G A C E TA

CONSTITUCIONAL

ANÁLISIS Y CRÍTICA

La construcción jurisprudencial
del derecho a la libertad sindical

Javier ESPINOZA ESCOBAR*

Ya han pasado 15 años desde la emisión de la STC Exp. N° 01124-2001-AA/TC, que pese
a sus imprecisiones, significó el punto fundamental de partida para la reforma progresiva
en materia laboral, específicamente en la construcción del contenido de la libertad sindi-

RESUMEN
cal y su protección frente al despido En ese sentido, el presente artículo analizará retros-
pectivamente la citada sentencia, enfocando el análisis en la protección constitucional que
–a partir de esta– ha recibido el derecho de libertad sindical. Asimismo, se resaltará la si-
tuación actual de dicha sentencia, pues el panorama fáctico no ha variado sustancialmen-
te ya que, todavía subsisten conductas empresariales antisindicales que vulneran la liber-
tad sindical.

emitida por el Tribunal Constitucional (en

ii PALABRAS CLAVE
Sindicato / Despido / Libertad sindical / Relación
laboral / Conductas empresariales antisindicales /
Negociación colectiva / Autonomía sindical
Recibido : 27/03/2017
Aprobado : 28/03/2017
INTRODUCCIÓN
No cabe duda de que una de las sentencias
trascendentales en materia laboral fue la
adelante, TC) en el Exp. N° 01124-2001-
AA/TC, del 11 de julio de 2002, caso Sin-
dicato Único de Trabajadores de Telefónica
del Perú y Fetratel contra Telefónica del Perú
(en adelante, STC). Con ella, el supremo in-
térprete de la Constitución (en adelante, CP)
da inicio a una reforma progresiva en materia
laboral en temas que incluyen la protección
frente al despido y la libertad sindical1.
Como se recuerda, el TC determinó que la
empresa Telefónica del Perú había afecta-
do el derecho a la libertad de sindicación y

* Miembro de la Sociedad Peruana de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social. Director (Sección Perú) del
Laboratorio Hispano - andino de Jurisprudencia Laboral y de Seguridad Social.
1 Para apreciar esta reforma progresiva en materia de la libertad sindical se puede consultar ESPINOZA ESCOBAR,
J.: “El Tribunal Constitucional, los procesos constitucionales y la delimitación del contenido de los derechos co-
lectivos de trabajo” en ÁLVAREZ MIRANDA, E. (Dir.): Constitución y proceso. Libro homenaje a Juan Vergara
Gotelli. Jurista Editores, Lima, 2009, pp. 913-926.

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el derecho al trabajo de los a sustentar su pronuncia-

recurrentes representados miento. Nos referimos a:
por el sindicato puesto que La vulneración del derecho de (1) la teoría de la eficacia
resultaba coincidente que libertad sindical parte de dos horizontal o inter privatos
las personas con las que la presupuestos: la teoría de la de los derechos constitu-
demandada concluyó uni- cionales; y, (2) la remisión
lateralmente la relación la-
eficacia horizontal o inter pri- a los instrumentos interna-
boral fueran precisamente vatos de los derechos cons- cionales de derechos hu-
las que conformaban tan- titucionales; y la remisión a manos ratificados por el
to el Sindicato Unitario de los instrumentos internacio- Perú y a la interpretación
Trabajadores de Telefóni- nales de derechos humanos que de estos han efectuado
ca del Perú S.A. y la Fede- ratificados por el Perú. los órganos internaciona-
ración de Trabajadores de les. Ambos serán tratados
Telefónica del Perú. a continuación:
A través de la presente contribución se ana- 1.1. Los efectos inter privatos de los derechos
lizará retrospectivamente la citada senten- constitucionales
cia, enfocando nuestro análisis en la protec-
No cabe duda de que, de un tiempo a esta par-
ción constitucional que –a partir de esta– ha
te, los derechos fundamentales no constitu-
recibido el derecho de libertad sindical. Asi-
yen solo derechos públicos subjetivos oponi-
mismo, se resaltará la actualidad de la STC,
bles al Estado sino que su eficacia se extiende
pues a casi 15 años de su emisión, el panora-
también a las relaciones jurídico-privadas,
ma fáctico no ha variado sustancialmente ya
sin necesidad de “mediaciones concretizado-
que, actualmente, subsisten conductas empre-
ras”2, pese a que aquellas están influidas por
sariales antisindicales que vulneran la liber-
la libertad de contratación y el principio de
tad sindical.
la autonomía de la voluntad. La razón funda-
I. ANÁLISIS DE LA STC EXP. N° 01124- mental es proteger al individuo frente a otro o
2001-AA/TC: CONSTRUCCIÓN IM- frente a cualquier poder social, económico o
PRECISA DEL COMPLEJO CONTE- de otra índole.
NIDO DEL DERECHO DE LIBERTAD
De esta forma –al igual que ocurre con la ac-
SINDICAL
tuación estatal– la actuación de los particu-
1. Presupuestos constitucionales lares está sometida a los principios, valores
para la protección de la libertad y derechos que la Constitución proyecta pero
sindical además, estos cuentan con los mecanismos
Como se desprende de la STC bajo comenta- necesarios para hacer valer sus derechos fun-
rio, para el análisis de la vulneración del dere- damentales como auténticos derechos subje-
cho de libertad sindical por parte de la emplea- tivos ante los órganos jurisdiccionales, en el
dora, Telefónica del Perú, el TC parte de dos supuesto de amenaza o lesión por parte de
presupuestos fundamentales que contribuyen otro particular.

2 Esto porque se condiciona la operatividad de los derechos fundamentales en el campo de las relaciones privadas a
la mediación de un órgano del Estado, sea por “la intervención del legislador o la recepción a través del juez, en
el momento de interpretar la norma”. Sobre la eficacia mediata de los derechos fundamentales se puede consultar
BLANCAS BUSTAMANTE, Carlos. Derechos fundamentales de la persona y relación de trabajo. 2ª edición
aumentada, Fondo Editorial de la PUCP, Lima, 2016, p. 53 y ss.

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Así lo ha reconocido el TC en la STC bajo co- reconocido en el artículo 1 de la Constitu-

mentario, pues partiendo de la supremacía de
la Constitución en el ordenamiento jurídico
peruano, según lo dispone su artículo 51, nos
recuerda que el deber de respetar y cumplir la
Constitución –regulado en su artículo 38– co-
rresponde a todos los peruanos. Este deber es
una muestra de la vinculatoriedad erga omnes
de la Constitución que se proyecta “no solo al
ámbito de las relaciones entre los particulares
y el Estado, sino también a aquellas estableci-
das entre los particulares”. Por ello, cualquier
acto proveniente de una persona natural o
persona jurídica de Derecho Privado que pre-
tenda desconocer los derechos fundamentales
reconocidos en la Constitución puede ser ca-
lificado como inconstitucional3.
Esta opción constitucional es incontestable
al punto que la propia Constitución establece
una norma de cierre: el artículo 200 que habi-
lita a cualquier ciudadano a interponer las de-
mandas de hábeas corpus (numeral 1), am-
paro (numeral 2), y hábeas data (numeral 3)
frente al hecho u omisión, por parte de cual-
quier autoridad, funcionario o persona, que
amenace o vulnere los derechos fundamenta-
les en ella reconocidos4.
La interpretación vertida por el TC en la sen-
tencia bajo comentario no hizo sino dar vi-
gencia efectiva al principio fundamental
ción que coloca a la persona humana y el res-
peto de su dignidad (y, por tanto, de los de-
rechos que como tal le corresponden) como
fin supremo de la sociedad y del Estado5. Si
esto es así, las disposiciones constituciona-
les no van solo dirigidas al Estado sino tam-
bién a la sociedad en su conjunto y a todos los
que la conforman quienes –sin excepción al-
guna– quedan obligados a respetar y defen-
derla. Así, desde el ámbito de las relaciones
privadas se contribuye también con la efecti-
va vigencia de los derechos fundamentales6,
más aún, si ninguna relación laboral –según
establece el artículo 23, tercer párrafo de la
Constitución– puede limitar el ejercicio de los
derechos constitucionales ni desconocer o re-
bajar la dignidad del trabajador.
Y es que la conducta tachada de inconstitu-
cional por el Supremo intérprete se ha pro-
ducido en el marco de una relación de traba-
jo que –por su configuración misma– coloca
a trabajadores y empleadores en una desigual
posición por el estatus particular de preemi-
nencia que ostenta este último. Ni siquie-
ra esa situación de preeminencia constituye
una circunstancia habilitante para desconocer
los derechos fundamentales o impedir su efi-
cacia inmediata. Lo contrario atentaría con-
tra el mandato constitucional de procurar la

3 Cfr. STC Exp. N° 01124-2001-AA/TC del 11 de julio de 2002, f. j. 6.

4 Esta posibilidad no solo se presenta en el ámbito de la jurisdicción constitucional, a través de alguna de las accio-
nes de garantía pues como lo tiene reconocido el TC, “el primer nivel de protección de los derechos fundamentales
le corresponde a los jueces del Poder Judicial a través de los procesos judiciales ordinarios”. A ello hay que agregar
que “los jueces se encuentran vinculados por la Constitución y los tratados internacionales de derechos humanos” y
que “la Constitución los habilita a efectuar el control difuso conforme a su artículo 138”. Cfr. STC Exp. N° 00206-
2005-PA, del 28 de noviembre de 2005, caso Baylón Flores, f. j. 5.
5 En ese sentido, precisa el TC, “esta eficacia horizontal de los derechos fundamentales en las relaciones entre priva-
dos se deriva del concepto de Constitución como Ley Fundamental de la Sociedad, que en nuestro ordenamiento se
encuentra plasmado a través del artículo 1 de la Constitución de 1993”. Cfr. STC Exp. N° 00976-2001-AA/TC, del
13 de marzo de 2003, caso Eusebio Llanos Huasco, f. j. 5.
6 Afirmamos esto porque el artículo 44 de la CP establece como deber primordial del Estado el de “garantizar la plena
vigencia de los derechos humanos”, lo cual no significa que este no sea también un deber dirigido a toda la colecti-
vidad en su conjunto.

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efectiva realización de la conformidad con la Decla-

igualdad que constituye ración Universal de Dere-
una exigencia natural del Los derechos fundamentales chos Humanos y con los
Estado social (art. 43 de no constituyen solo derechos tratados y acuerdos inter-
la CP) e impediría contra- públicos subjetivos oponibles nacionales sobre las mis-
rrestar situaciones en las mas materias ratificados
que el empleador ejerza de
al Estado sino que su eficacia por el Perú”.
forma abusiva su poder de se extiende a las relaciones
jurídico-privadas, pese a que Estamos frente a una regla
dirección.
que fija un mandato dirigi-
Por esa razón, el TC re-
estén influidas por la libertad do a quienes tienen a car-
conoce que Telefónica del de contratación y la autono- go la interpretación de las
Perú S.A.A. “dispone de mía de la voluntad. normas (cualquiera sean
potestades empresariales estas) en las que se reco-
de dirección y organiza- nocen los derechos y li-
ción y, constituye, además, bertades que la Constitu-
propiedad privada”, pero además puntualiza ción reconoce a los ciudadanos. La regla va
que aquellas “deben ejercerse con irrestricto dirigida, fundamentalmente, a los jueces (or-
respeto de los derechos constitucionales del dinarios o constitucionales) que tienen atri-
empleado o trabajador”7. Con ello se reafirma buida la facultad de interpretar las normas
que también en el ámbito privado de la em- como parte de su labor de impartición de jus-
presa y de las relaciones laborales, se debe ticia ya que los obliga a tomar en cuenta no
respetar de forma irrestricta los derechos de solo el contenido de los tratados internacio-
los trabajadores. nales de derechos humanos ratificados por el
Perú sino también la jurisprudencia que emita
1.2. La remisión a los instrumentos inter- la entidad de la que surgió el tratado que es la
nacionales de derechos humanos ra- que lo interpreta y aplica8.
tificados por el Perú y a la interpre-
Justamente este mandato es el que se ve cum-
tación que de estos han efectuado los
plido en la STC bajo comentario, pues con la
órganos internacionales
finalidad de dotar de una adecuada protección
Desde la entrada en vigor de la Constitución al derecho de libertad sindical, el TC recurre
de 1993 se puso en debate el alcance de su a los tratados internacionales suscritos por el
Cuarta Disposición Transitoria y Final que, Estado peruano sobre la materia; en concre-
textualmente, dispone que “las normas re- to, el Convenio 87 de la OIT sobre la libertad
lativas a los derechos y a las libertades que sindical y la protección del derecho de sindi-
la Constitución reconoce se interpretan de cación y el Convenio 98 sobre el derecho de

7 Cfr. STC Exp. N° 01124-2001-AA/TC del 11 de julio de 2002, f. j. 7.

8 Y es que, como afirma Neves “si la interpretación del tratado es atribución de la entidad de la que surgió y no de
los magistrados nacionales –a pesar de ser una norma incorporada al derecho interno–, la jurisprudencia produci-
da por tal entidad con ese propósito debería acompañar al tratado”. Cfr. NEVES MUJICA, Javier. “La Cuarta Dis-
posición Final y Transitoria de la Constitución y los derechos laborales”. En: Ius et Veritas. Vol. 9, N° 19, 1999,
p. 198.

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sindicación y de negociación colectiva9. Am- consiste en la facultad de toda persona de

bos tratados no solo son de aplicación direc-
ta al caso por formar parte del Derecho nacio-
nal, en los términos del artículo 55 de la CP,
sino que –como afirma el TC– actúan como
parámetro de interpretación del derecho de li-
bertad sindical pues “los conceptos, alcances
y ámbitos de protección explicitados en di-
chos tratados constituyen parámetros que de-
ben contribuir, de ser el caso, al momento de
interpretar un derecho constitucional”10.
La remisión a los Convenios 87 y 98 de la
OIT es importante, pues el artículo 28 CP se
limita a reconocer de forma escueta el dere-
cho de sindicación y a garantizar la libertad
sindical, sin formular mayores precisiones so-
bre su contenido. De esta forma, para “com-
pletar” o “ampliar” el contenido de este dere-
cho se acude a los tratados generándose como
consecuencia que junto con la Constitución
conformen un bloque constitucional para fi-
nes hermenéuticos11 que otorga una mayor y
mejor protección al derecho específico.
2. El aspecto orgánico y el aspecto
funcional de la libertad sindical en
la STC Exp. N° 01124-2001-AA/TC.
Un intento impreciso de dotar de
contenido a la libertad sindical
A partir de los presupuestos antes menciona-
dos, el TC intenta dotar de contenido esen-
cial al derecho de libertad sindical. Así, el
supremo intérprete precisa que este “tiene
como contenido esencial un aspecto orgáni-
co, así como un aspecto funcional. El primero
constituir organizaciones con el propósito de
defender sus intereses gremiales. El segundo
consiste en la facultad de afiliarse o no afi-
liarse a este tipo de organizaciones. A su vez,
implica la protección del trabajador afiliado o
sindicado a no ser objeto de actos que perju-
diquen sus derechos y tuvieran como motiva-
ción real su condición de afiliado o no afilia-
do de un sindicato u organización análoga”12.
Como se puede apreciar, el TC considera
como parte del contenido esencial del citado
derecho el de constituir organizaciones sin-
dicales (a lo que denomina aspecto orgánico
del Derecho); e incluye –de forma imprecisa–
como parte del aspecto funcional de la activi-
dad sindical a la afiliación o no afiliación así
como a la protección al afiliado frente a cual-
quier acto que perjudique sus derechos y que
sea consecuencia de su condición de afiliado.
Si por aspecto funcional debemos entender
lo relacionado a la función o funciones –en
este caso de un derecho– que está relaciona-
do con los fines que cumple, entonces esta-
mos frente a una imprecisión técnica. La im-
precisión radica en el hecho de que el aspecto
funcional o de actividad se reduce a la afilia-
ción o no afiliación y a la protección frente a
las conductas antisindicales, dejando de lado
otras facultades trascendentales que expresan
de modo pleno la “funcionalidad” de la liber-
tad sindical, o lo que es lo mismo la actividad
que los sindicatos deben realizar en cumpli-
miento de sus fines, tales como el derecho de

9 Hay que precisar que en la STC bajo comentario, a pesar de que en su fundamento jurídico 10 se refiere expresamen-
te al artículo 1, inciso 2), literal “b” sin relacionarlo a ninguna norma específica, el TC se está refiriendo al Conve-
nio 98 de la OIT sobre derecho de sindicación y de negociación colectiva. Tal afirmación se sustenta, además, en el
hecho de que en la Resolución aclaratoria del 16 de setiembre de 2002, el TC declara expresamente en su apartado
2.3. que la sentencia se ha expedido con arreglo al Convenio 87 OIT y al Convenio 98, OIT, relativo a los principios
del derecho de sindicación y de negociación colectiva.
10 Cfr. STC Exp. N° 01124-2001-AA/TC del 11 de julio de 2002, f. j. 9.
11 Cfr. NEVES MUJICA, Javier. “La Cuarta Disposición (…) en Ob. cit., p. 201.
12 Cfr. STC Exp. N° 01124-2001-AA/TC del 11 de julio de 2002, f. j. 8.

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negociación colectiva, el de todo trabajador a una

derecho de huelga o el de- adecuada protección con-
recho a promover acciones La razón fundamental es pro- tra todo acto de discrimi-
judiciales, etc.13. teger al individuo frente a nación tendiente a menos-
cabar la libertad sindical
A pesar de la imprecisión otro o frente a cualquier po- en relación con su em-
antes descrita, este intento der social, económico o de pleo y, especialmente, si
del TC de dotar de conte- otra índole. están referidas “a despe-
nido al derecho de libertad dir a un trabajador o per-
sindical deja en evidencia judicarlo en cualquier otra
su naturaleza compleja. forma a causa de su afilia-
Consideramos que se trata de una respuesta ción sindical o de su participación en activi-
construida en atención a la situación concre- dades sindicales”, a fin de dotar de protección
ta que fue objeto de análisis por el TC. En a los trabajadores que se han visto afectados
efecto, se trató de una conducta empresarial con el despido por su condición de afiliados
antisindical pues resultaba coincidente “que al sindicato.
las personas con las que la mencionada de-
mandada concluyó unilateralmente la rela- Lo importante es que –a través de esta STC–
ción laboral hayan sido precisamente las que el TC dejó claramente establecido que el Es-
conforman tanto el Sindicato Unitario de Tra- tado peruano está obligado a garantizar la
bajadores de Telefónica del Perú S.A. y de la libertad sindical de los trabajadores impidien-
Federación de Trabajadores de Telefónica del do que el criterio de afiliación sindical pue-
Perú” .14 da traer como consecuencia la adopción por
parte de un particular de medidas arbitrarias
Es por eso que el TC recurre al artículo 2 del como la del despido.
Convenio 87 que reconoce a los trabajado-
res y empleadores, sin ninguna distinción y Pero la STC fijó una cuestión adicional pues
sin autorización previa, “el derecho de cons- –apelando a la vis expansiva de los derechos
tituir las organizaciones que estimen conve- fundamentales– el TC estableció que el con-
nientes, así como el de afiliarse a estas orga- tenido esencial del citado derecho constitu-
nizaciones, con la sola condición de observar cional no se agota en los aspectos a los que se
los estatutos de las mismas”; y, también a lo ha referido, sino que es posible “el desarro-
establecido en el artículo 1, inciso 2), literal llo de ulteriores concretizaciones o formas de
“b” del Convenio 98 que establece el derecho proyección del citado derecho constitucional

13 De la misma opinión es Villavicencio para quien “lo cuestionable no es la denominación sino el contenido que se le
da al aspecto funcional que lo restringe a la afiliación y la protección frente a conductas antisindicales; cuando la ac-
tividad va mucho más allá de ello, involucrando todos los actos de proselitismo, representación, las facilidades para
el ejercicio de la actividad sindical, etc. Pero sobre todo deja fuera la actuación de los sujetos colectivos, que además
de ser titulares también de la libertad sindical, ocupan un rol preponderante en el cumplimiento de los fines de este
derecho”. Cfr. VILLAVICENCIO RÍOS, Alfredo. La libertad sindical en el Perú: Fundamentos, alcance y regula-
ción. Plades, Lima, 2010, p. 90.
14 Cfr. STC Exp. N° 01124-2001-AA/TC del 11 de julio de 2002, fundamento jurídico 11. Además, se debe tener en
cuenta que en la Resolución aclaratoria el TC mencionó que la afectación a la libertad sindical se había producido
por cuanto existía “evidencia profusa, en el sentido de que los despidos masivos de trabajadores han estado orien-
tados a extinguir los contratos de trabajo de los afiliados a las organizaciones sindicales demandante”. Cfr. STC,
Resolución aclaratoria del 16 de setiembre de 2002, numeral 2.4.

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que, en principio, no pueden, como tampoco
deben, ser enunciadas de manera apriorísti-
ca”. Con ello se habilitó la construcción per-
manente del contenido de la libertad sindical.
II. LA COMPLEJIDAD DEL CONTENIDO
DE LA LIBERTAD SINDICAL Y SU
CONSTRUCCIÓN JURISPRUDEN-
CIAL POSTERIOR A LA STC EXP.
N° 01124-2001-AA/TC
Como se manifestó ya, la STC bajo comenta-
rio dejó en evidencia el carácter complejo del
derecho de libertad sindical que hizo necesa-
ria la labor de concretización de su contenido,
caso por caso. Y es que el contenido del de-
recho de libertad sindical se materializa o se
proyecta “de múltiples formas en razón de su
naturaleza lo que dependerá de la manifesta-
ción concreta del mismo en determinado con-
texto espacial y temporal”15. De allí que, a ese
mínimo indisponible constituido por los as-
pectos orgánico y funcional, pueda agregarse
un nuevo o mayor contenido.
En la STC Exp. N° 01469-2002-AA/TC, el
TC considera que al contenido de la libertad
sindical deben agregarse “todos aquellos de-
rechos de actividad o medios de acción que
resulten necesarios, dentro del respeto a la
Constitución y la ley, para que la organiza-
ción sindical cumpla con los objetivos que
a su propia naturaleza corresponde (…). Por
consiguiente, cualquier acto que se oriente a
impedir o restringir de manera arbitraria e in-
justificada la posibilidad de acción o la capa-
cidad de obrar de un sindicato resulta vulne-
ratorio del derecho de libertad sindical”16. En
esta STC, el supremo intérprete pone énfasis
en la faceta dinámica o de actividad de la li-
bertad sindical como la expresión medular de
este derecho pues carece de sentido garanti-
zar la constitución de un sindicato y la afilia-
ción pero no favorecer, ni garantizar la activi-
dad sindical que es –a fin de cuentas– la que
justifica la existencia misma del derecho de
libertad sindical y de las organizaciones sin-
dicales17. Aparece, pues, ese contenido fun-
cional que se quiso esbozar en la STC Exp.
N° 01124-2001-AA/TC.
Posteriormente, el TC brinda una definición
más bien escueta de la libertad sindical reco-
nociéndola como la “capacidad autodetermi-
nativa para participar en la constitución y de-
sarrollo de la actividad sindical” y –siguiendo
al TC español– reconoció la trascendencia
de los sindicatos como “(...) formaciones de
relevancia social, en la estructura pluralista
de una sociedad democrática”18. Asimismo,
la dotó de un haz de facultades que incluyen
–entre otros aspectos– el derecho a fundar or-
ganizaciones sindicales; el derecho de libre
afiliación, desafiliación y reafiliación en las
organizaciones sindicales existentes; el dere-
cho a la actividad sindical; el derecho de las
organizaciones sindicales a ejercer libremen-
te las funciones que la Constitución y las le-
yes le asignen, en defensa de los intereses de
sus afiliados, lo cual comprende la reglamen-
tación interna, la representación institucional,
la autonomía en la gestión, etc.; el derecho a
que el Estado no interfiera –salvo el caso de
violación de la Constitución o la ley– en las
actividades de las organizaciones sindicales19.

15 Cfr. STC Exp. N° 03039-2003-AA/TC del 29 de enero de 2004, Caso sindicato de Trabajadores Municipales Unita-
rio de Casa Grande, f. j. 4.
16 Cfr. STC Exp. N° 01469-2002-AA/TC del 23 de julio de 2004, Caso Sindicato de Trabajadores de la Municipali-
dad de Paucarpata, f. j. 5.
17 Sobre la particular importancia de la faceta de actividad de la libertad sindical se puede revisar VILLAVICENCIO
RÍOS, Alfredo. La libertad sindical en el Perú .... Ob. cit., pp. 88-90.
18 Cfr. STC Exp. N° 00008-2005-PI/TC del 12 de agosto de 2005, Caso Juan José Gorriti y otros, f. j. 26.
19 Ídem.

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Estas facultades las orga- Preliminar del Código

niza en dos planos: por un Procesal Constitucional,
lado, el de la libertad sin- En el ámbito privado de la incluye la autonomía co-
dical intuito personae o li- empresa y de las relaciones lectiva dentro de la dimen-
bertad sindical individual laborales, se debe respetar de sión plural o colectiva. Se-
reconocida a favor de cada gún el TC, la autonomía
trabajador individualmen-
forma irrestricta los derechos colectiva implica que los
te considerado que no solo de los trabajadores. sindicatos “funcionen li-
puede concurrir a consti- bremente sin injerencias
tuir un sindicato sino tam- o actos externos que los
bién a afiliarse, desafiliarse o reafiliarse; por afecten” pero además, implica la adopción de
otro, el de la libertad sindical plural o colec- medidas de protección de las actividades que
tiva que implica otorgar la titularidad del de- realicen los sindicatos, sus afiliados y los di-
recho a la organización sindical previamente rigentes sindicales puesto que sin esta protec-
constituida que –fundamentalmente– va diri- ción “no sería posible el ejercicio de una serie
gida a facilitar la actividad sindical pues se le de derechos y libertades, tales como el dere-
otorga autonomía sindical, personalidad jurí- cho de reunión sindical, el derecho a la pro-
dica y diversidad sindical y que, además, in- tección de los representantes sindicales para
cluye facilidades para su actuación, la protec- su actuación sindical, la defensa de los intere-
ción de sus dirigentes a través de la figura del ses de los trabajadores sindicalizados y la re-
fuero sindical y la proscripción de las conduc- presentación de sus afiliados en procedimien-
tas antisindicales que vulneren su actividad20. tos administrativos y judiciales. Del mismo
modo no sería posible un adecuado ejercicio
Es la autonomía sindical entendida como “el de la negociación colectiva y del derecho de
derecho de las organizaciones de trabajado- huelga”22. Una vez más se asienta el éxito o
res de elegir libremente a sus representantes, fracaso de la función de los sindicatos en la
de organizar su administración y sus activi- garantía de la autonomía sindical que será el
dades y formular su programa de acción”21 la sustento tanto de la sindicación, la negocia-
que recibe una especial atención por parte del ción colectiva y la huelga.
TC, pues se entiende que su adecuada garan-
tía y protección condiciona la efectiva actua- En lo que respecta a la protección de mani-
ción de los sindicatos en la consecución de festaciones concretas de la autonomía sindi-
sus fines y funciones. cal, el TC considera importante que el acto
de fundación o constitutivo de un sindica-
Así, en la STC Exp. N° 00206-2005-PA, que to, incluidas la elaboración de las reglas de
constituye precedente constitucional vincu- organización y funcionamiento, a través
lante conforme al artículo VII del Título del estatuto se ejecuten “sin intervención

20 Cfr. STC Exp. N° 00008-2005-PI/TC del 12 de agosto de 2005, Caso Juan José Gorriti y otros, f. j. 27.
21 Cfr. STC Exp. N° 02974-2010-PA/TC de 24 de octubre de 2011, caso Sindicato Nacional de Trabajadores de
Alicorp, f. j. 10. Sobre la autonomía sindical, Villavicencio precisa que constituye el derecho de los sindicatos a au-
toorganizarse y actuar libremente en defensa de los intereses de los trabajadores que conlleva además la prohibición
del Estado y a cualquier tercero, especialmente a los empleadores y sus organizaciones, de controlar o intervenir en
la vida de las organizaciones sindicales. Cfr. VILLAVICENCIO RIOS, Alfredo. Ob. cit., pp. 52-53.
22 Cfr. STC Exp. N° 00206-2005-PA, del 28 de noviembre de 2005, caso Baylón Flores, f. j. 12.

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administrativa”. Aún más, es necesario que procedimiento que garantice debidamente el

la protección del acto fundacional se extien-
da hasta el reconocimiento de la personería
jurídica “la cual debe ser otorgada evitando
la imposición de requisitos de difícil cumpli-
miento y sin que en esta actividad se permi-
tan decisiones discrecionales que escapen a
la mera observancia de los requisitos previs-
tos legalmente”23.
El TC se ha pronunciado también sobre la
protección del derecho de afiliación pero ya
no desde agresiones que vienen de fuera sino
de las que vienen desde dentro de su propia
estructura pues el sindicato, en tanto “orga-
nización corporativa de personas, también
tiene el deber de respetar los derechos fun-
damentales de sus agremiados en la medida
en que estos se vean involucrados en sus pro-
cedimientos internos”. En ese sentido, invo-
cando la eficacia horizontal de los derechos
fundamentales, nos recuerda que las normas
estatutarias y los actos de sus órganos, deben
guardar plena conformidad con la Constitu-
ción, y en particular, con los derechos funda-
mentales”24. Los argumentos antes señalados
los vertió en la STC Exp. N° 01198-2012-PA/
TC en la que examinó un supuesto de expul-
sión de un afiliado y en el que concluyó que
la decisión adoptada por el Sindicato había
sido arbitraria pues todo afiliado a un sindi-
cato tiene derecho “de no ser excluido arbi-
trariamente de este, sino solo a través de un
ejercicio de sus derechos al debido proceso y
a la defensa”25, más aún si el derecho de de-
fensa está reconocido en el propio estatuto del
Sindicato que, además, establecía un quorum
mínimo para la realización de una asamblea
válida que no se cumplió.
En la STC anteriormente mencionada llama
la atención el pronunciamiento del TC en el
que plantea que se ha vulnerado el derecho a
la objeción de conciencia del afiliado al sin-
dicato que no acató el acuerdo de paralización
de labores acordado en asamblea. De acuer-
do con el TC, los contenidos subjetivos que la
conciencia de cada individuo puede internali-
zar como valores o principios de crucial im-
portancia no solo pueden ser religiosos sino
también filosóficos, creencias culturales, so-
ciales, etc. En esa medida, si el Sindicato no
planteó ninguna posibilidad de solicitar ex-
plicación alguna respecto del no cumplimien-
to del acuerdo de la paralización de labores
por parte del trabajador pudo generar la le-
sión del derecho de objeción conciencia. De
allí que –de cara al futuro– los sindicatos de-
ben adecuar su actuación “a la debida garan-
tía del ejercicio de este derecho fundamental,
naturalmente, no con el propósito de enervar
los acuerdos adoptados en el ejercicio del de-
recho a la sindicalización, pero sí con la fina-
lidad de que se respete el estándar mínimo del
derecho a la objeción de conciencia”26.

23 Cfr. STC Exp. N° 03039-2003-AA/TC del 29 de enero de 2004, caso sindicato de Trabajadores Municipales Unitario
de Casa Grande, f. j. 5. Como se puede apreciar, para el TC, es fundamental que las organizaciones de trabajadores
se creen, tal como lo establece el artículo 2 del Convenio 87 de la OIT, sin autorización previa de ningún tipo pues
“el principio de libertad sindical podría llegar a ser letra muerta si para crear una organización los trabajadores y los
empleadores tuviesen que obtener un permiso cualquiera, ya revista la forma de una licencia para fundar la organi-
zación sindical propiamente dicha, de una sanción discrecional de sus estatutos o de su reglamento administrativo o
de alguna autorización previa indispensable para proceder a su creación”. Cfr. OIT. Libertad sindical. Recopilación
de decisiones y principios del Comité de Libertad sindical del Consejo de Administración de la OIT. 5ª edición
(revisada), OIT, Ginebra, 2006, & 272.
24 Cfr. STC Exp. N° 01198-2012-PA/TC del 30 de enero de 2013, caso Richard Huamán Salvatierra, f. j. 9.
25 Cfr. STC Exp. N° 01198-2012-PA/TC del 30 de enero de 2013, caso Richard Huamán Salvatierra, f. j. 18.
26 Cfr. STC Exp. N° 01198-2012-PA/TC del 30 de enero de 2013, caso Richard Huamán Salvatierra, f. j. 32.

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La autonomía sindical que grupo o categoría de pres-

se expresa fundamental- tadores de servicios28.
mente a través de la ne- La autonomía sindical se También el TC se ha refe-
gociación colectiva y la expresa fundamentalmente rido al derecho del afiliado
huelga, incluye también a través de la negociación a un sindicato a la partici-
el derecho de las organi- colectiva y la huelga. pación en la vida política
zaciones sindicales a plan- económica, social y cultu-
tear reclamaciones o ini- ral de la nación reconoci-
ciar acciones judiciales a do en el artículo 2, inciso
favor de todos sus afiliados o un grupo de- 17 de la CP. Este derecho –según el TC– tiene
terminado de ellos sin necesidad de contar un contenido amplio e “implica la interven-
con un poder de representación ya que “(…) ción de la persona, en todo proceso de deci-
los sindicatos de trabajadores no son entida- sión, en los diversos niveles de organización
des cuya creación obedezca a la satisfacción de la sociedad”, sean públicos o privados29.
de intereses ajenos a quienes lo conforman, En ese sentido, se vulnera el derecho a la par-
sino, contrariamente, su objetivo primordial ticipación política de un afiliado al sindicato
lo constituye la defensa de los derechos e in- que desea ser candidato si es que el estatuto
tereses de sus miembros”27. Visto así, el Sin- establece que podrán participar como candi-
dicato estará habilitado constitucional y le- datos a la junta directiva del sindicato “quie-
galmente para representar y defender los
nes no tengan juicios ni denuncias y/o deman-
intereses y derechos colectivos e individua-
das contra el sindicato”. Y esto porque se está
les de los trabajadores, ejerciendo un verda-
restringiendo de manera absoluta la posibili-
dero derecho a plantear reclamaciones e ini-
ciar acciones judiciales. dad de participación política ya que “la finali-
dad de la medida adoptada no puede ser equi-
Se entiende, de esta forma, que la norma pro- parada en modo alguno con ninguna de las
cesal laboral, Ley N° 29497, les reconozca le- finalidades que sustentan el funcionamiento
gitimidad para defender sus intereses, los de del sindicato o de su comité electoral”30, si-
sus dirigentes y los de sus afiliados así como tuación que se agrava aún más por cuanto con
para incoar demandas relacionadas con la no dicha prohibición se enerva la eficacia del de-
discriminación en el acceso al empleo o del recho de libertad sindical del trabajador que –
quebrantamiento de las prohibiciones de tra- por mandato judicial– había logrado recupe-
bajo forzoso e infantil así como en aquellas rar su condición de afiliado al sindicato.
que se discuta la afectación de la libertad sin-
dical, negociación colectiva y huelga, la segu- La autonomía sindical incluye la facultad de
ridad y salud en el trabajo y, en general, cuan- los sindicatos de elegir libremente a sus re-
do se afecte un derecho que corresponda a un presentantes. Esta facultad sería letra muerta

27 Cfr. STC Exp. N° 00632-2001-AA/TC del 5 de agosto de 2002, caso Sindicato Unitario de Trabajadores de la Em-
presa Química del Pacífico S.A., f. j. 8. En el mismo sentido en la STC Exp. N° 00340-2003-AA/TC del 25 de no-
viembre de 204, caso Félix Lazo Villanueva, f. j. 1.
28 Ver artículos 8.2 y 8.3. de la Ley N° 29497, nueva Ley Procesal del Trabajo. Asimismo los artículos 9.1. y 9.2 de la
norma adjetiva. Para un entendimiento de la participación de los sindicatos en el proceso judicial se puede consultar:
ESPINOZA ESCOBAR, Javier. Sindicatos y conflicto individual. Una visión constitucional. Palestra, Lima, 2012.
29 Cfr. STC Exp. N° 01198-2012-PA/TC del 30 de enero de 2013, caso Richard Huamán Salvatierra, f. j. 24.
30 Cfr. STC Exp. N° 01198-2012-PA/TC del 30 de enero de 2013, caso Richard Huamán Salvatierra, f. j. 25.

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si es que no se dota de protección a quienes
ejercen los cargos de representación del sin-
dicato. Es por eso que se ha establecido que
“todo acto lesivo, no justificado e irrazona-
ble que afecte a los trabajadores sindicaliza-
dos y sus dirigentes y que haga impractica-
ble el funcionamiento del sindicato, deberá
ser reparado”31.
Y es que, aun cuando los efectos de un despi-
do de los dirigentes sindicales repercuten en
la esfera individual de cada uno de los afec-
tados, también es verdad que ese acto “reper-
cute, indirectamente, sobre la propia organi-
zación sindical, puesto que es evidente que el
despido de todos los miembros de la junta di-
rectiva del sindicato, también se presenta, ab
initio, como una lesión a la propia institución
sindical”32. Este razonamiento del TC desve-
la –además– el carácter pluriofensivo de las
conductas antisindicales, ya que sus efectos
dañosos se producen no solo frente al indivi-
duo afectado sino también frente a la organi-
zación sindical; razón suficiente para decla-
rarlas inconstitucionales.
En sentido similar se pronunció el TC en la
STC Exp. N° 03311-2005-PA/TC. En ella, el
TC ordena la reposición de trabajadores que
han ostentado el cargo de dirigentes sindica-
les o que se habían afiliado al sindicato de la
empresa por haber sufrido un despido masi-
vo y simultáneo respecto del cual no se con-
taba con las pruebas suficientes que determi-
nen la responsabilidad individual en los actos
vandálicos que se ocasionaron con motivo de
una paralización de las labores. Con ello se ha
vulnerado la libertad sindical en su dimensión
plural pues “se ha impedido la participación
de los dirigentes sindicales y de los afiliados
31 Cfr. STC Exp. N° 00206-2005-PA/TC, del 28 de noviembre de 2005, caso Baylón Flores, f. j. 13.
32 Cfr. STC Exp. N° 00632-2001-AA/TC del 5 de agosto de 2002, caso Sindicato Unitario de Trabajadores de la Em-
presa Química del Pacífico S.A., f. j. 7.
33 Cfr. STC Exp. N° 3311-2005-PA/TC del 5 de enero de 2008, caso Sindicato de Trabajadores Mineros de Atacocha,
f. j. 16.
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en las actividades sindicales y se ha afecta-
do seriamente el funcionamiento del sindica-
to”33. De este pronunciamiento constitucional
se desprende que también se pueden aplicar
medidas disciplinarias a los dirigentes y afi-
liados al sindicato en caso cometan faltas san-
cionables. Obviamente, la aplicación de estas
medidas deben obedecer a la existencia de
una causa y un procedimiento que respete las
garantías del debido procedimiento, caso con-
trario –como ocurrió en el caso analizado–, la
medida empresarial será considerada un acto
antisindical.
El TC ha tenido oportunidad de referirse al
fuero sindical como garantía de protección de
la libertad sindical plural. Así, en un proceso
en el que se ordena la reposición de un diri-
gente sindical que había sido cesado en virtud
de un procedimiento irregular de cese colec-
tivo, el TC manifestó que la libertad sindical
“protege a los dirigentes sindicales para que
puedan desempeñar sus funciones y cumplir
con el mandato para el que fueron elegidos;
es decir, protege a los representantes sindica-
les para su actuación sindical. Sin esta pro-
tección no sería posible el ejercicio de una
serie de derechos y libertades tales como el
derecho de reunión sindical, la defensa de
los intereses de los trabajadores sindicaliza-
dos y la representación de sus afiliados en
procedimientos administrativos y judiciales.
Del mismo modo, no sería posible un ade-
cuado ejercicio de la negociación colectiva
y del derecho de huelga”; reconociendo ade-
más que la protección que se otorga a los diri-
gentes sindicales y que es llamada fuero sin-
dical en nuestro ordenamiento “es una de las
dimensiones del derecho de sindicación y de
 ANÁLISIS Y CRÍTICA

la libertad sindical que se ejercicio de la representa-

deriva del artículo 28 de
la Constitución y que tie- Es necesario que el emplea-
ne protección preferente a dor y el Estado respeten la
través del amparo”34. actuación sindical evitan-
También sobre la protec- do las conductas antisindi-
ción de la libertad sindi- cales.
cal en un caso en el que
el TC declara fundada una
demanda de amparo pre-
sentada por un dirigente sindical, por vulne-
ración de la libertad sindical al haber negado
permiso para participar en un evento gremial
fuera del país y haber sufrido, posteriormen-
te un despido fraudulento se reafirma la ne-
cesidad de otorgar una tutela específica a los
trabajadores y a las organizaciones sindicales
frente a las represalias de las que sean obje-
to en razón del ejercicio de la libertad sindi-
cal. Se señala también que la protección del
derecho de libertad sindical exige la “instau-
ración de garantías positivas y negativas”. La
protección negativa va dirigida al Estado y lo
obliga a remover “todos los obstáculos y res-
tricciones que impidan el libre ejercicio de la
libertad sindical” 35.
Por su parte, la protección positiva implica
la “implementación de medidas frente al em-
pleador, principalmente, dirigidas a garanti-
zar la efectividad del derecho por medio del
establecimiento de reglas, procedimientos,
medios de reparación, sanciones y facilidades
para su ejercicio” 36, entendiéndose incluidas,
en esta última los permisos y licencias para el
desempeño del cargo sindical que facilitan el
libre funcionamiento del sindicato y que tam-
bién deben ser protegidos frente actos irrazo-
nables e injustificados que impidan el libre
ción sindical37.
La protección de los di-
rigentes sindicales no se
produce solo en caso de
despido injustificado sino
también en caso de tras-
lado a otro establecimien-
to de la empresa sin ha-
ber mediado causa y sin
que él preste su consentimiento y que, pos-
teriormente, fue despedido de la empresa
por causas irrazonables. Así en la STC Exp.
N° 02318-2007-PA/TC, el TC declara funda-
da la demanda interpuesta por el trabajador
afectado señalando que “el fuero sindical re-
viste especial relevancia dado que sin él no
sería posible el ejercicio de una serie de de-
rechos y libertades, tales como el derecho de
reunión sindical, el derecho a la protección de
los representantes sindicales para su actua-
ción sindical, la defensa de los intereses de
los trabajadores sindicalizados y la represen-
tación de sus afiliados en procedimientos ad-
ministrativos y judiciales. Del mismo modo,
no sería posible un adecuado ejercicio de la
negociación colectiva y del derecho de huel-
ga”. De aquí se colige, una vez más que la
institución del fuero sindical reviste particu-
lar importancia como mecanismo garantista
del derecho de libertad sindical y, en esa me-
dida, forma parte del contenido constitucional
del derecho de libertad sindical.
El TC ha condenado también las prácticas
desleales del empleador (clausura del centro
laboral, desplazamiento de los dirigentes sin-
dicales a diversos locales y áreas y la reduc-
ción de categoría) que afectan a un dirigente

34 Cfr. STC Exp. N° 05474-2006-PA/TC del 25 de setiembre de 2006, caso Sindicato nacional de Trabajadores de em-
botelladora Latinoamericana, ff. jj. 3 y 4.
35 Cfr. STC Exp. N° 01139-2007-PA/TC, del 13 de noviembre de 2007, caso Eddy Cuadros García, f. j. 8.
36 Cfr. STC Exp. N° 01139-2007-PA/TC, del 13 de noviembre de 2007, caso Eddy Cuadros García, f. j. 8.
37 Cfr. STC Exp. N° 01139-2007-PA/TC, del 13 de noviembre de 2007, caso Eddy Cuadros García, f. j. 15.

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sindical que viene asumiendo la defensa del
sindicato al que pertenece como miembro de
la comisión negociadora, pues afectan direc-
tamente la libertad sindical plural. El supre-
mo intérprete ha precisado que se trata de ac-
tos proscritos “atendiendo a la vigencia de la
libertad sindical plural del sindicato deman-
dante, toda vez que este derecho se condice
con el deber de los empleadores de no ejercer
ninguna práctica desleal”; deslealtad que se
ha generado debido a que “las medidas adop-
tadas por el empleador resultan irrazonables,
por cuanto los traslados sucesivos, la rebaja
de categoría sin justificación alguna y sin am-
paro legal, así como la clausura del centro de
labores en el contexto de una negociación co-
lectiva, resultan actos violatorios que atentan
contra la actividad sindical”38. Una vez más,
la pluriofensividad de las conductas antisindi-
cales genera la necesidad de una intervención
efectiva en defensa del citado derecho.
CONCLUSIONES
1. Han pasado 15 años desde la emisión de la
STC Exp. N° 01124-2001-AA/TC y qué
duda cabe que, pese a sus imprecisiones,
significó un punto de partida vital para
dotar de efectiva protección al derecho de
libertad sindical, a partir de la construc-
ción permanente de su contenido.
2. La construcción del contenido del derecho
de libertad sindical ha tenido como pre-
supuestos fundamentales la eficacia hori-
zontal de los derechos fundamentales y la
remisión constante a los instrumentos in-
ternacionales de derechos humanos ratifi-
cados por el Perú y a la interpretación que
de estos han efectuado los órganos inter-
nacionales. Una norma fundamental que
permite utilizar ambos presupuestos es la
propia Constitución peruana que ha colo-
cado a la defensa de la persona humana y
38 Cfr. STC Exp. N° 08330-2006-PA/TC, del 15 de noviembre de 2007, Caso Sindicato Único Nacional de Trabajado-
res del Cuerpo General de Bomberos Voluntarios del Perú y Ricardo Ramírez García, f. j. 12.
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el respeto de su dignidad como fin supre-
mo de la sociedad y del Estado.
3. El Tribunal Constitucional, a lo largo de
los años, ha cumplido satisfactoriamente
la tarea de ampliar, caso por caso, el con-
tenido de este derecho complejo, sea refe-
rido a su aspecto orgánico o funcional, a
su faceta individual o plural, a su faz posi-
tiva o negativa. Prueba de ello es la abun-
dante jurisprudencia en la que se muestran
las múltiples formas en las que el conteni-
do del derecho se materializa o proyecta.
4. Es el aspecto funcional referido, en concre-
to, a la autonomía sindical y a la actuación
libre y sin injerencias que de ella se des-
prende, el aspecto que da sentido a la li-
bertad sindical. De allí que se hace necesa-
rio que el empleador y el Estado respeten
la actuación sindical evitando las conduc-
tas antisindicales. Asimismo, los propios
sindicatos deben ser capaces de entender la
trascendencia de la función que les toca de-
sempeñar y actuar en consecuencia.
BIBLIOGRAFÍA
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bunal Constitucional, los procesos consti-
tucionales y la delimitación del contenido
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tución y proceso. Libro homenaje a Juan
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2009.
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• VILLAVICENCIO RÍOS, Alfredo. La li-
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