aprehende (voluntad).
- La fe es el asentimiento con certeza pero son evidencia, basado en el testimonio y autoridad de otro. En la fe
el asentimiento está motivado por la voluntad porque la inteligencia no dispone de la evidencia.
- Unidad del acto del entero ser personal. Pero son dos momentos de un mismo acto.
- La fe sobrenatural consiste en el asentimiento a las verdades reveladas por Dios merced al imperio de la
voluntad movida por Dios mediante la gracia.

3.4 Génesis de la fe: conocimiento de la credibilidad de la revelación; el juicio de credendidad.

Génesis del acto de fe (4 momentos)
1) juicio de credibilidad, (es razonable creer, puedo creer); motivos de credibilidad.
2) juicio de credendidad (debe creerse, debo creer);
3) decisión o mandato de la voluntad (quiero creer);
4) asentimiento del intelecto (creo).
- Es necesario la ayuda de la gracia divina. Los dos últimos momentos (decisión y asentimiento) se realizan
con la cooperación e influjo de la gracia sobrenatural, sin la cual no se puede creer.
- La credibilidad expresa el “para el hombre” de la revelación. La credibilidad es la propiedad de la
Revelación cristiana que, a través de signos ciertos, aparece acreditada como realidad adecuada al modo de
conocer humano, y por tanto digna de ser creída. La credibilidad de la revelación es la que hace que la entrega
de la fe sea razonable.

3.5 Credibilidad y vida de fe.

- Motivos para creer: credibilidad.
- Único motivo es la autoridad de Dios que se revela: objeto formal de la fe.
- Salto de la fe: siempre es necesario fiarse de Dios porque no es evidente para nosotros mismos. Este salto es
posible si:
1) la razón consiente sin ser forzada a ello, sino movida solamente por el amor más libre y personal posible;
2) que el “Otro” al que se somete sea quien es: el Creador

3.6 Fe e Iglesia.
- Creo y creemos.
- Dimensión eclesial de la fe: el acto personal de la fe debe ser completada por un acto eclesial, identificando
al sujeto creyente con la Iglesia. Dos momentos:
1) El creyente en la Iglesia: El hombre no encuentra por sí mismo la revelación de Dios, sino que la recibe
en el seno de la comunidad creyente que es la Iglesia
2) La Iglesia: significa que el sujeto debe hacer suya la fe de la Iglesia
Propiedades del acto de fe. Explicar brevemente cada una de ellas
- Sobrenatural: es un don de Dios, más que una conquista. Para creer es necesario la gracia de Dios (Orange,
Vat I, Vat II). Es imposible adquirir la fe por nuestras propias fuerzas, y no es el resultado de un proceso
racional. La fe “no viene de nosotros, es don de Dios” (Ef 2, 8).
- Libre: solo se cree si libremente se quiere creer. Es propiedad y causa de la fe. Por eso, Jesús invita a creer
en Él. La libertad humana, mismo debilitada, no desapareció por el pecado, enseño Trento. Esto significa
que el hombre es llamado a cooperar con la gracia una vez que puede resistir a ella.
- Oscura: la fe es oscura porque el que cree no ha visto, y está relacionada con la libertad porque se trata de
aceptar el testimonio de alguien que merece crédito. La fe es oscura por: 1) El objeto de la fe no es
evidente por demostración. 2) Porque una vez alcanzado el objeto de fe, este excede completamente la
capacidad de la mente humana. Debido a la condición caída del hombre.
De la oscuridad del objeto viene la oscuridad del acto de fe que debe tomar una decisión libre para creer. Es
oscura por la excesiva luz. La oscuridad que solo puede ser provisional, desaparecerá. Oscuridad
crepuscular porque en ella hay suficiente luz para ver y suficiente oscuridad para no ver.
- Cierta (CEC 157): certeza de la fe, indubitabilidad. La certeza de la fe le viene de la autoridad inefable de
Dios que no puede engañarse ni engañar (Vat I). Por su fundamento en Dios mismo, la certeza de la fe es
superior a la certeza del propio conocimiento. Es fides quaerens intellectum, con tendencia a comprender. Al
que cree no le cabe la menor duda. “Diez mil dificultades no hacen una sola duda” (Newman).

Inteligencia y voluntad en el acto de fe (CEC 156-160, 176)

- La inteligencia interviene en tres momentos: entendiendo la palabra que se le propone; juzgando la
credibilidad de lo que se le propone; asintiendo en el mismo acto de fe.
- La voluntad tiene la última palabra: “Sólo se puede creer si se quiere”. Creer no es sólo de la inteligencia.
Aun así, no basta querer para creer porque la fe es gracia, pero sólo creo si quiero.
- El querer creer es la libertad del acto de fe que se cree para amar. “Creemos porque amamos” (Newman).
- Carácter personal de la fe: ese querer se orienta a la persona del testigo. La fe es adhesión amorosa a aquel
que ve entregándose totalmente a Él.
- Unidad del acto de fe: inteligencia y voluntad intervienen armónicamente en el acto de fe:
· Si no actuara la inteligencia: acto irracional o ciego (apuesta, opinión).
· Si no actuara la voluntad: quedaría disuelto en ciencia (puro conocimiento)
- Se da la intervención de la entera persona –inteligencia y voluntad- en el acto de fe (CEC 176).

Nociones de fides qua y fides quae

- Dimensiones de la fe:
· Objetiva: fides quae;
· Subjetiva: fides qua.
Carácter teologal de la fe
- Lo específico de la fe es su carácter teologal: Dios es el centro, fundamento y fin de la fe del creyente.
- La fe cristiana toma lo mejor de la fe humana (carácter interpersonal) y lo mejor de la fe religiosa
(incondicionalidad, obediencia...).
- Credere Deum: teocéntrico (infinitivo +acusativo) objeto material de la fe: creer en Dios, creer que existe
Dios. El objeto de la fe no es una verdad abstracta, sino un ser personal. Entendimiento.
- Credere Deo: teológico (infinitivo+ dativo) aspecto formal del objeto de fe: motivo por el cual se cree: se
cree a Dios que se revela, Verdad Primera y como Bien Supremo; creo porque me lo dices Tú.
Entendimiento.
- Credere in Deum: teleológico (infinitivo+in+acusativo) carácter voluntario y dinámico de la fe: creer hacia
Dios; comprende a todo el hombre y además se refiere a la dimensión escatológica de la fe. El credere in
sólo se reserva para Dios, no se dice de la Iglesia.

Carácter eclesial de la fe
- CEC 166: La fe es un acto personal, pero no es un acto aislado.
- CEC 167: Cierta identificación entre el creo y el creemos en el acto de fe.
- El contenido y el modo del creyente está en la Iglesia. Creo en la Iglesia como objeto y como testimonio
autorizado.
- El creyente es creyente por y en la Iglesia. Así como Cristo es el mediador de la revelación, así también la
Iglesia es el único camino a través del cual se llega a la fe. “fides ex auditu, auditus autem per Verbum
Christi...in Ecclesia”.
- CEC 181: Creer es un acto eclesial: la fe de la Iglesia, precede, engendra, conduce y alimenta nuestra fe. La
eclesialidad es una nota intrínseca a la fe del creyente individual.
- La Iglesia es una comunidad de creyentes, “communio fidelium”: en la Iglesia el creyente profesa la fe
común. El sujeto se libra de todo particularismo o relativismo. El acto de fe del sujeto expresa y edifica la
fe de toda la Iglesia.

CREDIBILIDAD
Vaticano II: el término credibilidad está ausente, pero no lo que él significa (los signos que atestiguan y
mueven hacia la fe). Esto sale con frecuencia en tres direcciones:
1. Los milagros de Jesús permiten comprobar que el Reino de Dios está llegando a la tierra, y él confirmó su
predicación con milagros (DV 4; LG 5).
2. Al conjunto del pueblo de Dios le corresponde dar un testimonio vivo y firme de Cristo (LG 12).
3. El signo fundamental de la revelación es el mismo Cristo (LG 15). Cristo con sus palabras y obras, muerte y
resurrección, y envío del ES, da testimonio del Padre, nos libera del pecado y nos da la vida eterna (DV 4).