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Preguntas de investigación.
¿Cómo cambiar, en la forma de enseñar historia, que favorezca un nuevo
paradigma en los estudiantes de tercer semestre del telebachillerato comunitario
#73 sobre el aprendizaje de la historia?
¿Cómo se logra el cambio en los estudiantes del tercer semestre del TBC73, sobre
la visión que tienen del estudio de la historia, como algo estático hacia algo
dinámico, y que les proporcione?
Objetivos.
- Mostrar a los estudiantes que al aprender historia, no se trata de ver hechos que
se quedaron en el pasado, sino que la historia es un proceso de constante cambio.
Justificación.
Cuando leí esto, me llevé una enorme sorpresa, pues nunca había leído y menos
escuchado tales sucesos, que a mi forma de ver, le dan mucho sentido a lo que hoy
entendemos que pasa en, por ejemplo, el estado de Guadalajara y la visión de la
mayor parte de su población referente a la religión. Este “nuevo” conocimiento, lo
compartí con los jóvenes estudiantes de mi escuela, con quienes ya había impartido
la materia de historia de México, a quienes pareció agradarles lo que les llevaba y
que a mi había causado una enorme sorpresa. Al observar ellos mi entusiasmo en
el conocer aquello, pareciera que se contagiaron y me hicieron más preguntas al
respecto; esto a pesar que sé, no les dura mucho, pues padecen una especie de
“olvido” sobre los asuntos escolares, ojalá se les haya quedado algo de aquella
clase.
Creo que la historia es esto y no lo que los alumnos habían aprendido años
escolares atrás, que la cuestión del estudio de la historia, es algo aburrido que no
tiene sentido estudiar; por lo menos eso me dice el diagnóstico que aplico a ellos
previo al inicio del curso. Ante la pregunta de para qué sirve la historia, ofrecen
respuestas en el mismo sentido, que se trata de una materia que solamente es
memorizar fechas o personajes.
En mis cursos, de lo que se trata es que como afirma Serge, Grunzinski “…una
materia extraordinariamente viva, gestada en la interacción entre teoría y práctica,
actual, que nos introduce de pleno en la ya aludida cuestión de la enseñanza de la
historia en un tiempo global gracias a un fluido y bien construido discurso que une
con rigor pasado, presente y futuro.” (Gruzinski, 2018, pág. 7).
Esta forma de comprender el estudio de la historia, rompe de alguna manera con
un paradigma que poseen los estudiantes de educación básica, aporta elementos
para que el alumno comprenda que “…la historia reflexiona sobre el conocimiento
del pasado para optar con mayor libertad en el presente y en el futuro.” (Torruella,
2013, pág. 25). Si bien la enorme barrera del estudiante para aprender historia, es
acercarse a libros que mencionan constantemente fechas y personajes, me parece
que lo preciso sería ofrecer conocimientos que inviten a cambiar tal paradigma de
conocimiento; creo que esto solamente puede conseguirse, cuando el docente
participa en la misma generación de nuevo conocimiento histórico.
Esta nueva visión de la historia, es la muestra en sí misma, de que se trata de una
forma dinámica de comprenderla, de que no es algo estático, sino de profundo
cambio incluso en aquello que ya “pasó”, pero que sigue construyendo el
conocimiento y aprendizaje en los estudiantes.
Esto es muy importante, pues el cambio en lo que los estudiantes creen que es el
estudio de la historia, les permite comprender que “no hay una esencia natural del
ser humano que dicte los fines a los que este ha de encaminarse. El ser humano
tiene completa libertad para determinar esos fines, y su historia es la historia de
esas determinaciones a las que, por otra parte, no puede sustraerse.” (Diéguez,
2017, pág. 123) .
Lo mismo pasa con la revisión de los textos del historiador israelí Yuval Noha Harari,
quien en sus textos, ofrece una explicación distinta de la historia, con buenos
fundamentos y con una escritura amena. Los escritos de este autor, muestran una
forma distinta de comprender lo que anteriormente se creía, por ejemplo, que la
comunicación entre los hombres no se dio debido a la necesidad de comunicarse,
sino a la urgencia de la confianza entre los humanos. Ya que sin confianza (Noah
Harari, 2014), la sociedades y muchas de las civilizaciones, no hubieran logrado
consolidarse.
Poseer este tipo de conocimientos en los profesores de historia, provee de varios
referentes ante un alumno, es por esto que reafirmo que solamente un profesor
preparado y en constante aprendizaje, puede contagiar a los estudiantes de ello,
característica que se persigue en las escuelas, en teoría claro.