34 Pruardaremos allf y comeremos uno Soda dis. Ast nos drarin silos. “Gierta Mente, Dom Jw dh Jo Santi no muy watiefecho, Le encan. aban los carametos ero no hizo trampas. Puso st tarro eon el de Juan en el agujeto que hhabfa en el dbo! dotrds de Is cabaia Cacia dia sacaba solamente ino de los earamelos envucitos en papel dorade Yy se lo comin, muy despacite, ‘Quien ‘sf hizo trumpas fie Juaa. No paraba de encontrar excuse para comer caramelos. Una semana més tarde su tara estaba veto y ob- servabe con cnvidia el tarro de Santi “Ya podias darme uno dijo ‘na. Los caballoros siempre compar ten ia comida, ‘Sandi fruncié ef cetio. Querfa comerse sts earamelos €1 solo, pero 35 0 tana astaba todawta Ileno casi hasta atria, y le pareeio que era un egotsia Sldecia que ro. Wale. Pero slo uno —dei6 caer un ceramelo en cl tarro acto de Tuan. Este sonrid 9 10 Agito “Gracias, Don Santiago. Ha ‘ce mucho ruldo, Zverdad? Santi chups su caramelo. “Una vee vi um programa en la tole. Explicaba edmo hacer un tele ono con dos tarros me Me acuerdo! dijo Jean, mientras se Je iluminaban los ojos Vamos a hacerlo! Santi nego con La cabeza. “He olvidado coma se hacia, “Pere yo. no ~aijo Juan agi- tande de tueve at tareaHay que he- cer unos nenjeros en fos tarron y hiego ‘unirlos con tn corel “Yo teage un woz0 de cordel36 Santi sacé un rollito de uno de los bolsitlos de su chaquetén—. Es del pa- quete donde venta Ia escala. Juan tomé el cordel cuidado- samente enrollade y lo desenrollé un poco, Es perfecto, Podriamos ha- cer unteléfone muy largo que Tegara rasta lo alto de Ia stalays, Pero. Se quedé mirando el tarr de Santi. Santi tambige Jo hizo. Le ape- tecfa tener un teléfono, pero no po- ‘rian hacerlo hasta que los dos tarros cestuviesen vactes ‘Vey a contar mis caramelos ~dijo. Empezs a sacarlos y fue colo- candolos en hileras de cuatro sobre el suelo de madera. FI papel dorado bri- Haba en las sombras—. Uno, dos tres. Habia ocho filas de caramelos cuando colocé el ultimo. ‘Treinta y dos caramelos. <|Hay millones! —se Tameaté Juan-. {Si s6lo te comes uno al dia, >bunca tendremos teléfeno! Santi se queds mirando los caranelos, que brillaban sobre la ma- cera. -No hay por qué guardarios en un tarro.Juan se anime. ~Pucdes pedirle a mama una bolse. ¥ tambien puede hacemos los agujeros. “Metié los dos tarros en lox bolsillos de Santi :Por qué no vas pedirsclo? Despacio y con cukdado, San- bbaj6 del debol y fue hasta la cocina. ‘Cuando ‘mamé 36 lo que queria, sonrié. . . 59 “Yo tye um teléfono ast ceuando ora pequcna, Buea una bolsa fara tus carancion 9 YO hare los aw * Santi dejé los tarros en la me- sa de la cocina, y fe hasta donde es {Sivan Ins boleas de plastica “Mamnd =[Mmm? —aijo sin tevanmtar ta vista, Eola rabuscando ea ia aia de Tas herramientas, Sand sacd una bolsa y se que- 6 miranda. fama se fin comido todos sus earamelon, {reer que debe compar {irtoe mios Gon él? MGole sl quieres. hacerlo ~comtesis mama: Pato boca nhajo et primer torre le hizo vn apjero en Ey fondo comel marie 9 el elavo~ Som tus carametos Sand se queds ponsativo.