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Medicina
Gastroenterología.
Coristomas
Mucosa gástrica heterotópica
Se localiza frecuentemente en el bulbo duodenal.
Endoscópicamente se observa un pequeño nódulo en la
mucosa duodenal. Microscópicamente se puede presenciar
glándulas de tipo gástrico con células parietales.
Páncreas heterotópico
Tejido pancreático acinar y ductal frecuentemente se encuentra en la pared
duodenal. Endoscópicamente se observa una formación nodular en la pared del
duodeno.
Lesiones de glándulas Brunner (hiperplasia, adenoma, brunneroma)
Las glándulas de Brunner son secretoras de mucina, las cuales se localizan en el
duodeno. Estas glándulas se distribuyen al píloro, las cuales secretan un fluido
alcalino viscoso que forma parte de los mecanismos de protección duodenales del
contenido gástrico. Cabe mencionar que el crecimiento de estas glándulas de
Brunner ha recibido varios nombres: adenoma de las glándulas de Brunner,
hiperplasia, hamartoma polipoide. Raramente las glándulas de Brunner tienen
transformación maligna.
Estas lesiones pueden ser focales, multifocales o difusas. La ubicación más
frecuentemente es la pared posterior del duodeno en la unión entre la primera y
segunda porciones.
GASTROENTEROLOGÍA GEOVANY CORTÉS MÉNDEZ
Tumores benignos
Los adenomas, leiomiomas y lipomas son los tumores benignos más frecuentes del
intestino delgado. También pueden encontrarse hamartoma, fibromas, angiomas y
tumores neurogénicos
Neoplasias epiteliales
El intestino delgado es afectado por pólipos de diferentes tipos: Los pólipos de
Peutz-Jeghers (hamartomatosos) pueden localizarse en intestino delgado,
mayormente en el yeyuno, seguido del íleon y el duodeno. El diagnóstico se da a
través de múltiples pólipos hamartomatosos, pigmentación mucocutánea y un
patrón de herencia autosómico, estas lesiones presentan sangrado o
intususcepción.
Adenomas de intestino delgado
Se detectan mayormente a los 30-90 años de edad y no tiene predominio de género.
Aquellos adenomas pequeños son asintomáticos, no obstante, los adenomas que
desarrollan síntomas son los que se originan en el ámpula de Váter, los cuales dan
manifestaciones como cólico y obstrucciones biliares, colangitis bacteriana aguda,
ictericia, pancreatitis y dolor abdominal.
Son más frecuentes las afectaciones en duodeno y yeyuno que en íleon. En el cual
los adenomas pueden ser únicos o múltiples, sésiles o pedunculados. Los pólipos
sésiles son más frecuentes que lo pedunculados. Los tubulares su tamaño promedio
es de 0.5-3 cm. Los adenomas vellosos tienden a medir entre 5-8 cm.
Leiomiomas de intestino delgado
Pueden hallarse en cualquier localización e inciden por igual en ambos sexos y
suelen diagnosticarse en edades avanzadas por síntomas de obstrucción intestinal
o hemorragia. Su tamaño suele ser grande y los síntomas son similares a los de
otros tumores benignos.
Lipomas de intestino delgado
Se localizan en íleon mayormente, su tamaño suele ser grande y los síntomas son
similares a los de otros tumores benignos.
Pólipos mixtos, hiperplásicos/adenomatosos
Son lesiones polipoides raras que surgen en focos de mucosa gástrica heterotópica,
se encuentra mezclada con áreas de epitelio con cambio adenomatosos.
GASTROENTEROLOGÍA GEOVANY CORTÉS MÉNDEZ
Tumores malignos
Aproximadamente dos tercios de los tumores del ID son malignos, los tumores
malignos más frecuentes de intestino delgado son el adenocarcinoma, el linfoma, el
sarcoma y el tumor carcinoide. Puede encontrarse tumores metastásicos,
especialmente secundarios a melanoma, cáncer de mama o hipernefroma.
4) Paraganglioma
Se localiza en la segunda porción del duodeno, miden más de 2 cm e involucran
las muscular externa. Son lesiones benignas.
5) Carcinoma neuroendocrino
Son neoplasias raras en el duodeno y se localizan mayormente en el ámpula de
váter. Histológicamente, son lesiones poco diferenciadas con marcada atipia
citológica que muestran positividad para marcadores neuroendocrinos.
Estos tumores se presentan entre los 30-90 años. Los carcinoides íleales
pueden presentarse asociados a enfermedad de Crohn.
El síndrome carcinoide está compuesto por alteraciones vasomotoras,
cardiopulmonares y gastrointestinales.
GASTROENTEROLOGÍA GEOVANY CORTÉS MÉNDEZ
Linfomas intestinales
La forma más frecuente de linfoma en el tubo digestivo es la infiltración
secundaria por linfoma ganglionar diseminado.
Se han establecido criterios para considerar un LGI como primario:
Ausencia de ganglios linfáticos superficiales palpables
Adenomegalias mediastinales no detectables mediante radiografía de
tórax.
Leucocitos en sangre periférica normales
Predominio de lesiones en el tubo digestivo con afección en ganglios
linfáticos
Ausencia de infiltración de hígado y bazo
El linfoma primario de intestino delgado tiene su origen en tejido linfoide de la
mucosa submucosa, en su mayoría corresponde a un linfoma de células B grande.
La clínica del linfoma intestinal depende de la colonización y extensión del tumor,
suelen presentarse dolor abdominal tipo cólico, náuseas, vómitos, pérdida de peso,
alteración del ritmo intestinal y, a menudo, síndrome anémico. Ante la sospecha
clínica se deben realizar pruebas diagnósticas como a TC de abdomen, radiología
con contraste, endoscópica convencional y cápsula endoscópica.
La biopsia endoscópica y los linfomas intestinales
Es importante que el patólogo distinga procesos reactivos de proliferaciones
neoplásicas. La biopsia endoscópica nos permite determinar un diagnóstico
GASTROENTEROLOGÍA GEOVANY CORTÉS MÉNDEZ
Comentario
Es muy importante tener en claro la incidencia y las magnitudes que pueden tener
los tumores de intestino delgado, ya que como sabemos estos suelen ser raros y de
cuadros clínicos inespecíficos. Es por ello que es fundamental tener un excelente
conocimiento previo de los diferentes tipos de neoplasias que se producen en
intestino delgado, ya que como vimos hay una variación muy amplia
histológicamente desde los tumores benignos, malignos y los linfomas. Entonces,
el saber reconocer las diferentes variaciones que se pueden presentar nos hace
capaz para establecer un diagnóstico diferencial y así mismo poder determinar el
tratamiento adecuado para disminuir la mortalidad en nuestros pacientes.
Bibliografía