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Capitulo 1 Aproximaciones al estudio del Estado en Colombia: conflicto armado, ilegalidad y narcotrafico Nuestras reflexiones comienzan por sefialar lo paraddjico que resulta el hecho de que la violencia politica desde los afios cincuenta hasta hoy, la penetracién de la economia del narcotrafico en la sociedad colombiana y, consiguientemente, los nexos de los actores ilegales en la vida publica sean los principales motivadores de nuestras reflexiones sobre la confi- guracion concreta del Estado colombiano.|La Violencia y la ilegalidad han provocado, como corolario no planeado ni previsto, el desarrollo y la profundizacién de la reflexién conceptual ncret mo funciona el Estado en nuestro ais.|Antes, los enfoques dominantes tendian a ser primordialmente juridicos y normativos: se consideraba en- tonces que el proceso de construccion del Estado colombiano habia cul- minado con la Constitucién Nacional de 1886, refrendada por el triunfo del gobierno en la llamada Guerra de los Mil Dias, entre finales del siglo XIX y principios del XX. ] Solo con Ja Miglencia de los afios cincuenta empezo a hablarse, por boca de Pau! Onuistf 1978), de re ee para describir la tragedia col ina de esos afios. Mientras otros, entre ellos monsefior German Guzmén, Orlando Fals Borda, Eduardo Umajia Luna y Cami- lo Torres(1962)Ja entendieron como una “revolucién social frustrada’, Pierre Gilhodés (1974) hablaba de una rebelién campesina frustrada y Eric Hobsb (1968) se referia a los guerrilleros como “rebeldes pri- mitivos” Esta relativa ausencia de referencias al Estado contrasta con el interés de algunos académicos norteamericanos por analizar nuestro conflicto armado como fendémeno surgido del juego entre la modernidad 40 Ferndn E. Gonzélez Gonzalez mo ocurrié con Robert Williamson (1965), Richard la tradicién, tal co ‘ Payne (1968) y Vernon Flu. Weinert (1966), Robert Dix (1967), Wiliam harty (1981). Esta falta de interés en la relacidn de la violencia con el Estado se fue ymodifigando gradualmente con las referencias de los trabajos de Daniel ( ean 987, 1988) al concepto de precariedad del Estado, la mencién de anfas en vilo de Maria Teresa Uribe (2001: 251-256) y la presen- cia diferenciada de las instituciones del Estado en el espacio y el tiempo, ‘cumiada por los equipos del Cinep (Gonzalez, Bolivar y Vasquez, 2003).V Posteriormente, las transformaciones territoriales operadas por las acciones de los grupos armados ilegales y el aumento de su cobertura espacial llevaron a algunos a hablar de Colombia como un Estado fallido a punto de colapsar, mientras la ligaz6n del narcotrafico con la violencia condujo a otros a la denominacién de “nuevas guerras’, mas vinculadas a Yr la codicia humana que a la ideologia politica. Posteriormente, la insercién : de narcotraficantes y actores armados en la vida politica, especialmente en los niveles locales y regionales, introdujo las categorias de “parapoli- tica’, reconfiguracién mafiosa del Estado y captura (‘cooptacién’) del Es- tado, Colombia: zun Estado fallido? En 2005 la publicacién Foreign Policy Review (Foreign Policy and the Fund for Peace, 2005) colocaba a Colombia en el décimo cuarto lugar de las naciones en evidente riesgo de colapsar, puesto solo superado por Costa de Marfil, Republica Democratica del Congo, Sudan, Irak, Somalia, Chad, Sierra Leona, Yemen, Liberia, Haiti, Afganistan, Ruanda y Corea del Norte. En los afios siguientes nuestro pais fue mejorando su posicion en la catalogacién de esa revista y alejandose de los paises en mayor ries- go. En 2006 ya habia descendido al puesto vigésimo séptimo de riesgo y para 2010 estaba en el cuadragésimo sexto (Foreign Policy and the Fund for Peace, 2006). Obviamente, esto significa que la recuperacién del con- trol militar del territorio bajo los ultimos gobiernos, desde el final de la i ae de Pastrana y sobre todo durante las dos administraciones de 7 . p aes nl oe acral de Santos, se ha visto reflejada en la mejora de Aunque el significado de “Estado fallido” no es un muy claro, ni tam- poco su diferencia con un Estado normalmente débil, los indicadores que Aproximaciones al estudio del Estado en Colombia 41 emplea la revista son diafanos: la pérdida de control del territorio o del monopolio de Ja coercién legitima, junto con rasgos mas sutiles, como la falta de autoridad para tomar decisiones colectivas u ofrecer servicios publicos, la muy elevada desobediencia civil de la poblaci6n, la presencia de ejércitos extranjeros y la resistencia generalizada a pagar impuestos, el desarrollo desigual, la criminalizacién o deslegitimacién del Estado y eltraslado de las lealtades de la gente a otros lideres -entre ellos, sefiores de la guerra o jefes rebeldes-, el desplazamiento forzado de poblacién y la degradacién ecolégica (Foreign Policy and the Fund for Peace, 2005). Uno de los autores que han analizado el asunto, Robert Rotberg (2003: 1-16), relaciona el fracaso de los Estados frente a la violencia interna, que afecta la legitimidad del gobierno, cuya funcién mas importante es pro- porcionar seguridad frente a invasiones internas 0 amenazas domeésticas mediante la prevencién del crimen y el fortalecimiento de la capacidad de los ciudadanos para resolver sus disputas sin recurrir a las vias de hecho. Eso implica la existencia de cédigos de conducta y de procedimientos de un sistema impersonal de justicia que hagan cumplir Ja ley, y, asimismo, de mecanismos que permitan la libre participacién politica y el acceso tarias y bancarias.\Rotberg presta parti cién a la la violencia antiestatal, mas que a ase como ‘idad de cohesionar a grupos socialmehte_diversos (étnicos, teligiosos, lingiifsticos 0 econémicos) y a la proporcién en que el territo- rio es plenamente controlado, especialmente durante las noches, porque muchas veces el poder estatal se limita a vigilar la ciudad capital y algunos territorios especificos. Otros indicadores de Rotberg son el crecimiento de la violencia cri- inal, la de le las instituci Ja falta de autonomia del poder judicial frente el ejecutivo, la carencia de una burocracia profesional, la politizacién del Ejército, la destruccién o el deterioro de la infraestructu- ra fisica, la privatizacion de los sistemas de educacién y salud y la corrup- cién generalizada. Su indicador final es la perdida deTegitimidad politica, que lleva a transferir las lealtades de la poblacién a grupos que controlan Partes del territorio durante algtin tiempo, como sefiores de la guerra 0 grupos privados armados, que suplen el vacio de autoridad. Hay que anotar que la mayoria de las naciones analizadas por este au- tor pertenecen al continente africano (Angola, Burundi y Sudan), para las cuales algunos expertos internacionales del Pnud y el Banco Mundial ela- boraron una serie de instrumentos y herramientas institucionales que les

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