SUICIDIO ASISTIDO

Lic. Carla Zetina Fonz

2°F
 ÍNDICE

1. Objetivo página 3

2. Introducción página

3. Características página

4. Leyes que promueven la acción página 4-5

5. Caso práctico página 6-7

6. Opiniones de la comunidad página 8

7. Conclusión página 8

8. Bibliografía página 9
 La Bioética y su Relación con la Vida Humana

Situaciones de estudio de la Bioética:

“Suicidio Asistido”

OBJETIVO

En el siguiente artículo se busca proporcionar información veraz y objetiva sobre el

tópico que se plantea, para la defunción del mismo y, tener un mayor conocimiento
y dominio de este. Para ponernos en contexto acerca del tema, primero
explicaremos definiciones básicas para tener referencia en lo que se basará este
artículo.

INTRODUCCIÓN

Definiciones:

 Bioética: Disciplina que estudia el impacto de la actividad humana sobre la

vida. Busca comprender los dilemas de la vida tanto humana como de la
naturaleza.
 Pluralidad: Es la aceptación, reconocimiento y tolerancia hacia la existencia
de diferentes posiciones, pensamientos o acciones en base a la ética.
 Axiología: Estudio de los valores.
 Pluralismo: Búsqueda de la verdad y el ejercicio racional de la libertad.

Una vez teniendo el conocimiento básico de estos conocimientos podemos

comenzar en lleno con él tema. Iniciaremos planteando la definición de Suicidio
Asistido:

 Es la interrupción de la vida de una persona cuando está lo decide.

No debe de ser confundido con la Eutanasia, porque a pesar de que comparten

grandes similitudes, está le da control absoluto a la persona para decidir sobre lo
que hará, sin necesidad de padecer una enfermedad y no se requiere algún tipo de
requerimiento médico más que la mera decisión de hacer este acto.
Características:

Algunas de las características de esto son:

1. La muerte se presenta como una elección que es electa por la persona.

2. El papel del médico tendría que limitarse a proporcionar tanto el medio
para realizarlo (con las oportunas instrucciones) como la asistencia para
que la muerte ocurra de manera cierta y sin dolor.
3. El motivo que convertiría en legítima y obligada la intervención del médico
no sería ya un sentimiento evanescente, como la piedad, sino el deber
riguroso de respetar la voluntad y autonomía del paciente.

En la actualidad, por censo popular y de mano de Javier Úbeda, escritor del Diario
Siglo XXI, nos presenta que para la sociedad moderna este tema presenta tres
ventajas:

a) La acción letal aparece como una elección libre de la persona.

b) La presencia del médico proporciona las adecuadas garantías de una
asistencia profesional.
c) Sobre todo, poner fin a la vida se traslada a un plano éticamente menos
comprometedor, parecido al de la renuncia a los tratamientos inútiles.

Leyes que promueven esta acción:

En la mayoría de las partes de Europa se ha legalizado esta acción para que las
personas puedan solicitarlo. Ante esto la mayoría de los doctores han expresado
sus opiniones dictaminando lo siguiente:

Dr. Enrique Jaureguizar:

“A los médicos no nos forman para ser verdugos”

“Los políticos deben pensar que Es mucho más rentable quitarse de en medio a
enfermos crónicos y terminales”

Dr. Nicolás Jouvé:

“La objeción de conciencia va a ser brutal”

“Siempre habrá médicos que se ofrezcan a llevar a cabo estas labores”

Dr. Álvaro Gándara:

“Los políticos no saben de lo que hablan”

“Si finalmente gobiernan los partidos de izquierda, la ley sobre el suicidio asistido
saldrá adelante”

José Jara:

“No está regulada la objeción de conciencia para la eutanasia”

Los facultativos españoles podrían sufrir represalias laborales si no aplicaran una

ley de suicidio asistido.

Dr. Gádor Joya:

“Es un paso más hacia la aprobación de la eutanasia”

“El mensaje que se le envía al paciente es: preferimos tu muerte antes de que los
gobiernos apuesten por investigar en cuidados paliativos”

Dentro de nuestro país en 2008, se promulgó una ley a favor de esto. En ella dicta
que permite a los enfermos terminales solicitar legalmente una muerte pasiva,
la cual incluye una cláusula de conciencia que permite a los médicos negarse a
aplicar el procedimiento y transferir el caso a otro médico.

De igual manera se tiene el artículo 312 del CÓDIGO

PENAL FEDERAL el cual prescribe: “El que prestare
auxilio o indujere para que se suicide será castigado
con la pena de uno a cinco años de prisión, si este lo
prestare hasta el último punto de producirse la
muerte, la prisión será de cuatro a doce años”

Y el artículo 313 refiere: “Sí el occiso o suicida fuese

menor de edad o padeciere alguna de las formas de
enajenación mental, se aplicarán sanciones del tipo
homicidio al caso”.
Caso práctico:

Un varón de 72 años que padece un cáncer pancreático, ya con metástasis, que

está siendo tratado de la forma habitual, pero que a pesar de ello el proceso
canceroso continuó progresando. Por estar tratado en una unidad de cuidados
paliativos el dolor abdominal estaba bien controlado. El paciente hace 50 años que
estaba casado, tiene tres hijos y 6 nietos. Dado que vive en Salem, ciudad del
estado de Oregón, en el que el suicidio asistido está legalmente admitido, al conocer
el pronóstico de su enfermedad manifestó que no deseaba pasar los últimos días
de su vida sufriendo de una manera excesiva, por lo que solicitó el suicidio asistido,
de acuerdo con su mujer y sus hijos.

Las actitudes que se pueden plantear ante esta petición de suicidio asistido son dos:

Primera Actitud.

Los defensores de dicha actitud, en este caso, un médico y una farmacéutica,

opinan que el arte de curar debería siempre prevalecer en la práctica médica, lo
cual implica mantener a su paciente con activa esperanza, aunque siempre
comunicando la verdad.

A juicio de estos dos profesionales, permitir el suicidio asistido supone abrir la puerta
a una pendiente resbaladiza que puede llevar a abusos en contra de la vida humana.
Los defensores de la eutanasia niegan que ésta pendiente resbaladiza pueda
conducir a esta práctica siempre y cuando esté regulada adecuadamente por medio
de salvaguardias administrativas eficaces. Pero según los profesionales que en este
debate se muestran contrarios al suicidio asistido, la evidencia clínica es justamente
la contraria y de ello existen abundantes datos en los países en los que el suicidio
asistido o la eutanasia están legalizados. Pero además, sostienen opinan que el
suicidio asistido en muchos casos está viciado por que no se cumplen las normas
éticas que deben regularlo. Por ejemplo, según el “Death with Dignity Act”, en
Oregón, en 2011, se detectó que los médicos responsables del caso solo estuvieron
presentes en el 10% de los suicidios asistidos practicados en el estado de Oregón.
Concluyen, que entre los cuidados paliativos dirigidos a cuidar la salud de los
pacientes no se puede incluir el “homicidio terapéutico”. Eutanasia y curar son
intrínsecamente incompatibles. Involucrar a los médicos en tales intervenciones no
es ético y va en contra del papel fundamental de los médicos como sanadores.

Segunda Actitud.

Está en este caso defendida por un facultativo que trabaja en esta área clínica, el
cual de entrada manifiesta que el señor Wallace es afortunado por vivir en uno de
los dos estados en los que el suicidio asistido está legalizado en Estados Unidos,
Oregón y Washington.

Estima que el papel de los médicos no es solamente preservar la vida, sino también
aliviar sus sufrimientos, lo que conlleva, a su juicio, a hacer confortable la muerte de
sus pacientes.

También sostiene que existe un amplio consenso sobre la necesidad de promover

los cuidados paliativos, pero que el suicidio asistido no va en contra de ellos, pero
que en algunos casos los síntomas negativos de la enfermedad no pueden ser
debidamente controlados en estas unidades, lo que puede contraponerse a la
autonomía y dignidad de los enfermos, pues opinan que tomar una actitud favorable
a terminar con su vida es mejor que esperar pasivamente a que la muerte ocurra.

Este facultativo, defensor del suicidio asistido, piensa que tras la experiencia de lo
ocurrido en Holanda y Suiza, únicos dos países en los que el suicidio asistido está
legalizado, no parece que su legalización pueda propiciar un uso incontrolado, a la
vez que se sabe que el número de suicidios en esos dos países no han aumentado
con motivo de la legalización del suicidio asistido.

Por otro lado, de entre las personas que solicitan el suicidio asistido, solamente una
minoría lo utiliza, lo que parece indicar que la posibilidad de no recurrir a él después
de haberlo pedido es frecuente.

Finalmente en opinión del facultativo que en este debate defiende el suicidio

asistido, los médicos están preparados para llevarlo a cabo y además no existen
razones éticas para que no lo hagan.
Naturalmente, en este debate no manifestamos nuestra opinión sobre el suicidio
asistido, pues nos parece que lo más correcto es que nuestros lectores establezcan
su propio juicio, después de conocer las razones favorables y contrarias al mismo.

Opiniones:

 El suicidio asistido acaba con la vida de aquellas personas que así lo han
decidido, respecto al caso anterior el señor de 72 años, siendo este alguien
que podría perder la vida en cualquier momento recurre a esta vía, por esto
me parce “justo o aceptable”, el hecho de que decida con el apoyo de su
familia, morir sin sufrimiento.
 Opino que la función de los médicos, era cumplir a toda costa con su
juramento hipocrático, hasta donde fuese posible; pero no me parece una
opción acosta del sufrimiento del paciente.
 Opino que las personas tienen el derecho a la vida, así como la decisión de
ponerles fin cuando ellos decidan.
 En este caso el paciente opto por una ruta, en la cual, pienso que es una
decisión que se toma más allá de una simple cuestión médica dado que se
trata de su vida misma.

Conclusión:

Con todo lo anteriormente recabado, planteamos que el suicidio asistido, es una

opción viable para las personas desahuciadas, pero no para aquellas que no
padecen ninguna enfermedad o trastorno el cual no les impida pensar
correctamente sus acciones. Por lo tanto también pensamos hasta qué punto es
coherente quebrantar de manera propia la vida misma.
Bibliografía:

 Anónimo, www.observatoriobioetica.org Suicidio Asistido, s.f., consultado el

15 de marzo de 2019
 Ortíz Fernández, Joana, www.actuall.com Las leyes de suicidio asistido que
vienen ponen al médico entre la espada y la pared, publicado el 29 de
diciembre de 2015, consultado el 15 de marzo de 2019.
 DMD - Por el derecho a morir con dignidad A.C. (2019). Suicidio Asistido.
Consultado de: https://dmd.org.mx/suicidio-asistido/ el 15 de marzo de 2019