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Principales propuestas del Plato Harvard:

1) El 50% de nuestra alimentación debe venir de la fruta y la


verdura (contradiciendo a la recomendación de la Pirámide
Alimentaria, que sostenía que la mitad de los alimentos ingeridos
debían ser hidratos de carbono). Ellos sugieren que la base ha de
ser sustituida por vegetales, frutas y frutos secos, ya que todos
ellos son más efectivos en la lucha contra las enfermedades no
transmisibles. Además, añaden que las patatas (en especial las
patatas fritas) no entrarían en esta categoría debido al efecto
negativo que estas causan en los niveles de azúcar en sangre.

2) El agua ha de ser el líquido predominante. Propone evitar todas


las bebidas azucaradas, limitar la leche y los productos lácteos a
una o dos porciones al día, e incluso reducir la ingesta de zumo a
un vaso pequeño diario (como máximo). Otra gran novedad
respecto a la Pirámide es la ausencia del alcohol.

3) Reducir el protagonismo y el tipo de los hidratos de carbono. Los


cereales han de ser siempre integrales, y los hidratos han de
rondar un 25% de la alimentación del individuo. Una de las
principales novedades es la eliminación de productos procesados
tan habituales como el arroz blanco.

4) Las cantidades de proteínas no han cambiado respecto a los


planes previos, pero sí que proponen dar prioridad y preferencia a
los pescados, aves, legumbres y nueces por encima de las carnes
rojas, de las cuales se abusa con mucha frecuencia.

5) El Plato elimina por completo los ultraprocesados. Estos


alimentos estaban en lo más alto de la Pirámide Alimentaria, y
aunque sus recomendaciones y niveles eran saludables, muchas
veces su mera inclusión en la Pirámide creaba confusión y daba
lugar a que este tipo de snacks (bollería, dulces, grasas saturadas)
fuesen alimentos de consumo diario o semanal por parte de un
gran porcentaje de la población.

Otro de los factores que ha contribuido a la difusión y acogida de


este plan es la desconfianza que generaba el origen de la previa
Pirámide Alimentaria, siempre acusada de tener intereses ocultos
y estar sujeta a influencias y conflictos internos ejercidos por
industrias y gobiernos, mientras que la propuesta de Harvard goza
de un prestigio más académico y científico.

Por último, esta novedosa dieta no se olvida del ejercicio físico y


otros hábitos saludables que complementen a la alimentación, y
con un llamativo logo dentro de su esquema recomienda y
promueve ciert

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