Tun &
_OIMENSIGN
LOGS
y fotos
2 exelusivas)
atodo colorUNA CRONICA DE BEATRIZ
SOLLAZZO DE LEW.
INVESTIGACION
Y COORDINACION
DOCUMENTAL DE ONIFE
El MISTERIO
ee LOS OVNIS
1978:
GRAN OLEADA
OVNI
PAIS ELEGIDO:
REPUBLICA ARGENTINA
Lugar:
TUCUMAN
La evaluacién de todos estos casos dio como resultante
que en cada uno de ellos las evidencias y protagonis-
tas nos parecen totalmente veraces. El caso: Matienzo
es, sin lugar a dudas, el mas serio por la calidad del
testigo, el que no presenta dudas de tipo técnico.
‘QUARTA: DIMENSIONLos cuatro casos que voy~a
narrar han ocurrido en el trans-
curso de este afio en la Argen-
tina, provincia de Tucuman. Du-
tante el mes de octubre y
noviembre la oleada OVNI llega
a un grado tan alto que los me-
dios de informacién de Buenos
Aires se hacen eco y comienzan
uparse de ella. “La Gace-
importante diario de Tucu-
man, acude al lugar de los
hechos, informando a sus habi-
tantes, y es asi como la gente
habla de “los platillos” con gran
naturalidad y espera los acon-
tecimientos que estén seguros
habrén de sucederse.
Los dos contactos dei primer
tipo, el caso Mena (més ade-
lante explicaré por qué sélo es-
cucho el testimonio del_sefior
Mena y no del resto, sobre lo
acaecido en el Aeropuerto de
Tucumén), y el caso Suérez (el
nifio que fotografia el plato)
no son, a mi entender, mas que
la preparacién del terreno, psi-
colégicamente hablando, de los
contactos del tercer tipo que
luego se darian en la localidad
de Las Salinas y después en Fa-
mailla. Diferentes lugares, pero
la similitud del contacto lo ha-
cen verdaderamente apasionan-
te. El miedo de sus protagonis-
tas ante las apariciones me
dieron la mas acabada muestra
de que no era fantasia; luego
los estudios profundos no ha-
rian mds que aseverar lo que
mi intuicién me habia dictado.
Estaba frente a gente que habia
sido conmovida en sus costum-
bres y creencias. Estaba frente
a trabajadores humildes que su
tiempo de cosecha y siembra no
les permitia dar demasiada rien-
da suelta a su imaginacidn, y
donde el cansancio y suefio Ile-
gaban mucho antes que la re-
flexion.
Y fue a ellos y no a un expe-
rimentado investigador a quie-
es se le muestra el misterio, “a
ellos", quienes estén en estado
casi elemental en materia de
conocimientos. Esto me permite
la reflexién:, "También, en este
caso, Zse les! revelara el miste-
rio a los humildes de espiri-
tu?..." Por todo esto es que la
oleada OVNI que afecté a Tu-
cuman no ha podido ni debe
pasar desapercibida, siendo es-
te el resultado de mi investiga
cién, paso a paso desde mi
36 CUARTA DIMENSION
Walter y su hermana.
arribo a Tucumén el dia martes
26 de octubre de 1978.
CASO N° 1. AEROPUERTO.
BENJAMIN MATIENZO
Son las diez de la mafana,
cuando el calor tucumano me
recibe en el Aeropuerto Matien-
zo. Salir de Buenos Aires con
Nuvia y mal tiempo me permiten
apreciar con mas. intensidad el
limpido cielo azul, bordeado de
enormes nubes blancas. Poca
gente se encuentra alll, y la fal-
ta de nerviosismo de sus gestos
me aflojan la tensién del vuelo.
Una vez acomodada en el hotel
me dispongo a encontrarme con
los colaboradores de la revista
que se encuentran en Tucuman.
Para mi sorpresa, uno de ellos,
el ingeniero Lotti, cambid" su
domicilio, y Arturo Alvarez Sosa,
periodista de “La Gaceta”, ha-
bia viajado a Buenos Aires la
noche antes para asistir a un
programa periodistico donde
hablaria sobre OVNIs. Es a:
que de golpe descubri que me
encontraba sola para recaudar
toda la informacién y darle for-
ma. No fue tan dificil, la amabi-
lidad de los tucumanos y su
buena voluntad me agilizaron el
trabajo, que termind por atra-
parme a punto tal que senti un
poco de melancolia al regresar.
Decido comenzar por el caso
Aeropuerto Benjamin Matienzo.
EI calor dpretaba, la siesta pro-
vinciana y la pista parecia her-
vir desde lejos. Me encuentro
con el sefor Ernesto Rafael Me-
na, uno de los testigos oculares
dei caso, quien me expresa su
alegria por poder hablar de lo
que siempre lo fascind. Los de-
més testigos no se hallaban en
el lugar y luego me enteré que
tampoco hubieran querido pres-
tarse a declarar. Es asi que s6lo
me dedico a Mena, quien con
prolijidad y en detalie me dibuja
un mapa, describiendo la apari-
cién. Me dice que le resulta fa-
cil hacerlo, ya que su trabajo lo
obliga a realizar este tipo de
tareas muy a menudo (es ope-
rador de control de vuelo).
Mena dijo:
“La noche del 13 de octubre
de este afio, dia viernes, a las
20.95 aproximadamente, me en-
contraba desempefiando mis
funciones cuando el operador
en meteorologia grité para que
nos aproximéramos a donde es-
taba 61 (se encontraba en la
pista tomando fresco). Me pidié
que mirara hacia el $.0. donde
una esfera del tamaiio de una
naranja, de color rojo, se des-
plazaba con bastante velocidad
hacia el Este. El cielo estaba
claro, no habia nubes, el tiempo
era inmejorable. El aeropuerto
es una zona Ilana y solamente
se encuentra la cadena de Ce-
rros del Aconquija, que se halla
aproximadamente a unos 15 km
de la ciudad. Alrededor de 15
testigos vieron la aparicién y
sus edades oscilan entre 27 y 50
afios, la mayoria eran pilotos def
Aeroclub. La duracién del fend-
meno fue aproximadamente de