Revista de IUDEX * Nimero 1 * Agosto 2013,
DE TIN MARIN DE DO PINGUE, CUCARA, MACARA,
TITERE FUE, YO NO FUL, FUE LA LEY...
(La decisin judicial: entre el azar y lo predecible).
Gustavo Adolfo Jiménez Madrigal!
* Juez de Juicio del Il Circuito Judicial de San José, Goicoechea.
Profesor de la Facultad de Derecho de la UCR.
Correo Electrénico: gajm70@yahoo.comGUSTAVO A.TIMENEZM: ta decision jul entre el azar y lo predecible
Sumario:
1. A manera de introducci6n.
2. La tragicomedia judicial y el escepticismo (ante los hechc
antes las reglas).
3, La discrecionalidad del juez frente a las alternativas.
4, El mito de la ‘Unica Solucién Correcta’ (One Right Ansv
como mascara
5. Un ejemplo concreto.
6. Un par de palabras para concluir,
Resumen:
En este ensayo se analiza el tema de la discrecionalidad judici
la libertad de interpretaci6n de la que goza el juez y la jueza a lat
de decidir, Se critica la idea del ‘Unico Significado Verdadero’, dicie
entre otras‘cosas que los métodos de interpretacién son mascaras
encubren al verdadero sujeto responsable de la decision.
Abstract:
‘This paper is about judicial discretionality and the freedon
interpretation that a judge has when he renders a decision. Ther
a critic towards the idea of the 'One Right Answer’, saying am
other things that methods of interpretation are masks that cover up
human being responsible for the decision.
Palabras clave:
Juez — Interpretacién — Métodos - Discrecionalidad ~ Mascaras
Key words:
Judge — Interpretation ~ Methods ~ Discretionality - Masks
132Revista de IUDEX * Nmero 1 * Agosto 2013
A manera de introduccién.
Cuenta Piero Calamandrei que una vez dos jueces en dos salas de
Ja misma Corte, quizas el mismo dfa, juzgando procesos virtualmente
id€nticos, iguales hechos y mismo fundamento legal, decidieron el caso
de manera completamente diversa. Al finalizar ambos procesos, un
litigante habia obtenido la anhelada victoria mientras que el otro habia
perdido,
éQué fue lo que pasé? En este caso la respuesta es tan sorprendente
como inaudita: El que perdié el proceso lo perdié no necesariamente
porque se equivocara en el planteamiento de su teoria del caso, sino
porque se equivocé de puerta o, en otras palabras, de juez. Si su caso
hubiese sido conocido por el mismo juez de la sala contigua, quizas
en lugar de una sentencia desfavorable, habria también obtenido la
decision esperada
Este tipo de situaciones que en principio pudiéramos considerar
como casos singulares y poco comunes son, en la realidad de la praxis
judicial cotidiana, la regla y no la excepcién:
“Las sentencias contradictorias no son, por tanto, ni anormalidades
ni anomalias. Es irreal tachar de anormal un fendmeno cotidiano y
puesto que buena parte de los pleitos se basan en jurisprudencias
contradictorias, ningtin abogado aceptaria estas descalificaciones.
No hay que ser tan soberbio como para pretender que, cuando
propugnamos una rectificacién de un criterio jurisprudencial
asentado, se conviertan automaticamente en incorrectas todas
las sentencias anteriores. (...) Por cierto, que a las pocas horas
de haber escrito estas lineas leo en el niimero 144 de la RAP,
p. 266, un parrafo de Ana Belén Gomez que ~aunque sea con
unas intenciones distintas a las mfas- demuestra hasta qué punto
hay jOvenes que ya no estan dispuestos a aceptar sin beneficio
de inventario las averiadas ideologias de sus mayores: da
inmensa gravedad que pose este problema —de las sentencias
contradictorias- no ha levado paradéjicamente a tatar de
resolverlo sino antes bien a ocultarlo: no sélo a la opinién publica
sino incluso a los propios juristas, a quienes desde las aulas
universitarias se nos ha inculcado una falsa teoria... Y es que,
en el fondo, generalizar el conocimiento de este hecho tendria
consecuencias trascendentales, indeseadas por muchos:
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