You are on page 1of 10

Michael Faraday: (Reino Unido, Newington Butt, 22 de septiembre de 1791-Hampton Court, 25 de agosto de

1867), fue un físico y químico británico que estudió el electromagnetismo y la electroquímica. Sus principales
descubrimientos incluyen la inducción electromagnética, el diamagnetismo y la electrólisis.

A pesar de la escasa educación formal recibida, Faraday es uno de los científicos más influyentes de la historia. Mediante
su estudio del campo magnético alrededor de un conductor por el que circula corriente continua, fijó las bases para el
desarrollo del concepto de campo electromagnético. También estableció que el magnetismo podía afectar a los rayos de
luz y que había una relación subyacente entre ambos fenómenos.

Descubrió asimismo el principio de inducción electromagnética, el diamagnetismo, las leyes de la electrólisis e inventó
algo que él llamó dispositivos de rotación electromagnética, que fueron los precursores del actual motor eléctrico.

En el campo de la química, Faraday descubrió el benceno, investigó el clatrato de cloro, inventó un antecesor del mechero
de Bunsen, el sistema de números de oxidación e introdujo términos como ánodo, cátodo, electrodo e ion. Finalmente,
fue el primero en recibir el título de Fullerian Professor of Chemistry en la Royal Institution de Gran Bretaña, que ostentaría
hasta su muerte.

Faraday fue un excelente experimentador, que transmitió sus ideas en un lenguaje claro y simple. Sus habilidades
matemáticas, sin embargo, no abarcaban más allá de la trigonometría y el álgebra básica. James Clerk Maxwell tomó el
trabajo de Faraday y otros y lo resumió en un grupo de ecuaciones que representan las actuales teorías del fenómeno
electromagnético. El uso de líneas de fuerza por parte de Faraday llevó a Maxwell a escribir que "demuestran que Faraday
ha sido en realidad un gran matemático. Del cual los matemáticos del futuro derivarán valiosos y prolíficos métodos".

La unidad de capacidad eléctrica en el Sistema Internacional de Unidades (SI), el faradio (F), se denomina así en su honor.

Albert Einstein tenía colgado en la pared de su estudio un retrato de Faraday junto a los de Isaac Newton y James Clerk
Maxwell.

El físico neozelandés Ernest Rutherford declaró: "Cuando consideramos la extensión y la magnitud de sus descubrimientos
y su influencia en el progreso de la ciencia y de la industria, no existen honores que puedan retribuir la memoria de
Faraday, uno de los mayores descubridores científicos de todos los tiempos".

Heinrich Rudolf Hertz: (Hamburgo, 1857 - Bonn, 1894) Físico alemán que descubrió la propagación de las ondas
electromagnéticas en el espacio y estudió la naturaleza y propiedades de las mismas, sentando las bases que llevarían a
Marconi a una invención destinada a revolucionar las comunicaciones: la radio.

En 1887, en un célebre experimento, Hertz logró transmitir ondas electromagnéticas entre un oscilador (antena emisora)
y un resonador (antena receptora), confirmando experimentalmente las teorías del físico inglés James C. Maxwell sobre
la identidad de características entre las ondas luminosas y electromagnéticas. En su honor se denominan ondas hertzianas
o hercianas a las ondas electromagnéticas producidas por la oscilación de la electricidad en un conductor, que se emplean
en la radio; también deriva de su nombre el hercio, unidad de frecuencia que equivale a un ciclo por segundo y que se
representa por la abreviatura Hz (y sus múltiplos: kilohercio, megahercio y gigahercio).
Hertz siguió después investigando otros temas científicos, hasta elaborar unos Principios de mecánica (que aparecieron
después de su muerte, en 1894) en los que desarrollaba toda la mecánica a partir del principio de mínima acción,
prescindiendo del concepto de fuerza.

Guglielmo Marconi: (Bolonia, 25 de abril de 1874 - Roma, 20 de julio de 1937) I marqués de Marconi. fue un ingeniero
electrónico, empresario e inventor italiano, conocido como uno de los más destacados impulsores de la radiotransmisión
a larga distancia, por el establecimiento de la ley de Marconi, así como por el desarrollo de un sistema de telegrafía sin
hilos (TSH) o radiotelegrafía.

Es señalado a veces como el inventor de la radio, aunque realmente está es una invención colectiva, y compartió en 1909
el Premio Nobel de Física junto a Carl Ferdinand Braun en reconocimiento a sus contribuciones en el desarrollo de la
telegrafía inalámbrica.

Fue también uno de los inventores más reconocidos y, además del Premio Nobel, recibió la Medalla Franklin, fue
presidente de la Accademia Nazionale dei Lincei y el rey Víctor Manuel III de Italia le nombró marqués, con lo que pasó a
recibir el trato de «Ilustrísimo Señor». Además, está incluido en el Salón de la fama del museo de Telecomunicaciones y
Difusión de Chicago, y en su honor la Asociación Nacional de Radiodifusión de los Estados Unidos entrega anualmente los
premios NAB Marconi Radio Awards

Nikola Tesla: ( Smiljan, Imperio austríaco, actual Croacia, 10 de julio de 1856 - Nueva York, 7 de enero de 1943) fue
un inventor, ingeniero mecánico e ingeniero eléctrico de origen serbocroata. Se le conoce sobre todo por sus numerosas
invenciones en el campo del electromagnetismo, desarrolladas a finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Las patentes
de Tesla y su trabajo teórico ayudaron a forjar las bases de los sistemas modernos para el uso de la energía eléctrica por
corriente alterna (CA), incluyendo el sistema polifásico de distribución eléctrica y el motor de corriente alterna, que
contribuyeron al surgimiento de la Segunda Revolución Industrial.
Su carácter personal, su enfrentamiento con Edison y el halo de misterio que rodea a algunos de sus descubrimientos, han
hecho que Tesla se convirtiera en un científico muy popular a partir de la década de 1990, con una abundante bibliografía
disponible acerca de su vida y de su obra.

Thomas Alva Edison: (Milan, Ohio, 11 de febrero de 1847 - West Orange, Nueva Jersey, 18 de octubre de 1931) fue
un empresario y un prolífico inventor, considerado el inventor más importante de Estados Unidos. Desarrolló muchos
dispositivos que han tenido gran influencia en todo el mundo, como el fonógrafo, la cámara de cine o una duradera
bombilla incandescente. Apodado «El mago de Menlo Park», Edison fue uno de los primeros inventores en aplicar los
principios de la producción en cadena y el trabajo en equipo a gran escala al proceso de invención, motivos por los cuales
se le reconoce la creación del primer laboratorio de investigación industrial.

Edison fue un inventor prolífico que registró 1093 patentes a su nombre en Estados Unidos, además de otras en Reino
Unido, Francia y Alemania. Pero más importante que sus muchas patentes fue el amplio impacto que tuvieron algunas de
sus invenciones: la luz eléctrica y el suministro público de electricidad, la grabación de sonido y la cinematografía se
convirtieron en nuevas y poderosas industrias en todo el mundo. Sus inventos contribuyeron en particular a las
telecomunicaciones, como una máquina de voto, una batería para un automóvil eléctrico, la energía eléctrica, la grabación
de música y las películas. Sus avanzados trabajos en estos campos no fueron más que una continuación de su primer
trabajo como radiotelegrafista. Edison desarrolló un sistema de generación y distribución de energía eléctrica a las casas,
negocios y fábricas, un avance crucial para el mundo industrializado moderno.

Alexander Graham Bell: (Edimburgo, Escocia, Reino Unido, 3 de marzo de 1847-Beinn Bhreagh, Isla del Cabo
Bretón, Canadá, 2 de agosto de 1922) fue un científico, inventor y logopeda británico, naturalizado estadounidense.
Contribuyó al desarrollo de las telecomunicaciones y a la tecnología de la aviación.
Tras una serie de trámites (que se prolongarían después durante años en forma de reclamaciones judiciales), obtuvo en
1876 la patente del teléfono en Estados Unidos, a pesar de que el aparato ya había sido desarrollado anteriormente por
el italiano Antonio Meucci, quien fue reconocido oficialmente en EEUU y de forma póstuma como inventor del teléfono
más de ciento veinte años después, el 11 de junio de 2002. Independientemente de ello, la compañía que creó Bell para
explotar la patente, la Bell Telephone Company, fue la protagonista de los primeros pasos de la vertiginosa implantación
del teléfono como medio de comunicación de masas a escala internacional.

Muchos otros inventos ocuparon gran parte de la vida de Bell, entre ellos, la construcción del hidroala y los estudios de
aeronáutica.

Su padre, su abuelo y su hermano estuvieron relacionados con el trabajo en fonación y locución (su madre y su esposa
eran sordas), lo que influyó profundamente en el interés de Bell por las investigaciones sobre la escucha y el habla, así
como en sus experimentos con aparatos para el oído.

En 1888, Alexander Graham Bell fue uno de los fundadores de la National Geographic Society y el 7 de enero de 1898,
asumió la presidencia de dicha institución.

Aleksandr Stepánovich Popov:. Físico ruso, uno de los pocos ingenieros rusos de la época que además se interesó
por la electricidad y sus posibilidades. Es conocido en Rusia como el inventor de la telegrafía sin cable (1896) y fue el
primero en usar un cable suspendio como antena.

El 7 de mayo de 1895 el profesor e ingeniero ruso Alexander Stepánovich Popov había presentado un receptor capaz de
captar ondas hertzianas. También consiguió encontrar el mejor método para enviar y recibir ondas hertzianas: la antena
que estaba formada por un hilo metálico. Popov añadió a su receptor un hilo metálico extendido hacia arriba. Fue de este
modo que nació la primera antena. Por eso los rusos consideran a Popov como el auténtico inventor de la radio en lugar
de Marconi.

Dejo como legado un tipo de receptor de radio que sería clave para el futuro y realizó la primera comunicación a través
de este medio entre la tierra y un barco ruso, como hechos más importantes. Quizás su nombre no suene demasiado al
que no haya estudiado en profundidad la física y en pocas ocasiones aparece asociado al invento de la radio, papel que
ocupa casi totalmente Marconi, pero a pesar de su lejanía geográfica y su forma de ser tan modesta y distante hoy día se
conoce por completo su obra y la importancia de unos descubrimientos que encauzaron el camino posterior de la radio.
Edwin amstrong: En el año 1912 desarrolló un circuito regenerador que revolucionó la radiofonía sin hilos porque
podía amplificar débiles señales de radio sin distorsión, con mucha más eficacia que otros receptores de radio de la época.

En los años treinta, desarrolló el sistema de radiodifusión en modulación de frecuencia (FM), que proporcionaba una
mejor calidad de sonido y era más resistente a las interferencias que el anterior sistema de radiodifusión en modulación
de amplitud (AM).

El 31 de enero de 1954, Edwin Armstrong se suicida en Nueva York tras sufrir durante años el rechazo y todo tipo de
maniobras para dejarle fuera del negocio.

Reginald Aubrey Fessenden: (6 de octubre de 1866 – †22 de julio de 1932) fue un inventor canadiense. Nacido en
East Bolton, Quebec, Canadá, fue muy reconocido por sus trabajos en las primeras épocas de la radio, incluyendo el uso
de ondas continuas y la temprana - posiblemente la primera- radiotransmisión de voz y música. A lo largo de su carrera,
recibió cientos de patentes por dispositivos en campos como la transmisión de alta potencia, sonar y televisión.

A la edad de 14 años, el colegio Bishop's College School de Lennoxville, Quebec le entregó una maestría en matemáticas.

A finales de 1886, Fessenden comenzó a trabajar directamente para Thomas Alva Edison en el nuevo laboratorio de West
Orange, New Jersey. Fessenden logró rápidamente grandes avances, especialmente en el diseño de receptores. De 1890
a 1900, Fessenden trabajó en varias fábricas y en 1892 era profesor de ingeniería eléctrica en la Universidad Purdue, para
luego convertirse en jefe del departamento de ingeniería eléctrica de la Universidad de Pittsburgh en 1893. En 1900,
Fessenden trabajaba para el United States Weather Bureau (Servicio Meteorológico de Estados Unidos) donde desarrolló
el principio heterodino, con el que dos señales combinadas producen un tercer tono audible. Mientras trabajaba allí,
Fessenden, experimentando con un transmisor a chispa de alta frecuencia, transmitió con éxito la voz humana el 23 de
diciembre de 1900 a través de una distancia de aproximadamente 1,6 kilómetros, lo que parece haber sido la primera
radiotransmisión de audio en el mundo.

Lee de forests: (Council Bluffs, 1873 - Hollywood, 1961) Ingeniero estadounidense, inventor de la válvula triodo.
Estudió en la Universidad de Yale, donde realizó una de las primeras tesis doctorales sobre las ondas radioeléctricas.
Comenzó su carrera profesional en la Western Electric Company; previamente había solicitado, sin éxito, trabajar con
Guglielmo Marconi y Nikola Tesla. En la Western Electric Company patentó, en 1907, la válvula termoiónica denominada
inicialmente como auditrón y conocida popularmente como triodo.

El triodo de vacío consiste básicamente en un tubo rectificador de vacío o diodo en el que se ha introducido un tercer
electrodo en forma de rejilla entre el cátodo y el ánodo. Aplicando una tensión respecto al cátodo a la rejilla se hace variar
la corriente de electrones que van del cátodo al ánodo del diodo, de manera que una señal eléctrica débil que se introduce
a través de la rejilla aparece en la placa considerablemente amplificada.

El triodo permitió la construcción de amplificadores tanto de audiofrecuencia como de radiofrecuencia, a la vez que
osciladores y complejos circuitos eléctricos utilizados en los receptores de radio hasta el descubrimiento de los
transistores. Por todo ello se le suele llamar el padre de la radio. De Forest creó además la primera emisora: empleando
sus recién descubiertos triodos, instaló una emisora de radio en la Torre Eiffel parisina que se inauguró en 1915.

En 1920, en colaboración con la General Pictures Corporation, desarrolló un sistema para registrar la banda sonora en las
cintas cinematográficas, que no prosperó inicialmente al ser rechazado en favor de los sistemas desarrollados por otras
compañías más poderosas. Realizó una demostración pública en el teatro Rívoli de Nueva York en 1923, cuatro años antes
del estreno de El Cantor de Jazz, la primera película sonora.

La supremacía técnica del procedimiento desarrollado por Lee de Forest hizo que fuera finalmente el estándar adoptado
por la industria cinematográfica. De Forest fue además uno de los pioneros en la investigación de las ondas radioeléctricas
procedentes del espacio exterior y desarrolló un aparato de diatermia para uso clínico. Figura asimismo entre los primeros
que exploraron el camino hacia la invención de la televisión.

Antonio Meucci: (Florencia, 1808 - Nueva York, 1889) Inventor y científico italiano considerado el inventor del teléfono,
pese a que históricamente la paternidad del aparato se atribuyó al científico estadounidense de origen escocés
Alexander Graham Bell.

Meucci había cursado estudios de Ingeniería Mecánica en su Florencia natal, y en la década de los años treinta emigró a
Cuba en busca de fortuna. La suerte no lo acompañó, y después de trabajar durante algunos años como tramoyista y
sanador en La Habana, volvió a emprender viaje, esta vez con destino a Nueva York.

En Cuba, mientras trabajaba con enfermos reumáticos, a los que aplicaba pequeñas descargas eléctricas para paliar el
dolor, descubrió que la transformación de las vibraciones sonoras en impulsos eléctricos permitía transmitir la voz a
distancia, a través de un cable. En los años cincuenta comenzó a diseñar prototipos telefónicos. Construyó un primer
modelo en 1855 y en 1871 presentó un artilugio perfeccionado.

Ese mismo año, solicitó en Nueva York la demanda de patente del aparato y lo bautizó con el nombre de "teletrófono".
Para renovar el documento de la demanda debía pagar diez dólares cada año. El científico italiano cumplió esta obligación
los dos primeros, pero en 1874 no pudo conseguir el dinero y perdió sus derechos legales sobre el invento.
Meucci buscó entonces apoyo económico y presentó su teletrófono a la Western Union, pero la famosa compañía de
telégrafos rechazó la oferta. En 1876 y para sorpresa y desgracia de Meucci, el físico de origen escocés Alexander Graham
Bell patentó un aparato de transmisión de voz al que llamó teléfono. El científico italiano reclamó sus derechos en los
tribunales, pero murió sin que nadie reconociera su aportación a uno de los principales inventos del siglo XX.

Durante más de un siglo se mantuvo el error de atribuir a Graham Bell la paternidad del teléfono, hasta que finalmente,
el 11 de junio de 2002, el Congreso de los Estados Unidos reconoció oficialmente a Antonio Meucci como su verdadero
inventor. Además del teléfono, el científico italiano ideó un sistema de filtros para la depuración del agua e introdujo el
uso de la parafina en la fabricación de velas.

Édouard-Léon Scott de Martinville: nació el 25 de abril de 1817 en París. Procedía de una familia escocesa que
se había asentado en Francia en el siglo XVI. Su padre, noble de origen, era el barón de Balvery, caballero de San Luis,
capitán de dragones y comandante del departamento de Saône-et-Loire. Édouard-Léon era tipógrafo y corrector de
pruebas pero sobre todo un librero curioso que devoraba los libros estudiando los secretos de la estenografía.
Constatando las insuficiencias presentes en los principales sistemas, buscó un medio mecánico, semejante al oído, para
registrar automáticamente la palabra.

En 1854, con 37 años de edad, y después de estudiar la anatomía de la audición en uno de los libros que estaba corrigiendo
para imprimir, se planteó si no sería posible obtener con el sonido los mismos resultados que se habían conseguido con la
luz, de manera que se pudiera dejar una huella imperecedera de las palabras. Tras muchas experiencias, construyó un
pabellón fabricado con cornamenta en el que encajó un diafragma que recogía las vibraciones acústicas, las cuales movían
un estilete, grabando la variación de las ondas sonoras sobre una hoja de papel oscurecido de negro de humo que giraba
enrollada sobre un cilindro. Esta máquina, comparable a un oscilograma actual, la llama fonoautógrafo.

El 26 de enero de 1857 entregó su diseño en un sobre sellado a la Academia Francesa. Dos meses después le concedían
la patente.

En asociación con el fabricante de instrumentos de laboratorio Rudolf Kœnig, que le ayudó a construir sus aparatos, Scott
de Martinville vendió unas cuantas decenas de fonoautógrafos a laboratorios científicos que lo utilizaron para estudiar el
sonido. También fue distribuido a centros de enseñanza. El invento supuso una importante novedad para el estudio de la
acústica, permitiendo entre otras aplicaciones la determinación de la frecuencia de un tono musical. Sin embargo, el
aparato no era capaz de reproducir los sonidos que registraba, como Scott esperaba, ni tampoco reproducir el sonido.

Scott y Kœnig no compartían el mismo punto de vista sobre el destino del fonoautógrafo. Kœnig, vinculado a los medios
científicos, buscaba su perfeccionamiento por los investigadores, mientras que Scott, con un sentido más práctico, utilizó
su aparato para documentar la palabra y visualizar el sonido con la 'llama manométrica'. Esta divergencia provocó la
ruptura entre ambos.
La venta del fonoautógrafo no reportó los beneficios económicos que esperaba su inventor. Hasta su muerte, Scott fue
librero en la Rue Vivienne de París.

Édouard-Léon Scott de Martinville falleció el 26 de abril de 1879 en París, a los 62 años.

En 2008 el Lawrence Berkeley National Laboratory de California descubrió que una de las grabaciones realizadas por Scott
el 9 de abril de 1860 contenía un fragmento de unos 20 segundos de la canción popular francesa Au clair de la lune. Se
trata del registro más antiguo de una voz humana, 17 años anterior al fonógrafo de Edison.

Emile Berliner: (Hannover, 1851 - Washington, 1929) Inventor alemán. Miembro de una familia originaria de Berlín,
fue el cuarto de trece hermanos. Las penurias económicas familiares hicieron que Berliner se viera obligado a ayudar
económicamente a su padre, por lo que apenas fue a la escuela. Su primer trabajo remunerado fue como pintor, para más
tarde, a los 16 años, entrar como oficinista en un almacén de alimentación.

Pronto iba a aparecer su genio inventor: tras estudiar los métodos de producción de las fábricas en las que trabajaba,
construyó una máquina de tejer que mejoraba las existentes; fue éste el primero de su larga serie de inventos. El año 1869
fue decisivo para él, pues las tropas prusianas tomaron Hannover e instalaron un régimen de represión contra las familias
judías; además, en breve, Emil debía incorporarse al servicio militar. En estas circunstancias, un amigo de su padre,
residente en Washington, le ofreció un puesto de trabajo en una fábrica que poseía en Estados Unidos. La familia reunió
el dinero necesario para su viaje y en 1870 partió hacia Norteamérica con apenas 19 años.

Sus comienzos en tierras estadounidenses fueron difíciles, ya que el paro se extendía a consecuencia de la crisis de 1873.
Emil abandonó Washington para instalarse en Nueva York con la idea de encontrar un trabajo. Durante algún tiempo
vendió pegamento, volvió a pintar casas y dio clases de alemán. Tras la experiencia neoyorquina, decidió trasladarse a
Milwaukee, lugar en la que permaneció poco tiempo, y volvió a Washington. A pesar de los aprietos económicos, encontró
dinero y tiempo para tomar clases de música, estudios que fueron sin duda la raíz de su interés por la acústica. Su
exacerbado afán de conocimiento le llevó a matricularse en el Instituto Cooper para estudiar a media jornada electricidad
y física.

En esa época había varios inventores experimentando con la conversión del sonido en impulsos eléctricos que pudiesen
ser transmitidos sobre hilos; Berliner experimentó también con la transmisión eléctrica del sonido. Cuando avanzó en sus
investigaciones se le otorgó una posición de asistente del doctor Constantine Fahlberg en su prestigioso laboratorio
químico. Esta confianza pronto dio resultado, ya que inventó dos mecanismos eléctricos que reproducían el sonido de
manera más auténtica que los que existentes en ese momento y lo hacían transmisible en la distancia.
Berliner también creó los prototipos del micrófono y el transformador, los dos mecanismos básicos para la comunicación
electrónica, además de construir un micrófono de transmisor de carbono y un transmisor de diagrama de hierro (1877).
En esa época, el micrófono tenía el problema de la pérdida de fuerza de la corriente eléctrica en la distancia; Berliner logró
solucionar el problema añadiéndole una bobina de inducción al transmisor con corriente continua; era la primera vez que
se utilizaba una bobina de este tipo (transformador de forma ondulatoria).

Estos dos inventos fueron aplicados a la transmisión electrónica del sonido, hecho que transformó el teléfono de Reiss y
el de Antonio Meucci en meras curiosidades científicas, al tiempo que dio el impulso definitivo al aparato inventado por
Alexander Graham Bell. Por esta razón, se puede decir que Berliner fue el inventor del teléfono tal como ahora lo
conocemos: la patente sobre el transformador le fue otorgada en enero de 1878.

Berliner, conociendo que sus inventos podían hacer posible la telefonía, ofreció vender el uso de los mismos a la filial de
la Bell Company en Nueva York, negoció que logró concretar en septiembre de 1878 por 50.000 dólares, y en el que
también iba incluido un puesto de ingeniero jefe en la compañía. La lucha por la paternidad del invento con la Western
Union fue enconada, pero los tribunales norteamericanos dictaron que el inventor de ese nuevo tipo de telefonía era
Berliner.

En 1881 volvió a Alemania y, junto a su hermano Joseph, fundó la Telephon-Fabrik Berliner, con ramas en Viena, Berlín,
Budapest, Londres y París. Tras su paso por su país natal, regresó a Washington en 1883, donde resumió sus
investigaciones independientes sobre la reproducción mecánica del sonido. Berliner no se basó en copias de los inventos
de la época, sino que resolvió los defectos de aquellos creando nuevos materiales de reproducción.

Otra gran aportación suya fue el perfeccionamiento del fonógrafo. Como en los anteriores casos, era una forma más
evolucionada de las investigaciones de otros inventores como Edison, que había patentado el primer fonógrafo en 1877.
Berliner apostó por el disco de plato, ya que era más fácil de imprimir y de más preciso corte que los cilindros, el sistema
habitual. Buscaba, ante todo, materiales más duraderos y ligeros, razón por la que, con la invención de los discos, la
reproducción del sonido tomaba una gran potencialidad comercial.

También experimentó con una forma de incisión del sonido lateral más que vertical, en la que las líneas sustituyeron a los
puntos. A esta máquina tocadiscos la llamó gramófono, con un sistema de aguja que sería hegemónico hasta finales de
siglo XX. En 1887 patentó su invento en Estados Unidos y en Alemania; un año después, el Instituto Franklin de Filadelfia
le otorgó la Medalla de Scott, por su contribución al desarrollo de la acústica y la reproducción del sonido. Con algunos
amigos, fundó la United States Gramophone Company en 1893; en 1897 creó la Berliner Gramophone Company en
Montreal. También instaló sucursales en Europa: en 1898 abrió la Deutsche Gramaphon Gesellshaft y la Britrain's
Gramophone Co.

Además de sus experimentos en el campo del sonido, Berliner también trabajó en otros ámbitos como el de la aeronáutica.
Así, fue el primero en utilizar un motor ligero de combustión interna que, posteriormente, se empleó en los aeroplanos.
Bajo su supervisión general, su hijo, Henry Berliner, diseñó un helicóptero que voló con éxito a inicios de 1919. A pesar de
este repentino interés por la aeronáutica, volvió a los problemas de la reproducción del sonido y en 1925 creó unas
baldosas acústicas para su uso en auditorios y salas de conciertos. En 1913 se le concedió la Medalla Elliot Cresson en
reconocimiento de su contribución científica a la telefonía y la acústica.

You might also like