INDICE Prélogo.. Dictamen det Prof sFutio B. J. Maier Prefacio Palabras preliminares y agradecimientos del autor Cartruno T Introduccién Objeto de estudio . 11. Presentacion de la cuestién: el plazo razonable de duracién del proceso penal 1.2, Rolevancia dela euestién para el derecho procesal penal... 1.3. Las reglas en juego 1.4. Planteamiento de los problemas centrales en la in terpretacién del plazo razonable 1.5, Delimitacién del objeto de estudio: el caso indivi- dual . Aleance y estructura de la investigacién . 2.1. Alcance de la investigacién: tratamiento dogma- tico . 2.2. Tmportancia y actualidad del tema de tesis, 2:-“Estructura de la inwestigacién .. ; Cavtruto It El tiempo y el sistema penal . El sentido filos6fico, fisico, social y juridico del tiempo El tiempo del derecho penal ‘i El tiempo del proceso penal . 1 21 33 37 61 6 69 B 3h 8738 ELPLAZO se reine el tribunal compuesto por los profesores doctores David Baigiin, Marcelo Sancinetti y Eugenio Rail Zaffaroni, para evaluar la tesis titulada ‘El tiempo y la persecucién pe- nal, Plazo razonable de duracién del proceso penal’, presenta- da por el abogado Daniel Roberto Pastor. Luego de la exposi- ign del doctorando, de cuarenta minutos, de preguntas y observaciones de los sefiores miembros del tribunal y de las respuestas del doctorando, como también de las intervencio- ros de los sefiores profesores doctores Maier y Righi, el tribu- nal pasa a deliberar y por dictamen fundado por unanimidad considera que corresponde calificar la tesis como sobresalien- te y recomendarla para el Premio Facultad. No siendo para més y siendo las diecinueve horas y veinticinco minutos, el tribunal declara terminada su labor” Siguen las firmas de los integrantes del jurado, prot sores doctores Eugenio Rati! Zaffaroni, David Baigin y Mar: celo Sancinetti, como asi también la del director de la tesis, Prof. Dr. Julio Maier. En tercer lugar, yo mismo fui felicitado verbalmente por el tribunal, en especial por uno de sus miembros, el Prof. Dr. Marce- lo Sancinetti, cuya tesis doctoral —que también patrociné— me dio las mismas satisfacciones que ahora siento. Creo merecer es- ta felicitacién, pero no como mérito por la elaboracién del trabajo, tarea que, por supuesto, cumplié integramente el Dr. Pastor, a quien pertenece la obra, sino, antes bien, por el que indica el apo- yo académico imprescindible, sin el cual estas tareas son, précti- camente, imposibles, mas ain en la situacién en Ia cual se desa- rrolla la academia y la investigacién en la Repiblica Argentina. Pero déjenme ahora hablar sobre Daniel, ef autor de 1a obra, a quien siempre quise como se quiere a un hijo. Creo que 41 también convendré conmigo en que el esfuerzo valié la pena. Para observar esta cualidad basta advertir que el que obtuvo es el \inico titulo académico, propiamente universitario. Ni siquie- ra el titulo profesional —abogado—, de grado, gue en nuestro pafs conceden por razones practicas las universidades, puede re- clamar ese honor. Tampoco pueden rectamarlo, por supuesto, to- dos los titulillos terciarios —master, especialista, ete —, hoy en boga y multiplicados geométricamente, hijos de la competencia del mercado profesional y puestos en las universidades por razo-Dictamen del Prof. Dr. Julio B. J. Maier Buenos Aires, febrero de 2001 Sros. Comisién de Doctorado Facultad de Derecho Universidad, de Buenos Aires Presente De mi mayor consideracién: Tengo el agrado de dirigirme a Uds. a fin de presentar el dictamen final (art. 12, ¢, Regl. de Doctorado) para evaluar la in vestigacién realizada, la calidad del trabajo y la significacidn de la tesis elaborada por el doctorando Daniel R. Pastor. He tenido ya la suerte de apadrinar una tesis doctoral ex- celente, reconocida como tal por la Facultad de Derecho, calitica cin merecida por el jurista que la compuso, hoy integrante del plantel de profesores de ta Facultad de Derecho en su maximo nivel y reconocido como tal universalmente. Esta es la segunda tesis doctoral que presento a la consideracién de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires y pretendo los mis- ‘mos logros, pues ella merece esa calificaci6n y el jurista que la compuso recorre ya un camino similar. Desde el punto de vista personal, esta tesis tiene aun més importancia para mi, pues el doctorando se formé integramente en mi cétedra, desde sus co mienzos, estd muy estrechamente ligado a mé y el tema versa esDELESTADO DE 22 _ELPLAZO RAZONAULE. EN EL PROC! (ECHO pecfficamente sobre la materia del derecho penal a la que yo, por circunstancias del destino, destiné mis esfuerzos. Con ello adelante que se trata de una tesis que abarca la solucién de un problema en el area del derecho procesal penal y, més atin, que ese problema reside en el Ambito de los derechos humanos referidos a la administracién de justicia penal. Po- driamos decir, incluso, que ella se vincula a un derecho relativo a la dignidad humana y a la seguridad juridica de los habitan- tes de un Estado de curio “moderno”, en el sentido de que no fue, ‘como sus congéneres, preocupacién directa de las ideas libera- les que fueron forjadas politicamente a finales del siglo XVIII y desarrolladas basicamente en el siglo XIX por el orden juridico; por lo contrario, su nacimiento como preocupacién y garantfa del ser humano individual sometido a la persecucién penal co- za.en la segunda midad del siglo XX, aun cuando existan antecedentes mas remotos, y adquiere actualidad y fuerza juri- dica a través de las diversas convenciones internacionales, uni- versal o regionales, sobre los derechos humanos. Se trata aqut del derecho de la persona perseguida penalmente a ser juzgada répidamente por la imputacién que se le dirige, sin dilaciones, en un plazo razonable, de modo que, como lo ha dicho también —aunque sélo por via de principio declamatorio 0 politico— nuestra Corte Suprema nacional, pueda definir claramente su situacin jurfdica. Desde el punto de vista politico la tesis implica un recono- cimiento expreso de la utilizacién del proceso penal en reempla- 20 de la pena estatal, como reaccién frente al hecho punible (“pe- na de proceso”). Las dificultades que existen para ai condena, en virtud del mismo orden juridico y de la det ganizacién judicial, concluyen, cada vez con mayor vigor, en el ‘uso de los mecanismos del procedimiento penal para reaccionar contra el infractor, en el sentido de privacién de derechos funda- mentales de alguien a quien el mismo orden juridico ealifica co- ‘mo “inocente”, hasta tanto un tribunal, por sentencia firme, no reconozca su culpabilidad y Io condene. El sistema juridico-pe- nal, en verdad, cubre de garantias la obtencién de una condena firme (ey previa, juicio previo, defensa, in dubio pro reo, recur s0 del condenado, ete.), como producto de la memoria historieaDICTAMEN DEL PROF. JULIO B A. MAKER sobre los abusos del poder penal de! Estado, pero facilita 1a pri vacién de derechos individuales bésicos durante e! procedimien- to: ya no se trata aqui de demostrar fehacientemente Ia imputa- ci6n, sino, tan sélo, de tornarla probable a manera de un in dubio pro republica; durante el procedimiento no sélo la misma perse- ‘cucién penal se trasforma en lastre duro de portar y en pérdida efectiva de oportunidades en relacién con otros que no la sopor- tan, sino que, ademds, se autoriza la injerencia estatal en una gran cantidad de derechos basicos de los habitantes con mini- mos recaudos (libertad locomativa, libertad de disposicién sobre bienes, privacidad hogarefia y de comunicacién con otros, etc.) Ello y la verificacién de la extensién temporal de los procedi- mientos determinaron la necesidad de limitar Ia duracién del procedimiento a un plazo razonable, maxima de principio sobre Ja cual el autor nos pretende, en principio, informar, para luego abocarse a {a solucién juridica que él reputa necesaria. EI trabajo presentado por el abogado Daniel R. Pastor pa- ra optar al titulo maximo de nuestra Universidad se descompo- ne en seis, capitulos. Tres de ellos son centrales (3.°, 4." 5.°)y los otros tres sélo de acompaiamiento (1°, 2." y 6.°). Denomino cen- trales a los capitulos 3.*, 4" y 5, porque el primero de ellos cons- tituye la informacién basica, histérico-politica, juridica y juri prudencial, para poder abordar el tema, mientras que los dos Liltimos,representan el desarrollo y la solucién propuesta por el autor para la cuestién juridica acerca de la regla de principio que establece la garantia para el imputado de “un plazo razona~ ble de duracién del procedimiento penal”. Denomino, en cambio, capitulos secundarios o de acompafiamiento al 1°, 2° y 6", porque Jos dos primeros pretenden introducir correctamente la hipéte- sis a estudio, mientras que el titimo representa tan sélo el colo- fon de resultados a los cuales se ha arribado, Una apretada sintesis secuencial de la investigacién juri- dica practicada puede describirla como sigue. E Capitulo Prime- ro presenta el objeto y el método de la investigacién: nos aclara, por una parte, la pregunta bésica que ella se propone responder, su importancia para el derecho procesal penal, determina las re- glas en juego y su rango, y Jos problemas principales que debera afrontar en su trascurso, para remarcar, finalmente, que aborda24 el tema desde los limites estrictos de una investigacién juridica —esto es, por fuera de cualquier proyecto de investigacidn em rica, pues supuesto el problema de la duracién excesivamente prolongada de los procedimientos penales (y judiciales, en gene- ral), el autor sélo aspira a darle solucién juridica al caso indivi- dual frente a una regla de principio (sin perjuicio de que ello pueda contribuir al tratamiento del problema empiricol—, in- vestigacién tefiida por la nota de su actualidad. EI Capitulo Segundo representa un ensayo sintético de las diversas concepciones y definiciones acerca de la categoria cen- tral con la que se enfrenta la investigacién: cl tiempo. Después de una sintesis acerca de los diversos puntos de vista segrin los cuales se ha abordado el tema en la filosofia, en lat fisica, en la vida humana individual y en lo social, concepciones e intuiciones que, aunque normalmente de modo oculto, influyen en las res- puestas jurfdicas, el trabajo presenta los dos puntos de vista ba- sicos de la relacién tiempo-derecho: tiempo como elemento de una situaci6n jurfdica, perspectiva a la cual pertenece la inves- tigacién, y tiempo como trascurso de las regias juridicas a través de él, Bl capitulo concluye con una breve exposicién de laimpor- tancia del tiempo, especificamente en el derecho penal y proce- sal penal. En el Capitulo Tercero comienza, propiamente, la investi- gacién juridica. Este capitulo contienc una informacién completa acerca del nacimiento histérico del problema y su consagracién jurfdico-positiva —més lejana de aquello que se sucle suponer y mds cercana de aquello que normalmente se supone al enfrentar monografias cientificas especificas sobre un tema, y acerca del desarrollo de aquello que se ha entendido por la regla juridica de garantfa, una vez que, politicamente, la regla de principio fue comprendida de esta manera, y las diversas soluciones que, para su violacién, han aplicado los tribunales y ha desenvuelto la doc- trina juridica, para culminar el capitulo con ta exposicién de aquello que se titula “opinién dominante”. En la primera parte (histérieo.jurtdica) del capitulo es interesante verificar la razén por Ia cual nuestros cédigos procesales penales histéricos conte- nfan un plazo, casi siempre de dos afios, para la duracién total del procedimiento penal; esos eédigos, de origen hispanico y fran-