Professional Documents
Culture Documents
DE ALME
ERÍA
ES
SCUELAA POLIT
TÉCNIC
CA SUPE
ERIOR Y
Y FACU
ULTAD DE
CIENCIAS
S EXPERIMENNTALESS
TIITULACCIÓN DE
E INGEN
NIERÍA
A TÉCNIICA AGRRÍCOLA
A
ESSPECIAL
LIDAD H
HORTOOFRUTIC
CULTURRA Y JA
ARDINERRÍA
VA
ALORAACIÓN DEL COMPPOST DE RE
ESIDU
UOS
VE
EGETAALES HORTÍ
H ÍCOLAS
S COM
MO SU
USTRATTO
EN
N CUBIIERTA
AS AJAR
RDINA
ADAS
ALUM
MNA:
SONIA IBÁÑE
EZ BARÓN
N
DIREC
CTORES:
AGU
USTÍN SÁN
NCHEZ PR
RADOS
ALMERÍA, FE
EBRERO 2014
Valoración del compost de residuos vegetales hortícolas como sustrato en cubiertas ajardinadas
I. INTERÉS Y OBJETIVOS
I. INTERÉS Y OBJETIVOS
En Almería se producen aproximadamente 769.500 toneladas de residuo
vegetal cada año, cifra calculada para una superficie de 27.000 hectáreas
invernadas (Callejón-Ferre et al., 2010).
En relación con esto, uno de los principales problemas que se presenta
en los cultivos intensivos bajo plástico es la eliminación de estos restos
vegetales generados tras la cosecha, ya que, por una parte se encuentra el
coste en tiempo y dinero que supone la eliminación de dichos residuos.
Y a sí mismo, esta situación da lugar a focos de infección de parásitos,
microorganismos, ratas e insectos y otros cambios ambientales como la
contaminación del suelo por parte de elementos tóxicos, generación de malos
olores, etc.
El compostaje controlado parece ser una forma de eliminar los residuos
y ofrece la posibilidad de reutilización de los materiales como enmienda
orgánica en los suelos agrícolas y/o jardines.
El uso en agricultura no está muy extendido por las susceptibilidades
que genera en los agricultores su reutilización. Por ello, el uso como sustrato
en las cubiertas ajardinadas de los edificios se convierte en una posibilidad
interesante. De esta forma, se utilizaría como fuente de material orgánico al
compost local y se contribuiría a dar salida a un residuo que actualmente tiene
difícil utilización.
Las características del compost de residuos vegetales hortícolas
presenta una serie de dificultades para ser utilizado directamente en el suelo
entre las que destacan la conductividad eléctrica por la elevada presencia de
cationes como el sodio y los altos valores de pH (Ventura, 2012; Salas et al.,
2000; Mazuela et al., 2005).
Las cubiertas ajardinadas podrían definirse como jardines sin suelo, con
lo cual la dificultad de la utilización es muy similar a la encontrada cuando se
utiliza como sustrato en hidroponía (Salas et al., 2000; Mazuela et al., 2005).
II.REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA
2.1. Introducción.
El fuerte desarrollo producido en la agricultura bajo plástico en la
provincia de Almería, ha llevado consigo un aumento de problemas
relacionados con la gestión de los residuos generados en distintas cosechas.
Estos residuos conllevan asociados diversos problemas en su
eliminación o tratamiento, tanto de índole económica como medioambiental
(ésta última cada vez con mayor importancia).
En Almería se producen aproximadamente 769.500 toneladas de residuo
cada año, cifra calculada para una superficie de 27.000 hectáreas invernadas
(Callejón-Ferre et al., 2010).
El efecto perjudicial de los residuos vegetales hortícolas en el medio
ambiente se debe fundamentalmente a la acumulación de los mismos en las
zonas de cultivo y proximidades a los invernaderos, convirtiéndose, debido a su
depósito y abandono, en fuente de lixiviados y gases, focos de plagas y
vectores de enfermedades, así como fuente de malos olores (causados por
procesos fermentativos), que hacen necesaria la gestión adecuada de los
mismos con el fin de minimizar el impacto asociado a su producción (Carrión et
al., 2006).
Los residuos generados deben ser retirados del lugar de cultivo en el
cual se han desarrollado antes de la implantación del siguiente ciclo, debido
principalmente a razones de carácter temporal y fitosanitario (Martínez, 2006).
Los efectos negativos de la producción de residuos orgánicos pueden
disminuir considerablemente si se desarrolla un plan de gestión de los mismos
cuyo objetivo sea convertir los residuos en recursos.
La alternativa más ventajosa desde el punto de vista ambiental para el
tratamiento de los restos vegetales hortícolas son los que permiten la
recuperación o el reciclaje de los recursos contenidos en ellos. Operaciones de
eliminación sin recuperación de energía o el depósito en vertederos suponen
una pérdida de recursos naturales y contribuyen a la contaminación ambiental,
por lo que se consideran prácticas no aceptables (López y Boluda, 2008).
Los restos vegetales son una fuente interesante de materia orgánica y
elementos fertilizantes. El reciclado y valorización de dichos residuos en
agricultura, da lugar a una forma eficaz de prevenir la degradación y
contaminación del medio ambiente reduciendo el consumo de fertilizantes,
enmiendas y sustratos (Abad et al., 2002; Carrión et al., 2006).
El uso directo de restos vegetales hortícolas en agricultura, provoca una
serie de inconvenientes: fitotoxicidad (compuestos orgánicos, elementos y
sustancias minerales, etc.), elevación de la temperatura en la rizosfera,
deficiencia de oxígeno en el entorno radicular, etc., por lo que deben ser
sometidos a tratamientos previos a su utilización (Abad et al., 1997; Butler et
al., 2001; Pascual et al., 1999). Dichos restos, aportan ventajas ambientales y
económicas, siempre que se realicen los tratamientos necesarios (como
(ZinC
Co, 2012). Esto, com mbinado coon un meno or mantenimiento, haa llevado a una
ampplia difusión
n de las cu
ubiertas ve rdes exten
nsivas.
2.2.1.2. Cubiertas
s ajardina das intenssivas.
Son cubiertas
c más pe esadas, costosas y demaandan mayor m
manntenimiento o del estra
ato vegetall. Requiere
en cuidadoo continuoo y un sistema
de rriego que dependerá plantas seleccionadas. Puedenn ser utiliz
á de las p zadas
como jardines reales.
Generalmente, re equieren de una estructura inferior con una alta
capaacidad de carga, es decir,
d puedden necessitar modificaciones een el diseñ
ño de
las e
estructurass para que e soporten el peso de medios de cultivo más ampllios y
plantas mayore es.
Con una a capa de medio de cultivo o sustrato
s > 200 mm, ppermite cu ultivar
una amplia gama de arbustos e inccluso árbolles. Aporta an una cargga > 150
-2
m (ZinCo, 2012).
kg·m
2.2.2. Beneficios
B de las cu biertas veegetales.
Más alllá de su aspecto n as cubiertaas ajardinadas
natural atractivo, la
ofreccen indisscutiblemente muc hos bene eficios ta
anto ecollógicos comoc
econnómicos (ZZinCo, 2012).
La supeerficie de cubiertas
c vverdes aummenta su presencia cada vez más
as ciudade
en la es ya que son una e estrategia importante para soluucionar algunos
de lo
os principa
ales problemas ambie entales urb
banos.
A contin
nuación se presentan n algunos ded los beneficios quee han sido más
estudiados:
III. M
MATERIAL
L Y MÉTOD
DOS.
Fotog
grafía 3.1. Lu
ugar del ensa
ayo al aire lib
bre. Fuente: Maps Googlle, 2013.
3. 2. Especies vegetales.
3.2.1. Aspectos
A a considerrar para la a elección de las plaantas.
La eleccción de lass plantas vva a depen nder principalmente del clima en el
que serán exxpuestas, donde se e valorará á esenciallmente loss cambios s de
temp peratura, la
as precipita
aciones, e l viento y la
a altura de
e la cubiertta vegetal.
El entorrno mediterráneo es rico en es species nattivas adapptadas a la falta
de h humedad y por lo tanto proporrciona muchas varie edades de especies para
ser cultivadass en dicha as cubierta as (Heredia, 2012). En nuesstro ensay yo, al
pressentar una escasa prrofundidad d, se vio limmitado el tipo
t de esppecies a poder
p
utilizzar.
3.2.2. Plantas
P selleccionada as.
3.2.2.1. Rosmarin nus officin nalis.
Arbustoo perennifo olio, que puede alcanzar de e 0,5-1m de altura. Su
feno
ología es muy
m amplia a, en alguunas zonas s florece durante
d caasi todo el año,
aunqque siempre con un máximo
m prrimaveral.
Se distrribuye por la Cuenca a Mediterrránea, exccepto algunnos puntos del
Nortte y Noroeeste. Es ca apaz de crrecer en diversos tip pos de susstratos, aunque
mueestra una clara
c preferrencia por los roqued dos calcáre
eos. El pH óptimo pa ara el
desaarrollo de la
a planta osscila entre 6-8 (floram
mu, 2013).
Su hábitat natural son l ugares so oleados y secos, no soportta la
hidro
omorfía ni la sombría a, pues se trata de una planta heliófila y xxerófila. Por su
abunndancia ess un elem mento de g gran impo ortancia pa
aisajística y geobotá ánica
(Gómmez, 2012).
Fotog
grafía 3.2. Ro
osmarinus officinalis.
Fotog
grafía 3.3. La
avandula ang
gustifolia.
Fotog
grafía 3.4. Th
hymus vulgaris
Fotog
grafía 3.5. Co
onstrucción de
d una de la
as cubiertas experimental
e les.
Fotog
grafía 3.6. Lá
ámina drenan
nte-retenedo
ora de agua y capa de lan
na de roca.
Fotog
grafía 3.7. Vista del drena
aje de la sim
mulación de cubierta
c ajard
dinada.
3
3.4. Establlecimiento
o, período
o experime ental y ma
anejo del eensayo.
Periodo o de estable
ecimiento del ensayo
o
Periodo
o experimental
Fotog
grafía 3.8. Riiego de las parcelas
p expe
erimentales.
3.5. Dis
seño experimental y tratamien ntos apliccados.
El expeerimento coonsistió en
n el uso de
d compos st de residduos vege
etales
hortíícolas commo sustra ato para lla plantacción en cubiertas aajardinadas s, el
compost fue uttilizado directamente e una vez finalizado
f el
e proceso de compo ostaje
y otrro fue sommetido a un tratamie nto para mejorar
m sus propiedaades quím micas.
En e el experimmento se realizaron n tres trataamientos en funcióón del sus strato
emppleado com mo comp ponente o rgánico de d la cub bierta. Loss tratamieentos
realizados fuerron los siguientes:
T0: Arccilla Expan
ndida + Su ustrato Ve
egetal.
T1: Arccilla Expan
ndida + Co ompost de e residuos s vegetalees hortícolas.
T2: Arccilla Expan
ndida + Co ompost de e residuos s vegetalees hortícolas +
Enmien nda.
Cada trratamiento estaba fo ormado poor 3 repetic ciones quee simulabaan la
estru
uctura de una cub bierta ajarddinada. El
E ensayo usado coomo testig go o
Una vez obtenidos los datos de las muestras tanto en seco como en
húmedo, se calcularon las cantidades de cada componente orgánico
necesarias para preparar la mezcla de cada uno de los tratamientos.
Debido a la diferencia en el peso en seco del sustrato vegetal y compost
de residuos vegetales hortícolas, se completó con arcilla expandida hasta
alcanzar la capacidad total de la bandeja (75L).
En la tabla 3.3 se resumen las cantidades a emplear de cada
componente del sustrato para la fabricación de una bandeja prototipo de
Tabla 3.3. Cantidades utilizadas para la preparación de cada bandeja de simulación de cubierta
en función del componente utilizado (sustrato vegetal y compost de residuos
vegetales hortícolas).
Composición de los tratamientos
T0 32 L 43 L
T1 27 L 48 L
T2 27 L 48 L 189 mL
Tabla 3.4. Características físico-químicas del Sustrato Professionnel Terreau según fabricante.
Composición Contenido
Materia orgánica Aprox. 80%
Cribado 0-20 mm
pH 5,6-6,4
Conductividad (mS/cm) Aprox. 0,85
NPK + Microelementos 0,9 kg·m-3
Abono orgánico 1 kg·m-3
Contenido 80 Litros (CEN- 12580)
Fotog
grafía 3.9. Prreparación de la mezcla d
de sustratos
s para cada simulación
s dee cubierta. Mezcla
M
y volteo (izquierda) y riego para h umedecer la
a mezcla (derecha).
Fotog
grafías 3.10. Añadiendo azufre
a al com
mpost de res
siduos vegeta
ales hortícolaas.
3.6. Pla
antación en las parc celas expeerimentalees.
La planttación se realizó
r el 2
22 de febre
ero de 2013
3 (Fotograffía 3.11).
Fotog
grafía 3.12. Medida
M del área
á ocupada
a por la plantta.
A п R1 R2
Siendo:
R1 = radio mayor
R2 = rad
dio menor
En el caso
c del ín
ndice de ccrecimiento
o (cm), se
e utilizó laa referencia de
Warssaw et al (2009).
(
A Dm
m dm
IC
C
3
Siendo:
A = Altu
ura
Dm = Diámetro mayor
dm = Diiámetro me
enor
En el ín
ndice de suupervivenccia (%), se cuantificó a lo largoo del ciclo cada
15 ddías, para ello se contabilizab
c ba el númmero de plantas muuertas de cada
trata
amiento sobre el total de planta
as plantada
as.
Fotog
grafía 3.13. Conductímet
C ro (izquierda
a) y pH-metro
o (derecha).
Fotog
grafía 3.14. Realización
R de
d las disolucciones (izquierda) y Crom
matógrafo iónnico (derech
ha).
4.1.2. Área.
En la figura 4.2, se puede contrastar el área ocupada por la planta y por
especie para cada unos de los tratamientos establecidos en el ensayo (T0, T1 y
T2).
Las medidas de las áreas de las plantas de Romero y Lavanda
presentan una gran variabilidad entre repeticiones lo que ha conllevado en
ocasiones a no apreciar diferencias que sean estadísticamente significativas. El
área ocupada por las plantas de Romero, es significativamente mayor en las
plantas crecidas sobre el compost vegetal hortícola con enmienda (T2) al
compararla con los otros dos tratamientos (T0 y T1).
En el caso de la Lavanda, las plantas en todos los tratamientos muestran
prácticamente la misma área, no habiendo diferencias significativas entre
tratamientos.
Las plantas de Tomillo, ocupan un área mayor en T0, presentando en T1
y T2 un área similar.
En general, el comportamiento de las plantas según la altura y el área
ocupada es similar y mayor entre los tratamientos que utilizan compost con o
sin enmienda para Romero; para todos los tratamientos en Lavanda, y los
mejores resultados se observan en T0 para Tomillo.
Figurra 4.3. Índicce de crecim miento (cm) de Rosmarrinus officina alis, Lavanddula angustiffolia y
Thymus vulgaris.
v Seggún el tipo de
e componente orgánico empleado
e coomo sustrato
o en la
cubierta ajardinada
a coomo medio d de crecimien
nto (T0 sustrrato comerciaal, T1 compoost de
residuos vegetales hortícolas, T T2 compostt de residuos vegetalees hortícolas s con
enmienda a de azufre e), durante el período comprendido o entre el 17/5/13 (85 5 días
después del traspla ante) hasta a el 5/9/13. Letras diferentes inddican difere encias
estadísticcas significativas a P≤0,055.
Fotog
grafía 4.1. Evvolución del crecimiento y superviven
ncia de las plantas.
p A la izquierda, 85
5 días
después del trasplantte. A la dereecha, 205 díaas después del
d trasplantte. Tratamien nto T0
repeticiónn 3.
Fotog
grafía 4.2. Evvolución del crecimiento y superviven
ncia de las plantas.
p A la izquierda, 85
5 días
después del trasplantte. A la dereecha, 205 díaas después del
d trasplantte. Tratamien nto T1
repeticiónn 1.
Fotog
grafía 4.3. Evvolución del crecimiento y superviven
ncia de las plantas.
p A la izquierda, 85
5 días
después del trasplantte. A la dereecha, 205 díaas después del
d trasplantte. Tratamien nto T2
repeticiónn 2.
Figurra 4.4. pH de el extracto saaturado del ccompost en función de los tratamienntos aplicado
os (T1
compost de residuo os vegetaless hortícolas y T2 com mpost de reesiduos vegetales
hortícolass con enmie enda de azu ufre), durantte el período
o comprenddido entre 222/1/13
(Inicial) hasta
h el 133/2/13 (Finaal y Lavado o). Letras diferentes
d inndican difere
encias
estadísticcas significativas a P≤0,055.
De acue erdo con loos resultad dos mostra ados en la figura 4.44, se obserrva la
evolución de pH p de los tratamiento os T1 y T22 en el prooceso de ppreparació ón de
las m
mezclas de e sustrato.
En los cuales
c com
mo cabría esperar en e la fase inicial no hhay diferen ncias
significativas entre
e el maaterial origiinal (se corresponde con el prim mer drenaje de
las mezclas). Después de aplica ar la enmienda y adecuar
a laa humedad d del
compost (fase e final) y el lavado d el compos st tras 20 días de prreparación n (ver
aparrtado 3.5.1), se pueden ver dife erencias significativas entre el ppH del extracto
de lo
os composst en funció ón de los trratamiento cación de l a enmiend
os. La aplic da de
azuffre en el compost (T2) prod duce una disminución del pH H del extracto
saturado a valores fuerte emente áccidos por actividades
a s de los miicroorganis smos
(Roigg et al., 20
004) que deberían
d sser consideerados cuaando se reecomienden las
espeecies vege etales a utilizar en la ccubierta (v
ver revisión
n bibliográffica).
4.2.2. Conductivi
C dad eléctrrica (CE).
4.2.3. Aniones.
A
Figurra 4.6. Anionnes (ppm) ded los tratammientos T1 y T2 (T1 co ompost de reesiduos vegetales
hortícolass, T2 compo ost de residduos vegetales hortícola as con enm ienda de az zufre),
durante el
e período comprendido e entre 22/1/133 (Inicial) has
sta el 13/2/133 (Final y Lav
vado).
Letras differentes indic
can diferenciias estadístic
cas significattivas a P≤0,005.
4.2.4. Cationes.
C
Figurra 4.8. Con nsumo hídric co (mL·m-2·ddía-1). Según el sustrato empleadoo en la cu ubierta
ajardinada como med dio de crecim
miento (T0 su
ustrato come
ercial, T1 com
mpost de res
siduos
vegetaless hortícolas, T2 composst de residuo s hortícolas con enmienda de
os vegetales
azufre), durante el período com mprendido entre
e el 17/5/13 (85 ddías despué és del
trasplantee) hasta el e 5/9/13. L Letras diferrentes indic
can diferen cias estadíísticas
significativas a P≤0,05
5.
De acueerdo con lo
os resultaddos mostra ados en la figura 4.88, se obserrva el
conssumo hídricco de las plantas
p parra los tres tratamientos, como ccabría esp perar
los ttratamiento
os T0, T1 y T2 pressentan el mismo
m con
nsumo híddrico duran nte el
períoodo de esttablecimien
nto del enssayo, no haabiendo differencias ssignificativas.
4.3.2. pH
Figurra 4.9. pH. Según el sustrato em mpleado en la cubierta ajardinada como med dio de
crecimiennto (T0 sustrrato comerciial, T1 comp post de residduos vegetaales hortícola as, T2
compost de residuos vegetales h ortícolas con n enmienda de azufre), ddurante el pe eríodo
comprend dido entre el 17/5/13 (855 días despu ués del traspplante) hastaa el 5/9/13. Letras
L
diferentess indican dife
erencias esta
adísticas sign
nificativas a P≤0,05.
P
4.3.3. Conductivi
C dad eléctrrica (CE).
De acueerdo con lo
os resultaddos mostra ados en la figura 4.100, con resp
pecto
a loss valores de
d la conductividad e eléctrica de los drenajes son mmayores lo os de
los ttratamiento
os con commpost (T1 y T2), igu ualándose a partir dde los 5 meses
m
desp pués del trasplante, siendo mayor en n el comp post con enmienda a por
apliccación dell azufre hasta
h el ccuarto mes.
m Los valores eelevados de d la
cond ductividad eléctrica iniciales dde las me ezclas de sustratos que emp plean
compost justifficarían la disminucción que se s observó en el ccrecimiento o de
algunas de lass especies empleada as.
4.3.4 An
niones.
Figurra 4.11. Aniones (ppm) de los tratamiientos T0, T1 T y T2 (T0 sustrato comeercial, T1 compost
de residuuos vegetale es hortícolass, T2 compo ost de residuos vegetalees hortícolas con
enmienda a de azufre), que correspponde a los 85,
8 130 y 205 días despuués del traspplante.
Letras differentes indic
can diferenciias estadístic
cas significattivas a P≤0,005.
De acue erdo con los resulta ados mostrrados en la a figura 4..11, en el caso
del ccloruro, nitrrato y sulfa
ato no hay diferencia
as significativas entree tratamien
ntos.
4.3.5 Ca
ationes.
Figurra 4.12. Cattiones (ppm)) de los trattamientos T0, T1 y T2 2 (T0 sustraato comercia al, T1
compost de residuos vegetales ho ortícolas, T2 compost dee residuos veegetales horttícolas
con enmienda de az zufre), que ccorresponde e a los 85, 130 y 205 ddías despué és del
trasplante
e. Letras dife
erentes indica
an diferencia
as estadística
as significativvas a P≤0,05
5.
V. CONCLUSIONES
V. CONCLUSIONES
VI. BIBLIOGRAFÍA
VI. BIBLIOGRAFÍA
Aalok, A., Tripathi, A.K. y Soni, P., 2008. Vermicomposting: A better option for
organic solid waste management. Journal of Human Ecology 24: 59-64.
Abad, M., Noguera, P., Noguera, V., Roig, A., Cegarra, J. y Paredes, C., 1997.
Reciclado de residuos orgánicos y su aprovechamiento como sustrato de
cultivo. Actas de Horticultura 19: 92-109.
Abad M. y Noguera P., 2000. Los sustratos en los cultivos sin suelo. In:
Urrestarazu M. (Ed.). Manual de Cultivo sin Suelo. 2ª ed. Mundi-Prensa.
Madrid, España. Pp. 137-185.
Abad, M., Noguera, P., Puchades, R., Maquieira, A. y Noguera, V., 2002.
Physico-chemical and chemical properties of some coconut coir dusts for
use a peat substitute for containerised ornamental plants. Bioresource
Technology 82:241-245.
Butler. T.A., Sikora, L.J., Steinhilber, P.M y Douglass L.W., 2001. Compost age
and sample storage effects on maturity indicators of biosolids compost.
Journal of Environmental Quality 30: 2141-2148.
Carrión, C., García de la Fuente, R., Fornes, F., Puchades, R. y Abad, M.,
2008. Acidifying composts from vegetable crop waste to prepare growing
media containerized crops. Compost Science and Utilization 16:20-29.
Fischer, P. and W. Popp., 1998. The use of various composts and recycled
materials in growing media for ornamental shrubs. Acta Horticulturae
469: 287-296
Fitzpatrick, G.E.; E.R. Duke and K. A. Klock Moore., 1998. Use of compost
products for ornamental crop production: Research and grower
experiences. HortScience. Vol. 33 (6): 941-944.
Lax, A., Roig, A., Costa, F., 1986. A method for determining the catión-
exchange capacity of organic material. Plant Soil 94, 349-355.
López, M.J y Boluda, R., 2008. Residuos Agrícolas En: Moreno, J. y Moral, R.
(Eds.). Compostaje. pp. 489-518. Ediciones Mundi-Prensa, Madrid.
Mazuela, P., Salas, M.C. y Urreztarazu, M., 2005. Vegetable waste composts
as susbtrate for melón. Commun. Soil Science and Plant Analysis 36:
1557-1572
Montero, J.L., Salas, M.C., Díaz, J.G., Guzmán, M., Heredia, E., 2013.
Evaluación hídrica de cubiertas ajardinadas para su uso en arquitectura
bioclimática en zonas mediterráneas de clima árido y semi-árido. Acatas
de VII Congreso Ibérico de Agroingeniería y Ciencias Hortícolas (en
prensa).
Palmero, R., 2010. Elaboración de compost con restos vegetales por el sistema
tradicional en pilas o montones.
Roig, A., Cayuela, M.L., Sánchez-Monedero, M.A., 2004. The use of elemental
sulphur as organic alternative to control pH during composting of olive
mill wastes. Chemosphere. Volume 57, Issue 9, Pages 1099–1105
Salas, M.C., Urrestarazu, M., Moreno, J., Elorrieta, M.A., 2000. Sustrato
alternativo para su uso en cultivo sin suelo. Phytoma 123, 52-55.