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MEDITACION Y CABALA Ati Coiemo mo mayeta ne tiatitl Rabi Itzjak Ginsburgh EDICIONES OBELISCO (&) BS fee Cecoige e(MC eM Cor u a eRe SM Cone CMTC Coleco ecole Ld eo oc mmel CULM os Mo eT UMICaLy él con lagrimas en los ojos. Al preguntarle por qué lloraba, el hijo contesté que en medio del juego, mientras se escondis PIE eee Rb AR RES Mh a tt ite) hasta que se dio cuenta de que nadie lo buscaba. E irrumpié en UU co Dele Cae eure eRe ecco col oR Boole CE decirlo, cuando nosotros detenemos el juego sagrado del es- nee eee eee) Peace acu i tome ee eee mst CMe Rol ee Ue lta Leo) (oe DTS M eet eee ME meLe CoM ge | jugar con nosotros el juego divino del «escondite». Nuestra necesidad mas profunda es revelar a Dios en nuestras vidas. Pero, ;dénde encontramos a Dios? ;A donde vamos para buscarlo? En el presente libro, Meditacién y Cabala, el Rabi esr Se Ne Rec oR eRe Ue eect SU clay Remo ec Mr eC MUA OL Ce LMR EU lect lellon NINN " | |) IF EDICIONES OBELISCO ® bora k Meta Cem L3 erties EL MISTERIO DEL MATRIMONIO. Rooke airy letra del abecedario hebreo, y al ET pes egoR Rt el ge oR) We ge Re eM eRe formar al lector que el mismo ha sido preparado y revisado en Is- rael por estudiosos de Tora. aes e Romeo le} de este libro y sobre el resto de Mele eee Meo ol UM a oo aaa os ot oe meal CE jstudy@netvision.netil. Expertos Comoe teeta cen et Ce Mu aL re Cee esd oa MEDITACION Y CABALA Raf ITZJAK GINSBURGH MEDITACION Y CABALA EDICIONES OBELISCO Si este libro le ha interesado y desea que le mantengamos informado de nuestras publicaciones, escribanos indicindonos qué temas son de su interés (Astrologfa, Autoayuda, Ciencias Ocultas, Artes Marciales, Naturismo, Espiritualidad, Tradicién...) y gustosamente le complaceremos. Puede consultar nuestro catalogo de libros en Internet: htp//www.edicionesobelisco.com Coleccién Cabala y Judaismo MEDITACION Y CABALA Rabi ltzjak Ginsburgh 1." edicién: junio de 2010 Maquetacién: Mariana Mutioz Oviedo Disefio de cubierta: Marta Rovira © 2010, Rabi Itgjak Ginsburgh (Reservados todos los derechos) © 2010, Ediciones Obelisco, S. L. (Reservados los derechos pata la presente edicién) Publicado por arreglo con Alef Jojmé, Jerusalén. Edita: Ediciones Obelisco S. L. Pere IV, 78 (Edif. Pedro IV) 3.* planta, 5.* puerta 08005 Barcelona - Espaita Tel. 93 309 85 25 - Fax 93 309 85 23 E-mail: info@edicionesobelisco.com Paracas, 59 C1275AFA Buenos Aires - Argentina Tel. (541-14) 305 06 33 - Fax: (541-14) 304 78 20 ISBN: 978-84-9777-577-9 Depésito Legal: B-22.569-2010 Printed in Spain Impreso en Espafia en los talleres graficos de Romanya/Valls S.A. Verdaguer, 1 - 08786 Capellades (Barcelona) Reservados todos los derechos. Ninguna parte de esta publicacién, incluido el disefio de la cubierta, puede ser reproducida, almacenada, transmitida o utilizada en manera alguna por ningtin medio, yasea electrénico, quimico, mecinico, éptico, de grabacién o electrografico, sin el previo consentimiento por escrito del editor. Dirfjase a CEDRO (Centro Espafiol de Derechos Reptograficos, www.cedro.org) si necesita forocopiar o escanear algiin fragmento de esta obra. PROLOGO En un discurso publico en el verano de 1979, el Rebe de Lubavitch, Rabi Menajem Mendel Schneerson, analizé la necesidad de desarrollar una forma de meditacién judia adecuada para nuestra generacién.! EI Rebe explicé que existen tres niveles generales de meditacién: En su nivel més simple, la meditacién es una técnica de relajacién, que se ha vuelto esencial en nuestro estilo de vida contempordneo e inquieto.? En este contexto, la medita- cién es simplemente una forma de medicina, administrada para curar desérdenes psicoldgicos como estrés, angustia 0 tensidn. Para que den resultado, las técnicas meditativas de este tipo no necesariamente deben suponer un contenido judaico explicito (aunque, para el judfo, obviamente, tienen que estar libre de asociaciones con cualquier otro sistema de creencia. (Las técnicas de meditacién que supongan formas explicitas o derivadas de prdcticas idolatras estan prohibidas también para los no-judfos). El siguiente nivel de meditacién requiere concentrar la mente y el corazén en la presencia de Dios en nuestras vidas y en su Providencia sobre todas las cosas, como lo expresado en un versiculo de Salmos: «A Dios he puesto siempre delante de mi».3 Finalmente, el nivel mds profundo de meditacién supone la contemplacién concentrada sobre los misterios de la Tord. Ras{ ITzjAK GINSBURGH Desde la época del Baal Shem Tov, la contemplacién de estos misterios y su aplicacién en nuestras vidas cotidianas se ha convertido en una necesidad. Por cierto, el mismo Mesias le prometié al Baal Shem Tov que su venida ser4 una conse- cuencia de «diseminar tus fuentes —esto que yo te he ense- fiado y que tu has comprendido— al extremo més lejano».* Inspirado por el llamamiento del Rebe, Rabi Itzjak Ginsburgh comenzé a desarrollar un sistema de medi- tacién judia basado en las ensefianzas de la Cabala y el Jasidismo.’ En el transcurso de los afios, ha ensefiado este sistema en varios sitios, y ahora algunos de sus estudiantes lo estén transmitiendo por todo el mundo.® El modelo estructural primario del sistema de meditacién judia de Rabi Ginsburgh est4 basado en la ensefianza tal- miidica de que el universo espiritual en el que vivimos est4 compuesto por los siete «Cielos» y la «Tierra» debajo de ellos.’ De acuerdo con la descripcién del Talmud de la fun- cién de cada uno de los cielos, podemos considerar estos siete cielos como niveles de conciencia Divina a través de las cuales podremos ascender a un conocimiento completo de Dios y a una unién con El, como sigue: ree Vilén («Cortina») — nuestra experiencia de la re- creacién continua de Dios de toda la realidad. Rakia («Firmamento») — nuestra experiencia de las letras del alfabeto hebreo como canales de la energia creativa de Dios y como los ladrillos de la realidad. Shejakim («Piedras de molino») — nuestra experien- cia de Dios nombréndonos y dandonos una misién para cumplir en la Tierra. MEDITACION Y CABALA * Zevul («Domicilio») — nuestra experiencia de Jerusalén y del Templo Sagrado mientras existen en la esfera espiritual, listos para materializarse en la esfera fisica. * Maén (Residencia») — nuestra experiencia de las fuerzas Divinas que operan en la naturaleza, permi- tiéndonos emular a Dios en nuestras vidas. * Majén («Lugar de Descanso») — nuestras experien- cias del Nombre Inefable de Dios Havaia, su omni- potencia y omnipresencia, reflejadas en cada aspecto de la realidad. * — Aravot («Cielos») — llegando al estado definitivo de verdadera anulacién positiva (ditul) en la experien- cia de Dios solo, transformandonos en un carruaje Divino, un vehiculo de Dios para cumplir Su deseo en la creacién. La «Tierra», situada debajo de los siete Cielos y sobre la cual descansan los siete Cielos,* es el cimiento de esta escalera meditativa. La meditacién presentada en este libro corresponde con la Tierra y es por consiguiente la medita- cién mds bdsica, disefiada para infundirnos una conciencia de Dios en este mundo mientras EI se revela ante nosotros a través de los seis preceptos continuos de la Tora. Primero debemos dominar esta meditacién y volvernos aptos para «vivir en el espacio Divino» antes de ascender a niveles mds altos de la conciencia Divina. Es la Tierra, la orientacién general de la conciencia Divina, la que nos permite apren- der a ascender. Algunos de los niveles subsiguientes del sistema meditativo de Rab{ Ginsburgh han sido analizados en otros libros suyos.? Rast ITzjAK GINSBURGH Ademéas de su contenido espiritual, la meditacién se aumenta por varias prdcticas asistentes. La primera en este sentido es la miisica. A lo largo de la historia judfa, el clamor del alma por Dios y la alegria de vivir en su presencia fueron expresados en forma de melo- dia. Con la llegada del Jasidismo, hubo un florecimiento de la creatividad judia en lo referente a la miisica, ya que muchos maestros y discipulos han compuesto (0 adaptado) melodias meditativas profundas que ayudan a la prdctica de la meditacién y la plegaria.'° Respiracién y movimiento también han sido siempre un elemento implicito de la meditacién judia. Cabalistas y Jasidim no siempre practican conscientemente técnicas especificas de respiracién, asumen posturas determinadas, o realizan en movimientos especificos. Pero la paz interna que proviene con la meditacién suscita una respiracién profunda, atin cuando el clamor por Dios y la alegria que acompafia a la meditacién llevan a la persona a servir a Dios con «todos mis huesos».'' En alegrfa, uno baila ante Dios;! deseando servirlo a El, uno corre® hacia 0 «para» Dios.'4 rere La exposicién basica de la meditacién del nivel basico aqui presentado, fue circulando durante algunos afios entre los estudiantes del Rabi Ginsburgh, y una edicién preliminar fue publicada en 1988 en Ascent Quarterly # 14, pags. 6-15.'5 Esto después fue ampliado a un librillo de 19 paginas, Living in Divine Space, publicada por Gal Einai en 1996. El pre- sente libro es una elaboracién adicional de esta meditacién. Ademiés del flujo central de ideas en el texto, este libro contiene una riqueza de material mds avanzado disefiado 10 MEDITACION Y CABALA para estudiantes avezados en Cabala y Jasidismo. Las expo- siciones mds breves aparecen junto con las notas al final del libro; las mds largas aparecen como ensayos suplementarios después del capitulo once. Incluso el principiante se enri- quecera explorando este material. cere Algunas notas acerca de las convenciones que se usan en este libro: Hay varios Nombres para designar a Dios que se usan en la Biblia y que se mencionan aqui. Por su santidad y su poder espiritual, est4 prohibido pronunciar estos Nombres, a menos que se haga durante una oraci6n o cuando se recita un versiculo biblico completo. Por lo tanto, hemos altera- do deliberadamente la transliteracién de estos Nombres, de acuerdo con la practica tradicional segtin como los judios observantes los pronuncian en contextos no-liturgicos. El Nombre unico de Dios, formado por cuatro letras, se conoce generalmente como el Tetragramaton y se hace referencia en escrituras judias (y en este libro, también) como «el Nombre Havaid». Nos esta prohibido pronunciar este Nombre por completo, y por cierto, su pronunciacién correcta no se conoce hoy en dia. En contextos litirgicos, el Nombre Adnut se pronuncia en su lugar; y en contex- tos no—litirgicos, es sustituido por la palabra Hashem («el Nombre»). Debido a su santidad especial, se abrevid a propésito (0 se le agregé un guién) cuando un versiculo se escribe en hebreo. En espafiol, fue escrito como «El Eterno» para distinguirlo de todos los otros Nombres de Dios. El término «Biblia» (Zanaj) constituye la Tord (los Cinco Libros de Moisés); los Profetas (que consisten ll Rast [TzjaAK GINSBURGH en ocho libros: Josué, Jueces, Samuel, Reyes, Isaias, Jeremias, Ezequiel, y los doce profetas); y las Escrituras (que consisten en once libros: Salmos, Proverbios, Job, Rut, Cantares, Eclesiastés, Lamentaciones, Ester, Daniel, Esdras-Nehemias y Crénicas 1 y 2). En el texto, el término «Tord» debe ser entendido de acuerdo con el contexto: en su sentido més estricto, se refiere a los Cinco Libros de Moisés, pero mas general- mente, se puede referir a la totalidad de lo escrito y a las ensefianzas orales, es decir, todas las instrucciones de Dios para Israel entregadas para iluminar a la humanidad. El término «Cébala» se usa frecuentemente para referirse a la totalidad de la dimensién interna de la Tord, incluyen- do las ensefianzas del Jasidismo. Estamos profundamente agradecidos al Todopoderoso por poder ofrecerle esta obra al publico. Con nuestras mentes y nuestros corazones concentrados en Dios, esperamos que pronto presenciemos la venida del Mesias y la verdadera y completa Redencién. Si el lector tuviera cualquier duda o consulta, o deseara ampliar su conocimiento acerca de estos temas, puede dirigirse a la pagina de Gal Einai en espafiol: www.dimensiones.org Gal Einai Jerusalem 18 de Iar, 5763 2 INTRODUCCION PNYII-A Con todo mi corazin te he buscado.! Buscar a Dios con todo nuestro corazén es la esencia de la meditacién judia. El objetivo del judafsmo en general, y el de la meditacién judia en particular, es encontrar a Dios y revelarlo en este mundo. Dios nos puso sobre la Tierra y oculté Su presencia para jugar con nosotros el juego divino del «escondite».? Al bus- carlo concientemente, le brindamos alegria, por asi decirlo, y asi cumplimos su deseo en la creacién. Nuestra necesidad més profunda es revelar a Dios en nuestras vidas y esto es también la voluntad de Dios. Se dice acerca de Rabi Baruj de Mezhibuzh, el nieto de Baal Shem Tov, que una vez, sus hijos estaban jugando al escondite con sus amigos, y uno de sus hijos vino corriendo hacia él, con lagrimas en los ojos. Cuando le pregunté por qué lloraba, el hijo contesté que en medio del juego, mien- tras se escondia, sus amigos se aburrieron del juego y lo dejaron solo. El esperé y esperé hasta que se dio cuenta de que jnadie lo buscaba! E irrumpié en llanto nuevamente. Rabj Baruj aprendié de esto cémo se siente Dios, por asi decirlo, cuando nosotros detenemos el juego sagrado del escondite en el medio, sea por la desesperanza ante la idea que jamés lo encontraremos 0 porque carecemos del suficiente interés como para seguir buscdndolo. 3Pero, dénde encontramos a Dios? ;A dénde vamos para buscarlo? 13 Ras{ ITZJAK GINSBURGH Dios nos revela sus caminos —los senderos por los que El mismo camina?— en la Tora. Los preceptos de la Tord son los «caminos de Dios»,* el «lugar» hacia donde uno se tiene que dirigir cuando busca a Dios.‘ Si esperamos descubrir y sentir la revelacién continua de Dios ante nosotros aqui en la Tierra, entonces debemos meditar sobre aquellos preceptos de la Tora que no estan limi- tados por las barreras de tiempo y espacio. Por eso, la meditacién judia mds fundamental esta basada en los seis preceptos continuos de la Tora, como sera expli- cado. Punto, LiNgA, AREA La Cébala y el Jasidismo hacen hincapié en la meditacién como una técnica esencial para la comunicacién con Dios. Con respecto a la meditacién, as{ como con respec- to a cualquier otro proceso de crecimiento, se habla de tres etapas del desarrollo espiritual: «punto, linea, drea».$ Definido en su sentido simple, un «punto» es cero- dimensional, una linea es unidimensional, y un rea es bidimensional. En la conciencia humana, el estado del «punto» cero-dimensional es la experiencia de quedarse estatico, sin avanzar, el sentido de tener velocidad cero. El estado de la linea unidimensional es la experiencia dindmica de movimiento a una velocidad continua y fija (mateméticamente, este tipo de velocidad continua es linear). El estado del drea bidimensional es la experiencia de aceleracién, velocidad que se incrementa constante- mente (matematicamente, la aceleracién se representa como una expresién cuadratica.) 4 MEDITACION Y CABALA Etapas del desarrollo espiritual «punto» | Cero-dimensional | Estético «linea» | Unidimensional | Velocidad a una velocidad continua y fija «Area» | Bidimensional Aceleracién, velocidad que se incrementa ‘constantemente Definido en un sentido mds amplio y profundo, el «punto» no debe entenderse literalmente como cero-dimensional, ni tampoco la linea como unidimensional, ni el 4rea como bidimensional. Estas tres etapas progresivas deben enten- derse en relacién una con la otra. El «punto» es el punto de partida de nuestro viaje espiritual hacia delante; la «linea» es la conciencia de avanzar realmente hacia nuestro objetivo; el «drea» es la experiencia de alcanzar el objetivo, poseerlo y ser poseido por él. Aqui, paraddjicamente, el estado siempre-creciente de aceleracién se para mientras nosotros seguimos experimentando la dindmica vital del movimiento. En otras palabras, paradéjicamente existen simulténeamente en nuestra conciencia movimiento y descanso Aplicado a la meditacién, el «punto» de partida es el de centrarse en el objetivo, que es la busqueda por Dios (como en la frase «Te he buscado con todo mi corazén»). La «linea» de meditacién es su direccién bien definida e incluye los parametros de su orientacién. Estos pard- metros son las seis direcciones espaciales que nos rodean (arriba-abajo, adelante-atrds, izquierda-derecha), cada uno correspondiendo a uno de los seis preceptos continuos de faa Rast ITzjAK GINSBURGH la Tord que deben asegurar nuestra conciencia continua de Dios. (Examinaremos estos preceptos en detalle dentro de poco.) El «4rea» completa de la conciencia meditativa es el vol- verse tan absorto en la profundidad de la meditacién, tanto en los planos intelectuales como emocionales, que uno transciende su propio estado limitado de autoconciencia y sufre una metamorfosis, hasta volverse uno con la verdad Divina envestida en la meditacién. Etapas del desarrollo espiritual en meditacién i T Centréndose Buisqueda

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