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Autor del artículo: Arturo Álvarez Ponce de León

Colaboración: Ninón Fregoso
Difusión: www.psicogeometria.com

“Salud Geométrica: la Ciencia de la Vida”

(Extracto y síntesis del libro “Psicogeometria I: introducción a
la Geometría Sagrada y la Arquitectura Biológica”)

“La Salud Geométrica es la Ciencia de una Vida Sustentable”

El concepto de Salud Geométrica es propuesto por varios investigadores

internacionales quienes continúan descubriendo los principios científicos que
subyacen en la relación entre las formas geométricas y el buen
funcionamiento de los sistemas del cuerpo humano.

La Geometría Sustentable (antiguamente

llamada Geometría Sagrada) estudia, entre
otras cosas, la matemática de la vida
psíquica y corporal. Es una metáfora del
estudio de las proporciones, patrones,
sistemas, códigos y símbolos que subyacen
como fuente de ordenación que nos ayuda
a comprender la función y la estructura
tanto de la subjetividad humana como de
su realidad material.

La Salud Geométrica involucra una serie de

principios y reglas que determinan la
calidad de las ondas que emite y recibe el
cuerpo humano y su sintonía con ondas de
mayor inclusividad armónica, es decir,
ondas que están entrelazadas con otras
ondas en proporciones especificas.

El cuerpo humano es un espejo que refleja el equilibrio o desequilibrio de la

interacción de cinco fuerzas fundamentales: la sexualidad, las emociones,
los pensamientos, el instinto y la dimensión espiritual. Además el cuerpo
humano no solo existe en su realidad celular sino que tenemos otros
cuerpos más sutiles como son el cuerpo gravitacional y el cuerpo fractal.

La molécula del ADN tiene forma de Dodecaedro, una figura geométrica

construida con doce pentágonos, y esto permite que la Vida continúe y se

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distribya. La Ciencia de Implosión es la ciencia de cómo una figura
geométrica puede generar espacios de no fricción o cero resistencia para
generar mayor fuerza y armonía en el sistema inmunológico.

Vista superior de la molécula del ADN revelando su geometría oculta: ¡un dodecaedro¡

El concepto central que distingue a la Salud Geométrica es el concepto de

“campo fractal”. Un fractal es una forma donde cada una de sus partes
están contenidas en el todo, es un objeto geométrico cuya estructura básica
se repite en diferentes escalas. Es un concepto universal que sirve para
describir cómo lo micro se relaciona con lo macro. El concepto de
fractalidad puede ser aplicable a diferentes escalas.

A menor nivel de fractalidad menor fuerza

de vida, a mayor nivel de fractalidad mayor
salud, productividad, eficiencia, lucidez,
paz mental, capacidad de enfoque y
bienestar.

Fractal de sanación de las emociones humanas

Es frecuente haber oído hablar del cuerpo

electromagnético (comúnmente llamado “aura”) y es
todavía mas usual escuchar acerca de las terapias
relacionadas con la interacción del campo
electromagnético y la salud, por ejemplo, las terapias
relacionadas con el aura, las terapias con imanes, la
musicoterapia y todas aquellas técnicas que inciden
directa o indirectamente en este cuerpo.

El cuerpo electromagnético, cuerpo áurico o etérico es

aquel estudiado por las filosofías de Oriente desde
hace milenios y desde hace algunas décadas por la
ciencia occidental. Tiene su base fisiológica en las siete
glándulas del sistema endocrino representadas por la

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energía electromagnética de los 7 chakras del sistema hindú, los canales de
acupuntura y los Nadis.

Forma en su complejidad un halo de colores que rodea el cuerpo celular

formando una especie de huevo, un óvalo. La ciencia puede medirlo
detalladamente, fotografiarlo e incidir sobre él con dispositivos sensibles al
campo como las cámaras de los científicos rusos Kirlian o con el sistema del
Dr. Korotkov en San Petersburgo, creador de la técnica GDV (Gas Discharge
Visualisation, o visualización por descarga de gas) que permite ver, con
ayuda de una computadora, el campo de energía humano y detectar las
carencias energéticas en el organismo.

El sistema del Hearttuner midiendo la

coherencia del corazón y descubriendo la
salud de la persona.
¡Un corazón fractal es un corazón sano¡

Estos descubrimientos avalan y dan rigor científico a conceptos de la

medicina tradicional de Oriente que, en su gran mayoría, no se reconocían
como válidas por la medicina de Occidente. De hecho, constituye un símbolo
de la síntesis entre conocimientos de la medicina alternativa y cuya
existencia no estaba con el conocimiento científico más cartesiano y racional
de la medicina ortodoxa. Ese campo energético es ahora visible,
fotografiable y sirve para la prevención y diagnóstico de enfermedades que
están en el cuerpo electromagnético y que pueden llegar a manifestarse en
el cuerpo celular.

También el cuerpo electromagnético se trabaja con emisiones sonoras, pues

dada la piezoelectricidad (impulsos mecánicos que se convierten en
impulsos eléctricos) de algunos elementos en la sangre, se logra alterar con
vibraciones sónicas este campo. El uso del sonido y de la música con
finalidad terapéutica es tan antiguo como el hombre. Se ha utilizado en las
culturas chamánicas de todo el mundo, desde Siberia hasta África y
Sudamérica, desde hace miles de años. Es más, en las antiguas escuelas de
sabiduría de Egipto, Roma, Grecia, la India y otros centros de aprendizaje,
el conocimiento del sonido era una ciencia muy refinada basada en el
entendimiento de la vibración como principal fuerza causal del universo.

El Dr. Gaynor, oncólogo de Nueva York, asegura haber utilizado con éxito
terapéutico el sonido obtenido con cuencos de cuarzo en cientos de
pacientes. Sonido que influye en el proceso de curación de varias maneras:
alterando las funciones celulares mediante efectos energéticos, haciendo

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que los sistemas biológicos funcionen con más homeostasis, calmando la
mente -y con ello el cuerpo- y teniendo efectos emocionales que influyen en
los neurotransmisores y los neuropéptidos que ayudan a regular el sistema
inmunológico. Las sustancias cristalinas están presentes en todo el
organismo: en los huesos, en la sangre, en el cabello, en la piel, en las uñas
y hasta en los dientes. Incluso nuestro ADN se estructura en una doble
espiral muy similar a la del cristal de cuarzo. Hay cuatro moléculas de sílice
(cuarzo) en cada una de nuestras células, y también está presente en la
estructura crístalo-coloidal líquida del cerebro.

El científico norteamericano M. Vogel encontraría, además, que el

electromagnetismo del pensamiento humano encaja con la matriz formada
en la estructura molecular del cuarzo y eso permite su programación por el
propio pensamiento (lo sorprendente es que ya en los puranas, antiguos
textos vedas de la India, se decía que el cristal de cuarzo podía amplificar
los pensamientos hasta 15.000 veces). Por ejemplo, la relación entre el
sonido, la palabra y el ADN es directa.

Tras estudiar a fondo el ADN, un grupo de investigadores rusos formados

por científicos de diversas especialidades -entre ellos genetistas y
lingüistas- ha llegado a la conclusión de que nuestro ADN puede ser
modificado mediante sonidos y frecuencias y, por tanto, por las palabras.
Los lingüistas rusos descubrieron que el código genético, especialmente en
la parte menos estudiada hasta ahora, en lo que se llama el ADN basura –
llamado basura pues aparentemente carece de información para la síntesis
de proteínas sigue las mismas reglas de todas las lenguas. El poder de la
palabra sobre la salud, sostenido durante milenios por diversas corrientes
de pensamiento, quedaría así confirmado.

El ADN como un “radio transmisor y

receptor” de emisiones lumínicas en el
rango ultravioleta del ADN confirmando
la hiper comunicación entre terapeuta y
paciente”

El biofísico y biólogo molecular ruso, P. Gariaev, y otros colegas del

Instituto Ruso de Ciencias en Moscú, centraron su atención más allá de la
pequeñez de miras de algunos investigadores occidentales que sólo
estudian el 10% de nuestro ADN, la parte donde se localiza la producción de
proteínas. Ellos han buscado en el 90% restante porque no les resultaba
creíble que millones de años de evolución le hubieran dado más importancia

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a ciertas partes desconectadas del todo, en lugar de comprender que las
partes están imbricadas en una totalidad fractal. Sus experimentos ofrecen
una visión absolutamente diferente del código genético y de la función del
ADN. Su trabajo presenta a nuestro ADN como un bioordenador capaz de
recoger y transmitir información de su entorno a través de ondas de
diferentes rangos de frecuencias, a partir de las cuales pueden modificarse
los patrones de comportamiento de las células.

Los investigadores rusos están convencidos de

que armonizando los sonidos que emitimos, las
palabras, en una determinada frecuencia, se
puede llegar a influir en el ADN. Ello quizás
pudiera explicar los sensacionales
descubrimientos del investigador japonés M.
Emoto, quien ha demostrado, a través de
experimentos repetibles y acompañados de gran
cantidad de imágenes gráficas, cómo las
palabras y la música son capaces de alterar la
estructura molecular del agua.

El sonido tiene un
poder gravitacional,
como lo apreciamos en
los experimentos
realizados por de físico
suizo H. Jenny.
Cymatics es el estudio
de los fenómenos de
onda asociado a los
patrones físicos,
producidos por la
interacción de ondas sónicas en un medio, generalmente en polvo de
licopodio. Se usa este polvo para transformar las vibraciones sonoras en
formas geométricas, lo que nos da un precedente y una aplicación
trascendental para obtener la geometría especifica de ciertas frecuencias y
patrones de onda.

Sin embargo, lo que ha sido celosamente guardado y desconocido aún por

la gran mayoría de las personas son técnicas de mayor eficiencia y
exactitud que inciden en un cuerpo de mayor sutileza y poder en el ser
humano: el cuerpo gravitacional que responde a la incidencia de formas
geométricas sobre puntos clave.

El cuerpo gravitacional tiene la forma de toroide, cruza y envuelve la

totalidad del cuerpo celular. Además hay 13 toroides horizontales en el
cuerpo que corresponden a los 13 “chakras” del sistema egipcio. Chakra
quiere decir, en sánscrito, ‘rueda’ y se conciben como vórtices energéticos
situados en los cuerpos sutiles del ser humano. Su tarea es la recepción,
acumulación, transformación y distribución del biocampo, también llamado

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prana o energía sutil. El biocampo comprende la totalidad de los cuerpos
sutiles que animan al cuerpo celular.

El cuerpo gravitacional opera con la energía de Orgon - así

llamada por W. Reich. La energía sexual, la libido,
atraviesa el cuerpo físico y electromagnético, creando
centros de atracción y puntos de implosión que amoldan y
forman el cuerpo gravitatorio. Para poder alcanzar un
estado óptimo de salud es indispensable un adecuado uso
de la energía Kundalini que se origina en el cuerpo
gravitacional y que inunda la totalidad de los dos cuerpos
anteriores, el electromagnético y el celular.

El Dr. P. Callahan es un científico estadounidense que ha documentado

cómo los olores aparecen en el rango de los infrarrojos y los evidenció, en
parte, por el rango de frecuencia de la antena física que tienen las narices
de los insectos. Dratch mostró que un análisis de la espina dorsal, para el
rango de frecuencias microondas en el nivel celular del ATP, producía un
mapa en 3D que indicaba la geometría biológica del fuego (o energía) en el
cuerpo. Permitiendo, por tanto, crear una historia completa de la guía de
onda que estaba bloqueando psicológicamente el flujo de la energía sexual
o el chi en el cuerpo gravitacional.

Existe, además, un entrenamiento sónico del corazón

donde se ajusta la presión del mismo con los líquidos
del cerebro. Ben Bentov, un científico, inventor y
místico checo, desarrolló un acelerómetro para medir
la relación entre el corazón y los líquidos del cerebro,
permitiendo observar detalladamente las experiencias
Kundalini.

Científicos rusos redescubrieron el nuevo tipo de

energía no-electromagnética propuesta por N.
Tesla, energía que viaja en ondas espirales, y le
han llamado ondas de torsión. Las ondas de
torsión son consideradas como ondas portadoras
de información más que como ondas de energía.
Las ondas de torsión están vinculadas a la
conciencia humana y son creadas por las
emociones, pensamientos y deseos. Las ondas
de torsión son la interfase entre el mundo físico y
espiritual, aunque debemos tener en mente que,
en la realidad, no hay dualidad entre ambos. La

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física del campo de torsión es la prometedora física que explica los
fenómenos de psicoquinesis y telepatía, emprendidos por algunos gobiernos
del mundo. Además, nos muestra cómo el Universo crea un holograma que
recuerda el campo de información, llamado antiguamente el campo Akasha.

Un tercer y más sutil cuerpo humano es el

cuerpo fractal. Este cuerpo tiene su base
científica en el descubrimiento de las ondas
escalares o energía de Punto Cero o Campo
Unificado. Atraviesa todas las dimensiones
humanas posibles, es un cuerpo
hipostaciado o imbricado en todos los
demás. Es un cuerpo de conciencia pura. El
alma, parafraseando a Gurdjieff místico y
filósofo ruso, no existe: hay que crearla. Y
se crea de los tejidos de la voluntad y la conciencia, por patrones y formas
de Geometría Sustentable. Se desarrolla elevando el nivel de inclusividad
armónica de diferentes campos de carga electromagnética, cuántica y
gravitacional que coexiste en el ADN. Todas las religiones y filosofías nos
hablan de un desarrollo de las capacidades ulteriores del ser humano. Para
ello es indispensable concebir al ser humano como un ser en constante
transformación. La transformación implica la recomposición de formas
geométricas que necesariamente nos llevan a pensar en un universo
relacionado mediante enlaces toroidales.

La terapia con poliedros y otras formas geométricas

incide directamente en el cuerpo del campo Fractal
creando Punto de Implosión o Puntos Cero para
devolverle a la persona su capacidad de auto-sanación y
manifestar una mejoría en el cuerpo electromagnético y
finalmente en órganos, tejidos y sistemas del cuerpo
celular. No se trata de “hacer” algo por la persona que
tiene una enfermedad sino se busca facilitar ciertas
geometrías que generen una aceptación en los cuerpos
sutiles de la persona y pueda esto ser medido por la
resonancia entre las ondas del corazón y las ondas del
cerebro. Cuando las ondas cerebrales entran en fase
con las ondas del corazón en cierta proporción se logran
estados de auto-sanación ya que el ADN de la persona
enferma entra en resonancia con el biocampo del ADN
de la otra persona quien le facilita la coherencia de
ondas necesaria para restablecer su propia salud.

Los principios de la Salud Geométrica son aplicables más allá del “estilo” o
“técnica” que utilices en tu terapia. Son principios milenarios que puedes
incorporar sin importar el enfoque terapéutico que se use. En un mundo
cada vez mas sediento de herramientas útiles, la Geometría Sustentable
abre las puertas de una nueva conciencia médica y cierra la división entre el
mundo de la medicina holistica y el mundo de la medicina alópata.
*** Crédito de algunas imágenes: Alex Grey, Frank van den Bovenkamp, Hans Jenny…

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