You are on page 1of 4

1

Análisis de “El Otro” de Jorge Luis Borges

En el presente trabajo se tomarán en consideración las cuestiones de mayor


transcendencia en el cuento “El Otro” de Jorge Luis Borges. El tema central de
la obra aparece subrepticiamente y con escasas referencias textuales (sólo
dos): “El hombre de ayer no es el hombre de hoy 1”. Esta idea es anticipada
indirectamente cuando Borges personaje ve el río Charles y piensa en
Heráclito. Al encontrarse consigo mismo desdoblado, Borges se da cuenta de
cómo el Borges que está en Ginebra es distinto del narrador que está en
Cambridge.

Símbolos de la irrealidad
Ana María Barrenecha tiene en consideración dos símbolos de la irrealidad
en la prosa borgesiana, por un lado, los espejos y, por otro, los sueños;
particularmente, en este cuento aparecen ambos. La temática del espejo se
encarna en la idea del doble específicamente. En la idea del espejo subyace
otra de índole “gnóstica de que el universo es una copia invertida del orden
celeste, […] la deformación monstruosa 2”. Rescatando esta idea y teniendo en
consideración la reacción del personaje Borges acerca de su álter ego que está
en Ginebra, es posible percibir su mirada como la mirada hacia un doble, hacia
aquello deformado de sí mismo. Sin duda, Borges no logra verse a su yo
sexagenario en ese Borges veinteañero. Entonces, este personaje del doble
adquiere características atenuadamente siniestras, pues es aquello familiar
(aquello que Borges fue en su momento) pero que se tornó extraño: le cuesta
reconocerse a sí mismo en ideas que ya no comparte:

Sin hacerme caso, me aclaró que su libro cantaría la


fraternidad de todos los hombres. El poeta de nuestro tiempo no
puede dar la espalda a su época.
Me quedé pensando y le pregunté si verdaderamente se
sentía hermano de todos. Por ejemplo, de todos los empresarios
de pompas fúnebres, de todos los carteros, de todos los buzos,

1
Jorge Luis BORGES, “El Otro”, Cuentos Completos, Buenos Aires, Sudamericana, 2012, pág. 356.
2
Ana María BARRENECHEA, La expresión de la irrealidad en la obra de Borges, Buenos Aires, Paidós
[s.d], pág 175.
2

de todos los afónicos, etcétera. Me dijo que su libro se refería a


la gran masa de los oprimidos y parias.
- Tu masa de oprimidos y parias –le contesté- no es más que una
abstracción.3

El personaje narrador ve a ese otro como un otro deformado, un no-él. Las


oposiciones entre los dos personajes son espaciales, madurativas, etáreas…
La construcción del otro es nominal, no es “el otro Borges”, sino simplemente
un no-yo, otro: “el otro se había puesto a silbar”; “el otro tampoco habrá
ido”;“el encuentro fue real, pero el otro conversó conmigo” y “el otro me soñó,
pero no me soñó rigurosamente”.
El segundo elemento del que Barrenechea toma nota son los sueños, los
cuales intervienen en los planos de realidad/irrealidad. Los sueños son un
elemento útil para sugerir indeterminación entre los límites del mundo real y el
mundo ficticio. En el último párrafo de la obra, el narrador da a entender a los
lectores que todo el episodio fue un sueño, por parte de los dos personajes; no
obstante, por momentos, el narrador parece confundirse acerca de la
naturaleza del evento, otorgándole una cuota extra de indeterminación a la
conclusión que se puede extraer acerca del cuento:

Creo haber descubierto la clave. El encuentro fue real, pero el otro


conversó conmigo en un sueño y fue así que pudo olvidarme; yo
conversé con él en la vigilia y todavía me atormenta el recuerdo.
El otro me soñó, pero no me soñó rigurosamente. Soñó, ahora
lo entiendo, la imposible fecha del dólar.4

Sin duda, en el texto interviene lo vivido y lo soñado y se mezclan para


producir confusión. Hay referencias históricas que son correctas, entre ellas,
de cariz autobiográfico está el hecho de que Borges viva en Ginebra desde
1914. De allí que se produzca cierta vacilación en el lector y el efecto propio
del cuento.

3
Jorge Luis BORGES, Op. cit. pág. 356.
4
Ibídem, pág. 359.
3

Recursos borgesianos
- Uso de adjetivos antepuestos: “largos trozos de hielo”; “alto edificio” ;“pobre
muchacho” y “brusca idea”.
- Expresiones parentéticas: “Sentí de golpe la impresión (que según los
psicólogos corresponde a los estados de fatiga)”. “(nunca he sido muy
entonado”. En el primer caso, la expresión parentética tiene por función la de
cuestionar y, en el segundo, su intención es dirigirse al lector.
- Verbos insólitos: “El agua gris acarreaba largos trozos de hielo”. “Se me ha
desdibujado”.

Género: ¿cuento fantástico o cuento-ensayo?

A la hora de determinar si este cuento es un cuento fantástico o un cuento-


ensayo como propone Barrenechea, es inevitable problematizar la cuestión.
Como cuento fantástico podemos tener presente que se parte de una situación
real, pero se ve alterada por un hecho sobrenatural. No hay una explicación
concluyente del porqué de esa presencia fantástica. Como cuento-ensayo,
debería tenerse en consideración que no sólo son sobre autores y libros
inventados, sino que son cuentos con una proposición matemática, teológica o
metafísica a los que se les da una aventura del pensamiento. En ese sentido,
“El otro” podría considerarse un cuento ensayo, cuya premisa es constatar la
idea heraclítea de que uno no se puede bañar dos veces en el mismo río, a la
manera de que el hombre de ayer no es el hombre de hoy, por tanto, el cuento
sería el contraste de esa premisa y su feliz comprobación.

En conclusión, la temática principal es la transformación del hombre y su


carácter dinámico. Borges hace esto concreto con el cuento al presentar la
problemática del doble y, de este modo, puede justificar su proprosición. La
temática filosófica que subyace en el cuento le da el soporte necesario para
ser considerado un cuento-ensayo, aunque, no cabe duda de que hay un halo
de indeterminación y vacilación propio del cuento fantástico cuya presencia es
innegable.
4

Bibliografía:

Fuentes Primeras

-BORGES, Jorge Luis, “El otro”, Cuentos completos, Buenos Aires,


Sudamericana, 2012.

Fuentes segundas

-BARRENECHEA, Ana María, La expresión de la irrealidad en la obra de


Borges, Buenos Aires, Paidós, [s.d].

You might also like