EN LA MENTE II
Cémo decirlo
Marc MONFORT
ISABELLE MONFORT JUAREZINTRODUCCION
EN LA MENTE,
En la mente es un material para trabajar el lenguaje de seferencia mental, es decir,
la comprension y expresion de experiencias y representaciones que ocurren dentro de
nuestra mente y la de los demis
A diferencia de los aspectos mas formales y probablet
guiaje como Ia fonologia y la morfosintaxis, este componente del lenguaje que tiene que
ver con la seméntica y la pragmatica esta estrechamente relacionado con otras funcio
nes que se desarrollan a lo largo de los primeros anos de vida y que permiten dotar de
sentido a la actividad humana
El estudio de dichas funciones ha ido desarrolliindose con mas fuerza a partir de la
observacién y estudio de las conductas de los nifios con autismo ya que parecen estar
especificamente alteradas en este trastorno.
Los estudios de nifios con un desarrollo normal muestran que se da en ellos un
interés muy precoz por les estimulos relacionados con la expresion de sentimientos:
“hacia los 2.0 3 meses empiezan ya a fijarse en los matices mas expresivos del rostro
jones emocionales" (Rivitre 1996). La per
cepcién y el uso de la informacion proporcionada por las caras aparece de manera muy
temprana en los bebés: empatizan con la cara del adulto Horando si la cara es de enfa-
do 0 por el contrario riendo si es de alegria, Hobson realiza en su libro * El autismo y
el desarrollo de la mente “ (Hobson, 1995) una revision de
males en la que destaca esta “preparacion emocional” de los bebés como elemento
esencial en el desarrollo de las relaciones interpersonales. 6n, se describe
un patron evolutivo en el que los bebés de algunos meses que ya tienen ciertos nive
les de empatia son capaces, al llegar al aio, no s6lo de detectar estados emocionales
sino de tener en cuenta esa informacion en sv interaccién con un objeto 0 con el
medio. Esta capacidad llamada ‘asignacion de referencia social” es definida por Hob:
son como " La capacidad para percibir y respondet a las orientaciones afectivas de las
personas que les rodean con respecto las cosas y los acontecimientos del medio’
(Hobson 1995). Es decir, que un nifo de un afo, ante varios juguetes, mostrard una pre:
ferencia por aquel que haya suscitado una expresion de emocién positiva en el adulto
\ente Mas especificos del len-
humano, comparten € intercambian expre:
trabajos con nifios nor
esta re)¥. Por el contrario, tenders a jugitr menos com «uel al que el adulto haya dirigido una
expresiin negativi
Alos dieciocho meses aparece en el nifo und nueva forma de relacionarse, cualita
livamente diferente, en la que se cr
an vinculos con determinaclas personas y aparece
cl rechazo a los extranos, Este momento del desarrollo. en el que aparecen funciones
esenciales en el nino, se corresponde con el periodo en el que sacle manitestarse tipi
camente el autismo, Es wit etapa critica en la que empiezan a desarrollarse las funcio
hes que Vygotsky Ltmaba funciones mentales rudimentarias superiores que companen
unas caracteristicas determinadas (aprendizaje incidental, universalidad, preparacion
en las interacciones
| para “sentir
then como Intersuubjetividad Primaria (Trevarthen 1982, 1995)
Al misnio Gempo, se desarrola en el nito un concepto también muy relacionado con
bioldgica etc...) y todas ellas implican la necesidid de participa
desile dentro, companiendo intencion y sentido. Requieren la capaci
con’, definida por Tre
la comprension y expresin de estados mentales y emociones que €s el sentido del “si
mismo”. Nifios de dos anos muestran conductas como la de dar un juguete al hermano
pequeno cuando lors que implican, en primer lugar, la nocién del otro como indivi.
duo con emociones, sto que le ofrecemos al otto
algo que para nosotros es satisfactorio y, por ttimo, la conciencia de poder modificar
el estado interno de los dem
nifos sean capaces de resolver las tareas clisicas de Teoria de la Mente.
A partir del segundo afio el lenguaje supone una nueva fuente de analisis del des-
arrollo emocional de los niftos. El patron de adquisici6n de los distintos términos rela
Gionados con estados mentales y emociones nos oftece informacion acerca de los dife-
rentes grados le complejidad y exigencia cognitiva de las distintas categorias: sobre
estados mentales (saber, recordar, conocer) y sobre emociones (alegria, enfado, ver-
gilenza) Segin Bretherton, Frith, Zahn-Waxler y Ridgeway (1986), autores de un traba-
jo sobre expresion de emociones, ‘aunque se ha pretendido que se pueden compren-
der las emociones sin el uso del lenguaje, la capacidad de hablar sobre ellas permite
erente de intersubjetividad al de la comunicaci6n no verbal, La habilidad
para discutir sobre las emociones cumple una funcién reguladora y clarificadora en las
relaciones interpersonales incluso en los nifios mas pequefos"(Bretherton, Frith, Zahn-
Waxler, Ridgeway, 1986), Los trabajos sobre adquisicién de términos emocionales no
han encontrado datos suficientemente consistentes como para definir un patrin de evo:
lucion comin, Lo que sf parece claro es que, por ejemplo, los nifios con 18 meses com-
prenden fa funcién de las emociones en el contexto de acontecimientos; que a los 24
meses ya hay intentos por parte de los nifios de aliviar los sentimientos de los demas;
que en tomo a los dos aitos, los nifos ya utilizan el lenguaje para imputar emociones
que no son veridicas, a si mismos, a mufecos 0 a compaferos como parte de juegos
de ficci6n. Entre los 3 y 5 afos parece que la habilidad de los aifios pata reflejar emo
ciones gana en precisin, claridad y complejidad y ademas empiezan a darse cuenta de
que las experiencias emocionales se pueden controlar y fingir. Este es el momento en
el que tabi apaces de resolver las tareas clisicas de falsa creencia de primer
orden ("Sally y Anna”, “El lapiz y el tubo de Samarties”- Frith, U. 1991).
en segundo lugar la de uno mismo
s. Este tipo de conductas ocurre mucho antes de que estos
un nivel di
son