Professional Documents
Culture Documents
FECHA : 24/10/2018
MODELO PRODUCTIVO DE BOLIVIA
Bolivia despunta como el país de mayor crecimiento económico en Sudamérica durante los últimos cinco
años, al aumentar el índice de su Producto Interno Bruto (PIB) alrededor del cinco por ciento anualmente.
La comunidad internacional reconoce este avance, puesto que, antes del 2006 y el inicio del proceso de
cambio, el país andino amazónico ocupaba los últimos puestos de desarrollo en la región.
La clave del ‘milagro boliviano’ se encuentra en las distintas políticas económicas implementadas como
parte del nuevo modelo adoptado luego de la llegada de Evo Morales a la presidencia: el social
comunitario productivo.
¿COMO FUNCIONA?
Como parte del mismo, se identifican cuatro sectores estratégicos en Bolivia para generar excedentes
económicos:
Hidrocarburos.
Minería.
Electricidad.
Recursos ambientales.
Por otro lado, entre los sectores generadores de ingreso y empleo figuran:
Industria manufacturera.
El turismo.
La vivienda.
El desarrollo agropecuario.
Son los viejos y tradicionales sectores de los que ha vivido el modelo primario exportador. No puede
cambiarse el país de la noche a la mañana, tiene que haber una estrategia, plasmada en este modelo, para
salir del circuito negativo, expresó.. De acuerdo con el nuevo
modelo, para desarrollar a Bolivia, generar esa transformación productiva y modificar el modelo primario
exportador, se requiere llevar los excedentes de minería, hidrocarburos, energía eléctrica y recursos
naturales hacia los sectores que generan empleos para los bolivianos. En este modelo -amplió Arce- el
Estado funciona como ente redistribuidor, con la capacidad de transferir los recursos de los sectores
excedentarios a los generadores de empleo e ingreso.
En otras palabras, lo que se busca es liberar a la nación de la dependencia de la exportación de materias
primas para abandonar el modelo primario exportador y construir una Bolivia industrializada y productiva,
apuntó. El investigador también reconoció que, si bien por un tiempo Bolivia seguirá siendo un país
primario exportador, esta vez se debe tener claridad sobre el objetivo y el camino a tomar, que es el de la
industrialización de la economía.
A su juicio, este es un modelo económico que se basa en el éxito de la administración estatal de los
recursos naturales y está diseñado para la economía boliviana. Su triunfo depende de la forma en que se
administren los recursos naturales.
En definitiva, su principal mérito es que se trata de un modelo económico para Bolivia hecho por
bolivianos.
No solo se trata de las cuentas públicas, sino de la orientación de la producción, la distribución, el cambio
o el consumo, que por décadas construyó una inserción subordinada a las transnacionales del agro-negocio
y la energía; la industrialización dependiente para la exportación y la especulación sobre a base de la
extranjerización del sistema financiero y el deliberado endeudamiento externo. Aquí está el meollo de la
cuestión, ya que no alcanza con discutir la ecuación macroeconómica, sea el PBI, el Consumo, la
Inversión, o el saldo del comercio externo; sino que se requiere discutir el modelo productivo y de
desarrollo, en especial vinculación con definiciones a asumir regionalmente y en un marco de integración
no subordinada. Es claro que se trata de una cuestión política, ya que el debate debe superar el
límite de lo posible sustentado desde el oficialismo y la oposición sistémica, que cunado mucho discute
quien gestiona el orden capitalista. Se trata de discutir precisamente el orden capitalista y confrontar con la
ilusión de avanzar en el camino de reformas posibles al orden contemporáneo. La posibilidad de defender
y ampliar derechos sociales, económicos y culturales de la mayoría de la sociedad implica discutir las
bases materiales que organizan la cotidianeidad y especialmente nuestra superestructura social, ideológica,
cultural y política. Por eso hace falta una gran batalla económica, política y sobre todo cultural, como
desafío en la disputa de la conciencia social para confrontar las miserias a que nos condenan con la
política económica en curso. Que no solo se escuche la presión por derecha para más ajuste, sino que se
haga oír la voz consciente de quienes aspiran a una sociedad emancipada.
En forma sorpresiva Nicolás Maduro -dictador de Venezuela- reconoció públicamente que su modelo
productivo fracasó. El hecho ocurrió el lunes 30 de julio, durante el congreso del gobernante Partido
Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Desde el inicio del gobierno Bolivariano de Hugo Chávez en 1999, Venezuela ha experimentado una serie
de cambios radicales en su estructura social, económica y cultural a propósito de la directriz de dicho
gobierno, la cual dirige a la nación hacia un desarrollo endógeno integral y a una igualdad social,
características que representan las bases fundamentales del pensamiento Bolivariano.
Para cumplir dichos objetivos se creó un proyecto trifásico denominado "Proyecto Nacional Simón
Bolívar" 2001-2007, 2007-2013 y 2013-2021. En el caso de la etapa en estudio correspondiente al periodo
2007-2013, el proyecto se enfoca en la refundación de Venezuela en una nación socialista, soberana,
estable y como potencia energética mundial.
Dentro de esta etapa se propone un nuevo modelo productivo, el cual al ser 100% socialista busca lograr la
eliminación de la división social, la estructura jerárquica y la disyuntiva en la satisfacción de las
necesidades humanas y la producción de riqueza subordinada a la multiplicación del capital.
Esto conlleva a identificar cuál modo de propiedad de los medios de producción está mayormente al
servicio de los ciudadanos y quienes la tendrán bajo su pertenencia para así construir una producción
conscientemente controlada por los productores asociados al servicio de sus fines.
En concreto este modelo productivo socialista se enfoca principalmente en los siguientes aspectos:
b. La dirección a seguir, por encima de lo urgente y lo inmediato, responderá a las preguntas sobre cómo
será posible: Cohesionar las fuerzas sociales en productores asociados, haciéndolos responsables de
prácticas productivas y administrativas auto gestionadas. Sustituir la concentración y centralización de la
toma de decisiones por una genuina autonomía descentralizada que alcance hasta las comunidades locales.
c. El modelo productivo socialista estará conformado básicamente por las empresas de producción social,
que constituyen el germen y el camino hacia el socialismo del siglo XXI, aunque persistirán empresas del
estado y empresas capitalistas privadas.
d. Son empresas de producción social (EPS) las entidades económicas dedicadas a la producción de bienes
o servicios en las cuales el trabajo tiene significado propio, no alineado y auténtico, no existe
discriminación social en el trabajo y de ningún tipo de trabajo, no existen privilegios en el trabajo
asociados a la posición jerárquica, con igualdad sustantiva entre sus integrantes, basadas en una
planificación participativa y protagónica.
e. En las EPS los trabajadores se apropiarán del excedente económico resultante, que se repartirá en
proporción a la cantidad de trabajo aportado; la gestión será democrática y participativa y el peso relativo
de la participación será con base en la persona y no con base en el capital aportado.