Professional Documents
Culture Documents
PUNTO DE VISTA
Alguna vez leí que los Wayuú, en el primer Consejo Comunitario en Uribia,
cuando el presidente de la época entró al poder, acudiendo a la idea del diálogo,
habían mencionado que a la Alta Guajira, habían llegado unos colonos armados
hasta los dientes, con acento del interior, a saquear, como los piratas, y a ocupar su
territorio ancestral, que, aunque eran muy pocos, en ese momento, y ellos los
podían derrotar con facilidad, no los habían enfrentado porque los consideraban
enemigos sin honor, que irrespetaban las reglas de la guerra, en los códigos de su
nación. Avanzaron estos colonos y hoy están regados como la verdolaga.
En Santa Marta se vive una crisis institucional, por el golpe a la democracia que se
ha dado, frente al incumplimiento normativo, al no designar alcalde encargado de
la terna proveniente del grupo significativo de ciudadano que eligió al mandatario,
ante su falta temporal, fruto de inconvenientes judiciales y, en su defecto, enviar a
una especie de virrey, —con ínfulas quizás— desde la fría capital, a pisotear el
Plan de desarrollo, a evadir el mandato popular de más de 93.000 ciudadanos, y a
controlar el presupuesto, al antojo de unas elites locales que se resisten al cambio.
Para nadie es un secreto que este negro nubarrón, en medio de una fuerte sequía,
tiene el propósito concreto de borrar del escenario político a todo lo que huela a
diferencia. Lo primero es controlar el poder local y regional. Para ello sólo les falta
recuperar a Santa Marta. Al triste estilo de Peñalosa en la capital. No están lejos,
cuentan con mayorías desde lo micro, en juntas, ediles, concejos y asamblea. Se
despachan, en las mieles del poder, con la Gobernación, desde que hay elección
popular. Además, lograron los cinco escaños en la cámara baja y 3 senadores;
concentran los 3 poderes; manejan los medios masivos; y el dinero a chorros. Con
eso cualquier acción, es una bola de nieve que arrincona a quien se les oponga. Sin
honor ni pudor, no les importa pasar por encima de la ley y de la gente, de sus
necesidades, de sus ilusiones, para lograr su cometido de reconfigurar el poder y
cooptarlo para preservar sus intereses particulares y sus privilegios de élite
excluyente. La única luz, es que en Santa Marta no han podido derrotar a la
esperanza del pueblo.
@rvillasanchez