en el Perú? Para su aplicación, el país tendría que renunciar al tratado de San José y salir de la convención
Esta no es la primera vez que la aplicación de la pena de muerte, como
una condena para todo aquel que incurre en el delito de violación, entra en debate en nuestro país. Muchas son las opiniones de quienes están a favor y en contra de esta medida, pero ¿realmente es posible su aplicación en el Perú?
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Desde el 2006, durante el segundo gobierno del ex presidente Alan
García, se planteó la aplicación de la pena de muerte para sicarios y violadores de menores de edad que causen la muerte de sus víctimas. Pese a que el Ejecutivo envió un proyecto al Congreso para reformar la Constitución y permitir la aplicación de esta condena, no tuvo éxito.
Y es que el 28 de julio de 1978 el Perú ratificó un tratado internacional
que recibe el nombre de Convención Americana sobre Derechos Humanos, también conocido como Pacto de San José de Costa Rica. Este documento contiene dos artículos clave que debemos considerar.
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El primero está referido a que se prohíbe extender la pena de
muerte para delitos que no estén contemplados con anterioridad en cada país, mientras que el segundo señala que ningún país puede interpretar la Convención para limitar la libertad de sus ciudadanos, según precisa la coordinadora académica y de investigaciones del IDEHPUCP, Renata Bregaglio.
Hace 39 años, cuando el Perú ratificó el tratado, estaba vigente la pena
de muerte para delitos de traición a la Patria en caso de guerra exterior, homicidio calificado y otros supuestos. Sin embargo, cuando se creó la Constitución de 1979, solo se mantuvo la pena de muerte por traición a la Patria y se eliminaron los delitos antes mencionados. ¿Qué dice la Constitución del Perú de 1993? El artículo 140 indica que “la pena de muerte solo puede aplicarse por el delito de traición a la patria en caso de guerra, y el de terrorismo, conforme a las leyes y a los tratados de los que el Perú es parte obligada”.
El asesinato y la violación nunca tuvieron como sanción la pena de
muerte, lo que significa que aplicar esta medida está prohibido para nuestro país.
Al respecto, el abogado de IDL, Carlos Rivera, manifestó que la
propuesta es “un verdadero despropósito”, y que “más me da la impresión de que es una suerte de treta política para meternos en un tema que hace por lo menos 30 o 35 años atrás se viene discutiendo en este tipo de circunstancias”.
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de violación
“Nunca se ha hecho efectiva (la pena de muerte) porque me parece que
el desarrollo y el avance del Estado de derecho ha impedido que propuestas de esta naturaleza, contrarias al espíritu del Estado democrático, a los compromisos internacionales del propio Estado y al contenido mismo de la norma constitucional, hablo de la del 79 y la del 93, se pueda materializar”, afirmó.
Órganos Jurisdiccionales - La Corte Suprema de Justicia
- Las Cortes Superiores de Justicia
- Los juzgados Especializados y Mixtos
- Los Juzgado Paz Letrados
- Los Juzgados de Paz
LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA La Constitución actual señala que corresponde a la Corte Suprema fallar en casación, o en última instancia, cuando la acción se inicia en una Corte Superior o ante la propia Corte Suprema conforme a Ley, agregando que asimismo Manuel Jesús Miranda Canales - Estructura organizacional piramidal de los órganos jurisdiccionales en el Perú y en el extranjero 90 Revista Oficial del Poder Judicial 1/1 2007 conoce en casación las resoluciones del Fuero Militar, con las limitaciones que establece el artículo 173º5 , el cual se refiere a los muy excepcionales supuestos de imposición de pena de muerte. Las funciones casatorias de la Corte Suprema, están relacionadas con el control que debe ejercer el máximo tribunal de justicia sobre la correcta aplicación y la correcta interpretación de una norma de derecho material y el respeto a las garantías de un debido proceso y a las formas esenciales de los actos procesales por los juzgados y tribunales inferiores, así como con la labor de unificación jurisprudencial (sentencias uniformes y reiteradas) que el principio de igualdad ante la ley y el principio de seguridad Jurídica, exigen al Poder Judicial. Por contraste, la intervención jurisdiccional como última instancia importa que la Corte Suprema, expida sentencias sobre el fondo de las controversias, resolviéndolas de manera definitiva. La Corte Suprema de Justicia, que tiene su sede en la capital de la República, extiende su competencia jurisdiccional a todo el territorio nacional, y es el más alto tribunal de la judicatura ordinaria del país. Para su trabajo resolutorio de conflictos, se divide en salas especializadas permanentes y transitorias. Cada sala está integrada por cinco vocales y es presidida por quien designe el Presidente de la Corte Suprema. Las especialidades son tres: de Derecho Civil, de Derecho Penal y de Derecho Constitucional y Social. En la actualidad, existen tres salas permanentes y cuatro Salas Transitorias Supremas.
El recurso de casación es un recurso extraordinario que tiene por objeto anular
una sentencia judicial que contiene una incorrecta interpretación o aplicación de la Ley o que ha sido dictada en un procedimiento que no ha cumplido las solemnidades legales, es decir por un error in iudicando o bien error in procedendo, respectivamente. Su fallo le corresponde a la Corte Suprema de Justicia y, habitualmente, al de mayor jerarquía, como el Tribunal Supremo. Sin embargo, en ocasiones también puede encargarse del recurso un órgano jurisdiccional jerárquicamente superior o en su caso uno específico.1