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7?) Que, por ultimo, la demandada impugna en su contestacién del
recurso extraordinario, para el caso de una decisién favorable a la
actora, la constitucionalidad del citado articulo 1042, primera parte,
del Codigo Aduanero. Sostienen que, al haber prestado la Administra-
cin General de Puertos un servicio de almacenaje a la actora, la tasa
correspondiente constituye un recurso genuino del citado organismo y,
por tal razén, considera que la norma aduanera cuestionada resulta
contraria a la garant{a de la propiedad consagrada en la Constitucién
Nacional.
8°) Que no corresponde que el Tribunal entre a examinar el planteo
resefiado pues no es posible reconocer a la A.G.P. —dada su calidad de
ente estatal— el derecho a oponerse a la manifestacién conjunta de
voluntad de los poderes legislativo y ejecutivo al sancionar y promul-
gar, respectivamente, la norma legal cuya constitucionalidad impugna
(conf, doctrina del pronunciamiento dictado in re: “Giffoni, Luis Vice-
nte o/ Poder Ejecutivo (Provincia de Buenos Aires)”, G. 374.XVIII, del
23 de julio de 1981 y sus citas).
Por ello, se revoca la sentencia apeladay se hace lugar a lademanda
de fs, 31/36 (art. 16, segunda parte, ley 48). Con costas.
Enrique Santiaco Petraccut — Aucusto César BetLuscio —
Carios S. Fayt — Jorce Antonio Bacqué.
EDUARDO A. SAMBRIZZI v. NACION ARGENTINA ~
(DIRECCION GENERAL IMPOSITIVA)
IMPUESTO: Principios generales.
‘A fin de determinar el momento en que se configuré el hecho imponible del
impuesto del 2% sobre los intereses y ajustes pagados correspondientes a los
depésitos a plazo fijo, establecido por la ley 22.752, no resulta correcta la
afirmacién en el sentido de que no debfan desconocerse ciertas consecuencias ya
verificadas, como lo eran los frutos civiles o reajustes del valor monetario que,
aunque no disponibles, se habfan ganado en un perfodo anterior a la entrada en
vigor de Ia ley, pues tal criterio implicarfa, a la vez que prescindir del claro texto
del art. 11, ine. a), de la ley, acordar a Ja operacién en cuestién un cardcter
divisible que no se compadece con su naturaleza, desde que el derecho para el
acreedor de percibir los intereses y ajustes sélo se verificé al vencimiento del
citado plazo.DE JUSTICIA DE LA NACION 2079
‘a2
LEY: Interpretacién y aplicacion.
La primera fuente de interpretacién de la ley es su letra, sin que sea admisible
una inteligencia que equivalga a prescindir del texto legal.
IMPUESTO: Principios generales.
Sélo existe retroactividad si el hecho imponible, incluida su dimensién temporal,
ha tenido fntegra realizacién antes de entrar en vigor la ley que lo convierte en
imponible.
FALLO DE LA CORTE SUPREMA
Buenos Aires, 31 de octubre de 1989.
Vistos los autos: “Sambrizzi, Eduardo A. e/ Fisco Nacional (D.G.1.)
s/ repeticion”.
Considerando:
1°) Que la Cémara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso
Administrativo Federal (Sala II1) revocé la sentencia de la instancia
anterior y, en consecuencia, hizo lugar a la demanda entablada por
Eduardo A. Sambrizzi contra la Direccién General Impositiva por cobro
de australes. Contra dicho pronunciamiento, el apoderado del Fisco
interpuso recurso extraordinario, que fue concedido a fs. 70, sin que
hubiese sido contestado por la parte actora (confr. fs. 69).
2) Que la ley 22.752 (promulgada el 25 de febrero de 1983 y
publicada en el Boletin Oficial del 28 del mismo mes y afio) establecié
un beneficio social temporario al trabajador desocupado, por un perfodo
maximo de 6 meses a partir del primer dia del mes siguiente al de su
promulgacién (art. 2). Dicho beneficio se financié, en lo que al caso
interesa, con un impuesto del 2 % sobre los intereses y ajustes pagados
correspondientes a los depésitos a plazo fijo en moneda nacional
extranjera, efectuados en instituciones sujetas al régimen legal de
entidades financieras. Seguin el art. 11, inc. b), dela ley, el mencionado
gravamen tenia una vigencia maxima de 6 meses a partir del 1 de abril
de 1983. El concepto del pago era el fijado por el art. 18, ultimo pérrafo,
de la ley de impuesto a las ganancias (N® 20.628, t. 0. 1977 y sus
modificatorias) que establecia: “...Cuando corresponda imputar las2080 PALLOS DE LA CORTE SUPREMA
‘312
ganancias de acuerdo con su percepeién, se considerarén percibidas y
os gastos se consideraran pagados, cuando se cobren o abonen en
efectivooen especie y, ademas, en los casos en que, estando disponibles,
se han acreditado en la cuenta del titular o, con la autorizacién o
conformidad expresa o tcita del mismo, se han reinvertido, acumula-
do, capitalizado, puesto en reserva o en un fondo de amortizacién ode
seguro cualquiera sea su denominacién, o dispuesto de ellos en otra
forma...”.
3*) Que la Camara resolvié que, si bien podfa interpretarse que el
gravamen del art. 11 de la ley 22.752 era aplicable al depésito a plazo
fijo de 365 dias instituido por el actor en el Banco de la Nacién
Argentina el 5 de agosto de 1982 —es decir, antes de la sancién de la
citada ley pero con vencimiento posterior a aquélla—, no podia aceptar-
se que el impuesto recayera sobre la porcién de intereses y ajustes
correspondientes a un momento anterior al fijado por la ley. En tal
sentido, el a quo consideré que la ley 22.752 nocontenia disposicién que
previera su aplicacién retroactiva y, por ello, era razonable, segin la
Camara, que el legislador hubiese entendido queno debian desconocer-
se ciertas consecuencias ya verificadas, como lo eran los frutos civiles
o reajustes del valor monetario que, aunque no disponibles, se habjan
ganado en un perfodo anterior a la entrada en vigor de la ley. En
consecuencia, resolvié, al hacer lugar a la demanda, que debfa reinte-
grarse al actor la suma por él pagada, correspondiente al perfodo
anterior al 1 de abril de 1983.
4°) Que el apelante discrepa con la solucién resefiada pues conside-
ra que aquélla se funda en una interpretacién errénea de la ley 22.752.
En su opinién, el hecho imponible del tributo cuestionado consiste en
el pago de ajustes e intereses, sin importar la fecha en que se efectud
el depésito a plazo fijo. Rechaza la suposicién de que el legislador haya
entendido que no debian desconocerse esas consecuencias ya verifica-
das. Opina que la ley era clara en el sentido de que gravaba sin
distincién a todos los frutos civiles o reajustes del valor monetario que
se abonaron durante la vigencia de la norma y que ésta fij6 el momento
del cobro para gravar esa manifestacién de la renta.
5°) Que, conforme a los agravios expuestos, la cuestiGn a resolver en
autos y de la cual depende la solucién del caso, consiste en determinar
el momento en que se configuré el hecho imponible del tributo exami-
nado.